- Tu lo mataste con un lápiz ¿Cierto? - sentía el rugir de la voz de aquel calvo, se notaba estaba muy alterado pues se le notaban varias venas un poco exaltadas - Sabes lo que significa esto... -dijo golpeando su escritorio fuertemente - Tendremos problemas con los padres, habrán muchos rumores entre los estudiantes y tu iras a la cárcel... Y tú también - me señalo directo a mis ojos, su mirada furia era notable, sus puños me daban miedo -
- Pero yo no hice nada -exclame en mi defensa- y no creo que el haya matado a nadie, solo mírelo - señale a Rei. Estaba claro que no era lógico pensar que un niño que se acurrucara y pegara mi de esa manera fuera capaz de algo así, tanto así que sentía sus lágrimas caer sobre mi brazo lo cual me avergonzaba un poco - Todo esto es un error-
Aunque todo lo que saliera de mi boca fuera en defensa de Rei, yo sabía en mi interior que no era cierto. Esa expresión en sus ojos, la forma en que sonreía sádicamente y... su mano con... ese lápiz l-lle-lleno de sangre fue algo realmente impactante. ¿Habrá sido su otra personalidad? ¿Qué rayos le ocurrió a este niño? ¿Porque parecía un desquiciado psicópata y de un momento a otro volvió a tener esos ojos esmeralda únicos? ¿Estaré equivocado? Quizá todo fue algo de mi imaginación por tanto ruido y tantos insultos que recibí al pasar atropelladamente por esa multitud. Quizá no fue lo que vi. Quizá eso no era sangre y nadie había muerto... Lamentablemente no puedo quitarme de la mente lo que vi.
- ¡¡ERRORR!! -me fulmino con la mirada, sentía como si una extraña fuerza además de la gravedad estuviera aplastándome. Su expresión me aplastaba - ¡Murió alguien! Se realista. La sangre era real, tú la viste, más de 50 estudiantes la vieron y ese niñito de ahí tenía un lápiz lleno de sangre en su mano - dijo señalando a Rei que no había asomado su cara de detrás de mi brazo- además que muchos niños de los presentes lo describieron como un monstruo. Dime tu ¿Hay algún error en lo que dije? ¡¡NUEVOOOO!! -mis rodillas tambaleaban de un lado para otro mientras mis manos trataban de detener e intentar soportar aquel martirio- ¡¡RESPONDEMEEE!! -grito de nuevo.
- no-no se-señor no hay ningún error en lo que menciono -balbucee lentamente -Lo que digo es que mi hermano no pudo haber matado a nadie, él no es así -fruncí mi mirada y la enfrente contra el coordinador Mizuo. Es obvio que Rei tiene algo que ver en todo esto, pero... pero no lo puedo dejar así, tengo que entender que rayos pasó y pensar que Rei no tuvo la culpa.
-Así que hermano. GGGRRR -hizo una mueca- eres nuevo y ya tienes dos hermanos, se nota que te gusta estar con niños menores que tu -eeehhh ¿qué rayos tiene que ver eso que dijo con lo otro? ¿Que estará insinuando este calvo? Lo miro con algo de desconcierto- Ahora que lo pienso este niño nunca hablaba y justamente por eso lo recuerdo, era uno de esos que no causaba problemas y después de que tu llegaste lo he visto diferente ¿No será que tu influiste en que matara por ti?-
- ¿Pero de que está hablando? Esta insinuando de que yo tuve que ver con esa muerte. Ni siquiera se quien se murió -dije en mi defensa. Me parece absurdo que él diga que fui yo la mente criminal. ¡¡Como se atreve a decir eso!! - ¡¡No tuve nada que ver!!-
- MMMM -puso una cara maliciosa y me miro un poco excitado- También te he visto jugando con otros niños en el campo. Eres muy popular entre los niños ¿Lo sabias? -no me agrada el tono en el que habla, es como si esas palabras tuvieran otro significado, algo más oscuro y malicioso -
-Ellos me pidieron que les enseñara a jugar soccer. Además ¿Cómo sabe usted eso? -
- ¡Niño! Soy el coordinador de este lugar, nadie sabe más que yo… ni siquiera el Director - dijo sonriendo-
PPPUUUUUUMMMMMM
La puerta se abrió de golpe y por ella entro el director Amano junto con el señor Akio, nuestro consejero. Aunque los dos estaban serios el director estaba bastante furioso, pero no nos miraba a nosotros sino a al coordinador Mizuo.
- ¿Que pasa aquí Mizuo? ¿Porque están estos dos aquí? -dijo con voz fuerte.
- Señor director estos niños fueron incitadores de una pelea y además el pequeño de pelo anaranjado fue el culpable de la tragedia que sucedió hace rato -menciono el calvo con las manos atrás hablando serenamente.
- ¿Y cómo lo sabes? ¿Ya tienes las grabaciones? ¿Ya lo inculparon? ¿Tienes el arma que lo mato? -hablaba tan rápido y cortante que no le daba tiempo de responder a Mizuo.
- No señor, no tengo nada de eso -dijo algo resignado y con rabia el calvo.
- AAHH Entonces si no tienes nada como sabes que fue él. Simplemente lo está asustando ¿Cierto? -lo señalo algo furioso -sabes que no me gusta que trates a los estudiantes así, es típico en ti hacerme enojar -aunque estaba muy agradecido por lo que estaba pasando, me paralizaba de miedo al ver la mirada agria del coordinador, era como un volcán a punto de explotar... sentia que en cualquier momento se venía una avalancha de furia - tu sabes que los estudiantes Majessty no se les pueden hacer estas cosas.
-Si señorrr -fue más un gruñido que una afirmación.
- Niños vámonos -dijo el señor Akio algo temeroso e inquieto. Creo que se debía a que tanto el como nosotros queríamos salir de este lugar.
Debo Ser...
XIII. Status Quo. Parte I
Agarre a Reisuke de la mano y salimos de allí seguidos del señor Akio que cerró la puerta tras él. Bajamos las escaleras, salimos del Bloque D y nos dirigimos al bloque principal, justo en la entrada el señor Akio nos pidió olvidar este suceso y nos deseó las buenas noches para después irse por donde acabábamos de salir. El camino de las escaleras fue silencioso; al igual que el recorrido por el pasillo, donde no había evidencia de lo que había pasado dos horas antes; Ni en el baño, cuando acompañe a Rei a ducharse mientras yo lavaba una gran mancha roja que había en su camiseta. Ni siquiera en el dormitorio hablamos, ese silencio era antinatural en ese lugar, aunque yo sabía que no estaban dormidos por temor... no eran capaz de ni siquiera de preguntar por lo que había pasado.
Mire a Konu que estaba de espaldas sin moverse, me parecía extraño pues estaba en su cama en la parte de arriba del camarote y siempre, desde que llegamos a este lugar siempre prefería dormir al lado mío. Algo estará sintiendo ¿Sera algo malo? Me tire en la cama, los ojos me pesaban y no tenía cerebro para pensar en nada ¿Que rayos paso hoy?... Me duele la cabeza.
Siento como si me estuvieran observando y claro que es verdad, Rei me mira desde el tapete un poco suplicante, como si estuviera a punto de romper a llorar otra vez. Yo lo defiendo, aunque lo vi... siento que no fue el. Con mi mano le hago la señal de que venga y sin perder el tiempo se acuesta al lado mío y abraza mi brazo a más no poder para consolarse. No leo la mente pero él debe estar peor que cualquiera. Le sobo la cabeza y sonrió ante su mirada cristalina, después nos cubro con la sabana y me pierdo en la oscuridad de mi mundo imaginario, no sin antes escuchar...
- ¿Te molesta si duermo como a mí me gusta? -su tono suplicante y quebradizo era celestial. Se refería a dormir... ZZZZ a lo que respondí con un resoplido mientras me quedaba dormido.
Tanto el desayuno como el resto de la mañana fueron desastrosas. Si yo me sentí mal que nadie me hablara durante el desayuno ni en las clases de la mañana como se habrá sentido el, que fue el que tenía el lápiz ensangrentado; Yo simplemente grite que lo dejaran en paz y lo jale hasta el baño para lavar la sangre de sus manos antes de que aquel calvo nos atrapara. Yo era el defensor de aquel que había aterrado a aquellos que estaban presenciando aquella pelea, los que lo vieron quedaron deseosos de ver más, pero al comentarlo hicieron nacer un temor y un odio hacia Rei y hacia mí.
- No te preocupes por eso -decía Ritsu antes del almuerzo- Siempre que muere alguien todos quedan estupefactos por la sangre pero después todo vuelve a la normalidad -pensándolo bien, era la primera vez que hablábamos en todo el día, ya que el acababa de llegar a clases. Según me conto falto a clases porque tenía otras cosas que hacer, además... - ¿Cómo dices eso? Me gusta hablar contigo.
- Pero si te ven conmigo también te trataran como a mí- dije angustiado, no quería que Ritsu pasara esto por hablarme.
- BBAAHHH -dijo chasqueando la lengua -En el almuerzo todo estará como antes ya verás. Te lo prometo - guiño el ojo - Somos amigos así que no dudes de eso -una palmadita en mi hombre derecho hizo que sonriera por primera vez en todo el día -Por cierto, supe que te enfrentaste al coordinador Mizuo por defender a ese niño ¿Es cierto? -me miro emocionado con una sonrisa expectante.
-Pues yo le dije seriamente que mi hermano no pudo haber realizado ese acto y eso fue todo -dije sin darle importancia.
-Escuche que le hiciste frente -dijo algo impactado y emocionado -Además que lo dejaste sin palabras -mmm ¿En serio yo hice todo eso?
-Bueno tal vez... pero... -
-Genial. Eres un héroe, nadie había logrado eso -su emoción se reflejaba en su forma de hablar, la cual empezó a llamar la atención en el salón de clases. Gracias al cielo el profesor de filosofía no estaba, sino hubiera sido víctima de su regaño “Filosófico” de nuevo.
Es como si Ritsu hubiera predicho el futuro; El almuerzo no fue otra cosa que una invasión de miradas fijas en la mesa donde yo estaba sentado; al menos no eran miradas de odio y desprecio, o por lo menos eso creía yo. Asombro, duda y algo de emoción era lo que me decían los ojos que de repente se alineaban con los míos. Bueno... al menos ya no siento como si todos me odiaran jaja
- ¡¡Oye Tommoky!! -observe a Daji al pie de la mesa que ocupábamos Rei y yo. Rei no había dicho una sola palabra en los minutos que llevábamos sentados y yo solo me había concentrado en comer -Supe que le hiciste frente al coordinador, no creí que fueras así -dijo sonriendo ligeramente - y Rei tu eres genial -se refirió al peli anaranjado -Te defendiste contra ese abusivo y le diste su merecido. Además salvaste a Konu y a mi hermano de una golpiza... -se sentó bruscamente en la mesa bastante emocionado y me miró fijamente -No lo sabes ¿Cierto? -yo ya estaba confundido desde que me había alagado.
- No sé de qué hablas Daji -dije perdido en su cara emocionada, nunca lo había visto así.
- Pero si tú lo defendiste, deberías saberlo -suspiro tocándose la cabeza en señal de decepción.
- ¿Saber qué? dime -casi suplicante, quería que me dijera la razón por la cual estaba así.
- AAhhhh, este niño -su mano cubría su rostro - Ayer apenas tú te separaste de ellos para ir donde un tal “Taichi”, ellos se dirigían hacia el dormitorio muy animados por que tú les ibas a enseñar no sé qué cosas -relataba un poco confiado mientras yo me mostraba muy expectante hacia su historia- Pero por pasillo del cuarto piso se encontraron con dos miembros del dormitorio 506, que son conocidos por ser brabucones y vándalos que molestan y lastiman a los demás estudiantes. Ellos estaban molestando a otro niño y Konu como no los conocía les dijo que lo dejaran en paz -Oh por dios, ¿¿Konu se enfrentó a unos abusadores?? Ante mi cara de asombro Daji prosiguió -Ellos dejaron al niño en paz pero se dirigieron hacia donde estaba Konu con mi hermano y Reisuke. Le empujaron y golpearon dos veces en el estómago y le dijeron que ese niño debía dinero a su jefe y que tenía que pagar lo que debía, y que ahora él tenía que pagar… que tenía que pagar por ser un héroe -en ese momento recordé lo que habíamos visto él y yo en la primera noche que estuvimos aquí.
-¿Que le iban a hacer? -pregunte con la sangre helada.
- Por lo que me conto Koji. Empezaron a decir cosas grotescas sobre Konu, cosas groseras y vulgares ¿Te haces la idea? -asentí con la mirada fría y triste -Entonces Rei dijo que no los molestaran, que los dejaran en paz. Entonces uno ellos empujo a Rei y el otro empujo a Konu y a mi hermano, lo cual provoco que se reuniera una multitud gritando “Pelea”. En medio de todo eso, mi hermano me dijo que uno se abalanzó encima de Konu y empezó a tocarlo por todas partes. Cuando mi hermano intento detenerlo recibió una patada del otro en el muslo y escucho que le decían que no se moviera o que sería peor -algo dentro de mí se quebró. Ayer mientras yo me bañaba solo, iban a violar a mi hermano, y todo por ser tierno y defender a alguien.
- ¿Y luego que paso? -mencione insistente ante la leve pausa del gemelo.
- Pues mi hermano se quedó quieto y vio como le quitaban la camisa a Konu y uno de ellos le besaba el pecho -
-¿QUEEE DICESSSS? -grite furioso, tanto así que llame la atención de mucha gente.
- oye cálmate...ssshh -puso su dedo en la boca- no hagas tanto escándalo.
- Lo siento, es que me... como es... como es que nadie hic...hiciera nada -dije cerrando mi puño con impotencia- todos solo querían ver como…-
- Así son -dijo Daji cambiando su voz, era mucho más grave de lo normal. Obviamente estaba enojado al igual que yo ¿Que rayos le pasa a la gente de acá? - A veces es increíble ver que los niños son tan malos y bastardos como todos los adultos. Todos los niños ricos de esta escuelita son igual. Ya te lo había dicho –cierto. Ya había escuchado a Daji hablar muy mal sobre la clase de chicos que estudiaban aquí -Solo se preocupan por ellos, el sentimiento de la madurez solo se refleja en lo que tienen en los bolsillos -se rostro estaba serio, se notaba que hablar sobre esto le transformaba completamente.
- ¿Y cómo termino esto? Yo sé que a Konu no lo violaron porque yo lo vi, pero... -dije con impotencia.
- Rei empujo al que estaba tocando a Konu y le dijo que era un maldito y un bastardo. Pero el otro lo cogió por detrás y lo tiro contra el piso recargándose sobre él, según mi hermano le dijo algo al oído y empezó a subirle la camisa. Después fue que paso lo bueno -me exalte ¿Lo bueno? ¿Qué hay de bueno en todo esto? - Rei se zafo de su agarra y de la nada saco una lápiz y se lo enterró al que estaba sobre él, una y otra vez. Según mi hermano tenía la mirada diferente y parecía como poseído pues tenía una sonrisa que lo petrifico de temor. En eso llegaste tú, de repente volvió en sí y después te lo llevaste ¿Cómo hiciste? Yo sabía que tenías algo con este niño. Eres genial, los dos -dijo emocionado y muy exaltado.
- No soy genial -dije resignado bajando la cabeza -si lo fuera no habría pasado todo esto y todos estaríamos bien -mencione mirando a Rei quien seguía mirando su plato lleno con mucha tristeza. ¿Cómo se sentirá? Después de que lo golpearan y de los gritos que recibió. Pienso que rayos debería hacer en estas situaciones ¿Que hace alguien para animar a sus hermanitos? Se supone que debí estar allí para ayudarlos... y Konu ¿Como estará Konu? Si todo lo que dice Daji es verdad el pequeño pelirrojo debe estar traumado por esa experiencia.
- Pero que dices... Claro que lo eres -menciono Daji golpeando la mesa- Si no es por ti, este niño no habría hablado ni sonreído... ni se habría convertido en un niño gritón y ruidoso lleno de alegría. Ni me hubiera hecho sonreír tantas veces con sus caprichos o en los baños... -yo sabía que Daji era un persona muy solitaria y reservada, pero mientras hablaba notaba un ligero brillo en sus ojos; Sentía la expresión de su interior, hablaba con sentimiento, como si todo lo que dijera causara algo en su estado de ánimo: satisfacción, seriedad y alegría demostradas a su manera; ¡¡Tonto!! Le cuesta expresar sus emociones - ...si no es por ti, este niño ni yo seriamos lo que somos ahora -sonrió orgulloso. No sé porque sus palabras me hicieron sonrojar -No te lo dije, tu eres diferente.
Se levantó en ese mismo instante y se sentó al lado de Rei, cogió su plato y empezó a cortar el emparedado en pequeños trozos, para después dáselo de comer a Rei que sin levantar la mirada del suelo recibía el contenido del tenedor y abría la boca pidiendo más. Se nota que tenía hambre. Le empujo mi plato que todavía contiene la mitad de mi almuerzo para que se lo coma también. Esta es la misma escena que tuvimos en nuestra primera cena, solo que esta vez Daji era quien ayudaba a Rei. Se sonrojaba de vez en cuando pero sonreía al ver la boca de Rei abierta. Aunque nunca lo demuestre, creo que Daji tiene algún sentimiento por el pequeño anaranjado, ya que nunca en lo poco que lo conozco no le he visto expresar tantas emociones juntas.
- ¿Estas bien Rei? - me atreví a preguntar cortando el silencio en la mesa. Un movimiento ascendente de su cabeza me tranquilizo un poco -¿No te duele nada? -movió su cabeza en señal de negación -¿Entonces que te sucede? Se supone que salvaste a konu de algo muy malo -mencione intentando animar a Rei pensando que se sentiría mejor al saber que había ayudado a los demás.
- ¡¡Cierto!! -afirmo el gemelo con emoción -Además te enfrentaste a un brabucón y ganaste. Muchos niños te consideran su héroe -decía excitado y orgulloso de lo que decía.
- ¿un héroe? -mención Rei casi susurrando- un heroeeee -repitió mirándome a los ojos, se le notaba desanimado y triste -Si soy un héroe ¿Porque todos me odian? -Volvió a bajar la cabeza. Note que se esforzaba por no llorar. Pero no entendía, se supone que el no habla en clases y que no tiene muchos amigos, pero nos tiene a nosotros. Nosotros no lo odiamos. NO después de lo que hizo por Konamu.
- Rei... pero nosotros no te odiamos. Tommoky y yo nos preocupamos por ti, por eso estamos aquí -dijo el gemelo consolándolo -No pongas atención a nadie de esta escuela, todos son basura que no se preocupan por nadie diferente a ellos mismos -
- jajaja -se rio Rei -"Basura” jaja -me alegre de que sonriera, aunque no era para nada gracioso. Tanto yo como Daji nos alegramos de que Rei dejara esa mirada desolada que tenía -Me gustaría ser un héroe...-dijo mirando a Daji, tenía un brillo en sus ojos que los hacían ver más claros de lo normal como una esmeralda muy pura-...así no nos molestaran más esos niños grandes -empuño su mano.
-No te angusties, eso no volverá a pasar -declaro el gemelo - te lo aseguro -dijo algo serio casi susurrando.
- MMM ¿dónde está Konu? Ya casi acaba el almuerzo y no lo he visto -se me escaparon esas palabras, no era mi intención pensar en voz alta -EEEHHH -puse una cara de incógnita pues el pelirrojo entraba rápidamente seguido de Koji y otro niño que no conocía.
QUE rara coincidencia, quien sabe cuánto tiempo llevamos aquí y mi hermano llega justo cuando pregunto dónde está. Mientras corría notaba que estaba emocionado por decirme algo y notaba su impaciencia por hacerlo... jajaja pero se tropezó a 5 pasos antes de llegar a la mesa. ¡¡Que tonto!! Como me puedo reír de esa situación. Aunque casi al instante se levantó con un ligero colorado en la frente producto del golpe y otro en las mejillas; Sonrió al ver que sigue corriendo para acercarse a nosotros, por lo cual sé que está bien.
- Holaaaaa -dijo al llegar mientras recobraba el aliento.
- ¿Koji dónde estabas? -pregunto Daji. Koji se sonrojo.
- Es que supe que konu estaba muy triste y llorando; Y no pude evitar ir para ver que le sucedía -dijo sonriendo ¿Porque se sonroja? -Este niño me dijo que Konu estaba mal y que necesitaba que hiciera algo -señalo al niño de anteojos que llego corriendo con ellos; Tenía el pelo negro, era más alto que Konu y tenía las manos algo raras, además parecía muy nervioso de estar ante nosotros y más cuando Koji lo señalo. Pensaba que se iba a desmayar de vergüenza, aunque no sé si eso es posible.
- Cierto -dijo Konu - Iván me fue a agradecer por haberlo ayudado ayer. ¿Sabes lo que paso ayer hermano? -me miro inquieto.
-Sí, ya lo sé -asentí- Daji me lo conto todo. Que tu defendiste a un niño que estaban molestando. ¡¡Que valiente eres!! -lo alabe un poco y sonreí al verlo sonrojarse bastante y después inflar los cachetes como si estuviera enojado. No quería mencionar lo que paso después, pues quizá generaría alguna conmoción de temor o ira, y no quería que eso pasara.
- Y Rei me salvo después -dijo inclinando la cabeza. Lo miramos con la cabeza ladeada, no sabíamos si estaba triste, feliz o... - ¡POR ESO VINEEE! -menciono alzando la voz - ayer me asusté mucho al ver a Rei de esa forma, hasta creía que si estaba cerca de él me haría lo que le hizo ese brabucón. En ese momento no quería estar con él, pues lo consideraba alguien muy malo por hacer lo que hizo...-decía con aire de nostalgia y temor -...pero hace ratito este tonto me conto algo, y me dijo que si alguien estaba dispuesto a hacer lo que hizo Reisuke, significa que yo soy muy importante para él y que no es correcto que me sienta mal y lo odie por eso -wooww me encontraba anonadado y muy sentimental; Konu era tierno, amable y a veces podía ser un gran hombre para tener su edad. Este miraba a Rei que no se atrevía a mirarle de frente - Me di cuenta de que estaba mal y vine corriendo a pedirle perdón a mi hermano por lo que le hice sufrir; Pues es muy malo no agradecer la ayuda de alguien, más si es alguien que se preocupa por ti -dicho esto hizo una reverencia a Rei- Somos hermanos y no pienso volver a pensar de ti así, algún día tendré la fuerza para devolverte el favor. Gracias -con la velocidad de un rayo el peli anaranjado abrazo al pelirrojo y este correspondió su abrazo fuertemente.
Aunque me sentí muy mal por no haber estado ahí para cuidar de mi nueva familia, supe que habíamos formado fuertes vínculos entre los que nos acabamos de conocer. Claro que esto no sucede con normalidad; el hecho de confiar en alguien desconocido no es normal en nadie. ¿Entonces porque nosotros somos así? ¿Porque somos tan unidos fuera de que apenas nos conocemos? Puede ser que el dolor de nuestro interior se halla aliviado con la amabilidad de los otros, hemos aceptado sin saberlo compartir nuestros problemas entre todos y así buscar algo mejor en nuestro futuro; Es como cuando estas en el jardín de niños, llegas solo y después de hablar con alguien y jugar con él, tienes la certeza de conocerlo por toda la vida, pues a pesar de que apenas lo conoces ya es tu mejor amigo; En realidad no sé qué nos hace tan... pero me alegra estar rodeado de gente digna de confianza.
-Gracias -le digo a Koji. Él se molestó en apoyar a Konu y su hermano se interesó por la situación de Rei. Con esta situación me quedo demostrado que los gemelos hacen parte de nuestro grupo, son extraños en algún sentido pero se preocupan por los que quieren.
- El también me salvo a mi -respondió sonriendo -debía hacer algo.
- Em-mmemmme yo-yo m-me voy ya -dijo Iván temblando antes de irse -OOUUUCCCHHH Disculpa NNOOO... suéltame -se oía desesperado. Mire para ver que le sucedía y vi como 4 personas rodeaban a Iván mientras que uno lo agarraba de la camisa.
-Pequeño mocoso, pensaste que nos olvidaríamos de tu deuda -dijo quien lo tenía agarrado fuertemente -Nuestro jefe está muy entusiasmado por verte -tenía el pelo parado y era bastante alto.
-Dejammeeee -se oponía el niño de anteojos. Se revoloteaba tratando de zafarse del agarre, hasta que un golpe en el estómago redujo sus movimientos.
- ¡¡Oye déjalo!! -grito Rei haciéndoles frente.
- Si... déjenlo -intervino konu, parándose al lado de Rei.
- Pero mira que tenemos aquí -hablo el más bajo de los 4 con un mueca un poco extraña, parecía excitado -Los defensores de los pobres, tomate y naranja. No creen que ya tuvieron suficiente metiéndose en este tipo de problemas -arqueo los ojos un poco, nos miraba penetrantemente a uno por uno, cuando se fijó en mi sonrió - Yo te conozco, te he visto en el césped. Eres bueno -así que me conoce. ¡¡Ahora resulta que todo el mundo me conoce!! Que ironía... MALDITA FAMA. ¿También jugara soccer?
- ¿Tu juegas? -pregunte tratando de evitar una confrontación. Son más altos y más fuertes, no creo que todos sepamos pelear, además de que no debemos hacerlo... no hay razón para terminar de la misma forma de ayer.
- Algunas veces. Somos del equipo del instituto -se señaló orgulloso - deberías ir a entrenar alguna vez, tu juventud sería una gran ayuda para todos -con que mi juventud mmm... ¿A qué se referirá con eso? No me fijo de sus palabras, solo con ver su postura se de antemano que es uno de esos que aprovecha su posición para lastimar a los demás -Entrenamos todos los días a las 6 de la mañana, ve y di que Yoshitory te recomienda -sonrió un poco más cordial. De verdad estará siendo amable o solo espera que baje la guardia.
-Gracias, sacare mi tiempo -dije temeroso sin borrar mi expresión seria -Por cierto. ¿Qué problema tienen con nuestro amigo? -me refería a Iván que se encontraba temblando en el suelo -Seguro podemos solucionarlo de forma pacífica -sentí un gran espasmo por todo mi cuerpo, un ligero chuzón en mis muslos como si estuviera ansioso.
Los tipos que estaban fretándonos sonrieron de forma maliciosa y el más alto se rio por lo alto. Era uno cuyo pelo relucía entre los demás pues no tenía nada, parecía ser el más fuerte e idiota de los cuatro y su forma de reír se comparaba con un retrasado mental. Nos pusimos en alerta, Daji se levantó de su silla con un aire agresivo, konu puso una mirada desafiante al igual que Rei; Koji, aunque temblaba corrió a ayudar a Iván a levantarse y después lo acerco hacia nosotros. Mire a mi alrededor y vi como los demás estudiantes continuaban con lo que hacían sin ningún inconveniente; Es como si se hicieran los sordos frente a este problema, como si no quisieran intervenir en esta situación, como si supieran lo que les esperaba si lo hicieran. Claro que era una situación tensa, el pensar que nos a iban a dar una paliza en este momento era algo que no se borraba de mi mente, aun así…
-Claro que podemos solucionarlo -dijo que el pelón grande con voz de tonto -Este chico tiene que pagar lo que debe -sonrió ligeramente -Si paga lo que él sabe, nos iremos y lo dejaremos tranquilo-
-Pero ya les dije que no tengo para pagarles -sollozo Iván, mientras se desplomaba en el piso junto a nosotros.
- Eso debiste pensarlo antes de pedir prestado niño -repuso el que tenía el pelo parado hasta las puntas.
- Mira... -me dirigió la palabra el que me había hablado antes- Este chiquillo debe un dinero y a nosotros nos mandaron a cobrarlo ya que ayer paso algo muy interesante con esos dos pequeñitos de allí -señalo a Konu y a Rei. Se dirigió a mí - Es por nuestra paga, así que no es nada personal. No queremos problemas contigo ya que serás una promesa para nuestro equipo, ni con el “Clon” que esta allí atrás -señalo a Daji- Además así son las reglas por aquí, y el orden se mantiene con el respeto. Este niño pidió un préstamo basado en reglas y ahora debe cumplirlas -dijo despeinándose un poco
- Yo pagare por el -dijo Konu ante el asombro de todos- Si nos dejan ir, traeremos el dinero- menciono valientemente.
- Y como sabemos que no escaparan- dijo el pelón con un dedo en la nariz. De verdad me parecía un tonto.
- Yo me quedare -dije seriamente -Esperare hasta que el traiga el dinero, así todos más contentos -sonreí. Estaba seguro de que konu traería el dinero lo antes posible.
- Yo Igual - repuso Daji - Para estar más contento -me sonrió y me dio un guiño. Era la primera vez que Daji me sonreía de esta forma, es como si estuviera muy feliz conmigo- Koji, acompáñalos.
- Bien. Vámonos -rodeando a esos tipos grandes salieron corriendo del comedor, dejándonos a Daji y a mí con esos tipos.
-No esperaba esto -dijo el más bajito de los cuatro con algo de inquietud. Tenía el pelo castaño claro y demostraba un cicatriz en forma de cruz en la mejilla inferior - Hola. Soy Yoshitory Santos -QQQUUUEE ¿Cuándo se acercó tanto a mí? ¿Y porque muestra esta amabilidad? - mucho gusto en conocerte -me estiro la mano. Yo se la apreté con mucha desconfianza.
-eeemm si... eemmm soy Tommoky Himmy -alcance a decir al fin- igualmente -no entiendo, hace un momento era un brabucón y ahora me daba la mano ¿Que pasa aquí?
- Es normal que desconfíes, después de todo no es un trabajo muy bien visto jajaja ¿Cierto chicos? -inexplicablemente los otros tomaron caras despreocupadas y amigables en algún sentido. Ya no sentía ese aire extraño de cuando te van a dar una paliza sin embargo las dudas respecto al motivo de esta situación me dejaban sin habla. Más aun, cuando el pelón gigante me saludaba agitando su mano.
- ¿A qué te refieres? -dije dudoso de mí mismo.
- Se refiere a la organización que mantiene el orden en este lugar -dijo Daji sentándose tranquilamente - Es como la policía, pero aquí no protegen a nadie solo asustan y abusan -hablaba bastante histérico, además tenia los brazos cruzados y miraba hacia donde estaban los otros tres desafiante.
- Oh vamos -dijo Yoshitory algo rizón - No hables así de nosotros, tu sabes que hay personas que se merecen esas cosas jaja -dijo riéndose -además creo que ser un vigilante no es algo fácil.
-¿Vigilante? -pregunte. Me sonaba a esos estudiantes que cuidaban los pasillos para asegurarse de que nadie faltara a clases, o que ponían multas a la gente que causara desordenes entre la multitud.
-Son estudiantes mayores que son nombrados por el coordinador para que le entreguen a cualquiera que rompa la reglas ¿Cierto? -la voz de Daji resoplaba de ironía -además de ser soplones y brabucones, se creen más que los demás y violan las normas que castigan -la palabra ideal era “corruptos”, utilizaban su poder para pasar por encima de las normas.
-Jajajaja -se rio en que tenía el pelo parado hasta las puntas -Eso fue lo mismo que dijiste hace tiempo.
- Mira, cuando llegas nuevo a un lugar te tienes que adaptar a el ambiente -dijo el castaño algo serio- si eres diferente atraes problemas. Tu tuviste problemas por pensar así -miraba a Daji sonriente -y creo que fue una experiencia no muy agradable... -Note que Daji se sobresaltó un poco y le lanzo una mirada asesina a Yoshitory, tanto así que sentía como esa mirada me erizaba los pelos de los brazos... me hacía sentir escalofríos.
- JAJAJA no has cambiado nada “Clon” -menciono el que estaba al lado del pelón. El castaño sonreía ante la mirada amenazante que expresaba el gemelo; era como la primera vez que lo vi, algo perturbadora esa imagen.
- ¿Porque eres así? Que no tuviste suficiente -Daji cerró los ojos y note como apretaba los puños fuertemente -El caso es Tommy, que nosotros no somos malos, siempre y cuando no vallan en contra de nuestra posición -Mmmm ¿Tommy? Otro que no es capaz de aprenderse mi nombre. Me toco la cabeza y suspiro ante el diminutivo… Aunque no suena tan mal.
- ¿Tom-mmy-y?- tartamudee.
- Es mejor que no te pongas como tu amigo -dijo en forma de advertencia -Está bien que seas rebelde –sonrió - Hasta supe que le gritaste al coordinador... eso es digno de admirar, pero no quieras parecer un héroe -sentí su mano en mi hombro -¿Sabes por qué te digo esto Tommy?
- No, Yoshi... tare -ahora era yo el que no recordaba su nombre jaja. Me había quedado nublado cuando escuche que me admiraba por gritarle a ese calvo… ni que fuera tanto, además solo lo hice por Rei.
- Dime Yoshi -sonrió abiertamente.
-Yoshi -repetí.
- Te lo digo porque lo que hicieron tomate y naranja no me gusto a mí ni a ninguno de los vigilantes, ni a ninguno de los de arriba -¿Los de arriba?
- Te refieres a Konu y Rei -asintió -¿A qué te refieres con los de arriba?
- Quienes les pagan por hacer cosas malas -menciono Daji.
- Quienes nos pagan por cobrar “Clon” -menciono Yoshi - El punto es que no quiero ver que tus hermanos estén por ahí enfrentándose con nosotros, ya que por lo que paso ayer se han ganado nuestro respeto al igual que este lo hizo -señalo a Daji.
- Así que respeto -sonreí -¿Fue tan admirable lo que hicieron? y ¡¡¡ ¿Cómo sabes que son mis hermanos?!! -dije sorprendido abriendo la boca pareciendo un tonto, estoy harto de que todo el mundo sepa más que yo.
- Mataron a un estudiante -dijo fríamente. Mi sonrisa se borró -No queremos recurrir a castigar a aquellos que se enfrentan a los que mantienen el orden en este lugar, pero si siguen creyéndose algo que no son, abra serias consecuencias - Me miro seriamente - Así que diles que no pueden volver a interferir con nosotros.
Era claro que era una advertencia, no tenían nada contra nosotros pues éramos nuevos y no conocíamos que tipos de problemas se presentaban diariamente en este lugar. ¿Porque tienen que pagar dinero en esta escuela? ¿Serán negocios o apuestas? ¿Que compran aquí? Ya van dos veces que escucho que alguien le debe dinero a otro pero se supone que aquí el dinero no se utiliza, entonces porque utilizan a brabucones para cobrar, ¿Y Si no tienen con pagar que pasa con ellos? ¿Me pregunto qué hubiera pasado con Iván si Konu no hubiera pagado por él? Hay tantas cosas que no conozco de este lugar... odio ser nuevo.
- ¿Tu sabes que fue lo que hizo ese niño con el dinero prestado? -pregunte resignado.
- No nos informan sobre eso -menciono el castaño negando con la cabeza -solo sé que a ese niño le gustan mucho las golosinas caras -sonrió pícaramente dándome un guiño. Por lo que entendí, no podía decirme la razón directamente por sus compañeros, pero no se guardó para darme una indirecta: Iván había prestado el dinero para comprar golosinas.
- MMM -gruñí afirmando que entendía su indirecta y que le agradecía por decírmelo.
-HERRRMMMMMAAANNNOOOOO -Konu me llamaba a lo lejos mientras entraba al comedor con algo escondido en su camisa. Lo raro era que venía solo ¿Dónde estarán los demás? -Mira el dinero -resoplo cansado mostrándome lo que tenía en su camisa - Iván me dijo que era esta cantidad. Después le pedí a ese gran tonto que lo acompañara a su dormitorio - JAJAJA De verdad me da lástima que Konu trate así a Koji después de todo lo que hizo. Sonrío al intentar pensar la razón por la cual mi hermano odia al gemelo... A mí no me cae tan mal jajaja.
- Gran tonto jaja -sonrió Yoshi -Eres un caso niño -A Konu no le causo ninguna sonrisa.
-Toma -chillo casi tirándole el dinero.
- Hiciste bien en esconderlo en tu camisa, no sabes quién puede verte y aprovecharse de la situación -sonrió intimidante -¡Cuéntalo! -le ordeno al pelón que se encontraba detrás de él. Nos sonrió tranquilamente mientras nos miraba, yo estaba normal pero Konu se le veía algo inquieto, como si quisiera decir alguna cosa... pero no era capaz de hacerlo. Mientras apretaba los puños, le puse la mano en la cabeza y le sacudí en pelo riéndome.
-Tranquilo... ya pasara -dije ante su expresión. Sabía que estaba incomodo, pero el apretar los puños ni temblar le haría bien. Debía calmarse y tratar de pensar en otra cosa. Era lo único que podíamos hacer en ese momento.
- Ya está -miramos todos al pelón, tenía una mirada que no reflejaba mucha inteligencia -Esta completo, solo falta los días de mora -dijo guardando el dinero en su bolsillo.
- MMmm no te preocupes yo arreglo eso -dijo Yoshi mirándole fijamente - Como un acto de buena Fe para ustedes -me señalo con su dedo pulgar. A decir por sus palabras parecía como si nos estuviera regalando algo - Así que nos volveremos a ver. Tommy te espero en la práctica algún día; Tomate... no te metas en problemas -le sonrió a Konu - ni con nosotros; “Clon” -hizo algo parecido a una reverencia con Daji. -AAHH espero que compitan en el reto anual, sería interesante verlos a ustedes en un equipo juntos -se dio media vuelta y se alejó de nosotros.
Los otros tres miraron a Yoshi algo serios. Apenas paso por su lado, le siguieron sin mirar ni reprocharnos nada. El único que hizo algo fue el pelón, que alcanzo a voltear su mano antes de que el que tenía el pelo en puntas le gritara por hacerlo. Lo raro es que Konu le devolvió el gesto con mucha simpatía. ¿Lo conocerá?
- Konu donde esta Re... -no alcance a terminar la pregunta cuándo.
RRRRRIIIIINNNNNNNGGGG
El sonido que avisaba el final del almuerzo aturdía mis oídos, todos empezaron a evacuar el comedor para dirigirse hacia sus clases. Daji hizo un movimiento con el brazo y con una cara alegre salió del lugar.
- Hermano llegaras tarde -dijo Konu halándome la camisa para que saliéramos.
-No te preocupes, vete tú. Yo tengo tiempo todavía, mi profesor llega tarde -respondí algo indiferente, algo me inquietaba
- Esta bien, nos vemos luego -escuche lo último antes de que Konu se perdiera entre la multitud. Chiquito pero escurridizo jaja
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Por más prisa que pueda tener. Por más inquietud que tenga sobre lo que me harán si me descubren. Por más que piense en tratar de estudiar en este momento... se me hace imposible querer dirigirme a clases, ni corro para llegar a tiempo y muchos menos me dirijo hacia allí. Lo cierto es que no quiero estudiar en este momento. Me siento perdido en un vacío demasiado extenso y oscuro. Mientras camino entre los bloques me doy cuenta de que sin tantos alumnos el instituto toma un silencio relajante y motivador, no hay nadie que moleste a nadie, nadie me mira feo o raro... no hay nadie que escuche...
- ¡¡¡QUE RAYOS PASA AQUIIIIII QUE ES TODA ESTA MALDITA BASURA. QUE HAGO YO EN TODO ESTOOOOO!!! -
Un pequeño desahogo rugió de mi interior, algo así como un vomito... algo que no puedes retener, y para que lo hubiese gritado de esa manera y con esas palabras debiera significar el alto grado de desespero que podría tener. RAYOSSSS... Nunca me ha gustado ser ignorante, desde hace algunos años tome la decisión de cambiar, ya que si no cambiaba el mundo se aprovecharía de mí. Por eso decidí tratar de ser fuerte, tratar de cambiar, intentar creer que todo tenía solución. Con los años me di cuenta del potencial que había adquirido; era un nuevo yo y estaba muy orgulloso de lo que había llegado a ser. Pero ahora todas estas malditas cosas y circunstancias se han propuesto acabar conmigo.
Cierto. No puedo intentar no pensar en algo que desconozco, o por lo menos en las cosas que tienen importancia para mí. Por eso quiero ser detective... quiero entender las cosas y resolver conflictos. Por esa simple razón siempre quería entender todo lo que me sucedió, siempre me pregunto qué rayos es esto y aquello pero....
AAAAAAHHHHHHHHHH
Es demasiado. Es mucho lo que no he podido entender de esta mal… ¿Porque estamos aquí? ¿Hay algo especial en nosotros para estar aquí? ¿Qué rayos es este lugar? ¿Porque muere alguien y todos siguen normales como si nada? ¿Porque permiten cosas tan inmorales? De donde rayos salen personas tan... ya saben... raras. Todo esto te da a entender que no somos nada, y justo en este lugar te dan la idea de estar en el lugar equivocado. Y ahora frente a todo, esto me doy cuenta de que: Hay una especie de policía que esta corrompida; Que compartes habitación con alguien que hizo algo tan impactante que hasta genera temor en alumnos más mayores; Que le agradas a muchas personas desconocidas por motivos desconocidos y que el coordinador cree que eres un Come-niños.
Mas faltaba que un niño de trece años tenga que pasar por esto. ¿Cómo debo pensar frente a todo esto? ¿Y frente a lo demás? No puedo salir preguntando por ahí, que hay si pregunto lo que no debo o a quien no debo y termino como ese niño que escuchamos esa noche en el baño. Pero tampoco puedo no pensar en ello, no puedo dejar de pensar en todo lo que ocurre alrededor... es mi vida y la de Konu también. Todo esto tiene que ver con nosotros y nos influencia a nosotros, sino le prestamos atención... algún día, sino estamos preparados... este nuevo mundo acabara con nosotros.
-¡¡MOOOMAAANNNNTAAAIIII!! - Ehh ¿Qué es eso? ¿Quién me habla? Justo al frente mío estaba parado un niño mucho más bajito que Rei, tenía el pelo rojo oscuro, no como el color de Konu sino un rojo más triste... ¿Así que triste? No me digas. Una expresión relajada apareció en mi rostro, para dejar ver varias gotas de vergüenza. Que tonto soy ¿Cómo se ve un rojo triste? jajaja tonto - Momantai -dijo alzando la mano y sonriéndome alegremente cerrando sus ojos; después volvió a tomar una postura normal, donde no paraba de verme fijamente... era coincidencia de que sus ojos también fueran rojo oscuro, pero no eran un rojo normal... AAHHH ya deja de pensar en colores ¡HABLALE!
- Emm ¿qué dijiste? -reaccione por fin -¿Qué es eso que dijiste?-razone mientras pensaba. Así que monuentoi... ¿Que significara eso?
-Dije momantai -dijo sonriendo - que significa no te angusties que todo se solucionara.
-¿Todo se solucionara? -repetí por lo bajo.
- Sip -Se acercó un poco, casi hasta poder tocarme. No me llegaba ni hasta el pecho en altura, era exageradamente pequeño - Como estabas gritando mucho y te tomabas la cabeza, creí que tendrías problemas, muchos problemas... -tenía un extraño peinado, trenza o arreglo en la izquierda de su cara; Un mechón de pelo rojo que era sujetado por una tira blanca. Además tenía una pequeña marca de un punto en su mejilla izquierda cerca de su oreja, tanto así que si se peinaba bien, su mechón podía taparle aquella marca - ... Además parecías un zombi con la cara que tenías, yo pensé que no quería verte así... -Se puso un dedo en la boca como si estuviera pensando- Entonces pensé en irme… pero después gritaste otra vez y eso me dio tristeza -se entristeció - No me gusta ver a la gente… así pensé en decirte lo que siempre me decía mi hermano cuando estaba triste -EEHH ahora que lo veo, habla demasiado. Nunca le pregunte eso -solo que mi hermano decía que solo los inmaduros gritaban sus problemas -puse cara de WTF, aunque no es en realidad que significa... pero debe ser malo -entonces comprendí que tú eres como yo -Me abrazo de repente -Y por eso me agradas-
Me sonroje ante su abrazo, parecía que abrazaba un muñeco de peluche... porque no me quería soltar. Me rio ante todo esto ¿Porque le agrado tanto a personas desconocidas? ¿Tendré atracción por las personas raras? ¿Sera por mis ojos? ¿O por mi aptitud?... Jaja No creo que sea por mi belleza. Una gran gota cae por mi mejilla jajaja… Si claro.
-Gracias por intentar alegrarme -sonreí apenas me miro de frente, esos ojos no eran normales, nunca visto unos ojos rojos de tal forma -Me siento mejor.
-¿Ya no gritaras?-pregunto mirándome algo raro.
-No. Lo prometo -el dio un brinco de alegría, lo mire extrañado pues nadie brinca de esa manera por estas cosas - Y por cierto... ¿Porque no estás en clase? -pregunte al recordar que yo tampoco estaba.
-Pues me escape al igual que tu -puso un posición algo tímida. Cruzaba y descruzaba los brazos, ladeaba la cabeza y evitaba mirarme fijamente... Este niño quiere decirme algo pero tiene vergüenza de decirlo -Es que solo que quería ver una cosa -se sonrojo un poco
-¿Que querías ver? -pregunte.
-MMm es... mmm es que se supone... que es algo secreto -dijo enredándose varias veces antes de balbucear- Nadie debe saber de esto-
-¿Algo secreto? -repetí.
-Si-sii -me miro sonrojado -Yo no debo mirarlo porque no me gusta, pero-pero... pero siento curiosidad de porque se ven tan felices todos haciendo eso -empuño las manos decidido -por eso quiero saber más sobre eso y quiero entender porque les gusta regresar -así que todos son felices mmm debiera pensar que es un club. ¿No le gustan los deportes? ¿Pero le gusta ver la gente feliz? Me rio de ironía al comprender que sería muy difícil encontrar una persona que podría considerar normal en esta lugar.
-Ya veo... quieres conocer más sobre las cosas. También yo soy así, me gusta entender lo que desconozco -sonreí abiertamente -Si tu sientes que debes ir. Hazlo, será para el bien tuyo -le sobe el pelo rojo, despeinándolo un poco, el me devolvió un gesto típico de Konu... una mirada brillante.
-Ya se, ya se ya se - dijo con la cara iluminada -¿Te importaría acompañarme amigo? -su pregunta me sorprendió - Es que quiero que tu también lo veas... así, así no me sentiré solo -su cara brillaba de inocencia. Si le decía que no, era como decirle que no a Konu y a sus peticiones amables y gentiles. Además, el trato de animarme, tengo que apoyarlo de alguna forma... no soy de esos que no se preocupan por los demás.
-Está bien -afirme alegremente -Vamos te acompañare pequeño mmm... Es cierto, no conozco tu nombre.
-Ni yo el tuyo -dijo con un dedo en la boca -¿Cuál es tu nombre desconocido? -frunció su mirada y me la clavo como si fuera su enemigo, gracias a la luz que resplandecía sus ojos rojos entrecerrados se avistaban como sangre que se veía a en sus parpados... algo que te impacta la primera vez que lo examinas.
- Soy Tommoky -dije sobresaltado y asustado a la vez -
-AAHH -sonrío de nuevo - Mi nombre es Lain... -
-Un placer Lain -le estire mi mano para saludarlo. Su nombre me sorprendió un poco, pero solo era otro nombre diferente nada más.
-Amigo Tommoky - Me abrazo otra vez ¿Porque lo hace? Trato de zafarme de su agarre y veo que está bastante emocionado -Lo siento, es que me gustan los nuevos amigos -
-No te preocupes, estoy acostumbrado al contacto con las personas -en ese mismo momento recordé todas las noches en la ducha y en la cama, todos los roces y abrazos en sueños de mis hermanos; Lo que paso con Ritsu ayer… el masaje que me hizo el señor Akio -Solo no me abraces tan fuerte.
-De acuerdo -sonrío complacido -Vamos, si nos damos prisa podremos entrar con facilidad.
-¿A qué te refieres con eso? ¿No se supone pues que ya habías entrado y habías salido? -dije en tono preocupado.
-Sí, pero yo me infiltre sin que nadie lo supiera -afirmo -Todos los que entran tiene que participar y yo solo fui a ver. Además solo tenemos que escondernos nada más... Vamos Tammoky sera divertido... -termino diciendo antes de halarme del brazo a través del sendero. Solo me preguntaba una cosa: ¿Es tan difícil aprenderse mi nombre? Gruño mientras ese pensamiento rebota en mi mente; Veo que pasamos de lado el gimnasio, y nos dirigimos a la zona donde había varios almacenes, como no conozco de primera mano esta zona dejo que me guie por ese lugar.
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Casi que no atravieso el orificio por donde Lain me ordeno pasar. Según él era muy fácil ya que por su tamaño no tuvo ningún problema para cruzar por el agujero en uno de los almacenes, en cambio yo casi rasgo mi camisa. Subimos por unas cajas y alcanzamos el vidrio que conducía al techo. Al tener vista, note que eran más de 5 techos los que se veían desde aquel punto ¿Para qué habrá tantos almacenes aquí? No creo que guarden todos los exámenes que hacen.
Después caminar por una tabla atravesada, bajar por una escalera metálica, rodear una esquina y arrastrarnos debajo de una cerca, al fin llegamos al lugar a donde Lain quería entrar. Desde que estuve en el techo de aquel almacén supe que era bastante secreto el club del cual este niño tenía interés, pues para tomar tantas vueltas y ensuciarnos un poco, debía ser algo sumamente privado o sumamente único. La ultima ventana fue la más incómoda, era una ventila pero estaba ya muy agrietada por lo que sus extremos chuzaban al cruzar.
Cuando por fin logre entrar Lain me tapo la boca súbitamente. Mientras lo veía escuchaba varias voces y bastantes risas. No era un almacén abandonado, no había mucha suciedad en el piso, además no había telarañas ni cajas rotas y los vidrios y lámparas estaban en perfecto estado. Había cosas apiñadas por todas las esquinas y pegadas de los muros, notaba que estábamos bien escondidos pues apenas nos veíamos con la luz natural que se filtraba entre las cajas, bultos, bolsas y quien sabe que más.
Me incorpore silenciosamente y mire a Lain quien me señalo un pequeño estante donde se podía ver perfectamente a través de él. Le señale el pulgar en alto insinuándole que todo estaba bien, el sonrió y se acercó a susurrarme algo.
- No debemos hacer ruido, aunque después harán tanto ruido que podremos hablar sin susurrar- susurro en mi odio, parecía que me estaba escupiendo jaja.
-bien - Muevo mis labios lentamente para que entienda.
Fijamos nuestras miradas a través del estante. Había bastantes niños, todos con el uniforme del Instituto riendo y charlando parados sobre un tapete de lona con un círculo rojo en todo el centro. Según lo que veía, podía contar 7 u 8 niños en total, que tendrían entre 11 y 16 años más o menos, aunque desde mi posición los veía a todos más altos que yo. Los miraba tratando de identificar a alguno... pero no conocía a ninguno, ninguno se me hacía familiar ni un poquito... pero un momento, eso no será... Claro, ese es Keijo. ¿Que hace Keijo en este lugar? Nunca me ha caído bien, pero no descarta que me pregunte de la razón por la cual esta aquí.
- Bueno, espero estén todos listos -dijo una voz desconocida -Veamos que hay para hoy -