Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Amigos ¿Para siempre? por Drasami

[Reviews - 495]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Por fin, aquí esta el nuevo capitulo, lamento la tardanza y espero que les guste

Los personajes y todo pertenecen a Akira Toriyama.

La pelirroja cepillaba sus bucles frente al enorme espejo de su habitación, se sentía emocionada por el inicio de un nuevo año escolar, pero a la vez estaba algo ansiosa, pues era su último año de secundaria y en preparatoria no podía dedicarse por completo a su mayor pasatiempo: los chismes, ya que debía concentrarse en sus estudios para lograr entrar a la universidad y lo peor era que en preparatoria habían muchos más chismes que en secundaria. Suspiró resignada y tomó parte de su cabello para amarrarlo con una cinta, sólo se lo tomaba para que no estorbara su visión, prefería llevarlo suelto, pues sentir su pelo moverse al viento le daba una gran sensación de libertad. Siempre la criticaban por ser chismosa y entrometerse en la vida de los demás, pero eso era lo único que podía hacer para darle a su aburrida y perfecta vida algo de emoción, ser la heredera de una gran compañía implicaba ser la niña buena, no meterse en problemas y obedecer a sus padres, pero ella no era así, su espíritu la llamaba a la aventura y para no decepcionar a sus padres buscaba la emoción a través de otros


-déjame en el centro de la ciudad, por favor – le pidió a su chofer, detestaba llegar a la escuela de esa manera


-pero señorita, me meterá en problemas con sus padres…


-ellos no lo sabrán – interrumpió, y aprovechando una luz roja se bajó de la limusina y se fue corriendo por un callejón, donde no pudieran seguirla


Se fue caminando tranquilamente, estaba a unas cinco cuadras de la escuela y aún era temprano,  fue mirando las vitrinas de los pocos locales que abrían a esa hora, se detuvo frente a una pequeña pastelería, nunca antes la había visto y el local parecía bastante tétrico y solitario, en comparación de la pastelería de enfrente que estaba llena de clientes y casi parecía una fabrica. Miró los cupcakes de esa pastelería diminuta, “recién hechos” rezaba un cartel, lo pensó unos segundos y decidió entrar, la mujer que la atendió era muy amorosa y dulce como los pasteles por los que estaba rodeada, compró una bandeja de cupcakes, si no le gustaban simplemente se los podía dar a Goten, él comía de todo. Siguió su camino a la escuela y tomó uno de los cupcakes que había comprado, lo miró y analizó durante dos cuadras, hasta que al fin le dio un mordisco, sintió derretirse del placer al sentir ese dulce sabor en su paladar


-¡qué exquisito! – dijo entusiasmada  y siguió comiendo con energía


 


Ya se había comido tres cupcakes cuando llegó a la escuela, en la entrada se encontró con Trunks que parecía esperar a alguien, miraba entre impaciente y algo asustado al cielo, luego miraba su reloj y volvía a mirar al cielo, daba largos suspiros y meneaba la cabeza como tratando de borrar ciertas cosas de su mente. Annière se lo quedó mirando entre divertida y curiosa, creía saber a quien esperaba el pelilila, pero no estaba segura si era él quien ocasionaba esa confusión en Trunks, se acercó a su amigo como si no hubiera notado nada, no podía empezar el año fastidiándolo


-hola, Trunks – dijo sonriente - ¿Qué haces? – preguntó haciéndose la inocente


-¿ah? – dijo Trunks despistado al escuchar su nombre – hola Annière… espero a Goten – y al decir eso desvió la vista como avergonzado


Ella por supuesto lo notó, pero no dijo nada, hace ya tiempo que veía ese comportamiento extraño en Trunks, pero debía estar segura


-él siempre llega atrasado – comentó Annière


-… - Trunks solo sonrió


-¿quieres un cupcake? – preguntó ella ofreciéndole la bandeja, Trunks tomó uno y le dio un mordisco, sus ojos se abrieron grandes


-¡es delicioso! – exclamó mirando asombrado el cupcake, terminó de comérselo y pidió otro, llevaba la mitad cuando sin previo aviso apareció Goten corriendo hacia ellos, Trunks se había concentrado tanto en comer esos deliciosos cupcakes que se había olvidado por completo que estaba esperando a Goten, al verlo sus ojos se abrieron enormes, su boca estaba entreabierta, no podía dejar de mirarlo, parecía que se movía en cámara lenta, veía como su cabello se movía, revoltoso, a cada paso que daba, y su sonrisa, esa luminosa sonrisa


-¡al fin! – dijo Goten agotado cuando estuvo frente a sus amigos – ¡parece que jamás empezaré bien un año escolar! ¿Cómo están? – preguntó sonriendo, con la respiración un poco agitada y transpirando un poco


-muy bien, pero algo aburrida, echaba de menos la escuela – contestó Annière sonriendo astuta, pues había estado atenta a cada reacción de Trunks


-no entiendo como te gusta la escuela – le recriminó Goten - ¿tu que crees, Trunks? – preguntó, pero el pelilila aun no reaccionaba, se había quedado aturdido viendo a Goten


-¿Trunks? – repitió preocupado el pelinegro y al no obtener respuesta  - ¡TRUNKS! – llamó elevando un poco su voz


El pelilila salió de su ensoñación


-¿eh? ¿Qué? ¿Qué pasa? – pregunto como un tonto


-¿Qué te pasa a ti? – Preguntó a su vez Goten mirándolo de pies a cabeza, y entonces lo notó, su grito llamó la atención de todos los alumnos que iban entrando a la escuela - ¡AAAAHHHH! ¡ESTAS COMIENDO UN CUPCAKE Y NO ME DISTE! – gritó haciendo escándalo, eso hizo que Trunks volviera a la normalidad


-¿Por qué tendría que darte? ¡TU NUNCA ME DAS NADA! – gritó a su vez Trunks


Goten lo miró fingiendo enfado - ¡dámelo! – exigió estirando sus brazos para quitarle el cupcake a Trunks, pero éste lo detuvo con un solo brazo y levantó el otro para apartar el cupcake del alcance de Goten, el problema es que Goten ahora estaba de la misma altura que Trunks así que no le costaba mucho trabajo alcanzarlo, solo tenía que acercarse más a Trunks… sus cuerpos estaban pegados y sin notarlo Goten tenia a Trunks contra la pared mientras luchaban por el cupcake, las mejillas del pelilila estaban sonrosadas, pero Goten no lo notaba pues estaba concentrado en su objetivo: comerse ese cupcake. Annière por su parte no hacia nada para separarlos, a pesar de que tenía aun muchos cupcakes en la bandeja, prefería grabar lo que sucedía con su celular. Estaban en eso cuando sonó el timbre de entrada a la escuela, pero ninguno de los tres lo escuchó, hasta que un maestro salió a regañarlos


-¡¿QUÉ SE SUPONE QUE ESTÁN HACIENDO?! ¡YA SONÓ EL TIMBRE! ¡DEBERÍAN ESTAR EN CLASES! – Gritaba el maestro furioso, los chicos solo se limitaron a bajar sus cabezas avergonzados – ¡ENTREN INMEDIATAMENTE SINO QUIEREN QUE LLAME A SUS PADRES!


-sí profesor – respondieron los tres al unísono y entraron a la escuela


Cuando estuvieron lejos del profesor, Goten nuevamente intentó quitarle el cupcake a Trunks, pero él rápidamente se lo echó en la boca


-¡AAhhh! – dijo Goten entre desilusionado, sus ojos se llenaron de lagrimas de berrinche


-tranquilo – dijo Annière evitando el escandalo que haría Goten – aquí hay otro – y le entregó un cupcake, el rostro del pelinegro se iluminó al verlo y de una mordida se comió todo el cupcake, pero se arrepintió de haberlo hecho: la delicia y dulzura de ese cupcake entraron de golpe en su organismo, tanto que lo aturdieron un poco y se desvaneció. Trunks alcanzó a agarrarlo antes de que cayera al piso


-Goten ¿estas bien? – preguntó


Annière se acercó cautelosa


-es el mundo de las golosinas y los pasteles… y hay un rio de helado – decía Goten mirando hacia la nada


-¡se volvió loco! – dijo Trunks alarmado


-no es eso – la pelirroja lo calmó – solo tiene demasiada azúcar en el cuerpo – y diciendo eso sacó de su bolso un termo con café caliente y le dio un poco a Goten


-¡QUEMA! – gritó el pelinegro reaccionando ante el café, se puso de pie de un salto y corrió al bebedero que estaba cerca a tomar agua fría – ah… ah… ah… ah… - respiraba con la boca abierta y la lengua afuera por su quemada lengua


-¿estás bien? – preguntó Trunks, el pelinegro asintió, – bien, no comas nada dulce el resto del día – recomendó Trunks, Goten lo miró y luego miró a Annière


-¿aun te quedan? – preguntó


-claro – respondió ella contenta y le pasó otro cupcake, Goten le dio un pequeño mordisco esta vez


-esto es el paraíso – dijo Goten como añorando algo


Trunks solo suspiró resignado


-¡hey, ustedes! Les dije que fueran a clase – el maestro los vio en el pasillo y siguió regañándolos, rápidamente se apresuraron a subir las escaleras para ir a sus respectivos salones, en el tercer piso Goten se despidió de ellos


-nos vemos al almuerzo – dijo sonriendo y se fue corriendo a su salón de clases


Trunks se le quedó mirando fijamente hasta que entro al salón; Annière, que ya había subido varios escalones se dio cuenta, miró al pelilila con suficiencia y le dijo recalcando cada palabra


-ya te vi… - su sonrisa descarada desconcertó a Trunks


-¿de qué hablas? – preguntó subiendo dos escalones sin entender a la chica, Annière bajó hasta quedar frente a él


- él te gusta, ¿verdad? – preguntó sonriendo ansiosa por ver la reacción de Trunks


-¿qué? – Dijo Trunks abriendo los ojos asustado, sintiéndose descubierto, su rostro se teñía de un rojo escarlata y su corazón comenzaba a latir rápidamente - ¡claro que no! – respondió no muy seguro de lo que decía, ni de lo que sentía, subió las escaleras dejando atrás a Annière


La pelirroja se quedó ahí de pie, asombrada por lo que había visto, la reacción de Trunks la había dejado sin palabras


-¡oh, por dios…! – se dijo asombrada de su descubrimiento, y se volteó a ver a Trunks - ¡en verdad te gusta! – le dijo sorprendida


Trunks la miró sin decir nada, pero se sentía asustado de lo que Annière pudiera decir, hace una semana había tomado una determinación y ella con solo una frase había removido todo su convencimiento


-¿no te das cuenta? – le dijo la chica - de todas las veces anteriores que decía que te gustaba Goten, tu cara nunca se había puesto así de roja… reaccionas porque es la verdad


-¡son tonterías tuyas! – dijo él con sus mejillas aun coloradas y se apresuró a llegar al salón


La chica guardo silencio y una sonrisa se dibujó en el rostro: ¿Trunks enamorado? Este sería un año asombroso.


 


-------------------------


 


El ruido de los pasillos permitía que Annière hablara directamente con Trunks sin temor de que fueran escuchados por los demás estudiantes, todos estaban muy ocupados en conversar con sus amigos y comentar sus extravagantes vacaciones de verano, era el horario de almuerzo, todos iban en dirección a la cafetería, así que la pelirroja no debía bajar la voz para molestar a Trunks, pero aun así tuvo cuidado de usar las palabras adecuadas


-¡oh, vamos!... por favor Trunks... dime ¿desde cuando? – preguntaba insistente desde que sonó el timbre del descanso


Trunks sentía que su paciencia se agotaba a cada minuto -desde cuando ¿qué? – preguntó enfadado


-pues… ¿desde cuando… te gusta?


-no sé de qué hablas – y apuraba el paso, se sentía incomodo hablando de eso, en especial por lo que había ocurrido hace unas semanas, Annière lo perseguía sonriente, dispuesta a sacarle cada gramo de información


-vamos acéptalo… - dijo ella y se acercó a su oído - teeee guuuustaaaa… - susurró


Trunks se volvió hacia ella enfadado y dijo con voz fuerte - ¡que NO me gusta!


-¿Quién? – escuchó una familiar voz tras él y se sintió congelar


Annière sonrió al ver como el rostro de Trunks pasaba de estar rosado a estar blanco como el papel, no había notado la presencia del pelinegro, al escuchar su voz se había aterrorizado


-hola Goten –saludó ella


 -¿Quién te gusta? – preguntó una vez más el pelinegro acercándose a Trunks


-nadie… - murmuró nervioso Trunks, ni siquiera se atrevía a mirar a Goten, se volteó rápidamente y se puso en la fila para de la cafetería, tratando de calmarse mientras pensaba en una explicación lógica para su nerviosismo


-¿uh? – Goten estaba extrañado por ese comportamiento, miró a Annière - ¿Quién le gusta?


-no puedo decirte – contestó mientras se formaban tras Trunks – lo prometí – mintió ella


-¿eeehh? No es justo – reclamó el pelinegro y miró a Trunks - ¡vamos, Trunks! Dime quien te gusta, somos amigos ¿no?


-no me gusta nadie – respondió algo enfadado Trunks y sin mirarlos – solo son invenciones de Annière – se cruzó de brazos, decidido a ignorar las preguntas de esos dos


-claro que le gusta – dijo Annière dirigiéndose a Goten – solo que no se atreve a admitirlo


El pelinegro miró algo decepcionado a Trunks, si Annière decía que le gustaba alguien debía ser cierto, entonces ¿Por qué no se lo decía a él? Eran amigos o al menos eso decían. Miró a Annière, debía averiguar de que se trataba todo eso – oye – le dijo a la chica - ¿podrías al menos… darme pistas de como es esa chica que le gusta?


Annière sonrió entusiasmada, seria muy fácil decirle de una vez a Goten que Trunks estaba interesado en él, ya que nunca había prometido guardarlo como secreto, pero eso le quitaba la emoción al asunto


 -¡por supuesto! – contestó, el ánimo en su voz era evidente, el pelilila por su parte se tensó, preocupado, al oír el entusiasmo de Annière, una idea pasó fugaz por su mente “y si Goten se daba cuenta… ”,pero inmediatamente eliminó esa idea de su cabeza, no le gustaba nadie, mucho menos Goten, no había nada que descubrir


-bien, tiene cabello y ojos negros, como la noche – empezó a decir Annière, Goten la escuchaba atento a la vez que iba pensando en quien podía tratarse – su piel es blanca, es más o menos de la altura de Trunks… tiene buen estado físico… uhmmm ¿qué más era? – se dijo Annière - ¡ah! Viene a nuestra escuela


-¿a nuestra escuela? – preguntó Goten asombrado – mmm… pues no conozco a ninguna chica con esas características… bueno, a decir verdad no conozco a muchas chicas – se excusó Goten rascando su mejilla derecha – aunque si se tratara de chicos, conozco a muchos que cumplen con la descripción… empezando por mí, claro – añadió despreocupadamente Goten sonriendo abiertamente – pero claro, a Trunks no le interesan los chicos, mejor me cierro la boca antes que se enfade – susurró a Annière y comenzó a reírse a carcajadas


-¡es cierto! – dijo Annière siguiéndole el juego y riéndose también, miró con astucia a Trunks, quien seguía de espaldas a ellos, pero había escuchado todo, sus ojos estaban abiertos por el asombro, no podía entenderlo: Goten se había nombrado a sí mismo, “parece un adivino” pensó, pero entonces recordó que él no estaba enamorado de nadie, se recriminó a si mismo por pensar que Goten había acertado


 


Al fin estaban en la vieja sala de música, terminando de comer sus almuerzos. Goten miraba con algo de tristeza el último bocado de su hamburguesa antes de comérsela, luego de hacerlo miró a Trunks que aun tenia la mitad de su pizza


-ni lo pienses… - dijo tajantemente el pelilila


Goten suspiró resignado, sabia por experiencia que no debía entrometerse entre un saiyan y su comida, luego miro de reojo a Annière que comía lentamente su emparedado, sabia de inmediato que no le iba a dar, pero ella se dio cuenta de que estaba siendo observada


-aun me quedan cupcakes – dijo mirando atenta a Goten, cuyo rostro se iluminó al oír eso


-¿de veras?


-toma, puedes comértelos todos – dijo ella entregándole la caja, Goten la abrió ansioso y comenzó a comérselos, solo quedaban tres, pero eran tan deliciosos que no necesitaría más


-ogge konkgs – dijo con la boca llena


-¡traga antes de hablar! – lo regañó Trunks como un hermano mayor, Goten le hizo caso


-oye, Trunks


-¿Qué pasa?


-¿Qué juego era el que querías que te ayudara?


Su pregunta dejo algo confundido a Trunks, no sabia de que estaba hablando el pelinegro, esa confusión se reflejo en su rostro, así que Goten le recordó


-ya sabes, hace unas semanas… cuando te pedí que me acompañaras a mi reunión – dijo susurrando la última palabra, pero Trunks seguía sin entender, no lo recordaba; Goten ya se estaba hartando de esa situación, no podía creer que Trunks no lo recordara, algo enfadado decidió dejar de lado las tonterías y lo dijo de golpe:


-¡cuando me vestí de chica!


Trunks por supuesto esta vez recordó claramente a que día se refería su amigo, pero claro, lo único que permanecía latente en su memoria de aquel día había sido “ese” momento, como en un sueño le vino a la mente el momento en que Goten le había prometido ayudarlo a pasar un juego


-ah, eso – dijo, y sintió sobre él la mirada de Annière “demonios, ahora tiene más razones para molestarme” pensó


-¿en verdad te disfrazaste de chica? – pregunto la pelirroja dirigiéndose a Goten con una sonrisa pensando en mil y un maneras de molestar al pelilila


-si – contesto Goten algo avergonzado – por favor, no le digas a nadie… - añadió alarmado


- no te preocupes, jamás cuento los secretos que hay entre ustedes, parejita – dijo señalando la ultima palabra


En ese momento sonó el timbre de fin del recreo


-¡ay, nooo! ¿¡otra vez a clases!? – se quejó Goten, mirando al cielo como reclamándole al universo


-es el primer día… - replicó Trunks sorprendido - ¿Cómo te puedes estar quejando?


Goten tomó sus cosas y se acercó a Trunks – lo que pasa es que tu eres uno de esos sabelotodo que les encanta venir a la escuela, como Gohan – se burló y se dirigió a la puerta


-¡OYE!


Goten se volteó a mirar al enfadado Trunks y sonrió cálidamente, dando a entender que solo estaba jugando, esa sonrisa borró el semi-enfado de Trunks


-¡es cierto! ¿Qué juego era? – preguntó Goten


-oh… es el half… life… o algo asi – dijo Trunks


-Goten alzó una ceja incrédulo - ¿el 2? – preguntó, y la respuesta de Trunks fue


-¿hay un 2?


El pelinegro solo lo miró perplejo y se rio un poco de la expresión confusa de su amigo – ok, iré este fin de semana – y se fue corriendo hacia su salón de clases


Pasaron unos segundos y Trunks que miraba fijo la puerta, suspirando resignado, cerró los ojos


-Annière, deja de mirarme así… - dijo


-¿Cuándo vas a aceptar que te gusta?


-nunca, porque no me gusta – dijo Trunks con firmeza, pero su corazón se remeció un poco como llamando la atención, lo ignoró y se dirigió a su salón.


 


 


La semana transcurrió tranquila, aunque claro, Trunks tuvo que soportar las miradas, risitas y preguntas insistentes de Annière a cada segundo a la vez que sentía un malestar inexplicable en el pecho; esa sensación y las burlas de Annière empeoraron luego de lo que había ocurrido ese miércoles:


“Goten tenía clases de gimnasia antes del almuerzo; sonó el timbre y Trunks y Annière salieron de su clase de filosofía, en ese preciso momento sonó el celular de Trunks


-¿Goten? – dijo extrañado el pelilila mirando la pantalla de su celular, contestó - ¿Qué pasa?


-¿podrías comprar mi almuerzo? – pidió Goten al otro lado de la línea


-¿Por qué? – preguntó Trunks - ¿Dónde estás?


-en clase de gimnasia – resopló Goten – el profesor dice que hice trampa en la carrera de cien metros planos, y me castigó haciéndome correr cincuenta vueltas al estadio de futbol americano… pero debo correr al paso de él, es una tortura


-esta bien, yo te compro el almuerzo – dijo Trunks aguantándose la risa


-gracias


 


Annière y Trunks estaban en el salón de música, habían empezado a comer sus almuerzos cuando aparece Goten aun con la ropa de gimnasia, con la respiración algo agitada y sudando a mares


-hola – dijo entrando - ¿Qué me compraste? – pregunto revisando la bolsa que estaba junto a Trunks


-¿no deberías ir a ducharte primero? – dijo la chica con algo de repulsión – estas salpicando todo con tu sudor, por lo menos sécate


-está bien – dijo Goten sintiéndose regañado, se hizo a un lado y de un movimiento se quitó su camiseta, hipnotizando sin querer a un pelilila que abrió grandes los ojos y escupió algo de su jugo cuando lo vio, sintió como si el tiempo comenzara a pasar lentamente. Goten comenzó a secarse su sudor con la camiseta, sus pantalones estaban muy abajo, se veía completamente su torso y un “poco más”, Trunks veía en cámara lenta como Goten pasaba su camisa por su rostro, su cuello y sus hombros mientras tenia  los ojos cerrados como si lo disfrutara, también a través de su pecho bien formado pero no de manera exagerada, su abdomen delgado, terso... Asustado Trunks bajó la vista y juntó las piernas, no podría pararse en bastante rato, su excitación era demasiado evidente


-ufff, ¿ya puedo comer algo, señorita? – dijo Goten con algo de sarcasmo, pero Annière estaba concentrada en las reacciones de Trunks


- claro – dijo la chica


-genial – Goten se acercó a su comida, tres hamburguesas, papas fritas y bebida extra grande, miró a Trunks que estaba con la vista pegada en el piso, sin prestarle atención a la hamburguesa y bebida que tenia en las manos - ¿ya no quieres tu comida? – preguntó


-¿ah? S-si la quiero – dijo Trunks tratando de no mirar a Goten y como un zombi, sin darse cuenta de lo que hacia le dio un mordisco al vaso de bebida


Goten vio eso y luego miró a Annière preocupado


-¡Trunks! – Llamó la chica con cautela – ese es el vaso…


Trunks salió de su ensoñación y se dio cuenta de que lo que estaba  masticando era plástico, lo escupió y siguió comiendo su hamburguesa con normalidad. Goten no entendía nada.


Luego de ese momento, Annière siguió molestando a Trunks con mas insistencia y esta vez con una mirada de cierta perversión cuando, susurrándole al oído, le preguntaba: “¿Qué es lo que imaginaste al verlo ahí, sin camisa?”


Ese viernes Trunks esperaba a una cuadra de la escuela que Goten llegara, estaba apoyado en la pared y cada cierto tiempo miraba al cielo ansioso; Annière lo vio y se le acercó


-vamos, admítelo – dijo como saludo


Trunks suspiró fastidiado antes de contestar – Goten no me gusta


-¿Cómo sabias que hablaba de él? – dijo ella astutamente


Un leve rubor apareció en las mejillas de él – me lo has repetido toda la semana… - dijo


-deberías aceptarlo – dijo la chica sin tapujos – tu rostro se ilumina cuando lo ves


-¿mi rostro se ilumina? – preguntó con sorna el pelilila - ¿acaso crees que soy un faro o algo así? – dijo tratando de burlarse


-¡búrlate!  – Dijo ella valientemente – eso no quita el hecho de que sí te iluminas al verlo: tus ojos brillan y esa expresión de seriedad y misterio que pones para atraer a las chicas se desvanece y en su lugar… sonríes como un tonto


-¡tonterías! – declaro el con seriedad, sonriendo astuto y con los ojos cerrados. Annière lo miro unos instantes y luego


-¡mira, ahí viene Goten! – dijo ella


-¿Dónde? – preguntó rápido y ansioso el pelilila mirando para todas partes


-jijiji


Trunks se dio cuenta de que había sido engañado - ¡¡¡¡¡AAARRGGGHHH!!!!!! Ya deja de molestarme – gruñó


-tu cara se pone roja cuando lo ves


-¡te demostraré que no me gusta! ¡Ya verás!


Un suspiro se escuchó atrás de ellos – desearía saber de quien hablan… - dijo Goten tranquilamente, sonriendo. Trunks lo miró, y tal como dijo Annière, sus mejillas se sonrosaron levemente


-¡por fin es viernes! – dijo Goten caminando hacia la escuela, sin darse cuenta del rubor en las mejillas de su amigo, los otros lo siguieron y se fueron conversando animadamente.


 


 


A la hora del almuerzo Annière y Goten se encontraron en la fila de la cafetería, pero Trunks no estaba por ninguna parte, antes de que el pelinegro pudiera preguntar, Annière le informó


-Trunks salió media hora antes de la clase, diciendo que iba a la biblioteca, dijo que se juntaría con nosotros en la sala de música


-está bien – dijo Goten, y un silencio se apoderó de ellos, Goten no hablaba mucho con la chica, le molestaba un poco que fuera tan chismosa y tenia miedo de decir algo y que luego toda la ciudad lo supiera; ella por su parte se estaba mordiendo la lengua para no decirle al pelinegro que Trunks estaba enamorado de él.


Una vez en la sala de música, cada uno se concentro en comer su comida mientras esperaban ansiosos que Trunks llegara para que se aliviara la tensión en el ambiente. Faltaban quince minutos para que acabara el recreo cuando sonó el celular de Goten


-¿aló? – contestó el pelinegro - ¿tiene que ser ahora?… ok, ok, iré para allá de inmediato – se tragó su emparedado, se puso de pie y se dirigió a la puerta, casi se estrella con Trunks que entraba en ese momento - ¡a la hora que vienes llegando! – le recriminó sonriendo mientras se iba de la sala de música


-lo siento – respondió Trunks -¿A dónde vas? – preguntó intrigado


-eehhmm… tengo que hacer… umm… cosas, estoy ocupado – respondió con evasivas Goten – en la bolsa esta tu almuerzo – añadió y bajo las escaleras corriendo


-llegaste tarde, tu amado ya se fue – dijo Annière una vez que Trunks entro en la sala


-ya deja de molestarme – pidió el pelilila enfadado – ahora mismo te demostraré que no estoy enamorado de Goten – dijo y sacó de su bolso una decena de libros, los fue poniendo en  una mesa uno al lado de otro, la chica se acercó y se dio cuenta que se trataba de libros de biología y psicología adolescente - ¡aquí tienes pruebas irrefutables de que no me gusta Goten! – dijo Trunks señalando triunfal los libros


Annière miró los libros, confundida - ¿de que se trata todo eso? – preguntó escéptica y algo molesta


-como ya sabes – dijo él poniéndose serio, como si estuviera en una presentación de proyectos para la empresa – tengo 15 años, todos estos libros coinciden en que a esta edad los adolescentes son muy sensibles e impresionables y que tienen reacciones inexplicables, hay muchos cambios hormonales y todo eso, verás  yo… no voy a negar que Goten se ha puesto muy… atractivo – al decir la ultima palabra bajó el tono de su voz y miró hacia otro lado – es inevitable que a veces me quede mirándolo, pero eso no significa – continuó – que yo esté enamorado de él, solo tengo reacciones hormonales normales para mi edad, pero eso no significa que yo quiera… ser su novio – dijo lo ultimo bajando su tono de voz y sin quererlo se puso sonrojado


- las hormonas son las hormonas Trunks, pero eso no quita que sí estés enamorado –dijo la chica in preocuparse – además – añadió y una sonrisa de satisfacción se dibujó en su rostro – si son tus hormonas las que reaccionan ante Goten ¿eso no significa que quieres acostarte con él?


El pelilila de inmediato recordó a Goten en su cama, desnudo, masturbándose… y a él mismo masturbándose pensando en el pelinegro, sus mejillas reaccionaron y avergonzado mintió una vez más – no sé de qué hablas – replicó – jamás pensaría en algo así


Trunks tomó su bolso y se dirigió a su salón de clases – devuelve los libros a la biblioteca, te cubriré con el maestro – dijo antes de salir


Annière miró como su amigo se iba, tomó los libros y saliendo del viejo salón murmuró con calma


-me pregunto cuanto tardará Trunks en darse cuenta de que sí ama a Goten – y se dirigió a la biblioteca tranquilamente.


 


-----------


 


Los primeros dos meses de clases pasaron bastante rápido, Trunks convencido de que sus reacciones eran causadas por sus hormonas de adolescente trataba de evitar por todos los medios pensar en Goten de “esa” manera, se repetía a sí mismo que esas ideas locas pronto pasarían, pero no importaba lo mucho que se concentrara en eso, al ver a Goten siempre terminaba poniendo “esa estúpida sonrisa” como decía Annière, quien seguía molestándolo pero ya no tan seguido.


Era un aburrido día viernes: Goten no fue a la escuela, había llamado a Trunks la noche anterior diciendo que sus padres iban a salir temprano ese día y que se quedaría jugando videojuegos en casa aprovechando que no estaban; Annière por su parte se encontraba con gripe y no había ido en toda la semana, Trunks era el único de ellos que si había ido a la escuela, se aburría tanto de estar solo que no había salido del salón en todo el día, ni siquiera quiso ir a la cafetería, en lugar de eso le compró todos los pastelillos a un chico de su salón. Había estado todo el día sentado en su puesto mirando por la ventana, sin ser consciente  de que una idea revoloteaba a cada segundo en su mente: Goten.


Era la primera vez que se quedaba en el salón durante los descansos, se sorprendió de ver que no era el único, hubiera deseado estar sólo: hacían demasiado ruido, en especial un grupo de muchachos que no tenían mucha suerte con las chicas, de un momento a otro entró al salón un chico de otro curso, Trunks recordaba haberlo visto en el salón de Goten, le llamó la atención que entrara de forma tan segura en un salón que no era el suyo, llevaba un bolso grande del que sacó varios libros, parecían álbumes de fotos, los molestosos chicos de aquel grupo hicieron aun más escandalo y se amontonaron a ver los libros, el pelilila se sintió intrigado de que hicieran tanto revuelo por unos libros, en especial porque comenzaron a reírse, nerviosos, como si compartieran un secreto, Trunks los quedó mirando como tratando de averiguar de que se trataba todo eso.


En ese momento el chico que traía los libros miró a Trunks quien al sentirse descubierto miró hacia otra parte, el chico sonrió con astucia, sabia perfectamente quien era y en especial todo el dinero que tenía, tomó su bolso, que estaba lleno de libros y se dirigió hacia el pelilila


-¡hi! – dijo sonriendo


-…


-tengo algunas fotografías “interesantes” – señaló el chico y abrió un libro: estaba lleno de fotografías de chicas en posiciones provocativas, el rostro de Trunks se tiño de rojo y miró al “vendedor” con suspicacia


-no te preocupes – dijo él sonriendo – todas las fotografías fueron hechas con el permiso de las chicas, de hecho ellas mismas eligen cual quieren que salga a la venta y cual no… las de tamaño billetera cuesta 100 zenis, las tamaño normal cuestan 300 zenis y las de tamaño oficio tienen un valor de 500 zenis… aunque claro… también puedes agrandar una imagen a tamaño real, pero eso cuesta 2000 zenis


-… - Trunks no decía nada, solo miraba al chico, aunque se sentía intrigado por que clases de chicas habían en las fotografías


-no te preocupes, te dejare aquí los álbumes, para que los veas con toda calma, estaré con los chicos por si necesitas algo – dijo el vendedor y se fue con el grupo


Trunks algo inseguro y avergonzado tomó con cautela un libro y comenzó a hojearlo, en verdad habían muchas chicas lindas y sobretodo sexis, eran posiciones MUY sugerentes, pero mostrando lo justo y necesario, sin embargo ninguna de ellas causaba un gran impacto en el pelilila, las encontraba lindas y sexis, pero no le provocaban querer comprar la fotografía para verla a cada rato, no había mucha diferencia con las revistas que ya tenia, excepto que eran chicas más jóvenes. Fue dejando a un lado cada álbum que veía, hasta que terminó de verlos todos, o eso creía, quiso guardar los libros en el bolso de aquel chico y entonces notó en un bolsillo más pequeño otro libro, dejó los libros e intrigado tomó aquel libro cuidando que el chico no lo notara, quizás eran cosas personales, pero aun así quería verlo, abrió el libro e inmediatamente sus ojos se abrieron enormes, un estremecimiento recorrió su cuerpo y por un momento olvido como respirar


-“¿era…? No, no podía ser… era… ¿Goten?” – pensaba mientras miraba la primera fotografía una y otra vez. Era evidente que se trataba de Goten, pero casi no lo parecía, se veía demasiado “hot”, llevaba una polera muy ajustada y su bóxer mostraban demasiado, mientras comía una paleta helada muy sugerentemente, todo cubierto con el helado derretido y una mirada que llamaba a hacerle compañía. Trunks dio vuelta la pagina con la esperanza de que fuera la única foto, pero no, habían más, muchas más, era todo un álbum dedicado a Goten, a un muy seductor y ardiente Goten.


Trunks se puso de pie alterado, con su rostro tan rojo que parecía salir vapor de su cabeza, el chico de los álbumes que estaba junto a los otros chicos lo miró y se dio cuenta del libro que tenia en sus manos, asustado se acercó a Trunks


-oye, ese libro… - alcanzó a decir antes de que Trunks lo tomara de su camisa y lo pusiera contra la pared


-¿se puede saber… por qué demonios tienes fotografías de él? – murmuró furioso, señalando una de las fotografías de Goten 


-¿Qué tiene? – murmuró a su vez el chico temblando de miedo


-es mi mejor amigo… - y lo empujo más a la pared


-¡hey! – Dijo con dificultad el vendedor -  Él… él quiso hacerlo, yo no lo obligué… hg…  ni nada de eso… - al escuchar eso Trunks se calmó un poco y soltó al vendedor


-incluso él eligió las fotos… ¿es tu amigo, verdad? ¿Por qué no se lo preguntas?


-bien… - dijo Trunks luego de titubear unos segundos – pero no venderás ninguna de estas fotos hasta que le haya preguntado a Goten ¿entendido?


-esta bien… - dijo asustado el chico, tocando su cuello con cautela


Trunks tomó sus cosas, subió al techo de la escuela y emprendió vuelo en dirección a la casa de Goten, no podía esperar a que terminara la jornada escolar, y no quería hablar de eso por teléfono


--


En pocos minutos llegó a la montaña Paoz, descendió con cuidado y tocó a la puerta de la casa, nadie contestó, recordó que Goten estaba solo en casa, “debe estar escuchando música” pensó y entró, con cautela, a la casa. Se dirigió de inmediato a la habitación de Goten, abrió un poco la puerta para no asustarlo con su llegada inesperada, pero lo que vio lo sorprendió a él, soltó la manija de la puerta asustado y retrocedió unos pasos, no había alcanzado a ver muy bien lo que pasaba, pero la idea central ya estaba en su mente: Goten, un chico, desnudos, en la cama.


Una mezcla de sensaciones llenó su mente, su corazón se sentía extraño pero no podía identificar que era, confundido decidió irse por donde había entrado, se dirigió a las escaleras, pero antes de que bajara el primer escalón los escuchó, sus gemidos, había entreabierto la puerta y ahora el sonido llegaba claramente a sus oídos, se detuvo y miró hacia la puerta de la habitación, una idea apareció en su mente, una idea aterradora y a la vez atractiva… la puerta ya estaba abierta, no pasaría nada si echaba un vistazo… pero no podía, no era correcto y bajó un escalón, pero el sonido de sus gemidos aun llegaba a sus oídos, ¡dios! pensó, la curiosidad lo estaba carcomiendo, sabia que no era correcto espiar, pero sabia que si no lo hacia se arrepentiría toda la vida. Se acercó lentamente a la puerta, la abrió un poco más para ver mejor y se quedó mirándolos, mejor dicho, mirándolo a él, su Goten


Estaban completamente desnudos, era Goten quien estaba encima, tenia a ese chico de piernas abiertas gimiendo mientras lo penetraba; Trunks se sorprendió, jamás creyó que Goten tuviera ese rol en la cama, un escalofrió le recorrió la espalda; Goten besaba a ese chico tratando de calmar sus gemidos, pero era incontrolable, siguió besándole el cuello y de un momento a otro le dio un mordisco que hizo que el chico gritara de placer; Trunks abrió los ojos sorprendido, asustado y miró hacia otra parte, se apoyó en la pared y se deslizó hasta quedar sentado en el suelo, su respiración estaba agitada, miró su entrepierna donde un enorme bulto pedía atención, un gemido gutural en la habitación llamó su atención y volvió a mirar, se quedó arrodillado con su vista fija en cada movimiento y expresión de Goten, mientras instintivamente su mano se dirigía a su entrepierna para calmarlo; Goten era quien había hecho ese gemido gutural, le faltaba poco para correrse y no quería dejar ni un centímetro de ese cuerpo sin tocar, besar, apretar, el chico asustado puso sus manos para apartarlo, pero Goten no lo toleró, puso las manos de el sobre la cabeza y las sujetó con una mano, mientras lo besaba y con la otra lo acariciaba de una manera tan llena de deseo que Trunks sintió como si fuera él a quien estuviera acariciando; nunca antes Trunks había notado lo grandes y a la vez finas que eran las manos de Goten, se sintió sobrecoger; Goten levantó aun más una de las piernas de ese chico y empezó a besarle su torso, pero algo llamó su atención y rápidamente su mirada fue en dirección a la puerta de su habitación, chocando con los ojos azules de Trunks, quien, asustado al sentirse descubierto, rápidamente se alejó de la puerta


-¡demonios! – Pensó poniéndose de pie - ¡él me vio! ¿Cómo se lo explico? – se preguntaba mientras daba vueltas alterado por el pasillo, lo peor era que aun estaba excitado pero le avergonzaba tocarse sabiendo que Goten sabia que estaba ahí, de pronto un sonoro gemido vino de la habitación llamando la atención del pelilila, y luego, silencio. Trunks no sabía como reaccionar si veía a ese chico, así que algo asustado se fue a esconder al balcón.


En la habitación Goten se había puesto de pie rápidamente una vez terminado, se puso una camiseta de manga larga como era su costumbre y sus bóxer negros, ese chico permanecía en la cama exhausto, con mucha dificultad se puso sentó en la cama


-¡estuvo excelente! – exclamó con la respiración entrecortada, mirando sonriente a Goten


-deberías vestirte – fue la respuesta de Goten sin siquiera mirarlo


-un trato es un trato… -dijo aquel chico sonriendo con algo de astucia


-así es – respondió Goten – tu querías perder la virginidad y yo quería acostarme con alguien… - y miró al chico de reojo, quien sonreía abiertamente mientras se vestía


-listo… -dijo luego de unos minutos – nos vemos Goten – y se dirigió a la puerta, Goten lo detuvo


-aunque sólo haya sido por hoy, debo admitir que fue un gran placer – dijo Goten extendiendo la mano, ese chico la estrechó con energía


-lo mismo digo – y le dio un beso en la mejilla a Goten.


Una vez que el chico se fue, Goten se dirigió al balcón para hablar con Trunks, lo encontró apoyado en la baranda mirando al horizonte, no pudo evitar sonreír con ternura al verlo, se acercó y apoyó su espalda contra la baranda


-¿Qué haces? – pregunto


-¿eh? N-nada – dijo Trunks como sacado de sus pensamientos, había estado mirando la dirección por donde se había ido ese chico, sentía unas irremediables ganas de matarlo de la forma más dolorosa posible


-¿estas seguro? – inquirió el pelinegro


-…


Al no recibir respuesta, Goten decidió burlarse un rato de Trunks, una sonrisa picara se dibujo en su rostro al imaginar la reacción de Trunks ante la pregunta que le haría


-dime ¿te gustó algo de lo que viste?


Pero Trunks en lugar de enfadarse solo  miró unos instantes a Goten y luego miró hacia otro lado, claramente enfadado, el pelinegro se sorprendió de eso, esperaba una reacción completamente diferente, se acercó un poco a Trunks, preocupado


-¿Qué ocurre? – la voz de Goten sonó tan grave y seductora que Trunks sorprendido casi se sintió derretir, tuvo que concentrarse mucho para no olvidar porque estaba enfadado


-¿Por qué no me presentaste a tu novio? – dijo enfadado mirando a Goten


-¿uh? ¿Novio? ¿De que hablas? – dijo Goten sin entender


-¡PUES DEL CHICO CON el que… estabas… haciendo… el… a… mor! – dijo disminuyendo cada vez más su tono de voz a la vez que su rostro aumentaba cada vez más su tono rojo


Eso llamó la atención de Goten, alzó la ceja intrigado, pero prefirió ignorarlo y responder la pregunta de Trunks – él no es mi novio – dijo el pelinegro con naturalidad


-¿qué…?


-de hecho – continuo explicando Goten – ni siquiera sé su nombre


-¡QUÉEEEE! – Trunks no podía creer lo que estaba escuchando – p-pero estabas con él en la… cama… - nuevamente su voz disminuyó al decir la ultima palabra, Goten lo notó


-¿Qué tiene? – le preguntó el pelinegro a su amigo, sin entender la gravedad del asunto, Trunks estalló


-¡¿CÓMO QUE QUÉ TIENE?! ¡HACER EL AMOR ES ALGO QUE NO TE TOMA A LA LIGERA! ¡¿CÓMO PUDISTE PERDER TU VIRGINIDAD CON ALQUIEN A QUIEN NO CONOCES?!


Goten sonrió comprensivo ante la reacción exagerada de su amigo -Trunks… - le dijo con tranquilidad – yo perdí mi virginidad hace un año, con Matt


Trunks se sintió congelar, fue como si su cerebro hubiera sido reiniciado, abrió los ojos lentamente y al ver a Goten sintió como si un nuevo espíritu hubiera en el pelinegro: más grande, más maduro y por sobre todo más atractivo, notó que su cabello había crecido lo suficiente para empezar a tomar la forma rebelde de los saiyan, Trunks se sintió diminuto al lado de él, a pesar de tener la misma altura, miró hacia otro lado avergonzado – ya veo – fue todo lo que dijo


Goten sonrió y se acercó a Trunks - ¿Por qué siempre que hablas de sexo bajas la voz y te pones colorado? ¿Acaso eres…? Ya sabes… ¿virgen?


El pelilila se sorprendió con la pregunta y sintió claramente el calor que emanaban sus mejillas, miró a Goten recordando que él había perdido su virginidad hace un año, se sintió avergonzado, no podía decirle la verdad a Goten, quedaría como un tonto si le decía que aun era virgen, él era el mayor, más guapo (bueno, ahora en eso estaban parejos), el que tenia más éxito con las chicas, se suponía que él perdería la virginidad primero


-¡claro que no! – mintió y al ver que Goten lo seguía mirando esta vez con curiosidad, replicó – no te daré detalles


-está bien – dijo resignado Goten – ven vamos a jugar, tengo un juego nuevo


-la verdad, ya me iba


-¿Por qué? – dijo Goten decepcionado, sus grandes ojos se humedecieron, Trunks lo notó


-de acuerdo, de acuerdo – dijo Trunks tratando de calmarlo – me quedaré, pero no me quedare a cenar ¿entendido?


-claro – dijo Goten guiñándole un ojo a su amigo y se dirigió a su habitación, solo entonces Trunks lo notó


-Goten… ¡ponte pantalones! – dijo, ese trasero redondo lo estaba hipnotizando


--


Regresó a la Capital del Oeste cuando ya estaba atardeciendo, mientras volaba hizo una llamada, a regañadientes, como si no quisiera hacerla, colgó y en lugar de ir a su casa se dirigió al centro de la capital, a la estación del metro, esperó ahí unos minutos hasta que de la estación salió un chico de cabello castaño que llevaba un gran bolso lleno de libros, se acercó a Trunks con una gran sonrisa de satisfacción y le entregó un libro, el pelilila le dio una ojeada sonrojándose automáticamente, le entregó la mitad de su mesada en efectivo a aquel chico y luego tomándolo de la camisa le dijo


-si le dices de esto a alguien, es especial a Goten, desearas no haber nacido ¿entendiste?


-claro


Una vez en su casa, fue directo a su habitación, cerró con llave la puerta y se puso a mirar con calma su nueva adquisición: casi cien fotografías seductoras de Goten, todas en tamaño oficio. Sintió el calor emanar de su cuerpo y fugazmente recordó algo que había dicho Annière: “si son tus hormonas las que reaccionan ante Goten ¿eso no significa que quieres acostarte con él?”


-está bien, Annière, tu ganas – dijo desabrochándose los botones de su camisa – si quiero acostarme con Goten – y al decirlo sintió su cuerpo quemar – pero eso no significa – agregó – que esté enamorado de él… - y se dejó llevar por sus instintos.


 

Notas finales:

Pero que chico más terco, está que se muere por su mejor amigo y aun asi no lo acepta D:

Bueno el proximo capítulo se titulará: "Corazón delator" (sí, como el cuento de Edgar Allan Poe)

Estoy pensando seriamente en acortar el fic y hacer que haya lemon entre esos dos lo más pronto posible, que me estoy desesperando, pero hay tantas cosas que quisiera ponerle xD

 

Espero que les haya gustado


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).