*******************POVs YUIIJI *********************
Soy Tatsuya Yuiiji tengo 20 años de edad, estoy en mi 3er año de la universidad estudiando administración de empresas. Gracias a mi popularidad puedo salir con cuantas chicas se me antojen, muchos de mis amigos me envidian y alagan por eso, pero otros me lo reprochan el hecho de que no soy serio con ninguna y que salgo con varias a la vez.
En toda mi vida no he encontrado una mujer que me haga sentir lleno, es por eso que si me dejan tener un momento de placer y ellas también lo disfrutaran ¿Por qué no?, es cierto que cada semana estoy con una diferente, pero es que simplemente no me complementan. Me pregunto si estoy destinado a esperar a esa persona predestinada… Desde pequeño he tenido una obsesión con la luna, si fuera una persona, estoy seguro que ella seria la ideal, si tan solo fuera real no pediría nada más.
Actualmente vivo solo en un piso de una torre, ya que toda mi familia vive en el extranjero, ya que mi padre es el dueño de una serie de cadenas de compañías de diferentes tipos; esto me hace sentir un poco solo y vacio, aunque eso no me desagrada del todo. Cuando me gradué espero suceder a mi padre.
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Acababa de llegar a la universidad, como siempre llamando la atención de todos, alto de finos rasgos, ojos verdes, cabellos de un chocolate casi negro (chocone xD), bella sonrisa, simpático… simplemente lo que más de asemeja a perfecto.
-Tatsuya-kun~- le llamo una joven de pelo negro corto no muy alta, pero una de las chicas más bellas y proclamadas de toda la universidad.
-Tomoka-san, buenos días- le saludo con un corto beso en los labios.
-buenos días-sonrió-{suspiro}, hay esta otra vez tu fan club, es increíble no solo hay chicas, sino chicos también- dijo algo cansada de eso.
-supongo que no puedo evitarlo, no es mi culpa ser quien soy- dijo todo orgulloso.
-me siento afortunada de ser tu novia… todas las chicas están molestas porque has sobre pasado tu limite de estar con alguien-rio- ¿sabes?- el soltó un sonido de querer saber. –te quiero-
-gracias- iban de la mano.
Siempre era así, todas las chicas lo querían rápidamente, pero para el Sumine Tomoka no le desagradaba en absoluto, no es que podía decir que la quería, pero no encontraba razón para dejarla, lo sorprendente es que ni siquiera habían tenido sexo aun, pero Yuiiji creyó que era una buena oportunidad para ponerse serio.
Se despidieron y prometieron juntarse en los arboles de cerezo que habían en el campo de la universidad. Yuiiji aparte de ser popular era un estudiante ejemplar, no se podía dar el lujo de ser malo, por su padre, ya que él no lo toleraría.
-habrá un cambio drástico en tu vida- le dijo una extraña voz a su espaldas, el se voltio y era un chico emo.
-¿eh?- fue lo único que articulo.
-Tatsuya Yuiiji ¿no?... lo que más deseas se te cumplirá- fue lo único que dijo y se fue. Yuiiji salió muy temprano de su clase y decidió tomar una siesta bajo esos árboles mientras su novia llegaba.
Un fuerte viento lo despertó, cuando abrió los ojos lo vio allí, un poco lejos de él, un chico de largo pelo, tal vez por la cintura de color rojo, ojos azules, piel blanca como la nieve, finos rasgos, alto; para el oji-verde, le parecía un ángel… hermoso. Cuando le iba a llamar, Tomoka llego.
-tatsuya-kun- le llamo con su dulce voz.
-tomoka-san… espera- volteo a buscarlo, pero no había ni rastro de el. –a donde ha ido?- se pregunto.
-de que hablas?, buscas a alguien?- pregunto.
-no, está bien vámonos-
-te hice esperar mucho?, perdón, vine tan pronto como termine- dijo apenada.
-está bien, fui yo quien llego media hora antes, ¿quieres ver una película antes de cenar?- pregunto.
-Claro, podemos ver Sybil?-
-veo que tienes buen gusto- ella hizo un puchero y el rio- se que si- ellos llevaban un buen tiempo siendo amigos pero solo como compañeros nada mas, y la verdad es que empezaron a salir como pura coincidencia, ella lo ayudo a mentir para que otra chica dejara de molestarlo.
-puedes ser un poco más atento en cuanto a mi persona?, no planeo ser una más de tus novias pasajeras- exigió.
-no lo estaba planeando que lo seas, perdóname si sientes que no te presto mucha atención-
-me alegro, pero está bien, sé que no estás acostumbrado a tener una relación duradera, pero espero que nos ayudemos mutuamente para poder seguir adelante tranquilos-
-sí, cuida de mi Tomoka-san-
-igualmente Tatsuya-kun-
Luego de terminar con sus planes el joven llevo a su novia a casa y esta se despidió del con un apasionado beso que le llego. Yuiiji decidió pasar por casa de Wataru antes de irse a casa.
Shimasu Wataru es su mejor amigo desde que tiene conciencia. Su familia es como la de el propia ya que sus padres aparte de trabajar juntos, son mejores amigos también. Yuiiji va casi a diario a matar algo de tiempo. Cuando entro al cuarto de Wataru este lo recibió todo seco.
-Yuiiji, es que no tienes nada mejor que hacer? Y tu novia?-
-Gracias por dejarme ser bienvenido siempre que quiero-dijo sarcástico para luego reírse. –Tomoka-san la acabo de dejar en su casa-
-así que todavía estas saliendo con ella, cuídala, sino te la robo- dijo serio.
-no te preocupes, esta vez voy en serio, no te la voy a ceder tan fácil- aseguro. –si la quieres lucha por ella- reto.
-qué extraño oír eso de ti, por el momento te la dejo ya que estas jugándotela muy bien por ella- ellos tienen la costumbre hasta de intercambiar novias, al igual que Yuiiji, Wataru es igual y a veces hasta mas proclamado que el, donde caminan y más si juntos son el centro de atención, incluso sin quererlo.
-Wataru… puedo recostarme de ti?- pregunto tímido.
-está bien-
Es una costumbre de Yuiiji desde pequeño acostarse al lado de Wataru abrasándole por la cintura y recostando su cabeza en el pecho del mismo apoyando su mayoría de peso sobre el mismo.
“me encanta estar así, me hace sentir seguro y puedo descansar bien cuando Wataru está cerca” pensaba.
-hoy vi al hombre más impactante que nunca he visto, era verdaderamente hermoso, fue por solo unos instantes, pero lo vi- dijo emocionado, algo que se encontró raro el joven mayor, aunque por poquito.
-hahaha, lo haces ver como si no fuera de este planeta-
-es que en verdad no parecía de este mundo-
-me vas a decir ahora que te enamoraste a primera vista- dijo burlón.
-no seas estúpido… eso es imposible, es hombre-
-nada es imposible, esto seguro que si te seduzco no serás capaz de resistirte- Wataru hablo sensual.
-hahahaha, debo lamentar el hecho de que te encanten la mujeres?-
-posiblemente- suspiro- quieres dormir aquí?- pregunto.
-si por favor… igual tengo que levantarme temprano a buscar al aeropuerto a mi hermanita-
-así que Nami-chan viene?-
-si… Wataru quédate a mi lado- Wataru le acaricio el pelo hasta que se quedo dormido, pero el no lo hizo.
Cuando Yuiiji se despertó ya se encontraba solo, el otro siempre se levantaba temprano para ejercitarse, luego de desayunar con la familia, fue a su casa a alistarse para ir al aeropuerto pero cuando llego se encontró con una pequeña niña de 8 años viendo televisión esperándolo.
-NAMI?, como entraste?, cuando llegaste?- pregunto preocupado y sorprendido.
-Yuiiji~- se le tiro arriba- perdón, solo quería sorprenderte, mami tubo que hablar con el encargado para que me abriera- explico. El mayor la lleno de besitos. Ella era su debilidad y de las pocas personas con la que el mostraba afecto.
-Nami, solo estaremos juntos 2 días… que te gustaría hacer?-pregunto.
-bueno… mientras este contigo no me importa, y bueno, quiero conocer a tu novia para que sepa que eres mío, jum… y me gustaría ver a Wataru-
-está bien, que tal ir a cenar hoy… Wataru tengo entendido que estará muy ocupado- dijo apenado.
-está bien, pero tenemos que ir cuanto antes a la compañía principal, papa me encargo llevar unos papeles-
-me dejas ver de qué se trata?- pregunto curioso.
-sabes que no me gustan las sorpresas-
-jiji, lo sé-
Ambos se alistaron, Nami se vistió con traje de trabajo, Yuiiji estaba seguro de que eso fue obra de su papa, pero se veía hermosa, parecía una mini-empresaria.
-Sr. Y Srta. Tatsuya, Bienvenidos- le recibieron.
-la mayoría de los accionistas de las compañías del presidente (su papa xD) vienen en menos de 2 horas, quiero que la sala de reuniones esté lista para entonces- ordeno Nanami (nombre real de Nami).
-si señorita, inmediatamente- dio una reverencia y los dejo en la oficina del presidente. Nami se sentó en el asiento principal.
-hahaha, Presidenta Nanami, buen trabajo- hablo Yuiiji con una voz exagerada para molestar.
-eres tonto!, búrlate ahora, pero veras que en un futuro estaré sentada aquí o en alguna otra compañía de papa enserio- hablo decidida. Se quedaron hablando, esperando la hora prevista.