Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Punto y Aparte por Mascayeta

[Reviews - 2]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Perdón la demora, comencé el capitulo y de pronto me di cuenta que era un Harry x Draco, así que tocó borrarlo y empezar de nuevo.  

Si desean un capítulo especial de ellos, o un fanfic aparte, escucho sugerencias.

Albus sintió el aroma del rubio, por más que quería darse la vuelta y sacarlo del escondite, optó por dejarlo pasar. Regresó a su habitación y sacó el mapa del merodeador que su padre le dio como regalo, abrió el pergamino y notó como Scorpius se encontraba en la habitación con Theo Goldstein, el Hufflepuff que años atrás lo golpeó, no podía entender como no lo había reconocido. Tanto Snyde como él tan pronto lo vieron en la evaluación práctica de Defensa contra las artes oscuras, supieron que venía por venganza.

Albus en su papel de precepto podía movilizarse por todo el colegio, quería comprobar si Malfoy se alió con ese tipo para fastidiarlo dejando de lado al incondicional de Rick, pero llegar a la zona de los docentes superaba los límites de cualquier alumno, fue cuando observó el nombre de Rose, caminaba hacia el salón de pociones, al día siguiente sería esa la prueba y el escriba encargado sería Scorpius, además en ese mismo salón tendrían los de quinto los TIMO a primera hora. Era momento de ver qué nueva sorpresa les tenía preparada su amada novia.

Rose con dificultad pudo quitar el doble encantamiento que los profesores colocaron a la puerta del aula de Delphini, la bruja le dio indicaciones muy precisas sobre la prueba que presentaría el grupo de Hugo, y si quería sacarlo por completo del juego debía cambiar algunos de los ingredientes que su hermano utilizaría en la poción que se le asignaría.

Abrió la alacena y modificó los envases tal cual como le especificó la docente, era bueno tenerla como aliada y saber que al final ella podría conseguir lo que otros magos más poderosos y con dinero no pudieron.

Volvió a dejar todo en orden y miró el armario con la marca de los EXTASIS, atraída por la curiosidad caminó hasta la estantería con la intención de conocer cual sería la prueba, aunque su interés académico no incluía ninguna de las asignaturas evaluadas hasta el momento, sabía que Albus para llegar a ser Auror o Inefable si debía obtener en estas un Sobresaliente.

—¿Qué hace aquí señorita Granger?

La voz la sobresaltó haciéndole mirar detrás suyo, con los brazos cruzados y con escepticismo se encontraba Albus.

—Soy la monitora de la profesora Augurey, así que terminaba de arreglar los implementos de los de quinto año.

Potter siguió los movimientos de su prima que se separó de la prueba para los de séptimo año, hizo el teatro de revisar por última vez los objetos en el salón y con una sonrisa se despidió para marcharse a la Sala Común de Gryffindor.

La mano de Asp la retuvo acercándola a él, con delicadeza separó los cabellos rojos que caían sobre su cara para detallarla mientras comenzó a acariciar la mejilla.

—Eres bella querida prima —para Rose la confesión de Albus la dejó desconcertada, por lo general era quien lo buscaba y trataba de tener intimidad con él fallando en el intento.

Los labios del ojiverde se deslizaron por la oreja de Granger mordiendo ligeramente su lóbulo para seguir repartiendo pequeños besos en el cuello, con presteza Potter desanudó la corbata y soltó el botón de la camisa que evitaba tener un mayor contacto.

El jadeo de la chica hizo reír al ojiverde que deslizó sus manos por los brazos para seguir con calma hacia su espalda.

—Tu cuerpo es delicioso Rose —el pelinegro se separó un poco para ver como su prima desencajaba la camisa y comenzaba a desabotonar el resto de la prenda para mostrarse en un delicado pero sugestivo brasear.

La chica tomó las manos del joven que llevaba deseando desde quinto año, cuando reconoció ante todos sus compañeros que lo amaba, colocándolas sin pudor sobre el bien formado busto, Albus apretó con gusto por unos segundos, para llevar una de estas a la cintura de la pelirroja y atraerla hacía él mientras con la otra sostuvo el blanco cuello para, sin dejar de mirarla, comenzar a apretarlo.

—Si mañana mi prueba o la de Hugo falla, prepárate para que tu madre sufra la peor humillación de su vida —aproximándose lamió la mejilla, susurrándole sin dejar de ver como trataba de soltarse—. Si deseas vivir como hasta ahora lo has hecho, piensa muy bien a quien debes lealtad.

Rose sintió un empujón que la lanzó directo al suelo, trató de cogerse de uno de los butacos consiguiendo una aparatosa caída que lastimó su muñeca. Al levantar la vista el despreció en la cara de Albus la asustó.

Agachándose a su lado, Potter le recordó lo hablado en la enfermería.

—Después del Torneo de los Tres Magos, quiero tu respuesta y ya veré como te disfruto, esto sólo fue por necesidad.

La voz de uno de los preceptos de Ravenclaw ingresando al salón hizo que el Slytherin retomara su gallarda postura.

Potter procuró mostrar su mayor aplomo cuando acercándose le miró a punto de llorar explicándole que la había encontrado con un chico al que no pudo reconocer. El precepto observó de reojo a la pelirroja que con lágrimas apuntaba su camisa.

—Acaso ¿no es tu prometida? —cuestionó para confirmar lo que ya había evidenciado.

—Creo que eso fue hasta hoy —dijo Albus con fingida tristeza— amigo mío, lo que acabas de ver sucedió por ser respetuoso, por lo visto mi prima necesitaba más… —movió la mano y cerró los ojos como buscando una palabra adecuada— …pasión y menos romance.

El chico vio salir a Granger con rapidez, hizo un gesto de decepción por lo que acababa de presenciar, para él y la mayoría de los estudiantes de Hogwarts, Rose era un ejemplo de belleza y distinción, digna hija de la Ministra.

Como era de esperar los rumores se esparcieron a gran velocidad, en Hogwarts los chismes volaban por las paredes llevados por fantasmas, alumnos y elfos, por eso a la mañana siguiente cuando ingresó a desayunar, la pelirroja tuvo que aguantar las burlas y comentarios de doble sentido sobre su supuesta infidelidad.

Con fastidio respondió que no se metieran en su vida y que confirmaran la versión antes de hablar, se sentó alejada de todos, en su cabeza la amenaza de Albus resonaba, no tuvo tiempo de cambiar los ingredientes de Hugo para la prueba, el miedo se incrementaba y no tenía manera de evitar lo que sucedería.

Si antes, cuando Augurey le dijo que era mejor entre menos supiera, lo vio perfecto, de esa forma nadie podría utilizar algún hechizo o darle algo para confesar siempre mantendría la misma versión, que ayudó a su docente, pero desconocía los resultados. Sin embargo, con la presión de Albus por proteger a su hermano, las cosas cambiaban, harta de las burlas tomó un poco de jugo y unas galletas y salió del Comedor, caminó lo más rápido posible en búsqueda de Rowle, para su infortunio, la docente charlaba de manera amena con los del Tribunal Mágico, al verla la sonrisa de Delphini fue mayor y le hizo señas para que se acercara.

—Rose Granger, mi más querida alumna.

—Un gusto conocerla señorita, es lógico que siendo la hija de la mejor bruja de padres muggle, usted sea tan buena.

Los halagos colorearon las mejillas de Rose que agradeció el detalle, pidiendo permiso para hablar con su docente los magos rieron ya que desde instante ningún alumno podía tener un contacto privado con los profesores.

—La pruebas ya iniciaron —explicó uno de ellos—, al igual que otras asignaturas, pociones es teórico-práctica, ahora están en la primera parte, agradecemos su colaboración, pero ya es cuestión de los adultos.

En el salón Hugo contestaba con facilidad las preguntas, los conocimientos aprendidos en el intercambio y las clases particulares con Scorpius, así como el asesoramiento del señor Malfoy le ayudarían a tener un muy buen promedio, que computado con lo experimental le dejaría con un Sobresaliente. Suspiró para dejar la pluma sobre la hoja y revisar las respuestas, aunque fuese el mejor de la promoción a su madre ese resultado no le importaría, para ella Rose era su sucesora, una bruja mestiza que callaría a todos aquellos que insinuaran que los hijos de “sangre sucia” eran menos.

Alzó la mano para llamar al evaluador, en ese año por los preparativos del Torneo, el Tribunal Mágico había sugerido a la Directora servir de calificador en los TIMO con el fin de que el cuerpo docente pudiese ayudar con el montaje de los Tres Magos.

Hugo observó al escriba revisar sus respuestas para ver si estaban completas, fue cuando notó un pequeño gusarapo resbalarse por el hombro del joven mago que al ser consciente de lo que ocurría puso el sello y le ordenó salir.

Weasley podría jurar que le escuchó insultar a Scorpius cuando se quitó la túnica para sacudirla, varios gusanitos de colores se deslizaron por el frío piso de la mazmorra para desaparecer con un zumbido de la varita. Una vez fuera, esperó con paciencia a ser llamado para la segunda fase.

Miró a Albus caminar con otros Slytherin, entre esos Snyde y Murk, quien se acercó a él tan pronto como se dio cuenta de su presencia extendiéndole un caramelo.

—¿Te he dicho que eres la ardilla más hermosa de todo Hogwarts?

—Ni tengo cola, ni soy dientón, así que no veo porque sigues diciéndome ardilla —repuso Hugo llevándose el bombón a la boca no sin antes sacarle la lengua a su pareja.

—Pero muerdes y rasguñas como una cuando…

El “calvazo” hizo reír al castaño que robó un beso a Weasley indicándole leer la envoltura. La tonta sonrisa desapareció del rostro del menor, guardó el papel en uno de los bolsillos del uniforme deseando que las cosas salieran lo mejor posible, bien se lo escribió Zachary en la nota que le entregó, las únicas armas que tenía eran un buen olfato y recordar colores.

Al otro lado del colegio Scorpius escribía el último informe de los resultados en las clases de Runas Antiguas para anexarlo al libro general de evaluación.

Tan pronto entregó el pergamino a su jefe, el mago mayor le sugirió revisar que todo estuviese listo en el salón de pociones para la hora de la evaluación, el rubio asintió con la cabeza disponiéndose a ir hasta las mazmorras. A pesar de la mala noche, no le dio el gusto a Goldstein de marcharse de la alcoba al descubrir su litera llena de esa porquería.

Durante treinta minutos trató inútilmente de librarse de la plaga con todo tipo de hechizos de limpieza, desapareciéndolos por unos minutos para regresar duplicados y de mayor tamaño, rendido y con demasiado sueño decidió darle un poco de su propia medicina a su «querido roommate» magnificando el problema. Tomó algunas de las cobijas del armario y se metió al baño acomodándose en la tina que transformó en una cómoda cama donde pudo dormir sólo tres horas, los insultos del otro escriba quien golpeaba furioso la puerta del lavabo, despertaron al piso completo, fue cuando McGonagall hizo presencia llamada por Argus Filch.

A puerta cerrada oyeron el regaño una vez la mujer desapareció ambos hechizos, sólo entonces se dio cuenta que Theo Goldstein había sido quien le golpeó el día antes de su salida de Hogwarts.

Avanzó por los corredores verificando el tiempo entre el TIMO de Quinto Año y el EXTASIS, si todo iba según lo planeado ellos debían estar en la parte experimental, eso iría hasta las 11:30, tenía dos horas para cumplir con su labor, almorzar y empezar el examen sin contratiempos; mientras aprovecharía el tiempo libre para ir a la biblioteca y revisar la sección prohibida, al fin y al cabo, una de las razones de su presencia en Hogwarts consistía en averiguar más de la supuesta profecía y a quien ayudaba Delphini, porque como bien lo descubrieron, ella no podía estar sola en esa mentira.

Al tropezar con uno de los estudiantes se disculpó y fue cuando oyó lo que parecía el chisme del día, según las voces de unos y otros Rose Granger había sido infiel con un desconocido a su novio, el cual la encontró desnuda en el salón de Pociones. Verdad o mentira, no se arriesgaría, debía entrar al aula y revisar lo que alistó para la clase, lo que menos podía era darle la oportunidad a la chica de sacarlo del colegio una vez más.

Apresuró su andar, hasta que al dar vuelta cerca de su objetivo alguien le haló tapándole la boca para arrastrarlo hasta uno de los tantos pasadizos secretos que conoció desde sus primeros años en Hogwarts.

—¡Auch! —se quejó Scorpius cuando fue estrellado con dureza contra una de las paredes, al encenderse las antorchas mágicas reconoció quien era su captor—. ¿Quién diablos te crees? ¡Déjame en paz y ve a preparar tu boda con Rose!

Albus ignoró el comentario para sujetarlo con fuerza de ambos brazos cuando del rubio trató de escabullirse.

—Sugiere un cambio en la hora de la evaluación, en este instante es imposible que ingreses a verificar si Rose alteró los ingredientes.

Los ojos verdes estaban fijos en los grises, por los escasos centímetros que les separaban el aliento de las palabras que Potter pronunciaba se sentía como una cálida caricia sobre el rostro de Scorpius, quien tratando de mantenerse en calma suspiró para preguntar el porqué de la ayuda, la respuesta fue una sonrisa de medio lado por su amigo, y la distancia entre ambos se hizo nula.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).