Capitulo uno: El gatito de Malfoy.
Presente.
Draco Malfoy como buen perteneciente a la mayor elite del mundo mágico, jamás tuvo una mascota. Su padre había criado pavos albinos y pegasos, pero “esos” no contaban como mascotas, ya que solo estaban para ser usados como un adorno más de la mansión, como solía decir su padre. Tenía a Mortis, pero su lechuza no contaba como una mascota en si, por que aunque le podía acariciar, no podía jugar o dormir con ella. Nunca se había puesto a pensar en ello, nunca necesito alguna criatura para sentirse bien o acompañado, eso era para los sentimentales Hufflepuff o los odiosos Gryffindor. Pero no para las astutas y frías serpientes como ellos.
Pero todo cambio cuando de la nada, en su último año en Hogwarts - la guerra ya había acabado y ellos quedaron como espías, así que no cayeron en Askaban – se encontró con un adorable, apapachable y peludo gatito negro, nunca había visto un gatito tan lindo, no era nada en comparación a esa cosa andromorfa que el conserje aseguraba era una gata y menos aquella cosa obesa que tenia Granger como gato. El que había encontrado, era pequeñito, gordito pero lindo, muy peludo, su pelaje era increíblemente negro y lo que más le encantaba eran sus ojos verdes, eran tan expresivos y enigmáticos, le recordaban a alguien…
Días atrás
Fue un día sábado, justo en la salida de Hogsmeade, era un día tranquilo y cálido, estaba junto a sus amigos, Blaise, Theo y Pansy, conversando tranquilamente, cuando casi aplasta a una bolita de pelo negro. Pansy le había gritado por lo que técnicamente gracias a ella había salido ileso aquella cosa peluda, Pansy se agallo y lo trato de tomar, pero el gato se puso alerta y con la cola tiesa y sacando sus garritas le maulló amenazante. La azabache escondió rápidamente su mano y se paro inmediatamente…
- maldito bicho – grito indignada
- solamente lo has asustado – se burlo Blaise
Pansy le fulmino con su mirada, su amigo solo le sonrió condescendiente.
Draco no les ponía atención, su mirada gris estaba fija en la verde y desafiante del minino, se agallo lentamente, quedando a poca distancia del minino salvaje, le acerco su mano tendida…
- ven pequeño, no te aremos nada – susurro para que nadie le oyera, aunque sus tres amigos si lo hicieron
El minino le miro un momento, con su cabeza ladeada como confundido, luego de un momento se acerco con pasos cortos y lentos. Se acerco a la mano pálida del rubio y le acaricio con su naricita. Draco sonrío imperceptiblemente… Lo tomo con su otra mano y le acerco a su cara, luego de mirarlo unos momentos detenidamente, lo coloco en su brazo doblado hacia su pecho para que el minino no se cayera y volvió a retomar su caminar, como si nada…
Sus tres amigos se quedaron un momento completamente estáticos, hasta que vieron que su amigo rubio no se detendría, le alcanzaron rápidamente… llegaron a su lado, mirando asombrados al gatito en brazos del rubio y este con su fría e indiferente expresión, como si no llevara un adorable gatito entre sus brazos.
- y… ¿el gato? – pregunto Blaise
- no lo estás viendo a caso – espeto con sarcasmo el rubio
- no me digas que te lo vas a dejar – dijo la única chica, mirando al gato con odio, misma mirada que le devolvió el minino
- ¿porque no?
Pansy iba a contestarlo pero Theo se adelanto…
- si te lo quedas deberías ir a una tienda de mascotas – acariciando un momento la cabecita del minino...
Pansy bufo molesta al ver el interés de sus dos más serios amigos en esa cosa peluda y después decían odiar a los gatitos (Gryffindor). Los cuatros Slytherin caminaron silenciosamente hacia la tienda de mascota que había en el pueblo, como siempre llamando la atención de todos los que se encontraban en su camino, aunque los de las demás casas no lo reconocían – sobre todo por parte de los Gryffindor – siempre les miraban no solo con odio o recelo, sino mas bien con deseo. Los Slytherin sabían que eran más que guapos y que gracias a eso podían aprovecharse muy bien de los demás. Pero esta vez no solo llamaban la atención por su belleza, sino también por el hecho de ver al príncipe de las serpientes, con un pequeño gatito negro entre sus brazos, parecía como si lo llevara con demasiado cuidado.
Sin importar las miraditas incrédulas, hasta de asombro y los cuchicheos que dejaban al pasar, fueron hacia su destino.
El lugar era grande y con varias jaulas con diferentes tipos de animales que eran consideradas como mascotas, sobre todo había una gran cantidad de lechuzas, sapos y ratas. Siguieron derecho entre los estantes de animales y diferentes cosas para ellos, como comida, juguetes entre otros.
Se detuvieron en el mesón, donde el encargado brillaba por su ausencia, Draco impaciente como siempre, comenzó a mover sus dedos sobre la dura mesa colocando al gatito sobre ella, acariciando su cabecita con la otra mano, este ronroneaba contento.
De entre las sombras apareció el dependiente – le pediría que dejara de hacer ese ruidito, molesta a las serpientes negras – dijo secamente
Draco le miro despectivamente y dejo de mover sus dedos, solo porque molestaba a las serpientes.
Frente a ellos se encontraba el encargado de la tienda, un hombre más o menos de treinta años, con el pelo castaño oscuro algo largo pero sin llegarle a los hombros, tenía la piel algo morena, ojos oscuros... El sujeto miro fijamente al gatito negro que aun Draco le acariciaba la cabecita. Su mirada negra evaluaba al minino y este se veía ¿nervioso? una sonrisa divertida se formo en los labios del dependiente. Los Slytherin le miraron sospechosamente, pensando que era lo que le hacía sonreír de esa forma al tipo.
- venimos porque necesitamos cosas para gatos – dijo secamente Theo, ya quería irse de ese lugar, quería ir por un par de “plantas”
- ya veo... – dijo algo ¿divertido? – Es macho o hembra – les pregunto, mirando al gatito que se puso nuevamente nervioso
Draco miro a Theo como diciéndole con la mirada que el respondiera, Theo solo levanto los hombros. Blaise sonrió divertido por el desconcierto de sus mejores amigos. Tomo suavemente al gato y lo acostó de espalda a la mesa, este se movía frenéticamente y maullaba molesto, pero Blaise se lo impidió…
- es macho – dijo con una sonrisilla
El gato le mira fijamente con ¿odio?...
- bueno y que deseas… - fue lo que dijo un divertido dependiente, mirando burlón al gatito
Draco levanto sus hombros despreocupadamente – lo que se necesite para tener un gato como mascota – fue simplemente lo que dijo.
- pero tenemos una gran variedad de cosas… - dijo tranquilamente
Pansy le miro curiosa, le encanta comprar, elegir diseños, los colores y accesorios, aunque eso implicara indirectamente ayudar a esa cosa peluda, se ofreció para ver que es lo que el rubio le compraría al gatito…
Luego de varios minutos u horas quizás, salieron de la tienda con varias cosas, juguetes, comida hasta ropa, que achicaron para llevarlo en el bolsillo. Draco llevaba su gatito en uno de sus brazos, el minino ahora traía un elegante collar de color verde muy parecidos a sus extraños y expresivos ojos verdes esmeralda.
Pasaron al lado de dos de los integrantes del trió de oro, que se quedaron en shock al ver el gatito que traía Draco en sus brazos…
Presente…
Draco se encontraba boca abajo en su inmensa cama con doseles que se encontraba en medio de su habitación individual por ser premio anual. Leyendo un nuevo libro de pociones que le había prestado su padrino, mientras que distraídamente acariciaba la cabecita de Rry, que es así como le había puesto al gato.
Días atrás
Se encontraban en la habitación de Draco con la nueva adquisición del príncipe de las serpientes, el minino miraba curioso todo el lugar, metiéndose bajo los muebles y la cama, pero siempre pendiente de su “amo”. Estaban todos en un círculo, Blaise divertido por cómo se comportaba el gatito y Draco aunque no lo quisiera demostrar también tenía sus ojos puestos en lo que hacía su nueva mascota.
- ¿y cómo le vas a poner? – le dijo curiosa la única chica del grupo
Draco le miro fijamente, levantando los hombros despreocupadamente
- ¿no pensaras llamarlo gato? – le dijo sarcásticamente
- porque no – dijo simplemente el rubio
Los demás le miraron…
- ¿Qué?
- gato no es un nombre de mascota – le dijo su amiga
- si vas a tener una mascota por último ponedle un nombre – hablo Theo, fijando su vista nuevamente en su libro que se trataba de plantas
Draco miro al gatito no sabía que nombre ponerle a esa cosa peluda, con su pelo negro y desordenado, con esos ojos verdes que tanto le llamaban la atención…
- Rry… - dijo simplemente el dragón
Theo le sonrió socarronamente aunque los otros dos no entendieron porque…
El minino escucho aquel nombre y miro ¿asombrado? A Draco…
Presente…
Rry bostezo perezosamente, Draco le miro de reojo aun con el libro en sus manos, sonrió imperceptiblemente ante la atenta mirada del felino…
- Qué dices Rry – le hablo al minino, mientras rodaba en la cama quedando de espalda y colocando al gatito en su pecho, acariciándole la cabeza - ¿quieres ir a tomar un baño? – Sonríe al sentir como el pequeño gatito le lamia su mano – pues vamos entonces – le contesto al minino parándose de la cama, llevándose al gato consigo en sus brazos.
Draco llego al baño aun con el gatito en brazos, dejándolo suavemente sobre la tasa del baño, mientras que regulaba la temperatura del agua y dejaba el agua correr para que se llenara la tina. Comenzó a desabotonar su camisa, mientras veía divertido a Rry que jugaba con una pelusa. La verdad es que al principio cuando había encontrado al gatito en el medio del camino, no le llamo para nada su atención, pero al ver mejor aquellos ojos que poseía, tan verdes, que no pudo evitar tomarlo y llevárselo. Aunque él no sabía nada de mascotas mucho menos un gato, que era más mascota de hijo de muggle o mestizos, pero aun así con ayuda de sus amigos supo más o menos que esperar de su nueva adquisición. Nunca pensó que terminaría encariñándose tanto con el peludo minino, ni menos compartir tanto con aquel animal. No solo le acariciaba y jugaba con la bola de pelos, sino también le hablaba de sus cosas, le mimaba más de la cuenta, dormía con él en su cama y hasta se bañaban juntos. Lo había sacado un par de veces de su habitación, para llevarlo a su sala común o al patio, pero trataba de no hacerlo muy seguido, ya que todos se le acercaban para acariciar a su pequeña mascota, e incluso un par de osadas Gryffindor se le habían acercado, para decirle lo muy “mono” que se veía con un gatito. Casi mata a esas mocosas, si no fuera por la oportuna intervención de Theo. Pero cuando él tenía que ir a clases, dejaba a Rry en su habitación, con comida, agua y sus juguetes para que no se sintiera solo.
Miro divertido al gatito que miraba distraído las baldosas del baño, lo tomo con cuidado, apoyándolo en su pecho desnudo, rio despacio al sentir los bigotes de Rry sobre su descubierto pecho. Con cuidado se metió a la bañera colocando al gatito en su pecho para que no se hundiera, mojándolo un poco, con su mano. Con un movimiento de varita trago a la bañera un pequeño salvavidas redondo de color rojo que era redondo y tenía un hoyo en el centro, permitiendo que el gatito se mojara su cuerpo, pero que flotara, teniendo su cabeza y patitas delanteras sin mojarse.
Se divertía mucho con su gatito, compartían casi todo, como incluso el baño…
Continuara...
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español