Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Reputación Uchiha por PokeGirl Uchiha

[Reviews - 17]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo: /Bueno pues que puedo decir gracias a todos los que me felicitaron por mi cumple!! ^^ jajaja y a los que me feliciten mientras sigua vigente este dia xD HAHAHA gracias por su apoyo!!, he aqui un OS de mi para mi xD por mi cumple xD con muchisimo amor!! xD pero dicen que un regalo es mejor cuando lo comparten asi que veamos espero que les guste, basada en la canción: Tu reputación de por supuesto el inigualable señor Ricardo Arjona! xD io quiero ir al concierto >< acepto donaciones para que pueda ir xD jajaja/
—¿Quién es él?— recuerdo que había preguntado apenas habia puesto un pie en mi nueva escuela hacía solo 6 meses atrás y pensar que en aquellos momentos estaba furioso con mis padres por obligarme a cambiar de escuela el último año.

—¿…l?—preguntó mi amiga Ino, la única de ese lugar cuando entré—Umm…Es Sasuke Uchiha.

—Sasuke…—recuerdo como algo en mí interior se removió cuando pronuncié ese nombre y no, no es lo que cualquier pervertido hubiera pensado, fue algo más, un sentimiento extraño.

—No deberías meterte con él—recuerdo que me había advertido Ino.

—¿Por qué no?—dije observando detallada…MUY detalladamente aquella criatura que llamaban Sasuke Uchiha, piel pálida blanca como el mármol pero se veía más suave que la seda misma, facciones delicadas, cabellos negros, ojos negros que tenía un brillo especial era una mezcla de perversión con no se qué, en aquel momento recuerdo que no, lo pude identificar— No le veo nada malo…

—Ese es el problema—había dicho Ino, yo había volteado para ver mejor la expresión de desagrado en su rostro—Ash…como te lo explico Sasuke goza de una reputación no muy buena.

Recuerdo la estruendosa carcajada que había soltado cuando Ino dijo: “Si a la palabra reputación le cambiáramos la “A” por la “O” las primeras 3 sílabas describirían perfectamente a Sasuke”— ¿A poco?—había dicho limpiándome las lágrimas de la risa, obviamente todos se me quedaron observando, todos menos Sasuke Uchiha, lo cual era una lástima porque recuerdo que había querido comprobar lo que Ino me había dicho de inmediato.

Mi primer día había sido tranquilo, recuerdo que todos me dieron “buenas” referencias de Sasuke, cada vez que escuchaba algún comentario de mis nuevos amigos, solo me daban ganas de probar si todo aquello era cierto—No puede ser cierto—había dicho entre carcajadas.

—¡Es enserio!—Había dicho un tipo—¡Se encadenó a la cama y me dejó hacerle lo que quisiera!— recuerdo que aquel día habían servido ramen, pero no hubo una sola oportunidad de que dejara de parar de reírme, para probarlo.


30 de penúltimo año, 35 de último años, había sumado en mi cabeza un total de 65 personas con las que había estado el famoso Sasuke Uchiha, recuerdo como había dejado escapar una leve carcajada a mitad de clase de matemáticas—¿Qué es tan gracioso Uzumaki?

—El número 65 Iruka—sensei—había respondido, recuerdo que mi maestro se me había quedado viendo como si estuviera loco ya que en primer lugar la respuesta del problema que había en la pizarra era 95 no 65.

Aquel día terminó demasiado rápido, me hubiera gustando seguir riéndome del tal Sasuke y su bonita reputación, interesante para alguien que solo contaba con 17 años, había tenido más experiencias que mi abuelo y eso que mi abuelo Jiraya aún era un completo pervertido; ¿Cómo será Sasuke Uchiha a la edad de mi abuelo? Recuerdo que me había cuestionado.

Había salido tan distraído de la escuela que fui a parar a un parque que no conocía, fue cuando lo vi—Sasuke—había susurrado—¡Oye Uchiha!—le había llamado, recuerdo perfectamente como estaba con la cabeza agachada, sentado en un columpio del parque, no sé porque aquella escena me conmovió y no era porque tenía complejo de madre sobreprotectora—¡Uchiha!—lo que vi me había dejado helado, jamás pensé que una persona como él era capaz de llorar con aquel sentimiento entonces fue que descubrí el otro ingrediente que acompañaba la mirada de Sasuke: Soledad.

—No sé quién eres pero…—había empezado pero calló al sentir como lo rodeaba con mis brazos—Gracias…—me susurró y nuevamente apareció aquella sensación extraña que había sentido al verlo aquella mañana.

—Hola amorcito…tardaste más de lo usual no crees—dije con una sonrisa al verlo bajar de las escaleras de su apartamento, me había sumergido tanto en mis pensamientos hasta que la puerta de su apartamento me sacó de mis pensamientos.

—No me digas así—exclamó con el ceño fruncido.

—¿Así saludas a tu novio, Sasuke? ¿Por qué no pruebas algo como buenos días amor?—exclamé con una sonrisa, mientras me despegaba de mi coche, en el cual había estado apoyado esperando que él saliera.

—Prefiero arrancarme la lengua—mientras me miraba ceñudo, así es habían pasado 6 meses desde aquella escena en el parque, hacía 5 que yo era novio de Sasuke Uchiha, días como estos es cuando rememoro aquel primer día de clases y sé que cualquiera me dirá ¿Cómo terminé con él? Sabiendo la clase de persona que era; Umm…Cupido me jugó sucio, es lo único que puedo decir a mi favor, además yo no era ningún santo, me avergonzaba siempre que recordaba que quería llevármelo a mi cama sin haber cruzado palabra con él.

—¿Tanto te desagrada la idea Sasu—Chan?— le dije, sabía lo que venía, siempre que lo llamaba “Sasu—chan” lo siguiente que me esperaba era una sarta de insultos.

Tomó aire para empezar a gritarme, sonreí antes de abalanzarme sobre él y robarle un beso, nuestras bocas chocaron y como era de esperarse: me correspondió. ¡Dios! Cómo amaba sus besos, parecía un drogadicto, jamás había probado manjar más exquisito que sus labios, jamás he tenido placer de degustar algo más sabroso que su lengua, a esto súmenle una técnica arrebatadora, siempre terminaba sin aire y con un dolor en mi entrepierna.

—Naruto…—susurró sin apartarse completamente de mí—Yo…—empezó.

—Hoy vienes destilando sensualidad Sasuke—dije con una sonrisa para luego volver a besar sus labios—No me provoques de romper nuestro acuerdo de nada de sexo— Ajá…así como lo escucharon, no he tenido sexo con Sasuke desde que lo conocí y no es porque no me den ganas de tirarme semejante cuerpazo.

La razón por la cual no lo habíamos hecho; es porque ambos habíamos llegado a ese acuerdo, puesto que queríamos estar preparados como una pareja “normal” si se nos podía catalogar así, esa era la verdadera razón; creo que cualquiera no nos comprendería ni nos creería si tomamos en cuenta como era Sasuke antes de ser mío y si incluimos mi ejem…poco ejemplar reputación que llegó a oídos de mis compañeros gracias a unos graciosos de mi antigua escuela.

—Lo mismo digo de ti Naruto…—susurró con una sonrisa, mientras volvía a darme uno de sus besos con paro cardíaco incluido.

—Sasuke…—gemí al sentir sus manos mientras recorrían mi cuello y se deslizaban por mi espalda y es que no podía evitarlo, ¡siempre terminaba prendiéndome aunque no se lo propusiera! En pocas semanas había encontrado puntos que me hacían perder mi cordura que ni yo me conocía.

—Andamos un poco calenturientos hoy…—dijo Sasuke mientras se separaba de mí y abría la puerta de mi auto, sonreí al ver como ponía su ejem…retaguardia a mi disposición, mecí mi mano y le di una nalgada lo que hizo que diera un pequeño brinco y se golpeara con el techo del auto—¡¿Qué estás haciendo?!—me gritó molesto, yo solo sonreí y le guiñé un ojo— Eres un…

—Yo también te quiero—le dije con una sonrisa que solo hizo que se sonrojara y apartara la mirada, a lo cual sonreí complacido, me encantaba verlo avergonzado y con sus mejillas ardiendo.

—Oye Uzumaki—alcé la vista, era la mitad de la clase de deporte, me había tocado hacer pechadas con Neji—¿Aún continuas con Uchiha?

—Si…—dije empezando a fruncir el ceño—Mañana serán 7 meses…

—¿A poco?—dijo Neji con cara de sorpresa—Oye…se que lo quieres y todo pero…

—Neji ocúpate de tus asuntos—lo corté antes de que siguiera.

—Pero él te engaña Naruto—yo solo bufé, Neji era de los difíciles— Gaara está detrás de él desde el año pasado, siempre se ven detrás del gimnasio—Yo solo fruncí más el ceño— Si de verdad lo quieres y quieres que lo suyo dure deberías ponerle una correa o…

—¡Ya escuché suficiente!—le grité, por suerte Gai—sensei había ido a buscar no sé qué demonios de la fuente de la juventud—¡Escúchame bien Neji Hyuga y todos ustedes! Al próximo que me venga con alguna tontería de que Sasuke me está poniendo los cuernos le juro que se va a arrepentir de haber abierto su hocico.

—Neji tiene razón Naruto—dijo Shikamaru, apenas escuché la campana que anunciaba el recreo—No deberías enojarte con él porque te dice la verdad…Uchiha no ha cambiado en nada, la única forma en que cambie es que te lo lleves a una isla virgen donde no haya nadie y no te pueda ser infiel.

—¡Ya basta!—rugí lleno de furia—¡Ustedes están celosos!—grité— Están enojados porque ya no quiere nada con ustedes, porque se dio cuenta que no valen la pena.

—Tienes razón—dijo Kiba con una sonrisa—Sasuke ya no quiere nada con nosotros…—suspiré aliviado—Solo con Gaara…—lo fulminé con la mirada—Antes que decidas matarme mira a tu derecha—volteé y vi como Sasuke iba caminando con ese maldito pelos de cerilla—¿Lo ves? Tú amado Sasuke sigue siendo el mismo, no cambiará Naruto, sentí como la rabia se apoderaba de mí.

—¿Qué acaso ya no pueden hablar?—pregunté buscando algo a mi favor.

—Hablar, besar, follar…todo lo que quieran total no es a nosotros los que nos afecta—dijo Kiba con una sonrisa—Apuesto que ni tú tienes el valor de espirarlos porque sabes que tendremos la razón.

—¡Bien! ¿Quieren que los espiemos?—les grité ya furioso, si así era la única forma de se callaran lo haría—Entonces vamos antes que se vayan…—


Son unos idiotas y yo el mayor por estar encabezando la comitiva espía, pero estaba harto de que hablarán así de Sasuke, ni siquiera lo conocen, no saben nada de él, nada de su pasado, ni de su presente, no saben nada de porqué él era así—Aguarden—dije mientras llegaba a la esquina lateral del gimnasio, me asomé para ver si no había moros en la costa.

—¿Naruto?—hacía más de 5 segundos que me había quedado clavado en el suelo, estático, sentí como los demás se asomaban para ver lo que yo estaba viendo, aquello simplemente me hizo querer la muerte, Gaara besando a Sasuke, sentí mis ojos arder. No me importaba enfrentarme a mis estúpidos compañeros y admitir que ellos tenían razón solo que aquello era demasiado doloroso.

Bajé la mirada—¡¿Qué crees que estás haciendo imbécil?!—escuché un golpe seco alcé la vista confundido.

—¿Vas a negar que te gustó?—decía Gaara con su labio sangrando pero satisfecho.

—No sabes el asco que me dio—yo miraba asombrado como Sasuke escupía a los pies de Gaara—¡¿Qué parte de NO quiero nada contigo no comprendes?!

—¿Es por Uzumaki verdad?—decía ceñudo.

—¡¿Algún problema?! Si es por Naruto, porque lo amo…ya lo dije ¿feliz? ¿ O necesitas que te lo escriba en tu frente con un bisturí?—le gritó Sasuke yo solo lo miraba con los ojos abiertos.

—Patético…—decía mientras se levantaba—Más que patético, ¿No te das cuenta que él está contigo solo para poder tener sexo contigo?

—Tú no lo entiendes Gaara—le dijo Sasuke serio.

—Solo busca con quien desahogar sus impulsos, a nadie le importas, solo te quieren por lo que puedes ofrecer, todos solo te quieren para tener una noche de placer, nadie jamás te tomar…—antes de que pudiera continuar ya lo tenía tumbado en el suelo, le di un puñetazo que hasta mí me dolió, si Sasuke le partió el labio yo le rompí la nariz.

—Vete antes que toda tu cara tenga el color de tu cabello—le gruñí mientras me levantaba y veía como se alejaba rápidamente de ahí.

—¿Estuviste aquí todo el tiempo?—preguntó Sasuke a mis espaldas, yo solo volteé a verlo avergonzado.

—Se que no tenía ningún derecho y que irrespeté tu espacio y …—empecé a balbucear mientras veía como fruncía el ceño hasta unir sus dos cejas— Sasuke yo…—genial hoy si había metido la pata.

—Te perdono—dijo Sasuke apartando la mirada yo solo lo miré sorprendido—Pero si lo vuelves a hacer te juro que…—no pudo continuar al siguiente segundo lo tenía agarrado de su cintura y lo levantaba en el aire—¡Bájame ya mismo Naruto Uzumaki o te juro que te arrepentirás!—gritaba mientas yo daba vueltas con él en el aire, la verdad Sasuke pesaba muy poco para ser hombre, pesaba menos que Ino, pero jamás se lo dije ni se lo diría a ninguno de ellos por mi seguridad.

—Te amo…—le dije una vez lo puse en el suelo y lo besaba con todo mi amor antes de que pudiera replicar; recordé que los malditos de mis compañeros aún debían estar espiando así que lleve mi mano hasta el trasero de Sasuke y lo apreté con fuerza y continué besándolo, mientras sonreía para mis adentros, sabiendo desde aquel día nadie iba a volver hablar mal de Sasuke, si iban a regar un chisme que fuera el de: Sasuke Uchiha propiedad exclusiva de Naruto Uzumaki.


Así pasaron los meses hasta el día de la graduación, mis padres decidieron regalarme un apartamento cerca del campus de la universidad a la que asistiríamos Sasuke y yo, recuerdo la cara que había hecho cuando se enteró que mis padres eran acreedores de una “pequeña fortuna”, más fue su sorpresa cuando le dije que quería que viese conmigo, se había negado de todas las formas posibles, pero al final me salí con la mía…
Pasó un tiempo hasta que finalmente logramos mudarnos por completo, la mudanza terminó justamente un día antes de que cumpliéramos un año de noviazgo— Estoy exhausto…—susurró Sasuke mientras se dejaba caer sobre nuestra enorme cama.

—Yo también—susurré y mientras me acosté a su lado, me quedé pensando mil y una formas de pedirle algo que deseaba para nuestro aniversario— Sasuke yo…—volteé nervioso pero él ya hacía profundamente dormido, solo sonreí un poco a los pocos minutos el cansancio me venció a mi también.

Pasaron las horas hasta que me desperté sobresaltado—Mierda…—susurré al ver el “pequeño” problema que había surgido a causa de mi sueño, ya había anochecido, el reloj marcaba las 11:55pm rápidamente eché un vistazo a Sasuke que seguía profundamente dormido, suspiré pesadamente y entré al baño, me quedé mirando aquel cuarto de baño, la verdad mis padres se lucieron con mi apartamento, 3 de las cuatro paredes de aquel cuarto de baño eran completamente de espejos, la única que no era así era la que daba a la ducha, la pared de ese lado era labrada; el suelo del baño era de cerámica a excepción del de la ducha que era de lajas, las puertas de la ducha eran de vidrio transparente en medio de aquel amplio baño estaba una enorme tina.

De repente recordé porque estaba ahí, me quité toda la ropa y me metí a la ducha y encendí el agua helada—¡Diablos!—grité al sentir aquella agua que parecía sacada del Ártico, miré abajo y vi como aún mi problema no baja—Genial…—murmuré entre dientes, tomé mi pene entre mis manos y empecé un suave vaivén—Ummm….—empecé a gemir suavemente, cerré mis ojos e inmediatamente visualicé al causante de aquella erección—Sasuke…—gemí mientras tomaba un ritmo más veloz—Sasu…Sasuke…—recordaba aquel maldito sueño, era donde finalmente ambos nos fundíamos en un solo ser—Ahhh…Sasuke…— ¡Oh aquel sueño había sido la gloria!, el solo recordar sus manos recorriendo mi ser hacía estremecer mi cuerpo como si en verdad lo estuviera sintiendo.

—Realmente estoy molesto…—susurró una voz en mi oído, me quedé helado, abrí los ojos y me encontré cara a cara con Sasuke; ¡Maldita sea ¿En qué momento entró a la ducha conmigo?!—Creí que habíamos dicho que estábamos ahí el uno al otro para ayudarnos a resolver todo tipo de problemas.

—E—es que…—empecé a balbucear mientras veía su camiseta blanca pegarse a su cuerpo a causa de que la ducha seguía encendida—¿No estabas dormido?

—Tus gemidos me despertaron—dijo cruzándose de brazos—¿Por qué no solo me despertaste?

—Yo…quería hacer las cosas bien—admití—quería que estuviéramos listos…

—¿Qué te hizo pensar que me negaría?—lo miré confuso— Naruto…sé lo que quieres, desde el primer momento que tus pervertidos ojos se posaron en mí lo supe—me sonrojé violentamente— Pero estos últimos días lo has deseado más, ¿Por qué simplemente no lo pediste?

—Quería esperar hasta nuestro aniversario—admití avergonzado, al siguiente segundo estaba devorando sus labios, luego de unos segundos nos separamos.

—Feliz aniversario…—susurró con una sonrisa, lo miré extrañado y dirigí mi vista al reloj que había a un lado el reloj marcaba las 12: 05 am— Bien ya puedes tomar tu regalo…—yo lo miré con una sonrisa—Vamos Naruto…—susurró mientras acariciaba con sus dedos mi barbilla—Hagámoslo aquí y ahora…—aproximó su rostro hasta que pudo con su lengua delinear mis labios, me estremecí ante aquel contacto, ¿o era por el agua?

Yo solo atiné a sonreír—Antes que nada…—susurré—Te amo…y deseo que este momento lo disfrutemos ambos, quiero pertenecerte y que me pertenezcas—me miró sorprendido, si ni yo sabía que tenía para poeta, pero era le verdad—No deseo tener sexo contigo Sasuke Uchiha…de eso ya he tenido suficiente…deseo experimentar a tu lado por primera vez lo que las parejas llaman hacer el amor.

—No estoy seguro como se hace eso…—admitió— Al igual que tú solo he tenido sexo…Pero no sé cómo se diferencia…

—Ni yo…—sonreí un poco— Creo que es poner tu corazón en cada caricia…en cada roce…en cada beso—susurré para besarlo con todo mi amor, sentí como él me correspondió, lo abracé con todas mis fuerzas y sentí como se estremecía bajo mis brazos.

—Naruto…—susurró mientras se separaba un poco de mí y le empezaba a desnudar lentamente, miraba atento todas sus reacciones, aquel brillo en sus ojos, la soledad de hace un año había en sus ojos se había desvanecido para dar lugar al amor. Finalmente ya hacía frente a mí sin prenda alguna, nos quedamos mirando fijamente, recorriendo con nuestras miradas cada parte de nuestro cuerpo, porque así era su cuerpo me pertenecía así como el mío era de él, nuestras miradas se rencontraron y nuestras bocas se unieron ansiosas, nuestras lenguas empezaron una danza erótica, sentía sus brazos explorando con total libertad por vez primera todo mi cuerpo, al igual que las suyas mis manos se deleitaban tocando finalmente por completo aquel cuerpazo de infarto.

—Nos sabes cuánto he esperado por esto…—susurré una vez rompimos aquel beso, él solo me sonrió y bajó hasta quedar al nivel de mi entrepierna, sus manos empezaron a acariciar mi pierna desde el tobillo e iban ascendiendo lentamente mientras que en la otra hacía lo mismo, solo que son sus labios, yo solo cerré los ojos al sentirme poseído por aquella sensación única, sentí como sus manos llegaron al final de su recorrido, abrí mis ojos y vi como me sonreía, como su mirada penetró hasta lo más profundo de mi ser, su expresión: inigualable.

Lamió todo mi pene haciéndome estremecer por completo—¡Sasuke!—gemí mientras sentí que las piernas me temblaron cuando apresó en su boca mi pene—Ah…ah…Sasu…—su lengua recorría todo sin el menor pudor, jamás sentí sensación como aquella, no era porque fuese mi primera felación, pero aquella era diferente, no por la forma arrebatadora que lo estaba haciendo, pero era algo más…Sasuke estaba no usando solo su lengua, usaba su corazón en aquel acto que poco a poco me iba robando el aliento—Ya casi…—dije con mi voz ronca de la excitación—¡Sasukeee!—gemí mientras arqueaba la espalda y depositaba en su boca toda mi semilla, me apoyé contra la pared, él nuevamente se puso en pie, yo solo pude sonreírle y besarlo.

—Espero que haya valido la espera—susurró para luego morder mi lóbulo, sentí como me estremecía por completo, ya había sido suficiente…ya se había divertido conmigo, hoy me tocaba a mí, en un rápido movimiento lo aprisioné contra la pared.

—Mi turno—sonreí besé su boca, eterna adicción mía y bajé hasta su pene y lo engullí por completo, aquel gemido hizo que algo en mi interior despertara y esta vez si eran pensamientos mal sanos, mi lengua recorría lentamente su extensión haciéndolo estremecer cada vez más.

—Na…Naruto…—aquella voz ronca solo conseguía prenderme más y más, empecé a sacar y a meter su pene de mi boca cada vez más rápido—Y—ya no…aguanto…—susurró luego de unos minutos, esperé ansioso mi recompensa hasta que finalmente llegó acompañada del gemido más sensual que jamás había escuchado, bebí cada gota de aquella sustancia lo miré fijamente con una sonrisa antes de besar su cuello suavemente, de su boca salió solo un suspiro, le di la vuelta, su cuerpo se estremeció cuando apegó su pecho a la fría pared, empecé a rozar con mis labios su espalda que era lo que ahora tenía de frente, froté mi pene contra su trasero—¡Ahh…!—gimió Sasuke apegándose más a mí, empezó a frotar su trasero más y más.

—¿Estás listo?—susurré divertido al ver su reacción.

—Sí…—gimió Sasuke, al sentir que cada vez mi miembro de ponía más duro.

—¿Lo deseas? ¿Qué tanto?—le susurré para abrazarlo por la espalda y apegarlo más a mí, mis manos empezaron a recorrer su abdomen hasta que empecé a pellizcar una de sus tetillas.

—Ahhh…Mucho…—gimió—Vamos no me hagas esto…—gimió preso de la excitación, sonreí, lleve una de mis manos hasta su boca—No…te quiero ya adentro…

—No quiero lastimarte…—dije preocupado al ver su reacción.

—Solo hazlo antes que me arrepienta y seas tú el que este en mi posición—gruñó mientras apegaba más su trasero a mí—Solo entra de una vez…—Suficiente convencimiento, profané su interior de una sola y profunda embestida—¡Ahhhh!—gritó mientras sentí como todo su cuerpo se estremecía y apretaba más mi pene.

—¡Ummm…Sasuke!—gemí de placer al sentir como mi pene era apresado por tan enloquecedora estrechez—¿Es—estas bien?—dije jadeante, no había logrado distinguir si aquel grito era de placer o de dolor.

—Sí…muévete…—dijo con voz ronca, empecé con una suave embestida—Umm…—gimió de placer, empezamos con un lento vaivén, entraba y salía suavemente de su cuerpo mientras besaba su cuello él agua seguía recorriendo nuestros cuerpos—Te quiero más adentro…—gimió de repente.

—De acuerdo…—susurré en su oído, mientras salía de su interior y lo volteaba—Tengo una idea…—lo alcé y lo pegué contra la pared, enrolló sus piernas a mi abdomen mientras yo volvía a entrar a él.

—¡Ahhh!—gimió sensualmente ahora en mi oído—Ummm Naruto…vamos….dame más, lo quiero….duro y sucio—sonreí ante aquella petición pero le di lo que quería empecé con vestidas más profundas, más bruscas que solo hacía que Sasuke gimiera más fuerte—Ahh…así…más…—yo estaba volviéndome loco, al sentir como aruñaba mi espalda, al sentir como besaba mi cuello, como mordía mi clavícula—Naru…Naru…—¡Aquella voz tan erótica que se escapaba de sus labios solo hacía desear que aquel momento jamás acabase!

—Ya no aguanto….—susurré, mientras sentía como Sasuke rompía el abrazo que habíamos mantenido, apoyaba sus manos en mi pecho, mientras me veía fijamente y yo lo miraba sin dejar de penetrarlo de aquella manera tan salvaje que nos acercaba poco a poco al climax—Sasuke…—susurré con una sonrisa, él tomó mi barbilla y con una sonrisa me hizo girar un poco mi cabeza, ¿Qué quería? Cuando volteé lo averigüé lo que quería mostrarme, ahí estábamos lo dos reflejados en aquella pared de espejo, los dos fundidos en un solo cuerpo, él miraba la reacción en mi rostro, aquella era la imagen más erótica que seguramente experimentaría en mi vida, sentía mi corazón que latía sin control, no pude desprender la mirada de aquel espejo, hasta que Sasuke me hizo volver a mirarlo, yo sonreí al verlo así, con sus mejillas sonrojadas, viendo su pecho subir y bajar con una rapidez asombrosa a causa de la necesidad de aire, sus mechones pegados a su frente, el agua bajando sensualmente por su cuerpo y por el mío, su boca entre abierta aquella imagen solo hizo que diera una última embestida en su cuerpo—¡Ahhh!—gemí al sentir que llegaba al ansiado climax.

—¡Ahhh Naruto!—gimió Sasuke al mismo tiempo mientras vaciaba su semilla en nosotros, mientras yo lo hacía en su interior, sentí como se aferró a mí al sentir como lo inundaba por completo con mi esencia, nos quedamos así hasta que me di cuenta que se había dormido en mis brazos, salí de su interior con cuidado para no despertarlo y lo llevé hasta nuestra cama donde finalmente caímos rendidos ante el sueño.
Cuando abrí los ojos unos brillantes ojos negros estaban observándome—Buenos días…—susurré con una sonrisa, él solo sonrió de lado—¿Y bien?... ¿Qué te pareció?

—Único….—dijo mientras me miraba fijamente— Jamás me había sentido así, no puedo compararlo con nada…¿Crees que lo logramos?

—¿El qué?—pregunté—¿Hacer el amor?—él asintió—Por supuesto…—susurré con una sonrisa mientras lo besaba, así que finalmente ambos dejamos de lado el sexo y lo reemplazamos con algo más fuerte, aquella madrugada estaba seguro de que ninguno de los dos podrá olvidar jamás, puesto que fue la primera vez que ambos incluimos a nuestro corazón….fue la primera vez que ambos hicimos el amor…

Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).