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Gaaracienta por chibiichigo

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Notas del fanfic:

DISCLAIMER: Naruto es propiedad de Masashi Kishimoto y yo sólo uso a sus personajes para que todos puedan experimentar la frustración que yo sentí al ver que la mitad de los fanfics se repiten...

Notas del capitulo:

Bien... aquí lo explicaré todo de una buena vez porque hoy vi algo que me molestó mucho: pasaba y pasaba las hojas de resumenes de la página y tanto en fics originales como de naruto (sobretodo de naruto) me di cuenta de que casi todos los fics tienen el complejo de la Cenicienta:

El uke es un pobre infeliz por el cual nadie da un centavo hasta que llega el seme todopoderoso y lo rescata. Entre ellos nace un amor extraño y retorcido y finalmente, después de la aparición de villanos estúpidos viven felices para siempre. 

Ese es el motivo por el cual este fic exista. Me enfadé y estaba aburrida y con ganas de expresarme (últimamente estoy demasiado borde) y de dar mi crítica de manera estúpida para que las personas que tienen la misma impresió que yo sobre lo repetitivo y ceniciento de los fanfics se rían...y los que solamente estén de flojos también xDDD.

 

 

 

Había una vez un chico pelirrojo que vivía con dos gorilas en una mansión, y al no tener siquiera la educación básica necesaria como para emanciparse – ni tampoco el deseo de hacerlo, porque como buen obrero gustaba de ser explotado – se dedicaba día con día a dejar la casa impecable.  

No es que el chico tuviera muy buen carácter, ni mucho menos que disfrutara su condición de seudo-empleado doméstico – cabe aclarar que era tratado como un esclavo, pues no recibía sueldo tampoco – sin embargo un trastorno terrible en su etapa anal* lo había vuelto un obsesivo-compulsivo, así como un extraño trastorno esquizofrénico y alucinógeno que lo había convertido en el mejor amigo de un mapache salvaje y gordo que se llamaba Shukaku.

La vida rutinaria de Gaara consistía en dejar impecable  la mansión en la que residía y ver, tan pronto caía la noche, a sus dos hermanastros ensuciar todo lo que había logrado. Así, antes de dormir le rezaba a quien lo escuchara que los matase y los destazase antes de que él no pudiera reprimirse y lo hiciera. Fuera de eso, algunas veces jugaba a las escondidas o cosía ropa para el mapache salvaje y gordo mientras maldecía por lo bajo a todo lo existente e intentando recordar maldecir cosas que habían sido o que todavía no eran.

Un día, mientras Gaara barría, limpiaba y decoraba la casa con montículos de arena con sangre por la casa, llegó una postal que decía: EL PRINCIPE SASUKE ORGANIZA UNA REUNIÓN, TODO EL REINO ESTÁ INVITADO.  Tan pronto la leyó, sonrió con sorna: ¿qué no el príncipe pudo haber transmitido por televisión? De que había gente poco práctica, la había.

Sin esperar nada, llevó la postal a sus hermanastros que se encontraban tomando, lanzando dardos y rompiendo los tímpanos ajenos en un karaoke.

-Llegó una postal del príncipe- anunció por lo bajo, sabiendo que sería ignorado. Y lo fue.  

Aburrido, dejó la postal por ahí y fue a seguir haciendo sus cosas. Él no tenía tiempo como para estar perdiéndolo.

Cuando por fin sus hermanastros se dieron cuenta, ¡le reclamaron el no decirles! Pero Gaara simplemente se cruzó de brazos y les dijo

-Humm.

Luego de eso, continuó limpiando e ignorándolos mientras mentalmente deseaba terminar con su existencia y reafirmarse él como dueño y señor del planeta. Sí, la megalomanía y el sadismo también había sido parte de un trastorno de etapas psicosexuales, pero como tenía un grande y puro corazón de piedra volcánica, se reprimió. Finalmente, a él le tenía sin cuidado ir a la fiesta del príncipe o no…

 

Por la noche se le apareció un hada. Era rosa y tenía una varita que echaba chispitas y le juró que lo convertiría en una bella mariposa para el baile. Gaara, que no quería ir se limitó a cruzarse de brazos y decir.

-Humm

Y el hada, que no entendió o no tomó interés por el sonido, lo transformó en un chico guapo y elegante antes de llevarlo casi a rastras al baile mientras él juraba que afirmaría su existencia matando a todos los habitantes del reino.

 

En el baile se encontró a sus hermanos, pero como estaban ebrios lo confundieron con alguien más y no le dieron importancia. Finalmente, los villanos en todo cuento de hadas son tontos y cometen errores que la gente con un coeficiente intelectual promedio no tendría.  El taheño vio a las personas en el baile, y al caminar hacia el balcón se golpeó con un hombre alto, varonil, fuerte y que quería vengar a su clan.

-Tsk- dijo el moreno.

-Hummm- dijo el pelirrojo.

Y ambos se miraron durante mucho tiempo, esperando a ver quién parpadeaba primero cuando la música empezó a sonar y ambos comenzaron a moverse al compás, siendo el centro de atracción de todos los personajes de relleno que resultan irrelevantes e increíblemente siendo ignorados por los villanos de esta historia.

El reloj sonó a la media noche, y Gaara, sabiendo que  el hechizo se iba a romper, salió corriendo del castillo, pero tropezó y dejó su zapato deportivo rojo ahí. Luego, al llegar a su casa, juró matar al hada que había decidido tramposamente que el hechizo se acabara  media hora después de que abrieran la pista. ¡Seguro que había sido abogada!

Al día siguiente, el príncipe tocó la puerta y Gaara, todo lleno de harapos y mugre lo atendió:

-Hummm

-Tsssssk

Posteriormente, lo pasó a la sala y llamó a sus hermanos.

-¿Qué desea?- preguntaron ambos, recobrando la sobriedad de golpe.

-El príncipe quiere probar este zapato que se cayó ayer en todos los habitantes porque ayer alguien lo tiró- habló el intérprete del moreno.

-Seguro que es mío- exclamó Temari, pero en el instante que se lo estaba probando, el lacayo vocero habló:

-Lo siento…el príncipe es gay.

Entonces. Fue el turno de Kankuro, pero no le quedó.

Indiferente y poniendo cara de que eso no le importaba un huevo, el príncipe se dirigió a la salida, donde se tropezó con Gaara, que había visto una mancha en el piso.

-Hummm- exclamó molesto.

-Tskkk- devolvió en una muestra de que no le intimidaba.

Después de unos minutos, ambos hombres se dispusieron a hablar como las personas civilizadas que eran:

-Mataré a todos para reafirmar mi existencia.

-Vengaré a todo mi clan.

Eso fue todo lo que necesitaban decirse antes de darse cuenta de que eran el uno para el otro y que el amor había brotado. El príncipe decidió que era una pérdida de tiempo ir de casa en casa cual niña exploradora para probar zapatos y se casó con Gaara. Luego de eso, Gaara mató a todo ser vivo que encontró y reafirmó su existencia, mientras que Sasuke vengó a su clan.

Y como en todo cuento: vivieron felices para siempre.

 

Etapa anal¨: es la segunda etapa del desarrollo psicosexual marcado por Sigmund Freud.

Notas finales:

Muy bien, espero que les haya gustado... Espero ansiosa sus reviews xDDDDD.

Kissus y ojalá este extraño cuento de hadas haya sido de su agrado, pues es sólo mi manera de decir:

 

DEJEN DE PONER EL ESQUEMA DE UKE POBRE, TRISTE Y ABANDONAOD POR TODOS...PORFA

 

Cualquier aclaración sobre esta historia por favor lean el chibi livejounal

kissus,

c.


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