Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Hasta que me recuerdes por RLangdon

[Reviews - 0]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

La helada brisa nocturna mecía su oscuro cabello al compás de las copas de los árboles. Esa noche era mas fría, lúgubre y solitaria que las anteriores. Y pese a que ya era muy tarde, él sostenía que Naruto se presentaría. Los contratiempos tendían a surgir pero no representaban impedimento alguno para aquel sol que, actualmente, lo tenía mas confundido de lo que ya estaba.

¿Serían acaso sus sentimientos pasados o realmente surgían unos nuevos?

Sasuke no estaba seguro de la respuesta. Fue por ello que noches atrás decidió hacer algo más, algo impropio, indigno y ridículo...le había besado. A él, quien alguna vez fuera su mejor amigo y primer amor. Se atrevió a robarle un beso, uno simple y corto, uno vacío y frío. Un beso que pretendía demostrar el hecho de que no sentía nada.

Pero, contra todo pronóstico, se había equivocado. Si había sentido algo con el incipiente beso, cuando Naruto correspondió a sus labios, un repentino calor surgió entre ellos, una llamarada que se extendía por todo su cuerpo, enviándole ligeras descargas de una emoción por demás conocida para el Uchiha.

Naruto Uzumaki había vuelto a despertar en él, sentimientos que creía en el olvido, muertos.

Cuando lo veía sonreír, algo en su interior se revolvía con brío. Y sentía más ganas de besarlo, de llegar a extremos en los cuales nunca antes había estado. Quería rebasar ese límite.

Más no estaba dispuesto a admitirlo. Fue su impulsividad la que lo llevó a actuar indebidamente y en contra de sus principios, besando a Naruto, el actual Hokage, su líder, antiguo compañero de equipo y con quién solía discutir a diario.

Irónico. 

¿Qué dirían los aldeanos si llegaban a enterarse?...

¿Qué diría Sakura?

Conociendole, era por demás seguro que lo mandaría a castrar antes de permitir su tórrido idilio. 

-¡Sasuke....!

El sonoro grito lo sacó de sus cavilaciones rápidamente. Sasuke descendió del árbol cuando vio al joven acercándose a él a toda carrera, sudando copiosamente y con aquella mirada cansada.

Naruto ensanchó una sonrisa radiante al verle. Su ritmo cardíaco estaba fuera de control. Poco había faltado para que no pudiera acudir al entrenamiento, pero lo había conseguido. 

Camino hacia alli, Naruto había estado pensando seriamente en lo que diría cuando se encontrara con Sasuke pero su mente se quedaba en blanco otra vez. 

Sasuke le había recomendado descansar algunos días y, aunque en un comienzo Naruto se había rehusado, terminó accediendo. Era demasiado complicado y exhaustivo el tener que entrenar dos veces en un día. Además, Shikamaru no dejaba de presionarlo, insistiendo en que debía recuperarse pronto y retomar actividades por el bien de toda la aldea. 

-Llegas tarde...- Sasuke caminó escueto hasta los troncos para practicar tiros. Naruto lo siguió rápidamente.

Días antes lo había besado y ahora actuaba como si nada hubiera ocurrido ¿Debía hacer lo mismo?

-No volverá a ocurrir.

-Eso espero- sentenció Sasuke con acritud, tratando de forjar fallidamente la barrera entre ellos, sin conseguir más que una sonrisa boba a cambio. Naruto era tan impredescible e ingenuo que no se daba cuenta de nada.

-¿Practicaremos lo mismo de antes?- casi instantáneamente, Naruto se cubrió la boca con ambas manos. No por la euforia de su cuestionamiento, sino por el imprudencial doble sentido presente en el mismo. 

No transcurrieron más de dos segundos para que el imponente y serio Uchiha se girara en su dirección, alzando una ceja inquisitivamente. Naruto ensanchó la sonrisa que denotaba más nerviosismo que alegría.

-Quitate la chamarra.

-¿Qué?- Naruto gritó tan fuerte que una parvada de pájaros emprendió el vuelo cerca de donde ellos se encontraban. Estupefacto, miró a su actual instructor. Sasuke no parecía estar bromeando en lo más mínimo.

"¿Acaso quiere...que yo...que nosotros?"

Naruto tragó pesado, presintiendo que el corazón se le saldría en cualquier momento. Lo peor de todo es que la idea no le molestaba en lo mas mínimo. 

¡No! Solo imaginaba cosas, eso era.

Sasuke tenía una familia, y él también. Ambos estaban casados y allí terminaba todo. 

Lentamente, Naruto tomó entre sus dedos el cierre, centrando a su vez la mirada en el mismo.

-La prenda te estorbara cuando intentes impulsarte hacia tu objetivo- le aclaró Sasuke, cruzando los brazos a la altura del pecho, aparentemente neutral a los movimientos del otro.

-Ah- Naruto asintió reiterativamente, después volvió a dudar. -Pero no llevo camisa.

"Por culpa de Boruto" se abstuvo de decir. Y es que gracias a su hijo y sus juegos con globos de agua, su playera había terminado empapada. Además no tuvo tiempo de buscar otra porque ya era muy tarde y Sasuke no le perdonaría saltarse el entrenamiento. 

-No pregunté razones- tajó Sasuke, ladeando el rostro con presunción. Aquello le había afectado un poco, pero jamás lo demostraría. Su orgullo le impedía decir nada, pero lo cierto era que odiaba saber que Naruto dividía su tiempo entre su familia y él. Además de que a él ni siquiera lo recordaba. 

Naruto se deshizo rápidamente de la chamarra, dejando su torso al descubierto, hacía frío pero soportaría cualquier cosa con tal de lograr lo que se proponía.

-Las reglas serán diferentes ahora- Sasuke explicó, posicionándose a su lado, instandolo a tomar un arma del estuche que yacía sobre el prado. Naruto se maravilló por la variedad de armas a su disposición. -Cada vez que falles, te preguntaré lo que yo quiera, si está en tu disposición responder, lo harás... ¿entendido?

Naruto vaciló en responder. Le gustaba más la antigua dinámica porque le daba la oportunidad de conocer más sobre Sasuke. Hasta ahora solo estaba consciente de que el Uchiha no era feliz, pero en esta ocasión Sasuke podría averiguar lo que quisiera ¿y si lo estaba probando y después usaba algun genjutsu para infiltrarse en sus pensamientos y saber la verdad?

Nervioso, Naruto aspiró hondamente.

-Si, Sasuke...

Parecía que todo hubiera sido previamente preparado para que se equivocara. Habían practicado puntería con los kunais, y aunque se sabía habilidoso en el manejo de armas, fue su torpeza la que brilló en esta ocasión. 

¿Cansancio, la mirada le estaba fallando?

-Tres fallas, lo que implica que te haré tres preguntas al azar- murmuró Sasuke en tanto retiraba las piezas de su sitio. 

Naruto asintió, algo agitado. Se sentía muy cansado y aunque trató de no equivocarse, terminó haciéndolo. Sólo le restaba responder, y rogar porque no fuera nada serio.

-¿Por que me pusiste como tu suplente?

La expresion de Sasuke no varió en lo más mínimo. Naruto lo observó atónito.

-No lo sé- admitió en voz baja. -No lo recuerdo, pero si dices que éramos amigos, tiene sentido que te eligiera.- sus ojos se opacaron a medida que revelaba la causa. Había un espacio vacío en sus pensamientos. Todos estaban allí menos Sasuke.

Conforme con la respuesta, Sasuke prosiguió.

-¿Recuerdas a Sakura?

-Claro.

Naruto esquivo la mirada, ladeando la cabeza hacia su costado. Le apenaba sincerarse con él, pero era la verdad.

-Era de esperarse- Sasuke habló lo suficientemente bajo para solo oírse a sí mismo. -Ahora quiero que me expliques ¿Que sientes con esto?- Naruto se inquietó cuando Sasuke le tocó los labios con dos de sus dedos, simulando una suave caricia que le dio cosquilleos. Estaba por responderle cuando el Uchiha lo tomó de la nuca y lo atrajo hacia sí. Sus labios entraron en contacto una vez mas.

Y Naruto solo pudo sentir....felicidad.

**

Esa noche se propuso llegar temprano (pero no lo había logrado), le hacía falta tiempo de caridad con su familia. 

Y es que extrañamente los echaba de menos. Boruto ya no acudía a su oficina diariamente, no lo molestaba o intentaba concretar una cita para verlo. Y lo peor de todo, comenzaba a sentirse culpable de que su hijo se apartara nuevamente de él.

Himawari también empezaba a mostrarse distante.

Y en cuanto a Hinata...

Ya había cometido muchas equivocaciones para darse el lujo de seguir haciendo caso a sus brumosos sentimientos.

Aunque realmente se sentía muy cansado al tener que rendir cuentas de informes, su entrenamiento con Sasuke, y el turbio manto de amnesia que le impedía recordarlo. Además de que estaba descuidando a su familia de nuevo.

Exhalando con fastidio, se adentró a su hogar, siendo recibido prontamente por su hija menor, quien no dudó en correr a abrazarlo. Hinata se hallaba recostada en el sofá, con una bola de estambre entre sus manos, se había quedado dormida tejiendo otra bufanda. Naruto sonrió con melancolía y le hizo una muda seña a su hija para que no despertara a Hinata, después se dirigió a las escaleras. Era muy tarde y él lo sabía perfectamente. Boruto estaría durmiendo en esos momentos y él no pretendía perturbar su sueño, solo quería verlo, quiza abrazarlo y pedirle perdón por ser tan mal padre.  

Porque así se sentía Naruto consigo mismo.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).