Estoy en el aeropuerto a punto de irme a un país completamente distinto al mío y no es porque este huyendo de la situación claro que no, este viaje lo tenía planeado hace meses, pero pude a ver renunciado a irme si tan solo te hubieras enamorado de mí.Aaaasi eso hubiera pasado, juro que mandaba muy lejos este maldito viaje, eso de ir a vivir con mis papas es de lo más aburrido y para acabarla en un país que esta horrible, mis amigos dicen que mueren por ir a haya, yo con gusto les dejaba mi lugar, a mí no me parece nada bonito Estados Unidos lleno de gente tan superficial y sin los hermosos cerezos. Y sobre todo no estás tú, pero para que quedarme a ver cómo te paseas feliz con ese estúpido, ni que fuera masoquista, bastante tengo con todo lo que paso como para que sufra aún más, no no y no, yo me voy pero no por cobarde sino porque? Porque? No sé pero me voy ya está decido.
Aún recuerdo la primera vez que te vi, estabas rodeado de una multitud de niñas que solo te decían lo lindo que te veías, (malditas zorras)al parecer eras nuevo en la escuela, más de una se te lanzo descaradamente. Yo solo podía ver lo cohibido y sonrojado que estabas, y cuando estaba a punto de ir en tu auxilio, de la nada salto Santo Kai y te rescato de las garras de esas arrastradas.Vi cómo te marchabas jalado por Kai, tu cabello ondeándose de un lado a otro, llevabas una cara de no entiendo nada jajaja, la confusión en tu rostro es tan hermosa creo que desde ese momento me enamore, a pesar de la distancia que nos separaba pude grabarme las facciones de tu rostro tan fresco, suave en pocas palabras perfecto.
Intente seguirlos para saber quién eras, pero pinche Kai parecía que volaba y termine perdiéndolos, sentí una gran tristeza por no poderte conocer en ese momento.Le conté a mi primo Aoi y el tonto me dijo “van al mismo colegio, en algún momento te lo encontraras” ptm, como se ve que no conocía esa pinche escuela, más grande no podría ser la maldita, era casi imposible que te volviera a ver y por lo que pude ver en tu uniforme eres menor que yo, lo que nos separaba aún más, total me termine resignando a que no te volvería ver, paso un año y la mitad de otro y no volví a saber nada absolutamente NADAAAA de ti ni de Santo kaiAhhh – suspiro – se preguntaran porque le digo Santo Kai jaja, es que después de ese año y medio de no saber nada, un día en que fui a casa de Aoi a hacerle una de las tantas visitas que solía hacerle para que practicáramos guitarra, entre a la casa tenía llaves digo yo era alguien de confianza por eso las llevaba, y la imagen que menos me esperaba era la de Santo Kai sobre las piernas del libidinoso de mi primo mientras se besaban con la mayor pasión posible, mi primera reacción fue hacerme el despistado y salirme de la casa pero antes de que me marchara, Santo Kai se desmonto de Aoi y corrió para evitar que me fuera, oooh si aún lo recuerdo jajaja:
- No te vayas – decía mientras me tomaba por el brazo – el que se va soy yo, disculpa las molestias que eh ocasionado gomennasai – terminaba de decirme eso cuando volteo a ver a Aoi – Aoi te veré después. – me asombre tanto al ver, como se miraban con tanto amor y tan tanta tristeza por estarse separando en ese momento era una escena tristemente hermosa jajajaja –
- No te preocupes, yo solo pasaba a saludar y ya me iba, sigan en lo suyo me sentiría muy mal si se quedan así de tristes por mi culpa – les sonreí con complicidad jajaja aún no me daba cuenta de que era Kai aquel chico al que le había borrado la sonrisa con mi llegada, y cuando habiendo aceptando que me retirara, lo recordé su sonrisa si su pelo negro si, era el sisisi no podía estar equivocado era el que no dejo que te conociera - oh yo te conozco, vamos al mismo colegio ¿verdad? – le dije sin pensarlo, pero tuve la delicadeza de no ir al grano no quería verme tan urgido – si eres tu verdad dime que siiiiiiiiiiiiiiiiiiii el colegio “tokyoshinjuu” dime que si eres tupor favoooor– bueno con eso si soné muy urgido, pero necesitaba saber de ti aunque fuera tu nombre.
- Jajaja cuanta insistencia – me dijo con una enorme carcajada – si voy ahí, pero ahora tu respóndeme porque tanto interés – gracias necesitaba que me preguntara.
- Ammettoo, conoces a un chico rubio, pequeñito, de ojos azules, unas mejillas suavecitas y redonditas – cuando fui interrumpido por las carcajadas de los dos que estaban conmigo – que dije que sea tan gracioso – les conteste molesto.
- Nada jaja, pero parece que te lo gravaste completito jajaja no sabía que takanori tuviera a tan ferviente admirador.
- Se llama takanori – conteste inmediatamente eeeeeeeeehhhhh, ya sabía tu nombre no me importaron las ahora más fuertes carcajadas de ambos, después de tanto tiempo ya sabía tu nombre, ahora ya sabía cómo nombrarte en mis pensamientos en mis sueños. – me lo podrías presentar – le dije un tanto ansioso –
- Claro porque no a taka le va a encantar saber que tiene un admirador secreto jaja, pero dime donde nos has visto juntos para saber que yo lo conocía – y pos ya le conté toda la historia – enserio, que mal me siento por eso, no pensé que alguien nos siguiera, oh rayos me vi muy mal – fue lo primero que atino a decirme –
- No te preocupes, pero aun lo puedes remediar preséntamelo sip – lo mire con ojitos de borreguito a medio morir, para convencerlo -
- Claro taka, es una persona muy solitaria, el conocer a alguien más le haría muy bien. Y más ahora que esta tan deprimido –
- Deprimido porque? alguien le hizo algo? – pregunte con insistencia, quería saber todo de ti.
- Mmm no se si sea buena idea contarte, no te conozco jajja solo sé que eres el que nos acaba de descubrir con las manos en la masa – oh cierto, ni Aoi le había dicho quién era yo –
- Oh cierto que mala educación la mía, Kai te presento a mi primo takashimakouyou, pero todos le decimos Uruha. – le dijo Aoi para que ya no fuéramos unos desconocidos –
- Mucho gusto Uruha yo soy Yutaka Uke pero dime Kai suena más bonito – mi mente dejo de procesar en el momento que dijo Uke jajaja pero no deje que se notara él era mi salvación y no debía molestarlo –
- Mucho gusto ahora si me cuentas que pasa con taka – si la paciencia no es una de mis virtudes.
- Jajajaja eres muy insistente, bueno te contare solo por eres primo de mi Aoi, mira taka es muy solitario por lo que nunca ha tenido novio, es más nunca ha besado a nadie, yo le quise enseñar pero le daba pena y opte por dejarlo en paz – más le valía a Santo Kai - pero últimamente, su situación le causa mucha molestia, dice que quiere saber que es el amor sin salir herido, en pocas palabra quiere salir con alguien que le enseñe a amar, sin que eso implique algún compromiso –
- Yo podría ayudarlo – fue lo primero que se me ocurrió decir, era mi oportunidad de conocerte y que me conocieras, tal vez te enamorarías de mí y viviríamos felices por siempre (si soy muy cursi yyyy) Aoi y Kai me miraban sorprendidos y como que no sabían que responderme – bueno es una opción, yo me ofrezco de tu todo corazón para que él aprenda lo que es el amor. – se miraban el uno al otro, que nervios tenia, tal vez Kai ya hasta se había arrepentido de presentarte conmigo eso pensé –
- Me parece genial la idea pero estas seguro por lo que veo a ti en verdad te gusta taka y él no quiere compromisos de ningún tipo – tuve que idear una buena respuesta para lograr convencerlo de que era una buena idea –
- Mira aunque yo me llegara a enamorar más, eso no sería problema, yo me voy de Japón en un mes, por lo que ya no lo vería más, así le enseño lo que es el amor, él se queda feliz aquí y yo me iré feliz por haberlo conocido.– no necesite más respuesta que su enorme sonrisa para saber que lo había convencido –
- Está bien, deja le digo que ya tengo quien le haga el favor, como eres primo de Aoi no se negara en que seas tú.
See así fue, como Santo Kai llego a mi vida para hacerme el milagro de conocerte, demonios creo que llegue muy temprano al aeropuerto, faltan 5 hrs para que salga mi vuelo, pero como no tengo nada mejor que hacer seguiré aquí hundiéndome en mis recuerdos. En que me había quedado, oh ya recuerdo,Kai me dijo que habías aceptado sin ninguna objeción y que querías conocerme inmediatamente, eso me puso tan feliz, pusimos lugar y fecha para el gran encuentro debía ser lo más pronto posible porque era verdad que yo me iba de Japón en un mes.
Hay ese día fue ahhhh raro jajaja creo que o tu no explicaste bien o yo entendí mal, la cita fue en un hotel porque tu así lo quisiste, al principio se me hizo raro pero después pensé que tal vez querías privacidad, que eras muy penoso y no querías que todos nos vieran, en fin llegue al lugar, era un hotel 5 estrellas precioso con una recepción bastante mona, ahí vi a Kai quien rápido se dirigió asía mí, me entrego una llave y me dijo –ya te está esperando, la habitación es la 123, espero que todo les salga bien, me voy porque Aoi me espera, ciao – me dio un beso en la mejilla y se marchó.
Subí un poco rápido, estaba muy nervioso era la segunda vez que te vería, la noche anterior había soñado con lo que pasaría en este encuentro, cuando me di cuenta ya había llegado a la habitación 123, abrí con mucho nerviosismo.
Entre y ooooooooohhhhhhhhhhh sorpresa no había nadie, eso pensé hasta que desde la recamara oí tu voz, casi me derrito cuando la oí, me llamabas – eres tu Uruha, estoy en la recamara – no espere ni dos segundos corrí tranquilamente hacia la recamara y la abrí, ahí estabas tú sentado en el filo de la cama, con tus piernitas juntas y tu cabecita agachada, llevabas un pantalón negro entubado, una camisa igual negra y un saquito de esos que tanto se están usando, cuando por fin alzaste tu cara para verme, vi tu hermoso rostro de nuevo, llevabas unos ojos perfectamente delineados, ahhhhhhhhhh casi me desmayo con tan solo verte, pero eso no era una buena opción – Hola yo soy Uruha – fue lo único que se ocurrió decir, no le iba a decir, yo soy tu maestro en el amor – hola yo soy takanori pero me puedes decir ruki – oh ruki ese apodo iba tan bien contigo.
- Está bien ruki – después de eso el silencio reino por varios minutos, como que te diría, fueron los minutos más largos de toda mi vida, hasta que tu hablaste –
- Quieres sentarte a mi lado – dijiste mientras tocabas el lugar donde me invitabas a sentarme –
- Claro – lo dije algo ansioso, me senté y paso lo que menos me esperaba, te me fuiste encima, hay dios me espante, comenzaste a besarme desesperadamente las mejillas, juro que a pesar de que moría de ganas de corresponderte no podía es que realmente ibas muy rápido, yo no te quería para un simple acoston y ya, como pude te separe de mí, tu cara de confusión era realmente notoria, solo atine a decirte – no crees que vas muy rápido, aun no nos hemos dicho nada.
- No se supone que tú me enseñarías a hacer el amor – dijiste con ligera molestia, obviamente había una confusión en todo esto –
- O yo entendí mal o me explicaron mal, o tú lo explicaste mal, no lose pero yo creí que querías que te enseñara como amar a alguien más, hacer el amor es una manera de demostrar amor pero amar conlleva más que follar por lo que hubiéramos hecho ahorita no era hacer el amor era simplemente follar. – esperaba no haberte molestado con mis palabras, no quería que terminaras yéndote –
- Tienes razón, pero es que yo no sé nada sobre esas cosas, será mejor que me vaya creo que te eh dado una muy mala impresión de mi –
- Noooooooooo – grite en verdad no quería que te fueras, mi grito te asusto y solo te quedaste sentado mirándome – no te vayas – dije ya más tranquilo – tengo una propuesta para ti, deja te la expongo y si no te parece te vas de acuerdo? – ya había planeado esa idea mucho antes de llegar aquí, pero aun no sabía en qué momento te la diría pero ya que se dio la oportunidad lo hice –
- Claro, te escucho – dijiste con emoción, eso me alegro mucho –
- Bueno, mira tú quieres conocer como es amar, para amar a alguien debes convivir con esa persona y disfrutar con ella de momentos inolvidables, de pequeños pero grandes detalles. En fin mi propuesta es que nos volvamos novios de mentiritas, así podre enseñarte todo lo que debes saber, para todos los demás seremos novios, pero nosotros sabremos que solo será para enseñarte y si quieres cuando estés listo te enseño a hacer el amor qué opinas – ese fue el momento más tenso de mi vida lo juro –
- Pero, eso aparte de que nos llevara más tiempo, no es algo peligroso, digo podría enamorarme de ti y eso no nos conviene – a ti no convendrá pero a mi si es lo que más deseo, eso era lo que yo pensaba, debía convencerte –
- Es una posibilidad, pero no te preocupes solo será un mes, no sé si te habrán dicho pero yo me voy en un mes de Japón. Como vez hay muy poca probabilidad de que nos enamoremos en un mes. – dimeeeeeeeeeeeeeeequeesiiiiiiiiiiiii era lo único que me decía en la mente –
- Tienes razón entonces acepto se… - no te deje terminar cuando te dije
- Espera aun no aceptes, deja te lo pido de la manera correcta – Salí corriendo de la recamara, en la entrada de la habitación encontré un arreglo de rosas del cual tome una la más hermosa, me mire al espejo que estaba ahí cerca, me arregle un poco mi cabello y decidí regresar a la recamara, entre, me arrodille frente a ti tome tus manos y te dije – ruki desde hace tiempo que eh querido pedirte que seas mi novio aceptas – mientras colocaba la rosa entre tus mano, te hubieras visto estabas rojito, rojito aaaaaaaaa como lo recuerdo, tuve ganas de irme encima de ti y besarte desesperadamente pero me controle –
- Si acepto – esas fueron tus palabras – las que yo acalle con un pequeño pero apasionado beso, sabía que era el primero de tu vida, el que el sabor de tus labios fuera probado por mí por primera vez fue algo que me hizo tan feliz, trataste de seguirme el ritmo pero fue algo complicado para ti es así que yo imite el tuyo para que disfrutaras más el beso, lo hice más lento y pausado.
Y así fue como empecé a ser tu novio de mentiritas, que bonito recuerdo, las primeras semanas fueron hermosas, salimos a varios lugares, tú eras algo distante conmigo, me dijiste que te apenaba un poco salir así y que todo el mundo te viera, por lo que decidí ser más discreto, tampoco fuimos a mil y un lugares por tus padres te tenían tan controlado que casi les tenía que rogar para que te dejaran salir conmigo, claro pensaban que iríamos a jugar futbol o hacer cosas de hombre jajaja tus papas en verdad me caían bien, y yo les caía bien a ellos, nunca lo supiste pero creo que tu mamá sabia lo de nuestro “noviazgo” una de esas tantas veces que fui por ti a tu casa ella me dijo – si mi taka fuera niña me encantaría que tu fueras su novio, pero como es niño te lo encargo no quiero que otro te lo quite – y se fue sin decirme nada más. Creo que todos estaban de acuerdo en que tú y yo tuviéramos algo enserio menos tú.
Un día me llegaron rumores de que te habían visto muy risueño con un chico me dio una rabia y unos celos, pero como no podía llegar a reclamarte nada, porque no éramos novios de verdad.
Ya solo faltaba una semana para que me fuera y en cuanto a cómo ser el novio de alguien llevabas gran avance, tus besos ahora eran casi perfectos y ya no esperabas a que fuera quien te los diera varias veces me sorprendiste besándome apasionadamente, yo me perdía completamente en tu boca era como ir al cielo, cuanto te separabas en busca de oxigeno me preguntabas – que tal lo hice esta vez – y yo te respondía – bien pero que te parece si seguimos practicando – y así era como te convencía para seguir besándonos.
Aahhhhhhhh tenía que pensar como nos pasaríamos esa última semana, era un hecho mi partida me había dado cuenta de que tu nada más no te habías enamorado de mí, eso me entristecía mucho él es así que decidí actuar rápido, te busque en tu casa era domingo, sorprendentemente saliste solo tu (sorprendentemente porque siempre salías con toda la flota de tu familia) te pregunte si querías ir por un helado y aceptaste inmediatamente.
Ya en la nevería platicamos de muchas cosas, me preguntaste el motivo de mi partida y cuando te lo dije, me dijiste que te parecía genial que me reuniera con mis padres.
- Uruha – me dijiste algo nervioso-
- Si ruki dime –
- Yo quería preguntarte si – hiciste una pausa que más que dramática fue aaaaaaaa aterradora.
- Que ruki dime sabes que puedes preguntarme lo que quieras – yo respondí bien lindo –
- Que si crees que ya estoy listo para hacer el amor – dijiste sin más rodeos, eso me sorprendió, pero me agrado a la vez yo pensaba proponértelo, pero no sabía cómo hacerlo, al ver mi rostro el tuyo se tornó rojo de la vergüenza que sentías. –
- Si ruki creo que ya estás listo – te dije mientras bajo la mesa comenzaba a acariciar tus piernas con dirección a tu amiguito – quieres probar ahora mismo? – te pregunte
- Sip – fue una rápida pero tierna respuesta –
- Entonces vamos a mi casa quieres – un beso fue tu respuesta a mi pregunta – entonces vámonos ya – deje algo de dinero en la mesa y te saque de aquel lugar para ir de inmediato a mi casa, que no quedaba lejos de ahí.
Entramos lo más rápido que pudimos, era nuestra primera vez estaba tan emocionado, buena era tu primera vez, yo hace mucho que había tenido mis cositas pero eso ahora no importaba era mi primera vez contigo.
Te lleve a mi cuarto, vivía solo nadie nos encontraría, al llegar con calma te subí a mi cama, ambos nos arrodillamos en uno frente al otro, te tome por el rostro y comencé a besarte con todo el amor contenido que tenía, era lento pero apasionado, tú te abrazaste a mi cintura y me acariciabas suavemente, en cada caricia de tu parte me perdía.
Deshice el beso que nos unía, dirigí mi boca a tu oreja y te pregunte – quieres ser Uke o seme amm – mi gemido salió sin querer, yo podía hacer el papel que tú me pidieras, los dos los sabía manejar muy bien – entonces dime que quieres – dije al ver que no me respondías nada –
- Uke amm – dijiste en un suspiro – quiero que estés dentro de mí – si hubieras visto mis ojos hubieras visto como me brillaron con esas palabras.
- Está bien, ammmm yo cumpliré todo lo que me digas, siempre y cuando el único nombre que salga de tu boca sea el mío – tampoco lo iba a estar cogiendo mientras me decía enrique o Lucas o que se yo –
- Si amm te lo prometo – después de esta respuesta comencé a besar lentamente tu cuello, y a quitarte poco a poco la ropa, prenda por prenda iba cayendo al suelo, tu intentaste quitarme la mía pero tu poca experiencia y los gemidos que te causaban mis besos te lo impidieron, por lo que decidí quitármela yo lento y sensualmente, si algo se es ser sensual. Ya desnudos los dos nos contemplamos el uno al otro yo quería memorizar cada parte de tu cuerpo, para no olvidarlo nunca jamás, esta también era mi oportunidad para que vieras cuanto te amaba, tal vez después de esto te enamorarías de mí eso pensé yo.
Tome tu rostro para besarte de nuevo, quería hacértelo lo más bellamente posible, con mis manos comencé a recorrer tu cuerpo poco a poco, tu hacías lo mismo, tardamos no sé cuánto tiempo en esto, cuando tu cuerpo comenzó a reclamarme más, rápidamente busque en el cajón más cercano lubricante, no quería hacerte daño y dejarte un mala experiencia.
Bingo lo encontré y puse lo necesario en mis dedos, claro todo esto sin dejar de besarte.
Deshice el abrazo en el que estábamos para poder acercar mi mano a tu entrada, tu instintivamente abriste más tus piernas para que fuera más fácil, introduje lentamente un primer dedo, me abrazaste colocando tu cabeza sobre mi hombro del dolor que sentías, con mi otra mano atraje tus labios a los míos, para apaciguar tu dolor mientras mi dedo empezaba a moverse dentro de ti, cuando ya te sentí más relajado introduje el segundo, que causo que me enterraras tus uñas en la espalda, pero yo seguía besándote y moviendo mis ahora dos dedos en tu interior quería que empezaras a sentir placer y con esos pensamientos sin aviso introduje un tercero este te hizo gritar tan horriblemente que casi saco mis dedos para no seguir lastimándote, tú lo impediste y me pediste que continuara.
Yo te obedecí con gran placer poco a poco fuiste relajándote y tus caderas comenzaron a seguir el ritmo que mis dedos te imponían y fue cuando supe que había llegado el momento saque mis dedos lo que te desconcertó y te pregunte – estás listo ahh mmm – solo asentiste – entonces empecemos – te dije con gran emoción por fin te haría mío y dejaría salir todo mi amor, todo mi amor.
Abrí aún más tus piernas para dar paso a mi miembro que a pesar de no recibir motivación de tu parte ya estaba más vivo que nunca antes, como estábamos aun de rodillas el uno frente al otro, te senté sobre mí mientras mi pene entraba poco a poco, mientras tus piernas empezaban a rodear mi cintura, pude notar la molestia con la que lo recibías y quise calmar tu dolor comenzando a masturbarte, acción que te sorprendió mucho no lo esperabas. Ya estando completamente dentro, empecé a besarte aún más apasionadamente antes de comenzar a moverme tenía que esperar a que te acostumbraras.
No tardo mucho cuando tus propias caderas me pedían que continuara mi tarea, mis primeras estocadas fueron lentas y pausadas pero con el pasar del tiempo fue hicieron rápidas y fuertes con lo cual parecías disfrutar aún más y cuando encontré que te hizo gemir aún más fuerte que antes te dije – te amo ruki te amo más que a nada en la vida – pero creo que tu pensaste que era parte del acto por lo que me respondiste así – yo también uru yo también te amoammmaaaahhhhhhhaaaa quiero más aaaaahhh – sus palabras eran órdenes para mí, empecé a entrar y salir aún más fuerte y rápido pero no nos duró mucho más tiempo el gusto, mientras te corrías en mi mano yo segundos después lo hice en tu interior.
Ahhhhhhhhhhhhhhhh – fue lo último que se oyó en la habitación, estábamos sudados y cansados, tu seguías sentado sobre mí abrazándome con tu cabeza en mi hombro, no quería salirme de ti, pero al ser tu primera vez te lastimaría aún más si no lo hacía. Poco a poco te levantaba, cuando por fin separe por completo nuestros cuerpos te acosté sobre la ya destendida cama (quien sabe porque) y te cobije con las sabanas, estabas tan exhausto que te dormiste casi al instante, me recosté a tu lado y te abrace por la espalda para también quedarme dormido a tu lado.
Y así fue nuestra primera vez, de recordarla aquellito ya se me despertó, debo ir al baño antes de abordar el avión ahorita vuelvo.
Bien ya volví en que me quede, a si en esa hermosa noche pues el desencanto vino la mañana siguiente cuando yo quise volver a tocarte mientras dormías comenzabas a responderme muy bien a pesar de seguir dormido, cuando dijiste aquello tan horrible.
- Mmmsakura
Sakura quien demonios era ese Sakuraaaaaaaaaaaaa la rabia y coraje se apoderaron de mi me levante y me fui a bañar, cuando salí del baño tu comenzabas a despertarte.
- Porque tanta prisa, me dejaste solito en la cama, auch me duele todo jajaja – decías mientras intentabas sentarte – vamos regresa aquí conmigo – me pedias.
- No lo creo tus padres deben estar asustados por que no llegaste a dormir – te dije no quería sonar molesto.
- Jajaj no lo creo ellos no están y no estarán toda esta semana, es así que tenemos mucho tiempo para despedirnos bien. – me sonreíste tan provocadoramente que casi muero, sino hubieras dicho ese nombre tal vez hubiera creído que te habías enamorado de mí.
- Qué bien jajaja, pero tengo un último favor que pedirte antes de comenzar nuestra semana de despedida.
- Sip dime cual.
- Que actúes como si fuéramos novios de verdad aunque estemos solos, tal vez tu no lo entiendas ahora, quizá después lo hagas, me harías ese último favor –
- Por supuesto Uruha, haría eso y más – decías mientras me atrapabas en un abrazo.
Y asi fue toda esa semana salimos más que nunca antes, por toda esa semana te mudaste a mi casa, ya que cada paseo lo terminábamos jugando en mi recamara, pero la duda pudo más conmigo fui a buscar a Kai tal vez él podría decirme quien era el tal sakura quería saber quién había logrado lo que yo no.
Kai me dijo que un día que regresaban juntos de la escuela hace una semana tropezaste con un chico que este quedo sobre ti y el muy descarado te beso, que tú lo rechazaste y cómo pudiste te paraste y le dijiste que tu tenías novio, con eso me sentí en las nubes pero sabía que debía bajarme de ellas, cuando Kai me dijo que te pidió disculpas y te pidió que fueran amigos y tu aceptaste y que a partir de ahí tú y ese tipo se empezaron a verse constantemente, Kai me lo describió y caí en cuenta que ya hasta lo conocía, una vez que fui por ti estabas con el si un chico de piel clara, alto y de cabello azul (maaldito). Así fue como supe que no había logrado nada contigo, fue triste pero era la realidad, decidí no decirte nada, quería disfrutar nuestra semana de despedida, y así fue una semana hermosa, en verdad te portaste como si fuéramos novios de verdad te agradezco tanto por los bellos momentos que me llevo y sinceramente espero que seas muy feliz aunque no sea conmigo.
Ayer fue el último día que nos vimos, fuimos al parque, al cine y por último a mi casa te hice el amor como nunca antes quería llevar tu nombre tatuado en mi piel, me pareció que gemías más fuerte que nunca eso me animo pero dentro de mi sabía que todo era de mentiritas.
Hoy por la mañana salí muy temprano de mi casa, para que no lo notaras ya tenía mis maletas listas. No quería despedirme de ti no quería oír salir de tu boca un adiós. Solo bese por última vez tus labios y me fui. Deje ordenes que te atendieran y de que cerraran la casa cuando tú ya te hubieras marchado, no te dije a qué hora me iba, no quería que vinieras a despedirte.
Aaaahhhhhhh que rápido paso el tiempo ya no tarda en salir mi vuelo, bueno me iré alistando – se encamino a la sala de espera con su maleta en mano, caminaba a paso triste y desanimado – si te hubieras enamorado de mi todo hubiera sido tan diferente.
Horas antes en la casa de Uruha.
- Uru donde estas – se despertaba ruki – uruuuu – decía sin recibir respuesta alguna. – uru ya te fuiste, porque yo quería despedirme de ti, yo quería decirte que te…– que te amo. No porque maldita sea, te dije que me terminaría enamorando de ti. – en sus mejillas comenzaron a verse descender lágrimas – porque me dejaste sin decir nada, pensé que tal vez te convencería de no irte. – dijo mientras se levantaba y se dirigía al baño.
Después de que salió de bañarse oyó el timbre de la puerta, una de las empleadas de la casa abrió la puerta e hizo pasar a quien había llegado. Salió presuroso, tal vez era Uruha quien había vuelto por el eso pensó.
- Uruvolvis…- su voz se acallo al ver que no era Uruha, eran Kai y Aoi –
- Ruki y Uruha veníamos a despedirnos y a llevarlo al aeropuerto
- Él ya se fue y no se despidió ni de mi – les contesto en medio de lágrimas.
- Pero porque lloras ruki, sabías que eso iba a pasar a menos de que tu… te enamoraste de él – bingo
- Si y perdidamente y ahora ya se fue y no volveré a verlo nunca más – decía mientras abrazaba desesperadamente a Kai –
- Y Sakura, el no te importa –
- Sakura el que tiene que ver el solo es un amigo, él fue quien me hizo darme cuenta de lo que sentía por Uruha – su amigo oh rayos –
- Entonces deja de llorar y vámonos aun lo alcanzas su vuelo todavía va tardar en salir. – decía Aoi mientras lo jalaba del brazo –
- Pero él no me ama – le dijo resistiéndose a salir –
- Eres un tonto él acepto este jueguito porque te amaba y quería estar aunque fuera un poco más cerca de tu corazón, ya no digas tonterías y vámonos – los tres salieron rápidamente de la casa y se subieron al auto de Aoi y sin tardar mucho se pusieron en marcha al aeropuerto era una carrera contra reloj pero tenía la esperanza de ganarla.
Pasajeros con destino a chicago Estados Unidos, por favor pasar a abordar en la puerta número 5.
Aaahh ese es mi vuelo, me voy de mi tierra hermosa, dejando lo que más amo aquí, lástima que no fui correspondido, pues al mal paso darle prisa. – tomo su maleta y forma en la fila de abordaje, con una lagrima en su rostro.
- Señorita el vuelo hacia chicago ya salio – preguntaba ruki desesperado –
- No joven apenas están abordando, aun alcanza a abordar corra –
Ya dentro del avión.
Buenos días pasajeros soy su capitán quien los llevara a su destino la hermosa ciudad de Chicago por favor pónganse los cinturones durante el despegue, les deseo un buen viaje.
- Buen viaje si como no, como él ya se acostumbró a andar de un lado a otro – se decía mientras se colocaba el cinturón.
Rato después.
Queridos pasajeros les informo que ya pueden quitarse el cinturón de seguridad ya estamos estables, tengan un buen viaje.
- Como jode este con el pinche buen viaje – dijo en voz alta, por lo que se ganó las frías miradas de los demás.
Se reacomodo en su lugar y se dispuso a dormir, cuando de repente sintió como unas manos atrapaban las suyas.
- Qué diablos pasa – fue lo que dijo antes de abrir su ojos y ver quien era la persona que lo agarraba – ruki – dijo en un suspiro al ver que era el pequeño rubio hincado aun lado de él.
- Shh, Uruha desde hace tiempo yo quería decirte que te amo y que quiero que seas mi novio, pero esta vez de deveritas. – no podía creerlo en verdad era ruki declarándosele, no estaba soñando no era un espejismo. – pensaba esto mientras el más pequeño le colocaba una rosa en las manos como el antes ya lo había hecho – que dices uru, quieres que lo intentemos – le dijo al no recibir respuesta del mayor.
- Si si quiero yo también te amo – levanto al más pequeño para poder besarlo – y el tal Sakura – querías arruinar el momento –
- Y dale con Sakura que el es solo un amigo, también Kai pensó que yo tenía algo con él, pero no es así solo somos amigos, me crees verdad.
- Claro que te creo volvió besarlo.
- Jóvenes irrespetuosos que no ven que estoy yo aquí a lado de ustedes.- dijo la señora que estaba sentada junto a Uruha.
- Lo siento señora si quiere podemos cambiar de lugar el mío esta tres filas adelante. – le dijo ruki
- Está bien solo porque no quiero quedarme a ver su espectáculo – dijo molesta mientras se levantaba y empujaba a los dos del coraje. Ya sin quien molestarlos, ruki se sentó a lado de Uruha.
- Y como fue que subiste al avión – le preguntaba el mayor.
- Pues mira corrí tras el golpe a todo el que se puso a mi paso me subi y aquí estoy jajajaja –
- No ya enserio
- Jaja está bien, cuando Aoi me hizo ver que tú también me amabas corrimos hacia el aeropuerto y ya aquí pregunte si aún había boletos y que crees si había compre uno y aborde, no sin antes robarme una rosa de la recepción xD
- Jaja hiciste todo eso por mí.
- Hace una semana cuando me pediste que actuáramos como novios de verdad te dije que haría eso y más por ti y lo dije porque en verdad te amo, un mes fue más que suficiente para aprender a amar. Y ahora viviremos experiencias verdaderas juntos.
- Te amo mi novio de deveritas, llegando a Chicago quiero reconciliación – le dijo al oído mientras comenzaba a besarle el cuello –
- Ohhsiiiiiiii
FIN