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Ellos por Ia Aiko Wittakker

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Notas del capitulo:

hola!! jeje

bua la verdad es que eh tenido miles de problemas con la pagina, jeje pero despues de mucho pelear por fin me agarro mi cuenta otra vez jejeje

este es un onsehot

bueno mas bien en un songfic

espero que les guste

es el trabajo mas largo qeu eh hecho en mi vida (en un solo capitulo)

otra cosa

es un Narusasu

la verdad es que no me gusta esta pareja (en suestion de las posiciones) jejeje pero fue un reto, la verdad es que para gusto mio, trate de que la pareja no fue muy evidente (sasuke uke)

en verdad por favor

denme una oportunidad

lo se esta super largo, pero denme una oportunidad n.n si???

Nombre del Oneshot: Ellos

Canción: Ella y el

Autor: Ricardo Arjona

Autora: Aiko Wittakker

Pareja: NaruSasu (aunque no es mi pareja favorita O.o, ya que a Sasuke no lo veo como Uke, pero esta canción lo requería XD)

Advertencias: un poco de Ooc (Jejeje que creo que es un cambio de comportamiento Jeje según yo)

Resumen :

El mundo está lleno de miles de problemas, guerras innecesarias y muertes inútiles.

La gente no se da cuenta de que solo tiene una sola vida, y el tiempo que pasa no volverá.

Por eso hay que vivir y si nos enamoramos no hay que pensar en el mañana, si no vivir en el presente.

Todos somos diferentes, en color, raza, idioma, creencias, gustos, etc.

Las diferencias nos dividen, causando que solo nos unamos cuando el amor es verdadero.

Resumen publicado:

Lo que las ideologías dividen al hombre
el amor con sus hilos los une en su nombre

 

Oo0oO

…….Inicio…….

 

Ella es de la habana, él de nueva york
Ella baila en Tropicana, a él le gusta el rock

 

La ciudad de nueva york es un lugar con una gran diversidad de personas, la gente va y viene, mientras que en un barrio más calmado, específicamente en una hermosa casa de color azul claro, la canción “The unforgiven” de la banda Metallica se oía al máximo volumen mientras era coreado por un rubio de un metro ochenta y ocho, quien alegremente terminaba de guardar sus cosas personales en dos grandes maletas.

La puerta estaba siendo tocada muy ruidosamente, mientras gritaban el nombre del dueño de la vivienda, pero todo era en vano ya que el sentimiento con el que el rubio ojiazul cantaba abarcaba toda su atención.

-       Maldición, ¡¡¡NARUTO UZUMAKI ABRE LA MALDITA PUERTA!!! – una joven pelirosa le gritaba a todo pulmón – NARUTO ABREME, SE NOS VA HACER TARDE. ¡¡¡NARUTO!!!

Después de media hora gritando como loca, sacando de sus casas a todos los vecinos menos al que quería que saliera, se podía ver a un rubio con un enorme chichón en la cabeza regalo de su mejor amiga por la escena tan vergonzosa que le hizo realizar.

-       Pero Sakura no fue mi culpa

 

-       Cállate, mejor apúrate que ya pronto va a empezar la ceremonia.

 

Oo0oO

La música Tropical sonaba, llenando de felicidad los corazones de todo aquel que lo escuchara, la gente bailaba en parejas o solos, no importaba, el ambiente estaba lleno de fiesta, el sol comenzaba a desaparecer, pero para aquella personas rebosantes de vida eso solo era el inicio, en una plaza la gente rodeaba a un hermoso joven de cabellera negra, y una piel clara, movía sus caderas al ritmo del baile llamando la atención de todo aquel que tenía la oportunidad de verlo, una gran sonrisa iluminaba su cara, mientras se dejaba llevar, olvidando todos los problemas y el mundo entero.

 

Ella vende besos en un burdel
mientras él se gradúa en u.c.l.a

 

La música se seguía escuchando, pero nada de eso era importante para un señor quien tenía acorralado a un joven ojinegro contra la pared detrás de unas columnas, el beso era candente y lleno de pasión, con una gran agilidad comenzó a acariciar las piernas del joven subiendo lentamente hasta su entrepierna, la pasión lo llenaba, hasta que bruscamente el joven lo alejo, intento volver a abrazarlo pero el joven lo esquivo.

-       Por el amor de dios Sasuke – juro irritado, siempre era lo mismo, el joven aceptaba los besos, pero todavía no había puesto un precio para su cuerpo – solo pon un maldito precio, y te lo daré.

El joven lo ignoro, dándose la vuelta se comenzó a alejar.

-       Paga la cuenta con Sai – ordeno el pelinegro, mientras volvía a la barra, hasta esperar la hora del inicio de su show.

 

 

Oo0oO

 

La alegría reinaba en los corazones de todos aquellos graduados, la ceremonia fue muy emotiva, se entregaron varios reconocimientos y diplomas.

Por fin, habían terminado lo que les llevo a algunos hasta cinco años.

Un grupo era el que más relucía, era el más popular ya que estaba conformado por  los jóvenes más guapos o las parejas más importantes de toda la universidad.

La pareja más popular era la que formaban Hyuga Hinata y Hyuga Neji, primos, pero prometidos desde antes de tener edad para razonar. Ella era la novia perfecta, tímida, respetuosa, educada, buena cocinera, excelente anfitriona, y una infinidad de dones más, él era una gran deportista, además de tener uno de los promedios más altos de toda la escuela, ambos eran de gran belleza, ella estudiaba la ingeniería bioquímica, mientras que el  Ingeniera en administración de empresas, para hacerse cargo de la empresa familiar. Y lo más importante, todos se podían dar cuenta del amor que se tenían.

La segunda pareja era la de Nara Shikamaru y Sabaku No Temari, una pareja muy inusual ya que los dos eran completamente diferentes, lo único que tenían en común era que los dos ocupaban el primer puesto en promedio de toda la escuela, a pesar de todas la peleas (quien iniciaba era la rubia) ya llevaban seis años juntos.

La última pareja era a un más inusual, Abúrame Shino e Inuzuka Kiba, de esta pareja solo sabían los amigos más cercanos, y si se había pasado el chisme nadie opino, ya que los jóvenes estaban muy bien protegidos. Shino era heredero de una compañía farmacéutica y a pesar de que Kiba no era rico, estaba respaldado por sus demás amigos, Shino estudiaba Ingeniería Genética, mientras que Kiba Ingeniería Ambiental.

La única mujer soltera del grupo, Haruno Sakura, una hermosa joven pelirosa, futura  medico muy prometedora.

Y por último el soltero más codiciado de todo la universidad por no decir toda la ciudad, Namikaze Uzumaki Naruto, nieto de la doctora Tsunade reconocida ginecóloga, además de Jiraya Namikaze un gran escritor,  hijo de Uzumaki Kushina, una gran diseñadora de modas, y Minato Namikaze un ingeniero en sistemas digítales y robótica. Dando como resultado aun guapo joven de 1.88 rubio de ojos más azules que el cielo, y una sonrisa que iluminaba la más grande oscuridad. Y ahora un Ingeniero en negocios y tecnologías de información.

 

 


Ella es medio marxista, él es republicano
ella quiere ser artista, él odia a los cubanos

 

-       Vamos Naruto anímate – el grupo se encontraba en un antro con una copa en mano, menos Hinata quien solo bebía una soda.

 

-       No lo sé – en el rostro del rubio se podía ver claramente la duda.

 

-       Cuba es un país muy bonito, y alegre – comentaba Kiba, quien se encontraba recargado en el pecho de su novio, y aunque  Kiba era  muy inquieto y a cada rato se movía, a su pelinegro novio no le importaba.

 

-       Pero Kiba… yo eh escuchado muchas cosas feas de haya, por ejemplo que no los dejan usar pasta y todo eso, te imaginas – comento sacando un gran goterón en sus compañeros, el rubio ya era un adulto pero nunca se le quitaría lo inocente.

 

-       No Naruto, no es del todo cierto…

 

-       No importa, no me gustan los cubanos, así que no voy – sentencio inflando sus mejillas  y cruzándose de brazos.

 

 

Oo0oO

 

Un joven pelinegro se encontraba viendo como el sol salía lentamente iluminando las hermosas playas.

-       Ya es muy tarde, ¿Por qué no has ido a descansar? – otro joven muy parecido al primero se sentó a su lado, al contrario del primero, este tenía una musculatura más notoria, además de unas facciones más masculinas.

 

-       Mhp – respondió el pelinegro, sin desviar la mirada de tan hermoso paisaje.

 

Los minutos pasaban, y ninguno de los dos volvió a decir palabra alguna.

-       ¿crees que estoy haciendo lo correcto, Sai? – pregunto sin mirar al mencionado, por su parte este tampoco volteo.

 

-       ¿esto es lo que quieres hacer?

 

-       No

 

-       Entonces no estás haciendo lo correcto…. – se levantó y sacudió – debo de irme, Gaara me está esperando.

 

El ojinegro no respondió, y continúo viendo el mar.

 


Él cree en la estatua de la libertad
y ella en su vieja habana de la soledad.

 

-       Vamos Sasuke apúrate – los dos pelinegros se encontraban cruzando la engentada plaza, cuando por fin lograron cruzarla Sai se lanzó a abrazar a su novio.

Sai nunca permitía que Gaara fuera al bar del que Sai era dueño, por esta razón siempre  iba a buscarlo a la salida de su trabajo, para pasar un rato juntos, a veces obligaba a Sasuke a ir, aunque a este le incomodaba ya que ver como estos se miraban con amor le daba algo de envidia, él sabía que el amor de su vida no lo encontraría en la habana, ya que ya no conocía a casi todas la personas y ninguna le había llamado la atención, pero Sasuke no quería abandonar el lugar que lo vio  nacer, no quería abandonar su ciudad, aquella que  tanto quería.


Él ha comido hamburguesas
ella moros con cristianos
él, el champagne con sus fresas
ella un mojito cubano

 

En un elegante restaurant se encontraba una pareja, para los ojos de todos eran una pareja que se complementaban, en belleza  y elegancia, pero eso era para los que no los conocían.

-       En serio Naruto, ¿no vas a ir? – el rubio prefería no responder, ya que no quería recibir los golpes de su amiga, además de que los “pansotti” estaban deliciosos. – Naruto… que te parece si solo vamos un poco más abajo… ¿Yucatán?

 

-       … - “mmm no creo que me deje en paz” – muy bien Sakura iré

 

 

Oo0oO

 

-       Sasuke no te gustaría irte de vacaciones con nosotros – por primera vez el pelirrojo  le hablo a  Sasuke, y no es que no se llevaran, simplemente que ambos eran muy callados y serios.

 

-       No me gustaría hacer mal tercio – respondió el azabache

 

-       No te preocupes, tampoco es como si fuéramos de viaje de placer. – respondió el pelirrojo calmadamente terminando de beber su botella de agua.

 

-       ¿eh?

 

-       Si, Sai te inscribió a una entrevista, para solicitar un puesto como bailarín de un grupo de música Tropicana, y quedaste, así que vas a ir de gira a Yucatán con ellos – termino de explicar el pelirrojo, ignorando el aura oscura que emanaba el azabache  menor, quien con toda su furia se lanzó contra Sai.

 

 

 

 

Ella se fue de gira a Yucatán
y él de vacaciones al mismo lugar.

 

Un grupo de jóvenes bajaba de un avión, la verdad es que llamaban mucho la atención, ya que además de guapos, y bien vestidos, tenían un aura de elegancia. Se instalaron en un hotel cerca de las playas, gracias a eso  todos los cuartos contaban con una hermosa vista.

Oo0oO

 

La verdad es que el viaje no fue muy agradable, ya que aparte de lo incomodo, se tuvo que quitar  a todos aquellos que se querían sobrepasar con él, (¡por dios no se daban cuenta de que él era hombre) pero por lo menos por fin pudo salir de su cárcel, tal vez sea su hogar pero eso no quitaba que estaban advertidos que tenían que regresar.

 


Mulata hasta los pies, él rubio como el sol
ella no habla inglés, y él menos español

 

Se encontraba arreglándose frente a gran espejo que había en el guardarropa, se peinó sus rubios cabellos, y se arregló con un pantalón de mezclilla y una camisa de vestir negra, tratando de verse lo más informal posible.

 

Oo0oO

 

Tenía que salir al escenario en 5 minutos, la verdad es que la ropa no era de su total agrado, pero ya no le quedaba de otra, se acomodó su cabello negro con cuidado, se miró en el espejo y suspiro.


Él fue a tomar un trago sin sospechar
que iba a encontrar el amor en aquel lugar.
Lo que las ideologías dividen al hombre
el amor con sus hilos los une en su nombre.

 

Naruto se encontraba sentado en un pequeño bar la verdad es que se había separado de sus amigos un rato, se sentía un tanto incomodo estar rodeados de parejas que se demuestran su amor con besos, y él estaba  solo, claro que también Sakura estaba en esa posición, pero Naruto no veía a Sakura mas que como una buena amiga.

Movía su copa de un lado a otro, completamente aburrido, la verdad es que ya había recibido propuestas algo elevadas, pero a él no le intereso ninguna, solo quería beber una copa tranquilamente, suspirando algo a lo lejos le llamo la atención, en la pista de baile había varias parejas, pero una persona fue la que lo cautivo, este era un joven de cabellos negros, movía sus caderas al ritmo de la música haciendo que sonaran los cascabeles que había en su cadera, pero rápido movió su cabeza y desvió la mirada, ya que él no era homosexual.


Coro
Ella mueve su cintura al ritmo de un tan tan
y él se va divorciando del tío Sam

No sabía que era lo que pasaba, pero no podía desviar su atención de aquel precioso joven.

-       “¡por el amor de dios Naruto, tú no eres gay, levántate ahora mismo y vete!”


Él se refugia en su piel... la quiere para él
y ella se va olvidando de Fidel

“¡Diablos!”  Se repetía una y otra vez el rubio, ya sin intentar separar su vista de aquel azabache, no sabía que le pasaba, pero quería a ese joven para él, no le importaba si era hombre o si no era estadounidense, pero él lo quería.


Qué sabían lennin y Lincoln del amor
qué saben Fidel y Clinton del amor....
Ella se sienta en su mesa, él tiembla de la emoción
ella se llama teresa y él se llama John
ella dice hola chico, él contesta hello
a ella no le para el pico, él dice speak slow

 

Las horas pasaron, el rubio ya había perdido la cuenta de las copas que se había bebido, lo único de lo que estaba consiente es que a un estaba en sus cinco sentido, seguía esperando que el joven volviera a salir, pero después de que acabo show no lo había vuelto a ver, suspiro ya que todo esto era algo absurdo, “¡por dios Naruto Namikaze, ¿Qué diablos estás haciendo? Tú no eres homosexual, así que con el resto de tu orgullo levántate, paga y vete!” pero todo pensamiento se fue al caño al sentir como alguien se sentaba enfrente de él, levanto la vista y se encontró con un hermoso ángel.

-       Buenas noches – el azabache saludo, pero la verdad es que Naruto no le entendió, entre el acento del joven y su poco conocimiento del español.

 

-       Hola – respondió el rubio por educación, pero entendió que tampoco el otro lo comprendía ya que frunció su ceja.

Un incómodo silencio se apodero de ambos, no sabían que decir o hacer, el rubio lo observaba, detallando todas sus facciones, vio que se sentía algo incómodo, así que con una gran sonrisa le llamo.

-       ¿Cómo te llamas? – pregunto el rubio lentamente para intentar comenzar una plática, pero el azabache negó con la cabeza, y el ojiazul entendió que no había comprendido, así que sintiéndose un poco tonto se séllalo a sí mismo y dijo su nombre –Naruto – dijo lentamente volviendo a repetir la acción, luego señalo al azabache - ¿tu?

 

-       … - el azabache comenzó a reír ruidosamente, conquistando a un más al ojiazul – Sasuke – respondió después de unos minutos

Ambos se sonrieron, el azabache comenzó a hablar, primero lentamente pero después más rápido, la verdad es que el rubio no entendió mucho, solamente palabras sueltas, como “vacaciones”, “baile”, “amigo”, entre otras, pero ninguna en una misma oración.

-       Espera, alto, tranquilo – pedía el rubio, Sasuke le prestó atención y sonrojándose al máximo se dio cuenta de que no le habían entendido, Sasuke todavía no sabía qué diablos hacia allí, cuando estaba bailando lo había visto, y la verdad es que el azabache si era de esos gustos, el joven le había parecido el hombre más guapo que había visto en toda su vida, y en un impulso se sentó en su mesa, ahora se arrepentía mentalmente.

El azabache se iba a levantar, pero antes de siquiera intentarlo alguien le toco el hombro, rápidamente voltio encontrándose con el hombre que tocaba los bongo.

-       ¿Qué sucede? – pregunto molesto el azabache, al ver la mirada descarada que ese sujeto le dirigía.

 

-       Preciosura, ya es hora de que bailes conmigo- el hombre lo jalo del brazo, la verdad es que el azabache le había dado alas, pero solamente para que lo dejara platicar con el rubio, pero nunca iba a permitir que lo jalaran.

 

-       Suéltame

 

-       Lo lamento pero ya deje que te divirtieras con el extranjero, así que ahora debes de darme mi recompensa – sonrió lascivamente – oh al menos que te quieras saltar el baile y mejor disfrutarlo en un lugar más privado.

 

-       Suéltame

 

-       Vamos hermosura, prometo que tu recompensa será buena.

 

Naruto había observado todo sin intervenir, al parecer se trataba de una pelea de novios, ya que el azabache lo conocía y no había intentado pedir ayuda. El rubio se sintió como un estúpido, a parecer lo habían utilizado para crear celos, suspiro.

Se levantó al darse cuenta de que ninguno de los dos le prestaba atención, se iba a dar la vuelta pero los gritos lo detuvieron. El joven azabache estaba siendo sacudido por el otro joven, mientras este le gritaba, lo poco que entendió el rubio fueron las palabras “puta”, “sexo” y otras que mejor no mencionar.

El rubio ya no aguanto más y se lanzó contra el hombre, tirándolo al piso.

-       No sé si es tu pareja o no pero no debes tratar a nadie así – con cuidado se volteo hacia el azabache y tomándolo de la mano lo saco de aquel bar.


Él se guardó su bandera, ella olvidó los conflictos
él encontró la manera de que el amor salga invicto
la tomó de la mano y se la llevó
el yanqui de la cubana se enamoró.

Iban caminando por la calle tomados de la mano, ignorando a todos aquellos que los miraban sorprendidos, empezando por su apariencia completamente diferente, y terminando por las manos unidas, unos pensaban que el rubio iba a denunciar al azabache por robo o algo así, otros con mente más abierta pensaban que eran pareja.

Comenzaron a pasear mirando las tiendas, pero sin dirigirse en ningún momento ni una palabra o mirada.

-       ¿te encuentras bien? – el azabache no entendió pero asintió al ver la cara de preocupación del rubio.

Continuaron caminando, el ojiazul entro a una tienda donde compro un diccionario inglés-español y un libro de oraciones traducidas.

-       ¿bien... te en... encuen... encuentras? – el azabache sonrió dulcemente al darse cuenta del esfuerzo de Naruto

 

-       Si – respondió mientras asentía, al ojiazul se le ilumino la cara al darse cuenta de que ya podía comunicarse con el ojinegro

 

-       ¿pele... peleaste... te… con. .. novio? – intento preguntar suavemente para que Sasuke no se sintiera interrogado.

 

-       No era mi novio – respondió negando con la cabeza para reafirmar sus palabras, Naruto hacia un gran esfuerzo para buscar en el diccionario la frase completa, había entendido pero quería cerciorarse, en ese momento se arrepentía de no haber tomado el idioma español, hablaba cuatro idiomas más, y ninguno lo ayudaba en ese momento.

 

-       ¿ir… quie... quieres… lugar? –Sasuke debía volver ya al bar, donde debía reunirse con el grupo que lo trajo, el grupo partía en la madrugada, vio a qué hora eran, y se dio cuenta de que todavía tenía algo de tiempo, observo a su acompañante y pensó  que a su lado él se debía ver como una persona de la calle, miro su ropa, aquella ropa pegada y de colores brillantes, el rubio se dio cuenta de su incomodidad- ¿quieres… no? – la desilusión se veía él los ojos azules, y el azabache no quería defraudarlo.

 

-       Si quiero ir pero… -  el azabache se agarró la ropa algo incomodo

 

-       ¿ incomoda…. Ropa? –  Sasuke observo la tierna sonrisa del rubio y se sonrojo.

 

-       Me voy a ir a cambiar – el rubio removió su diccionario y entendió

 

-       No – con cuidado agarro la mano del ojinegro y comenzó a caminar hacia una tienda de ropa, se veía que era ropa cara, ya que el local  estaba finamente arreglado, el azabache se removió incomodo, a ver las miradas de desprecio que le dirigían las empleadas. El rubio no se inmuto y con una sonrisa que cautivo a todas las trabajadoras, saludo. Rápidamente una empleada fue a atenderlo.

 

-       Buenas noches señor, ¿Qué se le puede ofrecer? – pregunto la empleada en Ingles ya que vio que el extranjero traía un diccionario, lo que le dio a entender que no dominaba muy bien el español.

 

-       Buenas noches, disculpe nos podría traer un conjunto de ropa por favor – pidió el ojiazul, sonriendo ya que no tendría que utilizar su diccionario por ese momento.

 

-       Por su puesto – la joven lo recorrió con la mirada, el ojiazul negó con la cabeza

 

-       La ropa no es para mí, es para mi acompañante – la mujer observo al joven, y con una mirada de desprecio comenzó a intentar conocer sus medidas.

 

-       Entendido, en un momento se las traemos, si gusta puede esperar en la sala, junto a los probadores. – la joven los guio, ambos se sentaron, les trajeron unas sodas mientras esperaban. Naruto pudo ver a incomodidad del ojinegro, así que con delicadeza le tomo de la mano.

 

-       Tranquilo – susurro el rubio en español,  Sasuke lo vio y al ver su tierna sonrisa asintió.

 

La joven regreso con un conjunto informal pero que hacía que el azabache se viera muy elegante y guapo, unos pantalones de mezclilla oscura, unos zapatos negros de vestir, camisa  con cuello “v” de color blanco, y una sudadera con gorro delgada de color blanco. Sasuke se sintió un poco incómodo, pero al ver la sonrisa del rubio acepto la ropa.

Después de pagar, entraron a un restaurant de mariscos, donde se les atendió de prisa y con una gran sonrisa, platicaron, rieron al ver como los dos al intentar hablar el idioma del otro se trababan, y luego de la cena, caminaron por la playa.

No sabía que eran, ya que para el rubio todavía era difícil aceptar que le gustaba un  hombre, y el azabache sabía que no podían estar juntos por tantas diferencias.


Lo que las ideologías dividen al hombre
el amor con sus hilos los une en su nombre.

 

En un enorme parque se encontraba un azabache cabizbajo, no sabía qué hacer, luego de pasar una agradable velada, el ojiazul lo llevo hasta el motel donde se hospedaba, pero al llegar le dijeron que los de la banda ya se habían ido, lo dejaron solo en un lugar que no conocía, sin dinero y sin ninguna de sus pertenencias, tampoco podía contar con Sai, Gaara era estadounidense, pero se fue a estudiar a cuba donde conoció a Sai,  ahora ambos se encontraban en la ciudad de México, donde el pelirrojo iba a dar una conferencia.

No sabía qué hacer, no tenía a nadie a quien acudir.

 

Oo0oO

 

Nadie le podía quitar la sonrisa de tonto que traía, al llegar a su hotel se sentía en las nubes, había tenido varias novias pero con ninguna se sintió ni la mitad de bien de cómo se sintió con Sasuke. Al despertar se le ocurrió ir a buscar al ojinegro después del desayuno, así que bajo al restaurant donde se encontró con todos sus amigo.

-  Hey Naruto, ¿Dónde estuviste todo el día de ayer?- pregunto la pelirosa agarrándolo fuertemente del cuello.

 

-  Buenos días, Sakura, chicos.

 

-  Buenos días Naruto – saludo educadamente la ojiperla

 

-  Buenos días Hinata

 

-  Confiesa Naruto, ¿con quién te escapaste? – pico una rubia alta

 

-  Con nadie Temari, solamente salí a tomar una copa

 

-  Mmm , confiésalo, que nadie te cree que estuviste solo, y menos por esa sonrisa de bobo enamorado que te traes - se burlaba Kiba quien se encontraba siendo alimentado por su pelinegro novio.

 

-  Jaja no creo que tu debas opinar de eso Kiba, oh  no es cierto tu eres un experto ya que  siempre vives con ella – todos se comenzaron a reírse del ambientalista, quien se sonrojo y se acurruco en el pecho de su novio.

 

Muchos se preguntaran si una pareja homosexual era muy bien vista en un restaurant cinco estrellas, pero nadie opinaba, ni siquiera los meseros se atrevían a hacer algún desaire, no cuando esos ocho jóvenes se hospedaban en las suites más caras del hotel.

Después del desayuno, Naruto salió corriendo a cambiarse, pero ni aunque rogo o lo intento logro deshacerse de sus amigos.

-  Vamos Naruto no te enojes, solo queremos conocer a la afortunada – si a pesar de todo el joven Inuzuka seguía burlándose de su amigo.

 

-  Cállate Kiba, oh quieres que te recuerde como andabas en los pasillos de la escuela como un fantasma cuando pensaste que Shino andaba con tu hermana – Kiba se sonrojo al máximo ya que esto no lo sabía Shino ni la mitad de sus amigo, el pelinegro miro a su novio con una cara de interrogación, pero el ambientalista solo desvió la mirada y siguió caminando.

 

-  Ya tranquilo Naruto – la pelirosa paso su brazo por el cuello del rubio – vamos ya confiésalo, o por lo menos responde ¿es bonita?

 

-  Si – la cara del ojiazul se puso roja, causando la risa de todos sus amigos, a pesar de que estos ya tenían más de la mayoría de edad se seguían comportando como unos niños.

 

Lamentablemente no se dieron cuenta de que eran observados  por un pelinegro, quien en ese momento sus ojos se llenaron de lágrimas.

 

Oo0oO

 

Para ojos del mundo formaban un grupo muy elegante, y cada una de las parejas se complementaban perfectamente, sus sonrisas demostraban que se querían y eran felices, y eso fue lo mismo que vio el pelinegro, quien al ver como una cabellera rubia y otra pelirosa estaban juntos, sintió que su corazón se rompía.

-  “tranquilo Sasuke, tranquilízate, no vayas a llorar, de todos modos que esperabas, ¿Qué ese joven tan guapo se fijara en ti? Alguien que trabaja en un bar, alguien sin belleza y simple. Además no eran nada, el solo se compadeció de ti y te rescato de ese sujeto, además se veía que él era heterosexual, así que ¿Por qué estas llorando Sasuke?” – el pelinegro se levantó y camino en dirección contraria, no sabía qué hacer, no tenía a nadie, y para acabarla de amolar tenía el corazón roto.

El pelinegro se alejaba rápidamente, pero fue captado por una mirada azul, quien al reconocerlo corrió a alcanzarlo, los jóvenes restantes se le quedaron viendo raro, pero salieron detrás de su amigo.

-  Sasuke – grito llamando la atención del pelinegro quien se limpió las lágrimas y volteo, dando un intento de sonrisa.

 

-  Bueno días Naruto – para el ojiazul ver a si a su azabache, si SU azabache porque Naruto ya había aceptado que se había enamorada a primera vista de un hombre,  le dolió verlo sufrir.

 

-  ¿te…. Bien… estas? – el rubio se revolvía la cabeza tratando de recordar la frase en español que debía utilizar, pero gracias a dios, o lamentablemente para él, sus amigos llegaron a su lado.

 

Los siete recién llegados observaron al pelinegro, este vestía ropa informal, se veía que la ropa era de marca, pero su aspecto era algo apagado, tenía ojeras, se veía triste y preocupado. Vieron que su amigo estaba observando las expresiones del ojinegro, Shikamaru fue el primero en intervenir.

-  Buenos días, ¿se encuentra bien? – la mente ágil del Nara, se dio cuenta de que el ojinegro no le entendió, eso quería decir que no hablaba inglés, o sea que no era estadounidense, además al ver sus facciones se dio cuenta de que tampoco era mexicano, no era moreno, al contrario su piel era algo pálida, pero aun así algo le decía a Shikamaru que ese joven venia del sur del continente. Así que cambiando el idioma volvió a preguntar – Buenos días, ¿se encuentra bien? – pregunto en un fluido español.

 

-  Si, gracias – el pelinegro observaba a todos los jóvenes.

 

-  Un placer conocerlo, me llamo Hyuga Hinata – sonreía la pelinegra, dándole la mano como saludo – él es mi prometido Neji – el nombrado solo asintió.

 

-  Yo soy Kiba Inuzuka – se presentó con una gran sonrisa, él era el único de su grupo que no tenía una fortuna, así que él se dio cuenta de que ese joven era de bajo estatus. Dejándolo muy pensativo del porque tenía esa ropa, pero al ver el rostro de su amigo rubio, lo entendió todo. Saliendo de sus pensamientos presento a su novio, ya que sabía que este no lo haría – él es Shino Abúrame – igual que con Neji el abúrame solo movió la cabeza.

 

-  Temari Sabaku No, un placer conocerte pequeño – la rubia se fue directo a abrazarlo, poniendo nervioso a Sasuke – y este joven es mi novio Shikamaru Nara.

 

-  Yo soy Haruno Sakura – la pelirosa veía que el ambiente estaba algo tenso, el joven se mostraba reacio a saludar – de verdad te encuentras bien, yo soy doctora, si quieres puedo revisarte si estas herido.

 

“perfecto, definitivamente ¿cómo crees que alguien como Naruto te va a elegir, cuando tiene una novia hermosa con un gran fututo, y tu ni siquiera terminaste la primaria?”

 

-  Ahh todos hablan español – se quejaba el rubio al ver el perfecto español que hablaban sus amigo,  él era el único que no se podía comunicar con el azabache.

 

-  Por supuesto que si  Naruto, tú fuiste el único que no quiso tomar la clase de español – le grito la pelirosa, jalándolo del cachete.

 

-  Pero Sakura, tenía que tomar otras materias de mi carrera – explicaba el rubio intentando calmar a la joven

 

Una pequeña discusión comenzó, todos observaron cómo los dos amigos peleaban, pero incluso a lo lejos se podía ver que era falso y se podía apreciar una sonrisa en el rostro de ambos. El pelinegro menor sufría, una cosa era aceptar que perdiste a la persona que querías, y otra es verlo, no importa saber que nunca fuera tuya aun así dolía. Mientras el pelinegro sufrir en silencio, nada era desapercibido por Shikamaru, quien hasta el momento comprendía gran parte de la historia. Hinata también comprendió lo que pasaba así que llamo la atención de todos.

-  Disculpa, ¿Cómo te llamas?

 

-  Sasuke Uchiha

 

-  Disculpa Sasuke, ¿viniste de vacaciones? – Hyuga sabía que Shikamaru era el más listo de todos, así que quería darle más pista para saber qué era lo que pasaba – nosotros acabamos de salir de la universidad, antes de comenzar a trabajar nos animó venir a divertirnos…

 

-  Hinata – la llamo su prometido, a Neji no le gustaba que su novia anduviera dando esa información, ya que podía ser peligroso, no sabían nada de ese joven, y el nunca permitiría que ningún peligro se acercara a la ojiperla, iba a continuar hablando pero una señal de Shikamaru lo callo.

 

-  ¿viniste solo? – Sasuke observo a los jóvenes, al parecer todos entendían lo que decía, menos Naruto, no sabía si decir o no la verdad, se veía que no eran malas personas, pero él sabía que no debía confiar en nadie.

 

-  No, vine con un grupo a una gira – el Uchiha no les iba a decir que fue abandonado.

 

-  Oh, ¿entonces eres cantante? – pregunto la ojiverde -¿qué tipo de música cantas?

 

Sasuke observo a la pelirosa, le daba vergüenza admitir lo que hacía, no tanto por el hecho del baile, sino porque trabajaba en un bar donde vendía su cuerpo. La incomodidad no pasó desapercibida por ni uno de los presentes, así que en una interrupción muy impactante, Shino por primera vez desde que inicio la conversación hablo.

-  ¿hoy tienes el día libre?

 

-  Algo así – se podía notar el nerviosismo del menor, así que en solidaridad con su novio Kiba se acercó al joven.

 

-  ¿Te gustaría acompañarnos? – Kiba le sonreía tiernamente al joven, él se dio cuenta de que el azabache estaba algo incómodo  por estar entre gente rica, incluso para él todavía era algo incómodo – nosotros pensábamos ir a la playa y luego pasear un rato

 

Naruto no entendió nada de lo que decían sus compañeros, maldiciéndose mentalmente por no a ver traído su diccionario, Sakura se acercó a su compañero.

-  Dice que hoy no trabaja, así que Kiba lo está intentando convencer que venga con nosotros a la playa – la sonrisa del rubio fue deslumbrante, haciendo sonreír a su amiga

Sasuke veía la interacción de la pareja y el dolor de corazón solo incremento, Hinata sabía que el chico los iba a rechazar.

-  Naruto – llamo la ojiperla – Sasuke no quiere acompañarnos

El ojiazul llego a  lado de su amiga, y sonriéndole al pelinegro menor hablo.

-  Prometemos entregarte temprano a tu trabajo – Sasuke no entendió, pero la ojiperla le hizo el favor de traducirlo, “ Sasuke debes de rechazarlo, solo te harás sufrir más, además tienes que pensar en que vas a hacer”

 

-  ¿nos acompañaras?

 

-  si

 

 


Coro
Ella mueve su cintura al ritmo de un tan tan
y él se va divorciando del tío Sam

 

Los nueve jóvenes empezaron su paseo, se iban riendo, entre bromas y todo, algunas veces se les hacia difícil recordar que tenían que hablar en español, para que Sasuke  entendiera, pero al hacer eso el rubio era el que no entendía. Kiba y Hinata no se separaron del pelinegro menor, ya que desarrollaron un instinto de protección hacia él. Comieron algo por la playa, después un helado, y cuando el sol cayó se dirigieron al hotel de los mayores. Sasuke se sintió un poco incómodo al estar rodeado de tanto lujo, pero entre Hinata y Kiba lo distraían, las parejas se separaron para cambiarse ya que tenían pensado ir a bailar un rato, Kiba se apuró para no dejar a su nuevo amigo solo, lo que les dio tiempo para platicar.

-       ¿Qué te sucede?- pregunto el joven Inuzuka dulcemente para no alterar al pelinegro - puedes contármelo, la verdad es que yo no tengo dinero como mis amigos, entre a la u.c.l.a gracias a una beca universitaria del 100%, hay conocí a Shino  y a los demás, así que yo nunca te juzgaría, ya que sé que es hacer de todo con tal de salir adelante.

 

-       … - Sasuke no sabía si contarlo o no, pero ya no podía con toda esa carga – yo soy de Cuba, viví mis primeros años con mi abuelo ya que mis padres murieron al intentar salir de allí, mi abuelo me dejo solo cuando yo tenía doce años, vivo en la casa que me dejo, pero tuve que trabajar en un bar, para poder mantenerme, hay bailo, vine aquí ya que entre a un grupo como bailarín, pero estos me dejaron atrás, se llevaron mis pertenencias y estoy solo en un país que no conozco y sin saber cómo regresar a mi casa.

 

Kiba veía caer las lágrimas por aquel pequeño rostro, era verdad que el azabache ya era mayor de edad, pero eso no le quitaba que todavía era un niño para afrontar todo lo que tuvo que vivir. Con delicadeza lo abrazo tratando de reconfortarlo.

Todo fue observado y escuchado por una persona que estaba escondida detrás de una gran columna.

 

Oo0oO

 

Cuando todos estuvieron reunidos, salieron a un antro, todos iban vestidos muy elegantemente, incluso Sasuke a quien Kiba le presto algo de su ropa.

Naruto y Sasuke se encontraban bailando, mientras el resto de los jóvenes los observaban.

-       No – Sakura fue la primera en salir de sus pensamientos después de que Kiba contara lo que sucedía.

 

-       Pero Sakura, debemos ayudarlo – rezongo Inuzuka

 

-       Kiba no sabemos si ese joven dice la verdad – explico Haruno

 

-       Pero Sakura….

 

-       Sakura tiene razón Kiba – secundo el heredero de los Hyuga – no me importaría darle algo de dinero, si eso es lo que necesita, pero no vamos a ir hasta Cuba a dejarlo.

 

-       Pero Neji él no va a poder llegar hasta haya si no es en un avión privado, si llega solo lo podían asaltar o encerrar – opinaba una rubia

 

-       Temari tiene razón, debemos acompañarlo – Hinata estaba muy preocupada por lo que le podía pasar a su nuevo amigo

 

-       Lo lamento pero no – Neji no quería llevarle la contraria a su novia, pero no iba a correr ningún riesgo - ¿Cómo sabemos que ese joven no miente? ¿Qué tal si todo es una trampa, para llevarnos hasta aquel país y secuestrarnos?

 

-       Vamos Neji no seas tan exagerado – se reía Kiba, pero al voltear y ver el rostro serio de su novio sabía que esta pelea iba hacer difícil. -¿Shino?

 

-       … - Shino amaba a su “cachorro”, siempre lo apoyaba, incluso en las aventuras más vergonzosas, pero nunca permitiría que algo malo le pasara – lo lamento, pero no estoy de acuerdo

 

-       Por favor Shino, si tú fuiste quien lo invito a acompañarnos - Abúrame miro seriamente a su novio.

 

-       Eso fue porque aquí el peligro es moderado, tenemos una instalación aquí, así que si algo pasaba con una llamaba en menos de 15 minutos estábamos protegidos, además de que la familia Hyuga esta amistada con el gobernador de Yucatán y el mismo presidente de México, en cambio en aquella isla estaremos desamparados.

 

-       Si algo llega a suceder estaríamos a la deriva – opino Shikamaru, y eso fue una señal de que las probabilidades de ayudar al Uchiha eran muy bajas.

 

-       Shikamaru no estaremos desamparados – desmintió su novia

 

-       Estaremos desamparados, ya que nos quitaran celular  y nos prohibirán comunicarnos, salir de allí si nos acusan de algo será imposible – con esa información Hinata, Kiba y Temari sabían que todo estaba perdido, a menos que ganaran más aliados.

 

-       Sakura a ti te cayó bien el joven, ¿porque no quieres ayudarlo? – verde y perla se encontraron

 

-       Kiba dijo que él trabajaba en un bar… - Haruno miro al Inuzuka quien al sospechar lo que iba a decir su amiga bajo la mirada - ¿vendía su cuerpo?

 

Un incómodo silencio invadió la mesa.

-       … es lo más probable – contesto Kiba – pero eso no importa, él se vio obligado

 

-       ¿Cómo estas tan seguro? – el rostro del joven se ensombreció

 

-       Porque cuando no tienes a nadie quien te apoye debes hacer de todo con tal de sobrevivir – tenía la mirada abajo y su novio lo abrazaba fuertemente.

 

-       Kiba – Sakura llamo su atención – yo no estoy juzgando, todos sabemos lo que tu tuviste que hacer – nadie opinaba nada – pero tú no llegaste hasta esos extremos, al contrario luchaste por un futuro

 

Kiba era huérfano vivió en la calle desde los 8 años, aprendió a robar para comer, a los 13 una mujer lo recogió pero solo lo quería para vender su cuerpo, este al verse encerrado en un cuarto con un hombre se defendió, Kiba no habla de lo que paso en ese cuarto, lo único que se sabe es que Inuzuka no fue violado y el sujeto termino muerto. Después de ese incidente la policía llego y se llevó a Kiba a un orfanato, hay se le dio educación, este demostró su gran inteligencia, y con mucho esfuerzo llego hasta donde estaba, a pesar de que la escuela le pagaba todos los gasto de sus estudios y le daba una mensualidad para sus gastos personales, este trabajaba de noche en un restaurant como mesero, hay conoció a Naruto. Y lo demás es historia.

-       Lo que yo trato de decir es que no sabemos si él tiene buenas intenciones, ¿Qué tal si va tras el dinero de Naruto?, todos nos dimos cuenta de que Naruto fue quien le compro las ropas con la cual le vimos la primera vez…

 

-       Eso no quiere decir nada – opino Temari algo enojada.

 

-       Temari lo único que yo quiero es no ver sufrir a Naruto, si mis deducciones son incorrectas me disculpare con Sasuke, pero entiéndanme, no puedo confiar en un desconocido – Neji, Shikamaru y Shino asintieron.

 

-       Por lo menos denle una oportunidad – pidió Kiba

 

Después de esa conversación se separaron.

 


Él se refugia en su piel... la quiere para él
y ella se va olvidando de Fidel

 

Sentirlo entre sus brazos era una experiencia única, quería tenerlo hay para siempre, cuidarlo, protegerlo, amarlo.

Bailaban al ritmo de la música, algunas personas los veían raro, pero a ellos no les importaba.

El azabache tenía sus dudas, sabía que Naruto no correspondía sus sentimientos, ya que este amaba a la pelirosa, pero con vivir en una ilusión durante unas horas no perdía nada.

 

Oo0oO

 

Kiba se encontraba en brazos de su novio, este le acariciaba el cabello lentamente.

-       Por favor Shino – pedía por décima vez

 

-       No

 

-       Por favor, por favor, por favor, por favor, por favor, por favor, por favor, por favor, por favor, por favor, por favor

 

-       No

 

-       Shino entiéndeme por favor, si tú no hubieras confiado…

 

-       Eso es diferente

 

-       No, no lo es

 

-       Si lo es, ya que él no me gusta, o acaso quieres que también pelee por el – el rostro del Inuzuka se puso rojo, e inflando los cachetes  se lanzó contra su novio besándolo ardientemente.

 

-       No, tu eres mío – sentencio, el pelinegro se perdió en los sentimientos que le hacía vivir su novio –por favor – susurro en su oído, lamiéndolo lentamente – nada me pasara si tú estás conmigo Shino, además de que yo se defenderme solo – mordió, lamio y soplo su oreja – vamos, ya íbamos a ir, no me pasara nada – soltó un jadeo en el oído del pelinegro – ¿podemos ir Shino?

 

-       N… no – la voz del pelinegro se oía despacio,  y ansiosa.

 

-       Mmm – lamio su oreja para después soplar – me dejarías convencerte – pidió jadeando, acariciando una parte muy sensible del ojioro

 

-       Mmm – Kiba sonrió burlonamente y jalo a su novio del brazo para dirigirse a los baños.

 

 

Oo0oO

 

Dos ojiperlas se veían sin despegar su mirada.

Hinata puso una mirada triste, sus ojos se cristalizaron, y su labio comenzó a temblar ligeramente. Neji trataba de resistir, pero él no soportaba ver sufrir a su niña.

-       Neji-oni-sama ¿me quieres? – la ojiperla hablo en japonés, chillando su voz, sabía que eso causaba estragos en su prometido, Neji no iba a soportar mucho más, pero cuando Hinata comenzó a derramar ligeras lagrimas supo que ya no había salida – por favor

 

-       Está bien Hinata, preparare todo – la ojiperla sonrió deslumbrantemente y como recompensa beso a su novio.

 

 

Oo0oO

 

Se sentía un ambiente algo tenso, sabía que uno de los dos iba a perder, ese no era un concurso, era una guerra.

-       Ya íbamos a ir – empezó la rubia

 

-       Es peligroso

 

-       ¿entonces nos iban a llevar a un lugar peligroso?

 

-       El peligro es el joven

 

-       Un joven de 1.50, como de 50 kilos, esbelto

 

-       Puede que lleve drogas

 

-       No tiene maleta

 

-       En su cuerpo

 

-       … - la rubia tenía una ceja alzada –tenemos buenos abogados

 

-       No los suficientes

 

-       Te tenemos a ti

 

-       …

 

-       … - Temari sabía que su novio era muy sobreprotector aunque no lo pareciera – por favor, tú ya tenías un plan de ir, nada saldrá mal.

 

-       Ese es un pensamiento irracional - … - ok iremos.

 

 

Oo0oO

 

Una joven pelirosa veía como el rubio abrazaba suavemente al azabache, no es que le callera mal Sasuke, simplemente no quería ver sufrir a su amigo.

 


Qué sabían lennin y Lincoln del amor
qué saben Fidel y Clinton del amor....

 

La llegada a cuba fue tranquila, viajaron en clase turista para no llamar la atención, lo que fue algo nuevo para todos, Sasuke había viajado en barco y luego en autobús, Kiba nunca había viajado en sus primeros años, comenzó a viajar cuando conoció a sus amigos, pero siempre iba en aviones privados o en primera clase, para todos fue divertido, menos para Shikamaru quien odiaba el ruido y Neji estaba bien mientras viera la sonrisa de su prometida.

Entre fotos y paseos recorrieron la ciudad de la habana, cuando llego la noche convencieron a Sasuke de que se quedara a dormir en el hotel.

El joven no podía dormir así que salió al balcón donde se quedó viendo la luna, hasta que tocaron a su puerta, al abrirla se encontró con Sakura, quien disculpándose por la hora pidió que hablaran.

Un silencio incomodo se apodero del ambiente, ambos se miraban fijamente sentados en la sillas que estaban en el balcón.

-       Estás enamorado de Naruto – afirmo la pelirosa, sorprendiendo al azabache

 

-       No

 

-       Yo sé que si

 

-       No te preocupes no te quitare a tu novio – la ojiverde sonrió, ya que estaba en lo correcto con su sospecha.

 

-       Naruto no es mi novio, así que te volveré a decir. Estás enamorado de Naruto

 

-       … - … - si

 

-       Le has dicho en lo que trabajas en realidad – el rostro del azabache mostro una gran sorpresa.

 

-       No – Sasuke no sabía cómo se había enterado de que hacía en realidad, si ni siquiera se lo había dicho a Kiba

 

-       Díselo, confiésale tus sentimientos a Naruto, pero también cuéntale tu pasado y tus sueños de futuro, solamente así te aceptare como su pareja – Sasuke ya no entendía nada, al ver su reacción la pelirosa le sonrió, se levantó y acariciando la cabeza del ojinegro le sonrió dulcemente – ¡animo!

 

Sasuke se quedó solo en la habitación,  no sabía que pensar, él ya había admitido que amaba al rubio, pero no tenía nada que ofrecerle al rubio, le daba vergüenza decir lo que hacía, no quería ver la cara desilusionada del ojiazul. No quería verle su mirada llena de desprecio.

Por segunda  vez se escuchó el toque a su puerta, el azabache abrió encontrándose con la persona a la que menos quería ver en ese momento.

-       Buenas noches Sasuke ¿podemos hablar? – pregunto Naruto en un fluido español, sorprendiendo al azabache

El rubio se había pasado todas las noches aprendiendo español teniendo como maestro a sus amigos, todavía no entendía muchísimas palabras, pero como mínimo podía hablar un mal español.

-       Si – ambos jóvenes se acomodaron, Sasuke se sentó en la cama agarrando un pedazo de sabana para apretarlo, Naruto con toda la calma se sentó en una silla que estaba cerca de un gran escritorio.

 

-       Me gustas

 

-       … - las palabras todavía no eran procesadas por el azabache - ¿eh?

 

-       Sé que no tenemos mucho tiempo conociéndoos, pero desde la primera vez que te vi, me gustaste – dentro del rubio había un remolino , por un lado estaba revelando sus sentimientos, por el otro trataba de que no se le olvidara como se pronunciaba lo que quería decir, paso noches en vela aprendiendo como explicar sus sentimientos  en otro idioma y si era capaz de aprenderse  200 reglas de seis renglones cada una en una noche esto era pan comido, además de que Shikamaru hizo una lista de palabras que tenían más probabilidad de ser dichas por el azabache.

 

-       Naruto no sabes lo que dices – las lágrimas caían por los ojos del azabache, ya que estaba escuchando lo que más quería, pero no podía aceptar esos sentimientos ya que no los merecía.

 

-       Si lo sé, te amo – el rubio se acercó al ojinegro y con gran cariño le acaricio el rostro – te amo

 

-       Pero… pero no sabes lo que eh hecho

 

-       Si lo se

 

-       No, no lo sabes – el azabache se levantó de golpe, alejándose de Naruto

 

-       Si lo se

 

-       No, yo trabajo en un bar

 

-       Lo se

 

-       Donde bailo, le bailo a los hombres

 

-       Lo se

 

-       No me desnudo pero si los provoco

 

-       Lo se

 

-       Cállate Naruto, y escúchame – el rubio asintió a pesar de que el ojinegro no lo veía- le bailo a los hombre, me aprovecho de ellos, incluso a veces vendo …

 

-       Lo sé – el ojiazul se acercó al azabache y con cuidado limpio sus lágrimas – no me importa, te amo.

 

-       ¿Quién te lo dijo?

 

-       Te oí decírselo a Kiba

 

-       ¿Qué? – Sasuke no quería ver a los ojos a Naruto, no quería ver la desilusión. Pero con cuidado el rubio  le obligo a verse a los ojos, y el azabache solo vio amor en ellos.

 

-       No me importa lo que hayas tenido que hacer, te amo y quiero pasar el resto de mi vida contigo.

 

-       Pero los dos somos hombres

 

-       No importa… ¿me amas?

 

-       …  si

 

-       Entonces lo demás no importa – con una gran sonrisa, Naruto abrazo a su ojinegro. – a partir de ahora estaremos juntos.

 

-       Pero yo no puedo salir de esta isla.

 

-       Mañana mismo eso estará solucionado.

 

-       ¿te mudaras para acá?

 

-       No, mañana mismo arreglaremos tus papeles y nos vamos

 

-       ¿eh? ¿adonde?  ¿estados unidos?

 

-       No

 

-       ¿entonces?

 

-       … - el rubio reía dulcemente acariciando el cabello de SU NOVIO – adonde tú quieras, tu solo di el lugar y allí formaremos nuestra nueva vida

 

-       ¿pero tú vives en estados unidos?

 

-       Eso no importa

 

-       Pero no podrás tener descendencia

 

-       En verdad no quieres estar conmigo, ¿verdad? – el azabache negó vigorosamente

 

-       No, solamente no quiero que te arrepientas

 

-       Nunca me arrepentiré  Sasuke – con cuidado el ojiazul cargo al ojinegro y lo acostó en la cama.

 

Los besos iniciaron tiernamente, conociéndose, explorándose. Las manos del rubio acariciaron la piel expuesta, sacando suaves gemidos del azabache.

Con cariño quito lentamente la playera de Sasuke,  comenzó dándole pequeños besos en el cuello, lamiendo, mordiendo, el azabache gemía lentamente, perdiéndose en los sentimientos que vivían.

-       Espera Naruto – el ojiazul se detuvo – tengo que confesarte algo, en el bar yo vendía m...

 

-       No es necesario que lo digas – el rubio continuo besando pero esta vez siguió en el pecho, Naruto nunca había estado con un hombre, pero hasta el momento todo el cuerpo del azabache le fascinaba.

 

-       Déjame terminar, coqueteaba con los hombre para ganar mejores propinas incluso vendía mis besos – el rostro del azabache se encontraba de lado, a pesar de que la cabeza del rubio estaba refugiado en el hueco entre su cabeza y hombro, la vergüenza de Sasuke era muy grande – vendía mis besos y mis caricias… pero nunca vendí mi cuerpo – la cabeza del rubio se alzó rápidamente y con la mano junto ambas frentes

 

-       ¿Qué? – la sonrisa que comenzaba a formarse en su rostro se presagiaba como una de las más grandes y felices. Con un gran sonrojo  el azabache continuo.

 

-       Nunca pase de besos y caricias superficiales – susurro el azabache, con valor miro a los ojos azules de su compañero. – no miento

 

El rubio abrazo fuertemente a su novio y repartiendo besos por todo el rostro comenzó a reír ruidosamente.

-       Te amo, te amo

Varios minutos después solo se encontraban abrazados, lentamente el ojiazul se levantó.

-       ¿adónde vas?

 

-       A bañarme

 

-       ¿eh? No vamos a conti… - la oración murió en sus labios, sonrojándose al máximo

 

-       No mi amor – la cara desilusionada del azabache le hizo sacar una dulce sonrisa, se sentó a su lado y comenzó a acariciar el suave cabello – si te estuviste guardando para un momento especial, esperaremos a nuestra boda.

 

-       ¿boda?

 

-       Si, solo prepararemos los papeles, viajaremos, y nos casaremos. – respondió, el rostro de Sasuke estaba sorprendido, pero no podía dejar todo su orgullo de lado.

 

-       Y si no quiero casarme contigo – desafío

 

-       Pues… te secuestro – Naruto se lanzó contra Sasuke aplastándolo, con cuidado de no recargarle todo su peso, susurro en su oído – te amo ¿te casarías conmigo?

 

-       … solo porque me amenazaste – murmuro

 


Ahora viven en parís
buscaron tierra neutral
ella logró ser actriz, él es un tipo normal

 

Los años pasaban rápidamente y más cuando se está con la personas que uno ama, al día siguiente del cual se confesaron, Shikamaru ya tenía todos los papeles necesarios para que Sasuke saliera de cuba, en menos de un año ya se habían casado, al cumplir los tres Sasuke estudio  actuación y en ese momento era la más grande revelación de parís. Mientras que Naruto trabajaba para una gran compañía del cual pronto se convirtió en socio. Dos años más pasaron y la felicidad de ambos solo crecía.

Vivian muy cómodamente, siendo visitados por todos sus amigos.

Neji y Hinata se habían casado dos años atrás, y ahora vivía muy feliz junto con sus gemelos, los pequeños Misaki y Akihiko. Esta hermosa familia vivía en estados unidos, pero no desaprovechaban la oportunidad para viajar a visitar a sus demás amigos.

Temari y Shikamaru trabajaban para la nasa, no salían mucho pero aprovechaban sus vacaciones para visitar a sus familiares y amigos. Tenían a una pequeña con el mismo carácter perezoso del padre, a la cual le pusieron Emily.

Shino y Kiba trabajaban alrededor del mundo, viajando y viviendo miles de aventuras, gracias a la genética y la inseminación artificial  tenían a un pequeño hijo de los dos, llamado Shiki, el cuál era la adoración de sus padres, su carácter era igual al de Kiba a pesar de tener apenas dos meses.

Sakura  continuo viviendo en estados unidos donde se hizo alumna de Tsunade, en este momento era una de las más importantes ginecólogas del mundo.

Gaara y Sai se sorprendieron mucho a conocer toda la historia, pero rapidamente se volvieron amigos. A los pocos años se casaron, y en ese momento seguian viviendo en cuba, muy felices


Caminan de la mano, calle campos elíseos
como quien se burla del planeta y sus vicios

 

Más años pasaron, y en la ciudad de parís se podía ver a una familia pasear por las calles, eran cuatro personas, de las cuales solo una era mujer y no era precisamente la mamá.

Después de varios años Sasuke y Naruto decidieron adoptar, primero a una hermosa niña, esta era rubia de ojos oscuros, la cual ya tenía en ese momento seis años, el segundo en llegar a la familia fue un niño el cual el azabache encontró en la calle mendigando este era de cabello oscuro y ojos negros, después de una pelea con el padre del niño, el cual lo sobreexplotaba y de pelear con el gobierno perdiendo varios miles de dólares, la pareja por fin tenía a su precioso niño.

Vivian en una de las colonias más caras de la ciudad, y nadie era capaz de hacerles malas caras ni a ellos ni a los niños, ya que el renombre de ambos apellidos les daba miedo.

En ese momento se encontraban caminando, disfrutando de esa hermosa mañana, para ellos los problemas del mundo no existían, solo su pequeño mundo importaba, disfrutaban de los placeres más pequeños y para ellos la vida era maravillosa y así iba a continuar, gracias a sus pequeños Nowaki y Ayari.

FIN

Notas finales:

Oo0oO

jeje si lo se

super largisimo

para las personas que llegaron hasta el final

mañana publico la continuacion de "una nueva y ultima oportunidad" y el inicio de "al diablo lo nuestro"

ademas va a ver un extra de este songfic

espero qeu me sigan leyendo

onegaiiiiii un review

ustedes saben qeu es d elo que vivo.

n.n

jeje se aceptan tomotasos, ceboollasos, criticas CONSTRUCTIVAS. onegaiiiiiiiiii regalenme u comentario

los adorooooooo

  Oo0oO


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