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Roles por V chan

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Notas del fanfic:

voy a ver si hoy lo sube bien y no me come parrafos como ayer (hdfdhfshfhf!!).

este es otro one shot "seudo-filosofico" (¿?) que hice de apuro para no estudiar :) espero les guste!

-bueno, la verdad es que no entiendo como todavía ustedes andan juntos, ¡son tan diferentes!...

 

Ese había sido el comentario de la joven paciente del doctor Gregory House, cuyo diagnóstico había derivado en cáncer, razón por la cual el nefrólogo consulto a su amigo, el doctor James Wilson.

 

La chica luego de verlos interactuar un par de veces acabo con aquella reflexión en voz alta que hizo que los dos médicos, que se hallaban muy ocupados discutiendo el resultado de su radiografía, se voltearan a mirarla , el oncólogo con gesto de sorpresa y House con una ceja levantada.

 

 -¿y tú que demonios sabes de nosotros?, a mi es la segunda vez que me ves, y a él la primera-dijo Greg- además podrías tener un mortífero  cáncer en tu pulmón, ¿no deberías estar pensando en eso?

 

Wilson miro entonces al doctor mayor con reproche en los ojos.

 

-¡House!, no hace falta que la aterres, te he dicho que esto no parece…

 

-¿ves?, tu-interrumpió la paciente señalando a Gregory-eres un cabrón insensible, y él-añadió esta vez apuntando a James- en cambio es todo sutilezas y consideración, ¡son como el agua y el aceite!...ha, ya la capto, con ustedes va eso de que los opuestos se atraen, ¿no?-concluyo sonriendo.

 

House expiro perdiendo su casi inexistente paciencia y luego de arrebatar de un manotazo la radiografía de las manos a su amigo, emprendió la salida  de la habitación de la chica diciendo:

 

-más te vale que dejes de reírte, no tienes cáncer, lo que significa que seguimos sin saber que provoca que eches  sangre por la boca y tus pulmones colapsen.

 

 

 

 

 

“no entiendo como todavía ustedes andan juntos…” Esas palabras rondaban la memoria de Wilson unas cuantas horas  más tarde, mientras estaba en su departamento, en la soledad de su living mirando tele.

 

“son tan diferentes...”

 

-Es cierto-pensó James- cualquiera que nos mire desde afuera llegara a la misma conclusión. Desde lo básico somos diferentes. House es un cerdo maleducado que anda por la vida burlándose y valiéndose de todo el mundo como si nada le importara, que se viste de cualquier manera, incapaz de sociabilizar con muchas personas demasiado a fondo, tan poco dado a demostrar sus sentimientos que seguramente Lisa habrá tenido que sacarle un te amo a punta de pistola.

 

Yo, en cambio, soy un idiota prolijo y cuidadoso, siempre tan terriblemente preocupado por cómo pueden afectar mis acciones a todo el mundo, siempre entregando mi corazón para que hagan lo que quieran con él, fracasando e intentándolo mil veces, sin aprender nunca…-

 

Wilson miro el reloj de pared que tenía frente a su vista. Las 9 de la noche, Sam ya debería de estar por llegar del trabajo. También House. Él ya tendría que haber resulto el caso de ese jovencita indiscreta. Ya debía estar en su depto. Vagueando como James, aunque quizás no, quizás estaba con la decana. El oncólogo suspiro, y volvió a reflexionar.

 

- ¿Pero de verdad somos tan distintos?, a veces me parece que yo guardo en silencio tantas cosas como él…yo sé que no es el idiota insensible que parece, sé que la soledad y la falta de amor lo lastiman tanto o más que a cualquiera. Tanto como a mi…solo que Greg no lo dice, bueno, a decir verdad yo digo tantas cosas.

 

Ahora que pienso en eso, rara vez House y yo hablamos de cosas demasiados profundas, al menos no como lo harían otro par de amigos, si yo tengo algo que decirle generalmente se lo digo en tono  de sermón de profesor de escuela, no es que lo busque… (Bueno, un poco disfruto sermoneándolo) pero más bien es que me sale así.  Y cuando él quiere decirme algo simplemente me lo dice haciendo muestra de toda su acidez y habilidad de burla, (y estoy seguro que él si siente mucho placer haciéndolo). Si, la chica tiene un poco de razón.

 

Pero no es tan raro que nuestra…relación perdure, la gente cree que estoy con él por mi “complejo de mesías”, él también cree eso, seguramente, pero se equivocan. Yo no soy su amigo para satisfacer mi necesidad de sentirme necesitado, no estoy con House con el motivo de ser su niñera (no la mayor parte del tiempo), estoy con él porque más allá de todos los aspectos molestos de su personalidad jodida me hace sentir bien. Sí, es extraño, pero House me hace sentir bien. Sus salidas locas e infantiles me joden los huevos demasiado a menudo, es verdad, pero también me hacen reír, también me sacuden el aburrimiento de mi rutina diaria.

 

Su sinceridad tan contundente llega a ser tal a veces que se vuelve dolorosa, pero también resulta refrescante, liberador de muchas maneras, no necesito tener cuidados especiales cuando hablo con él, puedo dar cierta rienda suelta a mi costado más  salvaje a su lado…-

 

Wilson sonrió en silencio, absolutamente ausente de la pantalla del televisor, y se dijo a sí  mismo:

 

- Gregory House…si, es el hijo de puta más molesto de todo Jersey y aledaños, pero es mi amigo, yo lo am…lo quiero- Jimmy sacudió la cabeza, como queriendo sacarse algo de ella- si, lo quiero, y me siento bien con él, ¿y a quien le importa nada más?

 

Ahora él está feliz, con Lisa, ya no está solo-la risa del oncólogo se desvaneció dando lugar a cierto gesto de incertidumbre- Me alegro por él y espero que no la cague como hace siempre, pero también siento que las cosas van a ser muy diferentes… ¿diferentes entre nosotros?

 

Hasta ahora siempre era yo el que estaba con alguna mujer, y él el posesivo celoso que intentaba apartarme, porque así es House, su rol es ser un cabron. Pero ahora es él el que esta con alguien más y yo...bueno, yo me alegro por él, yo no me  pondría celoso, no soy tan infantil… pero, no lo sé, quizás a mí tampoco me gusten tanto los cambios después de todo…-

 

 

 

 

 

House cambiaba de un canal al otro, sentado en el sofá del living de su casa, con gesto aburrido. Estaba cansado, el caso de la condenada niña esa se había extendido más de lo que esperaba, pero finalmente lo había resuelto, ya estaba en casa, con su amada televisión por cable, en su adorado sillón, y con la mujer más increíble preparando la cena para ambos en la cocina.

 

 No había nada en la tele, como de costumbre. Greg arrojo el control remoto a un lado, dejándolo en el canal de deportes, lo que daban ahí tampoco le importaba, pero estaba cansado de hacer zapping.

 

Recordó a la mocosa que ahora era su “ex” paciente; era molesta la chiquilla, tal vez por eso le había caído bien, le gustaban las personas atrevidas.

 

“…ustedes son tan diferentes…” había dicho sobre Wilson y él.

 

-Es cierto-se dijo a sí mismo el nefrólogo- Wilson es un idiota y yo soy un genio-sonrió silenciosamente, pero la risa se transformó en un gesto de perdida reflexión rápidamente - bueno, él no es tan idiota a decir verdad, de hecho es muy inteligente, es un excelente medico (aunque nunca se lo diría, porque no hace falta subirle el ego), tiene ese increíble don para convencer a sus pacientes moribundos de que dos meses de vida es un montón de tiempo. Si fuera un poco más astuto sacaría muchas ventajas de ese pico que dios le dio. Pero no, Jimmy nunca haría eso, él nunca sacaría ventaja manipulando a los demás, él es un buen tipo. Una vez lo compare con un caballero de esos del siglo 18 por sus valores morales, y la comparación no podía ser más exacta. Así es Wilson, un caballero. Y menos mal, porque que si no, ¿Cómo haría para que me aguante todas mis locuras y aprovechamientos?...-

 

-¡Houseeee!-se escuchó la voz de L isa Cuddy desde la cocina- la cena está casi lista, ¡anda dejando esa tele y ven a la mesa!

 

Greg no contesto, tomo el control otra vez para apagar el televisor, pero en vez de esto se quedó inmóvil, con rostro pensativo al volver la vocecita de su paciente de ese día a su cabeza:

 

“…con ustedes va eso de que los opuestos se atraen, ¿no?...”

 

-Es verdad-reflexiono el médico-  Wilson me atrae, creo que es un término bastante apropiado para definirlo. Desde un principio me atrajo, desde aquella conferencia aburrida cuando nos conocimos, había muchos médicos en esa convención, pero él…me atrajo. Como un imán. Dos polos opuestos…(si es así seguro yo soy el negativo)- House volvió a sonreír- pero tampoco el chico maravilla es  tan angelito perfecto como parece, no, él también tiene sus zonas oscuras. A  lo mejor por eso yo lo atraigo a él, no solo es por su complejo de mártir que me aguanta. No es solo por eso, estoy seguro. Tampoco es por conveniencia que yo estoy con él, no es porque me pague las comidas, o porque no tengo otros amigos. No, si fuera por conveniencia no sería su amigo. Porque Wilson me duele. Sí, me duele.

 

Me duele verlo andar por la vida con su estúpida esperanza, con esa maldita perseverancia de seguir intentándolo. Me duele ver que a pesar de toda la mierda  que le haga él sigue conmigo. Y duele porque él tira al carajo todas mis creencias, todas mis teorías cínicas. El mundo es una mierda y el amor es algo irrelevante y pasajero. Y todos mienten, y todos buscan su propio beneficio. Pero Wilson no. Él es la prueba viviente de que mi raciocinio bien podría ser tan solo un escudo barato más para mi soledad, para mi incapacidad de ser feliz por más de dos minutos.

 

Una vez él me llamo cobarde y me dijo que morir era fácil, que vivir era lo verdaderamente complicado. Y cuando estoy cerca de él ciento que tiene razón. Y sin embargo sigo siendo su amigo, sigo aferrándome a él. Yo a él más que él a mí.

 

 Jimmy siempre hizo su vida al margen mío con todas sus esposas, y yo siempre busque cagarle las relaciones. Pero él no se portó a si cuando le dije que estaba con Cuddy, al contrario, se alegró por mí, y se preocupa todo el tiempo porque no lo arruine con alguna de las mías.

 

Wilson es un buen amigo, es su rol. Y yo también soy su amigo. Aunque duela. El cree que la relación de Cuddy y yo lo cambiara todo, pero se equivoca. No cambia nada, nada verdaderamente importante. Aquella vez que se operó para darle parte de su hígado a aquel imbécil, mi miedo me traicionó  y termine por decir en voz alta lo que sentía: si algo le pasaba a él yo estaría solo. Eso no cambio. Nada lo cambiara.-

 

-¡hey!, ¿vas a venir a comer o no?, si no te apuras no te dejaremos nada…-grito la decana.

 

Gregory house apago la tele, arrojo el control remoto y camino sonriendo hacia la cocina.

 

 

 

 

 

 

Notas finales:

and this is the end!, me voy a dormir, y mañana a ver el 7x2 (que todavia no vi) subtitulado.saludetes!


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