Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Doce Perdidos (MiloXCamus Yaoi Lemon) CaMilo por AMMU TEIKOKU YUDAINA

[Reviews - 2]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Hola mis terrones de azúcar, aquí mamá terrón de azúcar, publicando el pequeño regalo para nuestro terroncito de azúcar, que hoy esta de cumpleaños y es... HERO_EraserHead.

Espero que disfrutes tu regalo y debes compartirlo con tus demás hermanitos, jijiji

Tú me lo pediste el regalo y ahora mismo esta cumplido tu deseo de felicidad...

Kiaaaa tampoco te olvides de votar por tu pareja favorita.

Recuerden que esta encuesta se relazara diariamente hasta el viernes y el resultado se dará el lunes, pueden votar una ve por día y solo un solo voto, así que disfrútenlo

En esta semana, voy a dejar una pequeña encuesta... Que ustedes deberán votar por alguna pareja, lo harán comentando en este apartado... Podrán votar una vez al día... Estén atento a las actualizaciones que tendremos en esta semana igual si no sigues otros de mis fic's, pueden ver la lista en Wattpad.

No diré para que es... Solo que lo hagan, ya lo sabrán el próximo año. Y claro que no se me olvida las votaciones anteriores.

Ahora si, decidan ustedes que pareja es su favorita, solo un voto por persona al día, si votan mas de uno, solo tomare en cuenta el primero... Piénselo bien.

ShakaXMu

DohkoXShion

MiloXCamus

AioriosXSaga

DeathMaskXAfrodita

ShuraXAioria

AldebaranXKanon

Por el momento solo sean estas parejas de los dorados, pero me servirá mucho que escojan, así tendré una idea de que mas hacer adelante con esta información.

Sin mas, disfruten la lectura y los quiero mis terrones de azúcar.

No se olviden de votar.

-Claro que si- Asiente orgulloso de su mismo, plantando cara al castaño claro y una sonrisa -¡¡¡CON ESO LAS COSAS IRÁN MEJORANDO DE A POCO!!!-

Los ojos verdes oscuro se quedan impresionados, contraídos por la información, para demostrar una cara de negación absoluta, pero dudoso de igual forma, algo incrédulo por esto y burlesco en cierta forma –Y según tú… ¿Cómo pretendes hacer eso?-

Milo se queda unos segundos en silencio, sin dejar su pose de triunfo, con un pie sobre el escalón que usan para almorzar en la azotea, y el otro pie de planta en el suelo, apuntando al cielo con el dedo índice de forma firme, sin duda una escena donde alguien tiene el triunfo asegurado –No tengo idea-

Baja la mirada, dejando escapar un sonoro suspiro y negando con su cabeza –Eres un caso perdido- Niega varias veces con la cabeza.

-Bueno, sé que debo empezar por hablar con ellos- Baja su pie de aquel escalón, para mejor sentarse a lado de su mejor amigo en ese mundo –Tú conoces a los de este mundo, dime ¿Cuál sería más fácil de convencer?- Sonríe esperando la respuesta, creyendo que con esto la idea vendría sola.

-Estás viendo a la única persona que lograrías convencer-Se señala a si mismo con el dedo índice, con una cara de pocos amigos –Nadie te va a creer- Cierra sus ojos, terminando de beber su jugo de naranja.

-Oh vamos, Aioria de este mundo- Se para nuevamente para poner sus manos en sus caderas y mirar hacia la dirección del otro –Debe existir alguna forma- Cierra sus ojos, cruzando sus brazos delante de su pecho, dedicando unos momentos a su pensar -¿Tal vez Shaka de este mundo sea más accesible?- Se le ocurre esto, pensando en un patrón para entender mejor esta situación.

-Ja, si claro- Le da más burla esta idea, por la forma de ser del rubio.

-¿Qué tiene de malo?- No comprende por qué esta negativa tan directa a su propuesta, que lo hace fruncir el ceño.

-En primera, el señorito popularidad en bromas, payaso de la clase, te vera solo como una forma de burla, si le dices algo, te va tachar de loco en esta y en otras escuelas- Mira a su amigo o bueno a quien se supone lo es, cuando claramente no es de este mundo –Si quieres ser su amigo, no te tomara enserio y te va hacer más perjudicial-

-Mmh… Nunca creí que vería llegar el día en que Shaka fuera a ser tan divertido y genial- Aun le parece muy extraño este hecho, pero deja salir un suspiro entendiendo que esta derrotado en este aspecto.

Sin embargo de buenas a primeras recuerda que tiene otro tema más que tratar y que anoche hasta se quedó despierto más de la cuenta por pensarlo. Y es que… Lo que más está deseando de una sola vez es recuperar el tiempo que el idiota del Milo de este mundo perdió, por una estupideces que no les correspondía a ninguno de los jóvenes tener.

-¡¡¡YA SE!!!- Vuelve a gritar, casi infartando al chico de enfrente.

-¡¡¡¿PODRÍAS PARAR DE GRITAR?!!!- Se levanta como un león desesperado por la forma de actuar del otro.

-Es que, es que…- La emoción le gana –Ya lo decidí. A quien primero debo recuperar es a mi cubito- Declara esto con una enorme sonrisa.

Para Milo no existen dudas, debía primero que nada disculparse con el peliaguamarino por su comportamiento, hacer que se vuelvan a hablar y con el tiempo ahora si poder ser novios y contarle durante todo el proceso.

-¿Qué vas a hacer, que cosa?- La confusión en la mirada de Aioria se deja ver, sin duda le parece la peor idea de todas.

-Arreglaré las cosas con mi cubito, con Camus…- Suspira algo melancólico –Sé que yo no lo lastime, pues jamás sería capaz de eso, pero… Quiero disculparme por haberlo tratado mal y rechazarlo, cuando en toda mi vida…- Sonríe de lado –Pasado, jamás lo hubiera hecho, si era un sueño hecho realidad que me amara de esa forma…- Levanta su cabeza, para ver el cielo –Siempre quise estar con él… Ser más que amigo y jamás se pudo… Aquí… Puede pasar…- Su rostro demuestra el gran amor que le tienen a quien menciona, por como esas mejillas se colorean de un tono rojizo, y su sonrisa es tan sincera que nadie puede negarla.

Incluso al ver esto, Aioria comprende mejor la situación… Después de todo, solo se ha quedado con la boca cerrada después de saber cada cosa que le cuenta y confirmarla que puede ser verdad, con su sentir y más locuras que jamás logrará explicarse del todo.

-No creo que funcione- Le es sinceró, ahora siendo el que también está de pie, dejando sus brazos en los laterales, mirando fijo al otro.

-¿Por qué no?- Pregunta dudoso, intentando estudiar al contrario.

-Lo humillaste delante de toda la escuela, cuando llegaste aquí te dio un buen golpe y te evita… Está muy dolido por lo que hiciste o bueno hizo el otro Milo, no creo que sea posible que lo hagas- Niega nuevamente con la cabeza, para cerrar sus ojos.

-Lo debo intentar- Su dolor se agrava, aquel corazón tan acelerado por su amado, se contrae para sentir el vacío de perder al ser amado en vida –Estamos destinados a ser amigos y yo quiero ser más que eso para mí Camus- Le duele saber que arruino una oportunidad única, la quiere reparar, pero si lo piensa bien… Nadie perdonaría lo que hizo su yo de ese mundo.

-Esto no es como el jardín de niños, en donde con apenas poca interacción alguien se vuelve tu mejor amigo de repente- Le hace aquella analogía, destacando que será complicado que todos se amiguen, cuando se alejaron entre sí por diferentes circunstancias ya explicadas, pero no del todo exploradas.

-Si nuestra amistad fue desde que éramos niños… Lo que paso o no paso… No importará, al menos lo quiero intentar para que esto así… Eso arregle- Hace mención sobre la situación que se encuentran de pertenecer a mundos diferentes o dimensiones.

El silencio se apodera del lugar, Aioria no quería hablar más de ese tema, con lo que ha estado haciendo, para mantener en silencio lo que necesite, pues no quiere emocionar al peli cerúleo, si a la mera hora se arrepiente.

Pero le causa un conflicto enorme.

-No se… Si al momento que todos nos arreglemos o la mayoría… Las demás piedras de nuestras armaduras se revelen o no… Es aun difícil para mí comprenderlo- Suspira sintiendo una enorme presión sobre él –Nunca fui el más listo, sabio o prudente de nuestro equipo, pero lo intento… Y sé que algo dentro de mí, me dice que arreglar la amistad con todos es primordial, puede que con ello… Volvamos a la normalidad… Ser amigos… o…- No quiere continuar, también es complicado ahora que conoce el amor de una familia aunque estuviera rota.

Justo en ese momento la campana comienza a sonar, indicando es el final del receso y que todo estudiante ya debía volver a sus respectivas aulas.

-Volvamos…- Habla fuerte y claro el castaño claro, mientras toma la basura de su almuerzo para dejarlo en algún basurero de paso a su salón.

-Aioria… ¿Has pensando lo que va a pasar si tomas esa piedra?- Le pregunta esto nuevamente, sabiendo que será un conflicto muy grande para quien alguna vez fue el León dorado.

No recibe ninguna respuesta, ya que el contrario se está alejando para dirigirse a la puerta de la azotea y así irse, aun cabizbajo, no ha dicho nada de lo que está haciendo a nadie, pues es complicado aún tener que renunciar a todo lo que ama por una cosa que no lo deja dormir, ni estar en paz.

Dándose cuenta que no obtendrá respuesta, imita al león dormido, tomando la basura que ha dejado y dirigir sus pasos hacia dentro del edificio e ir a su salón.

Haciendo esto en un completo silencio, donde los dos supuestos mejores amigos, no pueden decir más… Incluso Milo preguntándose si está haciendo lo correcto en perturbar vidas ajenas, pero… A la vez entendiendo que no se tiene de otra…

Imprescindible es saber que está pasando y saber si su Diosa necesita ayuda, el acepta sigue con ella, pero… Una parte de él que ha crecido ahora, se piensa más el seguir en ese camino, ya que tiene mucho más de lo que desea, salvo el amor de su cubito…

---Salón de Clases---

Mientras la maestra está escribiendo algunas ecuaciones en el pizarrón, para que los alumnos las escriban y empiecen a trabajar en el ejercicio del día de hoy, con el método ya explicado.

La mayoría lo está haciendo, salvo por uno que otro moroso sin deseos de estudiar en lo más mínimo, cosa que a la maestra ni le da importancia mientras estén en silencio absoluto.

-Bien, tienen quince minutos. Despejen la X y luego resuelvan su valor en cada uno de los ejercicios, al terminar vayan a revisar si esta correcto- Sin más, camina directamente hacia su asiento, para dejar que los alumnos hagan lo debido, mientras ella revisa su celular sin mucho interés por la vida en cuestión.

Acto seguido los alumnos comienzan a hacerlo, notando que es algo complicado y bastante complejo, pero sí lograron escuchar algo de la clase, los podrían resolver con un poco de esfuerzo.

Aioria trabaja en silencio, frunciendo el ceño al ver esto, pero no por no obtener la respuesta correcta, sino que sus pensamientos vuelan hacia su hogar… A aquellos videos que está realizando cada que puede… Está pensativo que ni ganas de trabajar tiene ahora.

Mu, con esas ropas negras, cubriéndole por completo el cuerpo, manga larga, con un rostro meloso y enfadado, como si le molestara la simple vida, hace el ejercicio solo para no tener que aguantar a una maestra tan absurda a su parecer.

Aldebarán, ni anotar el ejercicio le da gana, por lo cual solo recuesta su cabeza sobre la mesa y decide dormir un poco, sin duda le ocasionará algunos problemas más delante, pero poco le importa eso.

Shaka por su parte, entre risas alrededor de sus compañeros por alguna broma o chiste que ha dicho, hace su trabajo, dejando espacios en su concentración para tonterías que solo él disfruta. Claro que es consciente en ser discreto para no ser atrapado por la maestra.

Y Camus por último, batallando en recordar y entender el método que se ha explicado, por más que se concentrará y deseara poner atención, se le hacía difícil… Era como si todos hablaran en un idioma muy diferente, que no logara comprender del todo.

Sabe que debe esforzarse mucho más, sus calificaciones lo están poniendo en riesgo de reprobar el año, por lo cual debía prestar suma atención, aunque no le está resultando nada bien.

Y más si de repente su mente trae la imagen de quien le rompió el corazón, quién debería odiar, pero no lo hace… Pues cada día que pasa este amor aumenta aunque quiera arrancarlo de su ser de tajo, es imposible.

Como si de otra vida esto se tratara y por todos sus esfuerzos quedaran destruidos.

Los suspiros de sus labios se proyectan, decaído por no encontrar el camino correcto para saber la respuesta, levantando la vista solo para pensar si es prudente ir con la maestra y pedirle una segunda explicación, pero… Le da tanta vergüenza y miedo hacerlo, temiendo en ser regañado.

Su rostro de tristeza se demuestra, cruzando sus brazos sobre el pupitre, dejando su lápiz a un lado… Dándose cuenta que perderá sin duda, sin importar sus esfuerzos, siempre será un torpe en los estudios y un idiota en comprender las cosas… Tan temeroso de hablar, aun sabiendo que no es un genio en ninguna materia, salvo por las artes… Pero eso no le funcionará en nada según él.

De buenas a primeras, una de sus compañeras del flanco izquierdo, le jala algo la camisa, para llamar su atención.

Tomándole esto de curioso, se incorpora de inmediato sin hacer mucho ruido, girándose hacia la joven que intenta darle algo.

Susurra, pues sabe la regla de esta maestra -¿Qué pasa?-

Ella igual hace caso a la única cosa que no permite la ahora autoridad del salón –Te manda esto, Milo- Le entra rápidamente un papelito, para de nueva cuenta volver a su trabajo escolar, y no ser regañada por hacerle de intermedio.

-¿Eh?- Apenas si tuvo forma de racionar, cuando ya tiene el papelito en su mano, no ha logrado terminar de procesar este hecho.

Se sonroja demasiado, volviendo a la posición correcta de su asiento, para con rapidez intentar saber que dice esa nota pasada entre clases.

Esta nervioso, sonrojado, asombrado, preocupado, triste y temeroso de saber que dice, lo que le muestre escrito en ese papelito, bien puede ser algo amable o grosero…

No quiero demostrar que le dolió tanto su rechazo aquella vez, pero es un hecho que no se pude negar… Y quisiera tanto olvidar, pero no puede.

Y aún con todo esto, sonríe al pensar que pueden ser cosas lindas que este chico le escriba.

Tiene razón su mejor amigo, esta perdidamente enamorado de alguien que no lo merece, pero… No puede evitar sentirse feliz por algún tipo de atención que el peli cerúleo le dedique aunque lo destruya de a poco.

Al fin abre la nota, y ve algo que podría considerar muy lindo y asombroso.

Para leer en su mente lo que esas letras quieren decir.

“Te espero al final de las clases en la puerta principal, quiero hablar contigo…

Por favor asiste… Necesito explicarte algunas cosas, y pedirte perdón por mis tonterías.

Me gustas Camus, de verdad… Te quiero, te amo…

Atentamente Milo”

Es aquello lo que la notita dice, escrito claramente con una letra pequeña, pero desde luego visible, pues Milo siempre ha tenido una buena caligrafía en este mundo y su cuerpo aun lo recuerda al parecer.

Los ojos violetas del peliaguamarino no pueden evitar sentir como se ensanchan, al igual que su boca no cabe de emoción y sin poder detenerse, sonríe, para exclamar lo siguiente a una viva voz de emoción.

-Yo también te amo…- Su sonrisa es evidente, como sus mejillas colorados y al parecer algunas lágrimas se dejan escapar.

Pero poco le duro la emoción, cuando siente como sus compañeros lo miran con una dará de asombroso y susto, pues el peliaguamarino no era mucho de hablar entre clases y todo sabían la regla con esta maestra de guarda silencio todo momento.

-¡¡¡CAMUS ACUARIO!!! ¡¡¡¿POR QUÉ ESOS GRITOS?!!!- la maestra se levanta de su asiento, bastante molesta, para dirigirse al asiento del chico -¡¡¡¿QUÉ SIGNIFICA QUE ESTÉS HACIENDO ESTE ESCALÁNDOLO Y…!!! Mira el cuaderno del alumno que se encuentra en blanco -¡¡¡NO PUEDE SER!!! ¡¡¡NI SIQUIERA HAS EMPEZADO!!! ¡¡¡Y TE ATREVES A INTERRUMPIR A LOS DEMÁS!!!-

-Yo… Maestra…- Su voz tiembla, sin saber que decirle, pues no tiene escusa… Sus ganas de llorar se incrementan al ver como todos lo observan con unas miradas de reproché y algunos de burla, solo baja la mirada, no es capaz de responder.

-¡¡¡TE CASTIGARÉ!!! ¡¡¡TODO POR ANDAR GRITANDO Y POR NO SER LO SUFICIENTEMENTE INTELIGENTE COMO PARA RESOLVER LAS ECUACIONES!!!- Mas grita ella al estar regañándolo, en lo que el peliaguamarino logró decir apenas en voz alta.

Pero alguien más sale en defensa del joven Camus, que está bajando la mirada, sin ver nada más que sus manos sobre su regazo, demasiado intimidado como para responder.

-¡¡¡NO MAESTRA!!! ¡¡¡SI CASTIGUE A CAMUS, MEJOR A MÍ!!!- La voz del peli cerúleo se denota imponente  potente, haciendo frente a la profesora más amargada del instituto -¡¡¡YO FUI QUIEN INTERRUMPIÓ A CAMUS, SOY YO QUIEN DEBE SER CASTIGADO, NO ÉL!!!- Está de pie de aquel pupitre, mirando con enojo a la profesora, por haber provocado miedo en el corazón de quien más y ha amado desde tiempos antiguos de su vuelta en vida aquí.

Su mirada estoica ante la mujer que representa la autoridad, desafiante en cierta forma con tal de evitar un inconveniente al peliaguamarino, pues era lo que menos deseaba, meterlo en problemas, solo deseaba arregla las cosas con él, y poder así tener en este punto la oportunidad que se le fue negada en su anterior vida.

Escuchar esas palabras, ver ese semblante en ese joven que le gusta, del cual se ha enamorado perdidamente desde que eran niños y creyó que era reciprocó… Le dolía el rechazo, pero no quería rendirse, aunque si fue algo sumamente vergonzoso las burlas por mucho tiempo y que aún se mantiene.

Su reacción de golpearlo cuando se atrevió a hablarle bonito y tomar sus manos con ese abrazo fugaz, lo desconcertó tanto que solo actuó antes de pensar. Jamás creyendo que algo así pasaría o mucho menos que le fuera mandada una notita muy linda, con una declaración y un pedido de verse.

Creyó que era un sueño, del cual no quería despertar, pero se volvió pesadilla al momento que esa maestra de cabellos rubios cenizos lo escuchará.

La maestra queda desconcertada, pues el peli cerúleo, jamás se había atrevido a alzar la voz en ningún momento, pero si mantenía una mirada seria, era de los alumnos que más seguían la regla del silencio, le sorprende de cierta forma, pero no va a permitirlo.

Con el ceño fruncido, notando como el salón se salía de control por mormullos incesantes, y a sabiendas que su clase duraría dos horas y después la salida, aprovecharía esto para el castigo sin remedio.

-¡¡¡NO ME IMPORTA QUIEN EMPEZARA O NO!!!- Mira fulminantemente a quien sus memorias antiguas posee –¡¡¡MILO ESCORPIO, SABES QUE ESTA PROHIBIDO ALZAR LA VOZ EN MI CLASE Y TAMBIÉN PASAR NOTAS!!!- Lo reta de esta forma una vez más.

-Lo sé, pero no pude evitar hacerlo- Sus ojos color azulados se fijan en el tímido joven de cabellos aguamarinos, para dedicarle una gentil sonrisa que demuestra mucho más de lo que alguna vez proyectaron –Era necesario…- Es como si viera nuevamente ese rostro gentil y adorable con un semblante tímido de su amado Camus, aquel que murió en las doce casas, quien le dolió esa traición fingida, que deseaba asesinarlos con sus manos, pero solo derramo lágrimas y cuando volvieron… De nuevo se alejaron.

Pero para Milo, eso ahora no importa, están aquí de nuevo, en un mundo extraño contra algo que no comprenden en donde las memorias antiguas están perdidas, prometió que haría algo, que ayudaría a todos a recuperarlas aunque no lo supieran, pero… Al menos quería cumplir su deseo más egoísta.

Poseer el corazón de quién alguna vez o tal vez no, fue el mago del agua y hielo.

Esta acción, esas palabras, provoca que el corazón del peliaguamarino se acelere, sus mejilla se sonrojen tanto, y no sepa que decir, solo bajar la mirada, apenado por ser visto por todos.

Como si fuera un espectáculo de fenómenos, pues la sorpresa no se detiene ante todos, aunque claro algunos están más indiferentes y algunos otros añorando un sentimiento que no conocieron o no pudieron decir nada.

-¡¡¡CUAL SEA EL MOTIVO, NO ES IMPORTANTE!!!- Niega con la cabeza, cruzada de brazos y mirando fijamente en un momento al peli cerúleo y otro al peliaguamarino -¡¡¡AMBOS TENDRÁN DETENCIÓN DE DOS HORAS EN LA BIBLIOTECA!!!- Se gira rápidamente hacia el temeroso Acuario -¡¡¡Y PARA USTED JOVENCITO CAMUS, ESPERO QUE ENTIENDA QUE POR NO HACER NADA EN MI CLASE COMO SIEMPRE, TENDRÉ QUE LLAMAR A TU PADRE!!!-

-¿Qué?- Su voz apenas salió, por la impresión, frunciendo su gesto a una de preocupación –No, por favor…- Niega rápidamente, sintiendo que su mundo está derrumbándose.

-¡¡¡NADA DE ESO!!! ¡¡¡CONOCES LAS REGLAS Y TÚ ERES DE LOS MÁS BAJOS ACADÉMICAMENTE HABLANDO, NO PUEDES SEGUIR ASÍ!!!- En cierta forma disfruta hacer sufrir a los alumnos que peor van y si se preocupan por esforzarse algo, aunque todos sus intentos siempre sean pobres.

El conocido murmullo y barullo por parte de los demás no se hace esperar, siempre mirando con malos ojos al peliaguamarino por ser alguien tan mediocre en sus estudios, las risas por esto al ver su cara de angustia, incluso burlas por que las lágrimas del joven se presentan aunque desea detenerlas con su antebrazo.

-¡¡¡CONTINUAREMOS CON LA CLASE!!!- La mujer parece satisfecha por haber hecho esto, creyéndose una salvadora porque esto ayudará al peliaguamarino, a que su intención va más para humillar en cierta forma, es un gusto que algunos maestro pueden llegar a tener.

Sin embargo no contaba con algo más que sucedería a continuación.

-¡¡¡OIGA!!! ¡¡¡¿CÓMO SE ATREVE A HACER ESO?!!!- La voz intensa por parte del peli cerúleo, notando tales injusticias y burlas de los demás, agregando las lágrimas de su amado es suficiente para hacerlo hervir en ira y si su cosmos volviera en ese momento, posiblemente Anteras sería el mejor ataque de una sola vez. Esta sumamente enojado en este instante.

-¡¡¡¿Y TÚ COMO TE ATREVES A HABLAR DE ESA FORMA A TUS PROFESORES?!!!- La mujer sí que se indigna al escuchar esto teniendo una fama de que nadie es capaz de alzarle la voz, y aquí presenté esta un joven que nunca lo hizo antes.

Ahora si la clase está en un silencio abrumador, que incluso aquellos que nunca tomaban en cuenta nada de esto, alzan sus miradas, curiosos, confundidos, asombrados sin entender este comportamiento atípico de quien alguna vez fue su amigo.

Un susurro cercano se escucha directamente para el que alguna vez fue el Escorpión, logre entenderlo –Milo, ya cállate… Te meterás en más problemas…-

-¡¡¡NO LO HARE!!!- Cruzando de brazos, mirando fijamente a la supuesta docente, caminando desafiante hacia ella, sin importar que su altura apenas este un poco por debajo de ella, solo porque está en uso de tacones -¡¡¡Y USTED, DEBERÍA RECONSIDERAR COMO LE HABLA A SUS ALUMNOS, SOBRE TODO A CAMUS!!! ¡¡¡DÉJELO EN PAZ Y NO VUELVA A OFENDERLO!!!- Sí que le entro bastante valor en esta ocasión que deja impresionado a la mujer de cabellos rubios cenizos.

Su mejor amigo, solo negando con la cabeza, con una cara que indica que el peli cerúleo está más que muerto en esta ocasión.

-Oye- Una voz que hace mucho no le dirigía la palabra.

-¿Eh?- Se asustó un poco, pues le pareció extraño volver a escuchar el tono de un amigo.

-¿Qué es lo que le pasa a ese idiota?- La mirada verde algo indiferente e irritado, pero por un instante pareciera preocupado.

-Creo, que está muy molesto… Por qué ofendieran a Camus…- De reojo ve la situación donde Milo está gritándose con la maestra y luego se fija en como el rostro sonrojado del peliaguamarino se proyecta, y comprende mucho más de lo que había entendido anteriormente.

-¿No se suponía que no le gustaba?- Raro escuchar más palabras que un murmullo de parte de este pelilila.

-No se… Milo, está algo cambiado últimamente- Le dice esto, con una gentil sonroja, rascando su cabeza, algo nervioso porque no debe habar de más.

Aquellos jóvenes que, por años no se habían hablado y que de hecho esto no significa que volverían a ser amigos, solo fue algo muy casual. No se han dado cuenta que un par de zafiros que solo podían dejar apreciar una cierta burla, los mira con molestia, sin saber por qué esto le está afectando tanto.

---Hora de la Salida (Biblioteca)—

Y claramente la sentencia seria cumplida, con la nueva agregación que igualmente el padre de Milo fue llamado por su forma de desafiar la autoridad y volverse ante los ojos de todos, un chico problema.

Pero jamás se disculparía con una pésima maestra, incluso aún sigue molestó, cruzado de brazos, haciendo un puchero, no va a gritar porque aprendió a tener respeto por las bibliotecas, no por esa mujer, sino por los recuerdos del patriarca, que siempre le dijo, que estos lugares se deben tratar como sagrados por el conocimiento allí guardado.

Ambos jovencitos están sentados, separados por toda la mesa, ya que fueron acomodados de extremo a extremo, para exactamente pasar ese tiempo en completo silencio, sin que puedan hablar o pasar notas, según lo que debían cumplir como sentencia.

El peli cerúleo no quería meter más en problemas a quien quiere, por eso muerde su lengua en decir alguna palabra, aunque se muera de ganas por abrazarlo, resistiría hasta el final del castigo y así hablar con total libertad.

Se embargó, jamás espero lo que prosigo.

-Milo…- Un susurro tímido, dudoso y con tanto miedo, le habla para ser escuchado solo por él.

El mencionado solo gira su cabeza, mirando para su flanco derecho, topándose con un rostro alejado, que le muestra una confusión y felicidad por partes iguales, no sabiendo que decir por increíble que suene esto.

-¿Por qué… Lo hiciste?- La duda que atormenta la mente de Camus, pero que igualmente desea saber la verdad… Pues que lo defendiera de esa forma y le propusiera aquello, le alegra tanto el corazón que no lo cree.

Temiendo a la vez que sea una cruel mentira…

Notas finales:

Buenos días, tardes, noches, ¿Que hora es? ¿Quién me ha robado el reloj? ¿Como están mis terrones de azúcar?

Yo me encuentro super bien, pero lo principal aquí es el regalo para nuestro terrón de azúcar HERO_EraserHead

¿Como te las estas pasando?

Aquí esta haciendo bastante frió, jajajaja bueno no tanto, pero uno se debe abrigar de una vez, jajajaja.

¿Has comido pastel?

¿Comiste tu comida preferida?

Vamos a cantarte la canción oficial de la familia terrón de azúcar.

Y una, y dos, y tres...

Un día feliz para ti, hoy es tu cumpleaños si que si, felicidades HERO_EraserHead tu cumpleaños si que si.

Un día feliz para ti, hoy es tu cumpleaños si que si, felicidades HERO_EraserHead tu cumpleaños si que si.

Si se han dado cuenta terroncitos de azúcar... Las cosas van en aumento, veremos que esta ocurriendo aquí...

Milo y Camus tiene una gran oportunidad para darse algo especial, kiaaaaa...

Incluso Mu le hablo a Aioria y un chico de ojos zafiros... Se esta enojando jajajaja

Sin mas disfruten.

Muchas gracias mis terrones de azúcar por apoyarme, estar conmigo siempre, votar, comentar y brindarme mucho cariño, kiaaaa se los agradezco eternamente.

Por favor hagan caso a las medidas de higiene, no se expongan y cuidense mucho.

Los quiero mucho.

Ammu se va.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).