Los pensamientos del teniente Abarai hervían en su cabeza mientras se dirigía a su habitación en la sexta división.
Estupida Matsumoto a quien se le ocurre una solución tan pervertía para sus problemas de stress
Aunque Renji no estaba en contra de la masturbación, pero no podía hacerlo, siempre que pensaba en hacerlo solo una imagen acudía a su cabeza, Byakuya.
-creo que soy mas pervertido que Matsumoto como se me ocurre pensar en un hombre, que puedo hacer tengo un cohete en el pantalón y si no hago algo explotara.
Ni siquiera la traición de Aizen podía sacarlo de sus pensamientos
Al siguiente día se levanto temprano y lo primero que hizo fue pensar en el capitán Byakuya.
-no, no, no sal de mi cabeza, ¿será posible que no pueda controlar mis propios pensamientos?
Rápidamente tomo una ducha de agua fría y salio a realizar una sesión de entrenamiento intensivo con sus subordinados –si eso era lo mejor, el ejercicio era muy bueno para calmar la libido - pensaba mientras caminaba.
Una vez reunido todo el escuadrón número seis se dirigió a ellos en un tono más agresivo de lo necesario
- muy bien como ya están enterados la lucha contra los traidores será muy dura y no quiero ni una sola baja en mi escuadrón, así que tendrán que volverse mas fuertes, hoy cuento con energía extra y peleare con todos y cada uno de ustedes así que comencemos.
Fue una lucha dura pero en menos de 3 horas había derribado a todos sus hombres y eso se sentía muy bien, estaba tranquilo y concentrado por fin tenia la victoria de sus pensamientos.
Pero al levantar su mirada hay estaba su taicho.
- ¿Muy bien teniente si ya termino de jugar podría venir a mi oficina? Tenemos trabajo que hacer – y mientras decía esto daba media vuelta y se marchaba.
Renji que tenía los ojos como platos solo pudo decir.
- Si taicho ya mismo- no se por que mi taicho es tan frío y prepotente, jugando, ¿pero quien estaba jugando? Este era un entrenamiento muy serio, bueno pensándolo bien lo había planeado como una ruta de escape ante los pensamientos y fantasías que tenia con su capitán, entonces al final si era un juego, ¿y como lo sabia su capitán?, talvez era uno de sus muchos dones, espero que no pueda leer mis pensamientos o estaré en serios problemas, pues un ataque de senbonzakura no estaba incluido en ninguna de mis fantasías y eso será lo único que obtenga de mi capitán se llega a enterar.
Al entrar en la oficina Byakuya ordeno a Renji tomar asiento y cerro la puerta
-Renji tienes una misión en el mundo de los humanos, partirás esta tarde y te hospedarás en la tienda del excapitán Urahara y ayudaras a Ichigo en todo lo que requiera-
-Si Capitán-
-Puedes retirarte-
Renji salio de la oficina, dirigiéndose a su habitación mientras se sumergía en sus pensamientos, Como puede ser que esa voz tan monocorde y fría, acompañada de esa mirada que no revelaba ninguna emoción, lo pusiera tan nervioso, ¿será por esos labios que solo me provoca morder o será el perfecto cuerpo que se esconde bajo tantas capas de ropa?
Al llegar al mundo Humano fue recibido por un pequeño y molesto niño llamado Jinta, que no paro de hablar por todo el camino, lo llevo a su nueva residencia, esto era genial, tenia una habitación para el solo y tenia tiempo para descansar, buscaría a Ichigo en la mañana así que tomo una ducha y trato de dormir.
- ¿Mierda pero que pasa con mi cuerpo?, parece que esta parte se hubiera independizado- piensa mientras observa la gran erección bajo su yukata, pensándolo bien la idea de Matsumoto no era tan mala, estaba solo, lejos de la sociedad de almas, así que se sentó en el futon y abrió su yukata, separo un poco sus piernas y llevo su mano a su intimidad acariciadola suavemente, cerro sus ojos para poder concentrarse mejor en el capitán que lo desesperaba, después de uno cuantos minutos en esto escucho una voz.
- ¿Necesitas ayuda con eso?-
No puede ser, la voz del capitán Byakuya, abrió los ojos y allí estaba el sentado en el marco de la ventana, mirándolo con la misma seriedad de siempre, mil pensamientos cruzaron por la cabeza del teniente, pero como podría ocultar lo que estaba haciendo, era imposible, esto era lo mas vergonzoso que había vivido.
- no..no es lo que parece taicho, es una técnica que Matsumoto me recomendó para liberar el stress, yo nunca hago ese tipo de cosas-
Renji cerro su yukata torpemente y trato de levantarse, pero unas manos fuertes lo devolvieron a su lugar y abrieron su jukata con algo de brusquedad, los labios del capitán se encontraban en su oreja, podía sentir su respiración y su olor esto hacia que el teniente se excitara aun mas.
- Pues si es una técnica recomendada por la teniente, deberías terminarla, ella es experta en estos temas, además quedarte en esas condiciones podría ser doloroso para ti-
El peli Rojo observo como su capitán de rodillas a su costado, tomaba su pene y comenzaba a moverlo de arriba abajo, firmemente, mientras susurraba en su oreja, solo relájate, vas a disfrutar esto.
Renji estaba mejor que bien, no podía creer lo que estaba pasando,
¿De verdad su capitán estaba tocándolo de esa manera?, sentía la presión de sus manos y ese ritmo constante, que lo enloquecían, de seguir así, esto terminaría vergonzosamente rápido, a los pocos minutos sostuvo fuertemente el futon, (pues no se atreveria a tocar a Byakuya) para dejar salir estrepitosamente, todo lo que lleva reprimiendo por tanto tiempo.
-Te vienes muy rápido Renji- dijo el capitán mientras miraba como el tibio liquido corría por su mano, saco un pañuelo y lo limpio sin mucha preocupación.
-pero capitán- el aludido cerro la boca, que le iba a decir, lo siento capitán pero llevo 4 meses en estado de desesperación absoluta, teniendo sueños húmedos con usted y tenerlo cerca esta noche fue lo máximo que pude soportar?, no definitivamente no sonaba para nada bien.
Este solo puedo observar como el capitán se ponía de pie y se dirigía hasta la puerta mientras le decía- nos vemos luego, fue un placer servir de ayuda para disminuir tu stress- y así se quedo el sub-capitan con la boca abierta y medio desnudo, y sin saber que pensar, mientras los pasos del capitán se alejaban de la habitación