1.
Era tarde y los chicos de The Gazette estaban terminando una sesión de fotos, todos estaban exhaustos y querían irse a casa lo más pronto posible. El vocal de dicha banda era el más exhausto de todos.
-bueno muchachos- les dijo el líder de la banda- ya es tarde, ya terminamos y ya se pueden ir… el ultimo en irse por favor apague la luz y cierre ¿sí?
-si-dijeron todos al unísono viendo a Kai salir por la puerta con su mochila al hombro
-pues, yo me voy también- dijo Aoi tomando su guitarra y metiéndola en su estuche
-yo también me voy- siguió Uruha- Reita ¿te llevo?
-eso sería grandioso-dijo el de la banda en la nariz- Ruki ¿vienes?
-no creo- dijo guardando sus cosas- aun debo recoger un par de cosillas que deje regadas por ahí pero váyanse sin cuidado que yo cierro cuando termine
-en ese caso- dijo el castaño- nos iremos, hasta mañana Ruki-san
-adiós
Los chicos salieron del cuarto dejando al rubio recogiendo sus cosas, ciertamente con el ajetreo de la sesión de fotos había dejado un desastre por todo el piso, ropa, accesorios, maquillaje y todo estaba regado.
Dio un gran bostezo, ya estaba muy cansado, comenzó a recoger las cosas tiradas en el suelo cuando de pronto lo vio. Un conejo blanco…
-¿pero que demonios?
dijo en voz alta dejando las cosas que estaba recogiendo y fue donde el extraño animal
un ¿conejo?-en ese momento el animal color nieve comenzó a correr como un demonio y por alguna razón Ruki comenzó a seguirlo
-¡espera conejo!- siguió corriendo por los pasillos de la compañía incluso en algunos en los que nunca había estado, ese estúpido conejo corría muy rápido.
Entonces el animal paro, Ruki estaba a un pasillo de alcanzarlo, jadeante y muy agotado por la carrera más aparte la fatiga de las fotos, solo quería asesinar a aquel animal de nariz rosada.
- ven aquí animal del demonio- con paso calmado Ruki camino hacia el conejo, este, comenzó a retarlo poniéndose en posición para comenzar a correr, sus ojos eran desafiantes, ¡que animal tan prepotente! Eso hacía que a Ruki le hirviera la sangre y cuando estuvo a unos pasos de atraparlo el animal corrió como demonio una vez más.
Ruki estaba que se lo llevaba la fregada con ese estúpido animal de apariencia tierna, sin pensarlo dos veces saco fuerzas de quien sabe dónde y corrió tras ese animal que doblo en un pasillo que Ruki no conocía pero por estar poniéndole atención no vio una cascara de plátano que estaba en el suelo, la piso y resbalo pero en el momento de estar cayendo vio que debajo de él no había piso… era una especie de agujero negro y fue inevitable para el caer dentro de aquel abismo
-¡AAAAAAAAAAAAAAAHHHHHHHHHHHHHHHHH!
sentía que estaba cayendo, tapo sus ojos con sus manos como si fuera un niñito asustado que acaba de ver una escena de alguna película de miedo. Aun sentía que caía, ya era mucho tiempo, abrió sus dedos sin quitarlos de su rostro para poder ver, diviso una luz blanca debajo de él y comenzó a pensar en su impacto contra en suelo, se imagino a el mismo estrellándose en algún tipo de suelo de metal desmembrándose por el mismo golpe haciendo que sus extremidades salieran volando rompiendo sus huesos y provocando una especie de fuente de sangre que inundaría todo ese cuarto de metal, además imagino a algún pervertido que cortara su pene para subastarlo en internet.
Pensar en esas cosas lo asusto mas asi que se tapo nuevamente los ojos y grito con todas sus fuerzas hasta que sintió que dejaba de caer, abrió los ojos y se encontró en un salón donde había una mesa de cristal, se acerco a ella y se sonrojo demasiado. En esa mesita habían dos cosas: una llave y un… vibrador
-¿pero qué mierda…? ¿En dónde estoy?
-debes entrar
-¿eh?- una pequeña puertecilla parlante a sus espaldas le había comenzado a hablar- ¿pero que demonios?
-tranquilízate, supongo que no eres Alicia ¿verdad?
-no… yo soy Ruki
-bueno- suspiró- para poder salir de este lugar debes pasarme y blah blah blah
Ruki se acerco a la puertecilla parlante y comenzó a apretar el pomo que funcionaba también como nariz de este extraño personaje
- ¡auch! ¡Eso duele! ¿Acaso eres idiota? Necesitas la llave que está en la mesilla
-pero aun así no cabré por ti
-para eso es el vibrador, lo introduces en ti y te hará mas pequeño
-¿introducir? ¿Por dónde?
-pues…-la pequeña puerta sonrió maliciosamente, para desgracia de Ruki este mueble de madera era fundashi- debes introducirlo por tu A-NO
-mi… ¿¡mi ano!?
-pues claro
Ruki comenzó a sudar, debía penetrarse con esa cosa tan… tan… bueno tan guarra pero quería encontrar a ese maldito animal para estrangularlo y hacerlo sopa de conejo acompañada con arroz.
Trago saliva, tomo el vibrador de plástico rosa, era un artefacto alargado con forma de pene que estaba conectado a un aparatillo que regulaba la velocidad en que este vibraba. Se bajo los pantalones ante la mirada atenta de aquella puerta pervertida, miro el aparatillo donde había dos velocidades y dedujo que para hacerse pequeño debía ponerlo en “despacio” así que activo el aparatillo y enseguida comenzó a vibrar.
-anda, mételo- insistió la puerta con ojos de perversión, Ruki maldijo en su mente a aquel mueble. Contuvo la respiración, conto hasta diez y sin pensarlo introdujo aquel artefacto de plástico rosa en su ano. Era extraño, mientras mas sentía las vibraciones mas sentía que su tamaño disminuía, cuando tubo el tamaño ideal para pasar la puerta saco esa cosa de sus adentros y la lanzo lo más lejos que pudo, se subió los pantalones y tomo la llave que había puesto en su pantalón
-a ver puerta estúpida, ábrete
introdujo la llave en la cerradura de la puerta que serbia como su boca, jito la perilla y abrió la puerta, una luz lo cegó entro caminando y se encontró con un lugar… algo extraño
-¡¿Dónde demonios estoy!?
Miro a su alrededor, todo era pasto verde y arboles creciendo solo que había un par de detallitos… en vez de fruta, en los arboles había látigos y cosas para sadomasoquismo creciendo, y en cada tronco había un hombre atado con esposas y grilletes amordazados de una forma que daba miedo
-estas en Pervertland dijo uno de los hombres escupiendo la mordaza, Ruki se horrorizo al reconocerlo
-Mi… Miyavi-kun ¿Qué demonios sucede?
Estaba tan concentrado viendo a Miyavi con una tanga de cuero atado a un árbol con grilletes que no se dio cuenta que cierto animalillo de cola esponjada se regodeaba por ahí. Cuando Ruki vio a aquel animal se olvido por completo de Miyavi y de su tanga de cuero
-¡TU! Maldito animal cuando te atrape no quedara nada de ti-
Seguido de esto el rubio comenzó a correr detrás de la criatura adentrándose en el bosque y cuando se dio cuenta ya no estaba con el animal-¡puto conejo!
-¡Hey chico!- una voz extraña llamo la atención de Ruki…
CONTINUARA…………………………………………………………………….