JungKook entró en la habitación y miró a su novio dormir. Sentía su mente viajar a mil por hora. Niall... JiMin... y no podía apartar los gritos de Vante... la doctora Prescott tenía razón, Vante no podía ser el novio de un modelo famoso, no podía estar rodeado de la presión de las cámaras y lo que ello suponía. Ahora entendía lo que significaba. Y no le costaba esfuerzo renunciar a todo aquello para lo cual había trabajado durante años, no le costaba esfuerzo porque se trataba de Vante. No lo veía como un sacrificio, ni como algo que tuviera que hacer, lo veía como algo necesario.
Al poco, recibió un mensaje del taxista, comentándole que ya había hecho todo lo que le había dicho y deseándole de corazón que Vante se recuperara. En la madrugada, vino un enfermero a suministrarle otra dosis de calmantes a Vante.
- Os trasladaremos en media hora- informó.
Así pues, Vante fue colocado en una camilla y atado para que nada le pasara. JungKook no podía verle así, jamás había soportado verle atado en la cama. Entraron en el helicóptero y le desataron, aunque le volvieron a atar al aterrizar.
Le llevaron a una habitación y allí le pusieron en una cama y JungKook se quedó a su lado, arreglándole las sábanas, las almohadas, incluso el pelo. Después se quedó quieto, sentado, observándole hasta que alguien llamó a la puerta.
- ¿Puedo pasar?- preguntó.
Era Angie. JungKook alzó la mirada y las lágrimas surcaron sus mejillas. La chica sacó un pañuelo de tela y se lo dio.
- Gracias.
- Niall me lo ha contado, he venido a ver como estabais, si necesitabais algo...
JungKook se quedó en silencio y se llevó las manos a la cabeza.
- Es mi culpa.
- ¿Por qué lo dices?
- Porque yo le veía mal y no le llevé de vuelta a Newport. Miré la opción pero... si en lugar de preguntarle lo hubiera hecho y ya está...
Angie suspiró y se sentó en una silla que estaba al lado de la puerta.
- Él tiene un problema, pero eso no quita que sea adulto- razonó- las veces que yo he tratado con él, me ha dado la sensación de que él es capaz de escoger lo que quiere y lo que no- dijo- te lo digo desde mi punto de vista de persona que no le conoce y no sabe lo que le ha pasado- le recordó- de todos modos, no puedes llevar una relación con una persona e imponerte siempre. Le quitarías su voluntad.
- No soporto verle así.
- En su momento te dije que haríais grandes cosas juntos, lo mantengo, JungKook. Sé que vais a hacer grandes cosas juntos, pero quizás no es el momento, o una gran pasarela no es eso que tenéis que hacer juntos...
- ¡Yo no quiero figurar en las grandes pasarelas!- dijo- desde hace un tiempo dejé de quererlo- admitió- desde que empecé a salir con él. Quiero una vida tranquila, dedicada a la moda, a lo que hacía antes de ser tan conocido...
- Quizás deberíais hablar de esa clase de cosas- dijo Angie- ¿Necesitas que te traiga algo? Comida, ropa...
- Ahora que lo dices... mi maleta y la suya van a llegar al Aeropuerto de Newport y nadie las va a ir a buscar... podrías...
- Claro, iré.
- Gracias.
La chica salió y volvieron a quedarse en silencio. A JungKook le daba pánico el momento en el que Vante se despertara, pero cuando lo hizo, sintió aún más pánico. El chico parecía demasiado ido, apenas enfocaba la mirada y no hablaba.
- Hola, bonito...
Vante le miró pero parecía que no le estaba mirando, de hecho, no parecía el Vante de siempre.
- ¿Vante?
El chico tomó aire, cerró los ojos y, cuando los abrió, su mirada se dirigió a la botella de agua que descansaba en la mesa.
- ¿Agua?
- ¿Quieres agua?
El chico asintió y bebió apenas un traguito.
- ¿Estamos... en Newport?- preguntó mirando por la ventana.
JungKook suspiró, su voz se había vuelto más normal, más parecida a la de Vante.
- Sí, nos trajeron en la madrugada.
- ¿Has dormido?
- De vez en cuando- mintió.
- Mentiroso- dijo y besó la mano del chico.
Y ahora volvía a ser el Vante de siempre. JungKook sonrió, más relajado y se dedicó a adorarle, como hacía siempre.
- Lo lamento tanto- dijo.
- No es tu culpa- dijo el fotógrafo- tú querías volver y yo te dije que no. Soy yo quien debe disculparse. Por mi culpa, no vas a recibir una oferta para ir a alguna pasarela.
- Vante, no quiero estar sobre una pasarela. No quiero porque tengo algo mejor y ese algo eres tú.
- Pero...
- Sí, estoy renunciando a mi carrera por ti. Porque, si entro en alguna firma, si desfilo en alguna pasarela, oficialmente pasaré a ser un personaje público y, si ahora no nos dejan vivir, ¿cómo será después? Yo no quiero encontrarme un día, sabiendo que he perdido lo que más quiero... por mi trabajo.
- Pero tu trabajo...
- Mi trabajo no es lo que más quiero, mi trabajo no es mi sueño, mi trabajo no es lo que me hace vivir. Todo eso eres tú. Mi trabajo es un medio para vivir.
- ¿Vas a pasar de ser modelo a ser camarero por mí? No lo vas a soportar.
- Habrá opciones- dijo JungKook- quiero continuar el consultorio de "Pregúntale a JungKook". Quiero continuar trabajando como modelo de revista, comerciales y quizás tenga suerte en papeles secundarios en series de Netflix...
- ¿Estás renunciando a todo... por mí?- preguntó, llorando.
- No- dijo JungKook- estoy renunciando a todo por nosotros.
Vante se incorporó y le abrazó. Odiaba admitirlo, pero sólo el hecho de saber que se apartaría de la vida pública y de la farándula, le hacía sentir seguro.
Alguien llamó a la puerta y se separaron.
- ¡Doctora Prescott!- dijo Vante.
- Me llamaron por tu ataque... quería saber qué es lo que había pasado...
- ¿Salgo?- preguntó JungKook.
- No, sería bueno que te quedaras- dijo- tú estuviste ahí.
- Bueno, cuéntame todo lo que recuerdes, pero empezando días atrás, desde que llegasteis a Londres.
- Me sentía estresado- admitió Vante- la gente en Newport normalmente no me persigue, pero cuando llegamos al aeropuerto de Newport, allí estaban esperándonos. Había demasiada gente, demasiadas cámaras, gente preguntando por nuestra vida. Sin embargo, cuando llegamos a Heathrow... aquello fue otra historia. En Newport no llegaban a los diez, en Londres sobrepasaban los quinientos, llegó un momento en que me separaron de JungKook, no veía nada, nuestros guardaespaldas estaban a mi alrededor, me caí y... hubo un paparazzi que me sujetó de la espalda...- calló- parecerá una tontería...
- ¡No es una tontería! ¡Ellos están acostumbrados a hacer esa clase de cosas, pero no todo el mundo reacciona igual!- dijo Prescott- además, fue un fotógrafo quien te abusó.
Vante tembló y JungKook le tomó la mano.
- ¿Cómo definirías tu comportamiento esos días?
- Depende del día- dijo Vante- el lunes estaba muy triste, igual que el martes. Aunque el martes me sentía aún más triste, creo que fue el peor día, incluso llegué a sentirme bastante desquiciado por la noche. El miércoles creo que me sentía un poco mejor y el jueves volví a sentirme estresado por la Fashion Week, las cámaras, la gente, los comentarios... pero aun así, después de la Fashion Week, empecé a sentirme muy bien, me apetecía estar con JungKook, salir estar juntos, no sé, me sentía eufórico... incluso cuando llegamos al hotel... bueno, tuvimos sexo. Al día siguiente, todo iba muy bien, seguía en ese estado de felicidad constante, hasta que llegamos a la Fashion Week y empezaron a preguntarme por mí y por mi salud...- contó y la doctora Prescott guardó silencio, pero no dijo nada- salimos de la Fashion Week- resumió Vante- el taxista que nos llevaba nos dio una revista... al parecer nos habían seguido el día anterior y habían hecho una exclusiva con todo lo que dijimos. Recuerdo haber visto la revista y... no recuerdo más- frunció el ceño- eso nunca me ha pasado.
- ¿Qué le pasó?
- Empezó a ponerse muy nervioso- dijo JungKook y le pasó los recortes de la revista- empezó a llorar y me dijo que se esforzaba todos los días en nuestra relación. Su tono y su gesto cambió, era diferente al Vante que estamos viendo ahora- explicó- empezó a gritar sobre el sexo... dijo que la gente da por sentado que el sexo el fácil pero no lo es cuando has sido abusado. Dijo que sólo pueden ver el sexo y no lo que supone y que estaban minimizando nuestra relación a momentos... y ya no pudo continuar.
La doctora Prescott lo apuntó todo en su portátil y asintió.
- ¿Cómo has ido con la bajada de medicación?- preguntó.
- ¿Lo que le ha pasado puede ser un efecto por bajar la medicación?- preguntó JungKook.
- Sí y no- dijo- ha sido un efecto por la presión y el estrés- resolvió- ¿en otras circunstancias hubiera reaccionado así? No. Lo que ha estado presentando son crisis de bipolaridad.
Vante abrió mucho los ojos y JungKook le tomó las manos.
- ¿Qué hay que hacer?- preguntó- es por una medicación, ¿no?
- La medicación que Vante toma en las tardes es muy agresiva y bastante tóxica- explicó- el propio Vante tuvo que firmar una serie de documentos para someterse a esa medicación, lo hizo porque nada le hacía efecto.
- Lo recuerdo, usamos esa medicación como solución provisional a...- guardó silencio y miró a JungKook- sabes que yo he intentado suicidarme más de una vez- explicó- esto era lo único que me ayudaba.
- Tenía que venir al centro todos los días para que le suministráramos la dosis, así durante dos años, luego le dábamos dos pastillas para que él fuera suministrándoselas solo y así hasta cinco pastillas. Ahora bien, esas pastillas tienen una serie de efectos secundarios. Entre ellos, pueden causar bipolaridad en el paciente si lo usa a largo plazo. Como no hemos podido encontrar nada que ayudara a Vante en estos años, yo conseguí elaborar un cóctel de medicinas que le mantuviera a flote. Pero es hora de quitarlo y que empieces a vivir. Es hora de quitar esto, Vante- dijo y le mostro sus pastillas.
- Ahora quiero vivir- dijo el fotógrafo- ¿cómo me las va a quitar?
- Hay que internarte...
- ¡NO!
- ... por un mes.
- ¡NI HABLAR!
- Mi amor, escuchémosla. Ella ha estado a tu lado, incluso cuidó de ti cuando yo no estuve. No va a hacer nada que sea malo para ti.
La mirada de Vante cambió y JungKook pudo ver, con horror, como era cierto que al chico le pasaba algo.
- La primera semana estarás internado sin poder salir porque supone la retirada más brusca del medicamento, sentirás crisis de ansiedad, incluso te sentirás airado y violento. Debemos tenerte vigilado. Pero JungKook podrá estar en todo momento contigo, incluso podrá quedarse a dormir.
- ¿Él podrá estar conmigo?- preguntó, más calmado.
- Claro.
- Bien.
- La segunda semana podrás salir a pasear y hacer deporte al aire libre, pero no a trabajar. Para esa semana, las crisis estarán más controladas, no te sentirás airado, ni violento. Aun así, dormirás en el centro, obviamente JungKook puede quedarse. La tercera semana empezarás a trabajar y sólo vendrás a dormir. La cuarta irás a trabajar y vendrás a dormir en días alternos.
- Por lo que parece, la peor semana es la primera.
- Lunes, martes y miércoles- dijo la doctora- pero con una buena dieta y mucho deporte, se supera... de hecho, hay gente que no llega a presentar ansiedad al retirar la medicación.
- Que empiece este lunes- dijo Vante- antes empieza, antes me lo quito de en medio.
- También te terminaremos de quitar el antidepresivo que estás tomando en las mañanas. Solo te quedarás con el de la noche. Si sientes ansiedad, te mandaremos algún relajante muy suave por fracciones de quince días.
- ¿Volverá a tener ataques bipolares cuando la medicación esté totalmente fuera de su cuerpo?
- En absoluto.
La doctora Prescott se fue, dispuesta a preparar todo para Vante. Mientras tanto, la pareja estaba en la habitación del fotógrafo.
- Va a ser un mes muy movido...- dijo Vante- no era lo que teníamos preparado...
- Cuando salgas, te juro que te llevaré de vacaciones al pantano- replicó el menor- y piénsalo, será aún mejor, no tendrás esas medicaciones tan malas... además, es posible que todo se haya calmado un poco y...- su teléfono le interrumpió y colgó.
- ¿Es Niall?- preguntó Vante.
- Tengo muchas cosas que hablar con él.
- Ve, yo estaré bien.
JungKook le miró, sabía que el chico no estaría mal, pero no quería enfrentarse a la realidad, aunque eso no era lo que a Vante le hacía falta.
- Estaré en la puerta. Te quiero.
- Y yo quiero un futuro contigo- replicó Vante.
JungKook le miró y sonrió. aquella forma tan alternativa que tenía Vante de decirle que le amaba era la más bonita que había escuchado en su vida.
Salió al pasillo y se puso al lado de la puerta, pero siendo cuidadoso de que el chico no le escuchara. Llamó a Niall y este le atendió al momento.
- ¡Ya era hora!- dijo Niall, furioso- ¿Cómo está? ¿Qué le ha pasado?
- Te lo contaré en persona, ya no me fío de nada, ni de nadie. ¿Puedes venir esta tarde? Él a las cuatro y media tiene una sesión con la doctora Prescott para prepararle.
- ¿Prepararle para qué?
- Tienes que venir.
Ambos colgaron y Niall empezó a recoger su escritorio, iba a llamar a Eileen pero no sabía qué decirle. Sin duda a ella tendrían que contarle algo porque era parte de aquella empresa, pero pensó que no le diría nada hasta que hablara con JungKook. Estaba recogiendo su maletín cuando alguien tocó la puerta.
- Perdón... mi nombre es Park JiMin y...
- Ahora mismo no aceptamos modelos- dijo Niall, al ver al chico y JiMin sonrió.
- No soy modelo, soy amigo de la infancia de...- torció el gesto- Vante- dijo y Niall le miró.
- Si fueras un amigo de la infancia de Vante, JungKook lo sabría, y en esta empresa no se ha oído hablar de ti. Somos muy familiares, ¿sabes?- preguntó, con aire amenazante- ¿quién te ha comprado? ¿Vertutti?
- ¡No! ¡No vengo por una revista! ¡No me interesan las exclusivas!
- Aléjate de Vante y de JungKook.
- ¡También soy amigo de JungKook!- exclamó y Niall soltó una risita.
- ¡Qué casualidad que eres amigo de la infancia de la pareja del momento! Gente como tú da pena. Fuera.
Niall empezó a empujar a JiMin hasta que le sacó fuera del despacho, cerró la puerta y le dejó allí plantado.
- ¡Están en peligro!- dijo JiMin.
- ¡No me cabe duda! ¡Por personas como tú!- dijo Niall, molesto.
El hombre se subió en su coche y pidió a los de seguridad que sacaran a JiMin, fue al hospital y se sentó en una sala de espera privada con JungKook.
- Cuéntamelo todo- pidió- cuando digo todo, es todo. Porque he tenido que sacar de mi despacho a un chico asiático que decía ser vuestro amigo, posiblemente quería sonsacarme información y venderla a Vertutti.
- Joder... ¿es que no van a parar?
JungKook se llevó las manos a la cara y decidió contarle toda la verdad a Niall.
- Bien, te diré toda la verdad, pero necesito que no se lo digas a nadie y necesito que no trates a Vante como una víctima.
- ¿Me vas a decir ya el porqué de su peculiar comportamiento? Porque sé que todo pasa por ahí. No soy estúpido.
- Vante fue modelo antes que fotógrafo y, cuando estaba a punto de conseguir un contrato con una firma para desfilar en una pasarela, fue abusado por el fotógrafo de un modelo de la competencia- le susurró JungKook al oído.
Niall se quedó helado y no contestó, sabía que esa clase de cosas pasaban en el mundo de la moda, pero nunca había conocido a nadie que le hubiera pasado. Nunca hasta ahora.
- Ese modelo se hizo muy famoso- susurró JungKook- y Vante no pudo ganar el juicio. Por eso se mudó a Newport. Empezó una nueva vida como fotógrafo y, por eso, fue idea de él fotografiarme siempre a mí, confiaba en mí, siempre le he respetado, nunca le he hecho propuestas indecentes, ni he dado nada por hecho.
- Pero él ahora...
- Él ahora me ha hecho famoso a mí y yo he hecho famosa nuestra relación- susurró el chico- Vante ha estado tomando tantos antidepresivos que en Londres sufrió una crisis de bipolaridad ¿y quién sabe si ha estado mal antes y yo no me he dado cuenta? Le van a internar un mes, Niall, le van a retirar en un mes dos medicinas. La doctora es positiva, pero yo no lo soy tanto... JiMin, un chico coreano que Vante y yo tenemos en común en Corea, aunque no lo sabíamos, él sigue sin saberlo, está aquí. La noticia de mi noviazgo con Vante ha llegado a Corea.
Niall se levantó y paseó delante de él con aire majestuoso. Incluso alterado, no perdía el porte.
- ¡Ese chico vino a verme para decirme que Vante estaba en peligro y no le creí! ¡Pensé que Vertutti le había pagado!
- Bueno... por lo que sé de él, ha estado siguiendo a Vante todos estos años- susurró JungKook- le puso un detective privado. No sé hasta qué punto fiarme de él.
- ¿Qué relación tenéis ambos con él?
JungKook recordó una conversación muy lejana con Vante "mi mejor amigo, el que animó a presentarme a las pruebas, también se llamaba JiMin". Suspiró y se tapó la cara.
- JiMin fue quien animó a Vante para que fuera modelo, fue él quien estaba con Vante la noche que le violaron y fue él quien le atendió en todo hasta que Vante se mudó a Newport... de hecho, JiMin siempre me ha dicho que ellos tuvieron algo. Y yo me lo creo. En la Universidad, cuando conocí a JiMin, él siempre estaba muy triste y, cuando me lo contó me dijo "tengo algo no resulto con un chico, él tenía un pasado tormentoso y yo le ayudaba. Un día se fue sin decir adiós."- suspiró- ¡Siempre he dudado de los sentimientos de JiMin hacia YoonGi precisamente por ese chico misterioso, al cual yo siempre he dado por muerto y ahora resulta que es mi novio!
- Chico, chico, te estás alterando sin motivo con ese tal JiMin.
- ¿Tú crees?- preguntó JungKook.
- Yo tenía un rollo con YoonGi, a mí me gustaba YoonGi de verdad y JiMin se metió en medio. Perfecto, los dejé estar, pensé que así estaría mejor. Pensé que YoonGi sería la luz que iluminaría la única neurona que, al parecer, JiMin tiene, pero ya veo que no. Ha pasado todo este tiempo saliendo con YoonGi y tratando de recuperar a Vante, ¿para qué? No, ya me he cansado. Entre Vante y yo hay un nosotros y no cabe nadie más en ese nosotros.
Niall consideró las palabras de JungKook, el chico tenía razón. ¿Qué clase de persona se pasaba buscando a otra siete años por medio mundo? Quizás es que aún no hubiera conocido a su alma gemela, pero ese chico había contratado a un detective privado para seguirle las huellas a Vante. Aquello daba mucho cringe, como poco. No obstante, algo que había aprendido en su trabajo era a mantener a sus enemigos cerca.
- Él te dijo que Vante estaba en peligro. Eso me lo dijo a mí también.
- Es por el fotógrafo que le violó- explicó- es un fotógrafo de reconocido talento en Corea del Sur, trabaja con un modelo muy famoso allí, sale en muchas pasarelas, vídeos, comerciales, está en la cima de su carrera y allí lleva un tiempo.
- Tu entrevista y todo lo referente a Jeon JungKook ha llegado a Corea- dijo Niall, entendiéndolo en el acto- y no sólo tú, me he fijado que las búsquedas de Vante Tittensor han subido en Corea, mucha gente habrá empezado a atar cabos.
- JiMin piensa que está en peligro- dijo JungKook- porque, en su momento, Vante era un modelo aficionado. Ahora es un fotógrafo de reconocido prestigio y novio de un modelo famoso.
- ¿Qué quieres contarle a Eileen de esto?- preguntó- ella es nuestro enlace con los medios, es escritora, te ha entrevistado, necesito que ella sepa algo de esto para que opine y tengamos un plan de ataque frente a los medios.
- En este mes, Vante y yo vamos a tener un perfil bastante bajo debido a su ingreso- dijo JungKook- propongo ver qué hace la prensa y, sobre todo, qué hacen los culpables de su ataque en este mes. Pasado ese mes, actuaremos bajo lo que Vante también decida, él ahora mismo no está preparado.
- ¿Y cómo sabes que dentro de un mes estará preparado? Ha tenido una crisis de bipolaridad.
- No me lo recuerdes- dijo, tapándose la cara- pero este ingreso es para que no le vuelva a pasar...
- ¿Y si aprovechamos que está ingresado para sacar a sus atacantes de dónde estén y acabar con ellos?
- Ello supondría que Vante se expusiera, bien porque tuviera que hacer alguna demanda o bien porque tuviera que dar alguna información sobre su vida. Cosa que estoy en contra- dijo y Niall suspiró.
- ¿Quieres que le cuente algo a Eileen?
- No lo sé... eso supondría que tendrías que contarle todo lo que te he contado...
Se tapó la cara y miró la habitación de Vante, con la puerta cerrada, veía a la doctora Prescott hablar con el chico, parecía calmada, aunque ella siempre estaba calmada.
- Puedo decirle que le atacaron- dijo Niall- ella entenderá que Vante no querrá revelar más datos. Es una mujer inteligente.
- Bien, eso estará bien.
- Vale, pues voy a quedar ya mismo con ella y luego llamaré al tal JiMin ese... ¿tienes algún teléfono de contacto? No quiero perderle de vista...
JungKook apuntó el teléfono del chico y Niall salió. Una vez en el coche, llamó a Eileen.
- ¿Diga?
- Eileen, soy Niall, perdóname que te moleste, pero tenemos problemas.
- Lo sé, los llevamos teniendo una semana...
- Ahora son más serios. ¿Puedo verte? ¿Te importa si voy a tu casa? No quiero que nadie nos escuche.
- En absoluto. Ya tienes mi dirección.