Desde aquella vez mi vida no fue la misma, desde que lo perdí en aquel accidente mi vida ha dado una vuelta completa, mi mundo se vino abajo, no me importaba ser multimillonario, no me importaba tener lujos, mujeres, o cualquier cosa material a mi alrededor solo me importaba ‘’el’’ y ya no estaba.
Recuerdo como lo perdí en una víspera de navidad, ese día habíamos quedado de cenar en mi apartamento, pero por ser víspera de navidad, las ventas de las empresas familiar habían subido significadamente, ya no podía darme el lujo de salir temprano y dejarlo todo solo por él, aunque fuera el presidente de la empresa y tuviera múltiples beneficios una empresa no es nada si no tiene un buen presidente y un buen panel administrativo. Ese día lo llame arrepentido de no poder llegar a tiempo a nuestra cena de navidad, él me había dicho que había entendido que no me apurara pero sabía que lo había decepcionado, aunque fuera la primera vez que lo hacía me sentía mal al imaginarme como esos hermosos ojos azules que tanto me gustaban se opacaban poco a poco.
comenzó a pensar en alguna alternativa en la cual pudiera pasar estas vísperas con él, pero nada en mi mente parecía reaccionar, aunque en este momento lo más importante fuera mi hermoso ojiazul el trabajo me mantenía ocupado todo el día, luego de tanto pensar le propuse que viniera a la empresa a que cenara conmigo aquí en mi oficina así fuera algo de algún restaurante cercano abierto veinticuatro horas al día, lo que yo quería esa noche era pasarla con él.
Pude imaginarme como esos hermosos ojos volvían a tener ese brillo tan característicos, sin pensarlo mucho escucho como dice un si emocionado y engancha el teléfono, yo me pongo a terminar los papeles que tengo en mi escritorio lo más rápido posible antes de ‘’el’’ llegue, quiero sacar todo mi tiempo para él, solo para él. Me había dado cuenta que no había visto la hora que era ya pasadas las once de la noche de una víspera de navidad, sabía que el rubio no tenía carro no porque no quisiera y no tuviera dinero solo por el hecho que no quería conducir, sabía que vendría caminando desde el apartamento, algo que comenzó a preocuparme.
Era tarde en la noche y para los ojos de él y de los demás su novio era una personas bastante hermosa y hasta cierto punto vioble. Comenzó a preocuparse más de lo normal dando vueltas por su oficina, ya había pasado mucho tiempo y este parecía no llegar.
Pocos minutos después tocaron la puerta de mi oficina, se me hizo raro, lo esperaba a él no a mas nadie, sabía que él no tocaría la puerta, así que con un adelante invite a las personas que estaban al otro lado, cuando entraron mis ojos se abrieron de par a par, eran dos oficiales de la policía los que habían entrado a mi oficina, pero lo más que me asombro fue el hecho de lo que llevaban en las manos…la chaqueta que le había regalado en su último cumpleaños.
-¿Usted es Sasuke Uchiha?- Pregunto uno de los oficiales, yo mantuve mi pose seria como siempre lo había hecho y solo pude asentir- Tenemos entendidos que usted es la Pareja de Naruto Namikaze…¿Estamos en lo correcto?- Maldición cada vez mi pecho se apretaba más y más apenas podía asentir lentamente aunque por fuera no lo expresara estaba que por dentro me moría. –Lamento informarle señor que el Joven Namikaze ha fallecido- Dijo uno de ellos.
No sé qué paso luego de esto, según mi hermano Mayor Uchiha Itachi vicepresidente de las empresas, había perdido completamente el control y había terminado en el hospital por unos días y luego fui trasferido a guardar reposo en mi casa, una vez en mi casa ya tranquilo Salí de ella y lo busque, lo busque todo lo que pude por todo el tiempo, no había encontrado su cuerpo, eso me daba una esperanza de que estuviera vivo mi hermoso ojiazul pero si no era así, ¿ Y si no estaba vivo? Era lo que me preguntaba en esos momentos, los policías habían dicho que luego de asaltarlo y apuñarlo lo habían tirado por un puente, pero como sabían todo eso era lo que llenaba mi mente de preguntas.
Lo busque por cuatro años seguidos con la ayuda de mi hermano, lo busque día y noche, contrate los mejores investigadores del país pero nadie podía localizarlo ni tan siquiera su cuerpo, si tan solo tuviera su cuerpo me quedaría más tranquilo pero ni eso tengo, solo tengo las fotografías de mi hermoso ojiazul y los recuerdos que tanto me atormentan.
Hacia dos semanas había comenzado una relación con una hermosa modelo llamada sakura Haruno quien también a su vez era doctora, una mujer hermosa un poco mayor que yo pero con unos ojos color jade que me atrajeron, no supe si fue porque que me los ojos color claro me recuerdan o el, pero ella es una mujer amable y paciente, ella sabía que había alguien que ocupaba mi corazón desde hace mucho tiempo pero decía que el tiempo curaba las heridas.
Heridas que todavía siguen en mi corazón como si hubieran sido ayer como si no hubiera pasado el tiempo y nada de esto hubiera ocurrido, pero así es la vida, decidí intentarlo, nos llevamos bien y ella es una excelente mujer, desde un principio le dije que nunca llegaría amarla y ella entendió pero me dijo que se sentiría feliz y tranquila si la quisiera y la quiero pero no como mujer sino como amiga y una de las mejores.
Ella es Psiquiatra y cada rato me hablaba de sus pacientes, me gustaba que me hablara de ellos, quería saber cómo era la mente de esas personas que aunque les dijeran locos solo por estar en una institución mental, eran mucho más sanos de los que andaban sueltos en las calles.
Un día le dije que la acompañaría a visitar su institución ya que era casi de ella por ser parte de la cadena de hospitales e institutos médicos que su familia poseía pero a ella no le interesaba eso, ella me dijo que era bienvenido cuando quisiera y así lo hizo un día tome mi tiempo libre y la acompañe a la institución, entre mirando detenidamente a cada uno de ellos, me llevo a los cuartos de cada uno y me conto sus historias, como habían llegado allí y sus diagnósticos, me llevo hasta el área de pediatría del lugar, no sabía que ese lugar existía, me conto de un caso en especial, era un joven de veinticinco años la misma edad que la mía, que había sido admitido hace tres años con un pequeño hijo, eso me sorprendió de sobremanera, no sabía que eso era capaz, pero ella me había dicho que habían casos especiales en los que se hacía, ya que el paciente no estaba preparado para separarse de su hijo, me conto que era un Doncel y muchos recuerdos vinieron a mi mente.
Me recordé del pero trate de no pensar mucho en eso y seguí hacia adelante con ella, parecía que me quería llevar a la habitación de esa persona, mientras íbamos acercándonos me contó que había sido encontrado deambulando con su hijo de apenas un año por las calles, mi corazón se conmovió nunca fue una persona completamente seria y fría también tenía mi lado amable y considerado pero eso solo lo conocía el. Me hablaba maravillas de esa personas pero me dijo algo que sorprendió me dijo que lo más que le gustaba de su paciente eran el color de sus ojos azules, no sé porque mi corazón comenzó a latir fuertemente, ¿Tal vez? ¡No! Rápidamente descarte la idea y más con lo que había escuchado anteriormente, el daño cerebral que tenía que su paciente era irreversible, estuvo tanto tiempo sin tratamiento que el daño cada vez creció mas y más que al comenzar el tratamiento de nada sirvió.
Ella se paró frente a una puerta indicando que ya habías llegado al lugar, abrió suavemente la puerta entrando ella primero y haciéndome unas señas para que la siguiera.
-Naru-chan ¿Cómo te sientes hoy?- escuche claramente como había llamado Sakura a su paciente haciendo que acelerara mi paso, cuando entre no podía creer lo que veía en el medio de la habitación había una pequeña cama donde estaba el, mi hermoso rubio que tanto tiempo busque, estaba allí.
-¿Sasuke-kun?- Me hablo Sakura preocupaba, seguramente había visto mis lágrimas bajando por mis mejillas, no me importaba ocultarlas-¿Estas bien?- me pregunto mirándome con lastima y angustia- Lo siento Sasuke-kun- dijo ella bajando la mirada, ¿Por qué la bajaba? – Hace unos días estaba en tu oficina esperándote a lo que salías de una de tus reuniones y lo admito estaba aburrida y me puse a verificar tu oficina no por curiosidad aunque si un poco si no porque no sabía que hacer ahí fue cuando lo vi, una foto de Naruto-kun- Dijo ella mirándome con tristeza y con algunas lágrimas en los ojos- en ese momento no lo podía creer, mi paciente a quien tanto cariño y amor le he tomado en estos años en los que he estado pendiente de él y su hijo era el Novio de mi actual novio, al principio no supe que hacer pero luego de días me decidí y decidí traerte aquí sasuke- dijo ella tomando mis manos mientras yo escuchaba todo lo que ella decía- quería que supieras que el está vivo y que su hijo, Tu hijo lo está-
Estaba en shock en ese momento no sabía que pensar, frente a mi tenia a mi Dobe como siempre le decía mirando en el techo como perdido en el tiempo y arlado de él había un pequeño pelinegro durmiendo tranquilamente, nuevamente lagrimas comenzaban a bajar por mis mejillas, eran muchas noticias en poco tiempo, me había enterado que el Dobe estaba vivo y que teníamos un hijo juntos, pero luego me había puesto a pensar en todo lo que me había dicho Sakura y me había dado cuenta de que este tenía un daño cerebral grave e irreversible que hacía que solo llorara más y más .
-Sasuke tienes que ser fuerte, ellos dependen de ti…Sé que lo nuestro nunca funcionara pero por todo el amor que tengo te voy a dejar libre sasuke, cuídalo lo voy a dejar a tu cuidado a él y a su hijo, sé que no va a ser fácil pero sé que podrás hacerlo- dijo sakura antes de darme un pequeño beso en los labios y salir de allí para firmar los papeles de alta.
Mientras ella estaba afuera yo me acerque a mi rubio y me baje a su altura buscando encontrar su mirada pero esta estaba perdida miraba hacia todos los lados menos hacia donde yo estaba, eso me entristeció pero sabía que iba a ser un camino largo y estaba dispuesto aguantarlo no solo por él y mi hijo sino también por mí porque lo necesitaba y lo quería a mi lado.
Levante una de mis manos y la acerque a su cabello deslizando mis dedos por las hebras doradas que tanto extrañaba, en todo el momento que estuve cerca de él y acariciándolo no me miro ni una sola vez. Me aparte un poco de él y llame a Itachi y le conté la situación no supe cuánto tiempo estuve allí mirándolos a él y mi hijo dormir que cuando me vine a dar cuenta Itachi estaba a mi lado junto con Sakura, nunca me espere que mi hermano cuando me viera me abrazara fuertemente, pero según me había dicho Sakura le había contado algo antes de que este entrara y este quería darme todo el apoyo necesario, sabía todo lo que estaba sufriendo, trate de ser fuerte pero comenzó a llorar como un niño chiquito en los brazos de una madre al ser fuertemente regañado por su padre pero esta vez estaba en los brazos de mi hermano mayor, no sé cómo paso y hasta Sakura se asombró pero Naruto nos había mirado a los tres fijamente. Aunque fueron solo unos leves segundos había podido aguantar su mirada hacia nosotros, ahí fue cuando la vi, su mirada sin brillo y llena de tristeza y soledad.
Mi hermano cargo al pequeño quien todavía andaba durmiendo, según Sakura le inyectaban una pequeña dosis de calmante ya que era muy muy hiperactivo y tenía que mantenerse en el cuarto junto con el rubio, una vida triste para un niño tan pequeño, pero él estaba dispuesto a darle una mejor vida de ahora en adelante, su vida iba a cambiar de eso él estaba seguro.
Mientras su hermano cargaba su hijo este con mucho cuidado toco el cuerpo del rubio, lo alzo lentamente mientras veía como el rubio se aferraba a su cuerpo como si tuviera miedo.
-Sasuke- escucho suavemente haciendo que abriera los ojos, solo fue un pequeño murmullo pero lo escucho claramente ya que el rubio estaba muy pegado a su cuerpo, inconscientemente apretó al rubio más a su cuerpo haciendo que este se estremeciera un poco pero en ningún momento dio inicios de que se sintiera molesto por su cercanía a sí que no hizo ningún movimiento de separarlo de su cuerpo, después de tanto tiempo podía volver embriagarse de ese olor tan característico del rubio que tanto amaba y lo volvía loco.
Pensaba que todavía todo lo que le estaba pasando era un sueño del cual si era así no quería despertar, quería quedarse allí para siempre si eso significaba que fuera feliz junto a la persona que tanto amo y todavía amaba y eso era algo que nunca iba a cambiar.
Dejo que su hermano se llevara al niño en su auto mientras él se llevaba al rubio quien monto con mucho cuidado, tenía miedo de lastimarlo, lo veía tan frágil y dedicado que temía dañarlo con algún movimiento en falso.
Llegue a mi apartamento y vi como mi rubio miraba todo a su alrededor como si nunca lo hubiera visto, como si fuera algo nuevo para él, luego de eso no sé cómo Salí hacia adelante no sé qué paso pero mi vida dio un cambio completamente.
Comencé a llevar a Naruto todos los días a su nuevo tratamiento, uno experimental si daba resultados el Dobe podía recuperar parte de su conciencia y remediar el daño causado, pero más pasaba el tiempo más perdía las esperanzas y la fe. No veía el cambio, Sakura me decía que tuviera paciencia que no era algo que se diera de la noche a la mañana pero parecía que mi paciencia no ayudaba mucho. Lo quería conmigo a mi lado, quería escucharlo, decirme que me ama, decirme ‘’Teme’’ .
Como extrañaba esas palabras pero parecía que nada de eso podía pasar, los años seguían pasando como si hubiera sido ayer que me encontré nuevamente con mi rubio y nada parecía cambiar, pronto me di cuenta de que la situación en la que estaba era irremediable y que tendría que aprender a vivir así. Mucho tarde en darme cuenta pero me cegué al verlo de nuevo, al ver esos hermosos ojos que tantos me han gustado.
Pero no me importa, lo único que me importa es que está conmigo y mi hijo quien me apoya en todo lo que decida así tenga un daño irremediable yo siempre lo amare y se lo demostrare así él no me corresponda, porque me basta con tenerlo a mi lado y decirle todas las noches ‘’Te Amo’’.
Fin