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Amigos ¿Para siempre? por Drasami

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Notas del capitulo:

Al fin terminé el capitulo nueve, lamento muchisimo la demora

espero que les guste

como saben los personajes pertenecen a Akira Toriyama

Los siguientes días transcurrieron tranquilamente y sin que los chicos lo notaran ya habían pasado las tres semanas. Trunks había tratado de comportarse con normalidad, pero aun había veces en que Goten lo descubría mirándolo con tristeza. Mientras ordenaba sus cosas para regresar a su casa, el pelilila estuvo extrañamente muy callado. Cuando estuvo todo listo, antes de salir de la habitación llamó a Goten


-¡Goten! – dijo y se quedó al lado de la puerta, mirando hacia el piso tristemente


-¿Qué pasa? – preguntó Goten preocupado


-yo… - comenzó a decir Trunks sin atreverse a mirar a Goten – yo, creo que es lo mejor que tu y yo, ya no nos juntemos tanto…


-¿de qué hablas? – Goten se acercó a Trunks preocupado


-yo te he causado mucho daño… - explicó Trunks sin levantar la vista y comenzando a llorar – si no fuera por mí, tu no habrías tratado de suicidarte… aunque digas que no es mi culpa, yo sé que sí lo es, soy un miserable…


¡¡¡PAF!!!


La cachetada que le había dado Goten lo tomó por sorpresa, antes de que el pelilila pudiera reaccionar, Goten lo tomó por la cintura y lo atrajo hacia sí, lo abrazó, no de forma protectora como antes, sino como si él mismo quisiera refugiarse en los brazos de Trunks


- esto no sale en el video – comenzó a decir Goten – aquél día, cuando perdí el conocimiento, la última imagen que pasó por mi mente fuiste tú… y lo único que quise en ese momento fue poder verte una vez más


Las mejillas del pelilila se ruborizaron tenuemente, sus brazos temblaban, por alguna extraña razón no se sintió capaz de devolverle el abrazo a Goten, quería hacerlo, abrazarlo con fuerza, pero una parte de él se lo impedía


-ese simple deseo, de poder verte una vez más – prosiguió Goten con voz suave – es lo único que permitió que le cumpliera la promesa a mi madre de no volver a intentar acabar con mi vida, durante ese verano


Al escucharlo Trunks sintió como si un gran calor se acumulara en su pecho, no podía entender que era esa sensación, quería salir corriendo y a la vez quedarse ahí para siempre, al fin Goten lo soltó y el pelilila sintió como esa sensación en su pecho se hacía cada vez más tenue, pero aun así se sentía algo aturdido. Goten no dijo nada más y tomando el bolso de Trunks se dirigió a la salida, al notar que Trunks no se movía, Goten se volteó a mirarlo, y lo vio ahí de pie con la mirada fija, el pelinegro sonrió para sí y tratando de actuar con normalidad se acercó a Trunks


-¡oye! ¿Qué haces ahí? – dijo con su expresión de perplejidad natural – vamos, sé que no te quieres ir, pero si no lo haces, tu madre se enfadará y nunca más te dejará venir a visitarme


-… - Trunks parecía no notar lo que dijo Goten, como si sus palabras llegaran lentamente a su cabeza – aa…a… ¿qué? – pregunto todavía aturdido


-bien no te preocupes – dijo Goten sonriendo pícaro – yo te cargaré – y habiendo dicho eso, tomó una vez más a Trunks en brazos y se encaminó hacia la puerta principal


Cuando Trunks se sintió en los brazos de Goten, por fin reaccionó - ¿Q- qué haces? – dijo alterado sintiendo como su cara se ruborizaba y como esa horrible sensación en su pecho volvía a crecer


-pues no reaccionabas – explicó despreocupado Goten


-¡b-ba-bájame! – pedía Trunks, pero no era escuchado


En el jardín los esperaban toda la familia Son, Goku entrenaba a Pan, quien se esforzaba al máximo, Gohan leía concentrado un libro de biología, por su parte Videl ayudaba a su suegra a ordenar y empacar unas cosas que Milk le quería enviar a Bulma


-¡listo! – dijo con orgullo Milk cuando por fin ella y Videl lograron cerrar el ultimo cierre del bolso que iba a mandar, justo en el momento en que Goten aparecía por la puerta cargando en brazos a un ruborizado Trunks que trataba de zafarse con todas sus fuerzas


Todos se les quedaron mirando y un silencio incómodo relleno el ambiente, hasta que Pan dijo emocionada:


-¡parece un príncipe cargando a su princesa!


El rostro de Trunks parecía que iba a estallar cuando escuchó a Pan decir eso y rápidamente se soltó del agarre de Goten y se alejó a una distancia prudente, Goten miraba a su sobrina sorprendido, sonrió avergonzado y un leve rubor se apoderó de sus blancas mejillas


-bueno, Trunks ya se va – dijo tratando de cambiar un poco el tema y la atención de todos


Todos se acercaron a Trunks a despedirse y enviar saludos a los amigos que vivían en la Capital del Oeste


-cuídate Trunks, saluda a Bulma de mi parte, podrías pedirle que me ayude a buscar un vestido para ir a una reunión de la policía de Ciudad Satán – dijo Videl


-claro, no te preocupes – contesto Trunks


-si te vuelves a sentir mal puede venir a verme acá o al hospital, como tú quieras – dijo Gohan, y añadió en un susurro – creo que te estas acostumbrando demasiado a los brazos de mi hermano


-¡GOHAN! No digas esas cosas – dijo Trunks volviendo a ruborizarse


-¿tú y tío Goten van a casarse? – preguntó Pan


-¡¿QUÉ?! – dijo Trunks alterado – c-claro que no… ¡no somos novios ni nada de eso!


-que lástima – dijo Pan – Trunks vas a ver, me haré mucho más fuerte que tú


-si, claro Pan – dijo Trunks escéptico


-yo que tú le haría caso, ella entrena todos los días, no como ustedes que se la pasan holgazaneando – dijo Goku – bueno, cuídate, y sigue entrenando, y dile a Vegeta que estoy listo si quiere pelear, que venga cuando quiera…


-claro que no – interrumpió Milk – bien Trunks, cuídate, y ven a visitarnos cuando quieras, esta es tu casa


-gracias…


-bueno, vámonos – dijo Goten


-¿Por qué vas a ir? – dijo Trunks algo molesto – no es necesario, puedo cuidarme solo


-es para ayudarte con las cosas que mamá le envía a la señora Bulma – contestó Goten y señaló hacia un lado de la casa


-¡¡aaaa!! – grito sorprendido Trunks, era un montón de bolsos atados con una soga, tenía una altura de unos cuatro metros, parecía una enorme roca hecha de bolsos


-estoy segura que a Bulma le encantará – dijo Milk – Goten, te vienes de inmediato, entendiste


-sí, mamá – contestó Goten, tomó la pila de bolsos y se elevó un poco en el aire – vamos Trunks


-¿eh? Sí, gracias por todo – dijo el pelilila y se fue volando junto con Goten


 


En unos pocos minutos ya estaban en la Capital del Oeste, aterrizaron en el patio de Capsule Corp.


-déjalo ahí, yo lo entrare – dijo Trunks


Goten le hizo caso – espero que hayas entendido lo que te dije hace un rato – dijo de pronto el pelinegro


Trunks lo miró, -sí – respondió con algo de tristeza y mirando al piso


-genial – contestó Goten – debo irme – y se elevó un poco


-adiós – dijo Trunks con pesadez y se dispuso a entrar en su casa


De pronto, Trunks sintió como alguien lo tomaba del brazo y a la vez sujetaba su rostro y le daba un tierno beso en la mejilla, sus ojos se abrieron sorprendidos al recibir ese beso inesperado, en especial porque no sintió ninguna presencia, se volteó rápidamente y vio a Goten flotando y sonriendo pícaramente muy cerca de él, al saber que era él quien lo había besado esa horrible lucha de sensaciones volvió a su pecho y se ruborizó en demasía


-¡AAAHHHHH! ¿Por qué hiciste eso? – gritó alterado, con su mano tapándose su mejilla izquierda, donde había recibido el beso y la otra se alzaba amenazante, lista para golpear a Goten si trataba de hacerlo otra vez


El pelinegro se limitó a sonreír


-ese es mi amigo Trunks que yo conocía – dijo sonriente – no ese que se la pasa todo el día llorando por cosas que ya pasaron


-Goten… - murmuró Trunks bajando la guardia


-sigue asi, tal como eres, amigo – dijo Goten y sacudió el cabello del pelilila, revolviéndolo con fuerza


-¡Goten…! – replicó Trunks, pero el aludido ya había volado más alto


-debo irme – grito – vendré a visitarte en unas semanas – y se fue volando a toda velocidad


-… … tonto… - dijo Trunks recuperando su habitual seriedad dirigiéndose a su casa, pero al verse en la ventana, notó que sus mejillas seguían rojas – “ayyy, ¿por qué siempre me ruborizo…?” – pensaba y desesperado trató de limpiarse el rubor restregándolo con sus manos


- ese tipo de rubor no se quita así – dijo de pronto una voz de mujer


-¿mamá? – miro asustado el pelilila, efectivamente se trataba de Bulma, Trunks se sintió descubierto – ¿a… hace cuanto que estás ahí?


-el suficiente – dijo ella guiñando un ojo  – anda entra a la casa – y una sonrisita burlona salió de sus rojos labios


-“lo que me faltaba” – pensó Trunks, por lo menos no se trata de Annière.


 


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Habían pasado dos semanas desde que regresó a su casa, estaba solo en casa, como siempre, Bulma había logrado llevarse a Vegeta de vacaciones a la playa, Trunks decidió no ir, le gustaba estar solo y poder pensar, no era de esos que hacían fiestas cada vez que sus padres salían, el prefería leer un libro, ver una película, era un chico bastante tranquilo y sensato, contrario a lo que se pudiera pensar de alguien que lo tuvo todo en su vida, de niño había sido bastante travieso, arrastrando a Goten en sus locuras, pero eso ya había cambiado, y ahora era Goten quien le daba un toque de locura a su apacible vida.


El pelilila caminaba tranquilo con la bolsa de las compras en dirección a su casa a la vez que leía un libro, estaba tan concentrado en la lectura que apenas si notaba las miradas y risitas coquetas de las chicas que pasaban a su lado. Llegó a su casa y dejando las cosas en la cocina se dirigió a su habitación tranquilamente. Al llegar le extrañó que la puerta de su habitación estuviera ligeramente entreabierta, entró de golpe y lo primero que vio fue a una chica con un vestido increíblemente corto que se subía seductoramente una liga, y al estar algo agachada se le veían un poco las bragas.


El rostro de Trunks se puso rojo - ¡Perdón! – gritó y se dio media vuelta, mientras pensaba que demonios hacia una chica en su habitación


-tranquilo, soy yo – escuchó una conocida voz que lo dejó desconcertado, “esa voz… no… no puede ser” pensaba, y se volteó lentamente


-¿G-Goten? – preguntó temeroso


Una enorme sonrisa y unos profundos ojos negros le confirmaban su sospecha


-¿Q-qué ha-qué haces vestido a-a-así? – preguntó con los ojos desorbitados, señalando temeroso la extraña –y seductora- vestimenta de su mejor amigo


-pues… - comenzó a decir Goten poniéndose frente a frente a Trunks, algo avergonzado pues se tocaba su corto cabello que ya comenzaba a hacer un seductor flequillo, pero que no llegaba a tapar sus ojos – lo que ocurre es que iré a juntarme con unos chicos que conocí en un foro de internet… y, bueno… los “nuevos” deben ir vestidos de girly


-¿girly?


-si… - contestó el pelinegro ruborizándose un poco – un girly es alguien que es muy femenino, y eso incluye usar vestido, maquillaje y todo eso… pero no necesariamente es un travesti – se apresuró a decir al ver la expresión de Trunks


Pero no era en eso en lo que el pelilila estaba pensando, su mente estaba concentrada en no mirar las “lindas” piernas de su amigo que extrañamente se veían muy bien con pantimedias


-eh… y ¿Por qué demonios estás en mi habitación? – reclamó Trunks enfadándose un poco


-no digas tonterías – Goten simplemente le dio la espalda y con tranquilidad comenzó a ponerse una peluca negra muy larga – sabes que mi madre me mataría si me viera vestido así… además – dijo, y se volteó a mirar a Trunks


-“ahora sí que parece una chica” – pensó Trunks al ver al pelinegro vestido de esa manera y con la peluca que le llegaba hasta la cintura


-te quería pedir un favor… - dijo Goten acercándose lentamente, jugueteando con la peluca, inclinando un poco la cabeza hacia abajo, para darle énfasis a esos enormes ojos negros que brillaban deseosos. Cuando estuvo a sólo diez centímetros de Trunks se le quedó mirando de una manera tan intensa que fue inevitable para el pelilila ruborizarse y sentir como el frio sudor recorría su espalda


-¿Q-qué? – dijo dando un paso hacia atrás


-¿me acompañarías a mi junta? – dijo Goten volviendo a su comportamiento despreocupado


-… -Trunks estaba helado, se había imaginado algo totalmente distinto, algo más “comprometedor”, su corazón estaba latiendo tan rápido que no pudo contestar la inocente pregunta de Goten


-¿estas bien?


El pelilila se limitó a asentir con la cabeza


-…


-…


-¿en qué estabas pensando? – preguntó Goten alzando intrigante una ceja


-¡nada! – dijo rápidamente Trunks sintiéndose descubierto - ¿Por qué tengo que acompañarte? – añadió algo enfadado para cambiar el tema


-porque se supone que soy una señorita – contestó Goten mientras se ponía los zapatos de plataforma – y debo comportarme como tal, cuando salga a la calle vestido así un montón de pervertidos se me van a acercar… y no puedo golpearlos, eso no es de señoritas


-…


-además – continuó tomando un pequeño bolso – no confío mucho en los chicos que voy a conocer… ¿por favor? – suplicó


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-ya suéltame – susurraba Trunks tratando de zafar su brazo del agarre de Goten


Iban por el centro de la ciudad, y tal como lo había pensado Goten, varios sujetos trataron de acercársele y coquetearle y también había otros pervertidos que solo trataban de tocarle su trasero, en esos casos el pelinegro se abrazaba a Trunks y actuaba como una chica desvalida. Por suerte para Trunks ya estaban llegando al parque donde sería la reunión.


-oye Trunks ¿podrías quedarte aquí entre los arboles? – pidió de pronto Goten señalando un pequeño bosque dentro del parque


-¿eh? ¿Por qué? – Preguntó Trunks – creí que querías que te protegiera de esos sujetos, por si no eran de fiar


-exacto – respondió Goten – pero si te ven a mi lado, quizás actúen distinto, y yo quiero saber si en verdad son buenos chicos


-como quieras – dijo Trunks – me quedaré en la cima de este árbol, pero me tendrás que dar algo a cambio por todo esto


-claro ¿Qué quieres?


-… me tendrás que ayudar a pasar un videojuego muy difícil


-está bien – aceptó Goten – oh, allí están, nos vemos, si pasa algo… háblame por telepatía – dijo y se fue corriendo hacia donde estaba el grupo de chicos



Una vez allí todos los chicos que estaban, incluidos los que iban vestidos de chica, se quedaron mirando embobados a Goten, él era el que mejor se veía, estaba realmente sexy. Conversaron entre todos unos minutos hasta que


-¡por fin! Ya llegó el líder del grupo – dijo uno de los organizadores


Goten se volteó a mirar, y esta vez él también se quedó mirando embobado, ese chico era alto, delgado pero musculoso, extremadamente guapo, su cabello de un rojo oscuro llegaba hasta sus hombros y tenía una actitud de desinterés que era misteriosamente atrayente. Ese chico se detuvo y miró al grupo, cuando vio a Goten levantó una ceja tan disimuladamente que sólo el saiyan pudo darse cuenta, se sentó junto con los demás organizadores y ni siquiera se molestó en presentarse, sin embargo su mirada estaba fija en el pelinegro quien sentía que lo estaban desvistiendo con la mirada.


Luego de un rato, cuando ya todos estaban conversando más animadamente, el chico misterioso le dice algo al oído a uno de los organizadores, quien automáticamente mira de reojo a Goten y sonríe, inmediatamente toma el mando de la situación y organiza una inesperada caminata por el parque en dirección a una pastelería cercana, todos se empiezan a dirigir a ese lugar, los nuevos eran guiados por dos de los más “veteranos”


Goten iba junto con ese grupo cuando uno de los organizadores se acerca y le dice


-el líder quiere hablar contigo… a solas


-“ay no” – pensó Goten – “¿habré hecho algo malo?” – y se dirigió a donde estaba ese apuesto chico


-hola – dijo tímidamente el pelinegro


-hola – contestó el pelirrojo sonriendo seductoramente, Goten se sintió derretir


-¿pasa algo malo?


-eres guapo, me gustas y quiero conocerte mejor – dijo sin tapujos


Goten por supuesto se quedó sin palabras y sus mejillas se ruborizaron a la vez que su corazón comenzaba a latir con fuerza. En ese momento el pelirrojo extendió su mano, galante


-¿vienes? – preguntó


Goten solo sonrió y tomó de la mano a ese chico, sin saber siquiera como se llamaba. Fueron caminando en dirección al pequeño bosque del parque, Trunks los vio acercarse desde la cima de un árbol


-vaya… ya consiguió un chico – murmuró, y entonces se dio cuenta que venían tomados de la mano, algo en su interior se remeció y desvió la mirada algo molesto pero sin saber porqué


Goten y el pelirrojo avanzaron conversando animadamente por el bosque, hasta que llegaron a un claro, donde había un enorme árbol; Trunks los había seguido, mirándolos con recelo en especial cuando Goten reía, se quedó mirándolos sobre un árbol.


Goten miraba el gran árbol, le encantaba la naturaleza, de pronto sintió a alguien detrás suyo, se volteó inocente y recibió un beso en sus labios que no demoró en contestar


Trunks se sorprendió cuando ese pelirrojo se atrevió a besar a Goten, su primer impulso fue ir a golpearlo; pero se sorprendió aun más cuando Goten le respondió el beso, entonces lo pensó mejor: no debía interferir si eso era lo que Goten quería, simplemente miró hacia otro lado, pero a la vez miraba de reojo como se besaban.


A cada segundo sus besos se iban volviendo cada vez más intensos, el pelirrojo tenía a Goten contra el arbol y lo acariciaba y recorria el cuerpo del pelinegro con pasión, de pronto el pelirrojo lo tomó de la pierna y empezó a mover su cadera contra la entrepierna de Goten, mientras comenzaba a besarle el cuello. El pelinegro solo se limitaba a responderle los besos y gemir suavemente.


Al ver eso Trunks no supo que hacer, su cara estaba muy roja; en ese momento el pelirrojo subió su mano y apretó con fuerza los glúteos de Goten, haciendo que el pelinegro gimiera sonoramente, al escucharlo Trunks ya no aguantó más y decidió irse de ese lugar. Dio media vuelta para marcharse, pero una luz lo encegueció, algo aturdido y cubriéndose un poco los ojos para poder ver bien, investigó de donde venia ese reflejo de luz y entonces los vio: todos los chicos del grupo estaban escondidos entre los arbustos y tenían muchas cámaras de video y sistema de sonido profesionales


Trunks lo entendió de inmediato: estaban filmando a Goten, no podía dejarlo ahí, aun cuando pareciera que lo estaba disfrutando, de inmediato se comunicó con él telepáticamente


-*¡Goten! ¿puedes oirme?* – preguntó


-*¿qué… ugh… que ocurre?* – respondio el aludido entre gemidos


-*es una trampa* – advirtió Trunks, ignorando los gemidos de Goten – *esos sujetos te están filmando, están entre los arbustos*


-…


-*¿goten?* - insistió el pelilila al no obtener respuesta


-*sabia que había algo raro* - dijo Goten


Goten apartó al pelirrojo justo antes de que le quitara la peluca


-¿Qué pasa? – preguntó el pelirrojo


-lo siento – dijo Goten – pero no puedo hacerlo si hay cámaras filmando – y creó una ráfaga de viento con la que descubrió a todos esos sujetos entre los arbustos y sus cámaras


-¿Quién eres? – pregunto asustado el pelirrojo al ver ese poder


-no querrás saberlo – contesto Goten, y se fue volando hasta el árbol donde estaba Trunks, lo tomó del brazo y cuando ya estaban muy alto, con otra ráfaga de viento destruyó todas las cámaras, micrófonos, celulares y portátiles de esos sujetos – adiós –añadió y se fue junto con Trunks volando hacia Capsule Corporation.


--


-mmm… ayy… ugh… aaah – se quejaba Goten suavemente mientras volaban a la casa de Trunks


-¿Qué diablos te pasa? – preguntó Trunks mirándolo algo ruborizado por esos semi-gemidos que estaba dando


-ese chico estaba muy guapo – dijo Goten con sus mejillas suavemente ruborizadas, lo cual era extraño, él no se ruborizaba con facilidad – ay – añadió tratando de ventilarse – siento mucha calor – inconscientemente comenzó a mover sus piernas y su cadera suavemente. Trunks no lo notó. Llegaron a Capsule Corporación y Goten se apresuró en ir a la habitación de Trunks, el pelilila lo seguía caminando normalmente.


Goten ya había entrado a la habitación cuando Trunks llegó y encontró botada en la puerta la peluca que Goten llevaba puesta, la recogió a regañadientes, dispuesto a regañar a Goten por su desorden, abrió la puerta de golpe y lo que vio lo dejo helado:


Goten estaba tendido sobre su cama, aun con la seductora ropa de chica, pero tenia la falda levantada y las bragas habían sido rasgadas por el mismo pelinegro cuando ya no aguantó más y comenzó a masturbarse con frenesí. Sus piernas estaban abiertas y Trunks podía ver claramente como Goten se daba placer a sí mismo, usando su mano derecha para tocar su miembro ya erecto que comenzaba a liberar un poco de “pre”. Sus caderas se movían al ritmo y sus gemidos cada vez más sonoros inundaban la habitación.


Trunks seguía en la puerta, con la boca abierta, su rostro estaba blanco al igual que su mente, no podía dejar de mirar y a cada gemido que Goten daba, el pelilila apretaba con más fuerza el pomo de la puerta.


Goten seguía masturbándose cada vez más rápido, sus mejillas estaban de un encantador tono carmesí, estaba a punto de llegar al clímax, sus gemidos lo anunciaban, de pronto, acompañado de un sonoro y profundo gemido, la blanca esencia salió, calmando la pasión de Goten y manchando el vestido. La respiración de Goten se fue calmando poco a poco y entonces, al abrir los ojos, se dio cuenta de la presencia del pelilila


-¡Trunks! – dijo entre asustado y avergonzado – yo…


Pero Trunks no espero a escuchar explicaciones, como un zombi cerró la puerta, sin siquiera pestañear, dio unos pasos, temblorosos, y apoyó su espalda contra la pared. Por fin pudo pestañear, lentamente, como si estuviera procesando todo lo que había visto y oído, y cuando al fin logró hacerlo, las reacciones subieron como electricidad por su cuerpo: sus piernas se tambalearon, una notable erección abultó sus pantalones y sin poder detenerlo eyaculó con fuerza manchándose los pantalones y sintiendo como el liquido bajaba lentamente por sus piernas, su corazón comenzó a latir rápidamente y su respiración se volvió agitada, su rostro al fin sintió todo ese fuego acumulado y se tiño de un rojo ardiente, a la vez que comenzaba a salirle sangre por la nariz, se tapó rápidamente mientras sentía como todo su cuerpo temblaba.


De pronto se abrió la puerta de su habitación y Goten miró tímidamente, el pelilila de inmediato se volteó, no quería que lo viera en ese estado


-¿estas enfadado? – pregunto temeroso Goten


-no – contestó Trunks tratando de calmarse y de que no se le notara algo raro en la voz


-lo lamento – dijo Goten – es que… no pude aguantarme


-“ya me di cuenta” – pensó Trunks y dijo – esta bien, no estoy enfadado… solo es que… me sorprendió – mintió


-¿quieres que me vaya? – la pregunta de Goten escondía cierto dejo de tristeza


-¡no! – Contestó Trunks – solo… déjame ir a refrescarme – y se dirigió a uno de los tantos baños que había en su casa, pasó al lado de Goten y le puso una mano en su hombro – en verdad no estoy enfadado – dijo, y eso hizo que Goten sonriera


Cuando el pelilila volvió a su habitación se encontró con Goten quitándose el vestido, durante unos segundos se quedó mirando la espalda bien formada de Goten, hasta que se dio cuenta de que lo estaba haciendo


-“no mires” – se regañó a si mismo mentalmente y se sentó en su escritorio frente a la laptop, mientras se repetía que no debía mirar


-ya volviste – dijo Goten al verlo - ¿te cambiaste la ropa? – preguntó algo confundido el pelinegro al ver que su amigo traía otros pantalones


-¿Qué tiene? – Se defendió el pelilila – tu también te estas cambiando


-es verdad – dijo Goten, y añadió – no volveré a vestirme como chica nunca más


-¿Por qué? – preguntó Trunks mirándolo de reojo, pero Goten ya estaba vestido


-bueno… soy gay, no afeminado – contestó el pelinegro tranquilamente – aunque fue divertido – añadió riendo, guardó el vestido y se sentó en la cama de Trunks


-te dio vergüenza ¿verdad? – preguntó Goten mirando a Trunks, el pelilila se sorprendió por la pregunta


-¡claro que me dio vergüenza! – respondió alterado, mirándolo con cierto enfado y con sus mejillas coloradas


-¿Por qué? – replicó Goten – yo también… te he visto… “haciéndolo”


-sí, pero… - dijo Trunks “tu no te me quedaste viendo todo el rato”


-está bien – dijo Goten sonriendo, iluminando con esa sonrisa toda la habitación – lo mejor será que me vaya – y se puso de pie


-¿Por qué? – preguntó algo asustado Trunks, poniéndose de pie de un salto


-mi mamá se enfadará si llego tarde – dijo Goten con cierto tono “racional” en su voz – ya está atardeciendo – y señaló la ventana de Trunks donde se veía claramente los hermosos colores del atardecer – bueno, nos vemos – dijo Goten y salió volando por la ventana


-nos vemos – dijo Trunks mirando en la dirección en que Goten se había ido


--


Eran cerca de las doce de la noche cuando Trunks ya no encontró otra escusa para quedarse levantado y decidió irse a dormir, apagó su laptop y se quedó mirando su cama, una extraña sensación se apoderaba de él cada vez que miraba ese lugar, como si aún pudiera ver a Goten tendido sobre la cama. Meneó la cabeza y se dirigió al baño, mientras se lavaba los dientes una idea rondaba su mente


-es una tontería –dijo al fin – él no me gusta – declaró frente al espejo con firmeza y un poco de rabia


Regresó a su habitación y comenzó a ponerse la pijama, al quitarse la camisa sintió un escalofrío en la espalda, miró asustado a su cama, gruño por seguir teniendo esos pensamientos y se cambió rápidamente, queriendo olvidar todo ese asunto se dirigió a su cama con decisión y abrió las sabanas, pero una vez ahí se quedó paralizado, Goten había estado justo en el centro de la cama, no podía el pelilila quitarse esa imagen de la cabeza


-¡maldita sea! – se regañó a sí mismo, y con resignación se metió a la cama, pero se quedó en la orilla y muy quieto, se trató de acomodar en esa orilla de la cama y se cubrió hasta la cabeza con las mantas, pero entonces notó algo: su cama olía como Goten, había absorbido por completo ese olor dulce que Goten emanaba – demonios… - dijo susurrando y, ruborizándose un poco, se dispuso a dormir


 


Ya eran las dos de la madrugada y el pelilila no había logrado dormir ni un minuto, cada vez que cerraba los ojos la imagen de Goten masturbándose aparecía en su mente y la sensación de que aun estaba acostado a su lado tocándose y gimiendo no desaparecía, lo peor era que producto de todo eso tenia una erección en su entrepierna que exigía atención desesperadamente. Por mucho que se resistió, no pudo seguir controlando su cuerpo, su mano se deslizaba temblorosa por su cintura hacia su abultada entrepierna, como si en ella se concentrara la lucha entre su mente y sus instintos, cuando al fin se tocó su miembro por sobre su pijama , un leve gemido de alivio se escuchó. Empezó a tocarse con intensidad mientras trataba por todos los medios de alejar de su mente la imagen de Goten, pero no logró hacerlo. Con su mente y su cuerpo ardiendo buscó entre sus cosas una revista hentai, para buscar imágenes de mujeres hermosas y sexys con las cuales olvidarse de Goten. Al fin encontró una imagen de una mujer que siempre lo calentaba en demasía, siguió masturbándose mirando la imagen mientras se imaginaba junto a esa mujer, tocándola, besándola, “penetrándola”, pero al imaginar eso cerró sus ojos y el sonoro gemido que había dado Goten al eyacular retumbó en su cabeza. Abrió los ojos asustado, lanzó la revista lejos y se sentó en la cama


-¡no, no, no! – Repetía con los ojos cerrados mientras se daba golpecitos en la cabeza con sus manos – ¡deja de pensar en eso! – y miró otra vez “ese” lugar, donde Goten había estado. Lo que vio lo hizo pararse de un salto, asustado, lo que veía ya no era el recuerdo de la imagen de Goten que había en su cabeza, era algo totalmente distinto, como una ilusión, era como si de verdad Goten estuviera ahí ofreciéndosele, mirándolo con lujuria y jugueteando con su lengua


-me estoy volviendo loco… - se dijo Trunks con temor y acercándose lentamente – ¡tu no eres real! – le hablo a la ilusión, y ésta le respondió gimiendo seductoramente. Temblando se acercó a tocar esa visión, cerró los ojos, pero lo único que sintió fueron las sabanas y mantas de la cama, pero al abrir los ojos la visión seguía ahí, se sentó al pie de la cama sin dejar de mirar esa ilusión que lo estaba volviendo loco


-desaparece – pidió casi desesperado el pelilila, pero la ilusión negó con la cabeza


-sácate la camisa – escuchó la voz de Goten en su cabeza hablar a través de esa ilusión, fue Trunks quien tuvo que negar con la cabeza esta vez, si lo hacia quedaría totalmente desnudo y perdería el control… aun más


La ilusión sonrió ante la negativa de Trunks y los gemidos volvieron a la cabeza del pelilila mientras la ilusión comenzaba a desabrocharse su camisa lentamente al ritmo de cada gemido, cuando hubo terminado comenzó a tocarse su torso desnudo y a mover su espalda y sus caderas


Trunks no pudo aguantar más, puso una almohada donde estaba la ilusión, porque sabia que no podía tocarlo, se quito la camisa con fuerza y se puso encima de su Goten, aun podía ver la ilusión que generaba su mente a través del almohadón


-mierda… - fue lo ultimo que su razón pudo articular antes de dejarse dominar por  completo por la pasión y el instinto


Se abalanzó sobre la almohada imaginando que era Goten, comenzó a besarlo, en el cuello, pues no podía imaginar como eran los besos apasionados de Goten; a tocarlo por todas partes, su torso, sus piernas, sus muslos, mientras seguía masturbándose con frenesí. Los gemidos de Goten retumbaban en su cabeza como una sinfonía, las imágenes de su ilusión se mezclaban con lo que Goten había hecho esa tarde. Su poca experiencia lo estaban desesperando y generando cierto dolor en su miembro al no poder imaginar una escena más ardiente, sabía como lo hacían los gays, pero no podía imaginarse la sensación, intentó pensar en que Goten y él estaban frotando sus miembros, pero ver el miembro del pelinegro era muy distinto de sentirlo. Imaginó entonces que Goten le pedía más y más, y que le agarraba los muslos para acercarlo más, así que el mismo comenzó a tocarse con la otra mano sus muslos, mientras apoyaba su cabeza en la almohada y seguía masturbándose, en un momento tomó con fuerza el frenillo de su pene mientras se agarraba con fuerza los muslos y al fin llegó al esperado y deseado clímax, la almohada ahogo su gemido mientras eyaculaba sobre su cama. Su cara estaba roja, su cuerpo sudaba como nunca antes y su cama estaba muy manchada por la gran cantidad de semen que había eyaculado, pero el pelilila no estaba consciente de eso ni de nada, su mente se había perdido entre tanto placer y su cuerpo exhausto se desplomó sobre la cama.


 


Al día siguiente, lo único que despertó a Trunks fue el hambre, los gruñidos de su estomago lo despertaron, aun medio adormilado levanto un poco la cabeza y miró la hora


-las cuatro y quince – murmuró y volteó a ver por la ventana: un sol radiante - ¡diablos! Son las cuatro de la tarde – y apoyó su cabeza con pesadez sobre la almohada “¿Por qué dormí tanto?” pensó, cuando empezaba a quedarse dormido otra vez, sintió un viento helarle las piernas. Con pesadez se sentó en la cama mientras se rascaba la cabeza, aun tenia sueño, y entonces se miro, estaba desnudo; vio la cama, era un desastre y vio la almohada… y entonces la pregunta de “¿Por qué dormí tanto?” tuvo una respuesta


-¡oh por dios! – exclamó Trunks aterrado al recordar lo que había hecho esa noche


Tendría mucho en que pensar antes de regresar a la escuela y ver a Goten nuevamente, y solo tenía dos semanas para hacerlo.

Notas finales:

Espero que les haya gustado, sobre el proximo capitulo, yo creo que va a ser largo, aunque no estoy segura de eso, asi que si sale asi de largo se va a llamar: "La curiosidad mató al gato"

 


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