Capitulo 39.
Ojos abiertos.
Qué era lo que estaba pasando?
En qué momento las cosas se habían salido de control? Así era el odio que le tenía a él? Anthony no podía entender el comportamiento que acababa de presenciar, su amigo de tantos años, su mayor confidente y la única persona en la que realmente confiaba acababa de demostrar su verdadero rostro.
Una serpiente traidora que se había creado bajo sus narices.
Trato de procesar todo lo que había ocurrido entendiendo realmente el verdadero motivo por el cual había sido apuñalado por la espalda.
Al escuchar una simple frase tras la puerta.
"No te preocupes mí pequeño… De ahora en adelante me tendrás a mí y siempre estaré a tu lado, Jamás te dejaré sólo"
Esas palabras dichas con cariño por la boca Edward hicieron "click" dentro de la cabeza de Tony. Todo tenía sentido ahora, las constantes negativas ayudarle, la incomodidad que sentía cuando besaba al menor frente a su amigo, las inexplicables coincidencias cuando Edward aparecía y los interrumpía… Todo tan silenciosamente que ni siquiera lo había pensado.
En todo este tiempo sólo se había fijado en quién podría arrebatarle a su amado niño, en las personas que lo rodeaban y en el profesores y compañeros que siempre estaban persiguiendo a Day a todos los lados posibles, tan ocupado estaba en alejar a todos que nunca pensó en Edward como una Amenaza.
Sí.... Ahora entendía toda esta mierda que ocurría, los pretextos y excusas, las herramientas empleadas para destruirlo a él incluso el mensaje de amenaza que había recibido.
Todo apuntaba a qué quién había orquestado todo esto era nada más y nada menos que Edward. Los impulsos bajos de James, el rencor de Claude y el secreto del amorío... Todo manipulado de apoco en poco, como piezas de ajedrez sobre un tablero.
Tantas emociones y tan repentino estrés no le provocaban más que náuseas y dolor. La traición sí que dolía pues aunque no lo quisiera reconocer Realmente si consideraba Edward como un amigo muy en el fondo de su corazón, las palabras dichas dolían menos que las acciones que le habían afectado llevándole hasta el punto en el que se encontraba en esos momentos.
Edward había mantenido ante sus ojos una fachada tan fría e inmutable que casi podría jurar que no poseía sentimientos algunos, o es que simplemente no quiso notar la humanidad dentro de él cuerpo de Edward, ahora tenía las manos atadas y lo único que le quedaba era rogar por su hermano menor y su perdón al presentir que ya había visto su vergüenza por la 36 malditas fotos.
Dentro de la habitación de Day Edward había regresado a la cama En búsqueda de de seguir acurrucando al menor entre sus brazos pues ya sentía la victoria total a sólo unos momentos simple y sencillamente tendría que terminar de mover sus últimas piezas, soltó un suspiro y acarició los cabellos dorados del menor.
-No te preocupes mí pequeño… De ahora en adelante me tendrás a mí y siempre estaré a tu lado, Jamás te dejaré sólo- pronunció con suavidad y una sonrisa muy marcada en su rostro.
- Él está detrás de la puerta? Aún no se ha ido verdad?- dice el menor con apenas un hilo de voz escondiendo aún su rostro entre las almohadas.
Day se encontraba bastante triste y decepcionado por la infidelidad de Aquel que había considerado en algún momento su protector. Ahora que habías admitido estar enamorado de su hermano le dolía demasiado tener que aceptar qué tal vez el amor no era mutuo Y qué simple y sencillamente de lado de Anthony no era más que una pasión física y dominante aquella "relación".
Su corazón estaba apagado y no quería pensar más en el tema pero tener la presencia Tony detrás de la puerta pidiéndole que le permitiera entrar para poder hablar correctamente le confundía, pues una parte de él deseaba verlo y exigirle explicaciones respecto a su infidelidad. Le molestaba el hecho de que Tony hubiese compartido sus caricias con otra mujer, No aceptaba para nada la idea de que hubiese otra persona en la vida de su hermano. Pues ahora que entendía que estaba enamorado también quería ser un tanto egoísta y mantener exclusiva la bizarra relación.
Se regañó asimismo por esos pensamientos pues no era normal el desear ese tipo de cosas, entendió que estaba expuesto por demasiado tiempo a actitudes posesivas que habían influenciado un poco su manera de ver el mundo en las relaciones amorosas. Soltó un suspiro tratando de controlar su corazón.
-Mí pequeño… Todo estará bien… Te lo prometo, Dentro de poco tú y yo seremos libres- Dijo Edward sin pensar siquiera en lo que estas palabras significaban.
El menor se confundió un poco pues no terminaba de entender el porqué repentinamente le empezó a llamar " Mí pequeño", Miró con tristeza al amigo que se encontraba a su lado, sus ojos azules se encontraron con el café de Edward y notó un extraño brillo en aquella mirada.
Era… Felicidad? No… Era otra cosa.
El señor Frederick se habían encerrado en su estudio buscando desesperadamente un poco de paz y soledad, niña tantas emociones conglomeradas en su pecho que él era difícil incluso respirar. Sentía decepción y asco por lo que había hecho su hijo. Tony siempre lo había decepcionado con cada oportunidad que él le brindaba, siempre saliendo con alguna maldad superior a la otra. Pasando por encima de todos y siendo egoísta. El Señor Frederick, trataba de controlarse pues su respiración se aceleró más al pasó de los segundos, su brazo izquierdo dolía y su pecho punzaba. Sacó del cajón de su escritorio un pequeño frasco con pastillas y escrito en él estaba el nombre de un medicamento calmante.
Hace bastante tiempo que no había tomado esas pastillas pues desde la llegada de su adorada esposa su felicidad se había incrementado y los corajes que seguidamente realizaba con su hijo habían disminuido drásticamente.
Abrió el pequeño frasco y trago las pastillas, se recargo sobre su escritorio intentando respirar adecuadamente.
Su mente se hallaba dispersa y tenía bastantes problemas ahora sin mencionar los de la empresa Pues el incendio que había ocurrido hace poco le había hecho perder muchos millones, dejando en cierta inestabilidad el legado de la familia.
Había tratado de mover todo a su alcance para que esto no afectará las producciones y las acciones en el mercado.
Jaló su cabello estresado, agobiado por tener que pensar nuevamente en como resolver las cosas con su hijo no tenía de otra más que dejar que por primera vez Anthony afrontara las consecuencias de sus actos y que fuese reprendido que cualquier otra persona normal.
De pronto una llamada entró haciendo que el teléfono fijo sonara sacándolo esos pensamientos.
Un suspiro Y tomó la llamada.
-Señor disculpe que lo esté molestando en estos momentos, pero hemos tratado de comunicarnos con usted lo antes posible… Su esposa la señora Susan ha vendido las acciones que le correspondían a un comprador anónimo, además de ello un abogado nos ha contactado e Índico que era el abogado qué representaría Señora Susan en el proceso de separación- La secretaria habló esta vez no con su típico tono apresurado, por esta ocasión trato de sonar lo más calmado posible.
-Qué? Cómo que vendió sus acciones? Cuándo ocurrió esto Y quién es ese abogado?- preguntó molestó.
Se levantó abruptamente silla en su escritorio esta vez ella había llegado demasiado lejos pues aunque era dueña de ciertas acciones de DRISMA por ser su esposa no estaba autorizada a vender sus acciones sin el consentimiento de la mesa directiva y mucho menos sin el consentimiento del presidente y dueño mayoritario de la empresa.
-Señor el abogado estuvo aquí hace poco, nos mencionó que representaría la señora Susan en el divorcio, nos ha dejado los documentos aquí para que su abogado los revise y de esta manera puedan planear para que ambos abogados discutan sobre proceso que se llevará, aparte de todo esto…. Dos autos de la señora han sido vendidos también, las acciones de la Señora Susana ya fueron compradas por alguien anónimo como le mencioné- La secretaria dijo todo aquello esperando que no le diera un infarto al pobre de su jefe pues también estaba al tanto del problema por el cual había sido llamado de su hijo hace poco.
-Qué? Qué es lo que estás diciendo? Susan va a pedirme el divorcio? Cómo se atrevió a vender todo aquello Y encima solicitar el divorcio sin mencionar absolutamente nada?- El señor Frederick estalló subiendo la voz cansado de tolerar la actitud de su esposa.
-Señor por favor cálmense, hemos todo esto encargado de hablar de este tema con el vicepresidente sobre la venta ilegal de las acciones, con referencia al tema del divorcio debería de hablar con su esposa Disculpe que no pueda ser más allá de esto dado a qué es un asunto personal su matrimonio- dijo la mujer en un tono ameno tratando de que su jefe se controlara.
Frederick no podía terminar de creer la clase de persona con la que se había casado pues en un principio, ella era un ángel que había aparecido frente a él representando que el verdadero amor sí existía y que se podía encontrarlo dos veces.
El señor se sentó en su silla nuevamente, tratando de callar su propio llanto. Susan ya había acumulado muchas fallas y malas acciones al paso de poco tiempo.
Adoraba a esa rubia mujer con la cual se había casado pero ahora estaba seguro de que no la conocía en realidad, no podía comprender porque ella había hecho esto deliberadamente, Haciendo del dinero lo que su voluntad quería. Derrochando en dinero en lujos y joyas, comportándose como una niña malcriada e indiferente con sus hijos. Alguien tocó la puerta del estudio de un momento a otro, Frederick aún exaltado ordenó agresivamente que se fuera pero Meena apareció por el borde de la puerta al abrirla habiendo notado los gritos de su jefe. Ella le miró con amabilidad dedicando una sonrisa sincera y buscando que su corazón se calmara.
Frederick ahora triste miró a la mucama y comprendió la terrible decisión que había tomado al no haberse casado con la mujer que tenía enfrente.
-Amo, disculpe que haya entrado así, hay algo importante de lo cual le tengo que hablar y que realmente no puede esperar pues esto le concierne a usted y a su esposa…- dijo Meena muy tranquilamente.
El señor puso una expresión dolida pues ya no quería más emociones turbias y dolores de cabeza, tantos problemas en tan poco tiempo de nuevo le hacían respirar con dificultad doliendo en el pecho no sólo por la situación sino porque esto ya era físico.
Meena se acercó al cuadro que se encontraba en la pared donde el señor Frederick tenía su caja fuerte.
-Amo Hace unos días cuando yo realizaba la limpieza de su estudio vi que la señora sacaba una gran cantidad de dinero de la caja… Ni una sola palabra dije porque pensé que usted le había autorizado, discúlpeme si eh sido imprudente Pero creo que es importante que usted esté al tanto también de esto- La mirada de ella bajó al suelo haciendo una reverencia señal de disculpa.
El señor se levantó rápidamente de su asiento y abrió con rapidez el cuadro y la puerta de la caja fuerte sin importarle si quiera si la mucama había visto la contraseña.
No fue una sorpresa.
No era algo difícil de creer a estas alturas.
Susan había sacado de su caja fuerte alrededor de unos 300.000, cantidad que no era para nada pequeña. El rostro de aquel hombre palideció y su corazón empezó a doler más fuerte. Qué era lo que estaba pasando con ella? Porqué estaba haciendo esto Susan a alguien que la amaba?
*Pimpim*
Repentinamente se oyó el sonido de una notificación al recibir un correo, lo ignoró en realidad pues no tenía ya cabeza para más cosas de las que estaban sucediendo justamente en este momento.
Meena sujeto a su jefe del brazo y lo llevó con cuidado nuevamente a la silla, sentía pena y tristeza de aquel hombre, no comprendía cómo es que alguien tenía corazón para traicionarle aunque ella no era la indicada para hablar de eso Pues estaba dedicada al servicio del joven amo y haría lo que fuera por la felicidad de Anthony.
-Amo por favor mantenga la Calma, sé que esto es demasiado difícil pero usted no se puede derrumbar… Controlese por favor- Meena le miró suplicante.
Tomó su mano con dulzura tratando de consolarle, no estaba dentro de sus actividades el hacer este tipo de cosas pero le tenía un gran cariño y devoción también, mirarle Cómo se derrumbaba de a poco en poco en verdad le dolía.
- Yo no entiendo que está pasando…. Qué está pasando con esta familia? Con este matrimonio...- Preguntó triste con el ceño fruncido tatuado en la frente y una amargura en su mirada. Movió sin querer el Mouse de la computadora con su otra mano y el correo que hace apenas unos momentos había recibido se abrió.
Tanto Meena cómo él miraron fijamente a la computadora al oír un audio que se reprodujo automáticamente…
" Te agradezco por el voto de confianza Susan, una persona tan maravillosa como tú es gratificante encontrar"
"Por favor James, haces que me sonroje… Un hombre tan atractivo como tú no debería hablarle así a una mujer casada"
Frederick expandió sus ojos como platos al darse cuenta que eran audios y videos donde su mujer estaba relacionada, Meena retrocedió preocupada por la reacción de su jefe, tocándose las manos con nerviosismo miró atentamente mientras escuchaba.
"Podrías tener una mujer como yo Si tan sólo te lo propusieras"
La voz de Susan era bastante clara, no había duda alguna de que la voz era de ella. Pues su particular tono agudo era una firma de su persona.
" Mi amor Esto es una desgracia mi pobre bebé está lastimado"
"Pero qué fue lo que pasó? Cómo es que de Day está en este estado? Quién se atrevió lastimarlo?"
"Querido Day ya está mejor, pero ahora yo estoy fastidiada! Frederick me ha cortado de dinero y se atrevió a maltratarme! Me mira feo y estoy segura de que me culpa por lo que le ocurrió a Day…"
Meena miró inquieta las expresiones distorsionadas que su jefe estaba teniendo en aquellos momentos Pues no sólo era una ladrona y mentirosa sin ahora se estaba dando cuenta del tipo de víbora traicionera que era en realidad.
El audio continúo.
" Susan no creo que sea tu culpa nada de lo que sucede"
"Sí seguramente él me culpa! Es mal marido… Oh James nadie es como tú"
"Eso no es tema ahorita, debemos asegurarnos del bienestar de Day, tal vez el pueda quedarse conmigo por un tiempo en el que averiguan que pasó con su comida y aquello que ingirió, Harás lo que te pedí verdad? El bien de Day es lo más importante"
La voz caprichosa de ella en el audio hacia eco por todo el estudio.
"Te digo que Frederick me maltrato! Me cortó el dinero! No me preocupa lo del hospital se que él lo pagará… Quiero poder estar contigo más tiempo, ya no es suficiente para mí vernos una vez por semana… Te extraño mucho cada día"
Frederick tragó duramente soportando cada palabra que escuchaba mientras su rostro palideció.
"Day está bien, el doctor dijo que se quedará a Observación otro día o tal vez dos, quiero hablar de nosotros ahora ya que no contestas mis llamadas todo para que nadie sospeche de nosotros…. Me estoy cansando de mi esposo, quiero estar contigo James"
"Querida no te pongas así, sabes que te adoro, significas todo para mí… Por ello quiero que estemos juntos siempre, tu, yo y Day haremos una familia juntos, solo espero a que te decidas dejarlo para estar juntos y casarnos"
"Amor mío… Quiero estar contigo por siempre"
Frederick se levantó abruptamente de la Silla y en un movimiento rápido levantó la lámpara de vidrio que se encontraba sobre el escritorio lanzándola rudamente contra la pared haciéndola añicos. El ruido fue bastante sonoro desconcertando a la mucama quien corrió a tranquilizarlo. Frederick colapsó rompiendo los restos de la lámpara sobre el suelo. La pobre mucama solo trataba torpemente de que se calmara,
Mientras tanto después del audio se reprodujo un video llamando nuevamente la atención de ellos dos.
En la habitación del menor se alcanzó a Escuchar el ruido de la lámpara romperse llamando la atención de los adolescentes, Edward esbozó una sonrisa pequeña mirando sutilmente la pantalla de la tablet que se hallaba en la mesa de noche a un lado de la cama.
El correo se había enviado y leído exitosamente.
- Qué fue ese ruido?- Pregunta el menor desconcertado.
- Debió haber sido algún empleado algunos de ellos son torpes- Contestó dulcemente el jóven de mirada café.
Cómo piezas de ajedrez moviéndose una por una.
El video que se estaba reproduciendo ante los ojos del señor Frederick y de la mucama esta vez no era protagonizado por la señora Susan sino por su hijo y el traidor de James. Ahora estaba más que seguro que su adorado sobrino también era una vil serpiente doble cara.
"Tú maldito Imbécil!! Cómo te atreves a tocarlo?! No vuelvas a poner tus sucias manos en él!!"
"Cómo te atreves a interrumpirnos?! Estábamos conversando sobre nosotros y tú vienes y metes tus narices donde nadie te ha llamado!!"
Frederick cambio repentinamente las expresiones de su rostro Pues en el video se mostraba a Day inconsciente en el hospital y a ese par discutir. Hace unos segundos era James quien tenía un amorío con su esposa y ahora en el vídeo estaba interesado en su hijastro. Que mierda era la que pasaba? Meena entró en pánico Pues sabría que su joven amo sería expuesto, trato de correr hacia el monitor de la computadora para poder apagarlo, no permitiría que el niño al que ella había criado fuera más lastimado de lo que ya lo estaba. Su jefe la detuvo exitosamente sin importarle en comportamiento de ella, estaba cansado se sentía herido y traicionado.
No toleraría más mentiras.
Este era el momento de que supiera toda la verdad, Aún si esa misma verdad le matará en el proceso.
"De qué mierda me estás hablando?! Tú no deberías estar aquí! Tú sólo causas problemas y discordia donde sea que vas…. No quiero que te la vuelvas a acercar a MÍ Day!! No quiero que lo mires! No quiero que lo toques, Te lo prohíbo!!"
Frederick por primera vez vio esa faceta de su hijo, sabía que tenía amoríos y que era alguien descontrolado pero no se imaginaba grado de depravación al ahora saber que su hijo se había enamorado de su hermanastro ante tal conducta posesiva.
"Tú me vienes a prohibir a mí algo?! Si eres tú quien le causa más daño, apuesto que tú lo golpeaste, No es así? Lo odias porque tu padre se casó con su madre y desquitas tu frustración con él"
"Tú no eres nadie para meterte en nuestra relación! Te la pasas tratando de entrar en esta familia, de ser alguien para mi padre cuando en realidad no eres más que un maldito oportunista hijo de puta que siempre intenta hacerme quedar mal!!"
El video era muy claro, duro y bizarro, Meena Bajo su rostro consternada por lo que fuese a pasar, ella sabía perfectamente bien que ese Idilio no podía durar mucho tiempo Y qué ahora que todo había salido a flote esta familia se destruiría en su totalidad. Tantos años de servicio y dedicación a la Poderosa familia Worthington se irían a la basura, esfuerzos por mantenernos unidos no importaban ya en realidad.
"Tú Day dices? él es mío y sólo mío!! Todo de él me pertenece! Su cuerpo, su vida, su alma, sus sueños, TODO! No permitiré que alguien tan embustero como tú ponga un dedo de nuevo en él!"
Más que un amor a los ojos su padre era una obsesión mal sana…. Todas esas veces en las que había visto que los dos dormían juntos las había tomado como una amistad entre hermanastros, algo de lo cual en su momento estaba orgulloso Pues pensaba inocentemente que su hijo por fin se comportaba adecuadamente y de unía en hermandad.
Nada más lejos de la realidad, pues un romance prohibido se había dado entre ellos dos desde hace quién sabe cuánto tiempo. Aquella familia que el juraba unida era una falsa careta de mentiras y tración.
Una vez que se terminó de Reproducir el video había una carpeta de distintas fotos, ya sin miedo a lo que sus ojos fuesen a ver el señor Frederick la abrió. La mucama retrocedió nuevamente y sólo atinó a cubrir sus labios con su mano, pues sabía que era el fin que apenas comenzaba.
"Mi señora... El jóven Amo es como usted también" pensó la pobre mucama mientras soportaba su propia pena.
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