Oneshot: “Este es el yaoi”.
Por: nydga
En la mañana , era viernes pero también era un día hermoso, todo el público se levantó muy temprano para ir a trabajar o hacer los ejercicios antes de irse al trabajo o la escuela. Los pájaros cantaban muy alegres, volaban, buscaban parejas, cuidaban sus pajaritos y le daban de comer. Las hojas de los árboles están moviendo por el viento y también lo mismo que las flores de margaritas, rosas, lirios y sakuras. Las calles estaban limpias, blancas, algunos niños y muchachos manejaban con la bicicleta, cercadas de las paredes, ahí unas tiendas que venden jugos, tortas y sándwich, los gatos se estiraron pero luego se escaparon por los perros que ladraban, vemos a un muchacho pelirrojo, mide 1.88 m, su piel bronceada, ojos cafés como chocolate, cabello rojo como el fuego, caminaba tranquilo, no tenía ganas de ir a la escuela, pero aún es poco temprano para poder llegar a su escuela, y todo el público que pasó a su lado, quedó asombrado, asustado y curioso por la estatura más alta del pelirrojo, su nombre es Hanamichi Sakuragi, llevaba el uniforme escolar, además llevaba la bolsa largo de color azul con la mano en el hombro y la otra mano cargaba el balón para jugar el básquetbol.
Sakuragi estaba pensando que si es necesario va a declarar sus sentimientos a Haruko hoy mismo, pues el pelirrojo logró ser un buen jugador de básquetbol después casi tres años y ya tiene el mismo nivel que Rukawa, cursaba el tercer año de la preparatoria, faltaba dos meses para terminar este grado, pronto va a la universidad en Estados Unidos, claro ya es famoso de toda la escuela preparatoria pero es como un segundo porque Rukawa como primer jugador de básquetbol. Pero tenía miedo de ser rechazado de nuevo, será 51 números de rechazos. Cuando pasó al lado de la revistera, donde vende revistas de deportes, bodas, modas, bellezas, dieta, telenovelas, muebles, casas y otros más, las mangas y los periódicos, se detuvo y se quedó confundido al ver una revista “amor – yaoi”.
-amor – yaoi... – rascó su cabellera roja - ¿qué es esto?...
Sakuragi iba a agarrar la revista pero se dio cuenta que sólo tiene dos minutos para entrar a la escuela, echó a correr y maldiciendo a sí mismo, luego llegó a la escuela pero fue castigado por el profesor por la tardanza. No entendió el por qué no dejaba de pensar en la revista, estaba curioso y ansioso para agarrar y abrir la revista, ahí podrá ver las imágenes, letras, logotipos, etc., maldijo a un reloj porque se pasaba muy lentamente parecía como eterno. Ya estaba harto, decidió de preguntar a un amigo o compañero sobre yaoi, sólo preguntó a Yohei, y éste se sonrojó, claro si sabe qué es pero le daba mucha pena como para decirlo, aunque Sakuragi se quedó parado y confundido al ver a Yohei tenía las mejillas rojas, luego se desesperó, ya quiere saber qué es esto y – a – o – i – .
Después las clases, entró al entrenamiento para practicar el básquetbol, preguntó a un compañero, pero lo pasó mismo que Yohei, Sakuragi creyó que el yaoi puede ser peligroso, entonces no prefirió preguntar nada, pero la curiosidad s ganó, pensó bien. Transcurrió 2 horas, los jugadores se fueron a bañar, vestir y irse a su casa, menos Kaede y Hanamichi, quienes todavía recogiendo la ropa para después irse a su casa pero antes.
-oye, espera – llamó el pelirrojo poco nervioso.
-¿qué pasa? – preguntó el zorro con la mirada seria.
-b-bueno, quiero saber ¿qué es el yaoi? – preguntó con la mirada confundida y seria.
-...... – no respondió pero Kaede con los dedos de la mano diciendo “ven”.
El pelirrojo obedeció y acercó al zorro, esté acercó su boca al oído de Sakuragi.
-¿tú lo sabes? – preguntó Hana confundido.
-Mañana esta noche en mi casa a las 10 de la noche te haré una clase práctica, ok? – dijo y se fue.
-práctica?? – preguntó confundido y sonrojado en las mejillas.
Luego de esta conversación, regresó a su casa, dejó de sentar en el sillón, preguntaba qué rayos se cree esto Rukawa??? ¿está loco o qué? La verdad no entendía bien, pero no dejaba de desesperar porque ya quiere saber qué es YAOI!!!!! Entonces al día siguiente, claro, Hanamichi ya quiere irse a la casa de Rukawa pero todavía no!!! Apenas son las 3:00 de la tarde, así se dirigió al baño para dar la ducha para poder relajar bien, luego comió espagueti con tasajo y tomó el agua de jamaica. Hanamichi odió hacer las tareas y estudiar. Ya después 6 horas, al fin!!! Podrá ir a la casa de su rival y saber qué es Y a o i... Hanamichi llegó a la casa de Rukawa, tocó dos veces la puerta, esperó unos segundos pero no contestó nadie, volvió a tocar otra vez pero esta vez fuertemente porque seguro que este kitsuine estaría durmiendo en la sala o la cama. Al fin abrió la puerta, ahí un muchacho zorruno, dejaba de ver el torso perfecto mojado, pelo negro mojado, sólo tenía pantalón negro, pues apenas terminó de bañar. Hanamichi se sonrojó violentamente.
-entra, do´hao – dijo el zorro.
-grrr.... – gruñó el pelirrojo pero no le importó y entró.
-siéntate, voy a preparar algo en la cama – dijo el muchacho de ojos azules.
-¿¡?¡?¡ ¿algo en la cama? – preguntó confundido pero ya no estaba el kitzuine se supone ya se fue al cuarto.
El pelirrojo se encogió los hombros, se sentó relajado en el sillón, miró a cada parte de la sala, parecía muy ordenada y bonita, las paredes de color rojas como la cabellera roja de do´hao, la mesa redonda centrada de los dos sillones, una izquierda y otra derecha, una librería lleno de libros de inglés, administración, historia, sociología, derecho, economía, educación sexual (jujuju)...
El joven más alto esperó unos minutos, hasta escuchó la voz del joven zorruno desde el cuarto, entonces se levantó y se dirigió al cuarto de su rival, al fin abrió la puerta y entró quedando sorprendido por el cuarto más ordenado, hermoso y hasta una cama de color blanco junto las sabanas rojas...
-¿qué significa esto? ¡kitsuine! – preguntó desconfiado.
-acuéstate, do´hao – pidió Rukawa.
Al escuchar esto, Sakuragi se quedó en shock, ¿qué significa esto? ¿por qué a él le pidió que se acueste en la cama? ¿acaso que este kitsuine está loco o qué?
-¿de qué hablas, zorro apestoso? – gritó enfadado creyendo que este zorro sólo está burlando de él.
-acuéstate o si no te diré nada qué es yaoi – murmuró Rukawa.
-¿eeh? – preguntó Hana con un montón de dudas pero al fin aceptó – está bien, pero me prometes a explícarme qué es el yaoi – dijo y se acostó en la cama.
-mmhh... está bien – dijo el pelinegro, acercándose al oído del más bajo haciendo que esas palabras se hubiesen producido como un leve susurro – el “yaoi” es aquella pareja del mismo sexo, es decir, HOMBRES...
Hanamichi se quedó helado, todo el cuerpo se erizó y se separó rápidamente del zorro ... ¿este zorro está mintiendo? ¿o es cierto? ¿yaoi? No logró reaccionar pronto pero hasta cuando escuchó la voz de kitsuine continuó.
-y... yuri, significa que es una pareja del mismo sexo también, pero mujeres...
-jajajajajajajaja un buen broma! Un buen chiste! – aún no creyó.
-uuff – suspiró el pelinegro – eres un do’hao... ¿por qué no compras la revista yaoi, si quieres saber que estoy bromeando-
-¿c-cómo? N-no pued – no terminó la frase al ver a Rukawa acercándose hasta que el pelirrojo quedarse como preso por este. -d-deten-detente! – rogó el pelirrojo, intentó de separar a Rukawa pero no pudo y no entendía por qué su cuerpo empezó a reaccionar ante el cuerpo de este zorro.
Rukawa agarró con la mano al mentón del pelirrojo y lo besó con furia, pero el mono pelirrojo no correspondió, agarró la manga corta de la playera blanca del zorro para jalar atrás, es decir, para separarlo, ya que las mejillas del do´hao algo rosadas.
-mmmhhhh!!! – intentó a hablar pero sigue callado por el beso de este zorro.
Por la falta de respiración, el joven de ojos azules se separó, la cabeza del pelirrojo agachó, estaba avergonzado por este beso, claro, por fin entendió qué es el yaoi, por eso Rukawa lo invitó acostar en la cama para hacer el amor con él, eso es el yaoi, significa cuando un hombre se enamora de otro hombre, la verdad no podía creer esto, desde ayer iba a declarar a Haruko pero ahora está confundido por el beso de Kaede, no cabe duda que este beso fue tierno y dulce, sabe como fresa. Pero el pelirrojo no quería esto, su cara enfurecida, golpeó con el puño contra la cara del zorro pero después se arrepintió por haberlo golpeado, se sintió estúpido, la boca de kitsuine dejaba de salir un hilo de sangre.
-¿e-estás bien? – preguntó Hana asustado y preocupado.
-eres un do´hao – dijo pero después le dio cachetada.
-¡uugghh! ¡me dolió! Estúpido zorro – dijo mientras estaba acariciando su mejilla.
Rukawa agachó y agarró la cabellera roja del muchacho para poder besarlo.
-¡d-detente! ¡suélt-! – Rukawa lo besó con ternura pero recibió el golpe en su estomago que le dio Sakuragi.
-¡uuhhgg! – gimió Rukawa pero no dejó de besarlo – tu mismo prometiste que después de explicar sobre yaoi y te acostarás en mi cama.
-¡pero no sabía esto! ¡nunca imaginé que me voy a acostar contigo! – gritó el pelirrojo.
-por eso eres un do´hao – dijo el zorro y luego suspiró, se levantó y miró una vez a la cara del pelirrojo, sus mejillas ya estaban rojas.
Hanamichi estaba asustado al mirar como el zorro se quitó la playera, luego esté se acercó a la cama donde estaba el pelirrojo, se colocó encima de él, Sakuragi se sonrojó más violentamente que antes, porque se siente como mujer pues Rukawa se comporta caballero y más varonil, nunca había hecho como este, intentó a apartar del zorro, pero éste agarró las muñecas de las manos del pelirrojo los puso arriba sobre la cabeza y los amarró con la camisa del pelirrojo, Sakuragi se sorprendió.
Rukawa tomó el rostro de Hanamichi y sin aviso besó sus labios, apresándolos y profundizando casi de manera automática. Hasta por la falta de oxígeno sus bocas se separaron con lentitud, dejando un leve hilo de saliva que unía las mismas, siendo al instante lamido por el pelinegro. Acariciándose dulcemente con sus lenguas, entregándose pasivamente al calor que comenzaba a crearse. La mano completa de kitsuine sujetaba la nuca de un do´hao que movía su boca acostumbrándose al juego que sus lenguas llevaban. Tocándose tanto dentro como fuera de la boca, dejando caer saliva por sus comisuras sin preocuparse que esta les ensuciara la barbilla y el cuello.
El pelinegro mordió el labio inferior del pelirrojo, haciéndolo jadear dentro de su boca y elevar la cabeza dejando su cuello propenso a un ataque de la pasional boca del joven de ojos azules, ataque que no tardó en llegar, comenzando por lamer los restos de saliva que caían por el.
El do´hao perdía la mirada en el techo de la habitación, mientras sentía como esa exquisita lengua subía y bajaba por su cuello, pero…
-…Rukawa…-se movió.
-mh…me acabas de romper la inspiración-deja de hacer lo que hacía para ver el rostro del do´hao.
-es que… me haces cosquilla-sonrió ruborizado por la vergüenza del momento.
Entonces el zorro comenzó por morder el lóbulo de la oreja del pelirrojo, sintiendo como el do´hao se comenzaba a excitar, dando pequeños mordiscos al bajar hasta el torso para pasar a besarlo, dejando pequeños chupones. Mientras que su mano la metía por el pantalón para empezar a acariciar el miembro del pelirrojo por encima del bóxer.
-Ru... Rukawa... no hagas eso – dijo avergonzado y sorprendido.
-tranquilízate... todo va a estar bien... te gustará – contestó el zorro quitándole el bóxer al do´hao.
El pelirrojo empezó a participar, aunque se encontraba nervioso al ser su primera vez. El zorro bajaba hasta las tetillas del pelirrojo, chupándolas y mordiéndolas suavemente, haciendo que soltara leves gemidos y continuaba acariciando el sexo de Sakuragi.
Cuando ambos estuvieron totalmente desnudos, Kaede bajó hasta el miembro de Hanamichi para remplazar sus manos, mientras que con una mano jugaba con las tetillas del do´hao y la otra acariciaba la pierna, haciendo que se desespera.
-ahh... Rukawa... hazlo – pedía un desesperado mono pelirrojo y hablando entrecortadamente debido a la excitación del momento.
-hacer... que – decía sensualmente, tratando de que SU monito pelirrojo le rogara.
-ahh... ya sabes... – rogaba - ¡lámamela de una vez!
-como tú ordenes.... - dijo con una sonrisa victoria.
Se metió el miembro del pelirrojo de una sola vez, chupándola lentamente en un comienzo y aumentando la velocidad. El joven de ojos azules lamía la longitud del pelirrojo igual que un niño lamiendo una paleta, saboreando aquel delicioso manjar... El kitsuine se excitaba cada vez más al oír los gemidos del do´hao, que iban en aumento debido al placer que el kitsuine le estaba causando mientras el pelirrojito intentó a soltar sus manos para poder acariciar la espalda del kitsuine. Rukawa se dio cuenta entonces quitó la camisa del do´hao que estaba amarrado sus muñecas..
-aahhh... Ka... Kaede... ya me – gimió Hanamichi, para seguido de esto eyacular en la boca de su rival – gomen – se disculpó una vez recuperada un poco la respiración.
El ojiazul llevó tres dedos a la boca del pelirrojo haciendo que esté último los comenzara a lamer igual que si se trátese de una paleta de helado, en seguida introdujo el primer dedo moviéndolo en círculos y haciendo que el pelirrojo se quejara por la molestia. Así siguió con el segundo y el tercero moviéndolos circularmente sin detenerse hasta que Sakuragi dejó de quejarse y comenzó a soltar pequeños gemiditos debido al placer ocasionado; y cuando creyó haberlo preparado lo suficiente levantó sus piernas para acomodarse; colocando las piernas del pelirrojo en sus hombros e introduciendo lentamente su miembro en la virginal entrada de Hanamichi.
-¡Ah! ¡Du-duele...! – se quejó al sentir el dolor punzante, ya que tres dedos no se comparaban con el miembro de kitsuine, mientras pequeñas lágrimas salían de sus bellos ojos – sá-sácalo...
-Tranquilo... ya pasará... –habló entrecortadamente con los ojos cerrados al sentir una fuerte oleada de placer mientras introducía el miembro en el do´hao.
Cuando logró meter todo su miembro se quedó quieto, besando las lágrimas que aún salían de los ojos de su monito pelirrojo, hasta que finalmente SU do´hao comenzó a mover las caderas para señalarle que ya podía moverse y el dolor poco a poco iba desapareciendo. En un comienzo las embestidas eran lentas, pero luego empezaron a ser rápidas y profundas haciendo que el pelirrojo tuviera que cerrar sus ojos debido al goce que le estaba ocasionando el pelinegro.
-Ahhh... Ka-Kaede – no sabía porque dijo con el nombre.
-Ha-Hanamichi... eres exquisitamente estrecho... -gemía el zorro.
Kaede al ver a Hanamichi sobre él totalmente desnudo, causándole aquella deliciosa sensación, con sus mejillas totalmente sonrojadas, y pequeñas gotas de sudor resbalando por el rostro. El kitsuine rodeó el miembro del do´hao y comenzó a masturbar al pelirrojo al mismo tiempo de las embestidas provocando que el pelirrojo se sintiera en el mismo cielo.
-¡aaaahhh! – dijo el monito pelirrojo llegando el clímax y arqueando su espalda y cerrando los ojos. Y debido al placer otorgado llegó al orgasmo derramándose en la mano del kitsuine.
Kaede también vino en el interior de SU monito pelirrojo y caer encima de él, luego salió del interior de su amado y se acomodó junto a él, rodeándolo por la cintura, acariciando los rojos cabellos y besando las mejillas rojas de este. Hanamichi se quedó inconsciente y se durmió.
Al día siguiente, salió el sol, dándole los buenos días a todo el publico, pero toda la gente se levantara un poco tarde porque es domingo, es día de descanso pero hay algunas personas también trabajarían en supermercados, tiendas de abarrotes, tiendas de ropa y otros demás.
Los rayos de sol entraron a la ventana, hizo a despertar a Hanamichi, quien estaba durmiendo y agotado, apenas abrió los ojos lentamente, se movió un poco pero dejó de salir un pequeño gemido al sentir el dolor de la entrada. Con mucho cuidado, volteó a ver qué está pasando ¿porqué le duele su entrada?... vio a todo el cuarto, no era suyo... se supone de quién rayos es este cuarto? Intentó a recordar qué sucedió ayer porque casi no se recordaba, cuando abrió los ojos como sorprendidos, pues se dio cuenta que su cuerpo estaba desnudo y abrazó rápidamente con sus brazos su cuerpo, ya después unos segunditos, se quedó más que sorprendidos... claro recordó ayer pasó la noche con el kitsuine, agachó la cabeza y vio unas gotas de sangre en la cama.
-ay... no puede ser... tuve relaciones sexuales con kitsuine... era mi primera vez... – susurró Hana cansado y con las manos taparon la cara – perdí mi virginidad...
-¿es tu primera vez? – preguntó Rukawa después salir del baño.
Hanamichi se sobresaltó y gritó un poco por el dolor de su entrada.
-aaggghhh – cerró los ojos - ¡kitsuine, no me asustes!
-eres un do´hao – dijo el zorro.
-ca-cállate! – habló con la voz casi alta.
-bien.
-bien qué? – preguntó confundido.
-por eso dije que eres un torpe –
-cállate, kitsuine – susurró el pelirrojo con las mejillas rosadas- ... ahora entiendo qué es el yaoi...
-te gusto? – preguntó con curiosidad.
Hanamichi se sonrojó violentamente, claro, no dudó que esta noche fue increíble... pero no quería contestar porque le da pena o vergüenza...
-oh, vamos – dijo el zorro acercándose al pelirrojo, quien estaba nervioso.
-¿q-qué piensas hacer? Al-alejate de mí – pidió Hana tímido.
-¿qué? ¿por qué? ¿eres tímido cuando te acerco? – preguntó divertido.
-deja de decir estúpid- no terminó la frase porque Kaede lo interrumpió con el beso – mmhhhfff – pero ese beso era dulce y tierno, entonces correspondió el beso del zorrito y lo abrazó al cuello del kitsuine – Kaede…
-¿mhh?
-e-estoy confundido… - confesó el pelirrojo.
-¿confundido?... sí lo sé… escuché decir que tu ibas a declarar a Haruko… ahora estás confundido porque me parece que ya estás enamoradito de mí, jejeje
-¡Tonto! – le dio una cachetada pero no fuerte sino suave para no hacer enfadar a su ahora zorrito – no me refiero esto… no sé… Kaede, ¿tu me amas? – preguntó tímido.
-Desde el primer día que conocimos, me enamoré de ti… - confesó con la mirada tierna.
-¿q-qué? ¿pe-pero porque no me dijiste antes? – preguntó sorprendido.
-no podía hacer nada… por que tu estabas enamorado de la hermana del Akagui.
-ah… discúlpame por no darme cuenta antes… - dijo Hana y se sintió excitado otra vez al sentir la mano volvió a acariciar su miembro.
-no hay que nada… porque te amo, do´hao – dijo y luego lo besó con mucha pasión.
-Y-yo también te amo, kitsuine – correspondió el beso.
Volvieron a hacer el amor una y otra vez…
Después unos años, ambos jóvenes eran parejas, y eran de hecho muy felices, hasta vivieron juntos, se casaron y tuvieron zorritos y monitos pelirrojitos (jujujuju).
FIN