Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Recuerdos de alguien a quien solías conocer por A Neko chan

[Reviews - 7]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

*suspiro* Bien, yo quería publicar esto antes pero como siempre se me hacía tarde para la uni y no pude porque tenía que editar cosas y eso. Ahora con un poco más de calma me poco a editar esto.

Bueno esto esta basado en la canción de Goyte y Kimbra "Somebody that I used to know" así que si pueden escuchar la canción mientras leen el fic, probablemente le de un efecto más dramatico...

También, para aquellos que no lo sepan, este es mi regreso a escribir en Amor Yaoi... Actualmente trabajo en los fanfics inconclusos (por si alguien aqui los estaba leyendo) así que tenganme paciencia

Notas del capitulo:

Originalmente posteado en mi LJ, aún trabajo en meter más Kpop (por ahora solo esta lleno de Jpop) pero si alguien quiere leer mis fics estan aquí

Una persona normal tiene muchas cosas que recordar: compromisos, viajes, aniversarios, personas… No todos saben recordar y probablemente muchos tienen problemas a causa de ello. Olvidar una junta de trabajo puede ser muy problemático, sobre todo si hay un ascenso de por medio, o tal vez olvidar tu aniversario y provocar que tu pareja se enoje.

 

Pero hay personas que tienen una memoria esplendida, recordando todos los detalles de un dulce encuentro o las desgracias de un terrible accidente, los tonos en que se tiñe el cielo cuando amanece o el llanto desconsolado de un niño.

 

Los artistas tienden a entrar en esa categoría, si bien no es necesario que recuerden todo y a todos deben saber que decir y cuando decirlo, recordar cómo comportarse frente a las cámaras y los lugares donde deben de estar. Los actores tienen que recordar  sus diálogos y sus posiciones, los cantantes la letra de la canción, los tiempos y los pasos de un baile. A veces mientras más fantástica es tu memoria mejor eres… aunque necesitas talento, claro.

 

Es inusual encontrar a dos personas que entren en estas categorías pero no es imposible. En los casos más extraños uno puede olvidar todo a voluntad y el otro no puede hacerlo. Se complementan pero se contradicen, la ironía de la vida actuando en las relaciones humanas.

 

Jiyong entra en la primera categoría. Él es capaz de recordar los acordes de una canción aunque la haya escuchado por primera vez pero puede olvidar la reunión de viernes por la noche con su manager (que nunca sonreía) y el jefe de la compañía (a quien nadie nunca podía complacer). Jiyong nunca se aparecía a tiempo porque odiaba esas reuniones y su mente se encargaba de suavemente arrojarla fuera de su cerebro, obligando al manager a buscarlo por todo el edificio y a veces por toda la ciudad.

 

Pero a nadie le daba gran importancia a eso. Jiyong es un gran cantante y compositor a quien el público aclama. La empresa le debe mucho, sus compañeros le deben mucho, por eso nunca escucharás que alguien se burle de su mala memoria. Nadie nunca se quejará de que Jiyong nunca se presente a las fiestas que organizan sus compañeros y que en lugar de eso prefiera ir a comer soba a las afueras de la ciudad.

 

Nunca lo harán porque necesitan a Jiyong.

 

Seunghyun es un caso totalmente diferente. Él asiste puntualmente a todas sus reuniones, si alguien le pide que este en el estudio a las 6 de la mañana para iniciar la grabación, Seunghyun estará ahí. O si un amigo le hablaba a mitad de la noche para contarle un problema él lo escuchará sin quejarse e intentará ayudarlo.

 

Seunghyun es capaz de recordar la euforia y el miedo de la primera vez que subió a un escenario y lo mucho que le dolió cuando su padre dejó de hablarle por haber elegido ser artista en lugar de un abogado. Él sabe que no debe de hablar acerca de sus reuniones con su madre frente a Youngbae porque a su compañero le duele no poder ver a la suya tan frecuentemente, o que Daseung se morirá de risa cada que cuente un chiste aunque lo haya escuchado millones de veces.

 

El que dos personas tan diferentes trabajaran juntos era increíble, pero ellos dos eran un equipo imbatible. Eran de los más populares en la compañía y a menudo sus compañeros los felicitaban por su buen desempeño en el escenario, porque su relación era una ironía.

 

Tal vez fue esa ironía lo que provocó que se enamoraran. Al principio ninguno de los dos se dio cuenta, pero poco a poco la existencia del otro se volvió indispensable en su vida.

 

Now and then I think of when we were together

Like when you said you felt so happy you could die

I told myself that you were right for me

But felt so lonely in your company

But that was love and it's an ache I still remember

 

De vez en cuando pienso en cuando estábamos juntos

Como cuando dijiste que te sentías tan feliz que podrías morir

Me dije que eras para la indicada mi

Pero me sentía tan solo en tu compañía

Pero ese fue un amor y es un dolor que aun recuerdo

 

Comenzaron siendo conversaciones casuales durante los descansos, cosas comunes como lo que habían comido en la cena el día anterior o la manera de conseguir hacer un paso de baile, pero poco a poco las conversaciones cambiaron, se volvieron más profundas, más… pasionales.

 

Ninguno de los dos supo cómo, pero sentían que podían confiar en el otro. Tal vez Jiyong necesitaba que alguien lo escuchara, tal vez Seunghyun quería escuchar, pero simplemente ambos se sentían libres de decir que se sentían frustrados en algún momento o que estaban cansados de las constantes giras porque sabían que el otro los entendía.

 

“¿Sabes que me encantaría?” preguntó un día Jiyong. “Quisiera viajar… Dejar todo esto atrás y comenzar a viajar. Tomaría fotos de todos los lugares a los que fuera y las pegaría en la pared de mi habitación.”

 

Seunghyun sonreía cada que él lo decía, y como siempre Jiyong lo repetía una y otra vez, y una y otra vez la respuesta de Seunghyun era la misma.

 

“Entonces llévame contigo” decía con la mirada perdida. “Así podría tomarte fotos y pegarlas en mi pared.”

 

Y después Jiyong reía antes de cambiar el tema hábilmente.

 

Ambos sabían que esas conversaciones donde hablaban sin inhibiciones lo habían cambiado todo. Era la confianza de saber que el otro jamás contaría su secreto, que podían contar fantasías ocultas al otro y que incluso él participaría en ellas.

 

Cuando Seunghyun lo dijo primero, Jiyong no quiso creerlo. Le parecía muy difícil que el mayor pudiera sentirse como él, sonaba demasiado bien para ser verdad…

 

Pero lo era, Seunghyun sabía que lo que sentía por Jiyong era diferente. Porque hablar con el menor, estar con él pese a toda la carga de trabajo que pudieran tener, lo relajaban y todos los días esperaba el momento en que Jiyong y él se sentarían uno a un lado del otro y comenzarían a hablar.

 

Y a Seunghyun le gustaba escuchar a Jiyong hablar… A Seunghyun le gustaba Jiyong.

 

-Jiyong…

 

-¿Mmm?

 

-Te amo

 

Y entonces Jiyong sonreía…

 

-Yo también…

 

Ninguno de los dos pudo notar que era solo felicidad pasajera…

 

Ninguno de los dos pudo ver como las cosas cambiaron…

 

De vez en cuando Jiyong recuerda. Recuerda esos momentos en los que Seunghyun lo tomaba en sus brazos y la manera en que sentía que su corazón iba a explotar cuando lo besaba. También, en esos días en los que estaban ocupados, recuerda como el mayor conseguía escaparse un rato para comprarle su café favorito, o como en las mañanas antes de los ensayos se acurrucaban en el sillón, esperando que los demás llegaran

 

De vez en cuando recuerda, no quisiera hacerlo, ni quiere admitirlo, pero él recuerda cuando comenzó a sentir que las cosas iban mal.

 

Una parte de él sabía que estaba dañando a Seunghyun al darle más prioridad a su trabajo que a su relación, pero debían guardar las apariencias. Nadie podía saber que ellos estaban juntos. Y por eso la habilidad de Jiyong para olvidar se volvió una gran herramienta en su vida.

 

No podía evitarlo, era algo que simplemente ocurría. Un par de noches se quedaba a trabajar hasta tarde por petición del productor, y Jiyong aceptaba porque jamás había fallado en su trabajo. Eso todo el mundo lo sabía.

 

A medianoche siempre recibía esa llamada. La voz de Seunghyun al otro lado de la línea, preocupado porque el menor no aparecía. Y era entonces cuando Jiyong recordaba que habían quedado de verse esa noche en el apartamento del mayor, o en el cine para ver esa nueva película que Seunghyun quería ver con él.

 

“Lo siento” repetía una y otra vez. “No vi la hora, lo siento.”

 

“Está bien” respondía Seunghyun una y otra vez. “Te esperaré.”

 

Pero Jiyong nunca llegaba antes de que Seunghyun se quedara dormido. Así que se escurría lentamente en el apartamento del mayor por las mañanas y se recostaba a su lado unas horas para verlo dormir.

 

Seunghyun era la felicidad de Jiyong. Él lo sabía, pero no hallaba la manera de expresarlo.

 

Después de sus fallidas citas, él siempre cocinaba para Seunghyun y era así como el mayor lo notaba.

 

Pero no fue suficiente…

 

“Debería habértelo dicho más”

 

Ahora ya era demasiado tarde…


You can get addicted to a certain kinda sadness

Like resignation to the end, always the end

So when we found that we could not make sense

Well you said that we would still be friends

But I'll admit that I was glad that it was over

 

Puedes volverte adicto a cierto tipo de tristeza

Como la resignación al final, siempre al final

Así que cuando descubrimos que no teníamos sentido

Bueno, dijiste que aun seríamos amigos

Pero admito que me alegraba que hubiera terminado

 

Jiyong no lo recuerda, pero Seunghyun sí. En cierta forma él ya estaba listo para el final.

 

Tal vez fue aquella vez en que Jiyong prefirió irse a beber con el resto del grupo en lugar de quedarse con Seunghyun a cenar. O tal vez cuando prometió que irían a cenar por su aniversario pero nunca se presentó.

 

Puede que Seunghyun lo recuerde, pero no sabe cuando fue. Simplemente un día recuerda haber pensado ‘él ya no me quiere’ y a partir de entonces la distancia entre ambos comenzó a crecer.

 

Pasaron de hablar diariamente por teléfono a apenas mirarse durante los ensayos. Y todo eso le dolía… Seunghyun necesitaba estar cerca de Jiyong pero la frialdad que ahora cubría su relación hacía que estar junto a él fuera aún más doloroso.

 

Entonces Seunghyun lo entendió… Entendió que tenía que dejar ir a Jiyong.

 

“Supongo que es lo mejor” dijo Jiyong sonriendo pese a las ganas inmensas que tenía de llorar. “Pero aún así seremos amigos, ¿cierto?”

 

“Por supuesto” asintió Seunghyun mientras intentaba mantener una expresión neutral aunque sentía a su corazón desgarrarse.

 

Ambos sabían que jamás podrían ser amigos, no después de todo lo que habían vivido y dicho, no después de saber que se amaban con locura y que aún así no podían estar juntos.

 

Pero Jiyong olvidó mientras que los recuerdos continuaban hostigando a Seunghyun.

 

“Tú querías que fuéramos amigos y sin embargo me has hecho a un lado”

 

Y es que, ¿para que necesitaría Jiyong a Seunghyun si tenía a toda una multitud que lo aclamaba? La fama, su trabajo, continuaba separándolos aunque su relación ya había terminado.

 

Y aun así, a Seunghyun no le dolía tanto…

 

O al menos eso era lo que pensaba.

Él no podía ver la realidad, no podía notar cuanto había cambiado su vida. No había manera en que él pudiera ver su dolor porque este lo había vuelto ciego. Seunghyun veía la vida pasar y no hacía nada por aferrarse a ella.

 

“Hyung, ¿te encuentras bien?” preguntó Seungri un día. Seunghyun lo miró sin ninguna expresión.

 

“Por supuesto”

 

“Entonces, ¿te gustaría venir a tomar un trago con nosotros?”

 

“Estoy cansado” respondió el mayor “Será otro día”

 

¿Cómo no podía notar eso? ¿Cómo era posible que no notara que se estaba aislando? ¿Cuándo había comenzado a dejar de disfrutar la vida?

 

Él no lo sabía porque no notaba todo lo que le faltaba.

 

Seunghyun no notaba lo mucho que extrañaba a Jiyong.

 

But you didn't have to cut me off

Make it like it never happened and that we were nothing

I don't even need your love, but you treat me like a stranger

And that feels so rough


No, you didn't have to stoop so low

Have your friends, collect your records

And then change your number

Guess that I don't need that though

Now you're just somebody that I used to know

 

Pero no tenías que hacerme a un lado

Fingir que nada había pasado y que éramos nada

Ni siquiera necesito tu amor, pero me tratas como un extraño

Y eso se siente tan duro

 

No, no tenías que caer tan bajo

Tomar a tus amigos, recoger tus records

Y entonces cambiar tu número

A pesar de todo creo que no lo necesito

Ahora solo eres alguien que solía conocer

 

Fue la necesidad que tenía de escapar lo que forzó a Jiyong a olvidar. Necesitaba escapar del dolor que sentía al no haber sido capaz de amar a Seunghyun como merecía.

 

Fue un impulso, pero lo abrumaba la soledad de su apartamento, de la sala de ensayos, de la limosina, cuando estaba con Seunghyun y no podía lanzarse a sus brazos. Eso era lo único que quería, que Seunghyun lo abrazara fuertemente mientras lloraba, mientras imploraba que lo perdonara y que volviera a su lado.

 

Cuando se dio cuenta estaba empacando sus cosas y mudándose a otro apartamento, lejos de todos los lugares que le recordaban a Seunghyun. Como aquella cafetería donde habían tenido su primera cita, o ese viejo banco en el parque donde se sentaban por las mañanas antes de ir a trabajar.

 

El nuevo apartamento era totalmente diferente al anterior y al mismo Jiyong. Era enorme, lujoso y estaba al otro lado de la ciudad, lejos de Seunghyun pero también de la compañía.

 

Aunque a Jiyong no le importó en absoluto. Todas las mañanas se despertaba entre las sabanas de seda que recién había comprado y tomaba una ducha en su enorme bañera. Después bajaba y cocinaba en su cocina de acero inoxidable y se sentaba a desayunar frente a su enorme pantalla plana.

 

Los lujos ayudaban a Jiyong a aclararse antes de conducir una hora y media hacia la compañía en su lujoso auto último modelo. Para cuando Jiyong llegaba al lugar, vestido con ropa de diseñador y con sus lentes obscuros cubriendo sus ojos, se sentía el rey del mundo.

 

El dolor que lo acompañaba siempre desaparecía y era capaz de sonreír… hasta que veía de nuevo a Seunghyun.

 

El mayor estaba molesto con la nueva actitud de Jiyong. Ese no era el Jiyong que el público pedía, no era el líder que necesitaba el grupo y definitivamente no era el Jiyong que él amaba.

 

Por eso cada que su mirada se encontraba con la del menor, no podía evitar reclamarle todo. Y eso provocaba que Jiyong sintiera deseos de huir de nuevo.

 

Pero no lo hizo. En lugar de eso se sumergió más y más en su trabajo. Pedía escribir las nuevas canciones, no solo de su grupo sino también de los demás. Nunca dejaba el estudio antes de las doce y participaba en todas las reuniones y fiestas que organizaba la compañía.

 

A todos les sorprendió el cambio pero estaban contentos con ello. Ninguno comentó el hecho de que Jiyong ahora recordara todo e insistiera en querer hacerlo todo, porque ninguno sabía que en realidad todo esto estaba destruyendo a Jiyong.

 

No pasó mucho antes de que él tocara fondo.


Todo comenzó cuando al intentar dormir imaginaba el rostro de Seunghyun. Eso bastaba para quitarle el sueño, y no importaba cuantas pastillas tomara, no podía dormir. Pero él estaba convencido en que eso le ayudaría, así que mientras menos podía dormir más pastillas consumía.

 

Después dejaron de ser solo pastillas. El día en que comenzó a consumir substancias más fuertes, Jiyong descubrió que al estar así sus heridas no dolían. Mientras consumía esas substancias tan tóxicas, los recuerdos de Seunghyun se desvanecían y era capaz de dormir.

 

Así que continuó consumiéndolas, al principio de vez en cuando, después un par de días a la semana pero llegó al punto en que eso no era suficiente y comenzó a consumirlas diario.

 

Generalmente solo lo hacía cuando estaba solo en su apartamento, lejos de amigos que pudieran detenerlo o de personas que pudieran dañarlo. Eso fue hasta que en una fiesta le ofrecieron un cigarrillo. Él no supo que era ni quiso saberlo, pero el efecto que le produjo fue aun mejor que sus pastillas.

 

De ahí, Jiyong todo comenzó a cambiar. Sin saberlo su vida estaba comenzando a derrumbarse.

 

Sin embargo a él no le importó. Había dejado de hacerlo desde hace mucho. Ya no importaba si no hablaba con sus amigos o si la calidad de su trabajo había decaído, ni siquiera le importó el escándalo que se produjo cuando estrelló su lujoso auto contra una cerca por estar drogado.

 

Nada importaba. Ahora lo único que sabía era que ya no dolía.


Now and then I think of all the times you screwed me over

But had me believin it was always something that I'd done

But I don't wanna live that way

Reading into every word you say

You said that you could let it go

And I wouldn't catch you hung up on somebody that you used to know

De vez en cuando pienso en las veces en que me hiciste daño

Pero me tenías creyendo que siempre era algo que había hecho

Pero no quiero vivir de esa forma

Leyendo en cada palabra que dices

Dices que puedes dejarlo ir

Y que no te descubriría obsesionado con alguien que solías conocer

 

De vez en cuando Seunghyun recuerda cuando notó que algo no estaba bien con Jiyong. El menor frecuentemente tenía la mirada perdida y no ponía atención en las reuniones. También había dejado de comer y Seunghyun podía notar cómo se iba demacrando.

 

Era obvio que algo estaba mal y ahora todo el mundo lo notaba. Jiyong se ponía agresivo cuando le cuestionaban y a menudo faltaba a trabajar. En varias ocasiones Seunghyun escuchó a Youngbae y Daesung hablar del tema.

 

“¿Crees que tenga que ver con lo que le pasó a Seunghyun hyung?” preguntó Daesung, intentando que su compañero no lo notara.

 

“Ambos han estado actuando raro” dijo Youngbae “pero ninguno de los dos ha querido decirnos que ocurre”

 

Seunghyun agradecía la preocupación de sus compañeros pero se sentía mal por causarles problemas. Sin embargo, ¿qué podía hacer para que dejaran de preocuparse por Jiyong? El menor apenas y hablaba con él, había comenzado a evitarlo y no soportaba estar junto a él demasiado tiempo.

 

Seunghyun no podía hacer que sus amigos dejaran de preocuparse por Jiyong… pero podía hacer que dejaran de preocuparse por él.

 

Poco a poco comenzó a derrumbar el muro que había construido a su alrededor. Comenzó a intentar escuchar lo que sus compañeros le decían, comenzó a salir con ellos de vez en cuando y de pronto descubrió que esa era la mejor cura que podía haber encontrado.

 

Seunghyun volvió a sonreír y sus amigos se sintieron aliviados al ver que regresaba su antiguo ser… o al menos algunos de ellos.

 

Jiyong también había notado lo deprimido que se había sentido Seunghyun después de que terminaron. Eso le hacía pensar que tal vez debía intentar acercarse a él de nuevo. Era obvio que ambos se necesitaran.

 

Pero sabía que a Seunghyun no le gustaría en absoluto saber lo que Jiyong había estado haciendo para olvidar. Por eso pensaba “tengo que dejarlo” y se proponía hacerlo. Conseguía pasar un par de días sin consumir nada, pero la ansiedad y el dolor de su organismo que se había acostumbrado a sus excesos lo hacían regresar.

 

“Lo dejaré, tengo que hacerlo por Seunghyun”

 

“Cuando esté mejor podremos estar juntos de nuevo, pero tengo que dejarlo”

 

Tal vez si tenía esos pensamientos era porque en el fondo Jiyong sabía que eso estaba mal. Pero cuando Seunghyun comenzó a recuperarse, las esperanzas de Jiyong se fueron al traste. Su mal humor regresó, así como sus ganas de consumir.

 

“¿Qué demonios están haciendo?” decía a menudo durante los ensayos. “La canción no es así. Tienen que practicar más porque no podemos presentar esta porquería.”

 

Seunghyun y los demás lo escuchaban, conscientes de que algo malo pasaba con  él. Intentaban soportar sus ataques de ira porque sabían que Jiyong estaba mal, y Seunghyun a veces pensaba que el menor tenía razón y no se estaba esforzando como debía hacerlo.

 

“¿Eres estúpido acaso?” decía con desdén el menor a cualquier mínimo error. “Si no vas a hacerlo bien mejor no lo hagas.”

 

“¿Cuál es tu maldito problema?” preguntó Seunghyun cuando perdió la paciencia. “Todo el mundo en esta sala se esfuerza al máximo para que tu llegues y comiences a criticar cualquier cosa.”

 

Los ojos de Jiyong centellaron de furia.

 

“Tú eres el último que puede reclamarme algo, bailarín barato”

 

Seunghyun no pudo detenerse a tiempo. Youngbae intervino antes de que atestara un segundo golpe contra el rostro de Jiyong que ahora se encontraba en el piso, mirándolo con incredulidad.

 

“¿Tú te crees mejor que todos solo porque has cambiado tu estilo? No me importa que tan bien te veas si continuas actuando así” Seunghyun temblaba de rabia. “No eres indispensable aquí, así que o maduras o te vas.”

 

“No eres indispensable” De alguna forma la mente de Jiyong lo entendió como un “no te necesito”. La poca cordura que aun quedaba en él se fue al traste con eso.

 

“Él cree que ya no me necesita” dijo con una risilla tonta mientras aceptaba la jeringa de manos de uno de sus compañeros de juerga. “¿Quién es para tratarme así?”

 

Nadie estaba escuchando, pero Jiyong continuó hablando mientras el líquido transparente desaparecía dentro de su brazo. En su estado era evidente que no notara la mirada de los demás asistentes a la fiesta, por lo tanto no era de sorprenderse que no notara la mirada profunda de Seunghyun al otro lado del lugar.

 

“¿Jiyong?” su voz temblaba al pronunciar su nombre. Jiyong levantó la mirada y le dirigió una boba sonrisa.

 

“Te tardaste idiota” dijo arrastrando las palabras. “Sabía que ibas a volver”

 

Acto seguido estampó sus labios contra los del mayor.

 

Seunghyun no pudo evitar que el estomago se le revolviera con eso. Los labios de Jiyong sabían a alcohol y su mirada cristalizada provocó que Seunghyun lo apartara bruscamente de su cuerpo, al cual el menor ya había comenzado a acariciar de una manera necesitada, ignorando a todos a su alrededor.

 

“Vámonos de aquí” le ordenó Seunghyun, tomándolo del antebrazo y arrastrándolo hacia la puerta mientras los asistentes a la fiesta comenzaban a murmurar.

 

“No, yo estoy bien aquí” respondió Jiyong forcejeando con Seunghyun. “Vamos a divertirnos hyung.

 

De alguna manera Seunghyun consiguió sacarlo de ese lugar y llevarlo a su casa. Jiyong cayó inconsciente una vez que su cabeza tocó la almohada.

 

“¿Cómo pasó todo esto?” se preguntó una y otra vez Seunghyun durante la noche. El recuerdo de Jiyong en la fiesta lo atormentaba cada vez que intentaba cerrar los ojos.

 

Terminó dando vueltas por el apartamento de Jiyong, mirando todo lo que había cambiado y notando que era exactamente todo lo que había cambiado en el menor.

 

Cuando llegó a la sala, se dejó caer en el sillón totalmente abatido.

 

“¿Por qué Ji?” se preguntó, tirando levemente de su cabello mientras continuaba mirando la habitación. “Este no eres tú.”

 

Fue entonces cuando lo notó. En la mesa del centro había una pila de revistas, revistas en las que el grupo había aparecido. Las revistas estaban por todo el lugar y Seunghyun se dio cuenta de que estaban abiertas exactamente en las paginas donde aparecía él.

 

Era casi mediodía cuando Jiyong abrió los ojos de nuevo. Al principio se sintió desorientado y cuando intentó ponerse de pie las piernas se le doblaron. Había algo extraño en el ambiente, creía haber escuchado ruido viniendo de la sala de estar y con mucho esfuerzo llegó ahí.

 

Seunghyun seguía ojeando las revistas, notando que Jiyong había escrito al borde de sus fotografías. “Ese color siempre te sentó bien” “Recuerdo que odiaste ese peinado

 

“¿Qué crees que estas haciendo?” preguntó Jiyong molesto, quitándole la revista de las manos.

 

Aunque Seunghyun estaba sorprendido por la actitud del menor se puso de pie y puso su mano en su hombro.

 

“¿Cómo te sientes?” preguntó mirando a Jiyong.

 

“Estoy bien, ahora lárgate” replicó el menor quitando de un manotazo la mano de su hombro.

 

“Ji, quiero ayudarte” suplicó Seunghyun.

 

“No necesito tu ayuda, estoy bien yo solo” respondió Jiyong, empujado a Seunghyun hacia la puerta. El mayor tomó su brazo y lo abrazó.

 

“Jiyong, basta… Deja de lastimarte así…”

 

Como pudo, Jiyong se soltó del agarre de Seunghyun y lo obligó a salir del apartamento. Seunghyun no pudo evitar temblar cuando la puerta se cerró de golpe frente a él. Jiyong no pudo evitar derrumbarse a un lado de la puerta, llorando amargamente.

 

“Te extraño” no pudo evitar decir Seunghyun antes de caminar de vuelta a su casa, ignorante de que al otro lado de la puerta Jiyong había escuchado sus palabras.

 

“También yo”

 

But you didn't have to cut me off

Make it like it never happened and that we were nothing

I don't even need your love, but you treat me like a stranger

And that feels so rough


No, you didn't have to stoop so low

Have your friends, collect your records

And then change your number

Guess that I don't need that though

Now you're just somebody that I used to know

 

Pero no tenías que hacerme a un lado

Fingir que nada había pasado y que éramos nada

Ni siquiera necesito tu amor, pero me tratas como un extraño

Y eso se siente tan duro

 

No, no tenías que caer tan bajo

Tomar a tus amigos, recoger tus records

Y entonces cambiar tu número

A pesar de todo creo que no lo necesito

Ahora solo eres alguien que solía conocer

 

Seunghyun estaba desesperado. No solo Jiyong se estaba marchitando cada vez más rápido, sino que también lo había estado evitando sin importar todo lo que intentara para hacerlo razonar.

 

Mientras tanto sus compañeros comenzaban a inquietarse y no eran los únicos. Los directivos de la compañía, los fans, los medios de comunicación, todos especulaban acerca del extraño comportamiento de Jiyong. Nadie sabía que ocurría, Seunghyun no había tenido el valor de decirlo porque en el fondo sabía que él lo había causado.

 

Finalmente un día, el manager entró a la sala de ensayos y les dijo que el presidente de la compañía había decidido suspender a Jiyong hasta nuevo anuncio. Seunghyun de inmediato se puso de pie y salió corriendo de la habitación.

 

Jiyong no estaba muy lejos. Se encontraba sentado en un banco en la entrada del edificio con la mirada perdida en algún lugar del techo. No reaccionó ante la presencia de alguien más y tampoco cuando Seunghyun se sentó a su lado.

 

“¿Sabes? Creo que lo ví venir”

 

“Se que estas atravesando un momento difícil ahora, Jiyong. Pero si lo dejas Hyun Suk nim te dejará…”

 

“No estoy hablando de mi suspensión, Seunghyun” Jiyong lo miró a los ojos. “Hablo de nosotros.”

 

Y sin más, se levantó y salió del lugar.

 

Tuvo que pasar cerca de un mes antes de que Seunghyun lo viera de nuevo.

 

El manager había explicado que la decisión de suspender a Jiyong había sido debido a los rumores de su adicción. Jiyong tenía medio año para desintoxicarse o cancelarían su contrato con la compañía.

 

Sus compañeros, sobretodo Seunghyun, habían estado intentando razonar con él pero Jiyong rara vez se encontraba en casa. No importaba cuantas veces tocaran el timbre o cuanto tiempo esperaran a que él regresara, ni una sola vez en un mes pudieron verlo.

 

Seunghyun estaba desesperado. Sabía que mientras más tiempo pasara, más difícil sería para Jiyong dejarlo. Pero sobretodo, Seunghyun se sentía culpable.

 

“Todo esto es porque lo dejé”

 

Él no era gran partidario de las fiestas que organizaban los famosos, aquellas llenas de sexo y alcohol, pero eran la única forma en que podría encontrar a Jiyong. Por eso él era el primero en llegar y el último en irse, siempre mirando a cada persona que entraba por la puerta del lugar, esperando reconocer las facciones del menor. Nunca hablaba con nadie, simplemente se sentaba en la barra y esperaba.

 

“¿Sabes? A una fiesta se va a divertirse” dijo Dong Wook.

 

Seunghyun a penas escuchó a su compañero, él continuaba mirando a la puerta.

 

“Seunghyun ah, es probable que no venga” insistió el mayor. “Tienes que aceptar que no hay nada que puedas hacer por él.”

 

“No voy a rendirme hyung.” Seunghyun lo miró severamente. “No voy a abandonar a Jiyong.”

 

“Pero esto te esta afectando también” dijo Dong Wook. “¿Cuándo fue la última vez que dormiste?”

 

“Eso no importa.”

 

“Seunghyun ah no puedo dejar que hagas esto” dijo tomandolo del brazo en un intento de razonar con él.

 

Seunghyun se liberó del agarre y tomó a Dong Wook por el cuello de la camisa. El mayor podía sentirlo temblar y notó como lentamente su agarre se volvía más débil.

 

“Tengo que ayudarlo, me hace más daño verlo lastimarse así” murmuró Seunghyun con los ojos inundados por las lágrimas. Dong Wook pasó su brazo por el hombro de su amigo sin poder hallar palabras reconfortantes.

 

“Sé que lo harás” dijo intentando comprender el dolor de Seunghyun. “Pero no puedes hacerlo si te esfuerzas tanto. Te llevaré a casa, dormirás un poco y mañana te ayudaré a encontrarlo.”

 

Seunghyun asintió derrotado y se puso de pie, solo para encontrarse cara a cara con Jiyong. Ambos se miraron a los ojos un momento antes de que Jiyong diera un paso a un lado y continuara caminando.

 

Antes de que Dong Wook pudiera hacer algo, Seunghyun salió corriendo tras él.

 

Jiyong salió a un callejón a un lado del lugar, junto con otras personas. No dijeron nada, uno sacó una bolsa de su pantalón y la pasó para que todos pudieran tomar algo de su contenido. Jiyong tomó el cigarrillo y lo miró dubitativo, no podía hacer eso si Seunghyun estaba ahí. Pero lo necesitaba, así que cuando el mismo chico sacó un encendedor de su bolsillo y se lo ofreció, Jiyong lo tomó rápidamente.

 

Los siguientes segundos fueron algo confusos para él. De pronto se vio lanzado hacia la pared y todos los que estaban en el callejón con él huyeron despavoridos. Jiyong levantó la mirada y descubrió a Seunghyun frente a él de nuevo.

 

“¿Qué demonios te ocurre?”

 

“Lo mismo podría preguntarte”

 

“¿Es esto lo que quieres? ¿Quieres seguirte haciendo daño?”

 

“¡¿Y qué más me queda Seunghyun?!” gritó el menor. “¡No tengo nada!”

 

“Eso no es cierto. Nosotros estamos aquí.” la voz de Seunghyun se había vuelto suplicante, pero Jiyong no quería ceder. No quería volver a tener esperanzas, no si el mayor iba a desaparecer de nuevo de su vida.

 

“No es verdad… hace mucho que te fuiste…”

 

Seunghyun dio un par de pasos vacilantes hacia él, las manos extendidas como si quisiera tomar al menor.

 

“Ji, estoy aquí ahora…”

 

“Pero no te necesito ahora.” Respondió él, dando un paso hacia atrás. Seunghyun dejó caer sus manos antes de sonreírle tristemente a su acompañante.

 

“Yo te necesito, necesito saber que estas bien…”

 

“Si eso fuera verdad no me habrías dejado.” La voz de Jiyong temblaba. “¿Tienes idea de cuantas veces esperé que volvieras, que me abrazaras y dijeras que fue un error? Ya no hay más que hacer Seunghyun… No hay nada que puedas hacer…”

 

Las palabras de Jiyong lo golpearon sin piedad. Por supuesto que sabía que la separación los había lastimado a ambos, pero Seunghyun había sido el único que también se había alegrado por eso. No había tenido en cuenta los sentimientos de Jiyong… Era ahora cuando podía ver la magnitud del daño que había provocado a Jiyong.

 

“Si no puedes dejarlo por mi, hazlo por tus amigos” insistió Seunghyun. “Youngbae esta realmente preocupado y no ha dejado de intentar encontrarte, y Daesung y Seungri tienen miedo de que hagas algo estúpido. Ellos necesitan que nuestro líder vuelva a ser el de antes… Te necesitan de vuelta”

 

Fue entonces que Jiyong pareció dudar. Sus amigos… Jiyong no había pensado en eso. Había estado tan enfocado en su dolor que no había notado lo que estaba provocando en sus compañeros, y probablemente incluso en Seunghyun.

 

“Jiyong, queremos ayudarte” dijo Seunghyun acercándose de nuevo a él. “Queremos que vuelva el chico alocado que tanto queremos. Yo quiero que vuelva mi Jiyong.”

 

Jiyong temblaba cuando Seunghyun finalmente lo abrazó. El menor enterró  su rostro en el pecho de Seunghyun mientras algunas lagrimas traicioneras corrían por sus mejillas.

 

“No puedo hacerlo…”

 

“Puedes, yo voy a ayudarte… No volveré a dejarte solo”

 

Esas palabras resonaron en la cabeza de Jiyong, era algo que había querido escuchar hace mucho tiempo y que justo ahora se daba cuenta de que era lo que necesitaba.

 

“¿Aún me quieres Seunghyun?” preguntó mirándolo a los ojos.

Y entonces Seunghyun sonrió como no lo había hecho en mucho tiempo antes de besar tiernamente los labios del menor.

 

“Jamás deje de hacerlo”


Somebody that I used to know

Somebody (now you’re just somebody that I used to know)

That I used to know

Somebody that I used to know

Somebody (somebody) (now you’re just somebody that I used to know)

That I used to know

 

I used to know

That I used to know

I used to know

Somebody

 

Alguien que solía conocer

Alguien (ahora solo eres alguien que solía conocer)

Que solía conocer

Alguien (alguien) (ahora solo eres alguien que solía conocer)

Que solía conocer

 

Solía conocer

Que solía conocer

Solía conocer

Alguien

 

De vez en cuando ellos recuerdan esto. Recuerdan el dolor que les produjo sentir que ya no se conocían. Seunghyun recuerda todas las veces en que deseó que Jiyong fuera el mismo de antes, y Jiyong recuerda que deseó que el mayor volviera a quererlo como en el principio.

 

Ahora saben que tenían miedo. El miedo de no ser lo suficientemente buenos para el otro dejó salir sus inseguridades, el miedo de perder al otro fue lo que los reunió.

 

Tuvo que pasar algún tiempo antes de que Jiyong pudiera volver a su antiguo ser. Había veces en las que la frustración de sentir que no estaba mejorando hacían que él y Seunghyun terminaran peleando. En esas ocaciones ambos corrían a encerrarse en sus habitaciones y no salían hasta que alguno de los dos se rendía e iba a buscar al otro.

 

La etapa de desintoxicación fue dolorosa para ambos, tanto física como emocionalmente. En las ocasiones en que Jiyong se sentía mal, Seunghyun lo obligaba a recostarse en su pecho y acariciaba su espalda hasta que el menor se quedaba dormido.

 

Seunghyun cumplió su promesa. Ya fuera que Jiyong tenía que ir al trabajo, al médico o simplemente quería salir, Seunghyun lo acompañaba mientras tomaba su mano.

 

Eventualmente las cosas comenzaron a mejorar. La prensa, los fans y las personas de la compañía comenzaron a especular acerca de lo que había pasado, pero el alivio general por la mejoría de Jiyong era palpable.

 

No quiso explicar toda la situación a sus compañeros, pero les dijo lo que necesitaban saber. Cuando mencionó que Seunghyun y él estaban juntos sus compañeros no quisieron creerlo, Youngbae incluso llegó a evitarlos por algún tiempo pero después pareció aceptar la situación, sobretodo porque Jiyong se veía más feliz.

 

Las cosas no han sido perfectas, pero ellos saben que es mucho mejor de lo que podrían estar. Seunghyun y Jiyong no quieren volverse a convertir en extraños, toda la experiencia les demostró lo mucho que se necesitaban, y a pesar de que han tenido problemas están seguros de que los recuerdos del pasado van a mantenerlos juntos siempre.

 

Eso es una promesa.

Notas finales:

En cierta forma siento que toqué una fibra un poco sensible con lo de GD, pero fue el giro que dio el fic.

Espero que aun así les haya gustado ^^


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).