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FEDERICO ~ Un Chico Diferente por Caballero de la Luna

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Notas del fanfic:

Una muy rara versión de la bella y la bestía, también basado en lahistoria de Penelope

Notas del capitulo:

Bueno, aqui el primer capitulo de un nuevo fic lleno de romance y con el mensaje de que lo que verdaderamente importa son los sentimientos y no nuestro dinero o nuestra cara.

 

CAPITULO 1 ~ MALDICIÓN GITANA

Mis padres nacieron con una buena vida; dinero heredado, de sangre azul, los favoritos de la sociedad; habían sido invitados por reyes y reinas y otras personalidades importantes, estaban acostumbrados a engalanar las columnas de las páginas de sociales; y estaban súper encantados con la atención de los medios con lo que sería el día más feliz de su vida, mi nacimiento.

Pero la leyenda cuenta que una maldición hechizó a la familia Van de Kamp; cuando mi tátara-tátara-tátara-tátara abuelo Rafael tuvo un amorío con una chica de la servidumbre, Clara; cuando le contó a su familia los planes de casarse con Clara, le hicieron entender lo tonto que sería, después de todo Clara era una sirvienta; y así Sir Rafael se casó con una joven más apropiada, y Clara se arrojó de un risco.

Esa noche la madre de Clara, la bruja gitana del pueblo, se apareció en la mansión Van de Kamp buscando venganza, quería que esos de “sangre azul” sintieran el rechazo que su hija sintió e hizo un hechizo, ordenando que el próximo hijo Van de Kamp nacería con cara de cerdo.

-“…y sólo cuando uno de su propia clase y genero reclame a este hijo como propio hasta que la muerte los separe será rota la maldición”.

Con la amenaza del hechizo sobre sus cabezas, las próximas cinco novias Van de Kamp, vivieron con el horror de engendrar a un niño, pero con suerte todos procrearon hijas, quienes a su vez tuvieron hijas, quienes tuvieron hijas, quienes tuvieron sólo hijas; lo que significa que el primer hijo descendiente directo de la familia Van de Kamp, fui yo.

-Federico, mi querido y dulce Federico, al igual que tú me he sentido aprisionado casi toda mi vida

-¿En serio? –le pregunté a Cristian Haensworth, que le hablaba un espejo en mi habitación que me permitía verlo pero él no podía verme a mí -¿Por qué? Eres bien parecido y de buena familia.

-Sí, exacto.

-Creo que al parecer nadie puede ignorar eso.

-Nadie. Bien Federico, con hechizo o sin él, si soy más que mi nombre y mi rostro, entonces seguro tú también eres más que eso

-Lo sabía, ¡El elegido! –comentó mi madre a Eliza, la casamentera oficial, mientras nos espiaban por una cámara de vigilancia desde la cocina.

-Dulce Fernando –continuó hablándome a través del cristal - ¡Déjame entrar!

-¡NOOOOOOOOO! –se escuchó el estruendoso grito de mi madre desde la cocina cuando supo lo que iba a hacer.

-¡Hola! –me mostré frente a él pero su reacción no fue precisamente la mejor.

-¡Ayúdenme! –Salió corriendo de mi habitación pidiendo auxilio - ¡Es un PUERCO! ¡ES UN CERDO ASESINO AYÚDENME POR FAVOR! –entonces Ric, mi mayordomo, salió a perseguirlo antes de que saliera a la calle y le contará al mundo mi vergonzoso secreto.

-¿Pero por qué Federico? ¿Por qué? –me cuestionaba mi madre luego de lo que acababa de suceder.

-Yo no hice nada, yo no fui el que huyó madre.

-Pues claro que todos huyen querido, si te les apareces así de repente. ¿Crees que le enseñé a tu padre mi lunar en la primera cita? Claro que no, me espere hasta después de casarnos.

-Yo no le enseñé mi lunar, le enseñé ¡Mi ROSTRO! –mi madre se sentó a llorar desconsolada y escandalosamente, no me quedó más remedio que reconfortarla aun cuando yo había sido el herido.

-Ay mijito, en serio le gustabas.

-No mamá, no es cierto.

-No, no le gustó tu nariz, pero tú no eres tú nariz.

-Pero si soy mi nariz.

-No, es herencia de los errores de tus tátara-tátara abuelos, ellos te hicieron esto a ti, a nosotros, pero tú no eres tú nariz, tú no eres tu… tu… -la abracé para que dejara de hablar, sin mucho éxito -…eres otra persona dentro de ti esperando poder salir.

Todos me han recordado durante años que yo no fui la única víctima de la maldición, nadie sufrió más que mi madre, por ejemplo al día siguiente de haber nacido…

-Estas cosas pasan todo el tiempo –consolaba mi padre a mi madre mientras esperaban mis radiografías en el consultorio del doctor.

-¿A si? ¿A quién?

-¿Sabías que algunos niños nacen con branquias? Sí, las de los peces.

-No, qué horror –pero por fortuna llegó el doctor para interrumpir tan absurda conversación. –Y ¿Pueden quitársela?

-Es de lo más raro, –respondió el especialista mientras entraba con una radiografía de mi cráneo en la mano – la arteria carótida parece correr directo a través de la nariz, o trompa en este caso, haciendo cualquier intento de remoción imposible. Lo siento, la trompa se queda. –mi madre no pudo hacer otra cosa más que intentar ahogar un grito de desesperación.

-AY NO ES CIERTO –cosa que no pudo hacer -¿POR QUÉ A MÍ? ¿POR QUÉ?

Mi madre es bienintencionada, siempre lo ha sido,  y siempre hizo lo que creyó mejor para protegerme; cuando un reportero de pequeña estatura se había escondido dentro de nuestra alacena para poder obtener una fotografía de mí cuando era bebé, mi madre, para protegerme de este sujeto, lo atacó con una cuchara de madera ocasionándole un grave daño en el ojo.

Pero, con el público demandando ver la cara que había causado tantos problemas, mi madre hizo lo que cualquier madre amorosa hubiera hecho, ella fingió mi muerte…

-Tierra a la tierra –recitaba un sacerdote sobre el ataúd que supuestamente contenía mi pequeño cadáver mientras mis padres lloraban desconsolados mi pérdida.

… e hizo cremarme; así el público pudo llorar mi trágica muerte y yo estuve a salvo escondido del mundo exterior.

Ahora sólo tenía que preocuparse de protegerme de mi padre, quien había tenido problemas adaptándose al nuevo menú matutino.

-¿Por qué no puedo comer tocino? –preguntaba mi padre en un tono algo molesto.

-Porque amas la avena –le respondía mi madre haciendo una voz de bebé muy molesta mientras me miraba -¿verdad que papi ama la avena? ¿Verdad que sí bebé?

-No, amo el tocino.

Además de la insensibilidad del entonces nuevo mayordomo, Ric.

-Con este puerquito hicieron estofado –me decía mientras agarraba mis tiernos dedos de bebé –y con este cerdito…

-¡Ric! –se enojó mi madre - ¡Ya basta! Ay pobre de mi bebé.

Y en ocasiones tenía que protegerme hasta… de mí. Cómo cuando tenía 5 años, decidí aventurarme a conocer lo que había en el mundo, así que robé la llave de la puerta principal y salí al jardín, y por las rejas de la barda de mi casa, pude ver a otros niños que jugaban en la calle, pero antes de que ellos pudieran siquiera verme, mi madre me jaló de vuelta a la casa.

Así que me la pasaba jugando en mi habitación, donde inventé mis propios amigos y aprendí a entretenerme solo, mientras que mi madre se pasaba cada hora del día enseñándome a ser un hombre correcto. Y en mi cumpleaños 18 contrató a Eliza, casamentera de los ricos y famosos; para romper el hechizo sólo tenía que encontrar a alguien de mi propia clase y género que me aceptara por quien soy, hasta que la muerte nos separe.

 

CONTNUARÁ…

 

Notas finales:

Espero que les haya gustado, y sí les gustó pues comenten q no cuesta nada y si no les gustó pues tambien comenten :P

El proximo capitulo lo subire la proxima semana, mientras pueden leer "Dulce Terry" que ya hay nuevos capitulos o "Rapsodía" o "El hombre tras la Sonrisa" o "Las Aventuras de Haruka y Michiru"; todos son muy entretenidos jeje XD


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