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"Te veo con otros ojos" por A Quick Kiss

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Notas del fanfic:

Este es parte de nuestro drabble: Bienvenidos a la universidad.

Disfruten :3

Tambien pueden leer el DooSeob: Una vez más y pronto el Minkey: Ultimo año.

 

Notas del capitulo:

Primer capitulo!

¿Hola?

¿Hay alguien?

*sonido de grillos*

Este es el ultimo drabble de la serie: “Bienvenidos a la universidad” (KyuWook) Con el termino de EunWook y de esta serie de drabbles. Habrá comeback de SHINee :3

Buen día a todos.

 

Todo iba normal, como siempre. Saludé a unos cuántos amigos que estaban pasando por ahí y doblé la esquina para entrar a mi curso.

El pequeño ese estaba siendo molestado por mis amigos, supuestamente “jugando” con él. Ellos cogían su maleta y la lanzaban por los aires mientras el muchacho peleaba y saltaba para alcanzarla.

-Eres tan patucho que das pena- dijo Kim JaeWook.

-Ya dénmela por favor, si no los hacen le diré al profesor- dijo Kim RyeoWook.

-Cómo si ese loco del profesor Kim KiBum te hiciera caso- respondió Bang DongChan.

Suspiré y fui hacía la escena. Como yo era más alto que Choi HaRim cogí la mochila de Wookie y se la entregué, él me miró un poco confundido y asintió.

-Déjenlo, no vale la pena molestar a alguien más pequeño que tú- dije en dirección a Kim JaeWook.

Le di una palmadita y los invité a que se sentaran. El profesor entró e iniciaron las clases. Cogí un pedazo de papel y lo tiré en dirección a Ryeo, no sé en que estaba pensando pero al final me prestó atención, sonrió y yo le guiñé el ojo.

Kim RyeoWook es el típico chico inteligente que todo el mundo molesta, siempre era la burla de mis amigos y compañeros, pero sacando su estereotipado ser era un buen amigo con modales y excelentes principios.

En cambio yo soy el (típico también) chico más popular de mi facultad, con una novia muy bonita y amigos que le sobran. Nunca supe por qué yo soy así y RyeoWook es como es.

Nadie creería que somos mejores amigos desde que tengo memoria. No se sabe que yo y él vivimos en el mismo departamento…creerían que somos pareja o algo por el estilo, aunque no me molesta el hecho de que RyeoWook tenga “gustos” por otro tipo de personas no hay que dejarnos descubrir, con tal de que él acepte todas mis condiciones no hay problema entre los dos.

Acabaron las clases y pude divisar a Wookie caminando apresuradamente a la casa que está muy cerca de la Universidad.

Yo, como siempre, me quedé hablando con mis amigos.

Me despedí de ellos y fui al departamento, ya era muy de noche y supuse que Ryeo se había madrugado estudiando y que pronto lo encontraría durmiendo encima del escritorio.

-¡RyeoWook, ya llegué!- dije eufóricamente.

No escuché nada, fui hasta la cocina y encontré una nota en el refrigerador.

KuyHyun, te dejé la comida en el horno, caliéntala en el microondas, también hice un pedazo de tu ensayo sobre las drogas. No te duermas muy tarde. Gracias por ayudarme ^_^

Sonreí y fui a comer, era arroz frito con Kimchi. Esa es una de mis comidas favoritas, igual siempre RyeoWook me las hacía.

Dejé todo limpio y fui a mi cuarto, lo encontré durmiendo encima de una pila de libros. Como era de costumbre sacudí sus hombros despertándolo de una, se asustó y con unos ojos chiquititos se secó la gotita de saliva que le corría por la comisura de sus labios.

(N.A: Solo imagínense a ese chibi durmiendo en una pila de libros :3)

-Kyu…ya llegaste- dijo un poco alterado- lo siento, me he madrugado nuevamente- se restregó los ojos y bostezó.

-Chibi- tan, ve a tu cama, yo terminaré mi ensayo- puse una mano en su hombro sentándome a su lado.

-Te ayudaré a terminarlo- sugirió tomando la hoja.

-No hace falta- lo detuve quitándole la hoja- ya hiciste mucho por hoy, debes descansar.

-¿Seguro? Tú sabes cómo es el demonio Key cuando empezamos el semestre.

 -Sí, pero tienes ojeras, mejor lo terminamos mañana juntos.

-Está bien…buenas noches Kyu- y se fue a su cama que estaba adosada a lado de la mía.

La verdad era que yo estaba muy cansado así que también me fui a dormir y no hice nada. RyeoWook es comprensivo, seguramente me los haría completo.

*A la mañana siguiente*

-¡Los libros de J.K. Rowling son un asco! Viven en mundo estúpido, lleno de fantasías, ellos no saben nada sobre la literatura- decía el profesor Kim KiBum quemando más libros.

Mientras se hacía un estúpido debate entre un estudiante llamado Choi MinHo y el profesor yo veía una imagen un tanto (mucho) extraña.

Era Ryeo hablando con un buen amigo mío y de DooJoon, parecían hablar de algo interesante porque sea lo que sea a Wookie se lo veía feliz y contento.

Esos dos locos seguían gritándose hasta que el profesor se llevó a Choi MinHo a la oficina.

Pobre, tenía una vida por delante- pensé riéndome.

Todos quedaron el silencio murmurando sobre lo que había pasado. Era la pelea del siglo.

-Que loco lo del profesor y ese estudiante ¿no?- dijo SanDara sentándose a lado mío, desvié la mirada hacía ella extrañado.

-Disculpa… ¿qué?- ella esa hizo una mueca de desagrado y me dio un beso fugaz en los labios, luego sonrió alegremente.

-Soy tu novia, deberías saludarme al menos- dijo entre pucheros.

-Lo siento… ¿sales hoy día?- cerré los cuadernos y dirigí mi cuerpo hacia ella.

-Tengo que estudiar, van a tomarme lección de botánica- dijo poniéndose frente a la pizarra.

-Apuesto a que vas a ir con Min y seguramente se la van a pasar chismoseando y hablando guarradas de mí o de MinHo- dije riéndome.

-¡Oye! Yo no hago eso, yo si estudio. No soy tú que siempre pasas conectado en las redes sociales.

Ya la iba a besar solo que DooJoon, un ayudante de Cátedra del profesor Kim KiBum informó que se acabó la clase.

-Nos vemos mañana- dije dándole un beso en la mejilla y saliendo del salón- ¡Estudia bien!- al salir me encontré con Min- y tú, no distraigas a mi novia.

-Ya KyuHyun, no lo hago, esta vez sí vamos a estudiar duro- dijo juntando su puño con la mano abierta.

Le revolví el cabello y me fui  a los comedores a comprar una barra de chocolates que sé que le gustan a Ryeo, tal vez así podía decirme que hacía hablando con Choi SeungHyun.

Volví al salón después de saludar a YoSeob que caminaba algo apresurado a la sala de la fotocopiadoras, seguramente RyeoWook estaría limpiando el desastre que dejó el profesor Kim KiBum.

-Hola- dije arrimándome a la puerta- ¿Por qué estas limpiando tú solo? ¿No debería DooJoon estar ayudándote ya que también es un ayudante de Cátedra?

Él levantó la cabeza e hizo una seña como si estuviera recordando algo.

-Creo que me dijo que iba a estar en el cuarto de copias sacando algunos documentos del profesor- dijo apoyándose en la escoba.

-¿Enserio? Porque vi a YoSeob caminar apresurado a ese cuarto- dije un poco avergonzado borrando mis malos pensamientos.

-Es mejor que no pensemos en lo que han de estar haciendo, son solo amigos. Además no creo que DooJoon quiera estar con alguien ya que hace poco se fue DongWoon.

-Bueno…espero que solo sea eso- se encogió de hombros y siguió barriendo-. Vienes a la casa conmigo, van a dar Joystickeros, además compré nuevos juegos para la consola- dije mostrándoselos.

(N.A: Me gusta mucho ese programa, dan en MTV!)

-Kyu…se oye tentador, pero voy a estar ocupado- dijo observando rápidamente los juegos para después ignorarlos y seguir barriendo.

-¿Qué? ¿Ocupado? ¿Tienes tarea o qué? ¿Tus padres viene a visitarte?- le pregunté entornando los ojos, esto estaba rarísimo.

-Voy a salir con alguien- sus mejillas se tornaron rojas con una sonrisa de niño enamorado.

En ese momento no supe que hacer o decir, nunca Ryeo había salido con alguien. Hasta donde sabía solo salíamos él y yo, a veces, o él salía con sus padres…pero menos con alguien más.

Ante era todo lo contrario, él no socializaba mucho y casi no tenía amigos.

 -¿S-Salir con alguien? Y dime… ¿Quién tiene ese honor?- le dije ocultando mi asombro.

-Sí, ¿algún problema?- negué con la cabeza, sonrió y siguió barriendo- ¿Por qué tendría que decirte?

-Pues porque me preocupo por ti- me acerqué a él y pellizqué su mejilla, hizo una mueca dándome un golpecito- quiero saber su nombre, profesión, antecedentes, número de cédula, padres, de dónde viene…todo.

-Eres un tonto Kyu- dijo riendo- es Choi SeungHyun, tu amigo.

¿SeungHyun? Todos menos él.

-¿Él, cómo así? SeungHyun no es del tipo que te gustan- dije aún más asombrado pues temía por la vida de ese muchachito.

-Lo sé, pero es muy diferente cuando lo conoces, sabe muchas cosas, lee muchos libros que me gustan y sabe sobre cine… pero no te he dicho la mejor parte…toca el piano y tendremos una cita viendo Carrie- dijo saltando alegremente.

Que romántico RyeoWook, una cita amenizada por una película psicológica de terror

(N.A: Saku y Yule somos fanáticas hasta la muerte de esa película)

Él al darse cuenta de mi desagrado dejó de saltar y me dijo:

-No voy si no quieres- noté la tristeza en su cara.

-No soy tu padre ni nada de eso, ya eres grande así que anda, no hay problema- dije saliendo del lugar.

Noté que Choi SeungHyun venía cargando un balde de agua con un trapeador, tenía ganas de decirle que cuide a RyeoWook pero no lo hice, sería algo estúpido e inmaduro.

Después de verlo me acordé que no le di la barra de chocolate que le compré, caminé otra vez hacia el salón pero parecía que sobraba.

-Ya traje el agua con el trapeador- dijo amablemente.

-Gracias Seung…- se rieron, enserio parecía que se gustaban.

-Ah, y también te traje esto- exclamó sacando de su bolsillo dos chocolates Sneekers, no sé cómo supo cuales le gustaban, era eso o era el uno para el otro.

-¿Cómo supiste que eran mis favoritos?

-¿Son tus favoritos? Los míos también- dijo abriendo el paquete para entregárselo a Wookie.

Yo siempre abría sus paquetes cuando él no podía (la mayoría de los casos), yo no más le compraba sus chocolates…no puedo creer que él ahora sea mi reemplazo.

Bajé la cabeza y coloqué mis manos en mis bolsillos. Caminé cabizbajo aún con el chocolate en mis manos.

Espero que a SanDara le guste este chocolate.

POV Kim RyeoWook

*Flashback, 7:00 A.M Departamento de Kim RyeoWook y Cho KyuHyun.*

Me levanté en silencio tratando de no despertar al dueño de mis pensamientos, fui a ducharme y luego me preparé algo de comer, dejé el desayuno de Kyu en el microondas y alisté mis maletas para la universidad.

Saludé a YoSeob que iba bajando con su maleta algo decaído. Él y DooJoon eran casi los únicos amigos que tenía, bueno, mejor dicho compañeros de piso.

No me importaba ser un “x” en la vida porque siempre lo había sido, supongo que ya estaba acostumbrado, siempre bajo la sombra de KyuHyun, patético.

Entré al salón más temprano por el hecho de que era un ayudante de Cátedra, sorpresivamente ya se encontraba el profesor Kim KiBum, lo más curioso fue que estaba vestido como todo un profesor, si se podría decir, ejemplar. Fui el primero en llegar, me alegré mucho.

Me acerqué lentamente porque sinceramente no sabía si dormía o estaba desmayado.

-B-Buenos días profesor KiBum, estoy listo para cumplir con mis obligaciones y...- me interrumpió.

-Sí, sí ,sí, buenos días, ya deja de andarme sacando en cara lo buen estudiante que eres y sirve para algo- se levantó y sacó de su “bolso” unas llaves- anda a mi oficina y tráeme un nuevo coñac que este ya se acabó- dijo alzando la botella vacía- bótalo en el basurero-. Lo miré con extrañeza- rápido, corre y sirve para algo.

¿Cómo es que contratan a gente como ésta?

-Está bien- agarré las dos cosas y salí del salón.

Era la primera vez que entraba a su oficina. Esta estaba horrible y muy desordenada, había restos de comida por todos lados, hojas y libretas volando incluyendo el olor pestilente del aire. Fui hacia la vitrina dónde pude observar toda especie de licores, saqué una botella de coñac y boté la otra en el basurero.

-¿Quién eres tú?- dijo alguien detrás de mí.

 Me asusté un poco y pensé que (por su gran aspecto físico) sería un abusador, de esos que siempre me molestan.

-Yo, yo no más vine a ver algo del profesor- dije abrazando la botella contra mi pecho.

-Ah, ¿También eres un ayudante de Cátedra?- dijo sorprendido.

-Hasta ahorita pensaba que yo y DooJoon éramos los únicos, ¿tú quien eres?

-Yo soy Choi SeungHyun- dijo extendiendo la mano- y es un gusto conocerte.

-Mucho gusto- dije un poco nervioso- yo soy…

-Kim RyeoWook, si te conozco, me han hablado muy buenas cosas de ti, eres un excelente estudiante, tus notas lo reflejan- me sonrojé un poco y solo miré al suelo.

-Yo no diría eso, ¿estudias lo mismo que yo?

-Creo que tú estudias medicina forense, ¿no es así?- asentí- no, yo estudio administración de empresa.

-Oh, claro, es una muy buena carrera, ha de ser divertido- murmuré.

-¿Divertido?, te equivocas, es horrible, son puros números y números, me canso, lo tuyo ha de ser divertido. ¿Cómo se siente ver a cuerpos muertos en las prácticas?

-Pues bien creo, aunque lo nuestro también es un poco difícil- sonrió igual que yo.

-¿A ti que te envió a ver ese loco?

-Pues su infaltable botella de coñac- dije alzándola.

-¡¿Dónde está mi licor?!- gritó el profesor KiBum.

Reímos nerviosamente, arregló su flequillo y dijo:

-Es mejor que vayas o se pondrá enojado, yo voy en un momento, primero tengo que sacar la basura- alzó las bolsas y volvió a sonreír.

Salí casi huyendo, uno: porque ese profesor era capaz de pegarme o bajarme puntos y dos: ese chico ocasionó algo en mí que acabé sonrojándome mucho.

-Al fin, mi querido coñac- dijo al verme entrar enseguida me lo arranchó de las manos- has tardado mucho-con el puño cerrado me dio un golpecito en la cabeza

-Lo-lo siento profesor no ha sido mi in…- a este chico se le estaba convirtiendo costumbre interrumpirme el habla.

-Todo fue culpa mía, yo lo distraje- dijo SeungHyun unos cuantos pasos de distancia haciendo una reverencia.

-Al parecer llego tu héroe- soltó con cierta sorna-. ¡Par de idiotas inservibles!- volvió a sentarse mientras destapaba la nueva botella de coñac-. Tomen -puso en alto la botella mientras que su mirada se dirigía a nosotros.

-Siéntanse privilegiados, les estoy dando de mi antídoto para no estar triste, vamos sean felices- hice una rotunda negación mientras que Seung Hyun solo se hallaba con los labios sellados-. ¡Les he dicho que tomen!

Nos sobresaltamos al mismo tiempo, cogimos rápidamente la botella y un solo sorbo que vacilo en mi boca fue lo suficiente para hacerme caer en una crisis de tos. Ese licor estaba demasiado fuerte , me puse rojo y tapé mi boca.

El profesor reía amargamente agitando sus piernas al aire entre carcajada y carcajada. En eso me dijo:

-Esa es la consecuencia, los chicos han sido muy buenos pero no saben el 0.5% de lo que es la vida- teorizó soberbio mientras tomaba un sorbo del coñac.

Sentí como SeungHyun daba golpecitos en mi espalda atenuando mi doloroso ataque de tos.

-Tranquilo pequeño, es solo un loco idiota, inconsciente de sus estupideces- sonrió sereno y beso mi nuca con delicadeza.  Sentí un respigo en el corazón tranquilizándome y arrullándome los sentidos. Alcé la mirada sonrojado y este me guiño un ojo.

Empezamos con la limpieza mientras que el profesor recostado sobre su escritorio balbuceaba incoherencias al aire. Por otro lado SeungHyun no parecía perder hilo de mis movimientos, solo me sonreía todo el tiempo haciendo que en mi se disparara un cosquilleo travieso.

Comenzaron las clases y tuve que regresar a mi vida real, en donde tendría que sentarme en el último pupitre del aula, pero ese muchacho vino y cogió mi mano haciendo que me sentara a su lado.

-¿No quieres ir a lo oscuro, verdad?- hice una negación-. Hay que conocernos mejor.

De repente se me acerco con andar muy seguro y deslizo mi flequillo a su posición correcta con sus masculinos dedos.

-¿Quieres salir conmigo?- mi asombro ya no cabía en mí-. Escuché que habrá un festival de cine de los 70’s y me gustan mucho esas películas- giré mi cabeza aún más sorprendido- por supuesto si no quieres…- esta vez yo interrumpí su habla.

-¡Sí! Si quiero, he conseguido dos pases para ir al  festival, gané un cupón para dos personas-dije dando saltitos  en la silla emocionado.

Pues si bien era cierto, tenía los pases, el plan era que iría con KyuHyun pero este de seguro ya tendría planes con su novia SanDara y yo quedaría en el olvido

-Quiero ver Carrie, he leído el libro y…-me interrumpió.

-¡Sí! También lo he leído, lo que  no me agrada es el final, no es igual que al del libro porque en el final Suzie si ve a Carrie…- y así  inició nuestra enorme plática sobre el libro de Stephen King, lo discutimos hasta mas no poder, me di cuenta de que él era muy divertido y compartía los mismos gustos que yo, era como el paraíso en un cuadro raro en el que un estudiante y el profesor discutían abiertamente como locos, pero a mí no me importaba eso, me importaba más él y lo que ocasionó en mí.

-Entonces paso por ti  a las 8:30, debes estar listo te sorprenderías al ver lo puntual que soy.

-Está bien- susurré-. ¿Esto cuenta como una cita?

 Me miró y bajó la cabeza ruborizado, tomó mi mano acercándose a mi rostro, miré a Kyu quien se encontraba en el extremo del aula hablando con su novia, fue diferente, esta vez no me enojé mucho tal vez porque ya tenía a alguien en quien pensar. Regresé a Seung quien se acercaba cada vez más  pero al final de todo solo besó mi mejilla con suavidad.

-Sea una cita o no, solo quiero conocerte más.

*FIN DEL FLASHBACK*

-¿Tu en serio crees que vendrá?- pregunté preso de la paranoia y de los nervios dando vueltas por todo el lugar.

-Tranquilo, si vendrá, además, apenas son las 8:20- respondió Kyu mientras jugaba los nuevos juegos que me había enseñado.

-Bueno, él me dijo que sería muy puntual- caminé hasta el espejo para arreglar mi flequillo que caía sobre mis ojos a cada rato-. ¿Me veo bien?- KyuHyun dejó a aún lado la consola para mirarme y hacer una afirmación.

-Espero que la pases muy bien, chibi-tan.

-Te he dicho mil veces que no me llames así, algún día voy a crecer- murmuré haciendo un puchero-. No regresare tan tarde, te hice la comida, está en el horno y también hice tu tarea de medicina, o te duermas muy…

-Lo sé, lo sé, lo sé- al instante alguien llamó a la puerta-. Ahora vete, estaré bien, puedo pasar unas horas sin ti.

Sonreí tocando su hombro amigablemente, abrí la puerta y atisbe a Kyu, este hizo una pose de ¨fighthing¨, salí de casa y cerré la puerta. 

Me voltee y ahí estaba el, tan apuesto como la primera vez que mis ojos lo vieron, cargaba una remera blanca  con una chaqueta de cuero negra abierta de par en par, pantalones ajustados  y unos deportivos que acoplaban perfectamente su imagen.

-Hola, te ves muy apuesto- halagó él con su sonrisa misteriosa mientras daba un beso a mi mejilla.

-Igual que tú- susurré estaba demasiado nervioso como para decir algo más. Me tomó de la mano y corrimos hasta su descapotable negro. Me cargo en peso para ayudarme a subir, reí al estar en el asiento y él me mostro un guiño.

Enseguida dio arranque, las carreteras de un puente fueron lo primero que recorrimos, la brisa golpeaba mi rostro con la misma suavidad de una almohada.

(N.A: A Saku y a Karla le encantan esos dulces, algodón de azúcar)

Cerré los ojos y agité los brazos al aire disfrutando de tan amena sensación. En eso Seung posó su delicada mano sobre mi pierna y me sonrió.

-¿Te gusta?- hice una afirmación-. Esto es solo el principio.

Llegamos a un restaurante o más bien algo parecido, había mesas al filo de la carretera y una decoración que dejaba mucho que decir- era  preciosa- nos sirvieron comida americana y yo ya no podía dejar de mostrar mis dientes, era imposible no sonreír.

Comía tranquilamente mientras sentía como SeungHyun daba ligeros golpecitos en mis piernas, secunde su acto y en pocos segundos los golpecitos se habían transformado en placenteras caricias que pasaban de arriba abajo por mi pierna.

Evité a toda costa mirarlo porque seguramente ya me hubiese lanzado sobre el para besar esos labios que de por sí ya me hacían perder la cordura. Gemía casi audible ante sus toques mientras el cambiaba su afable sonrisa por una maliciosa y provocante.

Terminada la cena nos dirigimos al festival, todo era tan divertido, era la misma diversión que sentía con Kyu que incluso hasta llegué a pensar que podría olvidarlo, que podría preocuparme por otra persona, que podía amar a Seung mas que a KyuHyun.

La película llegó a su fin, asió mi mano y caminamos un largo tramo hasta llegar a un barranco en donde se podía observar la ciudad entera. Nos sentamos al borde de este y agite mis piernas al abismo.

Por mi mente pasaron todos los doramas que había visto, me pareció un poco extraño que justo en ese momento se me ocurriera acordarme de las citas que se podían ver en estos, recordé que en cada una de ellas siempre había besos al final y quería que este fuera mi propio dorama.

Si quería besarlo debería dar el primer paso, estaba a punto de tomar su mano como muchos lo harían hasta que un apagón del poste que nos iluminaba (incluyendo toda la ciudad) interrumpió mi plan.

Todo estaba oscuro y lo único que nos iluminaba eran las estrellas que brillaban contrastando mis pupilas dilatadas, era un ambiente perfecto y mejor que eso: era romántico para un beso.

-Yo no sé porque te acomplejas tanto- comentó Seung mirando al negro azuloso del cielo-. Tal vez es porque no tienes ni idea del don que posees.

-¿Un don? Estas delirando- respondí incrédulo mientras apretaba los labios-. No soy nada en este…

-Tu don especial es alegrar la vida de las personas, con tan solo sonreír, hace un rato cuando te vi salir de tu apartamento, sentí que mi mundo se iluminó, que ya nada podría hacer que mi sonrisa se borrara, tu simple presencia y la dulce certeza de que existes en mi vida me hace inmensamente feliz.

Mis mejillas ya estaban rojo tomate, él solo se limitó a sonreír para luego volverse a fijar en las estrellas, me hice una bolita (:3) para contener mis escandalosos gritos de felicidad.

Eso casi sonaba como una declaración, no estaba seguro si se trataba de un amor a primera vista. Lo único que sabía era que Seung era una persona muy especial y linda.

-¿Me…me puedes besar?- pregunté mientras mis manos sumamente sudadas mostraban mis nervios, no pude describir cual fue exactamente su mirada pero si oí su respuesta.

-Claro…Wookie- susurró ya cerca de mi rostro.

Inmediatamente se colocó frente a mí, lo miré fijo mientras él se acercaba cada vez más, resbaló el dorso de la mano suavemente por mi mejilla y dejó un pequeño beso sobre mis labios, deje a un lado mis nervios y me acerque un poco más a su boca abriendo más mis labios al igual que SeungHyun.

Sentí sus dientes aprisionándome. Abrí del todo mi boca jugueteando con su lengua, todo era tan delicioso, tan irreal, tan perfecto. Su mano me agarró por la espalda y yo me aferré más a su delineado torso, peiné sus cabellos y levantó mis piernas acomodándolas alrededor de sus caderas.

El beso siguió tomando el control de nuestro tiempo hasta que nuestros labios se cansaron, me desenrede de sus ropas notando un leve sonrojo en sus mejillas, sus labios parecían latir rojos y ensalivados. Me besó fugazmente y me abrazó con fuerza como si alguien me fuese a arrancar de sus brazos.

-Te mostrare lo divertida que puede ser la vida- susurró en mi oído.

Me estremecí un poco al sentir su fría respiración rozar la comisura de mi oreja. De repente unos dientes se comían a mordiscos mi cuello, con sus labios empezó a succionarme el lugar donde había dejado su mordida, se aferró a mis brazos mientras sostenía su cabeza para  que siguiera con esa deliciosa tortura.

Podría asegurar que fue la segunda persona que más amé después de KyuHyun.

Sentía como dejaba con sus labios un sinnúmero de cosas que me recorrían la piel y me dormían la conciencia. En serio me gustaba, mucho.

-S-seung ya- gemí suavemente cerrando los ojos y tomándole de los hombros.

-Esto es para que me recuerdes, todo esto y lo mucho que te quiero- murmuró besándome la clavícula-. Te llevaré a casa.

Todo el camino a casa fue recorrido entre caricias, mimos y risas mientras no desentrelazaba mi mano. Llegamos al edificio, me cargó en su espalda y subimos.

-Sano y salvo mi principito hermoso- dijo melosamente mientras me bajaba de su espalda dándome vueltas por los aires. Rodee con mis brazos todo el perímetro de su cuello y selló mi inevitable sonrisa con un beso, abrazó mi cintura y  sentía que me quería comer vivo.

-Te veo mañana en la universidad- dijo separándose de mis labios mientras me dejaba un  mordisco.

Lo observe desaparecer bajando la escalera, suspiré como niño enamorado, jamás en mi tonta vida me había sentido importante para alguien, sentí que era la primera vez que alguien podría llegar a amarme y valorarme tal como soy.

Choi SeungHyun, tú me gustas mucho.               

POV KYUHYUN (EVIL KYU XD )

-Ya es muy tarde ¿Dónde estará?- me pregunté a mí mismo mordiéndome el dedo.

Habían pasado más de cinco horas desde que se había ido con SeungHyun, ni siquiera se había molestado en llamarme para decirme que estaba bien o alguna señal de vida por lo menos.

De repente la puerta se abrió dejando ver a un Wookie con la sonrisa más alegre del mundo que hasta incluso a mí me dieron ganas se sonreír.

-Llegaste- dije muerto de curiosidad y sin más preámbulos le pregunté-. ¿Cómo te fue?

-B-Bien, se portó muy dulce conmigo- respondió con la vista perdida mientras se dirigía al congelador-. ¿Quieres helado?

-¿Porque te dan ganas de comer helado a estas horas?- le acaricié la cabeza y mi mano resbaló por su cuello dejando ver  una inusitada sorpresa-. ¡Wookie! ¡Te has enrollado con él!- grité alarmado mientras alejaba mis manos de él.

Fue sumamente extraño, ver un moretón en el blanco cuello de Ryeo causado por un chico que apenas había conocido y al parecer su novio.

-¡Kyu! Él es genial, besa como los dioses, es dulce, cálido y atractivo- dijo dando saltitos mientras me abrazaba emocionado-. Estoy muy enamorado de él.

-Es genial, RyeoWook- lo cargué en peso e hice una vuelta feliz por los aires-. Mi pequeño ya se está convirtiendo en un hombre- lo baje sintiendo nostalgia pero a la vez alegría clavando sin querer mis uñas en su espalda, creo, tal vez no quería que creciera.

-Emm, Kyu me haces daño- murmuró Ryeo alejándose de mí y de mis garras asesinas.

-Lo siento, soy peor que madre- bufé divertido.

Tome el envase de helado con nuestras cucharas favoritas- tenían nuestras iniciales- y lo llevé a la mesa de centro donde siempre comíamos dulces y -claro las veces que no jugábamos videojuegos- veíamos Inmortal Song.

(N.A: Que ironía en el mundo Suju ellos participaban ahí xD)

Me senté a su lado verdaderamente avergonzado, él ignoró completamente el bochornoso incidente anterior y con una cucharada de helado en su pequeña boca  empezó a contarme sobre la gran cita que había tenido con Seung Hyun.

Sus ojitos eran como un par de diamantes a la luz del sol, cada vez que el nombre de aquel chico se articulaba en sus labios él parecía perder la razón. En serio estaba tan ilusionado que no me quise atrever a decirle que habían visto a Seung con varias chicas, pero según todo lo que me contaba me daba cuenta de que el realmente le importaba y eso me hacía hervir la sangre.

-Y además de eso…- seguía comiendo helado como un poseso-. Me llevó a un barranco donde…- se tocó la cabeza y cayó a rodar al piso, supuse que había sido por el famoso ¨cerebro congelado¨ ya que había comido helado en abundancia.

 Me hubiese dispuesto a ayudarlo pero es que se veía tan gracioso y adorable hecho una bolita (:3) dando  vueltas por el suelo que solo me limite a acostarme a un lado de él.

Me reí descaradamente mientras me montaba sobre él tomándolo de los hombros y sacudiéndolos divertidamente. Muy cerca de su pequeño rostro las sacudidas se detuvieron y su fría respiración chocaba contra mi nariz, me miró con los ojos bien abiertos y lagrimones.

-Cálmate pequeño- dije un inmerso en la amena risa que me hacía doler el estómago. Él se quedó estático mirándome fijo mientras que algo desde mi interior me pedía a gritos más cercanía entre nuestros rostros y su pecho se convulsionaba ligeramente-. Cálmate.

-E-es mejor que ya vayamos a dormir, sabes bien como el demonio Key enloquece si llegamos un segundo tarde y no nos abre la puerta del salón- dijo desviando la mirada y haciendo ademán de levantarse.

Me retiré de su pecho con timidez. Ryeo enseguida se levantó y emprendió su huida. Caminé tras él tanto ya que mi cama se encontraba adosada a la suya y  también por pedirle disculpas.

-Ryeo, escucha…siento haberte hecho sentir incómodo- susurré dando palmaditas a su delgado hombro.

-No hay problema, descansa- volvió a su forma de bolita (:3) pero esta vez sobre sus sábanas.

Me enternecí y recosté  mi cuerpo sobre la cama aun suspirando.

-Buenas noches, chibi-tan- murmuré entrecerrando los ojos.

¿Qué le ocurre a mis sentimientos? ¿Qué me está pasando?

Comentarios o sugerencias.

Las quieren, YuleSaku

 

Notas finales:

Comentarios.

Los comentarios son amor y nos hacen felices.


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