¿Y vivieron felices para siempre?...
Era un hermoso día de Julio, el viento soplaba húmedo y el cielo estaba despejado. Se encontraba solo en casa, ya que sus padres habían salido por negocios. Pero no se sentía solo. Se miro al espejo, viendo por el reflejo la hora que era, 9:45, casi seria las 10. Había quedado de verse con Hana en casa. Estaba listo para recibirlo, traía puesta una playera sin mangas algo ajustado, y unos pantalones de pana negros, se vio con satisfacción, su madre le había exigido que se comprara ropa para diferentes ocasiones. Suspirando se vio al espejo, su mirada se centro en su cuello, y tocándose el pecho sonrió con ternura sintiendo el frio metal que había bajo la tela. Entonces recordó.
---------------------------------------------------------- recuerdo -----------------------------------------------------------
Cuatro años atrás.
Después de decirse lo mucho que se amaban, a petición de Hana, caminaron a un café, donde pidieron un par de chocolates calientes, Hana desenvolvió su obsequio y entrego el suyo a Kaede.
Hana - WOW ZORRITO... es bellísimo, gracias JAJAJAJAJAJAJAJAJA
Kaede - (con la taza entre sus manos le veía tímidamente, no podía creerlo aun... el que escribía esas cartas si era Hanamichi Sakuragi) {Gracias Kamisama...} (la mirada castaña se poso en la suya y Kaede sonrojado bajo la taza a la meza al igual que su mirada)
Hana - Venga Kaede, quien no te conociera, diría que te han cambiado... mira como cambias, te ves espectacular... (Esas palabras aumentaron en sonrojo en Kaede, Hana sonrió y busco entre sus bolsillos una cajita) Toma, esto también es para ti. (Dijo extendiéndoselo)
Kaede - (tomándolo en sus manos observo la cajita, de terciopelo negro, era tan curiosa, jamás había tenido algo así entre sus manos, solo sus padre le hacían obsequios, regreso su mirada a Hana y sonriendo le agradeció) Gracias... jh.
Hana - Ábrela... (Dijo atento a su mirada, esperaba que le gustara)
Kaede, lo observo y entonces abrió la cajita, en la cual vio dos finas cadenas de plata, con dos balones dorados eran impresionantes y la cosa mas hermosa que Kaede había visto, sonrió sacando uno Hana se levanto sin importarle las miradas y se inclino a sus pies tomando la medalla entre sus manos Kaede entendió la indirecta y bajo la cabeza levemente para que Hana pudiera ponérsela...
Hana - ¿Te gusta?
Kaede - Me encanta Hana... gracias, (dijo acariciando la joya... tomando la otra) tu turno... (He hiso lo mismo desde el asiento, dejando sus manos descansar en los hombro de Hana, el cual se acerco a el y le beso castamente en una de sus manos) Sera mejor que te levantes, jajaja...
Hana - (viendo a su alrededor) Es verdad JAJAJAJAJAJAJAJA, nos vamos...
Kaede - Sip...
Y así lo hicieron, esa tarde la pasarían bien, seria inolvidable... su primera cita, sin discusiones y pleitos, solo ellos y lo que sentían... un gran amor el uno para con el otro. Al terminar el día, Hana fue a dejar a Kaede a su casa, donde Deret le leyó la carta con todas su clausulas... Kaede y Nomi, no paraban de reír, ese había sido un buen comienzo.
------------------------------------------------ fin del recuerdo ------------------------------------------------------------
Kaede sonrió al recordar, como su padre no dejaba hablar a Hana, y el como su madre parecía impresionada al ver que su padre ni respiraba cuando hablaba, Hanamichi había aceptado cada una de las peticiones para ser su novio.
Kaede - Hana... jumm...
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Por otra parte, cierto pelirrojo iba muy feliz de la vida, era fin de semana no había clases en la universidad, y sus suegros habían salido fuera, seria un día perfecto para pasarla con su zorrito, no tenia una relación cualquiera, era su novio oficial. Aun recordaba cuando se lo dijeron a su padres, y como su madre lo había tomado, su hermana había aceptado muy bien a Kaede como cuñado, y parecían estar feliz con el zorrito. Sin duda se había dado cuenta de que su kitzune tenía buenos principios y era una persona muy agradable. Sus padres lo amaban y no era fácil que su madre comenzara a hacerlo con los días. Era atento, y le gustaba ayudar, era respetuoso y comprensivo, cosas que eran muy difíciles de ver a simple vista, ya que al principio le había parecido un tipo extraño y antisocial.
Al fin llego a la casa de su chico, era hermosa, amplia pero cálida, la habitación de Kaede quedaba frente a la calle, lo que era genial por que había encontrado un forma de hacerse escuchar cuando el kitzune se enojaba, ¡ah por que no todo era felicidad! También había habidos días infructuosos, en que el que metía la pata siempre era él.
---------------------------------------------------Recuerdo de Hana------------------------------------------------------
Hana, estaba molesto, esa tarde había quedado con Kaede de verse en el Danni`s, pero hacia como media hora que esperaba y para cuando llego el joven moreno llegaba de lo lindo y desinhibido junto al puercoespín, el risota ese le veía y sonreía de una manera que no le agradaba.
Cuando los dejo solos Hana no había dicho nada mas, incluso en todo el día, se la había pasado serio y contestaba a Kaede con puros monosílabos. Al fin fue a dejarlo a casa. Pero Kaede se detuvo antes de entrar a la propiedad.
Hana - Sera mejor que entres o tu padre se molestara que te detenga fuera de casa (dijo eso de manera hiriente)
Kaede - (viéndolo serio vio hacia dentro, las luces estaban encendidas) Jh... Por que te comportas así, creí que eso de discutir había quedado en el pasado. Toda la tarde no hay dicho mas que, "si" y "no")... ¿te molesto algo que hice? (le vio con tristeza) ¿quieres hablar?
Hana - Jh...No, nada... además ya es noche, venga entra a casa.
Kaede - ¿No confías en mi? (pero Hana le vio molesto y gritando lo sorprendió)
Hana - ¡¡¡YA METETE DE UN MALDITA VEZ A TU CASA... (A cambio recibe una fuerte bofetada en el rostro)
Kaede - Vete al diablo (dice dolido dejándolo en la entrada de su casa, no dijo ni hola, solo se dirigió a su habitación, no sabia el por que Hana se comportaba de esa manera, ya tenían 6 meses de noviazgo y todo parecía ir bien, por que ahora tenia que pasar eso)
Había tenido que pensársela bien, Kaede estaba en todo su derecho de molestarse, por lo que, había pasado toda la semana preocupado de que Kaede no contestara sus llamadas y cuando se topaban en la universidad, le cortaba el paso o simplemente le ignoraba.
------------------------------------------------------------fin del recuerdo -------------------------------------------------
Hana - (viendo hacia la ventana, la encontró abierta, y con un chiflido se hiso notar)
Xxx
Esa era la señal de que había llegado un chiflido, caminando a su ventana, le vio en la acera sonriendo como siempre.
Kaede - Jajaja, llegas temprano (grito desde su habitación)
Hana - Quieres que me de una vuelta en lo que te arreglas... MUAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJA (grito desde abajo)
Kaede - No, estoy listo Do`aho. (Habla sonriendo tiernamente) Pasa, esta abierto.
Hana no espero ni dos veces e ingreso a la propiedad, mientras que Kaede viendo el cielo despejado recordó la primera vez en que discutieron. Habían tardado casi dos semanas sin verse ni hablarse, y se había puesto muy triste por eso, ya que no sabía el motivo por el que había sido el pleito... pero al final Hana lo había sorprendido.
------------------------------------------------------recuerdo-----------------------------------------------------------------
No había querido bajar a cenar, no se sentía bien, ya casi iba para un mes y Hana se había cansado de hablarle y no recibir respuesta. Pero ahora lo que mas quería era escuchar su vos y saborear sus labios. Lo extrañaba, y era un martirio verlo todos los días en la universidad y no poder decírselo. Estaba ahí, recargado en el marco de su ventana, viendo el cielo estrellado. Cuando de pronto escucha un chiflido, y bajando la mirada, ve a Hana con un ramo de flores en la mano.
Kaede - {Hanamichi...} (susurro al verlo, se mordió el labio, bajo la mirada así el área donde su madre seguramente le veía, y no se equivocaba) ¿¡¡¡QUE HACES AQUÍ!!!? (Dijo al ver que su madre se apartaba de la ventana)
Hana - VENGO A PEDIRTE DISCULPA... TE EXTRAÑO MUCHO KAE... POR FAVOR, HABLEMOS...
Pero lo único que recibió fue que Kaede cerrara la ventana, bajo la mirada triste, cuando de pronto lo vio salir de su casa.
Kaede - Do`aho... (Camino hacia la acera, saliendo de la propiedad, que era solo dividida por una muy peculiar cerca de madera, coloco sus manos en los bolcillos acercándose a el)
Hana - Kaede, perdóname, estaba celoso... yo... jh... fui un estúpido al no decir....
Los dedos suaves y largos de Kaede le impidieron hablar, el pelinegro, deslizo sus brazos por el cuello de su novio y le abraso con ternura, Hana paso sus manos por la estrecha cintura de su chico y escondió su rostro en sus cuello aspiro su delicado aroma, lo amaba.
--------------------------------------------------- fin del recuerdo ---------------------------------------------------------
Con los ojos cerrados, recordaba ese momento, Hana nunca mas dudo de el y lo que sentía, desde entonces si se molestaba y le celaba, pero no a tal extremo. De pronto sintió unos brazos fuertes en su cintura y unos labios juguetones en su cuello, una imperceptible sonrisa escapo de sus labios regresando a ver al causante.
Kaede - Hana!
Hana - Hola amor... (Buscando sus labios con necesidad) um... mi amor, te extrañe... um... tanto..
Kaede - Ah.. jh... Ha-na... solo han sido dos días... aah... jh... (El beso suave y tierno se había convertido en uno más pero sabían controlarlo, al menos Kaede, ya que tenia por novio a un hombre con llama ardiente entre sus venas) Hana, um... (se solto de el tratando de respirar)
Hana - JAJAJAJA, mi zorrito hermoso... (le beso pero de manera fugas, y tomando su mano lo jalo a la cama donde le pidió sentarse) Ven siéntate... tengo algo para ti.
Kaede hiso tal como le pidió, y muy pronto vio como Hanamichi se arrodillaba a sus pies. Tomaba las manos entre las suyas acariciándolas de una manera muy enternecedora, como si buscara algo que decir, o como si tuviera planeado un gran discurso y ordenara las palabras para decirlas, sus labios se habían pero no emitían sonido, por lo que nervioso dirigió su mano a rostro de Hana y le levanto hacia el, sus miradas chocaron.
Kaede - Hana, te has quedado callado, y eso... no es natural en ti. (Dijo con una leve sonrisa en su rostro) ¿Qué pasa?
Hana - (sonriendo, bajo el rostro nuevamente, jugando con las manos de Kaede, amaba tocarlas, eran suaves y hermosas) Bueno, será que yo... tenia... (Viéndolo a los ojos suspira) tenia planeado un discurso, pero parece que se me ha olvidado.
Kaede - Bueno, solo di lo que quieras decir... (dice viéndolo con sus hermosos ojos azules)
Hana - (soltando sus manos, saca algo de su bolcillo y tomando la mano nuevamente de Kaede le coloca en su palma una cajita negra de terciopelo) Ábrelo...
Kaede hizo como le pidió y su mirada se vio deslumbrada por un hermoso anillo con piedritas brillantes al derredor, "era un anillo de compromiso", regreso a ver a Hana y se laso a besadlo, sin preguntar mas. Hana profundizo el beso, de un momento a otro se besaban con tanto ímpetu y deseo.
Podría creerse que se comían a besos, era tanto el deseo del uno y el otro.
---------------------------------------------------------recuerdo--------------------------------------------------------------
Estaba ahí, sentados los cuatro en la sala de la casa de la familia Rukawa, Kaede y Hana sentados juntos frente a los padres del primero, Deret, había hablado y hablado... y Kaede estaba nervioso por que Hana se arrepintiera de ser su pareja. Veía a su madre como pidiéndole que callara a su padre, pero ella no hacia el mínimo movimiento, solo estaba seria escuchando todo muy atenta, pero entonces, su padre se sentó al lado de su madre, tomo sus manos eh dijo.
Deret - Bien, Kaede es lo único que tenemos... así que lo respetara Joven Sakuragi, nada de pararlo en los callejones, y cero de peleas como acostumbraban hacer.
Hana - Téngalo por seguro señor Rukawa, yo... amo a su hijo....(dijo viendo a Kaede con afecto y amor)
Deret - Y nada de sexo.
Ambos chicos lo regresaron a ver, Kaede iba a hablar pero su madre se adelanto.
Nomi - Lo siento, pero se que aunque es una relación, muy diferente a las otras, debemos cuidar que el honor de nuestro hijo este intacto. Así que nada de sexo, hasta después del matrimonio, Kaede esto va también para ti hijo. (Dijo su madre muy seria, aunque, al igual que Deret)
Ambos jóvenes se regresaron a ver, pero aceptaron la condición.
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Desde ese entonces, no habían llegado tan legos, mas que solo besos y mas besos alguna que otra ves algunas caricias, pero nada mas. Pero ahora, estaba tan feliz, que no se dio cuenta... cuando de pronto se hallaban en la cama de Kaede, comiéndose a besos y las manos de Hana recorriendo a placer cada parte de su cuerpo, una de esas manos se adentro por debajo de su playera. Kaede sintió una corriente eléctrica pasar por todo sus cuerpo y una leve gemido escapo de entre sus labios.
Kaede - AH... Hana... jh.. um... (Cerro los ojos al sentir la suave caricia en uno de sus pezones... Hana ahora besaba su cuello, él sentía que el alma se le iba, era una sensación tan nueva y deliciosa. Nadie podía interrumpir, estaban solos y sus padres no llegarían hasta el día siguiente. ¿Que lo impedía?)
- - Deret - Y nada de sexo.
Las palabras de su padre, retumbaron en su conciencia, dándole algo de cordura... Hana se había desliado a su vientre plano, donde depositaba deliciosas caricias y besos, Kaede estaba en shock, ¿Qué hacer, cuando algo te gusta?, los labios de Hana subieron muy lentamente a uno de sus pezones, Kaede no puedo evitar gemir ante el contacto, toda su piel se erizo y por inercia lo aparto de su cuerpo arrojándolo al suelo levantándose se cubrió el pecho acomodando su camisa, estaba completamente rojo. Confianza, eso lo impedía. Sus padres les tenían confianza.
El golpe había sido duro, pero se aguanto, al ver como Kaede abrasaba sus piernas a su pecho, tan rojo y avergonzado. Era cierto, jamás habían llegado tan lejos en lo que llevaban de novios, y entonces recordó la promesa que habían hecho a los padres del moreno. "nada de sexo, hasta después del matrimonio" Suspirando trato de tranquilizarse, gateo a su lado, y levantándose se sentó en la cama, aparto algunos cabellos del rostro de Kaede, y vio su rostro con ternura, Kaede esta sonrojado y se mordía el labio de una manera muy tentadora.
Hana - Perdona, se me había olvidado, lo siento (le abraso por la espalda, besando su hombro) Perdona Kae...
Kaede - um... perdóname tú a mí... jh... jh... (le regreso a ver abrasándose a el)
Así permanecieron por un buen rato. El silencio ya no les era aburrido, habían aprendido que si se ama a una persona la simple presencia de ella podía con cualquier cosa, que las palabras salian sobrando.
Tal como lo habían planeado, pasaron un día perfecto, salieron a caminar, a jugar un rato, ya que ambos pertenecían ahora al mismo equipo universitario de baloncesto en la universidad de Kanagawa. Y el baloncesto los unía aun mas, era una de las cosas que compartían. Juntos eran muy reconocidos, y jugaban muy bien juntos, encabezando la dupla de oro.
Todos sabían de sus noviazgo, desde aquella ves, en que Kaede comenzara a llevar en su mano ese listón rojos ya jamás se lo había quietado, incluso Hanamichi, había comprando unas pulseras rojas, y le había entregado una a él, pero aun así Kaede aun conservaba aquel listón entre sus pertenencias mas preciadas. Lo amaba. Se amaban, y todos lo que los conocían podían testificarlo.
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Continuara...