Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

SCAR por Walid

[Reviews - 0]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

JungKook salió con JiMin y sabía lo que el chico iba a hacer, bien sea por su tono o por lo predecible que siempre había sido, pero lo sabía.


- ¿Vas a pegarme?- preguntó cuando llegaron abajo.


Sintió que la rabia le invadía. Todo el esfuerzo que había hecho para recuperar a TaeHyung... y ahora JungKook se estaba aprovechando de ello.


- No tienes ni idea de cómo me siento.


- Prueba otras palabras, JiMin. Pasé años detrás de YoonGi y en una noche tú te lo quedaste, no me dijiste nada, me enteré por él. Mierda, ¡él era un rollo para mí pero tú eras mi amigo!


- ¿Y ahora te estás vengando?


- No. No lo hago- respondió- cuando conocí a Vante yo no sabía que era TaeHyung, ya te lo dije.


- ¿Y si lo hubieras sabido?


- No hubiera cambiado nada- admitió- hubiera hecho absolutamente lo mismo.


Y fue en ese momento cuando la paciencia de JiMin colmó y su mano actuó por sí sola golpeando a JungKook. El chico se llevó las manos a la cara, tenía el labio ensangrentado.


- Puedo soportar un labio roto- dijo JungKook y se encogió de hombros- al final del día, seguiré siendo su novio. Mimos gratis. Gracias, JiMin.


Bien, quizás aquello era pasarse, pero la relación entre JungKook y JiMin había mejorado cuando JungKook salió de Corea. El chico siempre le echó en cara que, entre todas las personas, tuviera que fijarse en YoonGi. Ahora le parecía una buena patada por parte del karma que su precioso, mimado y amado novio fuera, en realidad, Kim TaeHyung, la persona por la cual JiMin había perdido la cabeza y hasta el dinero.


JiMin se abalanzó sobre JungKook y volvió a pegarle, esta vez en el pómulo.


- ¡EN REALIDAD LO ÚNICO QUE TE JODE ES PENSAR QUE YO TE HICE LO MISMO QUE TÚ ME HICISTE! ¡PERO NO FUE ASÍ!


- ¡QUE TE JODAN, JEON! ¡SABÍA QUE NO ERAS DE FIAR!


- ¿YO?


Vante, que había escuchado lo gritos y los golpes, salió del despacho y vio a JungKook sangrar.


- ¡NO! ¡NO! ¡DÉJALE!


JiMin fue a propinarle un golpe a JungKook pero Vante le apartó y recibió el golpe, cayendo al suelo.


- ¡VANTE!- gritaron ambos.


El chico estaba sujetándose la mandíbula y se sentía desmadejado.


- Mi amor...- dijo JungKook y luego miró a JiMin con gesto asesino.


- JungKook... no le vi... ¡Juro que no le vi!- dijo, con miedo.


- ¡NO HUBIERA HECHO FALTA VERLE SI NO HUBIERAS EMPEZADO ESTA MIERDA!


Niall sujetó a JungKook y Eileen levantó a Vante.


- ¡Para, chico! No... déjalo...- decía Niall con dificultad.


- ¡Has sido un psicópata todos estos años! ¿Quién sigue a una persona durante siete años?- preguntó JungKook, molesto- ¿sacaste algo bueno? Bien, pero no por ello trates de aprovecharte o joderle su vida ¡NO LO MERECE Y NO TE LO PERMITIRÉ! ¿ME OYES?


- JiMin será mejor que te vayas, cualquier cosa, será mejor que me llames a mi- dijo Eileen- vamos, niños, vamos a curaros esas heridas.


Eileen ayudó a Vante a subir y Niall empujó a JungKook que ardía de rabia.


- Debería pegarte yo también, chico- le reprendió Niall- peleándote casi en plena calle ¿qué eres? ¿un animal? ¡Siempre has sido un ser razonal y pacífico!


- Déjalo.


- No, no lo dejo. Ese chico nos está ayudando, sí. Pero al mismo tiempo toca lo que tú más quieres.


- ¡No, no lo va a volver a hacer!


- Eres muy joven, chico, pero debes tener más sentido común- le reprendió- no lo digo por tu trabajo. ¿En serio vas a ir peleándote con todas las personas que traten de acercarse a Vante? Me da igual quien haya empezado- añadió- no debes caer en esa mierda y te lo digo porque vamos a reabrir un caso donde Vante te va a necesitar cuerdo, no queriendo golpear a todo el mundo, incluido al bastardo que le violó, por mucho que se lo merezca. ¿Entendido?


JungKook suspiró y asintió.


- Bien, ahora vamos a curarte esas heridas.


Cuando entraron en el despacho, Vante sostenía un trapo con hielo en su mandíbula.


- ¿Qué te ha hecho?- preguntó JungKook, preocupado.


- ¿A mí?- preguntó- ¡Yo ni siquiera estoy sangrando!


- Igual necesitas puntos- dijo Eileen, mirándole la cara.


- Lo mejor será que vayamos a Urgencias, eres un modelo, no puedes permitirte cicatrices.


Así pues, le limpiaron las heridas con agua oxigenada, se las taparon y fueron a Urgencias.


- Hola, buenas tardes- dijo Niall- estábamos en una reunión y se ha caído por las escaleras. No le duele nada, salvo la cara. Es modelo y no puede quedarse así. Le hemos traído por eso...


- Bien, ¿tiene seguro?


- Sí, aquí está- dijo JungKook.


- ¿La mano también te la golpeaste al caerte por las escaleras?- preguntó.


- Traté de sujetarme y me golpeé con la barandilla- mintió descaradamente.


- Bien, te haremos una placa de la mano y un cirujano estético te arreglará la cara.


JungKook entró en la zona de Urgencias. Como sólo una persona podía entrar con él, Eileen y Niall se quedaron afuera mientras Vante le acompañaba.


- No sé porque tengo la impresión de que pasamos mucho tiempo en hospitales.


- Bueno... tú siempre estás en el hospital porque me pasan cosas a mi... no me importa estar en el hospital porque sea a ti a quien le pase algo- replicó.


- Te besaría... pero me duele el labio...- dijo y Vante resopló.


- Odio esos escalones.


- Aun así me las ingeniaré para tener sexo contigo- dijo.


- ¡Estás loco!- dijo, soltando una carcajada.


- Malditamente loco por ti.


El médico llegó y Vante fue a la sala de espera, veinte minutos después, JungKook tenía tres puntos debajo del labio inferior y cinco en el pómulo.


- Cariño...


- Necesita reposo- dijo el médico- le hemos mandado unas medicinas y le hemos hecho una placa en la mano y la cabeza, por si acaso, pero está todo bien.


- ¡Menos mal!


- Descanse, nada de alterarse y duerma un poco incorporado, no tome el sol, de acuerdo.


- De acuerdo. Muchas gracias.


- Vamos, ya que estamos aquí, nos quedaremos en el centro, cenaremos allí y te acostarás a dormir. ¿Qué pone aquí sobre las medicinas? Una después de la cena. Bien, lo recordaré, te acostarás pronto. ¿Te duele algo?


- No. No te preocupes.


- Menos mal. Vamos.


Salieron y vieron a Niall y Eileen hablando.


- ¿Cómo ha ido todo?- preguntó Eileen.


- Bastante bien, estoy un tanto magullado, pero bien.


- Nosotros nos quedaremos aquí- dijo Vante- por mi tratamiento tengo que pasar las noches en el centro y él debe descansar. No tengo la obligación de cenar en el centro, pero puedo hacerlo...


- La comida del centro está asquerosa- se quejó JungKook.


- Sí, ahí tienes razón- corroboró el chico- pero es muy sana y tú necesitas tranquilidad ahora. Te han mandado reposo. Iremos al centro, cenarás allí y te acostarás.


JungKook le abrazó y cerró los ojos.


- Os acompañamos a la puerta del centro- dijo Eileen- la verdad es que cuando Niall me ofreció un contrato no me imaginé esto...


- Que los dos miembros más jóvenes de la empresa se metieran en una pelea no estaba en mis planes- dijo el hombre, divertido- ¿deberíamos castigarlos?


- Eso estaría bien- dijo Eileen, divertida.


- Ah, primero Vante y ahora vosotros, todo el mundo se burla de mí.


- A veces eres un poco dramático.


- ¿Sólo a veces?- preguntó Niall.


Los cuatro rieron y llegaron a la puerta del centro.


- Deberías contarle a tu terapeuta todo lo sucedido con JiMin- aconsejó Eileen- ya sé que ahora nos está ayudando, pero también pegó a JungKook.


Vante asintió y entraron, fueron derechos a la habitación que les tenían asignados y, al ver que no podían entrar, llamaron a un enfermero.


- Sí, a ver... un momento... vale, esperen fuera.


Confundidos, los chicos esperaron en el comedor hasta que la doctora Prescott los vino a buscar.


- ¿Qué te ha pasado?- preguntó al ver a JungKook.


- JiMin.


Camino a la habitación, le contaron lo sucedido.


- Me alegro de que quieras hablar y volver a denunciar. No creo que JiMin sea peligroso para ti, pero sí que creo que puede ser muy celoso respecto a JungKook porque piensa que él le ha quitado a Vante.


- No sabía que fuera un objeto- dijo, molesto.


- No lo eres para mí- aseguró.


La doctora les abrió la puerta de la habitación, inspeccionó que todo estuviera en orden y les dejó entrar.


- Por tu seguridad, habrá guardias por tu puerta de noche- informó.


- Se lo agradezco- dijo JungKook.


- No hacía falta- dijo Vante, a la vez.


La doctora sonrió y los dejó solos.


- Ven, vamos a la ducha, estás lleno de sangre.


Dejándose mimar, JungKook fue al baño y Vante le quitó los zapatos, los calcetines y luego le desnudó.


- Vamos, a la ducha.


- Me bañarías mejor, si te metes conmigo ahí- le dijo con una sonrisa.


- Vale, ¡Pero nada de sexo!


JungKook sonrió y, cuando Vante se metió en la bañera, le abrazó.


- Déjame verte- pidió el chico.


El agua se empezó a llevar los resto de sangre que JungKook tenía en la cara y Vante le lavó el pelo.


- ¿Te duele algo?- preguntó preocupado- ¿te golpeó el cuerpo?


- No, sólo la cara...


- No sé cómo pudo hacerte esto...


- Estaba muy enfadado...


- ¿Y qué?- dijo, cerrando los grifos y secándole la cara con muchísimo cuidado- ¡no es normal enfadarte con alguien y pegarle! Vamos, ponte el pijama, apóyate en mí.


- Puedo ponerme el pijama...


- No quiero que agaches la cabeza... ¡y ahora te voy a arreglar las almohadas!


JungKook sonrió y, en cierto modo, se sintió mal. Aquello era exactamente lo que le había restregado en la cara a JiMin: la atención de Vante.


- Lávate los dientes y tómate la pastilla, iré preparando la cama, te dejaré del lado de la pared.


Cuando salió del baño, encontró a Vante con uno de sus pijamas cortos, le había arreglado la cama y le esperaba con una sonrisa.


- Pensaba que ibas a dormir con otro pijama.


- Bueno... he pensado que te gustaría que llevara este.


- ¡Me encanta cuando los llevas!- dijo y acarició el trasero del chico.


- Aun así, sigo manteniendo que no habrá sexo.


- Odio a JiMin- dijo JungKook.


El chico se tumbó y el fotógrafo se tumbó a su lado, apoyado en su pecho. Inmediatamente, JungKook comenzó a acariciar sus piernas y sus nalgas.


- Me gusta cuando no llevas ropa interior- confesó.


Fue a incorporarse, quería besar sus piernas y sus nalgas, pero se lo impidió.


- Ya que no vamos a tener sexo, me lo he puesto para que disfrutes de mis piernas, sé que te gustan. Confórmate con eso- le dijo- el médico dijo mucho reposo.


- Vante... sé que tienes ganas, esos pantalones no dejan nada a la imaginación...


- Lo sé. Es lo que tiene dejar de tomar la medicación... siento que me paso las veinticuatro horas del día cachondo y no entiendo porque... pero tú has pasado mucho tiempo controlándote por mí, ahora es momento de que yo haga lo mismo por ti.


JungKook le besó, apenas un roce de sus labios y se tumbó.


- Gracias...- dijo- pero odio a JiMin.


- Que esté enfadado no es razón para hacerte esto- dijo- cuando termine todo esto, no le volveré a dirigir la palabra.


- Bueno... yo no me porté bien del todo con él- dijo y Vante le miró- no voy a decir que fuera culpa mía. Cuando salimos él quería pegarme, lo sabía, lo vi en sus ojos y, en cierto modo, yo... sólo quería... restregarle por la cara que, aunque lo hiciera, eso no cambiaría nada.


- ¡JungKook!


- ¡Lo siento! Pero JiMin y yo arrastramos nuestras mierdas desde hace tiempo- dijo- cuando vine a vivir a Newport, las cosas mejoraron entre nosotros. Pero cuando se enteró que tú eras mi novio, fue como volver a abrir esa caja que habíamos cerrado y metido bajo la alfombra, pero peor- añadió- JiMin me acusa de saber tu verdadera personalidad y no decirle nada.


- ¡Pero tú no lo sabías!


- Y siempre se lo digo- dijo JungKook- lo que lleva a su eterna pregunta de "Si lo hubieras sabido, ¿me lo hubieras dicho?" y eso lleva a mi eterna respuesta que es lo que le cabrea: no.


Vante le miró y JungKook rio.


- No te hagas el indignado tú también. ¡Es cuestión de lógica! Yo sabía todo lo que él estaba haciendo, cuando te conocí me dijiste que no estabas bien de salud, que era tema de nervios. Al poco yo supe lo que te había pasado. Y te juro que no sé en qué momento fue, pero entre sesión y sesión, ir a comer, hablar, quedarme en tu casa, enfadarnos y desenfadarnos, yo me fui enamorando de ti. ¿Me crees tan gilipollas como para decirle "oh, sí, está aquí, conmigo"? Sabía que tomabas medicaciones para los nervios, pero también sabía que no tenías pérdidas de memoria. Perdona la expresión, mi amor, pero con treinta y un años consideré que ya peinabas los suficientes pelos en los huevos como para saber a quién querías en tu vida y a quien no y, si me llamabas a mi todos los días y él necesitaba contratar un detective privado para saber de ti es porque no querías saber de él. ¡Esa es mi lógica!


Vante sonrió y le abrazó aún más. JungKook se sintió arder al notar el miembro tan duro de Vante en su cadera.


- Tu lógica es bastante acertada- dijo el chico- no he querido saber nada de nadie en este tiempo y sigue siendo así- resopló- por un momento me planteé que JiMin podría volver a mi vida. Pensé que sería genial, ¿sabes? Resulta que mi antiguo mejor amigo y tu mejor amigo eran la misma persona... pero no ha resultado como esperaba. Mejor dejar las cosas como estaban. Bueno... es igual, ¿sólo por eso dices que le has provocado?


- Bueno...


- ¿Qué hiciste?


- Después de decirle que sí, que si hubiera sabido que tú eras Kim TaeHyung... el Kim TaeHyung que él buscaba, hubiera hecho lo mismo, me pegó- admitió- y fue ahí cuando le provoqué. Le dije que, aunque me haya pegado, tú seguías siendo mi novio y, que gracias a él, ahora yo tendría más mimos de tu parte... fue ahí cuando se puso bastante irracional y empezó el drama.


Vante se quedó un momento mirando al techo y una sonrisa asomó por sus labios.


- Está mal lo que has hecho.


- ¿Por qué sonríes?


- ¡No debería darte mimos! ¡De hecho, no te los debería haber dado!


- ¿Quieres que te los devuelva?


- ¡Sí! ¡No!


JungKook rio.


- Deja de liarme.


- No te insistiré- dijo- respeto tu decisión.


- Me alegro de que sea así. No esperaba otra cosa de ti.


Se quedaron en silencio y cuando Vante habló, lo hizo con algo de miedo.


- Me da bastante... cringe lo que hizo JiMin- admitió- ese investigador me ha estado siguiendo durante años y no me he dado cuenta. ¿Quién sabe si... si HyukHae también y no me doy cuenta?


- Eso no pasará.


- ¿Cómo estás tan seguro?


- No lo estoy, pero no voy a dejar que nadie se acerque a ti.


- Eso es lo que más miedo me da.


- Mi amor, dejemos que las cosas pasen solas- dijo- no te pongas la tirita antes de hacerte la herida. Ese súper investigador pronto tendrá las pruebas y podremos llevar a cabo el plan.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).