Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

El destino nos unió y nos separó...¿Estás seguro de que no nos volverá a unir? por X-Dvir

[Reviews - 2]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Bueno con he subido ya tres fics, uno de ellos, aparte de este, está sin terminar pero es que la ispiración se me a quedado dormida y los comentarios no son muchos :( pero los que tengo los agradezco mucho :)

Bueno espero que les guste esta historia, la escribí hace bastante tiempo, agradesco que aunque sea la mirarán :D

Notas del capitulo:

Bueno espero que les guste aunque este cap es un poco corto, prometo que los demás serán más largos, lo juró.

Bueno aqui tienen el cap  :D

CAPÍTULO 1: El inicio el destino es cruel.

Acababa de tener una pesadilla. Desde ese momento sabía que algo malo le iba a pasar, pero no se imaginaba lo que cambiaría  su vida desde esa noche.

 Cuando despertó era todavía de noche, no podía dormir, no después de aquel mal sueño. Estaba asustado. Así que decidió ir a la cocina a buscar un poco de agua para intentar tranquilizarse. Había soñado que todo el mundo lo ignoraba, que a nadie le importaba nada de él, que nadie se quedaba a su lado, estaba solo. Después de beber agua se tranquilizó así que decidió ir de nuevo a su  cuarto, pero se dio cuenta de que la luz del salón estaba encendida, cosa que le pareció extraña, pero tenía miedo por lo que no la apagó, ni siquiera pasó por ahí. Subió las escaleras y se durmió.

Cuando despertó, ya era de día, le parecía raro, no olía el desayuno ni oía el ruido de la sartén al freír el beicon. No se oía nada. Silencio, puro silencio. Bajó las escaleras, en pijama, y se dio cuenta que la luz del salón seguía encendida, pero a diferencia de la otra noche esta vez se acercó a apagarla. Cuando entró vio todo el suelo lleno de un liquido rojo, que estuvo a punto de pisar, y al asomarse se dio cuenta que una mata de pelo asomaba detrás del sillón, así que decidió acercarse más y vio a su madre en el suelo y una pistola a su lado.

El pequeño trató de despertarla pero no pudo.

De repente apareció la vecina, la señora González, una señora bastante joven y muy amable a la que todos llamaban Pepa, que había entrado:

-Señora Gómez, perdone por entrar sin llamar pero es que la puerta estaba abierta y me preguntaba si tendría…Señora Gómez, señora Gómez está usted en casa, señora Gómez…- justo en el momento en el que decía eso entró en el salón.

 Y vio esa espeluznante escena, la de un niño con su madre, llena de sangre, entre sus brazos. Era una escena sacada de una película de terror. Pepa sin pensárselo mucho cogió su móvil y llamó a la ambulancia y a la policía. Cuando colgó el teléfono se agachó. Gritaba desesperadamente y lloraba, mientras silenciosamente el niño se apartaba a una esquina y se acurrucaba, sin derramar ni una lágrima, con el pelo castaño oscuro deslizándose cayendo hasta sus ojos negros que miraban sin pestañear, estuvo en esa esquina hasta que llegó la ambulancia junto con la policía.

 

Cuando llegó la ambulancia intentaron hacer todo lo posible para reanimar a la señora pero no pudieron, ya se había desangrado. En cuanto a la policía, tomaron fotos del lugar y de la víctima que yacía muerta, mientras hacían eso uno le preguntó a Pepa sobre lo que había presenciado y de la relación que tenía con la víctima, desde que habían empezado a hablar el policía que estaba interrogando a Pepa se giró hacia el niño, que todavía seguía en la esquina del pasillo en el que estaban hablando, sin moverse, con los ojos fijos en la habitación en la que había encontrado a madre.

El policía se acercó a él y se acuclilló, era joven, de unos dieciocho a veinte años, tenía el cabello rubio y unos ojos marrones claros, parecía bastante amable.

-Hola pequeño, ¿te encuentras bien?                                                           

-Señor policía… ¿Cómo está mi mamá? ¿Está bien verdad?- el policía se quedó callado, pero él siguió- ¿verdad?, ¿ella no se hizo daño, verdad? ¿Cómo está mi mamá? ¿Dónde está?

 -Pequeño, ¿cómo te llamas?...yo me llamo Diego, ¿y tú?-el niño no respondía era como si no le estuviera escuchando pero se dio cuenta que no era así.

-Señor Diego, ¿dónde está mi mamá? ¿Y que es esa bolsa grande que se están llevando?-la niña no quitaba los ojos de la bolsa desde que la estaban sacando del salón.

Cuando ya habían logrado sacar la bolsa del salón, con un poco de esfuerzo y agilidad, tropezaron con la pared y el brazo del cadáver se salió de la bolsa y fue visible para todos. Cuando el joven vio el brazo se dio cuenta que algo no iba bien, entonces miró a Pepa, que estaba llorando, y entonces supo lo que pasaba y no dudo en preguntar:

-Señor Diego, ¿mi madre está….?-no pudo continuar su boca se había secado.

-Lo siento pequeño, han hecho todo lo que han podido pero no la han podido salvar, se ha ido a un lugar mejor- el policía no podía dejar de llorar por aquella pequeña criatura que había perdido a su madre y había quedado huérfana, pero para su sorpresa el niño no estaba llorando tenía los ojos fijos en ninguna parte.

Cuando Diego lo miró supo que él no le iba a responder en ese momento por lo que se giró asía Pepa y le dijo:

-Señora González, ¿cómo se llama el niño? y ¿qué edad tiene?, a por cierto ¿sabe de algún familiar?- Pepa se secó los ojos he intento tranquilizarse para poder responderle

-Se llama Adalberto Guillermo, y si no me equivoco… tiene ocho años y de su familia solo sé que el marido de la señora Gómez desapareció sin dejar rastro  después de su separación.

-Muchas gracias señora, ha sido de gran ayuda para noso…

-Perdón por interrumpirlo pero ¿qué harán con el pequeño?

-La llevaremos a un orfanato por el momento, hasta que encontremos a algún familiar y…

-¿A cuál la llevaran? me gustaría ir a visitarlo y hablar con…

-Perdón no sabemos a cuál va a ir pero se lo diré en cuanto lo sepa.

-Muchas gracias señor

-De nada, pero me puede llamar Diego, señora

-Muy bien… Diego

-Bueno ya la llamaremos, ahora me llevo al niño, adiós.

Diego cogió al niño en brazos y la metió en el coche, que arrancó,  y que se estaba alejando de la casa poco a poco, dejándola atrás y con ella  el alma de un niño al que le iba a costar bastante olvidar el suceso tan trágico que había tenido lugar en esa casa, el hogar que tendría que dejar junto con todos sus recuerdos y quizás su sonrisa y toda su alegría junto con su vida, pero eso solo lo podía decir el tiempo y el destino, que había hecho girar la ruleta de no solo un pequeño inocente sino de muchas personas que compartirían un futuro incierto el de algunos entrelazado con el de otros y otros simplemente seguían su camino solitario y triste.

Notas finales:

Me alegró que llegarán hasta aqui y que si no les importa me comenten algo.

Digamos que mi mente solo trabaja si alguien disfruta con ello y por eso necesito saberlo.

Aunque no comenten os doy las gracias a todas aquellas personas que llegaron hasta aqui.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).