Hola mi nombre es Fuji Syusuke, tengo dieciocho años y estoy cursando el primer año de la carrera de fotografía de la universidad de Seigaku. Yo tenía una vida normal, hasta que el día veinte de febrero, por cosas del destino yo pase a invocar al rey de los vampiros.
Ese día yo me juntaría con mis mejores amigos uno de ellos se llamaba Yukimura Seichi a quien conozco de mi infancia y desde que nos conocimos hasta el día de hoy somos amigos, el esta estudiando kinesiología en la universidad del Rikaidai. Mi otro amigo se llama Kikumaru Eiji a el conozco desde de la secundaria, somos amigos desde esa época hasta el día de hoy y el estudia pedagogía en deportes en la misma universidad que yo.
Por cosas del destino ninguno de los tres tenia clases, así que nos juntaríamos esa mañana para ir una feria internacional que estaba por la semana en la ciudad.
Esa mañana me desperté después que mi despertador comenzara a sonar como un loco, lo tome y lo apague, luego de haberlo apagado me baje de la cama y fui a la cocina para hacerme algo de comer, ya que vivo solo.
Al estar en la cocina comencé a prepararme un desayuno el cual consintió en unas tostadas con mantequilla, una tasa de café con leche y una manzana, después de comer salí de esta y me fui al baño donde me bañe. Al terminar el baño me fui a mi pieza donde me seque y vestí y al estar listo salí de mi departamento.
Camine lentamente hasta que llegue a la feria donde ya me estaban esperando mis amigos, al verlos me encamine a ellos y…
- Hola chicos
- Hola
- ¿Cómo están?- pregunte sonriendo
- Bien y ¿tu?- me dicen los dos al mismo tiempo
- Bien
- Pues vamos a la feria nya – dice Eiji gritando
- Si – decimos los tres con dando un puñetazo al cielo
La feria tenía varias carpas donde vendían anillos, pulseras, collares, aros, figuras de recuerdos, cuadros, pinturas, cosas exóticas, peluches, cosas antiguas y libros.
Yo me acerque a la de los libros y vi uno que me llamo mucho la atención ya que era negro y tenia letras rojas, así que lo tome y lo compre. Luego de comprarlo me junte con mis amigos y…
- ¿Qué se compraron chicos?- les pregunte curioso
- Yo me compre pinturas y recuerdos- dice Seichi con una sonrisa
- Y yo ositos de peluche nya- dice Eiji también con una sonrisa
- Pues yo me compre un libro – digo como si nada
- ¿Un libro?- me preguntaron sorprendidos
- Si
- Jajaja eso no es muy común en ti syu-chan- dijo Seichi riéndose
- Si tienes razón sei-chan – le dije sonriendo
- Bueno ¿Qué hacemos ahora nya?- pregunto Eiji con curiosidad
- Pues yo me tengo que ir hacer una diligencias – dijo Seichi algo serio
- Y yo tengo que ir a estudiar la próxima semana tengo certamen – dije yo suspirando
- Entonces yo iré a la tienda de mascotas nya – dice Eiji con una mini sonrisa
- Nos vemos – decimos los tres al mismo tiempo
Luego de eso me volví a mi departamento, donde tome el libro y me senté en el sofá y comencé a leerlo, pero antes que pudiera continuar con mi lectura el libro decía que dijera una oración en voz alta o si no, no podía seguir leyendo. Así que tome aire y…
- Oscuridad y luz, tierra y aire, infierno y cielo, guerra y paz, que hagan que el aparezca – dije con una voz fuerte y clara
En ese momento todo comenzó a ponerse negro y oscuro, yo no podía ver ni la palma de mi mano, lo único que podía ver era el libro del cual salio un remolino negro donde se fue desasiendo y delante de mi apareció un hombre pero no era un humano ya que tenia orejas puntiagudas, garras, colmillos, ojos rojos y a las negras y…
- ¿Quién eres tú?- pregunte asustado
- Yo soy Kunimitsu el rey de los vampiros y ¿tu quien eres humano?- me dice seriamente
- Yo soy Fuji Syusuke
- Pues es un placer concerté – dice haciendo una clase de reverenda
- Igualmente, espere un minuto los vampiros no exciten – dije seguro de mi mismo
- Si eximimos me estas viendo justo al frente de ti- me dice mas serio
- No es verdad, tu no eres real – digo cerrando mis ojos como fuerza
- Crees que cerrando tus ojos yo voy a desaparecer – me dice acercándose a mi
- Si
- Jajaja, no me hagas reír – me dice pasando unas de sus manos por mis hombros
- Entonces, si eres real – digo mirándolo fijamente
- Por supuesto que si, bueno vamos al grano, ¿Para que me invocaste?- me dice serio
- ¿Qué yo que?- le pregunte sorprendido
- ¿Para que me invocaste?- me volvió hacer la misma pregunta
- Yo no hice eso – dije molesto
- Si lo hiciste – me dijo serio
- Y ¿Cómo hice eso?- le pregunte confundido
- Cuando leíste esa oración en voz alta – me dijo mirándome fijamente
- Yo no sabia que era para invocarte – dije mirando el piso
- Ahora lo sabes
- Si y ¿Qué supone que debo con usted?- le pregunte confundido
- Pues tienes derecho a una petición pero te costara un precio – me dijo cursándose de brazos
- ¿Qué tipo de petición puedo hacer?- le pregunte curioso
- Matar a alguien – me dice como si hablara del clima
- ¿Solo esa?- le pregunte con algo de ilusión
- Si
- Y ¿Cuál es el precio que debo pagar?- le pregunte con intriga
- Alojo y comida gratis para mi – me dijo como si nada
- De acuerdo acepto – dije suspirando
- Bien a quien ¿quieres que mate?- me dice seriamente
- Aun no lo se, me darías un tiempo para pensarlo – le dije mientras me corría una gotita en la cien
- Ok, te doy un año, por mientras me quedare en esta habitación –me dice y se va volando a la pieza
- Ok
Después de eso me fui a mi pieza y ahora que seria de mí, que tengo que convivir con un vampiro, el cual puede matar en cualquier momento, pobre de mí, seguí pensando hasta que el sueño me venció y me quede profundamente dormido.
Continuara
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