Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Uke vs Seme por PukitChan

[Reviews - 29]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

¡Hola! ¡Cuánto tiempo!


Soy PukitChan, regresando con esta historia. Dejenme decirles algo importante. Mi historia, junto con otras más fue borrada. Personalmente me dolió cuando la perdí, porque contaba con más de 600 reviews, todos eran muy importantes para mí y les tenia mucho aprecio. Me sentí mucho cuando los perdí y me desmotivo mucho.


Pero he estado recibiendo comentarios, diciendome que quieren que esta historia vuleva y después de mucho tiempo. Regresé y verán su final ^O^


Antes que nada, NO es un plagio, ni fue inspirada en ninguna otra historia. Esta historia es mía y la publiqué en esta página y en otra hace unos años. Pero aclaro, como siempre, que sólo la historia es mía ya que:


Los personajes de Junjou Romantica y Gravitation, pertenecen a sus respectivos autores.


Le hice algunas ediciones y cambios para que la lectura fuese mejor, sin más, muchas gracias nuevamente. Ojalá me puedan acompañar nuevamente en esta historia y su camino,  

Uke vs Seme

 

Por:

 

PukitChan

 

Capítulo 1. Los conquistadores y los inconquistables.

 

 

 

—¿Qué sucede Shuichi? —Un pelirrojo palmeó la espalda del chico de cabellos rosados que iba caminando a su lado.— ¿Por qué tan distraído?

 

—Nada en especial —respondió el otro, quien entre sus labios llevaba un pocky—. Es sólo que este semestre está algo… deprimido.

 

—Oh —agregó el chico sonriendo y levantó la vista hacia la cafetería a la cual se dirigían esa mañana.

 

—¿Cómo decirlo? Al inicio, la universidad era más divertida.

 

—Bueno, éste es apenas tu segundo año —dijo, refiriéndose al tiempo que llevaba el pequeño en la carrera que cursaba—. Es más fácil la tuya que la mía ¿No?

 

—Hiro –pronunció el nombre de su amigo, mientras entraban al lugar mencionando para después sentarse en un lugar cualquiera—, soy el más destacado de mi generación ¿Qué crees que me haga falta?

 

—Una pareja —dijo rápidamente, estando completamente seguro de su respuesta—. ¿Por qué no sales con alguien? Eres muy popular.

 

—Mmm –Suspiró notoriamente—, no lo sé… es sólo que…

 

—¿Qué? ¿Nadie es suficiente para ti?

 

—¡No es eso! –exclamó un poco enojado por esa pregunta, más enseguida su ánimo se calmó cuando continuó con su explicación—. Pues, por una vez me gustaría… que alguien tratara de conquistarme… no que sólo llegue y se me declaré…

 

—Eso es demasiado cursi hasta para ti, Shuichi —dijo una nueva voz.

 

El aludido giró el rostro enfurruñado que traía, para encontrarse con un joven castaño de hermosos ojos verdes, que aparentaba tener la misma edad que Shuichi, debido a su complexión. Es decir; parecían ser demasiado pequeñitos para estudiar en esa universidad.

 

—Hola Misaki —Fue Hiro quien se animó a saludar al chico nuevo, indicándole que se sentara. Misaki asintió y se sentó a un lado del pelirosa que miraba de tanto en tanto a sus acompañantes—, es que Shu anda de sentimental.

 

—¡Oye! —gritó el pelirosa, mirando feo a Hiroshi, quien ignoró ese gritillo infantil

 

—Jajaja, en fin. Shuichi,  comparte tu amargura con "el nunca he tenido nada con nadie; llamado Misaki"

 

—¡Hiro! —Ahora fue el castaño quien le reprochó, sonrojado.

 

—No es nuestra culpa de que no nos hallamos fijado en un profesor ¿O sí?

 

Esta vez, todos voltearon ante esa nueva y melodiosa voz. Un nuevo chico había llegado a su mesa, y el parecido que éste mantenía con Shuichi era terriblemente asombroso. Quizás lo único que los diferenciaba era el color de cabellos; unos era rosados y los otros unos verdes oscuros. Además de los distintos colores de ojos  y también, unos cuántos centímetros arriba.

 

—Ryu-chan —pronunció aquel nombre Shuichi, cuando lo vio sentarse a un lado de Hiro, mientras todos saludaban moviendo sus cabezas o levantando su mano.

 

—¿Qué? ¿Lo dices por mí? —murmuró Hiro, riendo con ánimos—. ¿Eso es acaso sarcasmo, Ryuichi? —Lo miró directamente, y el chico sólo le contestó con una mirada cómplice.

 

—Es cierto –dijo Misaki, mirando al pelirrojo—. ¿Qué le viste a ese chiflado?

 

—Pues… lo dominante —contestó Hiroshi, con una sonrisa de lado.

 

—¿Dominante? — preguntaron Shuichi y Misaki al unísono, ladeando ambos la cabeza.

 

—Hiro… —susurró Ryuichi, mirándolo de soslayo—, no les digas cosas así…

 

—¡Oh, vamos! —El pelirrojo soltó una carcajada—. ¡En universidad y no lo entienden!

 

Tanto Shuichi como Misaki se miraron como si entre ellos pudieran explicarse qué era lo que le causaba tanta gracia a Hiro, pero al comprender que no llegarían a ningún lado haciendo eso, volvieron a concentrarse en la plática.

 

—¿Pero no tendrán problemas si se enteran? —dijo el de mirada amatista,  preocupado por el bienestar de quien era su mejor amigo—. Es decir… un profesor y un alumno… no está bien… o al menos eso dicen.

 

—No, descuida. Créeme, él lo sabrá arreglar si alguien lo descubre —respondió Hiro con una seguridad que nadie se atrevió a contradecir. Todos conocían el carácter del profesor de defensa.

 

Un silencio un tanto aterrador se formó.

 

—Da igual que sea él un profesor, ¿no? —Ryuichi fue el primero en hablar, interrumpiendo el silencio—, mientras todo se trate de amor.

 

—¿Amor? —Misaki nuevamente se ruborizó y soltó un suspiro. Era claro que para él, dicho tema aún era una especie de tabú o gran misterio.

 

—Cielos —Shuichi sonrió—, me gustaría que alguien se enamorará de mí…

 

—Alguien lo hará seguramente —agregó Ryuichi.

 

Fue en ese momento cuando su plática se vio interrumpida por muchos murmullos y otros tantos gritos que no eran para nada discretos. Parecía que algo estaba causando esa alteración con los clientes de la cafetería, que hasta hace unos momentos, estaba tranquila.

 

—¡Miren, son los tres! —dijo una jovencita de su mesa vecina.

 

—¿Qué sucede? — preguntó Shuichi curioso, al ver tanta excitación por parte de los demás.

 

—¿Qué miran? –Misaki siguió la mirada de los demás, esperando encontrarse con aquello que tanto llamaba la atención.

 

—Ah, ya… —dijo Ryuichi, quien rió junto con Hiro. Ellos no miraron, simplemente se dieron cuenta de lo que ocurría por oír lo que los demás decían.

 

En la entrada de la cafetería, justamente venían llegando un grupo de tres hombres apuestos, y eran los que ocasionaban tanto alarde.

 

—¿Quiénes son? – preguntó Shu, alzando su cabeza para tratar de verlos, pensando que quizás eran una estrellas famosas o algo por el estilo.

 

—No lo sé —dijo el castaño, quien al igual que Shuichi, traba de verlos, pero la multitud de cabecitas les impedían una buena visión.

 

—¿No los conocen? — preguntó sorprendido Ryuichi, al ver y oír sus expresiones.

 

—Ellos no los conocerían —añadió Hiro con resignación.

 

Mientras tanto, aquellos tres chicos tomaban asiento, alejados por unas seis mesas del grupo que estaba hablando precisamente de ellos. Pero que desde donde estaban, tenían una visión perfecta, sin nada que les estorbaba para analizarlos.

 

—Son los "Conquistadores" –explicó Ryuichi, sin querer dejar a sus dos inocentes amigos con la duda.

 

—¿Conquistadores?

 

Hiro suspiró ante la cara de "no sé nada de nada" de Shuichi y Misaki y se preguntó mentalmente cómo es que lograban sobrevivir cada día.

 

—El rubio— dijo Hiro, haciendo que voltearan a ver al mencionado—, se llama Eiri Uesugi, pero lo conocen como Yuki; es estudiante de tercer año de filosofía. El del lado izquierdo es su hermano menor Tatsuha, él es de primer año de química y finalmente también estudiando lo mismo que Yuki pero en cuarto año, el de cabello gris es Usami Akihiko, pero he oído que le dicen Usagi.

 

—¿Y eso que tiene que ver con los "conquistadores"? —inquirió Misaki, adelantándose a la misma duda de Shuichi.

 

—Pues —Ryuichi los miró divertido—, dicen que nadie, sea hombre o mujer, ha podido resistírseles.

 

—¿En serio? Qué impresionante –Shindou parpadeó ante esa idea que sin duda alguna le impactaba cuando él recién apenas podía hablar decentemente del amor.

 

—Aunque también podría decirse que son unos "cualquiera"

 

Las risas estallaron en ese momento y olvidando e ignorando el anterior tema, comenzaron a hablar sobre su día sin notar que fue precisamente su risa y falta de interés, lo que los llevó a iniciar esta historia…

 

 

 

—¡Ahhhh! –gritó un chico de cabello oscuro mientras se estiraba, dirigiendo sus manos hacia el cielo. Era un joven bastante apuesto, de apariencia legre y animada—. ¡Qué día tan aburrido!

 

—Sí —coincidió otro de ojos color dorados, idéntico en su fisionomía, aunque el rubio parecía estar más serio y fastidiado que el moreno—. Últimamente no hemos tenido acción.

 

—Es porque todas y todos caen muy fácil ante cualquier intento de seducción –dijo un tercero, quien tenía el cabello gris y ojos de un tono lila.

 

—¿Qué ya no hay nadie que represente un reto? —refunfuñó el moreno, inflando sus mejillas.

 

—Todavía hay alguien…

 

—¿Lo dices en serio, Usagi?— gritó emocionado— ¿Quién?

 

—¿Quién? —También preguntó curioso el rubio, mirándolos ambos.

 

—Pues verán, Tatsuha, Yuki…

 

 

 

—¡Oigan, miren ¡Son ellos! ¡Están los tres! —Esos gritos de mujeres, interrumpieron las palabras de Usagi.

 

 

 

—Tatsuha… ¿Por qué teníamos que venir a esta cafetería tan repleta? —preguntó de mal humor el rubio.

 

—Oh, vamos, Yuki –Tatsuha rió mientras los tres se dirigieron a una mesa alejada del resto de las personas, haciendo quedar en claro que no querían nada de acercamientos humanos. Nadie invadiendo su espacio.

 

—Todos nos miran… —murmuró Usagi, acomodándose en la silla.

 

—Eso es lo más común —Yuki observó a su amigo—, somos bastante populares.

 

—Vaya, vaya— dijo de repente Usagi, ignorando a Eiri.

 

—¿Qué sucede?

 

—¡Oye Usagi! ¿Quiénes nos decías que eran un reto? —cuestionó Tatsuha, mientras apachurraba su rostro en la mesa.

 

—¿Pero lo aceptaran? –mencionó, dándoles una mirada misteriosa—. ¿Creen que lo lograran sin importar nada?

 

—¡Claro!— afirmó Tatsuha y Yuki sólo asintió con la cabeza.

 

—Son ellos— Akihiko señaló una mesa.

 

Yuki y Tatsuha siguieron la dirección que les era indicada y se encontraron con un grupo de 4 chicos que reían y platicaban entre sí, sin mirarlos siquiera, pues al parecer estaban demasiado interesados en ellos mismos.

 

—¿Qué? —El moreno rió.— ¿Esos mocosos?

 

—Además son hombres maldito, Usagi —gruñó Eiri.

 

—¿No los conocen? —Por las expresiones mudas que mostraron los rostros de los hermanos, Akihiko comprendió la respuesta—. Las chicas los conocen como "los inconquistables"

 

—¿Y eso por qué? —preguntó Yuki empezándose a interesar.

 

—Nadie, absolutamente nadie ha podido salir con ellos, hombres o mujeres, todos han sido rechazados.

 

—¿Sabes cómo se llaman? —preguntó el de cabello oscuro, mirándolos con descaro.

 

—Hiroshi Nakano, el de cabello rojo, estudiante de tercer año de medicina. El castaño es Misaki Takahashi de primer año de economía, el de cabello verde es Ryuichi Sakuma y el de rosa es Shuichi Shindou, ambos estudiantes de canto y composición, de cuarto y segundo año respectivamente.

 

—Ya veo—dijo Yuki, con una sonrisa maliciosa.

 

—Sólo les recomiendo no meterse con Nakano Hiroshi —dijo Usami.

 

—¿El pelirrojo? —Usagi asintió ante el puchero de Tatsuha—. ¡Pero si es lindo!

 

—Si deseas morir está bien…

 

—¿Morir?

 

—Ese chico está teniendo una relación "Secreta" con el profesor de defensa personal.

 

—¡¿Qué? —gritaron los hermanos—.  ¿Te refieres a…?

 

—Claude 'K' Winchester

 

—¿Cómo sabes eso Usagi?

 

—Jojojo

 

—Ellos — habló Yuki, interrumpiendo—. Ellos no nos han mirado para nada hasta este momento.

 

—¿Les da miedo que los rechacen? —preguntó Usagi desafiante.

 

—¡Idiota!

 

—¡Ya se! ¡Hermano, Usagi, hagamos una apuesta! —dijo totalmente animado Tatsuha ante la sola idea.

 

—¿Apuesta?

 

—Veamos quien los conquista.

 

—¿Uno para cada quién?— rió Usagi.

 

—¡No! —Tatsuha sonrió—. Gana el que conquisté a los tres.

 

Se miraron entre los tres, entendiendo qué seguía a continuación.

 

—Un mes. Ese es el tiempo límite —ordenó Usagi.

 

—Yo lo puedo hacer en una semana —respondió arrogantemente, Yuki.

 

—No si yo te ganó antes hermano. —El moreno, aun si estar conforme, agregó: —¿Y cuál va a ser el premio? Yo sugiero que sean esclavos personales… quien conquiste a eso tres mocosos, nos tendrá a los otros dos como esclavos personales durante un semestre.

 

—De acuerdo…

 

El trío miró a sus próximas víctimas, quienes no enteradas de lo que les aguardaba.  ¿Por quién debían empezar? ¿Cuál sería el vencedor?

 

Y sobre todo… ¿Quién de los conquistadores ganaría el corazón de los inconquistables?

 

 

 

Continuará…

Notas finales:

Aquí está el primer capítulo ^^ reeditado. Es como la versión 2.0 o algo así, jajajaja. Espero que les guste a quienes ya la hayan leído o les agrade a quienes recién la comienzan a leer. ¡Gracias por leer y si les nace de su hermosa voluntad, un review!


PukitChan vuelve. ^3^


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).