Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Así como se besan los amantes por Koroshi_Death

[Reviews - 178]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo: Este es mi nuevo fic, he escrito "Entre la oscuridad de la luz" y "Entregándome al demonio" Espero que mis fics sean todos de su agrado, porque los escribo con mucha pasión y dedicación ^^
Ojala les guste este nuevo fic, es algo diferente a los demás, y procuraré no cambiar algunas cosas de la serie, no pretendo hacer que Ciel sea un esclavo, en el fondo Ciel seguirá siendo protegido, aún es un niño que se mete mucho en problemas...
Llegaba la hora… Cada vez estaba mas cerca… Estaba tan cerca… Sus manos sudaban y tenía miedo de lo que fuera a ocurrir de ahora en adelante… Sabía que ese sería su final… Cuando Esos ojos rojos no podían estar más cerca del conde, su “yo” ya estaba fuera de este mundo, se hallaba resignado y tranquilo esperando su muerte… Primera vez que su rostro no tenía un semblante serio y tosco… Ahora permanecía en el, el rostro de la tristeza… La tranquilidad e incluso la inconsciente felicidad que el conde que ya había abandonado su titulo de nobleza subconscientemente… La felicidad de saberse vengado… La humillación al fin se había acabado… Las tristes y crueles palabras que le llegaban al alma “Sucio, impuro, feo” Como lo llamaban aquellos que se consideraban salvadores del mundo…

Se encontraba ya tan cerca… Tan cerca… El conde ya podía saborear el sentir de su muerte… Cuando Sebastián se detiene a sólo unos centímetros de su rostro, rozando sus narices… A estas alturas ya nada le parecía incómodo… Ya se sentía dentro del demonio como un alma más de su colección… Pero no… El aún estaba allí… Esperando la muerte dolorosa que el demonio le otorgaría… Tal y como el joven Phantomhive había pedido…

-¿Por qué te detienes, Sebastián? – Pregunta en un tono tranquilo, solemne, casi susurrante…

-¿Acaso me esta pidiendo que lo ayude a abandonar este mundo? ¿Tan poco aprecio le tiene a su vida?

-Bien sabes que el aprecio que tenía a mi vida era sólo por una cosa… Lo que era mi razón para seguir en este mundo, siendo custodiado por un demonio… Por el que antes era mí mayordomoo…

-Exacto, Joven Ciel…

-¿Por qué ahora me llamas “Joven Ciel”?

-Porque usted ahora es mío…

-¿Ya estoy muerto? ¿Y el dolor?

-No sé si usted se fijó en cierto detalle… - Sebastián quitó su chaqueta y su camisa, quedando semi desnudo – Mi brazo con el contrato se ha ido… No tengo forma de llevarlo conmigo… Sólo con el sello puedo hacer que su alma sea mía… Por ahora no tengo más opción que adueñarme sólo de su cuerpo…

-¿Mi cuerpo?

-Así es… Ahora usted es mi esclavo… ¿Cree que el protegerlo durante tres años arriesgando de esa manera mi vida, es gratis? Ahora que no puede pagarme con su alma… Tendrá que pagarme con sus servicios

-¿Eso significa que obtengo la inmortalidad?

-Nadie ha dicho eso…

-¿Qué tipo de “servicios”?

-No se asuste, Joven Ciel… No le pediré “eso” aún – El rostro de Ciel se torna pálido ante lo recién confesado… ¿Pedir “Eso”? ¿Acaso pretende que Ciel sea una especie de prostituta personal?

-No pretendo ser un esclavo, prefiero mil veces morir antes que eso, vamos Sebastián, no tienes el sello, pero aún puedes asesinarme – Toma la mano de Sebastián y la pone en su cuello – Ahora aprieta fuertemente para que abandone de una buena vez este mundo

-Eso a mi no me conviene – El ahora ex mayordomo quita la mano del delgado y delicado cuello de su ex amo – Si lo mato tampoco podré absorber su alma… Debo obtener cierta cantidad de poder para regenerarme y recuperar mi brazo… Si usted me ayuda en esa travesía, me será más rápido y fácil, una vez que recupere mi brazo… Recuperaré mi sello y podré devorar finalmente su alma… ¿Acepta el trato? ¿O prefiere que lo obligue?

-Creo que no me queda otra opción – Baja la mirada – Ponte tú camisa y la demás ropa, es incómodo que estés así

-Recién me tuvo a sólo unos centímetros de su boca y ahora se molesta porque me quité la camisa

-No es sólo eso… Me da algo de… Lástima… Contemplarte sin tú brazo… De cierto modo me siento algo… Culpable…

En esos momentos donde el conde ya había estado tan cerca de la muerte, tan resignado y sintiéndose incluso ya muerto, se le hacía de algún modo más fácil expresarse… Se sentía más liviano, más transparente… Sin duda no pretendía quedarle debiendo su alma a un demonio, sin duda estos son demasiado obstinados con sus contratos… Después de todo Sebastián había hecho un trabajo sensacional, jamás le había desobedecido, sólo se alejó de el cuando apreció que el corazón de su amo se ablandaba, y que su alma se llenaba de bondad, lo que la hacía ser menos valiosa… Tras la muerte de Albberline por salvar su vida, su alma sin duda se había llenado de tristeza y de rencor hacia Sebastián por no salvarlo… Pero fuera de eso, siempre fue su fiel mayordomo, aunque no perdonaba el que haya permitido que le dispararan… Pero a ese extremo tuvo que llegar el destino para hacer que el sello “despertara”

Ahora no tenía otra opción, tal vez debería cambiarse de país, cambiar de identidad para poder vivir tranquilamente y acompañar ahora como su sirviente a Sebastián para recuperar su energía tras la batalla con el ángel al volver a su forma original y recuperar su sello…

Ese definitivamente sería su final… Pero… ¿Valía la pena? Tal vez en el fondo este estaba deseando morir… O tal vez… Sólo deseaba vivir dentro de Sebastián toda la eternidad…

-¿Entonces para qué me trajiste hasta aquí? Si no ibas a devorar mi alma, entonces me hubieras dicho esto en Londres…

-No quiero que Lady Elizabeth nos encuentre, no quiero que se entere de que usted aún está vivo…

-¿Deseas que me den por muerto?

-Así será más fácil viajar… Ahora que usted es mi esclavo… En el fondo usted siempre me perteneció… Ambos sabíamos que este momento llegaría…

-Lo sé…

Ciel permanecía con ese semblante nostálgico, triste y calmado, nada parecía sorprenderle ni molestarle, se incorpora fácilmente y toca sobre el sello

-En cierto modo estoy feliz… - Susurra el conde desabotonando su camisa y quitándola con delicadeza – Ese balazo me penetró justo en el sello… Ahora desapareció… El único recuerdo que tenía de mi infancia lo llevaba marcado en la piel… Ahora sin el… Podré de cierta forma librarme de ese cruel pasado y mirarme desnudo al espejo sin recordar el momento en que me marcaron… Una marca que creí jamás se borraría de mi cuerpo… Aunque tal vez es cierto… Puede que se borrara de mi cuerpo… Pero será difícil borrarlo de mi alma… Después de todo… Viví sólo por esto…

-Ahora todo será más fácil, ahora que no tiene ataduras con su pasado, podrá complacerme en todo y olvidar su titulo de nobleza, usted ahora no es más que un humilde y simple empleado

-Ahora yo diré “Sólo soy un simple empleado”

-Si, o sirviente, suena más sutil, ya que no le alcanza como para ser mayordomo, es demasiado pequeño

-No te burles…

Ciel al parecer ya había aceptado ese trabajo, ahora su motivación era Sebastián, que este recuperara su brazo, se sentía culpable, tenía cargo de consciencia y en el fondo sentía que era su responsabilidad moral el recuperarlo ¿Cómo dejarlo así para toda la eternidad? Sin duda Sebastián con uno o dos brazos sería invencible igual, pero se veía diferente…

Quizás si podrá pasarla bien ahora… Comenzando una nueva vida e intentando ser feliz… Desde siempre Sebastián fue su único acompañante y fiel sirviente, ahora lo seguiría siendo, su acompañante y ahora amo… Tal vez era la oportunidad de hacer que ese “lazo” al que Agni se refería cuando estaba peleado con su amo, el príncipe Soma… Ese lazo tan fuerte que los unía, ahora tenía la oportunidad de fortalecerlo aún más…

Su orgullo fue abandonado por sólo unos instantes… No tenía idea que al final terminaría odiando su nuevo titulo de “Sirviente”… Un sirviente con apellido noble…
Notas finales: Dejen sus reviews!!!

Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).