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UN TRATO por hinata123

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Retumbo por las paredes el sonido de la imponente campana que anunciaba el inicio de las clases de primera hora del día, para todos los alumnos, sin excepción alguna, las clases debían empezar a las 7 de la mañana y todos debían estar cerca de sus respectivas aulas por lo menos con 15 minutos de anticipación, por si se quedaban los libros, los cuadernos o cualquier cosa puesto que una interrupción a mitad de clase no sería  tolerada.

Aoi se hallaba sentado en el suelo, respirando el frio aire de la madrugada, viendo pasar a los alumnos de un lado a otro, sostenía sobre sus piernas su maleta casi vacía que después de todo no pensaba utilizar

-buenos días- escucho y sin vacilaciones dirigió su vista hacia su amigo que se había parado a su lado mientras dejaba tirada a un lado su maleta que al parecer estaba mucho más llena y se dejaba caer pesadamente en el suelo a su lado, con los ojos cerrados y la cabeza apoyada en  la pared.

-no dormiste bien de nuevo ¿verdad Ren ?- le hablo suspicaz aunque honestamente no había que ser un genio ni usar gafas tipo botella para ver las oscuras manchas alrededor de los ojos de su amigo y la excesiva palidez en su piel, por su parte este sonrió y sin mucho drama le contesto- ya sabes que en las noches me cuesta dormir, seguro no es nada, cuando este lo suficientemente cansado tendré que dormir si o si- y le guiño un ojo mientras giraba la cabeza al lado opuesto tratando seguramente de descansar un poco sus irritados ojos antes de las clases.

Aoi suspiro y dejo escapar el aire pesadamente por su boca, de ninguna manera podía permitirse que su mejor amigo se esforzara en clase de cálculo en semejante estado, tenía que actuar despreocupado porque si se notaba como se sentía, Ren no le haría el mas mínimo caso, así era a él, así que se preparó para una buena actuación, de esas a las que ya estaba tan acostumbrado, seguro gracias a ello debía tener la apariencia del típico vago del colegio

’aquí vamos’’ se dijo así mismo mientras ensanchaba una malévola sonrisa

-oye, no tengo ganas de ver límites, vámonos, luego pedimos el taller- le pidió mientras iba poniéndose en pie, por supuesto que su amigo no acepto inmediatamente, se mostró receloso y hasta torció el gesto negándose a ponerse en pie y abrazando a su frágil cuerpo su maletín que había rescatado del suelo en una muda negación a volver a caer en las tentaciones de aquel demonio que tenía por mejor amigo

-sabes que sería como la quinta vez que no entramos a esta clase ¿verdad?, y tienes en claro que como siga así tendré que suspender porque no entiendo absolutamente nada y ni siquiera he pasado el primer examen, tu tampoco, por si no te basta solo con eso- iba a seguir hablando pero Aoi puso los ojos en blando y empezó a recitar en mudos gestos el sermón que ya se sabía de memoria haciendo que el chico aun sentado enrojeciera de vergüenza y rabia y sin disimular en absoluto un gruñido gatuno escapo de su garganta mientras se ponía en pie- está bien, vamos, pero te advierto que como me joda las notas de matemáticas tu tendrás que ser mi esclavo por todas la vacaciones de verano que tenga que quedarme estudiando.

-se te pasa por alto mi querido Ren que si tu suspendes yo no tendría la más mínima posibilidad de pasar ni en un millón de años, así que estudiaría el doble que tú en vacaciones

-pues no me importa, tendrás que hacer las dos cosas, después de todo tu eres una mala influencia para mí, eres quien me ínsita a no entrar a clase…

En ese momento ya ambos habían empezado a caminar por los pasillos desiertos y medianamente oscuros de la institución, Aoi trataba de darse prisa para no ser descubiertos por los profesores que por aquellas horas hacían sus rondas para verificar que nadie se saltara las clases, cosa que ellos obviamente estaban acostumbrados a hacer, sin pensar mucho en lo que hacía tomo en su mano la más pequeña de Ren para guiarle apresuradamente hacia la salida que ya estaba cerca, el más joven se sonrojo un poco y hasta olvido por un momento como respirar correctamente sin embargo no dijo nada solo trato de apresurar su paso y de calmar su agitado corazón.

 

Quince minutos después se hallaban frente al inmenso lago de uno de los territorios más alejados de la zona escolar, se hallaban bajo un árbol más que nada porque la densa oscuridad que la abundante masa verde les ofrecía era reconfortante, ya que sol del cual ocultarse no había, en su lugar las grises nubes se reflejaban en las aguas negras del enorme lago dándole la apariencia opaca y sin vida que tanto caracterizaba a ese lugar, hacía mucho frio y parecía que la neblina aun no había terminado de irse completamente aun con eso y gracias a la costumbre los dos chicos estaban cómodos, Aoi recostado contra el árbol y Ren completamente acostado en la húmeda hierba

 

Respiro hondamente antes de soltar la bomba que cargaba desde hacía mucho y de la cual deseaba deshacerse rápidamente- eh ¿Ren, tu hermana aún sigue en el hospital?- no supo muy bien cómo se escuchó aquello pues por los nervios sus oídos se habían taponada sabía que lo había dicho por la vibración en su garganta y porque su amigo se sentó precipitadamente y abrazaba sus piernas con sus manos- sí, no muestra ninguna mejoría, no sé qué vamos a hacer- le hablo mientras escondía su cara entre sus manos apoyándola es sus rodillas dejando que sus cabellos negros cayeran desordenadamente.

No supo si continuar pero sabía que ya no podía dejar las cosas así, debía arriesgarse-pero…pero…- empezó a tartamudear- si tuvieras el dinero suficiente para el tratamiento… las cosas serían diferentes ¿o no?

-sí, lo serian, estoy desesperado, creo que tendré que aceptar la propuesta de aquel hombre, es lo único que puedo hacer para conseguir el dinero pronto.

Aoi frunció el ceño ni siquiera tenía pensado que aquello llegara a la conversación pues según él era completamente imposible, una posibilidad completamente inexistente

-¿Cómo se te ocurre semejante cosa?- le dijo casi enojado pero aun guardando la compostura, tan solo se le veía un poco irritado

-veras, aunque me salga del colegio y me ponga a trabajar no alcanzaría a reunir el dinero a tiempo, honestamente no es que me parezca una buena opción pero es la  única que tengo.

Una vena se hizo notoria en la cien de Aoi que le miro con reproche

-claro que la tienes ¿y yo que?, ¿estoy  pintado en la pared o qué?, sabes perfectamente que solo es que me digas cuanto y yo…- pero la frase se vio interrumpida al ver la mirada asesina que su mejor amigo le dedico, se pasó ambas manos por su cabellera castaña clara y soltó el aire helado por su boca. Era más obvio que Ren no iba a aceptar ninguna clase de ayuda.

-está bien, está bien que no quieras mi ayuda, Ren- empezó a hablarle solido mientras lo miraba- a pesar de ser tu mejor amigo y de que no puedo entender las razones por las cuales no puedo echarte una mano, lo acepto… lo que no acepto es que te acuestes con ese tipo mucho menos por dinero… yo… sé que te enojaras conmigo pero… he destruido la tarjeta de tu celular… no podrás tener contacto con el…

La mirada seria de Ren que lo miraba atentamente se volvió de sorpresa y pareció a punto de saltarle encima…

-¿Qué?, ¿pero tú estás loco?, ¿acaso no entiendes que es la esperanza de mi hermanita?

-Ren, entiende tú, eso es malo, no debes- le hablo un poco molesto, por supuesto que entendía y en parte él sabía que lo correcto era hacer hasta lo imposible porque ella se mejorar pero el simplemente moriría de ira de  celos ¿Cómo es que era posible que su amigo no lo entendiera?, sabía que estaba siendo egoísta pero ¿no estaba siéndolo también Ren al pensar únicamente en el?, lo sabía, su amigo sabía muy bien lo que el sentía y sin embargo prefería hacer el que no pasaba nada, seguramente por miedo a perder la amistad pero eso era muy cruel, el también merecía una oportunidad

-¿Qué sabes tú de lo que está mal?- le dijo molesto mientras empezaba a ponerse en pie- no es tu hermano el que está en el hospital y si lo estuviera tampoco tendrías ningún problema

-solo trato de ayudarte – le recalco mientras también se ponía en pie

-pues lo estás haciendo mal ¿sabes?- le grito mientras empezaba a caminar…-claro que no… te estoy diciendo que te daré lo que necesites- ¿es que no entiendes que no quiero que me regalen nada?, sería muy diferente si fuera un trabajo o algo así pero simplemente o me siento bien haciendo que cargues con mis cosas

-lo haría con gusto porque eres mi amigo...- Ren se mordió el labio y lo miro directo a la cara la verdad es que le dolía decir las cosas de esa manera pero para empezar fue Aoi quien la provoco.

-si fuera por eso estaría bien… pero tú y yo sabemos bien que no es por eso… yo no quiero aprovecharme eso es muy sucio

-no sé de qué hablas, lo hago porque eres mi amigo, le dijo mientras se torcía la mirada no le parecía que era el momento de hablar de eso

-sabes que eso no es verdad- le dijo mientras empezaba a caminar. El chico inmediatamente fue tras el- de todas formas ¿Cuál es el problema? A mí no me importa si me usas o…- Ren se dio la vuelta y negó con la cabeza molesto, se estaba hartando de esa discusión

-YA TE DIGE QUE NO- le grito furioso

-también estarías aprovechándote de ese hombre sin embargo eso no te importaba no entiendo cuál es la diferencia entre ser la put… - se quedó callado, estuvo  a punto de ofenderlo y todo por sus celos

Su amigo le miro solido supo perfectamente lo que estuvo a punto de decirle sin embargo no dejó que las lágrimas brotaran por el contrario endureció su mirada

-la diferencia es que el no siente nada por mí- le dijo

`` Entonces estaba bien, era mejor ser la puta de alguien a quien no le importaba que aceptar la ayuda de la persona que le quería, en otras palabras ¿él era peor opción que rebajase de esa manera?’’

Agacho la mirada entendiendo aquello y viendo como el otro se alejaba, si las cosas eran así, entonces quizás hubiera alguna oportunidad.

Corrió tras él y le tomo de la muñeca jalándolo fuertemente

-¿ahora qué quieres?- le hablo Ren molesto- ya te deje claras las cosas, déjame tranquilo ya… no quiero hablar más del tema… tengo mejores cosas en las…-sin embargo no fue capaz de terminar la frase pues las manos del más alto se posaron en su cintura y le acercaron de una forma que jamás imagino que sucedería… con total descaro

-solo quiero acostarme contigo- le susurro el chico mientras agachaba su mirada a la vez que se acercaba- no quiero nada más que eso ¿te parece bien si las cosas son así?- el menor se quedó frio al escuchar aquello, fue liberado suavemente y pudo sentir cuando sus pies chocaron del todo contra el suelo que debió empinarse demasiado para llegar a la altura del otro…

Piénsalo, es la misma propuesta solo cambia la persona

Sin decir más Aoi se alejó del lugar, aquello le había dolido mucho pero no parecía haber otra forma

 


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