¿COMO PUEDO ODIARTE Y AMARTE A LA VEZ?
Naruto caminaba por la calle despacio. Sus cabellos rubios y sus lindas marquitas en su rostro, destacaban de entre todos los que regresaban del instituto. No tenía prisa por llegar a casa, ¿para que?, pensaba, si después de todo nadie le estaba esperando, ni siquiera Sasuke.
Pensar en el, le atormentaba… aun así, le amaba demasiado.
-¡Oí!, ¡Naruto!- escucho su nombre de labios de una chica de cabellos oscuros con destellos azulinos, que corría hacia donde el se encontraba. Se volvió para confirmar, que en efecto, era su querida amiga, Hinata Hyuga.
-Hola, ¿Cómo estas?- sonrió forzadamente el chico de ojos azules como el cielo.
-pues por lo visto, mejor que tu- dijo ella señalando las manos de su amigo, ya que en las muñecas tenia un par de vendas, así como una bandita en la cara-¿todavía dejas que ese salvaje se aproveche de ti?- le miro con el seño fruncido.
-no es ningún salvaje, Hina-chan- bajo la vista el menor- el es Sasuke, mi novio…-
-pues tal vez tu seas el único que le tiene afecto a ese bastardo- (O.O Hinata diciendo malas palabras… ja ja en este fic voy a ser que salga su lado malvado… muajajajaja) dijo ella mordaz; a lo que el chico solo entristeció mas sus ojos azules. Ella, miro a su compañero y suspiro cansinamente para tomarlo de la mano y jalarlo dentro de una cafetería.
Ya dentro, comenzaron a platicar sobre la última semana en la que no se habían podido ver ya que la chica estudiaba en otra preparatoria y aun que trabajaban tres veces a la semana en la cafetería junto a Neji, su primo; últimamente todos estaban ocupados y con poco tiempo libre; y, además, era un año más grande que Naru.
-Así que salio de la casa desde hace tres días y aun no regresa, ¿eh?- dijo ella mirando fijamente a su rubio amigo.
-si…-
-Y por lo que veo te dejo varios “recuerdos”…-
-esto… no… yo… fue mi culpa…-
-¿Por qué lo proteges tanto Naru?, no se merece que estés a su lado, te hace sufrir, te grita, te pone los cuernos e incluso te golpea cuando esta ebrio…-
-Aun así… no puedo odiarlo… me atormenta el hecho de que no sea fiel, pero el me lo dijo cuando comenzamos esta relación…-
-¿relación?, ¡por dios Naruto!, el no tiene ninguna relación contigo… solo te utiliza como su marioneta, cada noche sale y no sabes cuando regresará, puede tardarse días e incluso semanas y cuando por fin el “señor” se digna en volver, lo único que hace es darte una buena sesión de sexo- se sonrojo debido a sus propios comentarios- para que nuevamente lo perdones, y en sima se pone celoso cuando alguien mas te habla y termina justo como ahora…-
-Hina-chan…- el chico comenzó a llorar, sus lagrimas caían incesantes en su bronceado rostro- no se que puedo hacer…-
-Naru… -
-muchas veces he pensado en dejarle, pero siento que si lo hago mi corazón terminaría por romperse en mil pedazos… no quiero que este lejos de mi… lo amo… lo amo demasiado…- la chica se arrepintió un poco por haberle dicho todo eso al ojiazul; se acerco a el y lo abrazo fuertemente.
-Sabes que la decisión es tuya, Naru. En cuanto estés listo puedes ir a vivir con nosotros, ya sabes que mamá y papa te adoran y en casa siempre habrá un lugar para ti… Se que es doloroso lo que te dije, pero es la verdad, no entiendo por que sigues con el después de todo…
-Hina…-
-el idiota tiene suerte de tenerte a su lado, aun que no se lo merezca…-
Había regresado tarde al departamento que compartían desde hacia dos años, luego de que estuviera platicando con su casi hermana Hinata, durante toda la tarde. Dejo su mochila en el sofá y fue directo a la cocina. Abrió el refrigerador y tomo una lata de zumo. Subió por las escaleras hasta llegar a la segunda planta, en donde estaba su habitación. Entro al baño y abrió el grifo dispuesto a llenar la tina para relajarse con una baño caliente. Y así lo hizo, casi de inmediato ya estaba en la tina relajándose un momento. Miro sus muñecas, aun eran muy notables los moretones causados por su cónyuge.
Suspiro cansinamente. ¿Qué podía hacer para cambiar, aun que fuera solo un poco, el carácter de Sasuke? Estaba absorto en sus pensamientos, cuando escucho que alguien abría la puerta de la casa haciendo un ruido notable. Salio del baño en bata y bajo las escaleras para ver, que era nada mas y nada menos que Uchiha Sasuke, su novio. Estaba en mal estado, pero eso no fue lo que le sorprendió y molesto a la vez; sino que no solo fuera el quien hubiera llegado, sino dos tipos más que se veían peor que su “querido”.
-S-Sasuke…-
-¿Qué rayos quieres?-
-yo… ¿Quiénes son ellos?, y ¿Por qué estas tan ebrio?-
-¿a caso es tu esposa o algo así?- pregunto burlón uno de ellos
-¿bromeas?, algo como “eso” no podría ser nada de mi- respondió el otro tomando una lata de cerveza que traía consigo
-¿Qué dices?- pregunto dolido el rubio- claro que somos novios… ¿Por qué me niegas así?-
-cierra la boca- alzo la voz el otro
-entonces si no es nada de ti, ¿podemos usarlo un rato?- dijo otro acercándose peligrosamente al menor
-no te acerques… no me toques… ¡Sasuke haz algo!-
-hagan lo que quieran- dijo el otro recostándose en el sofá. Mientras tanto, Naru, al escuchar las palabras de su “pareja” quedo por completo en shock, no se movía, incluso cuando los hombres comenzaron a romperle la bata de baño dejándole desnudo y a su merced… Lloraba, no podía detener las lágrimas. Le dolía en lo profundo de su corazón que lo lastimara así, que lo usaran como un maldito juguete sexual… lo odiaba… y lo amaba…
Los rayos del sol se colaban por la ventana. En la habitación, sentado en una esquina de su recamara se encontraba Naruto. Lleno de moretones, con un poco de sangre seca en su boca. Sus ojos ya estaba hinchados de tanto llorar. Recordó entonces que a pesar de los golpes; aquellos hombres no habían podido hacerle nada…
[FLASH BACK]
Sendas lágrimas caían por su delicado rostro. Su bata era desgarrada con fuerza. Luego de escuchar a Sasuke lo poco que le importaba, no pudo reprimirse y un odio mezcla del dolor y la tristeza se hizo presente en el. Como había podido, se zafó del agarre de un hombre; sin embargo, ante esto, el “amigo” de su novio le dio una fuerte bofetada haciendo que sangrara su labio interior. Sin embargo esto no lo detuvo, y entre tirones y sacudidas logró, por fin, hacer que ambos hombres le dejaran libre. Este corrió a su cuarto en la segunda planta. Se encerró con llave mientras escuchaba como pateaban la puerta queriendo abrirla aun que no lo lograron, debido a su terrible estado. Naru se acurruco en un extremo de la habitación temblando de miedo. Mientras su llanto de hacía mas que evidente en aquel momento…
[FLASH BACK END]
Ya era tarde. Sus bellos ojos azules no reflejaban ni pizca de sentimientos, era como si no sintiera nada en ese momento. Era sábado y por lo mismo no iría a la escuela. Se puso una polera al color de sus ojos y unos jeans negros desgastados. Salio de la habitación así como de la casa para caminar hacia un punto fijo…