°_°_°_°_°_°_°_°_°_°_ Enero °_°_°_°_°_°_°_°_°_°_
-Y aquí lo tienen, empacando sus pertenencias para darle la razón a su amigo y no a su representante-comento el chico pelinegro con gafas obscuras, sentado en la orilla de la cama
-ya te lo dije Shino, quiero pasarme alegre estos días, no quiero estar encerrado en el maldito piso viendo pasar mi vida-responde a la defensiva un rubio que sacaba del closet ropa y la metía en su maleta
-escúchalo por favor, mira aquí lo están describiendo a detalle además está bien...-un chico castaño, con unos extraños triángulos invertidos dibujados en su mejilla
-hum- fue la escueta respuesta del azabache que estaba sentado a su lado en el aeropuerto
-bien entonces te leeré lo que escribe esta revista, pon atención-miro a su acompañante y después se metió de lleno a la lectura del artículo-esto pone así:
Este chico cuenta con 19 añitos y ya es todo un modelo reconocido y aclamado por las chicas amantes de los Bishonen. Su cabello rubio compite contra los rayos de nuestro rey astro. Sus ojos azules son incomparables con el cielo mismo .el color de su piel es bronceado, no en exceso es un panque hecho por un experto chef italiano. Su rostro cuenta con una sonrisa zorruna, mostrando sus perfectos y blancos dientes, que deslumbrarían al propio brillo de la luna misma. Sin más paradas les dejo con una pequeña frase del mismo modelo que tuve oportunidad de conocer:
La peor derrota de una persona es cuando pierde su entusiasmo."
-wow, este articulo habla muy bien de ese chico-termino su lectura con una sonrisa-míralo hay una fotografía integrada-le entrega la revista a su azabache compañero.
-¿Naruto Uzumaki?-sus manos níveas tomaron la revista leyendo el nombre de aquel rubio
-achu-estornudo el rubio justo cuando serraba su maleta
-lo ves, es enero aun hace frio y tu ¿viajas a una playa? Estás loco Naruto-sentencio su amigo levantándose de la cama
-no estoy enfermo-sonrió conciliadoramente-alguien ha de estar hablando sobre mí.
-cuando regreses avísame te iré a recoger-Shino se colocaba una chaqueta tomando sus llaves entre sus manos-no olvides que te tienes que cuidar y salúdame a tu familia-sonrió antes de salir
Naruto sonrió, ese era su amigo, y el de hace un momento su representante. Shino tenía complejo bipolar, a veces le hablaba como su representante y otras como su amigo. ¿Cuándo entendería que no necesitaba que lo regañasen?
Comino en dirección a la salida, antes de serrar la puerta le dio un último vistazo a su departamento, con la paga de su trabajo lo había podido remodelar, con sillones grandes y acolchonados, piso de madera un comedor pequeño pero fino de cristal cortado para seis personas, una cocina negra y pulcra y por supuesto tres habitaciones una de él y otra para los huéspedes y sin dudar su habitación favorita y prohibida para cualquiera, por supuesto la más grande. Donde podía admirar a la ciudad de noche y pensar claramente sobre su vida. Sonrió para sus adentros y cerró la puerta para salir del edificio y subir al taxi que lo esperaba.
-entonces nos veremos en un mes Kiba-el azabache se levanto al escuchar que su vuelo estaba por salir
-ten lo encuentra Sasuke, eres un fotógrafo profesional y aun no encuentras a algún modelo para tu debut-su amigo lo acompaño hasta la puerta de su vuelo.
-me dijiste que tu pareja representa a un modelo ¿Por qué no le pides una cita?-el azabache le entregaba le boleto a la mujer en la puerta
-dudo que me lo permita, nunca mezcla el trabajo con aspectos personales-sonrió mostrando sus colmillos
-hum-y sin más entro por el pasillo sin despedirse de su amigo
El vuelo para ambos chicos fue reconfortante y rápido. Ambos viajarían a la playa de Hokkaido por distintas razones.
Naruto: visitar a su familia, su amigo Shikamaru lo aviso de la boda de su hermano, tenía que viajar para no quedar mal con si aniki, además de que el viajecito le serviría para relajarse y ver a su apreciable familia. Además de saber que tan bien estaba la relación de su ex-novio con el pintor de cuarta que conoció en Venecia. Se daría una vuelta por Sapporo donde seguramente se realizaría la boda. Después escaparía a Hokkaido a la playa, tomaría un merecido viaje turístico por esa zona.
Sasuke: tomar fotografías que le ayudasen a encontrar el paisaje perfecto que exprese lo que en realidad la naturaleza les ofrece, pero de una manera distinta, no con la alegría que todos los fotógrafos y pintores aprecian a su espectadores. ¿Por qué ocultar la verdad con retoques ofensivos? Por eso había llegado lejos, un fotógrafo que busca perspectivas diferentes a las monótonas. La playa de Hokkaido llamo su atención en particular. Tomaría algunas fotografías y buscaría algunas de la ciudad.
Caminaba por las calles cerca del puerto, me habían dicho que la playa de aquella zona era hermosa por las noches. Así que cuando llegue al hotel y después de una reconfortante ducha salí en dirección a la playa. Llevaba mi cámara en mi mochila, no sabía qué tipo de clima encontraría en la playa, pero aun así salí sin algún suéter o polera que me cubriera del frio que era consiente aria. Al llegar a la orilla de esta, la visión más hermosa que en mi vida haya visto estaba posando para mí frente a mis ojos.
Un joven rubio estaba sentado frente al gran y hermoso mar que se reflejaba en mis orbes azabache. A esas horas de la noche la playa estaba bacía, como me lo informaron tiempo atrás, ¿Qué loco iría con el frio de la temporada a la playa y sobre todo por la noche?, pues un loco como ese rubito, un ángel, MI ángel.
Me quede ahí parado sin entrar aun en la arena, ese rubio estaba a espaldas de mi, así que pienso no se percato de mi presencia, ni de mi mirada fija en su persona.
Se llevo sus piernas a su pecho, rodeándolas con sus manos, serrando en el instante sus parpados para tomar la ligera brisa que el viento llevo hasta su rostro y sin pensarlo comenzó con una tonada salida de su garganta la voz más melodiosa que había escuchado, ¿a caso todo de ese chico era perfecto y encantador?:
Extendió sus manos como un pájaro, ¿acaso quería volar?, pero fue cuando me di cuenta que su atuendo era en total blanco, con una polera blanca, ligera como si el frio no le inmutase, algo holgada. Se levanto de la arena y pude ver que tenía unos pesqueros a la cadera.
Camino sin dejar de cantar en dirección a la saladita agua que tenia frente a él, pude percatarme que a cada paso que deba la arena se hundía en sus pies descalzos, como si se tratase de un príncipe la arena volvía a su habitual textura cuando la piel morenita dejaba de pisar sobre los granitos cafés.
Comenzó a girar como un adorable pajarito, con sus pies dentro del agua y sin percatarme sonreí y ¿Cómo no hacerlo? MI ángel levanto su rostro hacia el cielo manchado de lucecitas pequeñas, grandes y brillantes, en su rostro se dejo ver una sonrisa embrujarte sin dejar de pronunciar las palabras que formaban líneas para convertirse después en versos.
Su cuerpo no dejaba de girar ingresándolo poco a poco más adentro de lo que en un principio estaba. Las olas bailaban al compas que su cuerpo, acompañándolo en aquel canto y baile, se detuvo por un momento, para mi desgracia de nuevo dándome la espalda. Extendió sus manos frente a su cuerpo y recito de nuevo otra estrofa.
Al terminarla volvió sus brazos a sus costados y dio tres o cuatro giros más pero en esta ocasión con los brazos en su lugar, algo debió salir mal ya que veo como cae al agua. Ese dobe, sus pies debieron haberse enredado y tropezó por sí mismo y sin más vuelvo a sonreír. Pero mi mueca cambia en un instante.
Cuando el muy...usuratonkachi cayo llego una ola que lo cubrió por completo. Corro en su dirección aun con mis sandalias y mi mochila a cuesta, una vez que estoy un poco más cerca tiro sobre la arena la mochila y entro en su ayuda. La ola aunque pequeña logro volver a tumbarlo antes de que se levantara y fue arrastrado un poco. Lo tomo por debajo de sus hombros y lo levanto tratando de dejarlo de rodillas, escucho como comienza a toser y se toca su garganta.
-es lógico que te arda, debiste haber tragado una gran cantidad de agua salada con ese revolcón ¡que pensabas! ¡¿Qué no te podías tropezar y caer jugando a dar vueltas?!-mi voz se escucha molesta y a la vez preocupada
-lo...-tose de nuevo y trata de levantarse, por supuesto lo ayudo a levantarse-siento-tirita llevándose sus manos a sus hombros frotándoselos en busca de calor.
Lo miro incrédulo, ¿hasta ahora se da cuenta del frio inferna que está haciendo? Y sin pensarlo dos veces lo atraigo hacia mi pecho y lo abrazo tratando de proporcionarle un poco de calor, aun que con mis ropas también mojadas lo dudo. El se deja hacer y se entierra en mi pecho, parece un chiquillo temblando de frio abrazado por su padre.
-¡eres un inconsciente! ¿Qué hubiera pasado si no hubiera estado para salvarte?...-pero soy interrumpido por las convulsiones de su cuerpo, ¡genial Sasuke! Lo has hecho llorar-oye...no es para tanto yo solo...
Pero no vuelvo a terminar mi frase por que la risita que profesa el ángel entre mis brazos me sorprende. ¿Estaba aguantándose reír? Por dios este chico si me sorprende.
-perdón-se separa de mí sonriendo y con rastro aun de risitas-es que fue divertido-se limpia las mejillas y hace una mueca de dolor-auch
-solo lograras rosarte de esa manera-mi rostro vuelve al mismo de siempre, frio-vamos dobe, tengo una toalla en mi bolsa-salgo de la húmeda habitación que me rodea
Escucho el chocar del agua contra mis pies, poco después es secundado por otros roses, es seguro que también este saliendo del agua. Y aun así la vocecita ronca que sale de sus labios me hace sonreír, pareciese que fue más preocupante para mí, un desconocido que para él, el dueño de la vida en peligro.
Me acerco a mi mochila y me siento a un lado, abriéndola y dejando ver varias cámaras y en un apartado la toalla antes mencionada, la verdad es que soy muy ordenado con mis pertenencias y no dejo que nadie las toque. Saco la toalla y un paquete de pañuelos desechables. Observo que el rubio se sienta del otro lado de la maleta, viendo de nuevo en dirección al mar, pero en esta ocasión sin la sonrisa que antes presentaba su rostro.
-límpiate-le ofrezco el paquete de pañuelos y el los acepta agachando la mirada después de tomarlos entre sus manos- y bien, ¿Qué hacías dentro del agua a estas horas?-le pregunto mientras me quito las sandalias
-¿tienes un poco de crema?-me pregunta girándose hacia mí y volviendo a sonreír ¿es caso que es bipolar?
-¡¿y tú que me crees?! ¡¿Qué me cargo un botiquín de emergencia?!-me molesto pues me ve con cara de dobe-confórmate con los pañuelos-le digo para dejar a un lado de mi mis sandalias
-no seas bastardo, se que tienes por ahí-me dice inflando sus mejillas, un puchero que lo hace ver encantador-además mi piel es muy delicada, si se me rosa o queda alguna marca me reñirán en el trabajo
¿¡Pero este chico que se cree!? No soy yo su madre para andar cuidando de su "delicada" piel si quiere MI crema tendrá que costarle.
-no pienso darle mi crema a un baka como tu-finalizo para levantarme y empezar a quitarme mis pantalones ante la mirada atónita de mi acompañante
-¿¡PERO QU… ESTÁS HACIENDO!? ¡ERES UN PERVERTIDO!-comienza a gritar y sonrojarse al mismo tiempo, je lo cache
-¿Por qué te sonrojas? Tu y yo somos hombres tenemos lo mismo no hay por qué preocuparse-veo como frunce el seño y me saca su linda lengüita en forma de protesta-además es tu culpa-termino diciendo para que no despegue la vista de mi, de alguna forma me gusta ponerlo nervioso
-¿es...mi culpa?-pregunto de lo más inocente, ladeando la cabeza y colocando su dedo índice en la barbilla. Definitivamente este chico es bipolar, ya esta calmado de nuevo
-si-me ahorro un suspiro y sacudo y exprimo mi pantalón-tuve que mojarme cuando entre al agua para salvarte dobe
-deja de llamarme dobe-me pide mientras se asoma por encima de mi mochila y saca el botecito de crema-¿Por qué traes este tipo de cosas?-me pregunto abriendo y untando un poco el liquido de la crema
-¿Por qué lo has tomado sin permiso?-sin querer una venita palpitante salió a relucir en mi rostro
-no te pongas rudo teme, ya me empezó a arder la cara-en esta ocasión el suspiro sale por mi bona y me vuelvo a poner el pantalón ahora menos pesado
La verdad es que discutir con este dobe me hiso sentir ligero, creo que su compañía me reconforta y eso me alegra, claro de alguna manera. Me vuelvo a sentar y miro como termina de limpiarse el rostro, parece un angelito con esa piel en tono rosa, creo que si era delicada su piel. Y sin realmente pensarlo me imagino acariciando su mejilla, debe ser tersa y cálida. ¡¿Pero que estoy pensando?!
Y sin darme cuenta, cuando salgo de mis pensamientos tengo su rostro frente al mío, a un palmo de distancia. Y eme ahí perdido en sus ojos, me veo reflejado en esos orbes color azul...sin duda un azul intenso pero a la vez claro, con ese brillo de un niño pero con deje de seducción, y de pronto, me veo a un más hundido en ese ser mítico que tengo frente a mi cuando me sonrió tranquilamente y acerca su mano a mi rostro.
Y aun con mis cinco sentidos destrozados y mi cordura escondida, doy un pequeño gemido al sentir contra mi piel un líquido frio. Y la sonrisa antes tranquilizadora se volvió una de burla.
-que sensible saliste teme-agacha su rostro a mis pies y ensancha a un más su sonrisa-es solo c-r-e-m-a, también tienes granitos de sal-y empieza a limpiarme con el pañuelo el rostro, claro yo me dejo hacer.
Mientras él me limpiaba amablemente aun con esa sonrisa posada en sus labios, yo lo vea a detalle, claro con esas ropas semi-transparentes se veía bien. ¡Pero a hora imagínenlo con la ropa pegada a cuerpo! Era toda una deidad, cuanto agradezco que se haya mojado completo, la ropa se le pega a su cuerpo y puedo ver su pecho, esta algo trabajado pero no en exceso y esas piernas que mmm...Me mordí el labio inferior al posar mi vista en el poco visible culito de mi rubio.
Se encontraba a cuatro sobre mí, y creo que fue esa posición la que me hiso decidir que si, ese rubito era SOLO MIO, de ahora en adelante el ME pertenecía solo a mí, no lo voy a dejar escapar.
-bien teme estas limpiecito-se separo de mi sentándose sobre mis piernas y sonriendo-gracias por salvarme y lo siento por tu ropa-y tan rápido como la velocidad de un auto de carreras se acerco a mi mejilla y deposito un beso en mi mejilla
Me quede atónito ante tal acción y no me percate cuando se levanto y se coloco frente a mí de pie y aun sonriendo, pero con la diferencia de un sonrojo en su mejilla. El sonido de las llantas de un auto rechinar me saco de mis pensamientos y ensoñación. Ambos dirigimos la mirada al auto que se detuvo a las orillas de la playa.
-¡Naru!-grito un chico de coleta y cabezo café obscuro, con una cicatriz en el rostro-¡te he estado buscando!
El chico se bajo de la parte trasera del auto y corrió para abrazar a MI rubito, eso me molesto en demasía ¿Quién era ese para venir a interrumpir tan maravilloso encuentro?
-la abuela nos está buscando-no lo dejo de apretujar, ante los intentos de separarse de mi rubio
-nii-san, no puedo respirar-su voz se escucho algo entre cortada por la falta de oxigeno
Nii-san, baya así que era su hermano eso me quita un peso de encima y puedo decir que escuche parte de su "nombre" Naru...
-wow, ¿Quién es el chico?-pregunto el de coleta señalándome
-¿mmm?-mi chico volteo a verme y sonrió nerviosos-eto... ¿cuál es tu nombre?
Si no fuera tan guapo y tierno juraría que lo agregaría a la lista de mi venganza. Pero también fue mi culpa soy perfecto y lo reconozco. Tampoco he preguntado yo su nombre.
-Sasuke, Uchiha Sasuke-me levante de la arena para ofrecerle la mano en forma de saludo a mi nuevo cuñado. Este me miro por un momento y acepto mi ofrecimiento con un buen apretón de manos, lo cual me indica que es una persona con mucha seguridad, sin duda hermano de mi rubio.
-Iruka, Iruka...-el chico se quedo pensando que responderme, de pronto sonrió-en realidad soy medio hermano de Naru, mi apellido es Umino, después fue Namikaze y creo que ahora cambiara a Hatake
Mi rubito rio junto a su ahora "medio" hermano. No entendí mucho eso de sus apellidos, pero Hatake es el apellido del socio de mi hermano, es demasiada coincidencia, pero no me quedara con la duda.
-entonces...-pero antes de que pudiese formular la pregunta que me sacaría de la duda, una tercer voz me interrumpió
-Iru-chan, sigo esperando-un peli-plateado salía del auto en dirección a nosotros
-lo siento Kakashi, es solo que conocí a un amigo de Naru-chan-le respondía al chico que salía del asiento del piloto hace un momento.
Iruka camino a la orilla de la arena para que el peli-plata lo viera y se acercara. Mientras ellos estaban en su mundo el rubio se me acerco y sonrió, colocando sus manos en su espalda.
-lo siento no me he presentado-me sonrió de lo más conciliador-me llamo Namikaze Naruto, para mi hermano y su pronto esposo soy Naru-me sonrió ofreciéndome su mano.
Acepte sin chistear la mano de mi rubio. Mire de nuevo esos azulinos ojos perdiéndome como idiota dentro de la pureza y dulzura con la que me miraba. ¿Amor a primera vista? Aun no lo sé, pero es más claro a hora en mi cabeza. Encontré a la persona que puede ayudar en la búsqueda de mi visión verdadera en las fotografías.
-Sasuke-el peli plata me saco de mis ensoñaciones haciéndome girar en su dirección-pensé que no asistirías a mi boda, envié una invitación a la oficina de tu hermano, el ya está en Sapporo para la gran pachanga- me dijo el socio de mi hermano
-¿le conoces?- me pregunto con ingenuidad Naruto
-hum-fue lo único que atine a decir
-soy el socio de su hermano, Uchiha Itachi-comenzó a explicación Kakashi que tenía una mano en las caderas de su prometido-la verdad es que Itachi y yo somos buenos amigos, pero los negocios y amistades no se mezclan, así que por hoy y mañana Itachi es mi amigo y Sasu-chan es como mi hermanito pequeño
Kakashi comenzó a reír e Iruka sonrió, escuche una pequeña risita departe de mi Naruto, cuando lo voltee a ver este sonreía con una mano en su boca tratando de no dejar escapar su risita, con los ojos cerrados, parecía un niño lindo y tierno.
-¿Por qué no asistes con Naru-chan a la boda?-me pregunto de pronto Iruka
-es cierto aun no tengo pareja-le informo Naru a su hermano-¿Qué dices Sasuke? ¿Quieres ser mi pareja para mañana en la boda?
Sasuke regreso a su hotel con una alegría dentro de sí mismo, había aceptado la invitación del zorrito, de SU zorrito. Pero no lo demostraría, además de que tanto Iruka como Kakashi le habían pedido que dejara el hotel. En la casa de los Namikaze había bastantes habitaciones como para que un invitado estuviera en un hotel.
Al principio rechazo la oferta, no era un invitado, simplemente coincidencias, pero la carita de su rubio desilusionada lo había hecho ceder ante la petición. Pero como era de esperarse del peli plata, lo monto al auto y lo llevaron al hotel para que recogiera sus cosas, esa misma noche la pasaría en la mansión Namikaze.
Termino de empacar sus pertenencias, en realidad no había sacado mucho de las maletas y bajo a recepción.
-ya hemos cancelado tu hospedaje Sasuke-le informo Kakashi a Sasuke, ayudándolo con una de sus maletas-aun sigues de fotógrafo
El peli plata le afirmaba lo dicho mientras caminaban a la salida donde Naruto e Iruka los esperaban dentro del auto.
-así es Kakashi-caminaba junto a este
-enconches... ¿Naruto es tu nueva musa?-sonrió dentro de su bufanda
Sasuke se detuvo ¿Cómo pudo saberlo? No había sido tan obvio ¿verdad?, pero ya no le importaba había encontrado al chico perfecto, peo de alguna manera sabia que ya lo había visto en algún lugar
-parece que Naruto se enamoro a primera vista al igual que Iruka-saco de sus pensamientos a Sasuke
-¿Qué quieres decir?-Sasuke retomo el paso olvidando por completo donde había visto el rostro del chico
-parece ser que un eres un pelmazo-abrió la cajuela del auto y metió las maletas-vamos que nos espera un viaje largo hasta Sapporo
El viaje era largo, no mucho a la velocidad en que viajaba Kakashi, pero largo como una hora o dos. Los actuales prometidos viajaban al frente mientras atrás Sasuke junto a Naruto que estaba cobijado por una manta azulina.
Pronto comenzó a obscurecer a un más. Naruto cabeceaba de vez en cuando, el sueño y esa revolcada en la playa lo habían cansado. Sin pensarlo Sasuke se acerco a Naruto y lo recostó en su hombro. Mientras un somnoliento Naruto se dejaba hacer, y con el cansancio que se cargaba termino cayendo a las piernas de Sasuke, el cual no se inmuto, solo acaricio suavemente la cabellera rubia de su ángel mientras lo miraba con ternura.
Los mayores veían tiernamente la escena. Vaya que el destino es grande y las vidas pequeñas. Esos chicos estaban destinados el uno al otro. Como les sucedió a ellos, un amor a primera vista y después el compromiso por ambas familias.
Naruto había está comprometido con Sasuke desde pequeños. Y la boda a realizar dentro de unas cuantas horas también serviría para que se conocieran por primera vez, tanto la familia Namikaze como la Uchiha estaban reunidas en aquella mansión, ambas casa querían la unión de sus pequeños herederos, mientras que estos ya habían sido reunidos por el destino.
Llegaron a la mansión, una rubia de ojos color miel junto a un hombre peli blanco estaban esperando a los novios en la entrada de la mansión. La mansión contaba con amplios jardines y un lago detrás de esta que alcanzaba a distinguirse desde la entrada, era una mansión tipo de campo, ya que parecía más una casa de vacaciones que una de verdad.
-tardaron demasiado-se acerco la rubia al auto para asomarse en la parte posterior-¿trajeron a Naruto?
Esta abrió los ojos de sorpresa al ver a su nieto en durmiendo en las rodillas de un pelinegro que enseguida reconoció y sonrió con dulzura.
-así que ya se conocieron-susurro para sí misma-Jiraya (n/t: perdón, si escribí mal el nombre corríjanme x fa n//n) lleva a Naruto y a Uchiha-san a su habitación-ordeno a su esposo
-vieja borracha ¿Por qué tengo que hacerlo yo?-le recrimino a su esposa
-mira viejo rabo verde-en la cabeza de la rubia apareció una venita palpitante y un pucho que daría directo a las costillas de su marido se levanto-haz lo que te digo si no quieres que tire tus cochinos libros...
-clama Tsunade-intervino el peli plata-yo lo ayudare-abrió rápido la puerta trasera del auto-baja Sasuke, te llevaremos a la habitación
Sasuke aun estaba en la parte trasera del auto con un Naruto sonrojado y de vez en cuando suspirando, no quiso moverlo, pero la voz de Kakashi lo despertó de a poquito.
-claro Kakashi, como tú también eres adicto a esos libros lo ayudaras-un enfadado Iruka lo miraba con los brazos cruzados, entrando a la mansión enojado
-Iru-chan espera, no es lo que piensas-y dejo a Sasuke a medio ayudar corriendo tras su koi
La rubia suspiro y se asomo por la puerta abierta del auto, sonriendo tiernamente al ver a su nieto frotándose los ojos y al pelinegro sonriendo cálidamente.
-Naru-llamo Tsunade al rubio acariciándole la cabeza-tienes que subir a dormir, mañana será un día ajetreado
Naruto solo atino a asentir, tratando de bajar del auto sin mucha facilidad. Sasuke se percato d esto y lo tomo de la muñeca para que lo mirara.
-yo te llevo o te caerás en el camino dobe-salió del auto por la otra puerta
Naruto inflo sus mejillas en forma de puchero, pero aun con los ojos entrecerrados por el cansancio que aún conservaba su cuerpo. Sasuke llego frente a él y se inca para ofrecerle su espalda, Naruto lo miro y sin pensarlo se lanzo a la espalda del moreno sintiendo la calidez de su espalda.
Tsunade veía a un Sasuke delicado tomando las piernas de Naruto para acomodarlas a su espalda, como si de un momento a otro el chiquillo fuera a romperse como un cristal. Se levanto y lo acomodo mientras que el zorrito pasaba sus manos en el cuello del albino para apresarlo más hacia él y no caer.
-sigan a el viejo que esta por allá, los llevara a su habitación-ofreció la mujer para después sonreír-espero se la pase bien Uchiha-san
Sasuke se sorprendió porque la rubia supiera su nombre, pero no le prestó importancia, en realidad tenía un gran parecido a su hermano Itachi, así que si él idiota de su aniki andaba por esos rumbos era lógico saber que su apellido era Uchiha.
Camino en dirección al viejo que la mujer le indico, no hubo saludos ni nada por el estilo, pero si una mirada fría y molesta departe del peli blanco. Camino indicándoles el camino de la habitación. Al entrar se percato que se encontraban las escaleras, a su mano derecha la entrada a la sala, a mano izquierda la entrada al comedor. Aun lado de las escaleras un pasillo que suponía el alvino daba a la cocina y algunas otras partes de la casa. El peliblanco subió las escaleras seguido de Sasuke con un rubio durmiendo a pierna suelta sobre él.
-esta es la habitación de Tsunade, la vieja rubia que estaba afuera y la mía-indico la primer puerta que se encontraba subiendo las escaleras-somos los abuelos de Naruto, si se te ofrece algo llámanos, procura no hacerlo-siguió avanzando por el pasillo de las habitaciones
A cada habitación le era informado a quien le pertenecía. Casi terminaban el pasillo y aun no llegaban a la del rubio. Pero pudo informarse donde se encontraba su hermano y sus próximos suegro y para su sorpresa la habitación de sus padres. Se había sorprendido y molestado, no le dejarían estar un rato con el rubito, pero en parte les podía pedir ayuda para que los padres de SU Naru le pudieran otorgar el consentimiento de salir e ir por todas con su hijo.
-esta es la habitación de Naru-le abrió la puerta a la habitación, dejando entrar a Sasuke-buenas noches-dijo antes de serrar la puerta pero lo interrumpió Sasuke
-y ¿Cuál es mi habitación?-pregunto caminando hasta la cama
-¿Qué otra chiquillo?-pregunto con malicia el pelo blanco-por supuesto esta, no será la última vez que duermas con MI Naru-y serró la puerta para dejar a un Sasuke confundido
Sasuke miro la puerta por donde el viejo se había largado, decidió primero dejar a Naruto en su cama, lo dejo delicadamente sobre las sabanas, le quito las sandalias que aun portaba y un mechón dorado de su frente. Sonrió dulcemente.
No le molestaba dormir con su ángel, ¿Quién no quisiera dormir junto a un chico tan mono como lo era su rubio?, poro no confía en el mismo, tener un cuerpo tan encantador como el bronceadito de Naru no le ayudaba mucho. Decidido, dormiría en el suelo, dispuesto a levantarse.
La manita del rubio lo detuvo, lo miro sorprendido pues Naruto había entre abierto sus ojos para verlo y sonreírle.
-me gusta el calor de tu cuerpo-susurro Naru para serrar de nuevo sus ojos-¿me abrazarías para poder dormir?-pregunto para quedar de nuevo rendido a los brazos de Morfeo.
Sasuke no se pudo resistir a la petición, así que se acorruco a un costado de Naruto, ensolviéndolo entre sus brazos, uno en la cintura del rubio y otro en su espalda acariciándolo tiernamente.
Más de cincuenta veranos Hace hoy que no nos vemos Y tú ni el mar ni el cielo Ni quien me trajo a ti..."
Sasuke canto la canción que en ese momento le sonaba en la cabeza para arrullar a su niño...
-Sasuke-susurro entre suspiro el rubio que se acomodaba en el pecho del albino, restregándose contra él.
La sonrisa que se formo en el rostro del azabache alumbro toda la habitación, estaba seguro, mañana le diría al rubito que lo tenía vuelto loco y quería estar con él el mayor tiempo posible, en definitiva se enamoro a primera vista.