Una semana atrás, para ser mas exacto, un mes atrás Tezuka comenzó a evadirlo sin razón o motivo, dejaron de frecuentarse y hasta de hablarse. El castaño comenzó a decaer en depresión debido a ello, eran pareja y después de todo debían estar juntos durante algunas horas al día o a la semana, pero eso quedo en la nada.
En día, el día que tendría que ser el mas feliz de su vida o al menos ser un buen día, parecía que iba a terminar en lluvia y no era por el pronostico del tiempo sino por que al parecer el de lentes no estaba de humor. Lo que llevo a Fuji a saber eso fue por el tono de vos que uso para citarlo y porque lo llamo por su apellido.
Flash Back
El tensai estaba jugando un partido de dobles con Eiji contra Momo y Echizen, cosa de ellos, ya que Oishi estaba mas ocupado dándole asistencia a los chicos de primer año y no podía estar con Eiji, claro el capitán de esas cosas no participaba, por alguna extraña razón no quería saber nada con los dobles de tenis, Fuji muchas veces le pidió jugar juntos pero este le contesto cambiando el tema de conversación para no serle grosero, mientras en otro lado de las canchas Inui y Kaidoh entrenaban como siempre, Kawamura se preparaba para un partido contra algunos chicos de segundo que le habían pedido de favor enfrentarse a ellos.
Después del partido de dobles Tezuka se acerco a Fuji y le dijo- Fuji, espérame en los vestuarios después de las prácticas.
-Bueno- respondió algo nervioso. Tezuka le había llamado por su apellido lo que era indicio que no andaba nada bien las cosas.
Fin Flash Back.
El de lentes entro apresurado al lugar, miro a Fuji con seriedad y se acerco- Vamos afuera.
-Si señor- dijo con desanimó.
-¿Guardaste todas tus cosas?- le pregunto viendo el morral de Fuji.
-Si.
El de lentes tomo su cosas y se encamino a la puerta- en la banca de las canchas- dijo marcándole a donde ir al castaño
Syusuke se levanto del banco y se acerco al de lentes para besarlo, pero este lo alejo rápidamente, las cosas no iban bien desde ese momento, Tezuka jamás evadía en un beso no importase en que lugar se dará, menos que fuera cuando estaban los dos solos.
Salieron del lugar con lentitud, Syusuke caminaba más lento que de costumbre, el rubio lo miro sentarse en la banca y poner sus manos en las piernas, conocía mejor que nadie esa expresión, el tensai tenia miedo, se sentó a su lado y se quedo callado.
-Bien- dijo el castaño sacando el incomodo silencio.
-Bueno, yo quiero…-dijo el rubio mirando los ojos llorosos del castaño.
-Terminar…-atino a decir el castaño levantándose a toda prisa del lugar para salir corriendo.
-Fuji- dijo levantándose de la banca. Apresuradamente tomo sus cosas y corrió tras el.
Syusuke llego hasta donde sus pies el dieron, a pesar que el había dicho las palabra, estaba seguro que esa era la intención de Tezuka. Había llegado ni mas ni menos que al mirador donde el y Tezuka se habían besado viendo las estrellas mas de una ves, se acerco al barandal y miro para bajo, si el lugar estaba lo suficientemente alto como para terminar con su vida en un segundo sobre el una pequeña montaña, si se tiraba rodaría varios metros abajo sobre piedras muy filosas de por si y caería en el agua del mar, donde seguramente se hundiría en pocos segundos al no saber nadar. Se subió al barandal sin pensarlo dos veces, su corazón se había roto en mil y un pedazos, estaba deprimido y ya no quería vivir para el día de mañana seguir viendo a su capitán el cual lo trataría más frialdad seguramente.
-No- dijo el rubio tomándolo de la cintura- ¿Por qué nunca me dejas terminar de hablar?- pregunto molesto deslizándolo para la parte segura donde estaba el, luego lo paro delante suyo y le dijo con mas enfado, sacando todo su autocontrol de lado- ¿Cómo se te ocurre hacer semejante cosa? ¿Cómo puedes pensar en hacer algo así? Fuji no me mires con cara de niño de cinco años apunto de llorar sabes que no me compras con eso ¿Por qué siempre me llevas la contraria? ¿Por qué? Siempre lo mismo, malinterpretas las cosas.
-Solo me llamas por mi apellido cuando estas enfadado- se justifico mirando el suelo rompiendo en llanto-solo dime una cosa ¿Por qué?
-¿Por qué que?- pregunto sin entender el de lentes.
- ¿Por qué quieres terminar conmigo?
-¿YO TERMINAR CONTIGO?- le grito enfadado- primero muerto- murmuro mirándolo.
-¿Qué?
- Lo que escuchas, antes que terminar contigo primero me muero… ¿Cómo se te ocurre pensar en semejante cosa?- dijo abrazándolo con temor de perderlo.
-Solo me llamas Fuji cuando estas enojado o cuando tienes que decirme cosas seriamente.
-Tu lo has dicho, tenia algo serio que decirte, ¿Por qué pensaste esas cosas?- dijo tomándole el rostro con ambas manos- dime ¿Por qué pensaste eso?
-Hace un mes que no me hablas ni nada, ni siquiera quieres pasar tiempo conmigo.
-Dile eso al brujo de mi padre, desde que se entero hace un mes que salíamos no me dejo hacer otra cosa después de la escuela.
- No me respondes mensajes de celular.
- Uno, lo gaste la primera semana del mes pasado enviándote mensajes a ti, segundo mi padre me confisco el celular y tercero no me dejan usar el teléfono de la casa, porque saben que te llamare.
- ¿Los email?
- Me sacaron la computadora de mi habitación.
- En la escuela no me hablas.
-Papa tiene a un amigo que es profesor y le pidió que me mantuviera alejado de ti, le he hecho muchos favores esta semana bajando algunas cajas al sótano- le dijo pasando su mano con lentitud por su mejilla- te extrañe mucho Syusuke.
Syusuke instintivamente lo abraso con fuerza, si las cosas que le dijo el de lentes eran ciertas, no tenia nada que temer, nunca se separarían ante eso, pero aun tenia una pregunta, se seco con la manga de su camisa las lagrimas y lo miro a los ojos- Dime una cosa ¿Qué es lo que tenias que decirme? Comenzaba con que tú querías...
-Invitarte a cenar a mi casa, mi padre dice que intentara…aceptarte, pero te quiere preguntar algunas cosas, por las dudas no te me separes ¿Quieres ir?
-Claro que si- dijo abrazándolo- Te extrañe mucho.
-Yo también, procuremos que esto no vuelva a pasar, ¿Cómo? No vuelvas a especular cosas, escucha lo que tengo que decir antes ¿Vale?
-Vale- dijo sonriente- Dime, ¿Qué cocinará de rico tu mamá?
-No tengo la menor idea, dijo que seria sorpresa- dijo el serio dándole la mano- vamos a mi casa, tengo un conjunto tuyo para que puedas estar cómodo Syu.
-¿Cuál?- pregunto sonriente.
-El pantalón blanco, la camisa celeste y el chaleco blanco- dijo comenzando a caminar.
-Mi ropa favorita- sonrió alegre aforrándose con fuerza al brazo izquierdo el de lentes.
-Hey, hey, no hagas eso- dijo con enfado.
-¿Por qué?- pregunto.
-Terminaras rompiéndome mas el brazo de lo que ya esta roto y no quiero pasar por la misma rehabilitación, es muy molesta- dijo enfadado.
-Está bien- se separo unos escasos centímetros.
La casa del de lentes era una de las mas grandes de la cuadra del barrio donde vivía, un barrio de gente que no era ni de clase media ni de clase alta, sino entre ambas, ni media ni baja ni alta. La familia Tezuka era una familia bien acomodada, que no pasaba por malos momentos económicos debido al trabajo del hombre de la casa, el cual viajaba constantemente para solventar los gastos de la familia.
La familia tezuka estaba conformada por los padres Kunihara y Ayana, el padre trabajador y la ama de casa, el abuelo Kunikazu, el sabio mayor, ex oficial de policía que era maestro en un dojo de kendo de la policía, que a pesar de sus años tenia un hermoso jardín en el pateo de atrás en la casa y el hijo prodigioso, excelente tenista, alumno y presidente del consejo de estudiantes de la escuela Kunimitsu, una gran familia muy destacada.
El de lentes entro a la casa acompañado del castaño estaba seguro que ese día las cosas no irían del todo bien con su familia, que su padre le allá pedido llevar a Fuji a casa ya era un problema, debido a que un mes atrás, no tomo nada bien las cosas…
-Ya volví- anuncio al entrar el miembro mas chico de la casa.
-Tardaste mucho- dijo Kunihara entrando al pequeño pasillo de la entrada- eso lo explica- dijo mirado al castaño con una mirada fuerte.
-Lamento mucho haberte tardado, vamos Syusuke hay que ir ponerse cómodos.
-Si- dijo aforrándose con temor a su novio.
-No se tarden, la cena estará servida en cinco minutos- les dijo el hombre rubio a ambos que subían evadiéndolo.
Tardaron algunos minutos en cambiarse la ropa del colegio y ponerse cómodos para luego bajar y comenzar a cenar.
-¿Por qué te tardaste?- pregunto Kunihara a su hijo que se acababa de sentar a cenar.
-Un pequeño mal entendido entre Syusuke y yo, nada grave- dijo sin mirarlo el de lentes.
-Perdonen mi pregunta- dijo el castaño- ¿Qué es lo que cenamos? Solo para saber.
- Un especial mió, inventando por mí- dijo Ayana.
-¿Cómo se llama señora Tezuka?- pregunto el castaño tomando sus cubiertos.
-Ayana- respondió la mujer mirando muy detenidamente al muchacho.
-Estamos cenando la sorpresa especial de Ayana-san- dijo sonriente el castaño llevándose un gran bocado a su boca- y es esta exquisito.
-Gracias, desearía que mis familiares pensaran igual- dijo viendo a sus tres hombres.
-No es que no me guste, pero no se que tiene- se justifico el mayor de la casa.
-Está bueno- dijo el marido.
-Madre, Syusuke tiene un don para las cosas que mete a su boca, todo le gusta-dijo el de lentes.
-No todo, los jugos con vinagre me caen pesados- sonrió sonrojado el castaño.
-Además su lengua detecta todo tipo de ingredientes, su lengua es muy mordaz- dijo el de lentes, muy orgulloso de su novio.
-No es la gran cosa- dijo el castaño sonrojado.
-Ahora que estamos mas comunicativos- dijo Kunihara pasándose por la boca una servilleta- ¿Te llamas Syusuke cierto?
-Si señor- respondió dejando aun lado de sus cubiertos.
- ¿Cuántos años tienes?
-Yo…bueno tengo dieciocho años.
-¿Cuándo es tu cumpleaños?
-El veintinueve de febrero señor, nací en un año bisiesto.
-¿Qué estudiaras después de la secundaria?
-Aun no se.
-¿Cómo que no sabes?- pregunto con algo de enfado el padre de familia- el algunos meses te graduaras, debes tener una idea.
-No es que no sepa que hacer, no me decido, estoy entre estudiar para fotógrafo, es un pasatiempo que tengo sacando fotos en todo momento y lugar, puedo seguir jardinería, tengo una afición con unos cactus que tengo en mi casa, puedo seguir mi deporte y ser tenista profesional o bien medico, no me decido aun, Kunimitsu dijo que tome con calma mi decisión porque lo que decida afecta directamente tanto contra mi futuro como con el suyo ya que somos pareja.
-¿Qué le has aconsejado hijo?- pregunto el abuelo.
- Que deje sus pasatiempos de lado, es muy buen fotógrafo, no lo dudo y como jardinero no he visto uno igual, pero prefiero que tenga un oficio que sea fijo y por sobretodo que le guste.
-Por eso aun no me decido, son tantas cosas que aun quiero ser y me gustarían…- dijo en un tono pensante, era cierto aun no tomaba decisiones fijas sobre su futuro y eso lo afligía un poco.
- Cambiando de tema ¿Cómo esta conformada tu familia?- pregunto Kunihara tomando sus cubiertos para seguir comiendo.
-Por mis padres, mi hermana mayor y mi hermano menor.
-¿Mascotas?- pregunto llevándose un bocado a la boca.
-No señor, lamentablemente mi padre es alérgico al pelo de animal.
-¿Tienes amigos?
-Varios, de varias escuelas.
-¿Eres algo del chico de pelo tirando a gris?-
-Gracias a Dios no- dijo suspirando- Dios me libre si lo fuera.
-Habla de Atobe no de Saeki.
-Ya sabia, alguien con pelo tirando a gris que nadie le agrada, señor ore-sama, señor rey de los monos.
-Fuji- le dijo molesto.
-Lo siento- miro al suelo.
-Cambiando de tema- Dijo el abuelo- ¿Cuánto tiempo llevan? Veo que es avanzada la cosa.
-Poco más de tres años señor- respondió Syusuke mirando al suelo.
- ¿Han tenido relaciones?- pregunto Kunihara mirando fijamente a Fuji.
-Bueno… señor Tezuka…a…- dijo Fuji sonrojado.
El de lentes le tomo la mano por debajo de la mesa y decidió responder por el- No padre, aun es muy pronto para nosotros, sabes que lo significa hacer eso y aun no queremos experimentarlo hasta que no nos sintamos seguros.
-¿Tienes fiebre o qué? ¿Qué te duele? ¿Te sientes bien? ¿No deliras verdad?- pregunto el castaño llevando su mano a la cabeza del rubio a su lado.
-Dijo lo mismo hijo- dijo Ayana- jamás pensé que saldrían esas palabras de ti.
-Es cierto, Syu y yo creemos que somos demasiado jóvenes para eso, esperaremos hasta tener casa propia.
-Iban a hacerlo, cuando los agarre a los dos- dijo Kunihara mirando a ambos fijamente- si no mal recuerdo…Syusuke estaba en la cama recostado, totalmente desnudo y tu hijo estabas sobre el...solo con la ropa interior puesta.
-Syusuke también estaba con la ropa interior puesta padre- agrego el de lente- usa colores claros que se confunde con su piel.
-Entonces los agarre con las manos en la masa.
-Si señor- dijo sonrojado el castaño.
-No te sonrojes muchacho, ósea que hace un mes que lo intentaron pero como yo anduve metido a mi manera no pudieron.
-Tu lo has dicho padre.
-Otra cosa… ¿Eres bueno en el tenis?- pregunto Kunihara ahora intrigado.
-Me dicen el tensai.
-Interesante, ¿quieres jugar un partido en la cancha de atrás? Un amistoso, al mejor de un set, mis huesos no soportaran más.
-Bueno, no se…mitsu ¿tu que dices?
-A ti te pregunto no a el- dijo el padre de Tezuka con desconfianza.
-Es que el me dice si o no cuando me retan a un partido, por mi salud mas que nada.
-Diviértete- le dijo sin mirarlo el de lentes.
-Muy bien jugare con usted señor Tezuka.
-Después de cenar jugaremos- finalizo la charla el mayor.
Algunos minutos después estaban toda la familia Tezuka en las canchas del pateo trasero de la casa, una canchas donde Kunikazu, Kunihara y Kunimitsu de ves en cuando jugaban entre si para divertirse.
El padre de Tezuka estaba vestido con unos pantalones corto blancos y una remera blanca, Syusuke se había puesto una remera blanca con franjas celestes y un pantalón blanco que el había dejado en la casa de Tezuka por x razones.
La raqueta del padre de Tezuka era una igual a la de su hijo, por lo que el tensai dedujo que era muy posible que fuera la de su mitsu o una igual, pero más se daba para la primera opción que la segunda.
-¿Derecho o revés?- pregunto Kunihara en la red.
- Revés señor- dijo el tensai tomando su raqueta.
Kunihara hizo girara en el suelo su raqueta hasta que parara, la cual callo de derecho- Muy bien, te doy el saque quiero esta parte de la cancha.
-Esta bien señor Tezuka- dijo el castaño.
Syusuke miro el clima, no era un día ventoso, pero había algo de viento, solo tenia que esperar que una pequeña ráfaga se diera para hacer uno de sus contraataques, le daba mucha mas curiosidad saber a que se enfrentaría al jugar un partido contra el padre de Tezuka.
El partido duro menos tiempo del que Fuji previo, cuando se dio cuenta Kunihara le había ganado seis a cero y el no pudo ni moverse, a pesar que hizo su saque invisible y sus tres contraataques el padre de su pareja le devolvió cada golpe sin ningún problema. Tezuka desde lejos lo miro decaído y fue a las canchas, se saco su chamarra y se la puso a Fuji y con lentitud lo saco del campo.
-Kuni…
-Lo has hecho muy bien- le dijo en susurro- tranquilo, estoy muy orgulloso de ti en todo lo que hiciste, por mi jugaste de maravilla.
-Perdí- dijo mirando al suelo.
-Pero te esforzaste- le dijo abrazándolo con cariño- vamos a mi cuarto.
-Tiene muy buen brazo muchacho- sonrió Kunihara hablando saliendo de la cancha- Estas admitido, no hagan mucho ruido y usen preservativo, pero mas tarde, cuando todo mundo duerma.
-Si padre- dijo Kunimitsu mirando sonriente a su padre- gracias.
-Vallan a hacer tareas o ver televisión, todavía falta para la hora de dormir- sonrió Kunikazu.
-Creo que hay un documental de historia en la televisión ¿Quieren verlo?- Sugirió sonrientemente Ayana.
-Está bien ¿quieres verlo Syu?
-Contigo podría ver hasta la película mas aburrida de la historia- lo Abrazo el castaño con cariño.
-Ese es mi suke- dijo sonriendo mientras lo abrazaba posesivamente de la cintura.
El documental se trataba sobre la segunda guerra mundial, algo sobre el nazismo y los judíos muertos ante el, además que nombraba otras cosas que muy pocos al parecer no saben y que dejo a Syusuke con miedo.
Terminado el documental fueron a dormir, Syusuke estaba algo “traumado” e impresionado por lo que vio. Tezuka observo que estaba muy callado y lo abrazo llevándolo a la cama.
-Mitsu- dijo con timidez- ese tipo era una bestia, mato hombres, mujeres y niños y como poco no solo judíos, sino quienes estaban en su contra y eran diferentes a lo que era la vida normal…pobres…
-Lo dices por los homosexuales que les toco vivir en el momento equivocado en el lugar equivocado- dijo el de lentes mientras lo acomodaba en la cama.
-Si, y los gemelos a los que les metían inyecciones y los hacían morir frente a frente, experimentaban con vidas humanas y no les importaba.
-Déjame anotar eso, tener gemelos en un futuro- dijo sonriéndole.
-Creo que será difícil hallar gemelos- dijo sonriendo.
-No se sabe Suke- dijo acomodándose a su lado mientras abría la cama para dormir.
- Hay personas tan malas.
-Pero hay buenas también- le interrumpió dándole un beso- ahora a dormir que mañana será un largo día, recuerda que hay partidos importantes.
-Ya lo se, mañana nos enfrentamos al Rikkai en un partido amistoso, ansió ver a Seii-chan y a Geni-chan.
-¿desde cuando los llamas así?- dijo suspendido.
-A seiichi, desde hace como un año, el me deja decirle así y a Sanada, jamás se lo he dicho, solo una y se sonrojo.
Tezuka rio con las ocurrencias de su novio, le dio un suave beso en los labios y luego lo abrazo para dormirlo, lo amaba como a nada en su mundo, el tiempo que habían pasado lejos por culpa de su padre les había afectado a ambos, pero ya paso, y ahora solo contaba el hecho que la familia de Tezuka aceptaba a Fuji como parte de ella así también como la relación que ambos mantenían y quizás en un futuro los caprichos de ambos.