Uncommitted
It was all a dream / Fue todo un sueño
Reality was far from / La realidad estaba muy lejos
The safe picture he painted for me / de la imagen segura que él pinto para mí
Todo comenzó en una noche. En aquellas noches donde sólo buscas sexo y diversión, y posiblemente embriagarte para no recordar nada al día siguiente.
Empero KyuHyun no contó con que esas noches acabarían.
Caminando por su club favorito, el "Late Night", pudo divisar a un joven de finas facciones sentado en una de las mesas. Se sorprendió al verlo solo, así que quiso acercarse.
– ¡Kyunnie! –una joven de cabellos rubios se le coló al frente.
– ¡Victoria! –el muchacho le sonrió alegrándose por verla, supuestamente.
–Kyunnie, hace mucho que no nos divertimos, ¿Qué dices si lo hacemos ahora? –inquirió la joven coqueteándole.
Y tuvo que rechazarla, no porque no quisiera no porque ella no fuera deseable, es sólo que ¿qué tal si para cuando regresara el joven ya no estaba?
–Lo siento, Toria. Hoy no –y se retiró de su presencia caminando hasta donde el joven estaba.
Caminó con sigilo hasta la mesa sin despegar los ojos del hermoso joven.
– ¡Hola! –dijo cuando estuvo cerca con una de esas sonrisas que coloca en cada una de sus conquistas–. ¿Puedo sentarme?
El joven sólo se limitó a sonreírle y mirarlo con curiosidad.
–Claro –dijo para después beber de su copa.
KyuHyun se sentó realmente cerca de él.
–Soy KyuHyun –estiró su mano a su frente.
–Kim RyeoWook –dijo el joven mirando directamente a sus ojos y estrechando se mano. Su tacto era tan suave.
Pudo observar los ojos color negro del joven a su lado, sus labios finos, y aquellos pómulos que se levantaban con su sonrisa. En realidad era hermoso.
Y desde ese entonces, fue cuando toda la vida de KyuHyun dio una vuelta de 180°.
He told me I was the one / Me dijo que era el único
And I believed / Y le creí
Until the dream disappeared so suddenly / Hasta que el sueño desapareció tan de repente
Desde aquella noche KyuHyun y RyeoWook se hicieron amigos.
Mientras más tiempo pasaban juntos, más se conocían. Hasta llegaron a un punto en donde se relataban cosas que absolutamente nadie más que el otro sabían.
KyuHyun se sentía orgulloso por llegar hasta a aquel punto.
Aunque muchos se habían sorprendido, y otros no lo creían, KyuHyun había cambiado bastante desde que conoció a Wook. Ya ni siquiera frecuentaba su club favorito. Y es que en realidad, se había propuesto enamorar a aquel joven sin importar lo que tuviera que hacer, sin darse cuenta que quién se enamoró fue él.
Durante muchas noches ni siquiera dormía por pensar en aquel joven de ojos café y labios realmente tentadores. Debía admitir que todo lo que había hecho tendría su recompensa.
Y la tendría ahora.
Ya en la noche, cuando fue al apartamento de RyeoWook, fue cuando todo en su cabeza tuvo conexión. Se había enamorado, y no como aquellas veces en las que simplemente lo dice para conseguir una noche. Se había enamorado de la forma en que nunca creyó hacerlo, y de la que juró que nunca lo haría.
Y tras ver al pequeño cocinado para él supo que no podía usarlo. Él no era de aquellas jovencitas que se le regalaban y que el sólo usaba. No. Él era diferente.
RyeoWook era especial.
Y fue en esa noche cuando se lo hizo saber.
Cenando a la luz de las velas del apartamento, fue cuando comenzó una charla de esas que él odiaba con pasión. Y RyeoWook pudo notarlo. Pudo notar con la incomodidad que hablaba del tema, como si revocara recuerdos desagradables.
–Ve directo al grano –dijo Wook tratando de evitar que Kyu se sintiera más incómodo de lo que estaba.
Y es que KyuHyun era realmente malo en ocultar su incomodidad a RyeoWook. Sí, sólo a RyeoWook, y a su mejor amigo SungMin que en ese momento no era importante.
–Te amo –fue todo lo que dijo sin despegar la vista de los ojos de RyeoWook, aquellos ojos que lo miraban cargados de alegría.
Y antes de siquiera decir algo más, los labios ajenos se rosaban con los suyos en algo que resultó ser el beso más tierno que una vez en su vida imaginó tener.
Y es que, no es que no hubiera dado un beso de esos, es sólo que… No los recordaba.
I don’t know why he was so compelled to leave / No sé por qué se vio obligado a irse
Something was messing with his psychology / Algo estaba interfiriendo con su psicología
Y fue todo tan maravilloso… Los primeros meses.
El amor que se tenían desbordaba de cada uno de sus poros. No había duda de que se amaban. Todos, sin excepción, podían notarlo. Y ese mismo "todos" fue lo que dañó toda la relación.
Fue en una noche en que celebran un mes más de relación.
KyuHyun llevaba una botella de vino hacia el apartamento de RyeoWook para la cena de celebración creyendo que sería igual que las otras.
Que equivocado estaba.
Al llegar pudo sentir un cambio en el ambiente. Lo sintió pesado e incómodo. Lo iba a saludar con un beso, pero Wook giró su rostro haciendo que el beso llegara a su mejilla y no a sus labios. Y con ese simple detalle pudo sentir que no sería como su mente lo había imaginado.
Su novio (sí, ya lo eran), estaba frío y algo distante con él.
"Nada" era todo lo que contestaba cuando le preguntaba que sucedía, y "Bien" cuando le preguntaba cómo estaba.
No hablaron mucho, por no decir nada, en aquella noche. No hubo besos, ni abrazos correspondidos. Caricias frías y miradas vacías era lo que obtenía de su novio.
Y antes de que, por lo menos, quisiera decir algo, Wook le interrumpió diciendo que estaba cansado y que quería dormir, que se fuera.
Que se fuera.
Bufó molesto y con sarcasmo obedeciendo a Wook mientras escuchaba la puerta cerrarse tras de sí sin siquiera escuchar un "Descansa". Nada. No escuchó y recibió nada. Ni siquiera su vino fue abierto.
I’m confused / Estoy confundido
He’s saying something is wrong with me / Él dice que hay algo malo conmigo
But, How can I fix something that I cannot see? / Pero, ¿Cómo puedo arreglar algo que no veo?
Y durante varios días la frialdad de su novio fue su comida.
Lo llamaba y se iba directo al buzón; lo visitaba, y no estaba; lo topaba, y le huía.
Razón por la que se comportaba así: ninguna.
Hasta donde KyuHyun sabía no había hecho nada malo. Bueno, no contando las pocas, poquísimas veces que había ido al club de SungMin. Incluso podía contarlas con los dedos de una mano, e incluso le sobrarían. Y admitía que no se había convertido como un ángel, sí, pero tampoco es que hubiera hecho gran cosa. Ya había dejado su etapa evil atrás. Muy atrás.
Empero, ¿entonces? ¿Cuál era la razón de la frialdad de su novio?
–Tú mejor que nadie deberías saberlo –explicaba cada vez que KyuHyun le preguntaba la razón.
Y eso lo confundía más. Mucho más.
¿Él debería saberlo? ¿Qué es lo que debería saber? ¿Cómo arreglar algo que no sabes qué es?
Suspiró cansado mientras se acostaba en su cama y le daba vueltas al problema que se supone él sabe pero que no tiene ni la menor idea.
Vaya, eso le daba dolor de cabeza. Uno muy fuerte. Muy, muy fuerte.
He said "You’re not ready / Él dijo "No estás listo
Baby, you’re not ready for the real thing" / Cariño, No estás listo para algo real"
He told me that I’d be unfaithful / Me dijo que yo le sería infiel
And I cannot believe / Y no puedo creerlo
Habían transcurrido ya dos meses desde que las cosas iban de mal en peor.
La frialdad e incomodidad se sentía en el ambiente cada vez que se acercaban a ellos dos.
Y KyuHyun, ya harto de la situación, le preguntó qué demonios sucedía. Por qué se comportaba de esa manera.
–Porque no estás listo –fue todo lo que le dijo antes de salir de su vista.
¿No está listo? ¿Listo para qué?
–Para algo serio –le dio un sorbo a su café.
KyuHyun lo había citado en una de las cafeterías que más concurrían para que le explicara para qué era que no estaba listo. Y le salió con semejante respuesta.
Kyu lo observó con incredulidad. ¿No estaba listo para una relación? ¿Y lo que tenía con él qué era? ¿Una broma? ¿Un chiste?
– ¿Por qué dices eso? –cuestionó ya casi disgustado.
–También serás infiel –habló ignorando su pregunta anterior sin siquiera mirar más que la humeante taza de café a su frente.
KyuHyun seguía sin entender las palabras de su novio. Ya ni siquiera estaba seguro de si eran novios.
Era obvio que no le sería infiel, nunca, jamás. Claro, en su sano juicio, porque con el alcohol en la cabeza, y la razón en las nubes nunca se sabe. Y, además, era obvio que estaba listo para algo serio, sino, ¿Qué tenía con Wook?
Y después de todo eso, de ver como RyeoWook se levantaba de la mesa dejándolo solo, y con una cuenta que pagar, las dudas invadieron de nuevo su cabeza acompañadas de una migraña del demonio. Y es que no entendía nada. Nada.
Y sin que alguien le explicara mucho menos entendería su situación. Porque al parecer era su culpa. Suya y de nadie más.
He said "you can’t be committed” / Él me dijo "No puedes estar comprometido"
I said baby I don’t really get it / Yo dije, cariño realmente no lo entiendo
He said, you’re not the right type / Él dijo, no eres el tipo correcto
Only good for one night / Sólo eres bueno para una noche
You’ll never stay committed to me / Tú nunca te quedarías comprometido a mí
Cho KyuHyun, 25 años, todo un playboy y con una seguridad y arrogancia que sobrepasaba el límite de lo imaginable estaba pensando seriamente en visitar un psicólogo. Toda aquella imagen de alguien seguro se estaba yendo a la borda con pase directo al infierno o a algún lugar de donde Kyu no pudiera recuperarla. Le era, ahora, muy difícil el simple hecho de entablar una conversación con alguien pues siempre se la pasaba volando con su imaginación. Bueno, su imaginación volaba.
–Debo irme –dijo ignorando la conversación entre SiWon y SungMin, dos de sus amigos.
–Kyu, ¿a dónde vas? –preguntó SungMin poniéndose de pie tras verlo correr de la oficina hacia el ascensor como un rayo.
Bajó hasta el estacionamiento del edificio donde trabajaba, se subió a su auto y condujo con prisa a las afueras de la ciudad. Iría de nuevo al apartamento de su novio a pedir, de nuevo, una explicación de su comportamiento. Y es que no quería romperse la cabeza esa noche. No quería que las cosas se quedaran inconclusas en su cabeza rodando en ella torturándolo cada minuto del día y la noche.
–Ya te lo dije –habló con hastío Wook–. Ya te lo he dicho las veces que has preguntado. Creí que eras más inteligente y entenderías todo –le decía mientras se sentaba en su sofá. Ese sofá que Kyu se lo había regalado.
–Pues no le he entendido, ¿sabes? Por más que trato de que las piezas encajen, el rompecabezas me queda inconcluso.
– ¿Quién habló de rompecabezas? –Wook lo miró con rareza–. Estamos hablando de ti, de lo que eres capaz de hacer y de lo que nunca dejarás de hacer –y siempre hablaba así.
Nunca se explicaba de una manera sencilla, o por lo menos entendible, y eso frustraba a su mente que ya estaba cansada de acertijos y frases con un mensaje oculto.
Empero lo que Kyu no notó, ni esa noche ni las veces anteriores a esa noche, era la forma con la que dijo lo último. Su voz había bajado, y su mirada estaba cargada de tristeza. Una tristeza que, por más que quisiera, no se borraría.
–Por favor RyeoWook, háblame claro, ¿quieres? No entiendo cuando me hablas así –pedía, casi rogaba Kyu acercándose a Ryeo.
–Es fácil, tú nunca estarás comprometido con nadie, tú no eres el tipo de persona para una relación –se incorporó de su asiento casi gritándole–. Tú… –suspiró cansado acomodándose de nuevo.
– ¿Yo qué? –preguntó con ojos llorosos sentado a su lado tomando su mano.
Y por más que intentaba descifrar la emoción en los ojos de Ryeo no podía. No podía hacerlo y eso lo frustraba más de lo que ya estaba.
–Tú sólo eres bueno para el sexo –se acercó a sus labios besándolos con suavidad y delicadeza disfrutando del roce.
Se soltó de las manos de Kyu y rodeó su cuello con sus brazos mientras su cintura también era rodeada por los brazos de su amante.
Kyu se separó de él y se puso de pie halando en el proceso a Wook para besarlo de nuevo con pasión y desenfreno.
No había sentido sus labios desde hace semanas, diez si mal no contaba, y ahora que los tenía sobre los suyos no desaprovecharía la oportunidad.
Volvieron a la posición de antes caminando hasta la habitación del más bajo, para luego dejarse caer en al mullido, era la cama.
Fue cuando todo lo que habían reprimido esos dos salió a flote.
La camisa y la corbata de KyuHyun fueron a parar en quién sabe dónde al igual que las de RyeoWook.
Las manos del más bajo recorrían el abdomen y pecho del castaño disfrutando aquella pálida y pastosa piel, mientras su cuello recibía mordidas y besos.
El más alto acariciaba sus costados con la yema de sus dedos sintiendo como la piel de su amante se erizaba ate el contacto. Había extrañado tanto esa reacción en su novio. Dejando marcas en su cuello fue bajando hasta su pecho divirtiéndose con los dos botones del menor lamiéndolos y mordiéndolos un poco mientras escuchaba los jadeos del menor. Era placentero para él escucharlo.
Bajó sus manos hasta los pantalones de Wook desabotonándolos y quitándolo de un solo tirón haciendo lo mismo con los suyos, frotando su hombría contra la del moreno escuchando ahora sus gemidos y él acompañándolo.
Bajó sus labios hasta su abdomen repartiendo besos en toda la extensión llegando hasta la tira de su ropa interior. Con sus manos quitó la prenda con demora haciendo desesperar al dueño de ella. Subió por su abdomen hasta se cuello, depositando un beso para luego regresar a sus labios y devorarlos y morderlos con locura.
Acarició el falo de su novio escuchando sus gemidos ser ahogados en su boca.
Wook no quería ser el único falto de ropa, así que despojó a Kyu de la última prenda que le quedaba, acariciándolo en el proceso. Guturales gemidos salían desde la garganta de Kyu al sentir las manos del otro acariciar su trasero llenando a Wook de satisfacción.
Y, ya no soportando más, dirigió dos de sus dígitos a la entrada de su novio ingresando uno a uno para dilatarlo. Y cuando ya estaba listo, a su juicio, lo penetró sin miramientos ni restricciones. Haciendo, nuevamente, ese cuerpo suyo.
Las embestidas iban y venían, los movimientos de caderas seguían el ritmo de los corazones encontrados, la habitación se llenaba de jadeos y gemidos mientras dos cuerpos se acoplaban a la perfección.
Cuando ambos llegaron al orgasmo se quedaron así, esperando que los espasmos pasaran escuchando sus respiraciones ser normales de nuevo.
How could this be? /¿Cómo pudo ser?
He’s telling me, I will never let her be my everything / Me está diciendo, que nunca lo dejaré ser mi todo
He said I’m a player and I’ll never change / Dijo que soy un Casanova y no cambiaré
I feel that I’m ready to leave the game / Yo creo estar listo para dejar el juego
–Yo nunca seré tu todo –indicó RyeoWook mientras dibujaba formas amorfas en el pecho de Kyu con sus dedos.
KyuHyun observó a su pareja con indignación. ¿Qué no sería su todo? Empero, ¿cómo iba a ser eso? KyuHyun se la pasaba pensando en él día y noche. Él era el dueño de sus pensamientos y sueños.
– ¿Por qué? –preguntó con sutileza para sí mismo, no esperando ser escuchado.
–Porque no eres más que un casanova empedernido –dijo somnoliento para cerrar sus ojos y dejarse envolver por los brazos de Morfeo.
–Ya dejé eso por ti –susurró cerca de su oído depositando un beso en su cabellera negra y acurrucándolo más a él para dormir.
He said he could never trust a player like me / Dijo que no confiaría en un Casanova como yo
But baby, that was part of my history / Pero, cariño eso fue parte de mi pasado
He’s telling me breaking hearts is a part of me / Me dice que romper corazones es parte de mí
It’s like in my system and it will never leave / Está en mi sistema y nunca se irá
–Sí, sí YeSung, nosotros estuvimos juntos anoche –RyeoWook hablaba por teléfono sin darse cuenta que KyuHyun lo espía tras la columna de la cocina.
–Te dije que tuvieras cuidado Wook, ¿sabes lo que sucederá ahora? Él querrá que las cosas sean como antes, y tú no puedes hacer eso –escuchaba claramente las palabras de mayor a través del teléfono.
–Lo sé, lo sé. No me regañes, ¿sí? No fue mi entera culpa. Sé que no debí confiar en él nunca y… –se dio la vuelta y se encontró con un entristecido KyuHyun con las lágrimas surcando sus mejillas.
– ¿Por qué no debiste confiar en mí? –el dolor atravesaba su corazón como una daga, clavándose en lo más profundo de él.
–Ya te lo dije anoche, ¿no? Eres un casanova y nunca dejarás de romper corazones. No es bueno confiar en alguien como tú –decía de una manera fría, realmente fría.
–Eso es mi pasado, mi presente…
–Tu nunca cambiarás –le interrumpió–. Tú eres así, eso es parte de ti y nunca se irá, ¿entendiste? Nunca –salió de la cocina encerrándose en su habitación sin importarle las lágrimas que, silenciosas, le rogaban un poco de amor.
Uncommitted, I’ll never admit it / Uncommitted, Nunca lo admitiré
And then I’ll never get it / Y nunca lo entenderé
But somehow he could be right / Pero de alguna forma él podría tener razón
Y, aunque le costara creerlo, podría ser que RyeoWook tuviera razón. Que eso era parte de él y nunca se iría, que siempre sería un… Bueno, eso que Wook le decía.
Estaba camino a casa, conduciendo su automóvil. Ni siquiera escuchaba música. Sólo conducía.
Recordaba la razón de porqué se había vuelto eso que RyeoWook no dejaba de repetir, un casanova.
Fue en la secundaria. KyuHyun conoció a una muchacha hermosa, Tiffany. Nunca se olvidaría de ella.
Ella lo enamoró usando todos sus encantos, le utilizaba como si fuese un títere y el simplemente cedía. Y fue cuando supo que ella no lo amaba. Se dio cuenta que lo utilizaba como banco andante y también para sus estudios. Todo fue una trampa.
Ese día juró no enamorarse de nadie, pero que todos caerían a sus pies. Y, ¿por qué conformarse con chicas cuando también hay chicos? Fue cuando, queriendo otra experiencia con alguien del mismo sexo, encontró a RyeoWook y cometió el error de enamorarse de él.
Que estúpido que había sido. Juró no hacerlo y rompió aquel juramento.
Se dio cuenta que Wook era igual a esa chica. Era un manipulador. Sí, eso era.
Y tenía razón. No dejaría de ser un casanova, nunca.
Y fue entonces cuando su corazón se cerró más y se convirtió en algo tan frío que ni la luz solar lo derretiría ni el calor de un abrazo. Se olvidaría de Wook sin importar cuando difícil sería. Y empezaría hoy. Por suerte había un bar cerca. Se detuvo, bajó y empezó buscando a la primera chica que pasara por sus ojos y se la llevaría a la cama.
He said "you can’t be committed” / Él me dijo "No puedes estar comprometido"
I said baby I don’t really get it / Yo dije, cariño realmente no lo entiendo
He said, you’re not the right type / Él dijo, no eres el tipo correcto
Only good for one night / Sólo eres bueno para una noche
You’ll never stay committed to me / Tú nunca te quedarías comprometido a mí
Lo que KyuHyun no sabía era que a RyeoWook le dolía de la misma manera, o quizá más, de lo que a él le dolía.
RyeoWook siempre sufrió ante la idea de dejar a Kyu, pero no tenía opción.
O eso le hicieron creer…
–Hiciste lo correcto Wookkie… –le susurraba JongWoon mientras acariciaba su espalda de arriba hacia abajo y viceversa.
–Yo aún lo amo, Jong. No creo poder olvidarlo –decía entre sollozos.
JongWoon sonreía con satisfacción mientras veía como la relación de Wook con Kyu se desmoronaba, todo gracias a él.
Y su excusa era simple: Si Wook no lo amaba a él, él se encargaría de que lo hiciera. No importaba el precio ni los corazones rotos.
–Todo estará bien, pequeño. Todo estará bien…