Titulo: ¡Papá! Quiéreme…
Resumen: Tres historias incestuosas, tres hijos obsesionados con sus respectivos padres ¿Serán capaces de lograr sus objetivos? ¿Sus padres caerán ante el pecado?
Parejas: Lucius/Draco Remus/Ted James/Harry
1º One-shot: Papá, no me voy. (Lucius/Draco)
Resumen: Lucius decide mandar al extranjero a su hijo, para que termine sus estudios en Francia, pero Draco tiene algo que decir al respecto.
2º One-shot: Papá, yo si. (Remus/Ted)
Resumen: Remus no a tenido pareja desde que Tonks le dejo con el pequeño Ted, y Ted solo aceptara a una sola persona como pareja de su padre.
3º One-shot: Papá, ámame a mí. (James/Harry)
Resumen: James siempre a amado a Lily, aun después de que está haya muerto hace años, Harry solo quiere que su padre le ame a el.
Advertencias: Au (universo alterno) shouta (relación adulto/niño) incesto (relación entre parientes) leve alteración de las personalidades de los personajes.
Capítulos: 3
Actualizaciones: 1º el día: 3 de Febrero. 2º el día: 5 de Febrero. 3º el día: 8 de Febrero.
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1º One-shot: Papá, no me voy.
– ¿padre? – hablo una suave voz, tras la puerta de roble.
Lucius tenia sus ojos fijos en unos importantes papeles de negocios, sin levantar su mirada, le contesto a quien le hablaba tras la puerta – pasa hijo – le ordeno.
Un chico de diecisiete años, entro en el elegante despacho de la mansión, un joven de buen porte, elegante, su cuerpo era delgado, pero que bajo las ropas escondían grandes atributos, su piel era pálida, sus rasgos suaves y perfectos, con unos atrayentes ojos grises y su pelo rubio pulcramente peinado; llevaba unos pantalones negros ajustados, que le marcaban su trasero, arriba una camisa de seda gris oscura, que estaba desabotonada en tres ojales.
La mirada de su padre, jamás se levanto a mirarlo, seguían fijas en aquellos papeles tan importantes. Draco hiso una mueca de disconformidad, al ver que la atención de su progenitor, estaba completa en aquellos papeles, jamás le había gustado, que no le pusieran atención, sobre todo su padre.
– Siéntate hijo – le hablo fríamente, aun sin mirarle.
Draco hiso lo que su padre le pidió, comenzándose a enfadar al ver que su padre no le hablaba directamente, no le miraba… simplemente no entendía por que su progenitor le decía de una, para que lo había llamado.
Lucius sonrió al ver a su hijo desesperado, le miraba de reojo, sin que se diera cuenta; Draco era mucho más expresivo que él, y sabia que estaba desesperado por que le pusiera atención, su hijo aun era un niño malcriado, que siempre desea todo lo que quiere y que sobre todo le pongan toda la atención del mundo. Suspiro sin que su hijo se diera cuenta, ya que le iba a extrañar, pero era por su futuro y bienestar; sin contar que sus sentimientos hacia su hijo, no eran normales y antes de que cometiera alguna locura, debía separarse de él, aun cuando le doliera tanto.
– te iras a Francia a terminar tus estudios – le explico la razón, por lo que lo había llamado, sus ojos grises miraban fríamente a su único hijo – esta todo listo, en dos semanas mas, te iras a Paris – termino, volviendo su atención a sus papeles.
Draco no podía creer lo que su padre le decía… era algo completamente inverosímil, él jamás permitiría que algo así pasara. Después del divorcio de sus padres, por fin podía decir que su mansión, era un verdadero hogar. Su madre solo buscaba el dinero de su padre y jamás empleo su papel de madre, era una simple extraña en su vida, en cambio su padre era todo para él y no permitiría que le mandara lejos…
El rubio menor, se levanto de su asiento con una fría determinación en sus ojos; Lucius había estado esperando los gritos, reclamos y lloriqueos de su hijo, por eso se extraño de su silencio, en un principio había pensado que solo necesitaba procesar la información, pero ya habían pasado un par de minutos. El mayor levanto su mirada, dándose cuenta que su hijo se le acercaba, con pasos ¿sensuales? No eso no podía ser real, su vista debía estar mal o su lujuriosa imaginación descabellada, realmente necesitaba tener un polvo con alguien, para sacar de su mente aquellas imágenes que tenía con su hijo, en situaciones para nada santas.
Draco llego hasta el asiento de su padre, se le acerco lentamente, sus ojos fijos en los de su progenitor, que ahora tenia toda su atención, por lo que el menor sonrió con altanería.
– No permitiré que me alejes de ti padre – le susurro sedosamente el menor.
Lucius abrió sus ojos, completamente asombrado por las palabras de su primogénito, jadeo de sorprendido, al ver como su hijo se sentaba a horcajadas sobre su regazo; era una de las pocas veces en su vida, en que no sabia como reaccionar, que esperar de aquella situación.
– si me mandas a estudiar lejos… – le susurro en el oído a su padre, mientras sus brazos rodeaban el cuello del mayor – si lo haces, juro que te acuso de violación – le amenazo lujuriosamente, mientras le mordía el lóbulo de la oreja, con suavidad.
Lucius se quedo en shock, al escuchar las palabras de Draco, no podía creer la desfachatez que decía, aunque las ganas no le faltaban, para profanar el cuerpo de su hijo, se había aguantado estoicamente, pero sus deseos reprimidos, podían mas que su lógica y moral; sus manos a sujetaron fuertemente las caderas de su hijo, apegándolo mas hacia su cuerpo.
– Si es así… – le contesto a su hijo en el oído – no crees que primero debe ocurrir el abuso…
Y sin esperar respuesta de su hijo, busco los labios del menor, para besarlos hambrientamente, siendo correspondido por su primogénito, con tanta desesperación como él.
Draco sonrió dentro del beso, sabiendo que había ganado y que de ahora en adelante, tendría toda la atención de su padre y que no le enviaría a Francia, su padre era suyo, solamente suyo.
Fin.
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