Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

INDOMABLE (WangXian) por Shizumi Eibrin

[Reviews - 0]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Región de Lanling.


“Yiling Laozu… no creas que tienes aliados en este mundo… seres como nosotros estamos destinados a dominar o desaparecer.”


No podía sacarse las últimas palabras de Wen Ruohan de la cabeza mientras sobrevolaba el territorio de Lanling sobre el lomo de Ming Hu, Hei Lang iba al frente guiándolos a la prisión donde estaba su hijo.


Al salir pensó que sería atacado, el ambiente estaba muy caldeado y era evidente que muchos de esos cultivadores querían su cabeza, o su poder para ser más específicos, no pasó por alto para él que poseía algo que muchos envidiarían. Les había dado las riquezas y las tierras del clan Wen, esperaba que eso fuera suficiente. Ahora sólo le preocupaba rescatar y cuidar de las personas que salvaron su vida.


Cuando finalmente se acercaron a la prisión comenzó a escuchar ruidos de lucha, o más bien los gritos de angustia de una masacre. Lo primero que tuvo a la vista fueron varios cuerpos tirados de soldados y campesinos del Clan Wen, sus ejecutores eran miembros del Clan Jin. 


Entre las personas que huían logró ver finalmente a Wen Qing quién llevaba a un bebé en los brazos, fue rodeada por soldados que le apuntaban con arcos mientras que ella trataba de proteger el pequeño bulto con su cuerpo.


Wei Ying: ¡Hei Lang!


Hei Lang no necesitó más comandos, se abalanzó sobre la sanadora y la rodeó convirtiéndose en un torbellino, elevándola y dejándola sobre el lomo de Ming Hu. Cuando Wen Qing abrió los ojos suspiró aliviada al ver a Wei Ying y él sonrió al ver los grandes ojos grises de Xie Yun mirarle.


Wei Ying: Lamento la tardanza…


Wen Qing: Eso no importa - Mira hacia la tierra - Nos están matando… has algo por favor…


Wei Ying: Ming Hu… baja.


Ming Hu: “Si Gongxi.”


La tigresa aterrizó justo entre las personas que escapaban y los soldados que les estaban dando caza. Ming Hu y Hei Lang se colocaron frente a su amo mientras que Wen Qing se quedó atrás de Wei Ying.


- Wei Gongxi… ¿Qué hace?


Wei Ying: Eso mismo iba a preguntarles… ¿Por qué atacan a personas indefensas? 


- ¡Ellos no son personas!… ¡son perros Wen que trataban de escapar de la prisión! 


Wei Ying: Wen Qing - Gira la cabeza levemente para verla - ¿Qué ocurrió?


Wen Qing: Nos hacían trabajar sin descanso… muchos han muerto de agotamiento y sólo les pedimos un día para enterrarlos y hacer una ceremonia por sus almas - Sus ojos se llenan de lágrimas - Sólo se rieron y comenzaron a dispararnos sin importarles nada.


- ¡Se negaban a obedecer ordenes! ¡Tenemos ordenes de matar a los insurrectos!


Wei Ying: ¡Suficiente!


La ira invadió su mirada, tomó a Chenqing y comenzó a tocarla, su cuerpo fue rodeado de energía resentida y comenzaron a aparecer muchos lobos que de inmediato se lanzaron a acatar a los soldados los cuales comenzaron a huir aterrados.


Wei Ying: Hei Lang… no los maten… cuando estén lo suficientemente lejos regresa.


Hei Lang: “Como ordene Gongxi.” 


El lobo se marchó siguiendo a los demás lobos menores. El pequeño Xie Yun comenzó a llorar así que lo tomó de los brazos de la sanadora y casi de inmediato se tranquilizó, eso le hizo sonreír cariñosamente. 


Wen Qing: Te ha extrañado mucho… 


Wei Ying: También lo he extrañado - Acaricia sus mejillas y lo arrulla hasta que Hei Lang regresa - Es hora de movernos… no tenemos mucho tiempo. 


Wen Qing asiente y corren hacia las celdas donde el resto de las personas de la villa habían corrido, huyendo de los soldados Jin. Al verlo entrar suspiran de alivio y Wei Ying logra ver a muchas personas conocidas, entre ellas A-Yuan en los brazos de Wen Ning y a la abuela.  


Wen Ning: ¡Gongxi! 


Wei Ying: No tenemos mucho tiempo - Cuenta a las personas - ¿Son todos? 


Wen Qing: Los que hemos sobrevivido… 


Sintió como una puñalada el saber que algunas de las personas que le habían brindado su amistad y cuidados durante tantos meses ya no estaban con ellos. Pero lamentarse no valdría de nada, tenía que salvar a los que seguían con vida.  


Wei Ying: Entonces vamos… tenemos que poner toda la distancia que podamos antes de que los soldados regresen.


Al salir se dirigió a los caballos que pertenecían a los soldados que custodiaban la prisión, rápidamente montaron y esperaron a Wei Ying que amarró la manta de su hijo alrededor de su pecho para poder tomar las riendas de un caballo negro que esperaba por él. Estaba a punto de montar cuando escuchó llegar a alguien, al mirar hacia arriba vio llegar a Lan Zhan sobre su espada.


Los hermanos Wen lo miraron algo asustados desde el caballo en el que estaban, Wei Ying soltó la montura y se acercó, las bestias espirituales a su lado como siempre. Al estar frente a frente se miraron por lo que pareció una eternidad, hasta que el pequeño Xie Yun comenzó a llorar nuevamente llamando la atención de ambos. 


Lan Zhan no dijo nada, simplemente miró a Wei Ying arrullar al bebé hasta que dejó de llorar. La forma en que lo miraba y arrullaba eran tan dulces que por un momento le pareció ver al Wei Ying que conoció cuando llegó a estudiar a Gusu, por un momento quedó hipnotizado por la escena frente a él. 


Wei Ying: Shhhsh… tranquilo… no tengas miedo.


El momento de dulzura acabó cuando Wei Ying dejó de mirar al pequeño para mirar a Lan Zhan, la sonrisa y mirada dulce se habían ido, sustituyéndolas por una expresión seria y determinada. 


Wei Ying: No llevo conmigo soldados Lan Zhan… estas personas salvaron mi vida y es mi deber protegerlos. 


Lan Zhan: ¿A dónde irás?


Wei Ying: Donde sea que nos dejen vivir en paz - Mira al bebé y sonríe, luego vuelve su mirada al hombre frente a él - Tengo que irme ya… a menos que quieras detenerme.


Lan Zhan: ¿Está seguro de hacer esto?… no podrás volver a tu hogar.


Wei Ying: Desde el momento que supe mi herencia sabía que no podría volver a Muelle de Loto…  


Lan Zhan parece no querer moverse, Hei Lang y Ming Hu se mantenían a su lado sin decir una palabra, mientras los demás esperaban expectantes y algo ansiosos lo que sucedería. Finalmente Wei Ying sonríe levemente y baja la mirada hacia el lobo.


Wei Ying: Hei Lang…


Hei Lang: “Si Gongxi.” 


Wei Ying: Lidera el camino… Ming Hu cuida desde atrás.


Ming Hu: “Como ordenes.”


Wei Ying: Tengo que irme ya - Sus ojos brillan con lágrimas contenidas y por un momento pareciera querer decir algo más, pero no salen más palabras de su boca. Toma las riendas del caballo negro y sube sobre él.


& & &


Lan Zhan: Wei Ying… 


Lo vio subir al caballo y se miraron unos instantes antes de que a la orden de Wei Ying comenzaran a avanzar pasándolo rápidamente. No se movió ni hizo nada para detenerlos, tampoco hizo nada para seguirlos a donde quiera que fueran.


No había motivo para quedarse así que se marchó antes de que los soldados Jin regresaran. Al entrar en su habitación su hermano le estaba esperando mientras servía el té. Lan Xichen no dijo nada, simplemente esperó a que se sentara frente a él y tomara la copa que le ofrecía.


Lan Xichen: ¿Lograste hablar con él?


Lan Zhan asiente, su mirada fija en la copa de té.


Lan Xichen: ¿Es verdad lo que decía?


Lan Zhan: Ancianos, mujeres, y un par de niños pequeños… ningún soldado o cultivador.


El mayor de los Jade se quedó meditando unos momentos la respuesta. Tomó su copa de té y bebió, luego volvió a servirse.


Lan Xichen: Entiendo los motivos de Wei Wuxian… pero los demás clanes guardan mucho resentimiento contra el Clan Wen y ahora lo verán como un enemigo.


Lan Zhan se mantuvo en silencio, pensando en todas las posibles consecuencias de lo que acababa de suceder. El camino que Wei Ying había elegido estaba lleno de espinas y no sería sencillo llegar a un buen final.


Lan Xichen: Hablé con Jiang Cheng cuando terminó la reunión… no dijo mucho pero pude ver que está preocupado. 


Lan Zhan: Xichen… 


Lan Xichen: Wanji… sé que te preocupas mucho por Wei Gongxi… pero lo mejor será que te mantengas al margen mientras las cosas se calman un poco. 


Lan Zhan: ¿Mantenerme al margen?


Lan Xichen: Logré convencer a Nie Mingjue de no actuar todavía - Deja la copa de té en la mesa - A-Yao por su parte quería organizar una cacería… pero Zixuan lo evitó - Sonrió al recordar la intervención del joven - Tal parece que el futuro líder del Clan Jin está del lado de Wei Gonxi… en cuanto tome las riendas del clan podremos respirar tranquilos sobre este asunto. 


Eso pasaría después de la boda con Jiang Yanli, lo que sería en alrededor de un año. Era mucho tiempo y muchas cosas podrían salir mal, así que tendría que estar alerta para evitar que Wei Ying saliera herido o algo peor.


Ya le había fallado una vez, no podía hacerlo de nuevo. 


& & & 


Región de Qishan. Túmulos Funerarios. 


Apretando fuertemente las riendas ordenó al caballo acelerar, estaban por llegar en su destino pero no podía dejar de pensar en su encuentro con Lan Zhan. Cuando estuvo frente a él con Xie Yun en sus brazos estuvo a punto de hablar y decirle que ese pequeño era su hijo, pero eso sería algo largo y complicado de explicar, demasiado para el poco tiempo que tenían en ese momento.


Wen Ning: ¡Gongxi! - Se acercó en su caballo por lo que bajaron la velocidad a un simple trote - Este camino nos lleva directo a… 


Wei Ying: Lo sé… es el único lugar donde nadie se atreverá a buscarnos.


Wen Qing: ¿Pero se puede vivir ahí? - Dijo desde atrás de su hermano.


Hei Lang: “Gongxi vivió ahí un par de meses… no veo porqué ustedes no puedan.” 


Wei Ying: No te preocupes A-Qing - Le mira con una sonrisa y luego vuelve su vista al frente - Nunca llevaría a mi hijo a un lugar peligroso. 


Esas palabras parecieron calmar a la sanadora y poco más de una hora después, cuando comenzaba a caer la tarde, llegaron a la entrada de los Túmulos Funerarios. Ming Hu se adelantó hasta estar junto a su amo al igual que Hei Lang. 


Wei Ying bajó de su caballo y con cuidado desató a Xie Yun que estaba profundamente dormido, luego se lo dio a Wen Qing. Caminó hasta el frente y comando a Chenqing comenzó a tocar una melodía, los ojos de ambas criaturas comenzaron a brillar del mismo tono de rojo que el de su amo.


Las ramas de los árboles cercanos comenzaron a moverse y frente a ellos se formó una especie de pared hecha de troncos con una única entrada. Esta pared era muy alta y tenía ramas que se veían más como espinas haciéndolo imposible de escalar desde afuera, pero la entrada no tenía puerta.


Wei Ying: Sigan a Hei Lang hasta la cueva… no se alejen del camino.


El lobo comenzó a avanzar y los miembros sobrevivientes del clan Wen comenzaron a seguirle, Wen Ning ayudó a su hermana a montar nuevamente y fueron los últimos en entrar. Ming Hu entró y se quedó viendo a su amo el cual tras traspasar la entrada se volteó y haciéndose una pequeña herida en uno de sus dedos dejó la sangre fluir y con ella comenzó a hacer un trazado frente a él, cuando lo lanzó la entrada abierta quedó cerrada con un sello rojo sangre. 


& & &


Región de Qishan. Ciudad de Yiling.


Los días se convirtieron en semanas y estas en meses, los grandes clanes repartieron  de forma equitativa las riquezas y el territorio del Clan Wen. Al principio muchos clamaban por aquellos que había huido con Yiling Laozu pero al ser compensados parte de esa furia se disipó.


Aún así los grandes clanes mantuvieron la mirada atenta a cualquier anomalía que insinuara una posible revuelta, pero nada sucedió. Lo único que comenzó a escucharse era sobre un pequeño clan de sanadores que vendían sus productos y curaban a los enfermos en el mercado del a ciudad de Yiling, se decía que estas personas vivían en los Túmulos Funerarios pero muchos tomaron esos rumores como exageraciones de la gente.


Jiang Cheng no creyó esos rumores al inicio, pero ciertas pistas le hicieron sospechar que su hermano menor tenía algo que ver. Desde que lo vio salir del salón en la Torre de la Carpa Dorada no lo había vuelto a ver, su hermana había recibido un mensaje de él diciéndole que estaba bien pero nada más habían sabido en varios meses.


Tomando la decisión terminó viajando a la ciudad de Yiling los días que la gente decía que los sanadores estaban vendiendo sus medicinas en el mercado. Sólo viéndolos personalmente podría salir de dudas. Al llegar al mercado preguntó dónde se encontraban los sanadores y no tardó en verlos al final de la calle.


La primera cara familiar que vio fue la de Wen Qing, a su lado estaba su hermano y ambos estaban atendiendo a unas personas. Al acercarse no notaron su presencia al principio, solamente cuando los clientes que atendían se fueron lo notaron.


Wen Qing: Jiang Gongxi - Se pusieron de pie haciendo una reverencia.


Jiang Cheng: Wen Qing - Responde el saludo y al bajar los brazos mira alrededor - ¿Mi hermano está aquí?


Wen Ning: Hoy no vino con nosotros.


Jiang Cheng: ¿Es verdad que viven en los Túmulos Funerarios?


Wen Ning: Si… gracias a las habilidades de Wei Gongxi. 


Jiang Cheng se veía preocupado y la verdad no podrían culparlo, esas tierras habían sido inhabitables desde hace cientos de años, se decía que ningún ser vivo podría estar en ese lugar, pero al parecer su hermano había encontrado la manera.


Wen Qing: Jiang Gongxi… estamos por terminar aquí… si quiere puede acompañarnos  y hablar con Wei Wuxian.


Jiang Cheng: Si…


Los hermanos se miraron y comenzaron a guardar a todas las medicinas no vendidas, ya quedaba poco de todas maneras así que en poco tiempo pudieron ponerse en marcha hacia su hogar. Como los rumores le indicaron al caer la tarde se encontraban frente a una pared de troncos y una entrada protegida por un sello.


Wen Qing sacó algo de su bolsa Qiankun, una especie de cascabel de metal rojo que al hacerlo sonar hizo desaparecer el sello para que pudiesen pasar. Caminaron por un sendero tenebroso por un un buen trecho hasta que este se abrió a una zona despejada que no era para nada como se lo imaginaba. 


La tierra alrededor de la villa era verde y estaba purificada, parecía que el lugar estaba protegido de la energía resentida del resto de los Túmulos que lucían áridos y muertos como siempre. Habían construido tres casas de buen tamaño a un lado y del otro había un cultivos y un pozo. Era muy pequeña pero las personas que vivían ahí parecían felices, la mayoría eran mayores, campesinos y un par de mujeres jóvenes. 


Wen Qing: Wei Wuxian debe estar dentro de la cueva - Señaló al otro lado del claro donde se veía la entrada a una cueva - Seguro se alegrará de verle. 


Jiang Cheng: ¿Realmente lo crees?… no hice nada para evitar que las cosas terminaran como terminaron. 


Wen Qing: No había mucho que pudieras hacer - Le mira con una sonrisa cálida que siente no merecida - Con un líder como Wen Rouhan no había otro final posible… estábamos preparados para lo peor pero gracias a Wei Wuxian sobrevivimos. 


Jiang Cheng: Mi hermano me dijo que ustedes lo cuidaron cuando escapó de Wen Chao.  


Wen Qing: Habla con él - Le coloca la mano en el antebrazo - Realmente ha extrañado a sus hermanos. 


Jiang Cheng: Gracias Wen Qing.


Atravesando el claro llegó a la entrada de la cueva, las personas alrededor continuaban con sus quehaceres como si nada, se veían tranquilas y en paz. Al entrar a la cueva se sorprendió al ver que era bastante grande e iluminada, desde el techo parecía que había una grieta que permitía que la luz natural entrara, parecía que su hermano se había esmerado en hacer de ese lugar un hogar.


Muebles hechos a mano llenaban la entrada, parecía más una biblioteca porque a los lados habían estantes llenos de libros y pergaminos, en el centro un par de escritorios bajos y una mesa para comer. Tras el escritorio había una división de madera que separaba ese ambiente del otro, en el centro había una puerta que en ese momento estaba abierta. Al acercarse le pareció escuchar a su hermano conversando con alguien. 


Wei Ying: Eres muy inquieto Xie Yun… miedo me da cuando aprendas a caminar.


Cuando Jiang Cheng pasó la puerta vio dentro una habitación amplia con una cama, un guardarropa a un lado y una tina de baño del otro con un biombo. Frente a él, al fondo de la habitación había una gran cuna y un corral donde un bebé jugaba con un peluche hecho a mano. Wei Ying estaba sobre una mesa junto al corral terminando de mudar a otro bebé, se quedó ahí en silencio viéndolo cuidar de esa pequeña vida con un amor que le pareció enternecedor, entonces una idea se le vino a la mente.


Jiang Cheng: ¿Es tu hijo? 


Su hermano se giró asustado y luego se llevó una mano al pecho. 


Wei Ying: A-Cheng… casi me matas del susto - Se voltea para tomar al bebé y lo lleva a la cuna donde lo recuesta con cuidado - Es hora de la siesta… 


Wen Ning llegó en ese momento con un libro en la mano, tomó al otro bebé y lo acostó en la misma cuna. Asintiendo con una sonrisa Wei Ying se acercó a su hermano y le hizo una seña para que salieran a la zona de la biblioteca.


Jiang Cheng: No me has respondido. 


Wei Ying: Ambos lo son - La madre de A-Yuan había muerto en la prisión y había decidido que que el pequeño también sería su hijo, ella había alimentado a Xie Yun y ahora él criaría a su hijo con todo el amor que pudiera darle - Decidí hacerme cargo de ambos. 


Jiang Cheng: ¿Y sus padres? 


Wei Ying: Murieron… el padre durante la guerra y su madre en la prisión donde los retenían… de donde los saqué cuando me fui de Lanling.


Jiang Cheng asintió y se mantuvo en silencio lo que era normal, era una gran cosa para asimilar. 


& & & 


Fue una verdadera sorpresa cuando escuchó la voz de su hermano, mientras salían de la habitación después de dejar a sus hijos con Wen Ning, meditaba si decirle la verdad a su hermano sobre Xie Yun. Confiaba en Jiang Cheng, pero no en su madre, sabía que su hermana no le diría nadie y se odiaba por no tener esa misma confianza con su hermano mayor. 


Jiang Cheng: Así que has adoptado a esos bebés.


Wei Ying: Como Shushu se hizo cargo de mí hace tiempo… ahora es mi turno de devolver esa amabilidad con esos niños. 


Jiang Cheng: ¿Cómo se llaman?


Wei Ying: Yuan y Xie Yun. 


Jiang Cheng: Así que soy tío ahora… siempre pensé que jiejie sería la primera en darme un sobrino.


Sonrió al escuchar ese comentario y ver la sonrisa de su hermano calentó su corazón. El saber que su hermano los aceptaba a pesar de todo era algo que no se esperaba, no después de todo lo que habían pasado por culpa del Clan Wen. 


Wei Ying: Me sorprendes A-Cheng. 


Jiang Cheng: ¿Por qué dices eso?


Wei Ying: No pensé que serías tan benevolente… después de todo lo que hemos pasado pensé que estarías lleno de odio y resentimiento como los demás clanes.


Jiang Cheng: No te voy a negar que no lo estuve… pero las personas que nos hicieron tanto daño ya han pagado - Frunce el ceño y aprieta las manos - Al menos la mayoría de ellas… 


Wei Ying: ¿Siguen sin tener pistas de Wen Chao y el general? 


Jiang Cheng: Como si se los hubiera tragado la tierra. 


Wei Ying: Lamento no haber acabado con ellos ese día.


Jiang Cheng: No podrá ocultarse para siempre.


Wei Ying: A menos que se vayan tan lejos que nunca volvamos a saber de ellos… lo cual está bien para mí… no es el final que quería pero imaginarlo viviendo en la miseria el resto de su vida como un mendigo hace que mi ira se calme.


Jiang Cheng: Si lo pones así no es tan malo. 


Se miran un momento antes de reírse, como en los viejos tiempos cuando hacían travesuras de adolescentes. 


Jiang Cheng: Y respondiendo a tu duda… si… al principio quería a todos muertos como los demás clanes - Mira a lo lejos a una anciana hablando con Wen Qing - Pero cuando comencé a reconstruir Muelle de Loto pasé mucho tiempo en el Salón Ancestral… me dio tiempo para meditar y recordar lo que Die nos enseñó. 


Wei Ying: Él no querría que vivieras con odio en el corazón - Le rodea los hombros con un brazo y lo acerca en un abrazo - Sé que serás un gran líder como lo fue Shushu. 


Jiang Cheng: Mi hermana me dice lo mismo… aunque madre insiste en que debo ser más duro e inflexible.


Wei Ying: ¿Cómo está ella? - A pesar de todo seguía teniendo respeto por Yu Ziyuan, era una mujer de autoridad eso no podía negarlo. 


Jiang Cheng: Más fría y despiadada que antes… mi padre mantenía algo de humanidad en ella pero desde su muerte su carácter ha empeorado. 


Wei Ying: ¿Estarás bien?


Jiang Cheng: Si… diga lo que diga y por mucho que grite respeta mi autoridad… además jiejie me ha dicho hasta el cansancio que no permita que ella gobierne o me deje influir por su forma de ser… que recuerde como era Die y siga su ejemplo. 


Wei Ying: Bueno ella es la mayor y debemos hacerle caso. 


Jiang Cheng: Me asusta escucharte hablar con sentido - Busca algo entre sus ropas y saca algunos talismanes de mariposa mensajera - Te manda esto para que le escribas… te haré llegar más cuando se te acaben. 


Wei Ying sonrió al recibir los talismanes y los guardó entre sus ropas. Conversaron un rato más hasta que comenzó a atardecer y Wen Qing se ofreció a escoltarlo afuera de los Túmulos. 


Cuando ella desactivó el sello se giró para mirarle, parecía que tenía una pregunta en los labios pero no se atrevía a decirla, estuvieron ahí parados en silencio por un rato hasta que finalmente suspiró y la miró para luego tomar su mano. 


Jiang Cheng: Di lo que tengas en la mente… no temas preguntar.


Wen Qing: Yo… sólo quería agradecerte por venir a ver a Wei Gongxi… se que le atormentaba el no tener noticias de sus hermanos.


Jiang Cheng: Quise venir de inmediato… pero debo admitir que se escondieron muy bien - Suelta la mano de la sanadora - No sé que tan seguido sea prudente que los visite pero volveré… - Duda un momento pero luego se despide con un abrazo - Cuídate A-Qing. 


Afuera de la entrada le esperaba su montura y después de una última mirada a Wen Qing giró su caballo y se alegó a buen trote. Mientras que la sanadora se quedó ahí hasta que lo vio perderse en la distancia, luego activó el sello y regresó a la villa, aún sorprendida por ese abrazo y más por la manera en que su corazón se aceleró al recibirlo. 


& & &


Región de Lanling. Torre de la Carpa Dorada. 


Las estaciones pasaron y el tiempo no se detiene. En lo que se dieron cuenta la boda de Yanli y Zixuan llegó, el evento fue el más grande visto por los clanes ya que ese mismo día Zixuan tomaba su lugar como líder del Clan Jin, su hermano se quedaría como asesor y con el puesto de cultivador jefe. 


Después de la ceremonia se realizó la investidura de Jiang Zixuan como nuevo líder y luego siguió la celebración que duró varios días. Atrás había quedado el dolor y la ira contra el Clan Wen, ahora las personas celebraban un nuevo comienzo y la paz después de la guerra. 


Aún así Wei Ying decidió no asistir al evento, con tristeza se lo escribió a su hermana. No quería arruinar su momento con las reacciones que pudieran tener con su presencia los demás invitados. Yanli se puso algo triste pero lo entendía, aún así hubiera deseado tenerlo ahí con ella en el día más feliz de su vida.


Cuando le tiempo pasó y las cosas se calmaron y la vida volvió a la rutina, Wei Ying visitó a su hermana de sorpresa. Ella estaba en su habitación cómodamente sentada leyendo un libro cuando escuchó un ruido en su ventana, se levantó a abrirla y una nube negra ingresó, tomando forma, una era Hei Lang y la otra su hermano. 


Jiang Yanli: ¡A-Xian! - Se acercó y le dio un fuerte abrazo -  Que sorpresa verte… no te esperaba. 


Wei Ying: También me sorprendiste jiejie - Se aleja y le toma de las manos para verla bien, se veía hermosa y su vientre estaba casi tan grande como el que él tuvo una vez - Tampoco me lo dijiste… ¿De cuánto estás? 


Jiang Yanli: Seis meses.


Wei Ying: Zixuan debe estar como loco…  


Jiang Yanli: Y que lo digas… me trata como si fuera de cristal - Se sienta en un amplio sillón y su hermano le sigue - No me deja hacer nada.


Wei Ying: Tampoco te dejaría… tienes que cuidarte mucho - Toca el vientre de su sobrino y sonríe - ¿Ya tiene nombre? 


Jiang Yanli: Jin Ling… pero todavía no hemos pensado en su nombre de cortesía. 


Wei Ying: Falta mucho para eso. 


Jiang Yanli: Igual quiero tener su nombre elegido… el tiempo pasa muy rápido y en cuanto menos lo pienses ya será el día en que lo reciba. 


Wei Ying: Entiendo… - Se lleva una mano a la barbilla mientras medita en un posible nombre de adulto, hasta que sus ojos brillan - ¡Lo tengo! 


Jiang Yanli: Eso fue rápido - Se acaricia el vientre - Viste hijo… tu Shushu ha elegido un nombre para ti. 


Wei Ying: Es una sugerencia… 


Jin Zixuan: Ya la conoces - Dice rodeando el biombo que tapaba la entrada de la habitación - Cuando se le mete algo en la cabeza no puedes hacerla cambiar de parecer. 


Jiang Yanli: Cariño - Hace un puchero y se cruza de brazos, Zixuan se ríe y se acerca para darle un beso - ¿Desde cuándo estás ahí? 


Wei Ying: Desde antes de que entrara - Mira a su cuñado y sonríe - Me alegra ver que la tengas bien protegida. 


Jin Zixuan: Por supuesto - Acaricia el vientre y se inclina para darle un beso - Ellos son lo más importante en mi vida… ninguna precaución está demás.


Jiang Yanli: Bueno… dinos el nombre. 


Wei Ying: Jin Rulan… 


Jiang Yanli: Es perfecto… ese será. 


Jin Zixuan: Querida… ¿Y si es niña? 


La expresión les hizo saber que no se le había pasado por la mente la posibilidad y eso hizo que se rieran por la situación.


Jiang Yanli: Está bien… algo me dice que será niño. 


Wei Ying sonrió al ver el cariño que su hermana le ponía a su vientre, al igual que Zixuan. Y si su hermana creía que sería niño le creía, él mismo tuvo ese sentimiento aunque ya lo sabía porque se había comunicado con su hijo antes de nacer. Después de un rato más se despidió de la pareja y regresó a su hogar, no sabía cuándo podría volver pero esperaba estar presente en la vida de su sobrino y que creciera con sus hijos. 


& & &


Región de Qishan. Túmulos Funerarios. 


Al regresar a casa no se sorprendió de ver a su hermano Jiang Cheng ahí, tenía a su hijo en sus brazos mientras que Wen Ning terminaba de preparar la cena. Por las noches comían en una gran mesa que ponían en el claro para tener un tiempo todos juntos como una gran familia, y su hermano se había convertido en visitante más o menos frecuente.


Hei Lang: “Parece que el joven Jiang se ha encariñado mucho con el joven Gongxi” - Dijo desde el aire donde miraban todos sin ser percibidos.


Wei Ying: Creo que viene más por otra cosa. 


No pudo evitar reírse al ver lo evidente que eran ambos, las miradas que su hermano le daba a la sanadora y las sonrisas avergonzadas que se daban como si fueran adolescentes en su primer amor, era enternecedor en muchos sentidos. Al final y con un movimiento de Chenqing Hei Lang regresó a la Dizi y se hizo visible para todos.


Wen Ning: ¡Gongxi!


Todos se emocionaron al verle y se acercaron, después de saludar a todos se acercó y miró a su hermano frunciendo el ceño.


Jiang Cheng: ¿Qué?


Wei Ying: No te hagas el inocente… no me dijiste nada de jiejie.


Jiang Cheng: Ella quería darte la sorpresa… pensé que ya te había escrito.


Wei Ying: Pues de alguna manera sabía que la visitaría en algún momento - Toma a su hijo y le da un beso - Llevaré a este niño a dormir… Wen Qing te atenderá hasta que vuelva. 


Le hace una señal a Wen Ning que toma a A-Yuan y ambos entran a la habitación para dormir a los pequeños. Está arropando a su bebé cuando siente algo en el campo de energía de la entrada, alguien está tratando de violarla con energía de cultivación. Toca el collar con su mano y Ming Hu sale.


Wei Ying: Revisa al intruso y regresa.


Ming Hu: “Si Gongxi.” - Sale corriendo.


Wen Ning: ¿Le aviso a jiejie?


Wei Ying: No hace falta… quédate con los niños hasta que regrese - Toma a Chenqing y deja salir al lobo - Quédate a cuidarlos. 


Hei Lang: “Como ordene.” 


Al salir su hermano le mira serio, al parecer entró en alerta al ver a Ming Hu salir hacia la entrada. Basta una mirada para que ambos se dirijan a la entrada de los Túmulos donde ya la tigresa estaba inspeccionando el sello que estaba intacto. 


Jiang Cheng: Quien fuera no logró entrar… 


Wei Ying: No es la primera vez que sucede algo así… al principio sentí a varios cultivadores que venían para salir de la duda si vivía o no aquí… pero con el tiempo no hubo más intentos. 


Jiang Cheng: Hasta ahora. 


Wei Ying: Si… - Mira a la tigresa - Refuerza el sello y la muralla alrededor… cuando termines regresa a la villa. 


Ming Hu: “En seguida Gongxi.” 


La tigresa comienza a hacer lo que le ordena y ellos regresan a la villa. Ya están todos en la mesa y esperando por los dos señores. 


Wei Ying toma siento en uno de los extremos de la mesa y Jiang Cheng en el otro, teniendo justo a lado a Wen Qing. La cena no era nada lujoso pero estaba hecho con amor y sabía muy bien, además el poder compartirla con su nueva familia y con su hermano era algo que la hacía más especial.


Al finalizar la cena conversaron y bebieron tal vez un poco demás. Lo último que recordó esa noche era irse a dormir sin saber si su hermano se había marchado o no. Así que a la mañana siguiente al levantarse tenía una resaca de campeonato, gracias al cielo Wen Ning ya se estaba haciendo cargo de los niños y al verlo levantarse se acercó con algo de beber. 


Wei Ying: Gracias. 


Wen Ning: No sabe bien pero le ayudará con el dolor de cabeza.


Bebió el líquido de color verde, sabía horrible pero casi de inmediato sintió que el malestar le pasaba poco a poco. Después de saludar a sus hijos y darse un baño se vistió y salió, afuera todos estaban en sus quehaceres diarios y se sorprendió al ver que su hermano seguía ahí, estaba sentado bebiendo algo en la entrada de la casa de Wen Qing. 


Wei Ying: ¿Qué pasó anoche? - Se acercó y pudo notar que su hermano estaba pensativo y ten concentrado que no lo vio acercarse - ¿Sufriendo también resaca? 


Jiang Cheng: Si - Levanta el vaso levemente - Pero con esto me siento mucho mejor. 


Wei Ying: ¿Recuerdas algo de anoche? - Se sienta a su lado - Creo que se nos fue la mano anoche. 


Jiang Cheng: Ese vino es el demonio líquido… lo último que recuerdo es que Wen Ning me acostó en una cama y caí dormido como piedra. 


Wei Ying: Así que dormiste en la casa de Wen Qing… ¿Dónde está por cierto? 


Jiang Cheng: Adentro… sigue dormida. 


Esa respuesta le pareció extraña, generalmente la sanadora era de las primeras en ponerse de pie, se levantaba con el sol. Una idea se le vino a la mente, habían pasado la noche en la misma casa y era evidente la atracción que había visto crecer entre ellos en las últimas semanas. 


Wei Ying: ¿Acaso ustedes? 


Jiang Cheng: Lo que hagamos no es de tu incumbencia - Se pone de pie evitando mirar a su hermano menor. 


Wei Ying: Tienes razón - Se pone de pie - Después de todo ambos son adultos… cuando quieras marcharte me avisas para despedirme. 


Notó que su hermano estaba algo sonrojado por lo que se acrecentaron sus sospechas, pero no podía asegurarlo. Escuchó la puerta abrirse y vio a Wen Qing salir así que decidió no hacer mal tercio y regresar con sus hijos.


& & & 


Jiang Cheng escuchó la puerta abrirse y su hermano simplemente se marchó dejándolo a solas con la sanadora. No recordaba mucho de lo sucedido anoche pero si lo suficiente como para recordar lo que había pasado entre ambos cuando todos se habían quedado dormidos. 


Wen Qing: Buenos días - Se para a su lado mientras bebe de su té - Hice el desayuno por si tienes hambre - Mira la bebida que sostenía Jiang Cheng - Veo que mi hermano preparó la medicina para la resaca.


Jiang Cheng: Si… me ha ayudado mucho.


Se quedaron ahí mirado la pequeña villa continuar con sus actividades, al poco rato vieron a Wei Ying salir cargando a Xie Yun mientras que Wen Ning cargaba a Yuan. Se sentaron en la mesa donde les llevaron de desayunar.


Jiang Cheng: Ha cambiado mucho… ya no veo nada de ese adolescente travieso con el que crecí.


Wen Qing: Ambos han tenido que madurar y cambiar… por culpa de mi clan.


Jiang Cheng: Por culpa de Wen Ruohan… tu villa no tenía nada que ver he igual fue afectada.


Wen Qing: No vale la pena seguir torturándonos con cosas de las cuales no tenemos control… debemos seguir nuestra vida.


Guardaron nuevamente silencio, por el rabillo del ojo la sanadora podría


Jiang Cheng: Qing - Le toma de la mano sin dejar de mirar al frente - Recuerdo lo que pasó anoche - Se gira para mirarle - Y no pienso ignorar eso.


Wen Qing: No tienes porque hacerlo… no soy un buen partido para ti.


Jiang Cheng: Tonterías - Qing le mira sorprendida - Necesito a alguien fuerte a mi lado como líder del Clan Yunmeng.


Aún sujetándola de la mano Jiang Cheng comenzó a caminar con mirada decidida y se acercó a donde Wei Ying estaba. Cuando llegaron miró directamente a Wen Ning y de un leve tirón acercó a Qing para rodearla con su brazo. 


Jiang Cheng: Wen Ning… quiero casarme con tu hermana y como su único familiar quiero pedirte su mano. 


Wen Ning se quedó sorprendido mientras que Wen Qing se puso roja como tomate, los demás miembros de la aldea comenzaron a celebrar y felicitarlos mientras que Wei Ying sólo los miraba con una sonrisa de oreja a oreja. 


& & & 


Región de Qishan. Ciudad de Yiling. 


El mercado estaba a reventar esa mañana gracias a un festival, hacía algo de calor así que después de dejar a Wen Ning y a la abuela con la venta de las medicinas tomó a sus hijos para llevarlos a comer algo y ver las distintas actividades que había para los pequeños. 


Yuan: ¿A dónde vamos Muqin? 


Wei Ying: Vamos a comer… después pasearemos. 


Xie Yun: Si!!… tengo hambre… 


Sus hijos habían crecido mucho y a pesar de ser seis meses menor Xie Yun era más alto que Yuan. Ahora sus pequeños tenían tres años y muchas cosas habían pasado en ese tiempo. 


Wen Qing se había casado con su hermano mayor el cual se mantuvo firme con su decisión así que nadie protestó, ni siquiera Yu Ziyuan lo que le pareció increíble. Ahora ellos estaban esperando a su segundo hijo, porque ya tenían un niño resultado de aquella noche de borrachera. Todavía recordaba ese día como si fuera ayer y sonreía al recordar la cara de todos en especial la de Wen Ning el cual había decidido quedarse con él para ayudarle con los niños y porque después de su hermana él era el que más conocimientos sobre medicina tenía. 


Sonriendo siguió caminando por el camino hasta que llegaron a la feria, había mucha más gente de lo que pensaba así que tomando firmemente las manos de sus hijos comenzó a caminar para acercarse a los puestos de comidas. De pronto unas personas comenzaron a pelear cerca de ellos y fue empujado hacia atrás, estuvo a punto de caer cuando alguien lo sostuvo por la espalda justo a tiempo. 


Wei Ying: Gracias - Dijo mientras se giraba, sus hijos se aferraron a su túnica mirando al alto extraño vestido de blanco - Lan Zhan…


 


 


Continuará………


 


 


Notas: Gracias por leer y espero que les esté gustando. Nos leemos la otra semana.


 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).