Tiene unos años desde que lo conocí, mi padre me obligo como siempre a fraternizar con el, el hijo de el director Souh que acababa de llegar de Francia. Me pidió que fuera su amigo, que prácticamente me convirtiera en su sombra. Y así lo hice, desde el primer día me pidió que le mostrara Japón, viajamos por muchos lugares, compartiendo miles de momentos. Después formamos juntos el Host club, recluimos a los chicos mas guapos y populares del instituto. …ramos felices como siempre, viviendo en nuestra mentira de ser mama y papa. Hasta que… llego ella… Haruhi desde un principio te dedicaste a protegerla, a quererla, incluso me dejabas tirado de lado solo por verla a ella. Fue entonces cuando entendí que lo nuestro no era mas que una simple amistad, que nunca debió pasar de eso… así que cuando mi padre me dijo que tenia que casarme con la joven Hizaki-chan (sii ok se vale soñar… XD) no me quedo la menor duda de que era lo correcto. Si tu no podías amarme como yo lo hacia, si no podía tocar tu piel, si no podía ser tu dueño, entonces nadie mas ocuparía mi corazón, entonces lo congelaría por siempre… pero eso no sucedió… maldito el día en el que Haruhi y los gemelos fueron a rescatarte antes de que te fueras a Francia y abandonaras el Host. Llegaste a la escuela donde todos te esperaban con ansias, al verme corriste a abrazarme.
-Kyouya… pensé que no te volvería a ver… pensé que tendría que irme a Francia para siempre, pero como siempre encontraste la solución indicada… arigatou.
-vamos tamaki, sabes que nunca te dejaría solo…- dije mientras acariciaba tu cabello que estaba tiernamente reposado en mi hombro.
-señor que bueno que se quedo en el club.- dijeron los gemelos con una sonrisa de triunfo en su rostro.
-gracias a todos ustedes estoy aquí de vuelta!
-bueno eso debe celebrarse con pasteles!!- je como siempre el pequeño Honey, todos se reunieron en la mesa de los pasteles, pero tu te quedaste viendo el horizonte a través de el ventanal.
-que pasa tamaki?
-etto… solo que me di cuenta de una verdad que quise negarme a mi mismo desde hace años. Ven vamos a hablar a solas.- caminamos juntos hasta uno de los salones cercanos, nos sentamos en el sillón rojo.
-Kyouya… hay algo que quiero decirte yo… desde la primera vez que te vi me… enamore de ti…yo…te…amo…
-tamaki yo…
-se muy bien que no puedes corresponderme, que somos hombres, además somos herederos de las compañías mas importantes de Japón demo… yo no puedo cambiar lo que siento por ti…
Siento mucho si eso te incomoda…- te levantaste de donde estábamos, pero antes de que te fueras te sostuve del brazo y te jale hacia a mi, así que quedaste sentado en mis piernas de frente a mi, cara con cara.
-si que eres un estúpido tamaki… tantos años y… no te has dado cuenta de que yo… también te amo… con desesperación… con locura. Que odio a cada clienta que se acerca a ti, a cada persona que pone sus manos en ti… en ese cuerpo que debería pertenecerme solo a mi… te amo tamaki, y te deseo como no tienes una idea…-
-y yo a ti mi amada oka-san…- y sin pensarlo dos veces te bese. Te bese como soñé hacerlo miles de veces. No perdí nada de tiempo y desabroche uno a uno los botones de tu camisa, viendo como temblabas ante cada caricia que te daba, tu te las ingeniaste para quitarme mi traje, que con tantos detalles de la edad media pensé que nunca saldría. Avente tu camisa a un lado y me centre en besar tu pecho, prestándole atención a tus pezones, lo cual provocaba que gimieras, y que te sonrojaras aun más. Te coloque delicadamente en el piso el cual estaba cubierto por una fina alfombra, mientras lo hacia me deshacía de mi ropa y vi que tu hacías lo mismo con lo que te quedaba puesto. Así que continúe besando cada parte de tu blanca y hermosa anatomía, cuando estaba en tu pecho se cayeron mis lentes.
-recógelos- dijiste de lo mas sexy…- pero con la boca.-así que aproveche y mordí tu delicada piel dejando marcas a mi paso, para después tomar mis lentes con la boca, dejándolos a un lado.
-Kyouya, quiero que lo hagas ya… quiero sentirte dentro de mi…
-pero yo nunca e estado con un hombre y no se como…
-ni yo… pero no dijiste que tu y yo íbamos a descubrir miles de cosas juntos… pues esta es una cosa que quisiera aprender solo contigo y con nadie mas…
-esta bien… flexiona tus rodillas, y pon tus piernas en mis hombros…- me obedeciste sin decir mas, sabia que confiabas en mi, así que hice todo por no lastimarte, poco a poco fui adentrándome en ti, preguntándote infinidad de veces si te dolía, a lo que tu contestabas con un tierno beso. Así que poco a poco me fui moviendo dentro de ti, hasta que logramos un delicioso vaivén. Tu te aferrabas a mi espalda enterrando tus uñas en mi. Gimiendo bajito en mi oído.
-te amo Kyouya…
-te amo tamaki….- dijimos justo antes de llegar juntos al clímax terminamos abrazados en la alfombra el con su cabeza en mi pecho y yo acariciando su espalda. Deslizando mis dedos por su cuerpo.
-Kyouya… siempre estaremos juntos cierto?
-etto… tamaki… hay algo que debes saber… yo… me voy… a casar.
-que!!!!- te levantaste inmediatamente del piso y corriste por tu ropa.
-no tamaki espera es que yo…
-que no me amabas?? Todo es una mentira siempre es una falsedad contigo!
- no es cierto tamaki yo… dije que si antes de saber que tu me amabas, yo pensé que no sentías lo mismo. Yo… te amo tamaki, pero mi padre me obliga, dice que seria una gran inversión- dije imitando a la perfección el tono de mi padre.- dice que son buenos negocios pero yo hable con ella y ambos sabemos que es un simple contrato, ella no siente nada por mi, ni yo por ella. Somos buenos amigos, tengo que reconocerlo es una chica hermosa y educada demo… mi corazón es tuyo y siempre lo será…
-pero yo renuncie a ver a mi madre por ti!!! Porque te amo, tenia que volver a verte! Yo… lo deje todo por ti Kyouya!!!-
-tamaki perdóname por favor… si quieres odiarme lo entiendo, pero quiero que sepas que yo siempre te voy a amar- empecé a vestirme rápidamente mientras tu llorabas desconsolado, cuando acabe de vestirme camine a la puerta, pero sentí como te aferrabas a mis piernas.
-no me dejes kyo… ya encontraremos como estar juntos, aun cuando te cases seré tu padrino y al finalizar la misa haremos el amor en la limosina como locos, para después llegar a la fiesta y aparentar que somos solo amigos, y que te escapes en tu noche de bodas y regreses a mis brazos esa misma noche…
-jeje así será mi amor… lo prometo- le dije mientras volvía a besarlo, mi cuerpo temblaba de solo imaginar lo que el acaba de decir.
-es tiempo de que salgamos no crees?
- tienes razón vámonos.- al salir encontramos el salón de música vacio, solo vimos una nota…
Supuse que querían privacidad por lo que me lleve a todos de aquí… espero lo disfruten y sean muy felices…
No duden en pedirme algo sempais.
Haruhi…
Vi como sonreía de solo leer el último nombre…
-la quieres?
-si…
-aaa… etto… la amas?
-jeje no baka, ella es especial porque… es la ultima que sabe que… te amo
-yo pensé que…
-que la amaba? Jaja noo… siempre pase tiempo con ella porque era la única en la que podía confiar mi secreto…
-soy un tonto, como pude dudar de ti… pero bueno… te parece si vamos a mi casa señorito?
-seria un completo placer joven Ootori XD
Y así pasamos los días, hasta la noche de mi boda, tal y como lo había previsto tamaki, el fue mi padrino, llevaba un traje blanco que lo hacia lucir hermoso como siempre, honestamente irresistible, y admitiré que lo hicimos en la limosina, en la fiesta, en plena noche de bodas. De echo la luna de miel la pase con el, ya que mi nueva esposa estaba al tanto de mi relación con Tamaki.
Pasaron dos años y tamaki acepto por fin casarse con Haruhi, ya que su padre y su abuela le habían estado insistiendo que buscara una esposa. Pero Haruhi estaba de acuerdo con nuestros encuentros ocasionales, siendo ella quien los organizaba algunas veces…
Pero un día pasó lo inesperado, mi padre nos descubrió una noche en un bar, estábamos besándonos y el llego y me abofeteo…
-eres un mal nacido! Me lamento de que seas mi hijo!!! Como pudiste hacerme eso!!
-cállate!!! Estuve toda la vida aguantando tus insultos, pero no mas… yo soy el dueño de las compañías y si quiero te dejo en la quiebra.
-no puedes! El hecho de que te hayas casado con Hizaki fue para que su padre me donara la mitad de la compañía, con ese dinero y su apoyo puedo quitarte todo… eso no te gustaría cierto?
-señor Ootori yo…-
-tu cállate, créeme que tu abuela se enterara de esto, te odiara por el resto de tu vida. Serás la deshonra de la familia Souh.
-padre no lo hagas!!!
-solo hay una solución… tamaki lárgate lo mas pronto posible a Francia. Deja a mi hijo en paz y olvidare que vi todo esto… como tu debes hacerlo hijo… Perdónenme pero… tengo que proteger la integridad de ambas familias…
En menos de una semana ya nos encontrábamos en el aeropuerto despidiéndonos.
-Kyouya… sabes que te amo, y te amare por el resto de mi vida, eres el motor de mi existencia y nunca traicionare tu memoria.
-tamaki, eres lo mejor que me pudo haber pasado, gracias a ti mi corazón late. Y te voy a amar por siempre…
-adios amor… - nos besamos en pleno aeropuerto sin importarnos quien nos viera. Lloramos desconsolados por un largo rato, hasta que fue momento de abordar su avión. Nos seguimos con la mirada hasta que fue imposible hacerlo…
Desde ese día han pasado ya 3 años. Tres malditos años sin verlo, sin tenerlo a mi lado. Reconoceré que hemos hablado infinidad de veces por teléfono…
-moshi moshi…
-hola Kyouya… soy yo… tamaki…
-hola amor! Que haces?-
-pues emm pienso en ti… y dime…estas solo?
-si estaba afinando unos detalles para un negocio, dime que necesitas?-
-a ti…necesito que me beses, necesito que me toques…
-cierra los ojos… ahora imagíname encima de ti… soy yo el que te quita la camisa en este momento- desde el otro lado de la línea tamaki estaba recostado en su cama haciendo lo que Kyouya le decía…- ahora beso poco a poco tu pecho, llegando hasta tu ombligo.
-aaa oka-san aaa.-
-ahora tu me quitas impaciente lo que llevo puesto, dejándome descubierto ante ti… puedes verme Tama?
-aaa sii… sigue…- decía casi sin respiración el rubio, por lo cual Kyouya sonreía malévolamente. Imaginándose el cuerpo sudoroso y temblando de tamaki, tocándose a si mismo pensando en él.
-ahora te despojo de tu ropa interior y me apodero de tu miembro con mi boca, lentamente, tu llevas el ritmo.-
-Kyouya… Kyouya te....aaa…te amo…-
-yo a ti oto-san…- desde el otro lado se escucho la respiración acelerada de tamaki llegando a el clímax.
-demonios tengo que irme, mi padre esta tocando la puerta… nos hablamos mañana si?
-a la misma hora amor…
-hai… te extraño Tama-
Pero eso era lo mas cerca que podía estar de el… a un año de mi matrimonio me vi obligado a tener un bebe con Hazuki para tener un heredero de la familia, ella acepto que fuera inseminación, entendía que mi cuerpo era solo de una persona. Así que tuvimos un pequeño bebe, todos dicen que el parecido conmigo es impresionante. Es como un mini clon mío. [Awww imagínense un mini Kyouya]
Una tarde pase por la mansión de mi padre a saludarlo junto con mi esposa y mi hijo…
-como esta mi precioso nieto… Tamaki…?
-bien padre… tamaki esta creciendo día tras día…
-emm hijo… hablando de tamaki bueno emm…
-te agradecería que no lo mencionaras a el… es extremadamente doloroso.
-es que… bueno la compañía de los Souh esta estableciendo escuelas en Francia y bueno nos quieren como socios y tu eres el encargado de firmar el contrato… tamaki quiere verte solo a ti…- volverlo a ver, volverlo a tocar.
-pero te advierto Kyouya que si no vuelves en una semana, me encargare de que la familia de tamaki se quede en la quiebra, y hare que no vuelvas a ver a tu hijo, negare que eres de mi sangre, te quitare el apellido…. Todo…
-esta bien padre….- mis ojos se llenaron de lagrimas… una semana con tamaki, una semana entera con el…
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