Dignidad
Entraba a su recamara esperando encontrarlo ahí, sabía que debía estar molesto tal vez no le hablaría en días, pero aun así esperaba que estuviera ahí, esperanza que murió al no verlo por ninguna parte, comenzó por llamarlo a su móvil pero nada de inmediato su llamada era enviada al buzón de voz.
-¿ruki dónde estás? maldita sea – decía mientras aventaba contra el suelo su móvil – debo ser paciente seguro no quieres verme hoy, tal vez mañana ya estés aquí – intentaba tranquilizarse – volverás ¿Cierto? – lanzaba la preguntaba al aire.
De pronto noto la existencia de una carta sobre su buro, por un momento paso por su mente el contenido de aquella carta, pero quiso pensar que no debería adelantar conclusiones, solo era una carta que tanto daño podía causarle, se acercó al lugar donde esta se encontraba, sin siquiera tomarla pudo notar que estaba dirigida para él, un poco tembloroso la tomo entre sus manos, debía admitirlo tenía miedo de leerla, después de lo que le había dicho en la mañana a su novio sería tonto esperar dulces palabras de aquella carta, pero quería creer que sería así, estaba consciente de que lo que le había dicho a ruki había sido la peor canallada de su vida, se sentía horrible pero en su momento no supo más que hacer para conseguir la aceptación de su padre. La carta decía:
Para: Aoi
De: Ruki
Te preguntaras por que no estoy en casa en estos momentos, de seguro ya hiciste toda una escena, posiblemente hasta necesites comprar un nuevo teléfono ya debiste haberlo azotado contra algún lugar por no verme ahí esperándote para estar a tu disposición, lamento informarte que ya no será así, de hoy en adelante llegarás a esta casa para estar solo, me he ido para jamás volver, espero que no seas tan cínico como para preguntarte el motivo de mi partida, pero como seguro lo eres te lo diré.
Sabes que nuestra relación no comenzó como las demás relaciones “normales” de este mundo, sabes que comencé a salir contigo para olvidar a mi antiguo novio, razón por la que sentía sumamente culpable al ver el amor que me profesabas y no poder corresponderte de la misma manera. Recuerdo las tantas veces en las que me maravillabas con tus muestras de afecto y devoción, si por lo menos no te amaba si sentía un gran cariño y respeto hacia ti, llegaste en el momento en que más destrozado estaba.
Siempre me sentí en deuda contigo pensé que debía hacer lo que fuera con tal de devolverte un poco de la felicidad que tú me dabas, aunque pronto note cierto cambios tuyos que no me esperaba, al principio fuiste muy paciente conmigo con respecto a mi relación anterior, entendías el hecho de que yo lo siguiera amando pero toda tu paciencia se agotó aquel día en que él volvió a buscarme.
Recuerdas ese día.
Uruha vino a mi oficina para decirme que estaba arrepentido de haberme dejado por ella, que seguía enamorado de mí, tal vez si no hubieras llegado le hubiera creído todas y cada una de sus mentiras, pero no, tu llegaste justo cuando él intentaba besarme, lo tomaste de su ropa, no estoy seguro pero recuerdo haber visto que lo golpeabas antes de lanzarlo fuera de mi oficina para después decirle unas cuantas amenazas de que no volviera a acercarse a mí nunca en su vida. Después de eso recuerdo haber sentido la palma de tu mano sobre mi mejilla, no era una caricia sino una bofetada, me reclamaste el haber estado tan cerca de Uruha, me echaste en cara todo lo que habías hecho por mí y yo aun así seguía sin corresponderte de la misma manera, otra vez me sentía culpable, te pedí disculpas hasta por el hecho de haber nacido sin amarte.
A partir de aquel día te volviste posesivo y obsesivamente celoso, ni una mosca podía acercárseme, aún recuerdo las miles de escenitas que me hiciste frente a mis amigos, creías que te podía engañar con cualquiera de ellos. Pero te daba toda la razón, aunque ahora no estoy seguro de que la tengas o la hayas tenido.
En fin, mi mayor sorpresa fue cuando salió tu lado más obscuro y sado masoquista si quieres verlo así, ese día yo no quería tener sexo pero tú me obligaste y no solo eso me hiciste participar en cosas en las que yo nunca me hubiera metido, al parecer mis lágrimas y suplicas contrario a lo que pudiera pensarse te excitaban, tuve miedo, después de que acabaras tuve aún más miedo, llore como nunca lo he hecho en mi vida, pero fue como cuando pruebas por primera vez un cigarro, te sabe asqueroso, te saca algunas lágrimas y al final juras no volverlo a hacer, pero queda esa extraña sensación de volver a hacerlo, así fue seguimos teniendo sexo con ese tipo de prácticas, que poco a poco fueron dejaron de ser aborrecibles, ya no me daba miedo, digo tampoco era tan anormal lo que hacíamos, eran simples detalles durante el sexo que lo hacían más emocionante, viéndolo desde ahora me divertí mucho aquellas noches, había olvidado por completo a Uruha, ahora mi mundo giraba completamente a tu alrededor, no sé si era amor en ese momento solo sé que ya no podía vivir sin ti.
Nunca hubo golpes aparte de los que de vez en cuando adornaban nuestras noches de pasión, los cuales nunca fueron dados con el intento de lastimar al otro solo de provocarlo, pero recuerdas que hace poco discutimos y esta discusión nos llevó a los golpes, al día siguiente nos pedimos perdón mutuamente, creo que ambos entendíamos que ninguno tuvo la intención de dañar al otro, que la situación se nos salió de las manos, y así todo siguió como antes, de una manera yo ya te amaba, te lo dije pero creo que aún no confiabas en mí.
Aoi te amo y tal vez te amare por mucho tiempo más, te dije que haría cualquier cosa por ti, porque a pesar de todos los problemas y dificultades que teníamos entre ambos yo te amaba y sabía que tu solo tenías ojos para mí, sé que nunca me engañarías, yo no soportaría que tuvieras a alguien más así como tú no soportabas que nadie más se me acercara, estaba bien quedarme completamente sin nadie siempre y cuando nos tuvieras el uno al otro, así solo fuéramos tu y yo.
Y es que no solo era por esa manera adictiva y enferma si así lo quieres ver de tener sexo, tal vez para muchos éramos unos enfermos pero cada que estaba contigo no hacíamos nada enfermo simplemente nos entregábamos el uno al otro completamente sin reservas, es más tu y yo nunca tuvimos sexo siempre hicimos el amor. Amo tus ojos, tus labios y esos a veces dulces y tiernos o duros y apasionados besos, amo tus manos y las caricias que con ellas me dabas, amo tus gestos, tus gustos, amo cuando me haces berrinches por no quererme quedar en casa en lugar de ir a trabajar, Aoi te amo no olvides.
Pero después de lo que me pediste hoy no creo poder seguir a tu lado, sabes con o sin el apoyo de tus padres yo estaba dispuesto a todo para que estuviéramos juntos, te lo dije aunque tuviéramos que estar solo tú y yo contra el mundo entero.
Hoy en la mañana te levantaste temprano para ir a hablar con tu padre, insistes en que el acepte lo nuestro a pesar de que te ha rechazado prácticamente desde que naciste, perdóname si me expreso de ese modo pero debo sacar todo lo que llevo dentro, pues bien después de un rato recibí tu llamada.
*flash back*
- moshi moshi – respondía el pequeño castaño –
- ru… ki eh… soy yo amor – le contestaban –
- hola amor ¿Cómo te fue? Mira si sigue sin apoyarnos no importa, por favor vuelve a casa te extraño –
- ru él dice que está dispuesto a aceptarnos…-
- en serio esa es una gran sorpresa pero porque te oyes triste… - era interrumpido
- siempre y cuando tú cierres el contrato que tanto ha buscado con la corporación de los Suzuki –
- bueno lo haré, pero como es que yo podría cerrar el trato, no es que no entienda el negocio de tu padre, trabaje varios años para la compañía Shiroyama, pero desde que empezamos a salir juntos deje aquel empleo, dime como es que puedo ayudar –
- ruki – dijo casi llorando del otro lado de la línea – acostándote con su presidente con Akira Suzuki – el pequeño castaño quedo helado ante tal proposición –
- es broma ¿Verdad?, no puedes estarme pidiendo esto, además porque ese hombre querría estar conmigo, Aoi dime que es broma – le suplicaba el pequeño –
- dice que te vio en una reunión a la que ambos asistimos, que lo flechaste desde el primer momento que te vio, pero como esta casado dice que se conformaría con una sola noche contigo que si lo haces firmaría el contrato con mi padre y así mi padre aceptaría nuestra relación, ruki será solo una vez te lo prometo, amor hazlo por mí – después de esto hubo un enorme silencio – sigues ahí ruki –
- está bien – respuesta que el mayor interpreto como un sí, aunque para ruki no fue nada más que su salida para colgar el teléfono, en realidad no sabía si lo haría o no –
- Gracias ruki te amo no lo olvides –
- yo también te amo –
*Fin Flash back*
Después de que me pidieras aquello llore por mucho tiempo, te dije que no me importaba estar solo sin amigos, sin familia, siempre y cuando estuviéramos solo tú y yo.
Aoi yo hubiera dado todo por ti por el simple hecho de que fueras solamente mío y yo fuera solamente tuyo. Pero a ti no te importaba más que quedar bien con tu padre sin importante lo que yo sentiría con tal decisión que tomaste por ambos.
Si te importa más tu padre quédate con él y su maldita aceptación yo me voy, no estoy dispuesto a perder lo poco que me queda de dignidad y amor propio, alguna vez alguien me dijo que para amar a alguien debía amarme primero, cuando salía con Uruha me olvide de mi deje que me manipulara que me destrozara, pero no era amor lo que me ataba a él sino la necesidad de ser apreciado por alguien más, ¿lo que me tenía atado a ti en verdad era amor?, lo era.
Aoi adiós, perdóname si te causo algún dolor, pero tu elegiste a tu padre antes que a mí y aun que no logre entender por completo el por qué siempre has buscado que él te acepte ya que yo no tengo padre, pero si una madre que vale más que nada.
Voy a extrañar tus labios, tus ojos, la manera en que besabas mi cuello a la hora de hacer el amor, los desayunos que me preparabas antes de irme a trabajar, tal vez sienta algo de alivio ahora que no habrá quien me cele todo el tiempo, pero creo que extrañare hasta nuestras peleas y reconciliaciones. Pero no dejare que me arranques lo único que me queda intacto en estos momentos mi dignidad, ni siquiera para llegar al lugar donde estuve acepte cerrar los tratos de esa manera y mucho menos lo hare por tu padre que tanto me odia.
No me busques no volveré nunca, adiós para siempre, y te recomiendo que si vuelves a tener una pareja consideres que es más importante si su amor sincero o la falsa aceptación de tu padre.
Aoi te amo no me voy porque no te amé ten eso presente, te amo y te amare por siempre pero prefiero guardar un buen recuerdo antes de vivir algo que destrozaría todo mi ser, sé que nunca te perdonaría el hecho de que me hicieras acostarme con ese tipo siempre lo recordaría y te guardaría rencor, me voy para no dejar de amarte.
Te amo
Con esa última línea terminaba la carta.
- Ruki no, tu no pudiste haberme dejado – decía mientras la lagrimas ya inundaban su rostro – yo también te amo, debes saber lo que paso –
Salió corriendo de su casa debía encontrar a ruki, empezó buscando con los amigos del menor, uno de ellos Kai, quien le dio respuesta a su búsqueda.
- Kai ¿sabes dónde se encuentra ruki? –
- Lejos de ti para su fortuna –
- Por favor dime donde necesito explicarle lo que sucedió después –
- Eres un maldito, en verdad crees que lo convencerás de que se acueste con ese maldito de Suzuki, no puedo creer que hayas llegado a tanto pensé que en verdad lo amabas –
- Kai lo amo y no tengo la mínima intención de que se acueste con ese idiota por favor déjame explicarte, por favor –
- Entonces, cuéntame todo y que sea la verdad, pero hazlo rápido que si te creo debo decirte donde esta, bueno y para ver si lo alcanzas –
- Se va ir ¿donde? –
- CUENTAME!!! –
Después de contarle Kai quedo completamente convencido de que Aoi no tenía la intención de que ruki hiciera algo así, en verdad el pelinegro lo amaba con todo su corazón.
- Ahora corre, ya te dije donde esta espero aun no se haya ido con su madre que si no, no creo que lo encuentras, ni yo se donde vive –
- Si voy y Kai muchas gracias –
- De nada ya vete y en verdad que eres estúpido pero ya ve anda –
El pelinegro se fue lo más rápido que pudo hasta llegar al domicilio al que Kai le había indicado que fue, casi rompe en lagrimas al notar que ruki aun no se marchaba pero ya tenía sus maletas listas a punto de ser subidas al taxi.
- Por favor ruki espera – lo llamaba mientras corría hacia él.
- De prisa suba todo – le decía al taxista – a que vienes, pero más importante quien te dijo como encontrarme, No me digas que golpeaste a Kai – la sola idea de que hubiera lastimado a su amigo lo hizo estremecer –
- No – se detuvo en seco, si era algo impulsivo y de repente muy celoso y posesivo pero nunca golpeo a ninguno de los amigos de ruki, solo golpeaba a los que no eran sus amigos – el me lo dijo sin necesidad de llegar a eso, solo le dije la verdad que tu no quisiste oír, por favor solo te pido unos minutos, no te vayas por favor –
- Esta bien, pero que sea aquí –
- ¿En la calle? –
- Si aquí, vamos empieza –
- Ok mira sé que piensas que soy un canalla al haberte pedido eso –
- Y no lo eres – lo miraba sin mucho interés –
- Lo soy bueno deja sigo, mi padre si me pidió eso pero yo no tenía la intención de que lo hicieras, solo te llame y te lo dije por que sus hombres no me dejarían salir si no lo hacia. Después de la primera llamada te hice otra para explicarte como había estado el asunto para que no pensaras que yo sería capaz de proponerte algo así pero tu ya no contestabas, después llegue a casa para explicarte todo pero igual ya no estabas vi tu carta y te juro que entendí tus motivos pero ruki yo te amo y no quiero que te vayas de mi, te amo mucho antes de que me conocieras, antes de que salieras con Uruha yo ya te amaba, si de repente expreso mis sentimientos de una forma rara pero son las únicas maneras de tratar de sacar todo lo que siento por ti, también sé que mis celos son un problema pero ya estoy en terapia –
- ¿terapia? ¿De que demonios hablas? –
- Pues bueno cuando casi golpeo a tu primo ese ¿como se llama? –
- Yo-ka – dijo algo molesto al recordar la ocasión –
- Si ese, me di cuenta de que te lastimaba más a ti que a los que yo les echaba pleito, que ellos se disgustaban un rato y cuando se iban lo olvidaban, pero tu eras el que quedaba triste por mis actos y eso no estaba bien debía hacer algo así que desde ese entonces tomo terapia lunes y jueves para controlar mis celos, es algo medio estúpido lo sé pero creo que a surtido cierto efecto ¿no crees? –
- Bueno creo que algo, entonces no vienes a pedirme que me acueste con el tal Akira Suzuki –
- Nooo, si ese maldito se te acerca lo mato, lo hago pedacitos y lo sirvo de cena a sus padres –
- Jaja creo que necesitas más sesiones de terapia – decía riendo a carcajadas lo que le saco un sonrojo a Aoi –
- Entonces me crees, sé que piensas que siempre quiero complacer a mi padre y bueno es corrijo era cierto, siempre quise que aprobara lo que yo hacia, pero se trataba de mi no de ti, cuando te puso en medio y más en una situación así me dio una rabia inmensa, le dije que no que ni lo pensara y ahí cuando me encerró hasta que yo te hiciera aquella proposición, no me importa si me acepta o no, con que no se meta contigo es más que suficiente, ¿me perdonas si? –
- No se si creerte, fue duro recibir aquella llamada mmm – decía para torturarlo un poco, que sufra se decía ya que él había pasado llorando todo el día que el sintiera un poquito lo que el sufrió en la mañana –
- Por favor te amo – le tomaba las manos entre las suyas cosa que a ruki lo hizo sonrojar ya que el taxista los miraba como si fueran lo más extraño del mundo –
- Yo también te amo tonto, pero jamás me vuelvas a hacer algo así te juro que a la siguiente si te dejo y me llevo a tu perro para que te duela más – ahora ruki le acariciaba la mejilla – nos vamos de viaje Nee? –
- ¿ahora? – decía sorprendido –
- Si ya gaste en mi boleto a casa, anda vamos a mi mamá le vas a caer de maravilla, le he hablado mucho de ti muere por conocerte – le decía sonriente y amoroso –
- Entonces vamos, quiero conocer a mi suegris – ambos abordaron el taxi no sin darse un beso antes de subir.
Ya en el avión.
- Te amo Aoi no lo olvides, pero también me amo lo entiendes ¿cierto? –
- Ru yo también te amo y prometo no lograr que dejes de amarte, amo lo que eres ahora, fuerte y capaz de superarlo todo, si estuvieras como una marioneta sería aburrido, te amo por que tu te amas y de paso me amas a mi, prometo mejorar mis actitudes no solo por ti si no por los dos –
- Gracias, bueno ahora bésame si mucha platica poca acción – se besaron hasta que ya no pudieron más, a pesar de todo se amaban y quien les dijo que la vida en pareja sería facil, habría momentos en los que tendían que decidir que era más importante.