Durante dos días lo único que escuchaban a veces eran los lamentos de dolor de Wei Wuxian, lo que fuera que estuviera pasándole era terriblemente doloroso y era una tortura escucharlo, no tenían idea de lo que estaba pasando pero lo que sí sabían era que el joven estaba sufriendo un dolor indecible.
Finalmente, después de lo que les pareció una eternidad, vieron salir a Wen Ning. Sin decir nada este bajó las gradas y se dirigió a donde se apilaba la leña cortada para recoger algunos leños. Se veía agotado y sin perder tiempo se acercaron a preguntarle qué había pasado.
Wen Ning: Wei Gunsu y Xie Yun estarán bien.
Todos suspiraron de alivio, las mujeres comenzaron a preparar comida para su señor y para la señorita Wen Qing. Mientras su hermano fue llevado a una casa para que durmiera un poco después de comer, le urgía descanso aunque lo negara.
Dentro de la casa el silencio reinaba en la habitación. Wei Ying dormía profundamente y su hijo a su lado se movía algo inquieto, comenzó a llorar pero ni eso pudo despertar a su padre. La sanadora se acercó y lo tomó en sus brazos para calmarlo un poco con arrullos.
Wen Qing: Debes tener hambre - Se asomó por la ventana pero no vio a su hermano por ninguna parte - Deben haberlo llevado a descansar - Miró al pequeño - Tu padre necesita dormir… te llevaré para que te den de comer.
Eso fue suficiente como para que el bebé dejara de llorar, y le mirara atentamente con unos grandes y hermosos ojos plateados, iguales a los de su madre. Sin hacer ruido abrió la puerta y salió, casi de inmediato su prima estaba ahí y tomaba al bebé en sus brazos.
- Yo me encargo del pequeño Xie Yun… tú come y ve a dormir.
Wen Qing: Gracias - La anciana madre de su prima se acerca con algo de comida en un tazón, por lo que se sienta a comer en las gradas de su hogar.
Había realizado el transplante de núcleo dorado al pequeño Xie Yun, nunca antes se había llevado a cabo esa técnica y sólo la había aprendido por insistencia de sus padres de que ella debía conocer todas las técnicas médicas existentes. Ahora agradecía todas esas horas de estudio que le dieron ese conocimiento.
Aún así no sabía si funcionaría o si el bebé resistiría el recibir un núcleo adulto. Pero sorprendentemente se había adaptado al pequeño y no hubo ningún rechazo así que ahora era un bebé sano y su vida no corría peligro.
Wen Qing: “¿Tal vez resultó porque es su hijo?” - Pensó mientras terminaba de comer.
Su padre era una incógnita todavía, si bien había sobrevivido a la extracción del núcleo, no tenía idea de las consecuencias. Sabía lo que les ocurría a las víctimas del general Wen Zhuliu, tenían una muerte lenta y agónica para luego convertirse en algunos casos en marionetas. No tenía conocimiento sobre una persona viva que no tuviera núcleo dorado.
Pero Wei Wuxian no era una persona común, sus nuevos poderes dependían de la energía resentida que absorbió de los Túmulos Funerarios. Al menos eso le dijo Hei Lang antes de volver dentro de Chenqing cuando todo hubo terminado, así que teóricamente estaría bien.
Dejó el tazón a un lado e iba a levantarse cuando una gran mariposa dorada llegó hasta ella. Le sorprendió porque ese tipo de mariposa mensajera era usada sólo por el Clan Jin. Estiró la palma de la mano y al posarse la mariposa un mensaje llegó directo a su mente. Era la voz de Jiang Cheng y el contenido del mensaje le sorprendió.
La mariposa volvió a convertirse en un pergamino una vez más para que escribiera una respuesta. Volvió a entrar en la casa y se sentó en su escritorio. Se quedó mirando el pergamino durante mucho tiempo, el mensaje había sido claro y tremendamente erróneo.
“Wen Qing, quiero pedirte un favor. Nos ha llegado una información sobre mi hermano siendo llevado a Ciudad sin Noche. Sé que no puedes acceder ahí pero si tienes alguna información sobre esto sería muy útil para nosotros.” “Gracias y espero que te encuentres bien.”
Wen Qing: ¿Qué debería hacer?
Wei Ying: Simplemente no le digas a mi hermano donde estoy.
Wen Qing: ¿Cómo sabes?
Miró a Wei Wuxian, no se dio cuenta cuándo se había despertado y puesto de pie. Tomando a Chenqing se acercó y se sentó frente a ella, mirando fijamente al pergamino en blanco mientras giraba el arma en su mano.
Wen Ying: No sé cuáles sean sus intenciones… y no puedo confiar que los demás clanes no sigan pensando en eliminarme.
Wen Qing: Sigues sin responderme… ¿Cómo sabías que era él?
Wei Ying: Lo adiviné - Le sonríe y luego mira alrededor del área común - Supongo que Xie Yun está siendo alimentado.
Wen Qing: Si… mi prima lo está cuidando para que descansáramos un poco.
Wei Ying: Entonces descansa… se ve que lo necesitas - Se pone de pie y toca un par de notas para dejar salir a Hei Lang - Comencemos a entrenar… no tenemos suficiente tiempo.
Wen Qing: ¡Espera! - Se pone de pie y se para frente a Wei Ying - Debes descansar unos días… acabas de pasar por algo agotador y tienes que tomar las cosas con calma.
Wei Ying: Wen Qing… estoy bien - Se aparta de la chica y comienza a salir - Volveré por la noche… cuida de Xie Yun por favor.
Wen Qing: ¿Qué le respondo a Jiang Cheng?
Wei Ying: Dile la verdad… pero no le digas mi ubicación - Gira la cabeza y mira a la sanadora - No le digas nada de Xie Yun.
Wen Qing: No pensaba hacerlo… eso es algo que no me corresponde.
Wei Ying sonríe y sin decir nada más sale de la casa junto con Hei Lang. Poco después su prima llegó con el pequeño Xie Yun alimentado y dormido, lo colocó en la cuna para que siguiera durmiendo.
- ¿Dónde está Wei Gunsu?
Wen Qing: Fue a entrenar - Susurró terminaba de escribir el mensaje en el pergamino.
- ¿No debería estar descansando?… acaba de tener un hijo.
Wen Qing: Lo mismo le dije… pero ese hombre nunca hace lo que debería hacer.
Al terminar de escribir el mensaje se pone de pie y abriendo una ventana activa el pergamino para dejar ir la mariposa dorada. Se queda ahí mirando hasta que la pierde de vista.
No puede evitar pensar que las cosas hubieran sido diferentes le hubiera encantado ser amiga de los hermanos Jiang, eran personas amables y buenas que no merecían nada de lo que les pasó. En especial a Jiang Yanli, le hubiera encantado ser su amiga.
Sonrió al pensar en el joven Jiang Cheng, en lo amable y caballeroso que fue con ellos cuando estuvieron de visita por el festival. Tal vez si Wei Wuxian devolvía la antigua gloria al Clan Wen podrían volver a vivir días tan hermosos y felices como esos.
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Durante dos semanas, Wei Ying partía todas las mañanas apenas amanecía y regresaba al ponerse el sol, con la ropa sucia, heridas y moretones que Wen Ning le ayudaba a curar. Después de tomar un baño caliente para sus adoloridos músculos pasaba un par de horas con su hijo hasta que este se dormía, cenaba cualquier cosa y luego se iba a la cama.
Ahora Wen Qing podía notar que si bien Wei Wuxian no había perdido la vida al donar su núcleo dorado, algo definitivamente había desaparecido. Sus ojos tenían un aire de frialdad que no mostraban antes, seguía teniendo una sonrisa amable y alegre actitud con todos, pero todo rasgo de inocencia o travesura que vio cuando estudiaban en Gusu parecía haber desaparecido de su mirada.
Esto también podía deberse a por todo lo que pasó, ese tipo de experiencias pueden cambiar a una persona para siempre. Aunque esa frialdad parecía desaparecer cuando tenía a Xie Yun en sus brazos, hablarle a su hijo y arrullarlo traía de vuelta al viejo Wuxian. El chico de mirada cálida y sonrisa feliz parecía aflorar apenas ponía sus ojos en su hijo, las expresiones de alegría y asombro como las de un niño cuando estaba con él le daba esperanza de que poco a poco volviera a ser el de antes.
Una mañana al despertar escuchó el ruido de pasos, se levantó y abrió la puerta de su habitación. Wei Ying estaba cargando a su hijo contra su hombro para sacarle el gas y le cantaba levemente. Lo siguió con la mirada hasta que este la sintió y volteó a verla.
Wen Qing: No noté que había llorado… ¿Ya desayunaste?
Antes de que pudiera responder alguien tocó a la puerta y luego su prima llegó cargando a A-Yuan, era normal que trajera al pequeño cuando tenía que alimentar a Xie Yun. Pero esa mañana se veía algo pálida y asustada.
Wen Qing: ¿Qué ocurre?
- Soldados de Wen Ruohan - Caminó hasta Wen Qing - Los de la Resistencia están haciendo un ataque en conjunto y se están acercando peligrosamente a la ciudad… han ordenado a todos los hombres armarse para pelear…
Wei Ying: ¿Pelear? ¿A campesinos y personas mayores? - Coloca a Xie Yun en su cuna - Quédate con ellos.
- Si - Coloca a su hijo junto a Xie Yun, la cuna era lo bastante grande para ambos - Tenga cuidado Gunsu.
Wei Ying acaricia la cabeza de ambos bebés y luego se gira para salir de la casa.
Wen Qing: ¡Espera! - Se le acerca y le toma de la muñeca - Si sales vas a alertar a Wen Ruohan de tu ubicación - Regresa a su habitación y se coloca una túnica de exterior - Saldré y en cuando se marchen veremos qué hacer.
Wei Ying: Si los soldados se ponen violentos saldré.
Asintiendo salió de la casa y corrió hasta la única entrada de la villa, cuando llegó ya los soldados se habían marchado y notó que varios de los hombres jóvenes de la villa ya no estaban, sólo pudo ver a los niños y ancianos.
Wen Qing: ¿Qué pasó?
- Dijeron que si no se iban a pelear serían ejecutados todos por traición - Dijo la anciana, la abuela de A-Yuan.
Wei Ying: Maldito Ruohan.
Wen Qing: ¡A-Ning! - Comenzó a buscarlo por todas partes - ¡¿Dónde está?!
Wen Ning: Aquí estoy - Dijo saliendo de una de las casas. Se acercó a su hermana y esta lo abrazó llorosa - Sabía que me pedirían ir así que me escondí.
Wei Ying: Hiciste bien - Se le acerca y le pone una mano en el hombro - No tienes entrenamiento militar y la realidad es que ninguno debió ser obligado a ir.
Wen Qing: Wei Wuxian… ¿Qué debemos hacer?
Wei Ying: Prepara todo para salir si es necesario - Toca a Chenqing y uno de los lobos menores sale, se arrodilla y le coloca una mano en la cabeza - Si están en peligro llévalos a un lugar seguro - El lobo de humo se sienta y se queda ahí, resguardando la puerta principal.
Se da la vuelta y regresa a la casa. Wen Qing y su hermano lo siguen y al entrar lo ven cargando a su bebé, dándole un beso en la frente. Lo regresó a la cuna e hizo lo mismo con A-Yuan para luego regresarlo a las manos de su madre. En ese tiempo se había apegado mucho al pequeño, tanto que le gustaba pensar en ellos como hermanos de crianza como lo fue él con los Jiang.
Wei Ying: A-Ning…
Wen Ning: Si… Wei Gunsu - Se acerca rápidamente.
Wei Ying: Cuídalos con tu vida… sin importar lo que suceda quiero que los protejas hasta que regrese.
Wen Ning: ¡Lo prometo!
Wen Qing: ¿Qué planeas hacer?
Wei Ying: Si los demás clanes han decidido atacar y acabar con Wen Ruohan van a necesitar de mi ayuda… les guste o no soy el único que puede quitarle el Sello a Wang Lingjiao - Termina de guardar algunas cosas en su bolsa Qiankun y ata a Chenqing en su cinturón - No van a conseguirlo sin mí… puedo sentir un gran mal fortalecerse dentro de las paredes de la residencia de Wen Ruohan.
Wen Qing: ¿Qué quieres decir?
Wei Ying: Lo escuché una vez… cuando Wang Lingjiao me atacó con el Báculo de Cobra sentí al Sello llamarme… una voz me pedía ayuda.
Wen Ning: ¿Una voz?
Wei Ying: Dentro del Sello del Tigre Estigio se encuentra una criatura muy poderosa… Hei Lang me ha estado entrenando para que pueda liberarla y controlarla con Chenqing - Mira a su hijo y coloca una mano en su pecho, sintiendo el latir de su corazón y su calidez - Si lo logro el reinado de Wen Ruohan llegará a su fin.
Wen Qing: ¿Qué va a pasar si no lo logras? ¿Has pensado en eso?
Wei Ying: Lo lograré - Mira a la sanadora con determinación - Pero en el remoto caso de que eso no pase y muera el lobo de la entrada desaparecerá… entonces debes partir con mi hijo directamente a Gusu y entregárselo a Lan Zhan en persona.
Wen Qing: ¿Confías en él? - Se acerca y le mira preocupada - No hemos sabido nada de Lan Wanji desde que Wen Chao te secuestró… al menos tu hermano ha estado buscándote.
Wei Ying: Lo sé - Sigue mirando a su hijo y sonríe con nostalgia - Lo enviaría con mi hermana pero el único que tiene el poder para proteger a Xie Yun es él - Busca entre su túnica un sobre y se lo da - Escribí esto hace unas noches… dásela si algo me pasa.
Wen Qing: Wei Wuxian…
Wei Ying: Pide asilo para tu gente… si ya no estoy no habrá futuro para el Clan Wen… pero sé que tu villa de sanadores será bien recibida en Gusu ya que los conocimientos de tu familia serán muy útiles y estoy seguro que Lan Xichen los recibirá.
Wen Qing: No suenes como si te estuvieras despidiendo - Se gira bastante molesta - Si no vuelves de una pieza te llenaré de agujas para mantenerte en la cama por un mes.
Wei Ying se ríe pero no dice nada, sabe que Wen Qing cumplirá con su voluntad. De igual manera no tenía planeado morir, pero lo que iba a enfrentar no sería fácil y no podía estar seguro de salir ileso de ello.
Wen Ning: Gunsu… cuídese por favor.
Wei Ying: Lo haré… no pienso morir y dejar a Xie Yun sólo - Coloca la palma de la mano en el hombro del joven - Y tampoco a las personas que nos han salvado la vida.
Les da un abrazo a los dos hermanos al mismo tiempo, a pesar de ser poco el tiempo siente son sus hermanos de Clan, lo eran porque era descendiente de la antigua familia Wen, pero también porque lo sentía en su corazón.
Después de unos momentos más los deja ir y después de inclinarse para darle un beso a su hijo en le frente sale de la casa, camina hasta el jardín central donde es rodeado de las pocas personas que habían quedado de la pequeña villa. Mira a todos unos instantes antes de tomar a Chenqing y comenzar a tocar una melodía, Hei Lang sale con varios de otros lobos menores.
Wei Ying: Si ven señales de peligro sigan al lobo que está en la entrada… no se detengan y viajen ligero.
Wen Qing: Ten cuidado… recuerda que Xie Yun necesita a su padre.
Wei Ying le sonríe, luego vuelve a tocar una melodía y los lobos se transforman en una nube negra que lo envuelve. Esta nube lo levanta por el aire y se aleja rápidamente del a Villa Wen rumbo a Ciudad sin Noche.
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Región de Qishan. Ciudad sin Noche.
El Clan Jin atacó la entrada Este y el Clan Nie la del Oeste, los clanes Lan y Jiang se encargaron de enfrentar la parte central que era la principal y la que estaba más fuertemente armada. La lucha había tomado varios días, el avance era lento porque las marionetas eran muchas y los cultivadores caídos eran convertidos en enemigos gracias a los poderes de Wang Lingjiao.
Después de cuatro días de lucha incesante los tres Clanes de la Resistencia se encontraron frente a las puertas principales que resguardaban la residencia principal donde Wen Ruohan se encontraba.
Lan Xichen: Wen Ruohan debe estar encerrado en la casa principal.
Jin Zixuan: Debemos estar preparados… la peor parte de la lucha apenas está por comenzar así que no debemos confiarnos.
Nie Mingjue: También lo has notado - Mira hacia las grandes puertas de hierro - Nos ha atraído hasta este lugar…
Jiang Cheng: Una trampa… ya estábamos preparados para eso desde que recibimos la respuesta de Wen Ning.
Al recibir la respuesta de la sanadora habían reorganizado sus planes y esperado un tiempo antes de realizar su ataque. Ahora que tenían la certeza de que Wei Wuxian no se encontraba prisionero podían actuar con mayor fuerza.
Lan Xichen: No perdamos más tiempo… aunque sea una trampa no podemos echarnos para atrás ahora.
Los líderes se miran unos segundos antes de reorganizar a cada uno de sus clanes y con ayuda de sus habilidades tirar abajo las puertas de hierro de la entrada central que conectaba con la gran plaza y a la residencia principal.
En cuanto cruzaron por esas enormes puertas fueron recibidos por cientos de marionetas, comenzando la pelea. Las habilidades de los cultivadores eran increíbles, pero eran superados en número lo que les hacía la pelea más complicada de lo que pensaron en un inicio. Entonces Lan Zhan utilizó su técnica de cuerdas asesinas para eliminar varias marionetas al mismo tiempo.
Lan Xichen da órdenes a sus discípulos para adelantarse y comenzar a limpiar el terreno, necesitaban toda el área posible para no quedar encerrados o rodeados por el enemigo. La pelea era cruenta y varios de sus aliados comenzaron a caer, quedando con vida un puñado de cultivadores, los más hábiles de cada Clan.
Las cosas no se veían bien para la resistencia.
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Wei Ying sintió y escuchó la pelea antes de tenerla a la vista, oculto gracias a las habilidades de Hei Lang, se acercó y paró sobre el arco de la gran entrada. Desde esa posición podía ver la pelea sin ser visto y por primera vez en casi un año volvía a ver a sus seres queridos, Jiang Cheng y Lan Zhan.
Los veía pelear y a pesar de estar en inferioridad numérica no temía por sus vidas, al menos de momento sus habilidades parecían mantener las cosas equilibradas. Su verdadera preocupación era encontrar a Wan Lingjiao y recuperar el Sello.
Hei Lang: “Gunsu… ¿Interferimos?”
Wei Ying: Esperemos - Susurra - Hasta que salgan y el Sello esté a la vista…
Hei Lang: “Como ordene.”
A pesar de sus enormes deseos de unirse a la pelea y proteger a los cultivadores de la resistencia, debía esperar a que Wen Ruohan saliera y se expusiera. He iba a hacerlo de eso estaba seguro, su orgullo le haría salir para ver en presencia su victoria.
Pero la pelea continuaba y muchos cultivadores comenzaron a caer para luego convertirse en marionetas, las cosas no se veían nada bien y tal vez tendría que exponerse para hacer salir al líder Wen y a su hijo. Su corazón dio un salto cuando decenas de marionetas se acercaron demasiado cerca de Lan Zhan, pero sonrió al verlo atacar con su Guqin y eliminarlas con una sola nota.
Finalmente después de lo que parecieron horas, se escuchó un aplauso desde la misma entrada de la residencia. La pelea se desarrollaba en la parte más baja y amplia, pero el edificio en sí se encontraba subiendo por unas gradas de piedra desgastadas y rotas por el paso del tiempo.
Justo en la cima de las gradas los vieron aparecer finalmente, el líder del Clan Wen, Ruohan, su hijo Wen Chao justo a su derecha junto con el General Wen Zhuliu y la hechicera Wang Lingjiao estaba a la izquierda del líder y sostenía el Báculo de Cobra. Nuevamente sentía la energía del sello llamarle y una voz femenina pedirle ayuda.
“Yiling Laozu… Libérame…”
Wei Ying: ¿Esa voz en el Sello?
Hei Lang: “Si Gunsu… puedo escucharla también.”
Al ser vistos la pelea pareció detenerse y el silencio reinó en el campo de batalla. Las marionetas que quedaban en pie también se detuvieron a la espera de las ordenes de sus amos.
Nie Mingjue: ¡WEN RUOHAN! - Apuntó con Baxia hacia los Wen - ¡Ven y pelea en persona si te atreves!
La risa del líder le crispaba los nervios a Wei Ying, esas miradas llenas de arrogancia eran detestables y muchos inocentes habían muerto por culpa de esas cuatro personas. Pero el día de hoy eso iba a terminar, aunque tuviera que convertirse en el temido Yiling Laozu, iba a acabar con ellos antes de que cayera la noche.
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Wen Ruohan: ¿Pelear? - Se ríe y mira con superioridad a los demás clanes - ¿Por qué iba a hacerlo cuando mis mascotas los están haciendo tan magníficamente?… no todos tienen que mancharse las manos con sangre para obtener una victoria Nie Mingjue.
Nie Mingjue: ¡No eres más que un maldito cobarde!
Wang Lingjiao: Habla todo lo que quieras - Da un paso adelante y levanta el báculo que comienza a brillar - Les he preparado una sorpresa… veremos si son capaces de lidiar con ella.
El báculo brilló intensamente y un rayo rojo como la sangre cayó del cuelo envolviéndolo, entonces de dentro de la residencia comenzaron a salir más marionetas, pero estas eran distintas, eran más grandes que un humano común y su piel parecía estar hecha de piedra, portaban armas enormes y comenzaron a bajar las gradas lentamente.
Pero eso no fue todo, varios rayos cayeron también sobre las marionetas que estaban a su alrededor y comenzaron a transformarse en esas especies de golems. Las cuales comenzaron a atacar a los cultivadores con fuerza devastadora.
Era la hora, Wei Ying se dejó caer aún cubierto por la oscuridad que lo mantenía invisible, Hei Lang justo a su lado.
Wei Ying: Hei Lang… cuando te lo ordene desaparece la barrera y ataca a las marionetas con los lobos.
Hei Lang: “Si Gunsu.”
Comenzó a caminar atravesando el campo de lucha, pasando junto a Lan Zhan sin girar su cabeza para mirarle, tenía sólo un blanco en su mirada y ese era al Báculo de Cobra que mantenía prisionero al Sello del Tigre Estigio. Las enormes marionetas de roca pasaron a su lado sin notarlo y cuando estas lo pasaron dejaron el camino despejado. Entonces Wei Ying llevó a Chenqing a sus labios y entonó una melodía, dando la orden a Hei Lang de deshacer el camuflaje que lo mantenía oculto y de paso decenas de lobos aparecieron para abalanzarse sobre las marionetas.
Wang Lingjiao actuó apenas lo vio, haciendo movimientos circulares con el Báculo creó una ráfaga de aire carmesí y la expulsó en dirección de Wei Wuxian. Cruzando los brazos y protegiéndose con Chenqing se preparó para resubir el golpe de energía.
Este fue expulsado por una ráfaga de poder por varios metros hasta que sintió que fue detenido por dos pares de manos, al girar la cabeza vio a su hermano Jiang Cheng a su derecha y a Lan Zhan a su izquierda. Ambos le miraban sorprendidos como si estuvieran viendo a un fantasma.
Se soltó del agarre de ambos y limpió la sangre que sintió en su labio con la manga de su antebrazo. Pero no tuvo tiempo de decir nada porque los grandes guerreros de piedra comenzaron a atacarlos sin piedad.
Usando a Chenqing como una espada logró parar los ataques de un par de espadas, en un momento sintió un ataque venir de su espalda, al girarse Lan Zhan ya estaba con Bichen parando la gran espada de la marioneta. Se colocaron espalda contra espalda para pelear y cubrirse al mismo tiempo.
Wen Ruohan: ¡ATRAPEN A YILING LAOZU!
Ante la orden del líder varias de las marionetas corrieron hacia Wei Ying, quien al sentir a Lan Zhan girarse no necesitó mirar para saber lo que tenía que hacer. Saltó girando en el aire justo a tiempo para que el joven Jade sacara su Guqin y hiciera un ataque de cuerdas asesinas que derribó a estas marionetas.
Al volver a caer estaba justamente detrás de Lan Zhan y cubrió su espalda. Miró alrededor y se dio cuenta de que eran superados en número al menos diez a uno si no es que más. Tenía que acabar con esto de una vez antes de que perdieran la lucha.
Wang Lingjiao: ¿Todavía siguen pensando pelear?… será mejor que se rindan si quieren salir de aquí con vida.
Desde la cima de las imponentes gradas continuaban observando la lucha. No se habían movido desde que salieron de la gran residencia y parecían demasiado confiados.
Wei Ying: No soportaremos mucho tiempo - Mira a Lan Zhan y sonríe - ¿Alguna sugerencia?
El joven Jade parecía tener mucho que decir, después de todo tenían casi un año sin verse y tendría muchas preguntas seguramente. Pero ese no era ni el momento ni el lugar, finalmente suspiró y contestó.
Lan Zhan: Pelear… hasta que todos caigan.
Wei Ying: Sabía que ibas a responder eso - Recoge la espada de un soldado del suelo y se pone en guardia.
Lan Zhan: ¿Dónde está Suibian?
Wei Ying: Ni idea - Se encogió de hombros como si no le importara - No la necesito de todas maneras.
Esa respuesta pareció sorprender a Lan Zhan, su expresión hizo reír levemente a Wei Ying. Era una expresión realmente adorable en alguien tan usualmente serio y estoico como él.
Wei Ying: Lan Wanji… no tenemos tiempo para interrogatorios ahora - Una marioneta le ataca y la despacha rápidamente - No te distraigas…
Lan Zhan gruñó y con mirada furiosa comenzó a atacar a las marionetas que se acercaban por su lado. La cantidad era interminable, ni sus lobos parecían dar a basto con la cantidad de ellas, dejó ir la espada y con Chenqing les ordenó proteger a los cultivadores que quedaban vivos, mientras que Hei Lang se acercó para protegerlos a ellos.
Hei Lang: “Gunsu… mientras la hechicera tenga el Sello no van a dejar de aparecer… está gastando toda la sangre que le queda para llamarlas constantemente.”
Wei Ying: Entonces acabemos con la fuente de una vez.
Jiang Cheng: ¿Con quién hablas? - Se había acercado a su hermano apenas vio al enorme lobo acercarse - ¿Y por qué no le tienes miedo?
Wei Ying: Sabes… me sigo preguntando exactamente lo mismo - Baja la mirada y acaricia la cabeza del lobo - Jiang Cheng… reúne a todos los cultivadores - Mira a Hei Lang - Hagan un círculo de protección…
Hei Lang: “Como ordene Gunsu.”
Jiang Cheng se sorprendió de escuchar al lobo hablar, definitivamente esa criatura no era algo normal, comenzando porque no era del todo sólida y su cuerpo parecía estar hecho de humo.
Lan Zhan: Wei Ying…
Wei Ying: No salga del círculo Lan Wanji.
Quería preguntarle algo más eso podía verlo, así que antes de que pronunciara una palabra más saltó y se colocó encima de alguno de los postes que sostenían los estandartes del Clan Wen. Miró a los lobos guiados por Hei Lang rodear a los cultivadores sobrevivientes y con su Chenqing comenzó a entonar una melodía que les dio la energía para crear un campo de fuerza que le impedía a las marionetas acercarse.
Wang Lingjiao: No vas a poder protegerlos para siempre Wei Wuxian.
Wei Ying: No pretendo hacerlo - Hei Lang se acerca y permanece flotando a su lado - Sólo hasta que recupere lo que me pertenece.
Comenzó a entonar a Chenqing, la melodía era más intensa que las anteriores y la energía resentida comenzó a manar del cuerpo de Wei Ying, cuando acumuló suficiente de esta energía comenzó a dispararla como lanzas en todas direcciones y estas poseyeron a varias marionetas que comenzaron a atacar a otras.
Lan Xichen: ¿Las está controlando?
Nie Mingjue: Pensé que sólo el Sello podía hacer eso.
Desde el campo de protección los líderes no podían más que observar la pelea entre las marionetas, el poder de ambos era aterradoramente fuerte.
Wang Lingjiao: No te tengo miedo… la energía resentida de los Túmulos Funerarios es poderosa pero no los suficiente para derrotarme.
Toma la botella que conservaba la sangre de Wei Ying y la derramó toda sobre el Sello el cual comenzó a gritar con un chillido espantoso. Pudo sentirlo en su corazón, como si una mano lo estrujara dolorosamente y casi le hace perder la conciencia, su cuerpo todavía estaba débil por la pérdida de su núcleo y el nacimiento de Xie Yun, así que un ataque así fue demasiado fuerte.
Lan Zhan: ¡Wei Ying! - Salió de la protección al verlo caer, pero antes de que llegara el Lobo a su lado lo protegió y le hizo bajar al suelo lentamente.
Cuando llegó a su lado estaba sentado y con una mano en la cabeza. Se arrodilló a su lado para tomar su mano y curarle con su energía, pero Wei Ying se lo impidió y se puso de pie sólo.
Wei Ying: Eso dolió - Mira a Lan Zhan y le sonríe - Estoy bien… pero te dije que no salieras del círculo de protección.
Lan Zhan le miró sin decir nada, se veía preocupado y eso le tocó en el corazón. A pesar de no haber escuchado nada de él en tanto tiempo sus sentimientos por el joven Jade no habían disminuido, al contrario, ahora compartían un lazo más fuerte que era su hijo aunque todavía no supiera de su existencia.
Wen Chao: ¡Wei Wuxian! - Les miró con ira mal contenida - ¿Hasta cuándo vas a estar jugando?
Wei Ying: Tenemos mucho de qué hablar Lan Wanji… pero tendremos que dejarlo para otro momento - Se gira y encara a los Wen - Hei Lang - Este se acerca esperando la orden de su amo - Cuida de Lan Gunsu…
Hei Lang: “Como ordene” - Se coloca al lado del joven Jade - “Recuerde lo que ha aprendido Gunsu… tenga cuidado.”
Wei Ying: No te preocupes amigo mío.
Lan Zhan: Wei Ying - No entendía porqué le llamaba de forma tan formal, pero no se sentía natural y más cuando él no hacía lo mismo.
Wei Ying: Esto se termina hoy…
Con Chenqing en sus labios y entonando una nueva melodía comenzó a avanzar lentamente hacia el frente, las sombras de energía resentida lo rodearon como un campo de fuerza y cuando alguna marioneta trataba de atacarle era derribada por el poder. Lan Zhan atacaba a las marionetas que intentaban matarle, Hei Lang a su lado cubría su espalda, atacando con sus afilados dientes y garras.
La hechicera comenzó a lanzar rayos con su Báculo para tratar de detenerlo, pero estos eran desviados por el poder de Chenqing. Y con forme este se acercaba parecía que el Sello dejaba de responder, sentía la cercanía de su amo y comenzaba a revelarse a sus ordenes.
Wang Lingjiao: No puede ser… porqué no puedo atacarle.
Wen Zhuliu: Su poder es aterrador… parece que has subestimado a Yiling Laozu.
Wen Ruohan: Mátenlo… ¡AHORA!
A la orden del líder el general y su hijo se abalanzaron para atacarle pero la energía que rodeaba a Wei Ying la impedía a ambos acercarse. Se detuvo y cuando terminó la melodía levantó en alto su arma y de esta comenzó a salir más energía resentida la cual comenzó a llamar a otras criaturas, eran como doncellas vestidas de rojo con garras y ojos rojos.
Eran alrededor de media docena y de inmediato se lanzaron a atacar al general y a Wen Chao alejándolos de él. Con un movimiento ágil deshizo la protección y se lanzó sobre la hechicera.
En ese momento los demás líderes salieron de la protección, dejando a los heridos y otros cultivadores dentro para que no salieran heridos. Nie Miengjue, Jin Zixuan y Lan Xichen se lanzaron sobre Wen Ruohan que había quedado sólo y expuesto.
Lan Zhan corrió hacia Wei Ying junto con Hei Lang, pero fue interceptado por más marionetas así que tuvo que seguir peleando. El lobo a su lado seguía peleando y protegiéndolo.
Lan Zhan: Vuelve con Wei Ying.
Hei Lang: “Me ordenó protegerlo Lan Gunsu… no obedezco ordenes de otros.”
Lan Zhan: Eres igual que él…
Hei Lang: “Tomaré eso como un cumplido.”
Sin poder más simplemente miró hacia arriba para ver lo que estaba ocurriendo a sólo unos metros, no podía distraerse ya que aún quedaban marionetas para atacarle, pero su preocupación por Wei Ying le impedían apartar la mirada.
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Desde el campamento de la Resistencia, Jiang Yanli rezaba frente a un pequeño altar que había hecho ese mismo día. Estaba de rodillas con el Cascabel de su Clan entre las manos.
Jiang Yanli: Por todos los dioses… que la Resistencia salga victoriosa - Abre los ojos y lágrimas bajan por sus mejillas - Que todos regresen bien…
Por último pensó en su hermano menor, si bien se habían enterado de que Wen Ruohan no lo tenía prisionero no tenían idea de dónde estaba. Sólo pedía que si estaba bien llegase a ayudar a en la lucha, sabía que su hermano era fuerte y que si estaba en el campo de batalla no permitiría que Jiang Cheng saliera lastimado.
Jiang Yanli: A-Xian… dónde quiera que estés… ayúdalos.
Cerró sus ojos y siguió rezando, hasta que no tuviera noticias de ellos no pararía de hacerlo, hasta que escuchara a su hermano y prometido entrar a la carpa no se detendría.
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Sus acciones fueron rápidas pero sintió que todo ocurrió en cámara lenta. De un salto llegó al frente de Wang Lingjiao, la golpeó en el pecho con Chenqing para derribarla y con su otra mano sujetó al Sello, usando los propios dientes de la Cobra para hacerse una herida y que su sangre fresca lo bañara. Tirando hacia atrás con todas su fuerzas hasta que escuchó los dientes de la Cobra romperse y finalmente liberarlo.
El sello del Tigre Estigio produjo un rugido ensordecedor y un destello que le dejó cegado por unos momentos, cuando al fin pudo abrir los ojos estaba en medio de un campo lleno de bambús, tan altos que apenas los rayos del sol atravesaban e iluminaban hasta el suelo. Estaba en medio de un claro y en el centro, sobre una gran roca, un tigre le miraba fijamente.
Wei Ying: ¿Quién eres?
- "Esa debería ser mi pregunta" - Se pone de pie y se acerca lentamente - "He sido controlada por tu sangre así que debes ser descendiente de la persona que me creó… ¿Cuál es tu nombre?"
Wei Ying: Sabes mi nombre… así como Hei Lang lo sabía.
- "Eres un listillo Wei Wuxian" - Se sienta y le mira atentamente - "Me llamo Ming Hu."
Wei Ying: Es un placer conocerte al fin.
Ming Hu: "Ya veremos si es un placer o no… porque hasta que demuestres que puedes ser mi amo mi presencia será de todo menos placentera."
Wei Ying: Hei Lang me lo advirtió - Se coloca en posición de lucha - Comencemos… que todavía tengo que derrotar a un tirano.
La tigresa se rió y sin más aviso se abalanzó sobre Wei Ying.
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Lan Xichen, Nie Mingjue y Jin Zixuan peleaban los tres contra Wen Ruohan el cual poseía una fuerza y habilidad sorprendentes, tres contra uno pero no podían vencerlo. Las apariciones de rojo peleaban contra el general y Wen Chao, la hechicera estaba siento atacada por Hei Lang ya que no quedaba ninguna marioneta en pie, las pocas que habían quedado eran las manipuladas por Wei Ying y ahora estaban inmóviles.
Lan Zhan estaba de pie simplemente observando la esfera de energía resentida elevada en el cielo. Había visto a Wei Ying lanzarse sobre la hechicera y tomar el Sello del Tigre Estigio, luego ser expulsado y envuelto en esa esfera.
Ahora el campo de batalla estaba demasiado silencioso, eran pocas las que estaban peleando ahora. El brillo de un talismán le hizo bajar la mirada y vio en las manos de Wen Zuliu uno teletransportación. Corrió pero no llegó a tiempo, el general tomó el hombro de Wen Chao y ambos desaparecieron al instante. Las criaturas que los atacaban se desvanecieron al no ver más su blanco.
Lan Xichen: ¡Wanji!
Corrió al llamado de su hermano y comenzó a luchar contra Wen Ruohan también, no podía ser tan fuerte pero lo era, algo inhumano había tras este hombre porque su fuerza no era normal. El grito de una mujer le hizo desviar la mirada y pudo observar como Hei Lang la atacaba por el cuello de forma tan salvaje que terminó decapitándola, el báculo de cobra se lanzó a atacarlo pero corrió con la misma suerte. Era un espectáculo horrible pero también era una preocupación menos.
Wen Ruohan: Hechicera inútil - Se rió y sacó una botella - Pero al menos hizo algo antes de morir.
Sin dudarlo la destapó y bebió todo el contenido de golpe, casi al instante comenzó a sufrir una transformación, su piel se volvió como la de las marionetas de roca y su musculatura se incrementó al igual que su altura. Ahora era una criatura con forma humanoide, pero que había dejado de ser humana.
Jiang Cheng: ¿Qué rayos se hizo?
Nie Mingjue: Ha renunciado a su humanidad para ganar poder.
Jin Zixuan: Lo que faltaba… ahora será imposible vencerlo.
Lan Zhan: Wen Chao y el general escaparon - Llegó junto a su hermano - No pude detenerlos.
Lan Xichen: Ya nos encargaremos de ellos después… un problema a la vez.
Los cuatro comenzaron a pelear, Hei Lang les miró unos momentos y luego se acercó a Lan Zhan, cuidándolo y evitando que Wen Ruohan lo lastimara. Le dijo en varias ocaciones que ayudara a Wei Ying, pero el terco lobo se negaba a escucharle porque la orden de su amo era protegerlo.
La fuerza de Wen Ruohan era tan monstruosa como su apariencia, si antes les costaba pelear contra él ahora les estaba dando una paliza. El cansancio de días de lucha comenzaba a pasarles factura y comenzaban a recibir heridas, sólo Hei Lang estaba intacto puesto que la espada lo atravesaba sin herirle.
Jiang Cheng: Wei Wuxian - Miró hacia la esfera de energía en el cielo - Lo que sea que estés haciendo date prisa…
Como si escuchara a su hermano la esfera comenzó a agrietarse y terminó explotando con destellos de energía en todas direcciones. Las marionetas que todavía estaban en pie cayeron al piso y se convirtieron en polvo. La pelea se detuvo y todos miraron hacia el cielo.
Flotando en el aire se encontraba Wei Wuxian y a su lado estaba un tigre negro con el Sello del Tigre Estigio en su cabeza. Apuntando con Chenqing hacia Wen Ruohan, tanto el tigre como el lobo se abalanzaron al mismo tiempo y lo derribaron, sujetándole de los brazos mientras su amo bajaba y se paraba a los pies del líder Wen.
Wei Ying: Su hijo ha escapado… pero para usted todo se termina hoy…
Wen Ruohan: Yiling Laozu - Su voz sonaba tan inhumana como la de sus criaturas - Acabarás igual que yo… no creas que tienes aliados en este mundo… seres como nosotros estamos destinados a dominar o desaparecer.
Wei Ying no dice nada, su cara no tiene expresión alguna, simplemente lleva a Chenqing a sus labios y comienza a tocar, el Sello en la frente de Ming Hu comenzó a brillar y perdiendo su forma se transformó en energía, Hei Lang hizo lo mismo y ambas energías rodearon el cuerpo y lo elevaron en el aire.
Como un torbellino comenzaron a retorcer el cuerpo de Wen Ruohan, los gritos del líder eran horribles. La carne comenzó a rasgarse y los miembros comenzaron a separarse del tronco, no tardó en ser destruido por completo, cayendo al suelo como una masa de carne sanguinolenta sin forma alguna.
Wei Ying dejó de tocar, bajó las manos y se quedó mirando a cuerpo. Luego sin previo aviso cerró los ojos y comenzó a caer al suelo, siendo atrapado apenas a tiempo por Lan Wanji.
Lan Zhan: ¡Wei Ying! - Tomó su muñeca para sentir su pulso.
Hei Lang y Ming Hu volvieron a sus formas animales y se acercaron a su amo, al igual que los líderes de los otros Clanes. Jiang Cheng se agachó y le tocó la frente.
Jiang Cheng: Tiene un poco de fiebre - Apartó la mano y miró a las criaturas a su lado.
Hei Lang: “Estará bien” - Mira a la tigresa - “Pudiste ser un poco más suave con el amo.”
Ming Hu: “Tenía que probar su fuerza” - Da unos pasos para acercarse - “Si no era lo suficientemente fuerte mi poder iba a matarlo cuando intentara usarlo.”
Sin decir más Hei Lang volvió dentro de Chenqing, mientras que Ming Hu se quedó ahí con la mirada fija en Wei Ying.
Ming Hu: "Mi amo necesita descansar" - Mira a Lan Zhan - "Estaré atenta en todo momento" - Con esa advertencia volvió a convertirse en un talismán y creando una cadena se fijó en el cuello de su amo.
La guerra había terminado y el Clan Wen había sido exterminado. Sólo quedaba Wen Chao con vida, pero era cuestión de tiempo para eliminar todo rasgo de su tiranía.
Continuará………
Nota: Gracias a todos por sus comentarios y me siento muy contenta de que les esté gustando mi historia. Les dejo algo de vocabulario n_n
Hei Lang: Lobo Oscuro.
Ming Hu: Tigre Estigio.