Aquí...
Finalmente después de tanto tiempo nos encontramos de nuevo, vienes por tu cuenta, nadie te ha obligado...te abro la puerta medio dormido, son como las tres de la mañana, no me miras, solo te paras frente a mí intentando que las palabras broten solas de tu boca, pero nada ocurre y sé el motivo por el cual has venido, por ello ahora completamente despierto, no puedo hacer más que observarte y esperar ansioso que digas lo que ambos deseamos; si pudiera decirte que las palabras son completamente innecesarias, siempre te he esperado por que eres el único con el que puedo ser yo sin preocupaciones, el único que al que le entregado todo, pero al parecer eso no fue suficiente...
Pareces saber que pienso exactamente, y así sin decir nada, me tomas por la cintura y me besas, un beso lleno de pasión como nuestra primera vez, decimos todo lo que con palabras no podemos y me dejo llevar, pues yo también lo esperaba, no, lo deseaba más que nada pero no sabía como hacerlo después de tanto creí que tu ya no...
- ...gracias...- susurra el pelinegro en el oído de su koi, sacándolo de sus pensamientos y haciéndolo estremecer...
- no es nada...- me haces callar con un nuevo beso esta vez, más dulce, me entrego completamente a ti...dejo divagar mi mente, ya no quiero pensar, solo volver a sentirte...
Estas aquí, para al fin decirme que estás por mí,
Y quieres que lo nuestro nunca se acabe,
Pero no lo dices,
Y ahora estoy aquí,
Acostado y con mis manos aferrado a ti,
Pidiéndole al destino que nunca me vaya a separar de ti...
Entre besos y caricias que nos recuerdan un pasado que nos parece tan lejano, volvemos a entregarnos todo el amor que estuvo reprimido tanto tiempo, años en que mi piel deseaba tener este contacto con la tuya, y sin darme cuenta ya me tienes en la habitación y en la cama en la que hasta hace solo unos minutos solo dormía, solo con mis fantasías de que esto pasara alguna vez...
- no es un sueño...- me dices y nuevamente sabes hasta lo que pienso, a ti no te puedo ocultar nada, puedes ver a través de mí como nadie nunca podrá hacerlo...ya no sé del mundo...
Por que te amo,
Tú sabes todo lo que yo sufrí por ti,
Noches en vela desde que te ví,
Y ahora estas en mí,
Y yo pensando en que te extraño...
Me he entregado a ti, ahora agotado duermes junto a mí, creo que esta ha sido nuestra mejor noche juntos, a pesar de todo, sé que sigues siendo tú, pero algo antes de esto me daba la impresión de que no eras el mismo y te extrañaba más de lo que un día podrías llegar a imaginar...
Aún ahora me aferro a ti, y dormido correspondes a mi muestra de cariño, sabes que somos más parecidos de lo que ven a simple vista todos en el mundo, estamos unidos por algo más grande...creo que incluso más grande que nosotros mismos...
Sé que lo más difícil está por venir, que te vuelvan a aceptar, y que podamos ser felices juntos, por eso desde que volvimos y dejamos a Orochimaru en el pasado, he estado pidiendo a todos los dioses que conozco que no te aleje nuevamente de mí por que te juro que no sería capaz de soportarlo una vez más - el rubio le susurraba a su amado con su cabecita reposando sobre del pecho de su amor, abrazándolo posesivamente...solo leves susurros que se perdían entre suspiros y la lenta respiración de su amado.
Yo sé que,
Hiciste tantas cosas cuando estaba él,
Y no supo apreciarte,
Pues no supo ser lo que tú quieres,
Y ahora estoy aquí,
Acostado y con mis manos aferrado a ti,
Pidiéndole al destino que nunca me vaya a separar de ti...
Lloró de felicidad, no sé porque, un ninja no debe llorar, Kakashi-sensei siempre nos dijo que no estaba del todo mal romper las reglas y una de ellas dice que los ninjas no deben lloran, pero...no lo puedo evitar, y en el silencio lloro, como un niño, me levanto y salgo de la habitación lentamente para no despertarte, te ves tan lindo dormido
- ¿qué pasa? - Me miras con preocupación - ¿te lastime?, no fue mi intención, yo...- te sientas desconcertado frotándote los ojos
- estoy...- las palabras ya no salen de mi boca, se me quiebra la voz
- lo siento de verdad, soy un bruto - me secas con suaves caricias mis mejillas, pero eso solo empeora las cosas, me abrazó a ti y lloró como nunca antes lo había hecho, lloro sinceramente en tus brazos.
- yo...Naruto por favor, perdóname, no quise...- en verdad estas preocupado, me abrazas para protegerme o por instinto no lo sé, pero me quiero quedar en tus brazos fuertes y nunca irme del calor de tu pecho, quiero seguir escuchando por siempre los latidos de tú corazón.
- baka, no lloro por eso...snif, snif - paso mis brazos por tu cuello y enredo mis manos en tu suave cabello, mientras apoyo mi barbilla en tu pecho
- ¿entonces? - esa cara desconcertada tuya es tan graciosa - sonrió levemente
- no lo sé...estoy feliz...- abres los ojos enormemente, sin saber que responderme y ahora soy yo, el que se lanza sobre ti para besarte, estamos solos en el mundo...que importa, que fuera el fin, olvidemos juntos el pasado y no pensemos en el futuro, solo vivamos por el presente...
- te deseo Sasuke...ahora - suplico el kitsune
- yo también...
Nuevamente se envolvieron en una lucha de caricias que no tiene fin, besos, mordidas, y palabras dichas de verdad desde lo más profundo de su ser...
- Te amo - dice Sasuke en el oído de Naruto después de morderlo suavemente haciendo estremecer a su rubio de ojos azules.
- Yo también...
Sasuke comenzó a lamer una de sus tetillas, disfrutando de los gemidos y suspiros que escapaban de los labios entreabiertos de Naruto; continuó bajando hasta su ombligo, por su cintura. Se arrodilló frente a él para admirar su rostro sonrojado y húmedo por el sudor, saber que él estaba provocando esas sensaciones en su zorro lo excitó todavía más con un gemido, Sasuke deslizó los brazos bajo él, levantándolo en arco y su boca descendió sobre la superficie de piel deliciosamente torturada. Se detuvo solo para someter al otro pezón al mismo castigo Sus dedos apretaban su nuca mientras lo acercaba con desesperación hacia él.
Las manos de Sasuke le acariciaban los muslos, mientras su barbilla se apoyaba sobre la piel tersa de su estómago. Naruto dio un largo gemido, e inclinó la cabeza hacia atrás, cuando lo salpicó de besos ardientes, humedeciendo, mordisqueando su piel hasta hacerlo llegar a una agonía de placer, curvando la espalda...
Sus besos descendieron hasta la parte baja de su vientre, hasta llegar a la separación de sus muslos.
Sasuke bajó hasta su miembro y comenzó a lamerlo. Naruto emitió un sonoro gemido y arqueó la espalda. Enredó los dedos en el cabello del pelinegro y pronto tuvo que morderse los labios para ahogar los fuertes gemidos que intentaron escapar de su garganta en el momento en que Sasuke abrió la boca y lo tomó por completo.
Era tan delicioso, tan cálido, tan íntimo. La boca de Sasuke estaba húmeda y deliciosamente caliente, lo hacía gemir y arquearse bajo las caricias de su lengua.
El calor de la habitación aumentaba, haciéndole perder el control; Naruto movía desesperadamente la cintura intentando seguirle el ritmo pero apenas podía, la punta de la lengua se hizo cargo de excitarlo aún más, hasta lograr que se derritiera como miel caliente. Su espalda se curvó y dio un grito de puro placer cuando llegó su clímax, ya no pudo más y con un sonoro gemido gutural termino dentro de su boca, el pelinegro se encargo de recoger hasta la última gota antes de volver a besarlo y contemplar la perfecta anatomía de su zorrito que ahora estaba bañado en un sudor perlado y con sus mejillas rojas...
Naruto decidió que ya no soportaría seguir esperando y tomó una mano de Sasuke, comenzó a lamer y chupar los dedos con deseo, mientras separaba las piernas a lo largo del cuerpo de Sasuke.
El pecho de Naruto subía y bajaba, su respiración era muy agitada, Sasuke retiró su mano y lo besó un primer dedo se introdujo con sumo cuidado dentro de él, pasaron unos segundos cuando Sasuke empezó a moverlo, preparando su cuerpo para lo que venía, cuando sintió los músculos del joven bajo él relajarse introdujo otro, y luego otro Naruto empezó a moverse, pidiéndole que continuara, su cuerpo no estaba del todo satisfecho.
Naruto tragó con fuerza y cerró sus ojos, esperando que continuara. Más Sasuke lo tomó en sus brazos y lo estrechó contra su cuerpo, enterrando la cara en su cuello.
Sasuke soltó una risita ante la protesta, empezó a acariciar su entrepierna y muslos para después sepáraselos con sutileza. Se ubicó entre sus piernas y le sonrió de forma lujuriosa para después comenzar a introducirse en él, despacio, arrancándole gemidos de placer.
Naruto empezó a pedir y a rogar que se apure, pero Sasuke se tomó su tiempo esperando causarle el menor dolor posible, aunque también se moría de ganas de tomarlo de una sola y rápida embestida, pero ver la cara de Naruto ansioso por la espera, lo hacía disfrutar de sobremanera.
Naruto sintió como un estremecimiento recorría su cuerpo...
- ¿Todo bien? - preguntó, preocupado.
- sí... - Dijo Naruto después de una pausa; se movió bajo el, para poder sentirlo mejor
- Ah Naruto, eres...ahhh...tan lindo... - susurró en su oído mientras comenzaba a embestirlo a un ritmo lento, pero fuerte.
Por que te amo,
Tú sabes todo lo que yo sufrí por ti,
Noches en vela desde que te ví,
Y ahora estas en mí...
Sasuke abrazó la cintura de esa criatura delicada, tan hermosa, que ahora gemía para él mientras lo poseía; e incrementó el ritmo. No fue capaz de pensar en otra cosa más que en que lo amaba más que antes, tampoco fue capaz de imaginar que pasaría entre ellos después. ¿A quién podía importarle el pasado o el inminente futuro cuando el presente era tan perfecto junto a su amado?
Por que te amo,
No sabes todo lo que yo sufrí por ti,
Noches en vela desde que te ví,
Y ahora estas en mí...
Las respiraciones de ambos eran espectacularmente sincronizadas cuando juntos se fundieron en uno solo, dando ambos un grito de placer. Naruto derramó su semilla sobre el vientre de Sasuke y este terminó dentro de él; su esencia se dispersó por todo su interior y Naruto sintió como esa familiar sustancia tibia, lo invadía de felicidad.
Sasuke sostenía el cuerpo suave de Naruto contra su pecho. Se dio cuenta, por su respiración, de que se había dormido, y contempló la cara, adorable, y la expresión de paz que se le dibujaba en los labios, lentamente fue saliendo de su interior para no despertarlo, pero el rubio solo se acomodo en su pecho, mientras sonreía, la sonrisa más linda que Sasuke había visto nunca.
Se recostó abrazando posesivamente el cuerpo de Naruto, y comenzó a acariciar sus mejillas y su cabello, mientras en el silencio de la noche le susurraba, pequeños te amo que vivirían siempre en esa habitación testigo de su amor...
Te amo...te amo...
Te amo...