Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Vacaciones Test por minima

[Reviews - 1]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

4

Una vez más descansada y aseada Lila decidió revisar a sus hijos en su habitación, aún faltaba para la cena con sus jefes y demás compañeros de trabajo pero quería ver qué tanto de lo que les había ordenado cumplieron sus muchachos.

-Niños, ¿ya terminaron de desempacar sus maletas?-

-Hola mamá-

Quien le abrió la puerta fue su hijo menor que se veía más cansado de que cuando llegaron al hotel.

-Johnny cariño, ¿te sientes mal?- como cualquier madre protectora y preocupada al ver a su hijo de esa manera tomo el rostro de su bebé para checar si tenía fiebre o algún otro signo de enfermedad en este, había escuchado que algunas personas se enfermaban en sus viajes a otros países pero eso normalmente ocurría después de comer o beber algo al menos interactuar más tiempo en el país que visitaban.

-Cansado, mis hermanas me trataron como si estuvieran interrogando un criminal-

-No seas exagerado, solo fueron unas preguntas. Hola mamá- Susan que estaba pasando por la entrada de la habitación saludo a su progenitora con una sonrisa en su rostro cargando varios de sus vestidos en sus brazos.

-¿Y por qué interrogaban a Johnny?-

-Querían saber del chico que nos ayudó a subir las maletas, estaban tan distraídas viéndolo que realmente no lo escucharon cuando hablo en el ascensor-

-Más que distraídas… bueno si, Mary y yo estábamos un poquito distraídas, pero con la información que logramos recabar de Johnny estamos segura que nuestro siguiente acercamiento será mejor. ¿Rojo o azul o quizás verde?- Susan alzo su ropa para que se vieran mejor para madre e hijo “Verde, resalta mejor mis ojos- no espero respuesta y se dirigió a la habitación que compartía con su hermana, la de camas gemelas.

-Han estado actuando así desde que entramos al cuarto de hotel, ¿existe la posibilidad que Dukey y yo nos quedemos en otro cuarto?-

-No cariño, es solo que parece que tus hermanas tienen un fuerte flechazo en estos momentos. ¿Y Mary?-

-Investigando que maquillaje queda mejor en cada conjunto de ropa que trajeron, si intentan usarme como conejillas de indias para eso o a Dukey dormiremos en su habitación mamá-

-No creo que… se lo diré a tu padre cuando despierte de su siesta- sus hijas de hecho ya tenían un historial de usar a Johnny para sus experimentos, algunos de ellos de índole cosmética como ese barniz de uñas que hacia crecer las uñas en segundos o el aerosol que alisaba tu cabello sin necesidad de plancha para el cabello, ambos con efectos secundarios como que las uñas no dejaban de crecer hasta tener un metro o que el cabello se quedaba lacio por días “vine a ver si ya se habían acomodado y si querían pasear un poco antes de que fuera la cena, ¿niñas?-

-Debemos hacer planes mamá, prepararnos y quizás experimentar- respondió la voz de Mary desde la habitación.

-Sí, la próxima vez que Gil nos vea será el que no aparte la vista de nosotras jajajajaja- rio Susan, tal parece que ambas hermanas encontraron cuál sería su objetivo estas vacaciones.

-¿Salir de este cuarto lejos de mis locas hermanas?, ¡Claro que sí! Vamos Dukey, salgamos de aquí-

Lila sonrió a su hijo y can y dejaron a sus hijas solas, aun podía recordar que ella misma se comportó de manera similar con su primer enamoramiento, solo esperaba que sus niñas genio no lo llevaran a un extremo peligroso.

-¿Qué tal si vamos por unas bebidas tropicales y algunos bocadillos?, amo esas sombrillitas que ponen a los cocteles, tu padre siempre se queja que es desperdicio de dinero las pequeñas decoraciones en bebidas o comida-

-Suena bien, ¿habrá vasos con rostros tallados como las máscaras en la recepción?-

-Creo que se llamaban tikis, podríamos preguntar-

Así madre, hijo y perro decidieron pasar un rato agradable antes de la cena dejando a el padre de familia tomando una siesta, y a un par de gemelas obsesionadas por saber que atuendo pudiera deslumbrar al guapo chico que conocieron apenas hace unas horas.

El hotel aparte de su recepción muy lujosa y sus habitaciones espaciosas y cómodas, tenía salones, restaurantes, una sección de albercas muy amplia y delante una generosa sección de playa de blanca arena y grandes olas azules con salvavidas y diversos equipos que los clientes podían rentar para usar, desde tablas de surf a sky surfing, a kayaks a motos acuáticas. En realidad tenia lo suficiente para entretener a sus inquilinos como para que no tuvieran la necesidad de salir de las instalaciones del hotel.

Johnny y su madre estaban en un pequeño bar cercar del área de piscinas y el menor estaba fascinado viendo las áreas recreativas que lo rodeaba como si un parque de diversiones fuera, Dukey no paraba de menear su cola con igual emoción que su mejor amigo humano.

-Oh hay tantas bebidas, incluso un menú para mascotas jajaja- dijo Lila hojeando el menú que le habían proporcionado con lujo de detalle, incluso era muy moderno, una tableta digital que te permitía ver las fotos de las bebidas y bocadillos una vez dándole click en su nombre en el menú, todo parecía tan apetitoso.

-¿En serio?- no pudo hablar Dukey en voz alta animándose al saber que este lugar consideraba a las mascotas para ofrecerles un menú para ellos.

-Ejemp ¿en serio?- dijo Johnny cubriendo el desliz de su amigo canino, igual de sorprendido que este, era la primera vez que oía que un restaurante ofrecía un menú para mascota, o al menos en su ciudad no hacían eso.

-Sí, esta piña colada canina dice que tiene leche de coco y merengue que no le hará daño al estómago de Dukey, creo que le pediré uno, ¡Awww, y tiene su sombrillita!-

-Creo que a Dukey le encantara-

Los ojos brillantes de Dukey lo decían todo sin necesidad de palabras, el can ya empezaba a amar este lugar.

-Creo que pediré este coctel de frutas cítricas sin alcohol, ¿y a ti que se te antoja?-

-¿Habrá soda de cereza?-

-Vamos Johnny, atrévete a probar algo nuevo, hay muchos sabores nuevo, ¿Qué tal fresa kiwi? O ¿un coctel de frutos rojos sin alcohol?-

-¿fresa kiwi?- pregunto el menor no muy convencido.

-Sí, mira, también pediremos un plato de nachos para compartir si eliges una de esas bebidas, aprovecha estas vacaciones para probar cosas nuevas. Está bien tener tus gustos preferidos pero no por eso desperdicies una oportunidad de probar cosas nuevas-

-De acuerdo mama, creo que le daré una oportunidad a lo de fresa kiwi-

Eran raras las ocasiones en que podía pasar tiempo de paz y tranquilidad con Johnny, era agradable pasar este tipo de tiempo con su hijo menor, a veces se sentía culpable por pasar la mayoría de sus días trabajando y perder oportunidades como estas, por eso quería aprovecharlas cuando se presentaban.

Las bebidas y los nachos no tardaron en llegar, incluso había una galleta para perros de cortesía para Dukey al lado de su tazón de coco con su bebida la cual el can devoró con deleite, ¿ya había dicho que empezaba a amar este lugar?

-¡Lila! Veo que has llegado-

-Oh Henry, hola. Johnny este es un compañero de trabajo, Henry McAvoy. Henry te presento a mi hijo menor, Johnny-

Un hombre se acercó a madre e hijo, alto con una sonrisa tan blanca y grande como de aquellos vendedores que aparecían en los comerciales que vendían carros o productos en la televisión, en realidad exudaba esa energía carismática.

-Un pequeño Test, jajaja parece tener cerca de la edad de mis hijos, espero se lleven bien cuando se conozcan. Un gusto pequeño, soy compañero de trabajo de tu madre-

-Hola señor-

-¿Y dónde están tus pequeños?-

-El par de bribones están por aquí, escucharon que una de las albercas tenía toboganes y decidieron ir ahí a pasar el rato. Mi esposa está tomando una siesta en estos momentos, el viaje la canso un poco-

-Igual mi marido, el pobre seguía repasando si había dejado abierta alguna llave de gas o de agua. Y mis gemelas están arreglándose, están en esa edad que empiezan a preocuparse más por su imagen-

Platica de adultos, cortes y un poco aburrida pero que puede durar horas, como suele pasar cuando un menor está presente fue dejado a segundo plano comiendo sus nachos y tomando su bebida, le pasaba parte de los nachos a Dukey mientras desconectaba sus oídos cuando de hablar de familia el tema salto a las estadísticas de ventas de seguros del último trimestre o algo así, aunque el supiera su madre no se encargaba de vender seguros aunque suponía que debía ser algún tema interesante para ella y el tal Henry porque estaban platicando muy animadamente de ello. Aburrido.

Así que había toboganes y quizás más cosas entretenidas en la zona de las piscinas, tal vez debería echar un vistazo y…

-¡Fíjate por donde vas cretino!-

Johnny miro cierto alboroto que se estaba formando. Una mujer estaba gritándole a un pobre empleado, lo reconoció por el uniforme con extraño estampado, la voz chillona de la mujer llamaba mucho la atención pero se fijó en las cosas tiradas en el suelo.

-… es por eso que odio a los empleados adolescentes, no deberían dejarlos trabajar en estos hoteles de lujo, son tan…- se quejaba la mujer como la presencia de este joven adolescente era insultante.

-Hey, ¿necesitas ayuda?- y los adolescentes se multiplicaron, pues Johnny llego al lado del joven empleado ayudándolo a recoger toallas y botellitas de champú que se le habían caído al joven empleado cuando la mujer choco con este.

-No es necesario, puedo encargarme-

-Es más rápido si son más manos-

-Hey tu niño, no te metas, deja que haga su trabajo así aprenderá a hacerlo bien y no tropezarse con la gente- ahora la atención de la mujer estaba en el chismoso niño que había aparecido.

-Él estaba haciendo bien su trabajo, usted choco con él por estar distraída con su teléfono. Son muchas botellitas- Johnny ya tenía las manos llenas con estas botellitas.

-Tú…- la mujer ya lanzaba chispas por los ojos.

-Ten estos, creo que mi perro encontró otros- y efectivamente Dukey llego con otro par de botellitas en la boca.

-Gracias- el joven empleado por fin agradeció al chico cabello de llamas.

-¿Qué pasa aquí?- otro individuo llego a la escena del crimen, o es lo que parecía ya pues desde que la señora choco con el empleado del hotel se empezó a juntar gente alrededor y el numero aumento cuando Johnny llego a ayudar al muchacho a recoger las cosas tiradas.

-Por fin un adulto que se haga cargo de esto. Su empleado choco conmigo y ni siquiera pidió disculpas, debería despedirlo inmediatamente-

Hubo un pequeño instante de anticipación entre los que eran observadores, admitámoslo, todos fuimos en algún momento ese tipo de exportador que solo ve para enterarse como se desarrollaran dichos eventos, y tristemente también nos mantenemos apartados sin querer participar pues no es “nuestro problema”, es un extraño fenómeno de mentalidad de manada.

Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).