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Amigos ¿Para siempre? por Drasami

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Notas del capitulo:

Por fin... capitulo 11

Lamento la demora, en mi casa no tengo internet (es en serio... es el lugar más horrible del mundo D:)

Bueno, espero que les guste

 

personajes de Akira Toriyama

El estruendoso sonido del despertador retumbó en la habitación, de entre las mantas de la cama apareció un brazo que con lentitud se acercaba al despertador, cuando lo tuvo en sus manos lo apretó con fuerza haciéndolo añicos. Luego de unos minutos las mantas se movieron y de entre ellas apareció el pelilila con una expresión de cansancio y fastidio, se levantó con una parsimonia increíble, su cabello alborotado demostraba que no se había levantado en todo el fin de semana, sólo llevaba puestos sus bóxer, pero no había problema, no había pasado nada de frio esos días: había logrado “calentarse” lo necesario. Se metió a la ducha aun medio dormido y ni siquiera el agua lo logro sacar de esa ensoñación, la imagen del chico de cabello negro era en lo único en lo que pensaba. Regresó a su habitación mientras se secaba con la toalla y entonces lo vio, escondido entre las mantas de su cama, el libro de fotografías de Goten, se acercó a tomarlo y sintió lo mojado que estaba, algunas paginas estaban pegadas por una sustancia blanca que se había secado, las abrió con cuidado, no quería estropear las fotografías, las miró una vez más y sintió el calor emanar de su cuerpo, automáticamente su mano bajo por su torso en dirección a su entrepierna “NO” dijo y se detuvo, “hoy es lunes, debo ir a clases”, cerró el libro con cuidado y lo escondió junto con sus otros libros, parecía cualquier otro libro de cosas aburridas. Se vistió y se dirigió a la escuela sin tomar desayuno, hizo su recorrido como siempre, solo que esta vez iba sumido en sus pensamientos, pensamientos que hacían que los cabellos de su nuca se erizaban y que su entrepierna se ajustara. Se quedó a una cuadra de la entrada del colegio, como cada día, para esperar a Goten y a Annière, pero en realidad no estaba pensando en eso, por eso se sorprendió tanto cuando vio a Annière justo al lado suyo exigiéndole que le prestara atención, un desconcertado “hola” fue toda su respuesta y se volvió a sumir en sus pensamientos. Si no estaba listo para encontrarse con Annière, mucho menos lo estaba para encontrarse cara a cara con él, el causante de su estado, la persona en quien había estado pensando todo el fin de semana, la razón por la cual por primera vez en su vida se había quedado todos los días en cama maginándose junto a él, en cómo seria hacerle el amor, pero sobre todo se imaginaba a Goten encima de suyo, al igual como lo había estado con aquel muchacho el viernes pasado. Escuchó el sonido de su voz en la lejanía, levantó la vista como si saliera de un sueño y lo vio justo frente a él, con esa sonrisa como siempre

-¡hola! – fue todo lo que Trunks escuchó, Goten se le había abalanzado encima y lo besaba con pasión, se había sacado rápidamente la camisa y presionaba su torso desnudo contra el pelilila que sentía su miembro endurecerse rápidamente; las manos de Goten, rápidas, comenzaban a desvestirlo mientras sus labios bajaban ya por el cuello del mayor…

¡TRUNKS! – escuchó y salió de su ensoñación, Goten y Annière lo miraban entre confundidos, curiosos y preocupados

-¿Qué te pasa? – preguntó ella

-te acabo de saludar… ¿estas bien?– dijo él

-¡estoy bien! – dijo el pelilila dándoles la espalda a sus amigos y dirigiéndose a la escuela  avergonzado, su rostro estaba muy rojo, todo lo anterior no era más que producto de su imaginación, Goten se apuró para caminar junto a él

-¿seguro estas bien? – le preguntó acercándose por si quería contarle un secreto

-sí… - dijo Trunks y con su bolso se cubrió disimuladamente su entrepierna para que Goten no notara la evidente erección que tenia y miró hacia otro lado

Ese gesto en su mirada alarmó más al pelinegro, quien, preocupado, tomó de los hombros a su amigo y lo miró fijamente a los ojos

-¡Trunks, dime! – exigió, pero ya la mente de Trunks estaba volando…

Goten se le había abalanzado y estaba encima de él, Trunks tenía las piernas abiertas y ambos estaban completamente desnudos, Goten le besaba el torso lentamente e iba bajando directamente a la entrepierna del pelilila

~PLAF~

-¡auch! – se quejó Trunks, Annière le había dado un golpe en la cabeza para que reaccionara, la miró con algo de enfado pero agradecido, se apartó un poco de Goten

-estas actuando muy extraño… - comentó Goten con algo de tristeza

-es que… - trató de explicar Trunks, pero se confundía con facilidad

-¿acaso dormiste mal? – preguntó la pelirroja tratando de ayudar

-¿eh?... e-eso es, dormí muy mal este fin de semana

-¿en serio? – preguntó Goten sintiéndose más animado – si quieres puedo ir a tu casa y ayudarte a dormir… cuando Pan era una bebé le costaba quedarse dormida pero cuando yo la tomaba en brazos se dormía de inmediato – señaló con su inocencia de siempre

Trunks sonrió algo avergonzado, cuando Goten se ofreció a hacerlo dormir, una escena fugaz cruzó por su mente: Goten y él en la cama agitados y sudorosos, y la voz de él susurrandole: con todo este “ejercicio”, supongo que ya podrás dormir bien

-no es necesario – contestó Trunks actuando con la seriedad de siempre

 

-------------

 

 

-Deja de pensar en eso… deja de pensar en eso… deja de pensar en eso – murmuraba Trunks por lo bajo, mientras sostenía un libro para hacer creer al profesor de filosofía que estaba leyendo tal como lo había ordenado al inicio de la clase, pero no tenía idea de qué debían leer, estaba concentrándose para vaciar su mente de esas ideas indecorosas que tenía y en las que su mejor amigo tenía un papel fundamental, pero que lo estaban llevando al desastre. Tan solo era miércoles y en los dos días anteriores su vida se había ido a pique por ese libro de fotografías que había comprado el fin de semana y su impresionante imaginación, que incluso a él mismo asustaba.

No podía dejar de pensar en Goten, en cada momento a cada instante, luego del mal momento que le hizo pasar su imaginación justo en frente de Goten el día lunes, su cerebro no encontró nada mejor que dormitar durante la primera clase del día, empezó a mirar por la ventana, tenía su cabeza apoyada en su brazo izquierdo, mientras tomaba apuntes sobre lo que la maestra decía, pero la voz de su maestra se empezó a oír mucho más lejana y el empezó a concentrarse en el movimiento de las nubes producto del viento de otoño, empezó a recordar cómo él y Goten jugaban entre las nubes cuando eran más niños y empezó a dormirse…

- hey, Trunks, vamos – decía un Goten de 14 años, mientras volaba entre las nubes

El pelilila solo sonrió y lo siguió, Goten desapareció tras una nube y Trunks lo siguió, pero al atravesar la nube, el pelinegro no estaba, Trunks algo asustado lo llamó, pero al abrir la boca se dio cuenta que no podía articular palabra, “¡Goten!” pensó y sintió como alguien lo tomaba del hombro y lo volteaba

-¿me buscabas? – pregunto Goten con voz seductora y acto seguido besó a Trunks directamente en los labios, Trunks cerró los ojos mientras sentía como la mano de Goten iba bajando por su pecho hasta llegar a la entrepie…

¡¡¡¡¡PAF!!!!

El ruido despertó de golpe a Trunks, quien perdió el equilibrio de la silla y cayó al piso ante la risa de sus compañeros de salón

-ayy…

-¡señor Brief! – Escuchó la voz de su profesora claramente enfadada, rápidamente se puso de pie - ¿acaso cree que por tener la mejores calificaciones de este salón puede quedarse dormido en una de mis clases?

-no, profesora, yo…

-¡AUN NO TERMINO! – Dijo ella alzando la voz – si no está interesado en esta clase, tome sus cosas y salga – dijo dándole la espalda a Trunks y señalando la puerta

Trunks solo se quedó ahí de pie, luego de unos instantes la maestra volvió a mirarlo – veo que ha tomado una decisión sensata, señor Brief… y ya que cree que es muy inteligente tanto para dormirse en mi clase, espero un ensayo de mil páginas con interlineado simple sobre la literatura moderna… y para que vea que no soy tan malvada, tiene una semana, lo espero el lunes a primera hora, o reprobará automáticamente – y se dirigió al frente del salón para seguir con la clase

-sí, profesora – asintió Trunks mientras se lamentaba por dentro, primero por quedarse dormido y segundo por no haber salido del salón cuando tuvo oportunidad. Levantó la silla y las cosas que había botado y se sentó

-¿señor Brief? – Lo llamó su maestra, Trunks se puso de pie – ya que usted conoce tan bien esta materia, tanto para dormirse durante mi explicación, por favor, salga del salón, nos vemos la próxima clase – dijo la maestra con una sonrisa de suficiencia

Trunks miró el pizarrón donde estaba escrito con grandes florituras “Literatura Moderna”, “mierda” pensó Trunks tomando sus cosas y saliendo del salón “voy a reprobar”

Y así estuvo en todas las clases de ese día, trataba de concentrarse en lo que los profesores decían, pero su mente estaba dominada por un idiota de cabello negro que se había vuelto realmente sexy, por eso es que fue sacado de todas las clases de ese día y el martes fue igual, los maestros sabían que no era normal en él así que en lugar de castigarlo solo lo sacaban del salón, pero ese miércoles ya todos los maestros sabían del nuevo comportamiento de Trunks y habían decidido tratarlo como a cualquier otro estudiante

-señor Brief, continué con la lectura por favor – pidió el profesor de filosofía

-*deja de pensar en eso, deja de pensar en eso…* - se susurraba a sí mismo Trunks

-señor Brief – volvió a llamar el maestro alzando un poco la voz, pero no obtuvo respuesta, se acercó al puesto del pelilila que seguía con los ojos cerrados moviendo los labios mientras se repetía esa frase tratando de olvidar esas ideas. El maestro golpeó la mesa con el libro, lo que sobresaltó a Trunks y lo sacó de su ensoñación, se puso de pie rápidamente

-sí, profesor – respondió

-está castigado señor Brief, quizás así vuelva a comportarse como debe – dijo el profesor sacando una pequeña libreta de su bolsillo, anotó algo y le entrego la hoja a Trunks  – quédese de pie en el pasillo hasta que termine la clase y lo espero en el salón de detención a la hora de la salida

-sí profesor – asintió Trunks y se dirigió al pasillo

--

Luego de veinte minutos, Trunks seguía de pie en el pasillo sosteniendo dos baldes de agua, para alguien como él no costaba nada estar ahí, lo que le molestaba al pelilila era que todos en la escuela iban a saber que lo habían castigado. Unas chicas de otro salón se acercaban, bajó la vista avergonzado, las chicas lo miraron de reojo y cuando ya se habían alejado un poco se pusieron a cuchichear “-¿ese no era? –sí, si era… Trunks Brief -¿castigado? -sorprendente”

Trunks cerró los ojos y dio un profundo suspiro, sintió los pasos de unos chicos que se acercaban corriendo por el pasillo, se quedó con los ojos cerrados, no quería ver quien más lo iba a ver en esa situación, los sintió alejarse y abrió sus ojos azules que chocaron inmediatamente con unos enormes ojos negros que lo miraban entre curioso y divertido

-¿Trunks? – preguntó Goten alejándose un poco y con un tono divertido

Trunks se había perdido en esos ojos negros, ni siquiera pudo pensar en algo obsceno, solo miraba esos ojos hipnotizantes a la vez que en su pecho surgía una extraña sensación que se desvaneció cuando Goten se alejó, eso lo hizo reaccionar

Goten miraba por la ventanilla de la puerta pendiente de los movimientos del maestro, no estaba pendiente de Trunks, eso era bueno - ¿acaso te castigaron? – susurró sonriendo

-no es evidente

-¿Por qué? – dijo Goten sin quitar esa sonrisa suya, le parecía muy divertido que Trunks estuviera castigado

-he estado muy distraído estos días – dijo Trunks sin pensar en que se trataba de Goten con quien estaba hablando – no puedo dejar de pensar en… - y levanto la vista recordando que era Goten el que estaba ahí, “tí” había estado a punto de decir – no tiene importancia – dijo y miro a otro lado

Goten solo lo miraba “a este le pasa algo” pensaba, pero sabía que no le diría nada al igual que en los otros días – como digas… ya debo irme, tengo que ayudar a los chicos a llevar los balones al gimnasio, también debes quedarte a detención ¿cierto? Suerte con eso… nos vemos en el almuerzo – y se fue corriendo

Trunks se le quedo mirando, había estado a punto de decir algo que lo pondría al descubierto, pero lo que más le preocupaba era esa fugaz sensación en su pecho y el que no había pensado nada obsceno al ver a Goten

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-voy a reprobar

PUM!

-voy a reprobar

PUM!

-voy a reprobar

PUM!

-Ya deja de lamentarte y de golpear la mesa con tu cabeza, Trunks – lo regaño Annière – la vas a romper

-ella tiene razón Trunks –dijo Goten sentándose al lado de su amigo – no lograrás nada con lamentarte

-¿y qué más puedo hacer? – Replicó el joven de cabello claro – tengo que hacer un ensayo de mil páginas, ¡MIL PÁGINAS! y no tengo ni una mísera idea de que hacerlo, no sé nada sobre literatura moderna y Annière no puede ayudarme porque se va con sus padres a la montaña este fin de semana

-lo siento – dijo ella

Hubo silencio en el viejo salón de música, luego de un rato Goten dijo tímidamente –yo puedo ayudarte

Annière y Trunks se miraron y luego miraron a Goten con intriga, ante eso Goten añadió

-yo sé de literatura, me gusta mucho leer novelas, puedo ayudarte con eso y no se… podemos pedirle más ayuda a Gohan ¿te parece? – preguntó inseguro y algo avergonzado

-¡suena genial! – dijo la chica entusiasmada - ¿Trunks?

-está bien… - dijo pensativo el mayor

-¡oh, vamos! – Le reprochó ella – tienes tres días para hacer el ensayo, recuerda que mañana viernes no hay clases por el aniversario del fundador del colegio… ¡vas a hacer ese trabajo! – ordenó

-sí – dijo Goten con ánimo – ve mañana a mi casa y te quedas el “finde”

Trunks miró a Annière, quien alzó una ceja suspicaz, Trunks se sintió algo incómodo pero acepto ir a la casa de Goten

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Eran las dos de la noche del día sábado, Milk se levantó con cuidado de la cama para no despertar a Goku, se puso sus pantuflas con forma de cerdito y se dirigió a la cocina. Se sirvió un vaso de leche y regresó a su habitación, estaba a punto de entrar cuando notó que al final del pasillo y subiendo las escaleras se veía más iluminado de lo normal, con intriga y preocupación se dispuso ir a ver de qué se trataba. Subió las escaleras y notó que la luz provenía de la habitación de Goten “este niño debe estar jugando sus videojuegos” pensó frunciendo el ceño y dirigiéndose a regañar a su hijo menor, pero al abrir la puerta lo encontró sentado en el escritorio rodeado de libros concentrado leyendo, la luz provenía de la lámpara que Goten usaba para iluminar el libro

-Goten – llamó

-sshhhh… Trunks acaba de quedarse dormido – susurró y miró hacia su cama donde Trunks dormía, se notaba que estaba muy cansado, aun llevaba la ropa del día y ni se había molestado en ponerse bajo las mantas. Milk se enterneció al verlo, sacó unas mantas del armario de Goten y cubrió al joven de cabellos lilas, luego fue donde su hijo y le puso una manta en la espalda

-¿Cómo van con eso? – preguntó ella susurrando

-lleva 715 paginas – contestó Goten susurrando

-deberías acostarte y seguir mañana – susurró Milk preocupada

-lo sé, es que… estoy buscando unos fragmentos de unos libros que Trunks pueda citar en su trabajo, a esta maestra le gusta que citen algunas partes de las obras que uno menciona

-está bien – dijo su madre y le dio un beso en la cabeza – no te quedes despierto toda la noche – y salió de la habitación

Goten sonrió y siguió con su trabajo.

--

Trunks despertó por el dulce aroma proveniente de la cocina, se incorporó en la cama y lo primero que vio fue a Goten durmiendo en la silla tapado con una manta, lo quedó mirando unos instantes luego se acercó a la laptop y abrió el archivo de su ensayo, pero al hacer click notó algo “última actualización: hace una hora”, miró a Goten que dormía profundamente y entonces vio un post-it cerca de la laptop

“agregué unas citas a tu trabajo, ya están analizadas y todo, las puse de color rojo, si no te gustan solo bórralas” – Goten

Al fin el archivo se abrió, el pelilila se fijó en el contador de páginas y casi se va de espaldas:

-¡924! – exclamó y sin poder creerlo comenzó a leer lo que Goten había escrito, “woah, está muy bien, a la profesora le va a encantar” pensó, terminó de leer y arregló el archivo – ¡genial! Sólo me queda hacer la conclusión – dijo en voz alta

Ante el ruido Goten se movió en su sueño y perdió el equilibrio de la silla cayendo de espaldas

-¡AYYYY! – se quejó mientras se tocaba la parte posterior de la cabeza, donde se había golpeado, se puso de pie y dio un gran bostezo

-lo lamento, no quise despertarte – dijo Trunks mirándolo fijamente

-está bien, de todas formas tengo hambre, hay que tomar desayuno – miró a Trunks, frunció algo el ceño y luego alzo una ceja - ¿tengo algo en la cara?

El pelilila se dio cuenta de que estaba mirando fijamente a su amigo y volteó inmediatamente la vista, se puso de pie y siguió a Goten a la cocina

-gracias por ayudarme con el trabajo – dijo – ahora solo falta hacer la conclusión

-esa tendrás que hacerla tu – Goten arrastraba los pies al caminar y bostezaba a cada segundo, estaba muy cansado

-¿hace cuánto te acostaste? – preguntó preocupado Trunks

-eso depende de qué hora sea ahora

-hmmm… las nueve y quince…

-entonces me acosté hace una hora más o menos – dijo restregándose los ojos mientras seguía caminando. En ese momento Milk salió de la despensa con muchas cosas para cocinar y olvido cerrar la puerta, Goten estaba tan cansado que no se percató que iba a chocar con la puerta, Trunks también iba algo distraído y solo se dio cuenta al último momento

-¡cuidado! – dijo el pelilila tirando del brazo a Goten con tanta fuerza que éste perdió el equilibrio y para no caer se apoyó en Trunks, empujándolo contra la pared del pasillo

-¡auch! – murmuró Trunks, abrió los ojos y se sobresaltó al notar la posición en la que estaban: Goten lo tenía contra la pared y sus cuerpos estaban prácticamente pegados, sintió una sensación extraña en su pecho, Goten apoyó una mano en la pared y se incorporó, pasó su otra mano por su cabello y miró a Trunks

-¿estás bien? Ten más cuidado – le reprochó el pelinegro mirándolo fijamente, pero Trunks no escuchaba, había un sonido que se hacía cada vez más fuerte

pump… pump… PUMP

Los latidos de su corazón no lo dejaban oír y lo sexy que se veía Goten en ese momento tampoco ayudaba mucho

-¡vengan a desayunar! – llamó Milk, Goten obedeció de inmediato y fue a la cocina dejando a Trunks ahí, quien, al irse Goten, sintió como todas esas sensaciones desaparecieran, sin embargo su respiración aún estaba algo agitada cuando se sentó a desayunar

 

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Las semanas transcurrieron rápidamente, estaban en la última semana de exámenes, ya casi todas las calificaciones estaban listas y todos esperaban ansiosos las dos semanas de las vacaciones de invierno. Ese día miércoles Goten y Annière almorzaban como era de costumbre en la sala de música, comían en silencio y el pelinegro miraba fijamente una hoja como tratando de descifrarla; cuando la pelirroja terminó su almuerzo, ordenó sus cosas y miró a Goten

-¿esas son tus calificaciones? – preguntó

-mmm… - asintió Goten y le dio un mordisco a su hamburguesa

-¿hay algún problema? ¿Tu madre te va a regañar?

-no…, obtuve “B” en todo, bueno, excepto en literatura y gimnasia que obtuve “A+” – dijo Goten pausadamente, como si estuviera algo triste

-entonces ¿Cuál es el problema? – inquirió la chica

Goten miró su hoja de calificaciones – es la primera vez que veo tantas “B” juntas – respondió

Annière lo miró unos instantes y luego comenzó a reír a carcajadas, Goten solo la miraba. Luego de un rato en que Annière seguía riéndose, Goten volvió a mirar sus calificaciones, luego miró hacia las altas ventanas donde se podía observar la caída de la nieve

-no quisiera convertirme en mi hermano – murmuró para sí, pero Annière lo escuchó y detuvo su risa, mirándolo fijamente, asombrada del comentario del pelinegro, iba a preguntarle algo, pero justo en ese momento llegó Trunks, su abrigo venía cubierto de nieve y traía unos papeles en la mano

-hola – saludó, sacudiéndose la nieve del cabello

-¿Qué traes ahí? – inquirió la pelirroja

-… la profesora de filosofía al fin me entregó la calificación final y la del ensayo – dijo Trunks seriamente

-¡oh no…! – Gimoteó Goten poniéndose de pie preocupado - ¿acaso reprobaste? Lo que escribí en tu trabajo estaba mal ¿cierto?... lo lamento tanto – dijo Goten bajando la cabeza

-míralo tú mismo – dijo Trunks entregándole el ensayo. Goten lo tomó y sus ojos se abrieron grandes al leer la primera página

“Excelente trabajo, buena redacción y ortografía, magnifico uso de citas. Nota final: 100, equivalente a todo el semestre. Aprobado. Felicitaciones.”

Una hermosa y enorme sonrisa se dibujó en el rostro de Goten, miró a Trunks con los ojos brillantes de alegría

-¡aprobaste! – exclamó y sin dejar a Trunks responder se abalanzó sobre él y lo abrazó con fuerza. Un escalofrío recorrió a Trunks al sentir el abrazo de Goten y automáticamente se paralizó, asustado cerró los ojos con fuerza y apretó los puños, mientras sentía una vez más el latido de su corazón acelerándose y retumbando con fuerza

pump      pump       pump          PUMP

Ahí estaba otra vez, esa horrible y placentera sensación de tenerlo tan cerca, Trunks no sabía lo que le pasaba, podía estar con Goten con normalidad, pero cuando estaban así de cerca, no podía entender lo que pasaba, sólo podía esperar que Goten lo soltara para poder tranquilizarse. Ni siquiera se excitaba y para evitar que sucediera de todos modos y poder concentrarse en sus estudios había dejado de ver el álbum de fotografías sexys de Goten (bueno, ahora no lo veía tanto como en un inicio)

Goten al fin lo soltó, el pelilila actuó con naturalidad y se sentó a comer su almuerzo. La chica solo sonrió, ya se había reído de eso muchas veces

-y bien chicos… ¿Qué van a hacer estas vacaciones? – preguntó ella como esperando que le preguntaran, Goten y Trunks se miraron y luego la miraron a ella

-¿tú qué vas a hacer? – le preguntaron al unísono

-va a venir mi primo y podré salir con él… iré a muchas fiestas – contestó alegre la chica, pues era su única oportunidad de salir de casa a altas hora de la noche, Trunks y ella miraron a Goten, el pelinegro supo que esperaban su respuesta, miró su hoja de calificaciones y sonrió, tomó la hoja y la guardó cuidadosamente en su bolsillo

-mmm… digamos que… tengo planes para estas vacaciones – dijo sonriendo astuto – aunque primero debo pedir permiso – señaló y miró a Trunks. El pelilila se tomó el tiempo y terminó de comerse su hamburguesa

-no tengo planes… - dijo al fin – durante las vacaciones veo lo que hago…  - y alzó los hombros como diciendo que no le importaba

Sus amigos quisieron decir algo, pero el timbre de la escuela los interrumpió

--

Atardecía, Trunks había pasado toda la tarde del sábado disfrutando del primer día de vacaciones a su manera: sentado tomando un café y leyendo un libro sobre el manejo empresarial, corría mucho viento, habían anunciado nieve para el día siguiente y Trunks ya sabía lo que haría, descansaría todo el día, vería una película acostado y trataría de olvidar esas tonterías que lo atormentaban a diario, terminó de leer y se dirigió a su cuarto, tomaría una ducha, se acostaría y quizás… quizás vería con más calma cierto libro que el chico de las fotografías le había pasado aquel viernes

“Había sonado el timbre del final del semestre y todos los estudiantes ordenaban y vaciaban sus casilleros, Trunks por supuesto ya había ordenado todo con anticipación, pero Goten y Annière tenían mucho que ordenar, en especial Goten. Aburrido de que los chicos menores lo empujaran a cada rato al llevar sus cosas, el pelilila fue a la entrada de la escuela a esperar a sus amigos, luego de un rato en que la mayoría de los chicos se había ido, un chico con un gran bolso salió corriendo, se detuvo de golpe al ver a Trunks

-¡Trunks! – dijo el muchacho con energía – te estado buscando… tengo algo que seguro te gustará – dijo buscando algo en su enorme bolso y sin dejar que Trunks le respondiera

Trunks lo miraba fijamente, hasta que recordó de quien se trataba: era el chico de las fotografías, intentó decir algo pero el chico lo volvió a interrumpir

-¡Aquí está! – dijo pasándole un libro a Trunks, el pelilila sin pensarlo lo tomó y alzó una ceja

-es un especial navideño, tengo que irme, págalo a la vuelta de las vacaciones – dijo el chico y se fue corriendo rápidamente

Trunks miró el libro con intriga, “¿Especial navideño?” – pensó y abrió el libro, fue como si Trunks se hubiera convertido en una caldera hirviente, podía sentirse el calor que emanaba su cuerpo a un metro de distancia, su rostro estaba muy rojo y parecía que se iba a desangrar de tanta sangre de nariz que salía, y todo era por ese simple libro que estaba lleno de fotografías de Goten vestido con ropa navideña en posiciones muy seductoras, bueno, que estaba vestido es un decir, ya que en algunas fotografías solo llevaba un gorro navideño colocado “ahí”. El pelilila guardó el libro entre sus cosas y trató de calmarse antes de que llegara Goten”

Iba pensando en esas fotografías, cuando al llegar a su habitación se dio cuenta de que había alguien adentro, entró preocupado y dispuesto a atacar al intruso cuando se dio cuenta que se trataba de Goten que estaba revisando su ropa, casi se va de espaldas al verlo

-¡QUÉ HACES AQUÍ! – le gritó claramente enfadado

-¡Trunks! – dijo Goten con ánimo y sin notar el enfado de su amigo, se acercó a él y comenzó a zarandearlo de los hombros, como Trunks muchas veces hacía - ¿vas a ir verdad? Vamos, di que sí, yo siempre te he acompañado, no seas malo, dijiste que no tenías ningún plan para estas vacaciones, además no hace tanto frio, por favor acompáñame, no quiero ir con Gohan y mucho menos con papá, o vamos, di que sí – dijo Goten todo rápidamente, de tanto zarandeo Trunks se había mareado, se sentó en la cama para reponerse mientras pensaba en cómo Goten soportaba siempre que él le hiciera lo mismo

-¿si vas a ir, verdad? – insistió el pelinegro

-¿de qué estás hablando? – respondió al fin el mayor mirando a su mejor amigo

-vas a acompañarme a un pub – dijo Goten con su ánimo de siempre

Trunks alzó una ceja como toda respuesta

-verás… - comenzó a explicar el menor – como saqué buenas calificaciones mi mamá me dio permiso para salir de noche a bailar a algún local, pero mi mamá exagera mucho y me dijo que solo podía ir con alguien más y que fuera responsable, ya sea Gohan o papá, pero no quiero ir a divertirme con ellos, primero porque papá no sabe nada de eso y segundo porque Gohan es un aguafiestas, entonces le pregunté a mamá si podía ir contigo y ella dijo – Goten se paró muy derecho, puso sus manos en sus caderas, frunció el entrecejo e imitando la voz de mando de su madre dijo – “mmm… si, Trunks es un muchacho muy responsable y se preocupa mucho por sus estudios… está bien puedes ir con él”

Trunks sonrió al ver la buena imitación que Goten hacía de su madre

-entonces ¿Qué dices? – inquirió Goten regresando a la normalidad

Trunks lo meditó unos segundos – no quería salir – dijo al fin, Goten se sintió desilusionado – además, aunque te acompañara no nos dejarían entrar en ningún local, solo tenemos 14 y 15 años…

-no te preocupes por eso – dijo Goten rápidamente – conozco unos lugares que aceptan chicos de nuestra edad, pero en la barra hay que mostrar la identificación, así no le venden alcohol a menores – Trunks alzó la ceja incrédulo – tampoco dejan fumar, es un lugar para ir a bailar exclusivamente… por favor – suplicó Goten

Trunks lo miró fijamente unos instantes, suspiró resignado – está bien – dijo a regañadientes

-genial – dijo Goten – toma, ponte esto – dijo pasándole la ropa que había estado hurgueteando, Trunks solo volvió a suspirar

--

Eran cerca de las nueve de la noche cuando se bajaron del taxi, Trunks fue el segundo el bajar, aun pensaba en lo bien que estaría acostado en su cama, tomando chocolate caliente, siguió a Goten con resignación y sin prestar mucha atención a su alrededor

-entremos – dijo al fin el pelinegro, Trunks levantó la vista para ver el local, al verlo dio un paso hacia atrás y frunció el entrecejo

-¡Goten! – llamó enfadado, el pelinegro ya esperaba una reacción así, sintió una gota fría recorrer su espalda

-¿si? – dijo haciéndose al inocente

-ES… - Trunks miró a su alrededor y bajo la voz – es un pub gay – dijo enfadado

-¿Qué tiene?

-no voy a entrar

-pero dijiste que me acompañarías – replicó Goten – por favor… - añadió con algo de tristeza, sus enormes ojos negros se pusieron brillosos, Trunks lo miró enfadado, pero recordó como Goten había sufrido por su culpa

-está bien – dijo

-¡sí! – dijo Goten sonriendo – vamos

El guardia de la puerta saludó a Goten como si ya se conocieran, Trunks alzó una ceja sospechando algo, al fin entraron y el pelilila se sorprendió pues el local era mucho más grande de lo que parecía, en el centro había una enorme pista de baile y alrededor habían mesas y sillas, en las paredes habían sofás y futones donde varios chicos se besaban entre ellos, al fondo estaba la barra, a la derecha estaba el dj sobre una tarima, cerca de la barra habían dos pasillos, uno iba hasta el fondo donde una puerta tenía el cartel de no pasar, y otro pasillo que iba hacia la izquierda donde había un cartel que indicaba “baños”. Mientras Trunks se fijaba en todo eso Goten ya se había adelantado y se dirigía a la barra, el pelilila seguía en la entrada y unos jóvenes de unos 25 años se le acercaron

-hola… - dijo uno de ellos pasando su brazo por encima del hombro de Trunks

-¿Por qué estás tan solo, pequeño? – dijo el otro, acariciando la mejilla del pelilila

Trunks sintió su rostro ponerse azul, apretó sus puños para golpear a esos sujetos, pero justo llegó Goten, quien tomándolo de la muñeca lo atrajo hacia sí

-lo siento chicos – dijo el pelinegro sonriendo seductoramente – él viene conmigo – y alzó una ceja

-¡oh, Goten! – reclamó uno de ellos

-no es justo, siempre te quedas con los más guapos – dijo el otro

Goten solo sonrió y se llevó del brazo a Trunks – deberías tener más cuidado, aquí todos andan “al acecho” – le advirtió

-¿Por qué todos te conocen? – dijo Trunks enfadado

-no es la primera vez que vengo

-ya lo suponía… - suspiró profundo - bueno no importa, ya estoy aquí

-ven, te invitaré un trago sin alcohol – Goten sonrió con calidez y a Trunks se le fue todo el enfado al verlo sonreír así, se sintió flotar cuando Goten lo iba llevando de la muñeca atravesando la pista de baile sin poder quitar la vista de ese revoltoso cabello negro, hasta que…

-¡AY!

Goten se volteó inmediato al escuchar a Trunks quejarse, se sorprendió al verlo, sus mejillas estaban rojas y estaba algo asustado, miró a todas partes y automáticamente se acercó más a Goten

-¿Qué te pasa? – preguntó el pelinegro

-alguien me… alguien me agarró el trasero – susurró Trunks, avergonzado

Los ojos de Goten se abrieron grandes y sus mejillas se ruborizaron suavemente, miró a los chicos y chicas que estaban bailando sin prestarles atención y sonrió

-bueno – dijo calmadamente – ya oíste a esos dos sujetos… eres el más guapo de aquí, bueno junto conmigo… eres… la novedad

-no voy a dejar que me toquen a su antojo – reclamó el chico de cabellos claros

-sólo ponte más atento

Siguieron avanzando, como era sábado había muchas personas en el pub, en especial en la pista de baile y era difícil esquivarlas, Goten seguía llevando de la muñeca a Trunks para no perderse, pero ahora el pelilila llevaba su otra mano en su trasero para evitar que lo volvieran a toquetear, sin embargo volvió a pasar, y otra vez, hasta que Trunks se hartó y se soltó del agarre de Goten para cubrirse su trasero con ambas manos pues ya no soportaba que esos chicos lo tocaran

-no creo que debas hacer eso – dijo Goten mirándolo, el mayor iba a preguntar porque pero no fue necesario pues uno de los chicos que estaban bailando cerca paso por delante de Trunks y le dio un fugaz agarrón en las partes más íntimas del pelilila, haciendo que el rostro de éste se pusiera en una mezcla de rojo y azul, asustado se aferró con fuerza a la única persona que conocía: Goten, el pelinegro solo sonrió y caminó con Trunks abrazado de él hasta que llegaron a la barra del bar

-listo… ya puedes soltarme – anunció el chico de cabello oscuro

Trunks miró para todos lados para asegurarse que no hubieran chicos cerca suyo, suspiró profundo al sentir que estaba a salvo y luego sus ojos chocaron con los ojos de Goten, aún lo estaba abrazando y sintió como esa extraña sensación volvía otra vez a su cuerpo, se alejó rápidamente y fue a sentarse en el bar, el pelinegro se sentó al lado, trataba de ocultar una sonrisa burlona, pero nada se escapa a la vista de un saiyan

-todos aquí son unos pervertidos… - murmuró el pelilila con cierto enfado y con sus mejillas aun rojas – ¡deja de reírte! – ordenó

Un joven del bar se les acercó – hola chicos, que quieren

-un whisky doble en las rocas – respondió inmediatamente Goten, Trunks lo miró de reojo, dudando

-si, como no – respondió con sarcasmo el joven del bar – ¿en una semana pasaste de tener 14 a tener 21 años, Goten? – preguntó

El pelinegro solo sonrió y alzó los hombros – tráenos dos jugos – pidió. Cuando les hubieron servido lo que pidieron Goten miró a Trunks con una expresión seria

-¿Qué ocurre? – preguntó preocupado el pelilila

– regla numero 1: nunca descuides tu trago en un bar, sea “hetero” o gay ¿de acuerdo? – dijo Goten con autoridad

-… aaa… está bien – respondió Trunks sin darle mucha importancia – ¡salud!

-¡salud! – respondió Goten volviendo a actuar despreocupadamente como siempre – ven, te presentaré a algunos amigos – agregó poniéndose de pie, Trunks automáticamente miró la pista de baile con temor

-tranquilo – le dijo Goten al notar su expresión – no tenemos que pasar por ahi – y señaló las mesas cerca del dj – vamos

Trunks lo siguió en silencio, cuando el pelinegro hablo de unos amigos, algo le molestó, pero no sabía porque, quizás era porque el único amigo que Trunks tenia era Goten

-hola chicos – escuchó Trunks la voz de Goten saludar alegremente, el pelilila se acercó cauteloso, mientras esos chicos saludaban a Goten, pero no pudo mantenerse alejado mucho tiempo, Goten lo tomó del brazo y lo acercó hacia sí – Trunks – anunció el pelinegro con elocuencia – te presento al grupo de las parejitas

Trunks al verlos entendió de inmediato porque se llamaban así, habían seis chicos y dos chicas y se notaba claramente quien era novio de quien, los mayores del grupo eran una pareja de chicos que parecían tener más de 20 años, uno de ellos, el de cabello castaño claro estaba sentado pulcra y correctamente en el sofá y miraba a Trunks por encima de sus lentes y sonreía cálidamente, sostenia un libro abierto en sus manos, como si lo hubiesen interrumpido en medio de la lectura, Trunks se preguntó cómo alguien podía ir a un lugar como ese a leer, el novio de éste era todo lo contrario, estaba entre sentado y acostado en el sofá, abrazando posesivamente la cintura de su chico, tenia el cabello largo hasta la cintura, vestía unos jeans rasgados y una camiseta negra que no se molestaba en abrochar como correspondia, su rostro era muy varonil y sus ojos grises miraban a Trunks como si recién hubiera despertado de una siesta. Había otro chico mayor, de unos 25 años bebía cerveza, a simple vista parecía un joven oficinista que había salido a divertirse, llevaba el cabello corto, algo despeinado pero no mucho, como si se lo hubiera desordenado hace muy poco, llevaba la corbata suelta y se había arremangado las mangas de su camisa, ocupaba el pequeño espacio del sofá que sobraba, habría pasado por un hombre normal de no ser por el joven de 16 años que estaba sentado en sus piernas tranquilamente, sin importarle que lo vieran. Las ultimas dos parejas estaban compartiendo una mesa, las chicas parecían de unos 18 o 19 años, Trunks había escuchado que las lesbianas de cabello corto eran las más agresivas y que las de cabello largo eran las más dulces y amables, pero se soprendió cuando al ver a la chica de cabello corto esta lo miraba con sus enormes ojos verdes y sonreía cálidamente, mientras que la chica de cabello largo y negro lo miraba con cara de pocos amigos, sin embargo quienes más sorprendieron a Trunks fueron la ultima pareja, al verlos lo primero que pensó el pelilila fue llamar al servicio de menores, pues se veian demasiado jóvenes, de unos 11 o 12 años. Todos ellos miraban atentos a Trunks, Goten le dio un codazo para que reaccionara

-… hola..?.. – preguntó no muy convencido de lo que tenia que hacer, e inmediatamente todos ellos lo acogieron y saludaron amablemente, la chica de cabello corto caminó alrededor de el examinándolo de pies a cabeza

-vaya, eres de esos chicos muy populares con las chicas que se cambio al otro bando ¿no? – preguntó mirando repetidamente a Goten y a Trunks

-tienes buen gusto Goten – dijo el joven oficinista

En ese momento  el chico de rostro varonil y cabello largo se sento correctamente en el sofá y miró a Trunks con algo de intriga, luego de unos segundos se puso de pie y se acercó a Trunks con energía y una sonrisa en el rostro

-hola, encantado, es un placer – decía rápidamente dándole la mano a Trunks - con que tu eres el novio de Goten ¿eh?, si que tiene buen gusto ese tipo, ¿Qué edad tienes? Unos quince diría yo, debes estar muy feliz, Goten es muy cotizado aquí, tienes mucha suerte, ahora cuéntanos ¿Cómo se conocieron? – dijo todo eso muy rápido, y luego se quedó callado esperando la respuesta.

Trunks por su parte se sorprendió cuando escuchó que todos creían que era el novio de Goten, trató de interrumpir al muchacho, pero este seguía hablando muy rápido, cuando al fin lo dejo hablar, dijo tímidamente

-Goten no es… no somos… novios – y al decir la última palabra su voz se disminuyó casi por completo y sus mejillas se tornaron de un suave tono rosa, que no pasó desapercibido por los chicos del grupo – solo… solo somos amigos – agregó con una sonrisa y miró de reojo a Goten, pero este no había escuchado nada de lo que hablaban, su atención estaba puesta en un chico muy guapo que había entrado al pub. Trunks miró al muchacho al que Goten miraba, en verdad era muy guapo, una sensación muy extraña, distinta de las que había sentido las últimas semanas, se apoderó de él, sin embargo, y esto no lo recordó hasta la mañana siguiente, era una sensación muy similar a cuando veía a Goten con Matt. Bajó la vista y su sonrisa de esfumó, todos los del grupo se dieron cuenta de eso, excepto el muchacho guapo que estaba frente a él que tardó unos minutos en encajar todas las piezas, cuando lo hizo

-¡AHHH! – gritó el muchacho de rostro varonil, llamando la atención de Goten, señaló a Trunks y agregó - ¡a ti---!, pero fue interrumpido por el resto del grupo que se abalanzó sobre el y le tapo la boca

-¡SSSHHHHHHH! – le dijeron

-¿Qué sucede? – preguntó sin entender Goten y miró a Trunks

-ni idea – le contestó éste con la naturalidad de siempre

-como digan… - dijo Goten aún confuso – bueno, chicos, este es mi amigo Trunks – dijo Goten poniendo su mano sobre el hombro del pelilila – es hetero – agregó en un susurro – se supone que está aquí para cuidarme – y se rio – ustedes siempre están aquí y a mí me gusta ir a bailar y eso… ¿podrían cuidarlo de los pervertidos? – preguntó sonriendo como siempre, pero Trunks frunció un poco el entrecejo

Los del grupo aceptaron gustosos y de un tirón sentaron al pelilila en el sofá

-genial – dijo Goten – no te preocupes, no te harán daño – le dijo a Trunks – bien… yo iré a… ustedes saben – dijo y se fue a la pista de baile con un chico en la mira

Una vez que Goten ya no podía oírlos, todos los del grupo se quedaron mirando a Trunks con cara de emoción, expectantes, incluso la chica de cabello largo lo miraba con más interés, solo el muchacho del libro parecía no estar prestándole atención, pues estaba muy concentrado en su lectura

-y bien – dijo al fin la chica de cabello corto - ¿desde cuándo te gusta?

-¿qué… quién? – preguntó Trunks sin entender, aunque sospechaba de que se trataba

-pues Goten – dijo el joven oficinista como si no quedara alguna duda

-él no me gusta – dijo Trunks tranquilamente y sonriendo un poco, ya le habían hecho ese interrogatorio tantas veces que estaba acostumbrado

-o vamos…

-no es posible

-se nota a lo lejos

-¿Por qué te mientes de esa manera?

Todos los del grupo reclamaron de alguna manera

-tranquilos muchachos – dijo el chico del libro deteniendo su lectura y mirando a Trunks con una cálida sonrisa – a veces el corazón sabe cosas que la mente ignora

“el corazón…” pensó Trunks y recordó las sensaciones que tenía cuando Goten estaba cerca… “no” se convenció al final, “tonterías”, y se quedó sentado con el grupo, que luego de un rato se aburrió de hacerle preguntas que él no contestaba.

---

Eran cerca de las dos de la madrugada y Trunks seguía sentado en el mismo sitio del sofá, se había tomado cerca de quince jugos en el transcurso de la noche, por su expresión se notaba que estaba bastante aburrido, y lo peor era que no había visto a Goten en toda la noche y eso lo estaba enfadando, aunque entendió perfectamente porque lo dejo con ese grupo cuando un muchacho se acercó a preguntarle si quería bailar y antes que pudiera responder, todos se abalanzaron sobre él y dijeron al unísono

-¡está con nosotros!

Luego de eso nada interesante había pasado y los jugos que se había tomado comenzaron a hacer efecto, algo fastidiado se puso de pie – vuelvo luego – farfullo y se dirigió con lentamente al baño, cuidando de no tropezarse con nadie ni de pasar muy cerca de la pista de baile, la cual ya no estaba tan repleta como al inicio de la noche, pues la mayoría de los chicos se estaban besuqueando en los sofás, pensaba en eso mientras se dirigía a los baños, pero alguien lo detuvo

-¡hey chico! Ponte a la fila – un muchacho alto y moreno  que estaba abrazado a un chico pecoso lo miraba con cierta seriedad, Trunks miró el resto de la fila: ¡habían más de diez personas!, resignado fue a ponerse a la fila y en ese momento, casi instintivamente miró hacia el costado y los vio, junto a la puerta con el letrero de “no pasar”, estaban besándose apasionadamente Goten y ese chico al que Goten había estado mirando. Trunks sintió como si algo se apagara, sin pensarlo mucho fue al sofá con el resto del grupo y tomó su chaqueta

-¡me voy! – anuncio con firmeza

-¿Qué sucede? – preguntó Remi, dejando inmediatamente su lectura  al notar el tono de voz del pelilila

Trunks lo miró y abrió la boca para contestar, quería decirles que estaba harto, que no soportaba ese lugar, que todos eran unos pervertidos… quería destruir ese lugar para siempre, pero se contuvo, cerró los ojos y respiró profundo – estoy cansado – dijo al fin y sin ninguna otra palabra se marchó.

---

-¡hermano, hermano, despierta! – una pequeña voz  se escuchaba mientras alguien movía su cama, Trunks abrió los ojos y vio a su pequeña hermana Bra zarandeándolo lo mejor que podía, para que se levantase

-¿Qué pasa Bra? – preguntó Trunks sentándose en la cama

-¡es navidad! – dijo la pequeña emocionada – ¡ven, vamos a ver los regalos! – y tironeaba de la ropa a su hermano mayor. Trunks se levantó a regañadientes y acompañó a su hermana al salón, donde se sentó en el sofá a beber café mientras ella miraba sus obsequios, a él no le llamaba la atención la navidad, sabía que podía conseguir lo que quisiera en cualquier época del año, Bulma se acercó con una sonrisa y se sentó junto a él

-toma tu obsequio – dijo poniendo una pequeña cajita junto a él, el pelilila lo abrió sin mucha emoción y encontró un par de llaves adentro, miró a su madre

-es la nueva motocicleta que estamos diseñando, saldrá a la venta en medio año – dijo su madre

-gracias – contestó poniéndose de pie – iré a darme una ducha – y se dirigió a su cuarto

Luego de cuarenta minutos de ducha, el pelilila salió tranquilamente a su habitación totalmente desnudo secándose el cabello con la toalla

-luces bien

Trunks miró asustado hacia donde venía la voz y vio a Goten sentado tranquilamente en su cama sin molestarse en mirar a otra parte, sintió su rostro encenderse, se cubrió rápidamente

-¡¿Por qué siempre entras así a mi habitación?! – reclamó

-es la costumbre, lo he hecho así desde que éramos niños – respondió el pelinegro con una leve sonrisa, mirando hacia otro lado mientras Trunks rápidamente se vestía

-¿Qué haces aquí? – el fastidio de Trunks era evidente

-¡es navidad! Vine a saludarte – respondió con ánimo Goten – además… quería hablar contigo – agregó en un tono más serio

-no tengo nada que hablar contigo – respondió impulsivamente Trunks sin entender porque actuaba así

-¡es precisamente de eso de lo que quiero hablar! – dijo Goten poniéndose de pie - ¿Qué te sucede? Has estado actuando muy extraño últimamente

Trunks terminó de vestirse y miró a Goten, se estuvieron mirando fijamente unos segundos, hasta que Trunks rompió el lazo – nada – dijo y se dirigió a su escritorio

-¿ves? Eso es exactamente a lo que me refiero – reclamó Goten – me has estado evitando, estas muy callado, más de lo normal, tienes secretos con Annière y el sábado te fuiste sin decírmelo

Un silencio incomodo siguió a los reclamos de Goten, Trunks no sabía que responder, ni siquiera él lo entendía, miró al piso en todo momento

-es por esa persona que te gusta ¿verdad? – Preguntó finalmente Goten con algo de tristeza en la voz – de la que has hablado con Annière y no conmigo… … pareciera que ya no somos amigos

-je… como si te hiciera falta – murmuró Trunks molesto

-¿de qué hablas?

-tienes cientos de amigos… no me necesitas – respondió Trunks mirando a Goten - ¿sabes porque me fui del pub el otro día? Estaba aburrido, harto de todo eso, se suponía que iba para acompañarte, pero no hacía falta porque tienes cientos de amigos que pueden cuidarte y yo estaba de más… y no solo eso… sino que apenas llegamos me dejaste con tus amigos gays y tú te fuiste a besuquearte con esos chicos, de los que seguramente ni siquiera sabes el nombre, al igual que la otra vez con ese chico con el que te acostaste… … para ti solo soy un estorbo, un fastidioso estorbo hetero, por lo que no vale pasar tu tiempo conmigo, ya que no tienes ninguna chance – termino de decir el pelilila, estaba muy agitado y cansado , ya no miraba a Goten, se sentía avergonzado, estaba reclamando como una chica

-¿quieres que pasemos más tiempo juntos? – pregunto Goten

-¡sí!... ¡no!... no lo sé – dijo finalmente Trunks, estaba muy confundido

-¿te sientes solo? – pregunto el pelinegro acercándose un poco, Trunks miró hacia otra parte y asintió levemente con la cabeza, Goten sonrió y lo abrazó para calmarlo como hacia siempre, pero Trunks lo apartó casi de inmediato

-¿ves? Tu eres quien me aparta – reclamó el chico de cabello alborotado sin entender que su abrazo había causado sensaciones en el pelilila que éste no era capaz de comprender ni de aceptar

-lo sé – dijo Trunks y miró a Goten – lo siento

-está bien – dijo Goten sonriendo – tu siempre has sido algo extraño… hey, ¡te traje un regalo! – busco en su bolso y sacó un videojuego, Trunks lo recibió con agrado hasta que leyó el destinatario

-¡Goten! Aquí dice que es para ti – reclamó

-see, es que me lo regalaron, pero no tengo la consola para jugarlo – se excusó Goten arreglando los puff y la televisión para jugar. Trunks por curiosidad volteo la tarjeta del regalo para ver quien lo había enviado

-¡GOTEN! Te enviaste este regalo a ti mismo – dijo enfadado

-bueno, sí, quería ese videojuego, no te enojes, puedes quedártelo – dijo Goten sonriendo – es multijugador… ¿quieres jugar o no? – agregó con una sonrisa entusiasta, era imposible negarse a esa sonrisa

Mientras jugaban, Trunks estaba muy concentrado hasta que Goten comenzó a hablar

-oye ¿me acompañas el sábado al pub? – preguntó

-¿para qué? – preguntó el pelilila

-por favor, estaré todo el tiempo contigo, te lo prometo – la voz de Goten sonaba sincera

Trunks lo miró un instante, que bastó para que Goten le ganara en el juego – insistirás hasta que acepte ¿verdad? – preguntó

-tu sabes que sí – respondió el pelinegro

-está bien

-genial… ¿quieres la revancha? – preguntó Goten, y siguieron jugando todo el día

 

El sábado llegó pronto, no había nevado, pero corría un viento helado que traspasaba toda ropa, habían decidido encontrarse en la esquina del local a las nueve de la noche, Trunks esperaba hace cinco minutos, aun no era la hora señalada pero sabía muy bien que Goten llegaría tarde, estaba congeladísimo, llevaba un enorme abrigo de piel, dos bufandas y un gorro tan grueso que no dejaba ver su cabello claro

-hola – escuchó de pronto

-¡Goten! – dijo y luego de un segundo - ¡¿no tienes frio?!

Esa pregunta tenía fundamento, Goten solo llevaba un abrigo muy delgado que dibujaba muy bien su figura, unos jeans también ajustados y una bufanda también delgada que dejaba ver parte de su cuello, lo único que parecía abrigarlo más era su gorro que cubría muy bien sus orejas

-pues sí, tengo mucho frio – respondió Goten – es que tengo que verme bien y no parecer una pelota de abrigos, como tú, jeje – Goten rio como si nada – entremos luego, que me congelo

Una vez adentro, Goten se quitó su gorro y sacudió su cabello un poco como si quisiera desordenarlo aún más de lo normal, Trunks no pudo dejar de notar el flequillo sexy que casi tapaba los ojos del pelinegro, hasta que Goten lo miró y sonrió pícaramente

-¿Qué…? – comenzó a preguntar el pelilila cuando Goten de un tirón le quitó su enorme abrigo dejando ver su bien formada figura

-así está mejor – dijo Goten – ven, los chicos están allá… descuida no tendremos que pasar por la pista de baile – agregó, tomó del brazo a Trunks y lo arrastró a la mesa donde estaba el grupo de las parejitas. Había más sofás y sillas, se sentaron juntos, la chica seria se puso de pie y ofreció traer bebidas, todos pidieron jugo de fresas, excepto Remi y su novio que pidieron whisky en las rocas y el chico oficinista que no pidió nada pues esperaba a su novio que aún no llegaba.

Todos conversaban animadamente, incluso Trunks se veía más animado que la última vez y bromeaba con Goten, pasaron cuarenta minutos hasta que el novio del chico oficinista apareció, su cabello rojo resaltaba en contraste con su abrigo blanco

-¡Tim! ¡al fin llegas! – dijo su novio sonriendo alegremente

-sí, lamento el retraso… - se excusó Tim – es que tuve que convencer a mis tíos para que dejaran venir a mi prima

-¡hola! – dijo ella, el sonido de la voz familiar hizo voltear a los saiyan que miraron asombrados a la chica que estaba de pie frente a ellos

-¡Annière! – dijeron al unísono, la chica solo se limitó a sonreír, pero en su mirada la astucia era evidente al ver a Goten junto a Trunks en un lugar así

-¿ustedes se conocen? – preguntó Tim mirando a su prima, así se inició de nuevo la conversación. Luego de un rato, en el que Annière milagrosamente no había dicho nada para burlarse de Trunks, Goten decidió ir a buscar más bebidas y jugos, se puso de pie y tomó del brazo a Trunks

-vamos…

-¿Qué no puedes ir tu solo? – pregunto Trunks mirando alternadamente a Annière y los demás del grupo, alarmado de que lo fueran a molestar

-claro que puedo ir solo – respondió el pelinegro – pero recuerda que te prometí que no te dejaría solo… así que vamos – y tiró con más fuerza a Trunks, quien se fue resignado (y un poco ruborizado) tras su amigo.

Una vez que se habían alejado, Annière se volteó al grupo

-ustedes tienen más experiencia en esto… – dijo la chica sin dejar de sonreír – ¿creen que entre esos dos hay algo?

Todos la miraron con intriga y se acercaron más entre sí, creando una especia de círculo de confidentes. Conversaron hasta que vieron acercarse a los dos jóvenes aludidos

-tengo una idea – dijo la pelirroja – actúen normales

-al fin – dijo Goten cansado dejando las bebidas en la mesa y tirándose en el sofá

-había mucha gente en la barra – dijo Trunks, sentándose junto a Goten

-¿de que hablaban? – preguntó el pelinegro ansioso de unirse a la conversación

-de lo buena que esta la música – respondió rápidamente Annière – me extraña que no estén bailando, la gente suele venir a estos lugares a bailar…

-aaa… eso, bueno aquí los chicos no suelen bailar, el único que siempre baila soy yo – dijo Goten y le dio un sorbo a su bebida despreocupadamente

La chica de cabello corto y enormes ojos verdes, cuyo nombre era Tammy, entendió lo que Annière quería hacer y sonriendo intervino la conversación

-es cierto, Goten – dijo fingiendo algo de asombro - ¿Por qué hoy estás tan calmado? ¿No deberías estar bailando? – preguntó Tammy algo preocupada. Remi seguía leyendo, sin embargo una sonrisa de astucia se dibujó en su rostro, él también había entendido el plan de la pelirroja

-es que… le prometí a Trunks que estaría con él en todo momento – respondió el pelinegro sintiéndose, sin saberlo, algo avergonzado

-bueno… no creo que a Trunks le importe ir a bailar un rato contigo ¿verdad? – dijo Rex, el chico oficinista, los ojos del pelilila se abrieron grandes, había entendido lo que ellos querían hacer

-sí - dijo Tammy – si bailan juntos nadie te dará agarrones Trunks – agregó

-es cierto – dijo Goten que estaba pensando en eso, sabía que Trunks se negaría a ir a la pista de baile a causa de eso - ¿te parece? ¿vamos a bailar? – Goten invitó a Trunks con una sonrisa, le entusiasmaba la idea de ir a bailar, de hecho era lo que más le gustaba de salir en la noche, estaba bastante aburrido ahí sentado sin hacer nada, pero no había dicho nada por la promesa que le había hecho a Trunks

-eee… - Trunks se había puesto muy nervioso, su corazón había saltado cuando Goten lo invitó a bailar y ver esa sonrisa que le dirigía Goten inevitablemente lo había hecho sonrojar

-Trunks – dijo Remi con su dulce voz, quitando su vista del libro – Goten está haciendo un gran esfuerzo por incluirte en este mundo y que tú te sientas cómodo, una buena forma de retribuirle es que él también se divierta ¿no crees? – preguntó sonriendo cálidamente

-Remi, no digas eso… – contesto Goten, rascándose la mejilla algo avergonzado – no es ningún problema…

-¡está bien! – dijo Trunks poniéndose de pie rápidamente – ¡vamos a bailar! – tomó del brazo a Goten y se dirigió a la pista de baile

-e-está bien – dijo Goten algo asombrado por el repentino cambio de Trunks

--

-sabes que no tienes que hacerlo ¿verdad? – preguntó Goten una vez que estuvieron lejos del grupo

-está bien – dijo Trunks sin mirarlo – no quiero que te aburras por mi culpa… es solo que…

-¿qué?

-no se bailar – admitió el pelilila

-oh, vamos, no digas tonterías – dijo Goten sin dejar de sonreír – es música rave… solo tienes que moverte, como cuando éramos niños – y se empezó a mover siguiendo el ritmo de la música, Trunks lo miró y empezó a moverse lentamente, algo avergonzado hasta que se sintió más confiado y también se puso a bailar

--

-y bien, primita – dijo Tim mirando a la pelirroja - ¿Cuál es la siguiente parte del plan?

-pues… - dijo Annière entre misteriosa y orgullosa – el dj…  - y señaló al joven que estaba colocando la música - es un amigo de mi familia, del club campestre – e inmediatamente se puso de pie – es necesario que estén más cerca – dijo antes de irse hacia donde estaba el dj

--

Trunks y Goten bailaban sin prestarle mucha atención al resto, aunque varios de quienes estaban en la pista no dejaban de mirarlos, de pronto la movida música rave se detuvo, los bailarines miraron para todas partes, Goten instintivamente se acercó más a Trunks, las luces bajaron y comenzó a sonar música lenta

-como pedido especial – se oyó la voz del dj –  abracen a sus parejas y disfruten de la música lenta

Trunks se aterró al oír eso y miró rápidamente a la plataforma del dj y pudo ver claramente a la pelirroja que sonreía astuta, mientras lo saludaba desde la plataforma, “lo sabía” pensó y volvió a mirar a Goten quien, sin percatarse de que todo era un truco de la pelirroja, extendía su mano izquierda hacia Trunks y sonreía cálidamente invitándolo a bailar.

Trunks titubeo un poco, su mano temblaba al tomar la mano de Goten, se alegró de que hubieran bajado las luces pues su cara estaba muy roja y era imposible disimularlo, su corazón comenzó a latir furiosamente cuando Goten puso su otra mano en su cintura

-espera… - comenzó a decir, pero Goten lo interrumpió

-dijiste que no sabías bailar, por eso yo te guiaré, no te preocupes, pon tu otra mano sobre mi hombro – dijo tranquilamente, el pelilila nervioso hizo lo que el otro le pidió, sin embargo mantuvo los brazos bien estirados, para no estar tan cerca de Goten. El pelinegro comenzó a bailar y automáticamente Trunks miró al piso para seguir sus pasos

-hey – dijo Goten deteniéndose y buscando la mirada de Trunks – es a mí a quien debes mirar

Trunks se sintió hipnotizado por esos ojos y sin pensarlo se quedó mirándolo, Goten comenzó a bailar nuevamente, Trunks lo seguía, sin embargo sus movimientos eran muy torpes, pues en su mente una gran interrogante estaba a punto de llegar a una solución.

Su corazón había comenzado a latir fuertemente, como muchas veces lo hacía los últimos días, sabía que no podía apartar a Goten, estaban bailando, Goten se enfadaría con el si lo empujaba, entonces la pregunta de porque su corazón latía de esa manera cuando estaba cerca de Goten se puso en su cabeza “¿Por qué? ¿Por qué me pongo tan nervioso? ¿Por qué mi corazón late así? Debería calmarme… hace minutos que estamos así de cerca ¿Por qué en lugar de tranquilizarse mi corazón late más fuerte?” Estaba tan aturdido pensando en eso, con su vista fija en esos ojos negros y moviéndose torpemente, que estuvo a punto de chocar con otra pareja que estaba bailando, Goten se dio cuenta y para evitarlo tomó fuertemente de la cintura a Trunks y lo acercó, quedaron juntos, muy juntos.

Ante ese movimiento tan brusco, el pelilila perdió la conexión con los ojos de Goten y miró a la pareja que casi choca, en ese momento se dio cuenta de algo, su corazón se había calmado y podía sentir claramente como el pecho de Goten subía y bajaba al respirar, miró algo asustado lo pegado que estaba su cuerpo al cuerpo de Goten y levanto la vista lentamente, vio el cuello de Goten muy cerca, sus labios rosados entreabiertos, sintió su respiración muy cerca y luego choco con sus ojos, que se veian más grandes que nunca debido a lo cerca que estaban, sus narices casi se tocaban. En ese momento Trunks sintió una ola de calor naciendo de su pecho y esparciéndose rápidamente por todo su cuerpo, a la vez que su corazón comenzaba a latir con una fuerza que nunca antes había sentido, sentía su cuerpo débil, como si toda su fuerza estuviera concentrada en ese loco corazón, y estaban los dos tan cerca, que Trunks no tenía dudas: “Goten lo sabía”

La canción lenta terminó, las luces volvieron y el dj volvió a poner música rave, Goten soltó a Trunks y se apartó un poco

-¡genial! – Dijo volviendo a bailar despreocupadamente, hasta que vio a Trunks, su rostro se puso serio – hey ¿estás bien? – preguntó preocupado, y con razón, pues Trunks se había quedado quieto, como si estuviera congelado, su respiración era lenta y profunda, como si tratara de calmarse y era que su corazón seguía latiendo con fuerza a pesar de que Goten ya no estaba tan cerca

-sí – dijo casi susurrando y con la mirada perdida

-ven… - dijo Goten tomándolo del brazo – mejor vamos a sentarnos

Llegaron con el resto del grupo, todos se dieron cuenta de que a Trunks le pasaba algo, asi que no dijeron nada

-siéntate – dijo Goten – te traeré un jugo – y se fue hacia la barra rápidamente, pero Trunks se quedó ahí de pie, su rostro estaba pálido

-Trunks… siéntate ¿Qué sucedió? – preguntó Tammy, sus ojos verdes mostraban preocupación

Trunks reaccionó, como si hubiera salido de un sueño, miro a todos, asustado y salió corriendo del local, sin recordar llevarse su abrigo ni sus bufandas. Corrió lejos, aún algo aturdido, sin saber ni importarle a donde iba, solo quería estar lejos, lejos de todo y lejos sobre todo, de él, sin embargo, no importaba cuanto corriera, ni cuanto se alejara de Goten, su corazón seguía latiendo con mucha fuerza. Llegó a la mitad de un puente solitario, poco iluminado y se detuvo, agotado, puso su mano sobre su pecho y sintió como su corazón seguía latiendo “¿Por qué?” se preguntó una vez más y a su mente vino lo que Remi había dicho la vez anterior “a veces el corazón sabe cosas que la mente ignora”, los recuerdos de las veces que Goten se le había acercado, de cómo se sentía cuando estaba con él, y de cómo su corazón latía con fuerza al tenerlo cerca llenaron su mente como una lluvia de estrellas fugaces, iluminando su mente con algo que no había querido ver

-estoy… - murmuró suavemente haciendo salir vaho de su boca – estoy enamorado… de Goten – dijo al fin, y su corazón al fin se calmó, como si todo lo que quería era que Trunks aceptara sus sentimientos, sin embargo sus ojos se habían llenado de lágrimas, no sabía como sentirse ante eso, sus emociones cambiaban a cada segundo, se sentía feliz, tranquilo, ¿esperanzado? pero sobre todo sentía mucho miedo y angustia – Goten… - murmuró, se sentó en el puente en el mismo lugar donde había reconocido su amor por su mejor amigo y junto con la primera lagrima que se deslizo por su mejilla comenzó a nevar…

 

 

Notas finales:

Espero que les haya gustado... sobre el siguiente capitulo... aun no se en que centrarlo, quizas sea sobre el primer beso pero no prometo nada

saludos


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