Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Mi sueño cumplido … por Yakaylex2

[Reviews - 0]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

La historia, nombre y personajes utilizados son de mi autoría. Cualquier parecido con la realidad es mera coincidencia. Se escribe sin ánimo de lucro.

Notas del capitulo:

Serie: No


Fanfic relacionado: No


Pareja: Chica x Chica 

Recuerdo la primera vez que la vi. Era la chica más hermosa de la preparatoria y la próxima dueña de mi corazón. Desde ese primer día intenté de todos los modos hacerme su amiga, pero siempre recibía de parte suya una mirada hostil y fría. Muchas veces me pregunté por qué yo no le agradaba. Era amigable, inteligente, extrovertida, agradable, atractiva, popular y siempre estaba rodeada tanto de chicas y chicos por igual. ¿Cuál era el problema? Bueno, precisamente eso. Mi chica especial era muy antisocial e introvertida, así que odiaba a las personas que eran lo opuesto a ella. Su mejor amigo, después de haberle suplicado de rodillas durante varios meses, me dio un consejo bastante útil: "¡Deja de actuar como si fueras una diosa reencarnada!". Era, lo admito, precisamente de esa forma. Pero, ¿cómo no hacerlo si tenía tantos súbditos a mis pies? Pero la razón más importante es que había comenzado a actuar de esa manera porque quería llamar la atención de todos, que alguien se fijara en mí. Pero ahora solo quería que ella lo hiciera.


Por eso, un día decidí regresar a mi antiguo aspecto, menos glamoroso y más cómodo, e hice a un lado a todo mi séquito de seguidores, que estaban impactados de lo que me había pasado. Lentamente me fui acercando a ella, y logré hacerla reír varias veces con las humillaciones que ahora recibía por parte de mis antiguas admiradoras. Comenzamos a entablar una ligera amistad, que yo deseaba con toda el alma que se profundizara aún más. Decidí que el mejor lugar para hacerlo sería en la fiesta de fin de cursos, que daría una amiga que ambas teníamos en común.


Ese día traté de vestirme lo más presentable posible, no tan coqueta, pero si algo más que en otras ocasiones. Llegué a la estación al mismo tiempo que ella y mi corazón dio un vuelco, al verla tan hermosamente vestida. Pude ver que ella también me miraba y por alguna razón sus mejillas se tornaban carmesí. ¡Quizá podía tener alguna oportunidad! Durante todo el camino conversamos poco, pero al menos no hubo discusiones como en el pasado. Al llegar a la fiesta - que ya estaba en todo su auge -, nuestra amiga nos hizo pasar a su habitación, ya que ahí "hablaríamos más cómodas". Cuando estuvimos solas, mis manos sudaban como locas, mi corazón palpitaba con violencia y parecía que mi cuerpo no podría sostenerme. Sin embargo, mantuve una actitud serena para que no se notara mi ansiedad. Lo mejor que podía hacer era bromear como antes, pero eso jamás había funcionado. Esas conversaciones siempre terminaban en pelea y lo último que quería era que todo finalizara antes de empezar. Mientras yacíamos sentadas en la cama, pude notar un leve movimiento en su pierna, como si temblara por sí sola, lo cual me mostraba que también se encontraba en un estado parecido al mío. Sin embargo, y conforme los minutos pasaban, nuestro nerviosismo pareció desvanecerse y comenzamos a platicar, mirándonos en algunas ocasiones con más confianza.


Hablamos de todo un poco, no como amigas que se conocen desde años atrás, sino como dos personas que se acaban de conocer y quieren recuperar el tiempo perdido. Supe sobre sus sueños, sus ambiciones, sus gustos y desagrados. Obviamente diferíamos en varios temas, pero lo cierto es que en la mayoría compartíamos las mismas ideas. Y aunque por fuera podía verse como cualquier persona común, lo cierto es que jamás creí que fuera una enciclopedia cultural viviente. Hablaba con conocimiento de causa y profundidad. Sabía sobre tantas cosas que me preguntaba por qué no lo demostraba más seguido en la escuela. Jamás me imaginé que podríamos llegar a entablar una conversación tan amena y tan agradable, sin que ella quisiera arrojarme por la ventana. Era un buen progreso. Conforme hablaba, me di cuenta de que me gustaba mucho más de lo que creía. No era solo ese rostro tan lindo, unos ojos de un color tan luminoso y una sonrisa tan brillante que opacaba la misma luz de las estrellas. También era su inteligencia, su encanto, su forma de ser. Era la chica más perfecta que jamás había conocido. Por un momento fugaz, sus ojos se encontraron con los míos y de inmediato desviamos tímidamente nuestras miradas.


¿Qué rayos me pasaba? Pasé años enteros intentando que me viera y ahora toda su atención estaba sobre mí, ¿Y no lo aprovechaba? Pero no podía evitar esa sensación de vulnerabilidad que recorría con lentitud mi cuerpo, ese sentimiento que ayudaba a no poder comportarme como siempre lo había hecho a su lado. De verdad que tenía tanto miedo de hacer un movimiento en falso que nos haría separarnos para siempre. No quería eso. Quería mantenernos unidas; como compañeras, como amigas, y obviamente como pareja. Era la persona que más había amado en toda mi vida. Pasaron las horas y el mundo se detuvo a nuestro alrededor. No recuerdo si en algún momento sentí hambre o sed, solo me importaba lo que ocurría en esa pequeña habitación y que estábamos juntas. Por ello, cuando se disculpó para conseguir algunas bebidas, no pude soportar la idea de separarnos ni por un segundo. Evitando que se levantara, me abalancé sobre su cuerpo abrazándola con fuerza. El peso del movimiento hizo que ambas cayéramos sobre la cama.


Mientras acariciaba su mejilla con delicadeza pude notar un ligero temblor en su cuerpo, pero afortunadamente no se separó de mí. Solo atinó a cerrar los ojos. Mi propio cuerpo también temblaba, tanto de miedo como de emoción. Nos besamos lentamente, disfrutando de esa agradable sensación que llenaba de calor a nuestros labios. Jamás creí sentir tantas emociones al mismo tiempo, era como una explosión de fuegos artificiales, como una agradable brisa en una tarde de verano. Su rostro tan cerca, su cálida respiración y esos labios tan delgados y suaves... Era la primera vez que nos besábamos. Después de un par de minutos, rompimos con lentitud ese beso tan delicioso que me supo a helado de limón. Si, un poco frío pero refrescante. Un poco turbadas, pero con una enorme sonrisa en nuestros labios, nos abrazamos por un largo rato sin decir ninguna palabra, hasta que nuestra respiración se regularizó. Una vez calmadas, nos levantamos de la cama.


Con tranquilidad se dirigió hacia la fiesta para conseguir bocadillos, mientras yo salía al balcón. Las estrellas y la luna brillaban en el firmamento. El cielo tan limpio, que oscurecía el paisaje cercano, hicieron que mi mente y mi corazón se llenaran de una paz y armonía que no había experimentado en años. Tal vez en mi vida. Cuando vi que regresaba, mi corazón comenzó a latir nuevamente, muy emocionado. Esperaba acostumbrarme pronto a esa sensación. Mientras sus manos se unían a las mías y nos deslizábamos con lentitud hasta el piso, para seguir contemplando ese cielo tan hermoso, supe que todo estaría bien, más que bien. Mi sueño por fin se había hecho realidad...

Notas finales:

Bueno, hasta aquí la historia. Debo decirles que esto del yuri todavía me está costando un poco, así que espero no molestar a nadie por la forma en la que lo escribo. Pero quiero que sepan que lo hago de todo corazón para los amantes de este género - saludos hermano Alekay. - No puse nombres ni características físicas para que cada quien pueda imaginarse en el lado que más le acomode y con su persona más especial. Espero que les haya gustado y cualquier comentario ya saben que es bienvenido.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).