-¿Entonces no fueron a ningún lugar a vacacionar? – Pregunto aquel rubio de forma perezosa y desalentadora.
-Claro que nos fuimos de viaje… –Respondí tranquilamente -… y todos lo disfrutamos bastante-Agregue sonriendo mientras miraba hacia mis tenis y volvía a subir la mirada. “Sería muy tonto decir que ese viaje no nos sirvió de nada” – Fue muy constructivo para mí –Mencione justo cuando me sentaba en mi puesto en el salón de clases.
-Jajaja te sonrojaste jajaja –Se burló Ritsu señalándome la cara. No cambie mi expresión. Creo que hay algunas cosas de las que vale la pena sonrojarse –Pero en serio… Me alegro por ti –Sonrió mientras me sujetaba de los hombros de forma extraña –Espero algún día poder viajar contigo – Ojos penetrantes.
-¿EEhhh? –
-Digo… eemm… ya sabes, como salida de campo del club –Hablo nervioso mientras me soltaba los hombros. Ahora era el quien estaba nervioso. Se giró rápidamente de su escritorio y saco un botellón lleno de algún liquido -¡Ten! Te traje esto de mi cuarto –Estiro la mano para mostrarme un poco de refresco –Yo sé que te encanto cuando lo probaste y… -Se le trabo la lengua. Se le veía muy rojo… ¿Por qué?
-Oye…¿Estas bie..? –
-¡Oye! ¡Tommoky! –Grito alguien en la distancia. Se suponía que no había nadie en el salón ¿Por qué…? – ¡Bien hecho en la competencia! –Un chico de mi clase; uno de los más populares del salón me levantaba la mano como si me conociera de toda la vida y me sonreía abiertamente - ¡Tienes talento! –
-eeemm gracias –Respondí sin nada más que decir, hasta avergonzado de lo que pasaba.
-Si quieres te puedo mostrar unos movimientos para las siguientes pruebas –Menciono mientras llegaba a su asiento y se dejaba caer en él. Ya lo recuerdo, es de ese grupito que siempre se ríe en clase- Soy cinturón negro – Esbozo una sonrisa confianzuda y unos dientes blancos.
-¡Lo tendré en cuenta! – Mencione respondiendo con una afirmación. Luego me gire para ver a mi amigo de nuevo -¿Qué ha sido eso? –Pregunte sin saber que había logrado realmente.
-Jaja Aunque no lo creas, tú y tu equipo son lo único de lo que se habla este fin de semana en el instituto jaja – Menciono Ritsu un poco animado – Y no solo aquí, por radio también los mencionan- ¿Qué? ¿Por radio?... ¡Qué demonios!
-¿Por qué? Ni que fuera gran cosa – Dije confundido.
-Claro que lo es, no te imaginas cuán importante podría ser lo que estás haciendo, además de todos los que te observan… –Eso ultimo no sonó muy bien, y creo que Ritsu se dio cuenta de su error pues noto que se muerde la lengua - ¡En fin! Deberías aprovechar tu popularidad amigo. Es tu recompensa por ganar el reto – Me palmea el hombro, aunque sé que hay algo mal.
¿Ganar? Yo no gane el reto. Quedamos en la posición decima; Además... ¿Por qué me dice eso? ¿Y qué significa eso de “Observar”? Varias preguntas revolotean mi mente, desde que llegue a este lugar siempre he tenido mis cuestiones frente al porque llegue aquí. Y ahora también se junta con esta competencia en la que me he envuelto en participar y de repente aparecen personas que nos consideran importantes y esas cosas.
Quiero pensar que todo lo que pasa por mi cabeza es parte de la cotidianidad de ser estudiante de este lugar. Que es normal todo lo que nos está pasando y que todo esto pasa con mucha frecuencia aquí. ¡No soy estúpido! Sé que la vida no es color de rosas y que… ¡No te pueden pasar tantas cosas buenas sin que haya algo oculto!... ¿O tal vez si?
-Tommo… Tommo… SSHH ¡Oye! –Una mano se mueve frente a mis ojos y yo no me había dado cuenta –Tierra llamando a Tommoky… ¿Estas bien?-
-EEHH Si… si lo estoy – Respondí finalmente saliendo de mi trance mental -¿Qué quie…? EEYYYY – Alcance a gritar antes de darme cuenta que estaba rodeado de mis compañeros de clase. Unos se veían emocionados, otros no los reconocía… Solo clavaban sus miradas en mí.
-¿Estás pensando en la próxima prueba? –Pregunto uno con voz aguda. Era el más bajito de la clase pero creo que yo era menor que él. Lo mire anonadado –Parecías muy concentrado –Y en realidad lo estaba, pero tantas miradas me ponen nervioso.
-¿Qué sentiste cuando estabas en el desfile? Es genial que la gente te aplauda ¿Cierto? –Dijo otro que era medio calvo.
-Bueno… si, un poco –Respondió nervioso.
-¿Golpeaste a alguien en la prueba?-
-¿Cómo supiste la respuesta del bosque?-
-¿Te molestaría enseñarme a jugar soccer?-
-¡Me gustas!-
-¿Me darías tú autógrafo?-
Una lluvia de preguntas se abalanzó sobre mí inundando cuerpo y mente. Todos hablaban a la vez mientras se mostraban ansiosos por su respuesta. Mientras eso, luchaba por evitar un dolor de cabeza y rebobinaba muchas preguntas por mi mente. EEHHHHH “¿Me gustas?” ¿Quién dijo eso?... Gire la cabeza de forma perdida, intentando buscar alguna mirada o indicio de quien se me había declarado.
-¡CHICOS! ¡CHICOS! –La linda profesora de ética estaba al frente del tablero intentando llamar la atención de todos - ¡Vamos a comenzar la clase así que por favor vallan a sus lugares! ¿Sí? – Puso una cara muy extraña, como si fuera una niña pequeña pidiendo algo e incluso saco la lengua.
Fue extraño, ya que todo el mundo se sintió afectado por esa cara tan sensual y tierna de aquella mujer mayor. En menos de 30 segundos la clase estaba en silencio y lista para empezar.
-Gracias a todos, los quiero mucho –Puso su mano en su boca y mando un beso imaginario al aire. La mayoría de la clase se revoloteo y sonrojo por aquella acción –Por cierto, antes de empezar… -Saco un papel de su bolsillo –Joven Ritsu, su tutor lo necesita. Por favor no se demore –
-Uuufff Mas tareas –Reclamo Ritsu mientras se levantaba quejándose –Ojala esta vez sí sea en serio-Le escuche murmurar mientras pasaba al lado mío, pasaba al lado de la profesora y salía del salón.
-Por cierto… ¡Felicidades! –Sin previo aviso siento un beso en la mejilla. Me pongo rojo al instante e intento taparme cuando ella deja de besarme –Te felicito por haber dado lo mejor de ti en la competencia, espero sigas así. Ustedes son mi equipo favorito –Veo su linda cara sonreírme y siento una gran calidez dentro de mí; Como cuando mi mama me decía que todo saldría bien – Si necesitas algo solo pídemelo, además… eres el capitán más atractivo de este año- Sentí un escalofrió por toda la espalda al ver cómo me guiñaba el ojo atrevidamente.
-emmme ¡Sí! ¡Gracias por su amabilidad! –Grite sonrojado. Hice una pequeña reverencia e intente dejar de parecer tan nervioso.
-JIJI Eres tan tierno –Se burló la profesora mientras ocultaba su boca con su mano. ¿También estaba avergonzada? – ¡Bueno chicos! ¡Empecemos con la clase…! – Afirmo mientras caminaba alegremente hacia su escritorio, tenía una cara angelical y parecía como si bailara vals mientras caminaba.
Sentí un fuerte presentimiento es ese momento, algo que no podía pasar por alto… como si estuviera en algún peligro a algo así. Me gire para sacar mi cuaderno y me pude fijar en la causa de todo ese presentimiento: Muchos de los compañeros que antes me adulaban, ahora tenían sus caras sombrías y me miraban con odio y maldad. Con algo de sorpresa pude entender durante el resto de la clase que esas miradas solo debían significar envidia, pues no era normal que la profesora le dijera algo así a algún estudiante.
-JAJAJA Sí que soy afortunado –Me rio para mí mismo mientras recibo una bola de papel lazada directamente a mi cabeza. “Cuidado con lo que le dices a ella”, escrito con letra negra y con una pequeña calavera al final. Sé que si miro, no sabré quien me lanzo esto… BAAHHH por ahora solo debería prestar atención.
Debo Ser…
XXVII. Dentro de lo Cotidiano.
-¿Para qué me necesita? –Pregunte con tono serio y muy rígido. No me parecía muy cómodo estar solo frente a este señor. Alguien particular que había realizado algo horrible y que debería morir por eso.
-Te mande llamar porque necesito que hablemos algunas cosas –Respondió normalmente. Con su postura habitual y esta vez usando gafas de tonalidad verde -… Además quería aprovechar mi hora libre para esto –Sonrió maliciosamente.
-Bueno, pero que sea rápido. Todavía tengo que copiar lo que hicieron ayer en clase –Respondí rápidamente. Completamente desinteresado de sus palabras. Tome asiento cruzándome de brazos.
-Bueno, intentare no demorarte mucho –Dijo el señor Akio poniendo sus gafas sobre la mesa – Primero que nada, como su tutor me siento emocionado por su desempeño en la primera prueba. Tengo que decirte que en todos mis años, a ninguno de mis equipos les había ido tan bien… – Sonrió emocionado –… Y eso me hace sentir muy bien; Aunque me gusta más cuando pierden, son más dóciles y menos rebeldes –
-¿Así?... ¿Entonces estaba deseado que perdiéramos?- Mencione nada más por llevarle la contraria. Por hacerle frente. Por responderle a este maldito.
-No he dicho eso –Respondió sereno – Simplemente me gusta animar a mis estudiantes cuando pierden o los dejan comiendo lodo en cualquier prueba –Me miró fijamente por fin y luego suspiro –En fin, Felicidades. Lo segundo que quiero decirte es que la casa que esa a tu nombre ya le fue asignado un abogado, él se encargara de ella hasta que tengas la edad suficiente para tener esas cosas –
-Entiendo ¿Y si quiero tener mi casa antes de que me gradué? –Pregunte por curiosidad.
-Apenas te gradúes y te vayas te la entregara, antes no, a menos que tengas alguien que responda por ella. Leyes del Instituto –Afirmo. Asentí pasándome la idea por la mente –Como tercero esta la información que tengo de la segunda prueba –Algo… ¡NO! Fue mucha la emoción que senti; Es este viernes y ya quiero que llegue… la emoción de la competencia hace que me impaciente –Sera un reto de eliminación directa y será de conocimientos generales –
-¿Entonces será como un examen? –
-No, es una competencia por conocimientos. El que haga más puntos gana y pasa a la siguiente ronda – La preocupación me invadió, no es que no confié en mis compañeros, pero ver a Konu y a Rei respondiendo preguntas contra otros chicos mayores no me generaba un buen sabor. Esa era nuestra debilidad, por lo que muchos nos aplaudían… era lo que más nos causaría problemas: La corta edad. – Pero no te preocupes tanto, el equipo rival no es muy bueno que digamos. Además, ellos no saben lo que tú ya sabes –Me guiño el ojo. No podía creerlo, este señor nos estaba haciendo un favor ¿A cambio de qué? ¿Qué querrá a cambio?... Seguro es para ganar mi confianza.
-Gracias –Escupí intentando sonar agradecido, aunque no era posible - ¿Algo más que me quiera decir? –Dije apresurado. Tenía que irme a clases, además de que tenía examen de inglés a la ultima hora y no sabía nada –Tengo un examen la próxima hora –Mentí mientras lo miraba serio.
-Solo falta una última cosa –Afirmo con las manos delante de su escritorio – Por lo que veo, todos ustedes ya saben del pasado que tenemos Takuya y yo ¿Cierto? – Por impulso, empuñe mis manos mientras me mordía el labio inferior. “Como se atreve a hablar de eso” Es un… - No tengo problemas con que ustedes lo sepan, y la verdad me importa un carajo si me odian unos niños como ustedes –Tenia una expresión total de confianza, por la forma en que me miraba debía creerse muy superior a mí y a los demás – Pero te advierto que el hecho de que alguien más conozca sobre esto los podría poner en situaciones de peligro inminente – No se le veia sonriente ni confiado, ahora solo estaba serio y muy rígido.
-¿Pe-peligro? –Repetí sin creérmelo totalmente.
-Así es –Afirmo – Y solo para que lo sepas, tengo de mi lado varios individuos que actuaran en razón de proteger mis intereses y mis conocimientos, así que espero que mantengan la boca cerrada – Sonrió cálidamente – Eso es todo. ¿Alguna duda? –
-Todo muy claro señor –Respondí temeroso y guardándome todas las indirectas que tenía – Aunque si tengo una pregunta fuera del tema –Mencione mientras me ponía de pie.
-Pues dímela –Respondió inclinándose sobre su silla.
-¿Quién es el niño del cuadro? – Señale el cuadro que estaba en la pared del lado, el mismo que me había llamado la atención la primera vez que entre aquí: Un niño de ojos verdes vestido de marinerito que miraba tiernamente mientras se chupaba uno de sus dedos. Siempre tuve la impresión de que debía ser su hijo pero…
-Es una persona muerta… –Hablo fríamente. Lo comprendí de inmediato, esas “son cosas que no se deben preguntar” –…Que alguna vez fue mi hijo y simplemente no tuvo la fortaleza para seguir viviendo –Hizo un silencio mientras veía expectante la imagen –Era un niño muy lindo ¿No crees? –La voz parecía algo conmocionada. Pero si, sus ojos y pelo verde lo hacía alguien que sobresalía de los demás.
-Si señor… Lamento su perdida –Hice un reverencia por haber hecho tal pregunta y me dispuse a salir de la oficina.
-No está mal intentar ver de nuevo a los que murieron. Tú lo comprendes mejor que nadie – Fue lo último que alcance a escuchar antes de cerrar tras de mi la puerta; Aquellas palabras retumbaron por mi mente hasta que estuve de nuevo en mi asiento de clase.
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-¿Cómo te fue en el examen Tommo? –Me pregunto Ritsu a la salida del salón. Acababa de entregar mi examen de inglés y como era la última hora el profesor nos dejaba salir apenas acabáramos.
-Más o menos- Respondí rascándome la cabeza- Respondí todo el examen, pero creo que no me fue muy bien con el texto en inglés jaja- De hecho, creo que lo tengo todo malísimo. Baje la cabeza expulsando un aura oscura y gris.
-Te ira bien, estaba fácil –Sonrió Ritsu alegre –MMM Oye ¿Hoy vamos a entrenar? Tengo ganas de jugar –Dijo con mucha emoción.
-EEHH ¡Cierto! Hoy es martes – Mencione un poco sorprendido. Se me había olvidado que siempre jugamos los martes. ¿Hoy querrán practicar? – ¡Claro! En el mismo lugar y a la misma hora jaja –Sonreí al ver como Ritsu se alegraba.
-Hoy yo llevare lo que vamos a tomar. Déjamelo a mí –Menciono con un guiño antes de salir casi corriendo por el pasillo dejándome con un gota extraña detrás de la cabeza, aunque con un sonrisa.
-¿Con que entrenar?... mmmmm No me vendría nada mal – Dije para mí mismo mientras empezaba el trayecto hacia mi dormitorio. Lo último que había dicho el señor Akio rebotaba por mi cabeza, era como la idea de que estaba jugando con la muerte o algo así… pues, eso pude entender, ya que nadie puede volver a la vida, ni siquiera… AAHHHHH Agarro mi cabeza mientras intento soportar la migraña que me provoca pensar en eso.
-Oye ¿Estas bien? –
-EEHH –Dije sorprendido al notar quien estaba al frente mío – Emmm Si, gracias Yoshy –Respondí un poco avergonzado de mi aptitud. ¿Me habrá visto mientras gritaba? Debió ser muy vergonzoso.
-Ya veo –Hablo mientras me miraba fijamente –Escuche que formaste una alianza con cierto equipo ¿Es cierto? – Directo al grano. Preciso y certero como siempre… y por lo que veo, no tiene intención de irse sin respuestas.
-Fue más como un pacto de no agresión entre nuestros equipos, además no podía decir que no…-
-¿A no? ¡Claro que podías! – interrumpió con furia alzando uno de sus brazos. Creí que me iba a golpear pero solo la uso para beber algo de un botellón – Perdón, me exalte mucho. La verdad creía que eras más independiente y genial como dicen en las propagandas -¿Eso dicen?
-Ese no es el punto; Ese equipo nos buscó, nos acorralo y su capitán es alguien que pertenece a un club muy poderoso. Lo conozco –Su expresión cambio ante la fuerza de mi voz – ¿No crees que no lo pensé? Ese equipo quiere sacarnos ventaja de alguna forma, hasta nos dieron dinero. ¡No sabes todas las cosas que me imagine si le respondía negativamente! –Afirme seriamente, defendiendo mi decisión como fuera; haciéndole notar que todo fue por proteger a mi equipo.
Hubo un silencio incomodo por 30 segundos.
-Tu puedes decir y pensar lo que quieras, pero lo que te dije es cierto –Agregue, sin ganas de hablar más con él –Si me disculpas, tengo que entrenar con mis amigos – Empecé a caminar. Tenía que apresurarme, si no llegare…
-¡Espera! – Su brazo me agarro la camisa – No quise ofenderte, simplemente estaba enojado porque ahora ese equipo también tendrá de aliado al equipo más popular.- Menciono con tono de nostalgia -No tenía idea de que pensabas eso… y sí. Ese chico es peligroso –Menciono temeroso.
-¿Creí que no te agradaba el equipo más popular? –Pregunte con ironía mientras me giraba lentamente –Porque según tú, “solo éramos cara y nada más” –Mencione con diferente todo mientras lo miraba con mucha ironía.
-Tienes razón. ¡Lo lamento! –Apretó mi mano con fuerza mientras intentaba inclinar la cabeza –La verdad sentía envídia de que tu fueras más reconoció que yo, me sentía muy mal al saber que alguien nuevo tiene más Fans que yo -¿Fans? ¿De que estará hablando?
-Pero eso a mí no me interesa, no ves que no me importan esas cosas –Mencione mientras intentaba soltar mi mano de las suyas –Yo solo quería participar y ya AAAUU –Suspire por el dolor que me estaba surgiendo del brazo.
-Lo siento –Exclamo sorprendido en lo que me soltaba –
Pasaron por lo menos 60 segundos sin que ninguno de los dos dijera nada. Pasaron unos chicos mucho más altos que yo y siguieron derecho. Yoshitory tenía la vista en su mano, y no dejaba de tener una mirada desolada.
-Me tengo que… -Pronuncie por fin con la intención de irme.
-Espera –Su voz me detuvo –En el fondo yo no soy así como me ves ¿Sabes? Yo soy como tu… o bueno, era como tú –Su tono de voz era distinto al Yoshy de antes, al que vi por primera vez con los vigilantes, al que era jugador del Seleccionado del Instituto. No sonaba a un brabucón, sonaba a alguien más humano –Alguna vez yo tuve algo parecido… pero no siempre las cosas son como lo parecen. Es por eso que tu aptitud hace que recuerde alguna parte de mí… hace algún tiempo –
-No te preocupes, no serias el primero que me dice eso –Sonreí tontamente, incluso sentí como me sonrojaba – Lo bueno es que nunca me canso de hacerlo –Puse una mano en el hombro de Yoshy para que alzara la mirada –Siempre es bueno sonreírle a tus amigos –Su cara roja estaba totalmente desolada. No paraba de mirar su cicatriz mientras sonreía.
-Tienes mejor aptitud que los niños menores de este lugar –Hablo intentado sonreír –Eres el mejor perfil de alguien de tu edad que he visto ¿Por qué será que aquí no les enseñan a actuar así como tú?- Puso una de sus manos en mi hombro y esbozo una sonrisa amplia –No sabes cuánto me alegro de que estés aquí en este momento –
-Emm ¿A qué te refieres? – Pregunte confundido antes de sentir que me jalaban por el pasillo.
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-Por última vez… ¿A dónde vamos? –Pregunte por cuarta vez al borde de la rabia. El pelirrojo me había jalado por fuera del bloque de las clases y me llevaba directamente hacia los almacenes que quedaban detrás del instituto. Le lugar donde había visto la reunión de aquel grupo anteriormente.
-Quiero que veas algo, no tardara nada –Respondió sin mirarme a la cara – Además, creo que hoy tenemos que entrenar a tu equipo – Vi como aceleraba el paso- Es por aquí -
-¿Mi equipo?... ¿A qué te refieres con “tenemos”? –Pregunte totalmente, aún estaba pensativo por la palabra “Mi equipo”.
-No es obvio, desde hoy seré tu ayudante de entrenador -¿EEHHH? Aunque puse una cara de sorpresa, Yoshy no me dejo pronunciar ni una palabra, pues se giró y me tapo la boca con su mano. Debo decir que no olía muy bien que digamos – Creo que prefiero estar contigo y tus niños, que seguir siendo temido como el jefe de los vigilantes – Me guiño un ojo y me indico que hiciera silencio con su dedo –SSHHH No hagas ruido –
Asentí y me quito su mano de la boca. Sin darme cuenta, Yoshy me había guiado a un lugar entre dos árboles y un basurero. Mientras guardábamos silencio, el miraba fijamente un lugar, oculto detrás de aquel árbol. Yo un poco curioso me coloque cerca de él y espere ansiosamente ver algo.
Fue algo rápido que por mis ojos fue como si pasara en cámara lenta. Por el camino que mirábamos pasaron 4 chicos que yo ya había visto antes: El líder del equipo rojo “bonito”; el chico de pelo azul largo que ya lo había visto varias veces; Estaba el vigilante que había visto una vez junto con Yoshy, el que tenía el pelo en puntas cuando Konu y Rei defendieron a otro estudiante; y al último estudiante creía que lo había visto alguna vez.
Caminaban con rapidez y al mirarlos comencé a pensar muchas cosas… y quería preguntar muchas otras. No tuve que guardarme mis dudas mucho tiempo puesto que ellos desaparecieron casi al instante.
-Siempre se reúnen todos los martes a esa hora, ya van más de 7 veces seguidas –Hablo Yoshy con seriedad –Nunca me ha agradado el tipo que es vigilante, pero no quiero pensar para que se reúne con ese demente de Ouji –
-Ouji es el líder del equipo rojo ¿Cierto? –Pregunte.
-Así es, desde que lo conozco siempre me ha generado una gran sensación de desconfianza, sé que es malo y que es un bruto sin razón – Dijo sin quitar su seriedad.
-Oye… Sabes quién es el chico de pelo azul –Pregunte un poco nervioso – Es que siempre lo veo con Ouji – Agregue mirando para otro lado. Aun después de todo, me quedaba la impresión de que lo conocía de algún lado.
-No sé quién es. La verdad no habla mucho y siempre está a distancia –Respondió el pelirrojo –Pero es alguien fuerte, lo he visto –
-Se llama Koichi Kimura –
-Ya veo –Respondí sobándome la barbilla.
Esperen… ¿Quién dijo eso? EEEEEHHHHHHHHHH
Me gire rápidamente para encontrarme cara a cara con un chico de pelo rojo oscuro que ya había visto antes, tenía un mechón de pelo bajando por su rostro y poseía unos ojos rojo intenso, como si fueran de sangre. Era Lain, el pequeño que se había envuelto en una aventura conmigo no hace mucho, pero… ¿De dónde había salido? ¿Por qué siempre aparece como si fuera una sombra?
-¿Quién eres tu niño? Y ¿De dónde saliste? – Pregunto Yoshy quien estaba más sobresaltado que yo. Se le veía a punto de golpear a alguien.
-Tranquilo –Le cogí la mano indicando que se calmara un poco –Él es Lain, es alguien… agradable. Y no te preocupes, ya lo conozco de antes – Sonreí mientras le revolvía un poco el pelo –
-¿Así que me recuerdas? ¡Que genial eres! – ¿EEH? Puse cara de Poker Face al escuchar aquello. Mientras eso, el chico miraba hacia arriba intentado mostrar una sonrisa agradable… pero no lo lograba. La verdad, su expresión no era para nada agradable, parecía enfermo de algo de la cabeza.
-Ya veo –Hablo Yoshy calmándose, pero tenía la misma postura que yo frente a la aptitud del pequeño de cabello rojo – ¿Tu como sabes su nombre? ¿Lo conoces o algo así? –Señalo a Lain quien aún no dejaba de mirarme enfermamente.
-Si lo conozco, el viene por aquí casi todos los días –Respondió sin dejar de mirarme, luego de cruzar miradas giro su cabeza para ver directo a Yoshy – Se su nombre porque se lo pregunte personalmente –Y dicho esto le saco la lengua en forma graciosa.
-¿Has hablado con él? ¿Desde cuándo?- Pregunte curioso por saber más de aquel extraño.
- Desde la última vez que estuvimos tú y yo en ese lugar –Señalo hacia un lugar entre los árboles, de seguro se refería a aquella bodega donde habíamos expiado la reunión –En la noche estaba buscando una cosa y me lo encontré cerca al bloque D –Dijo mientras jugaba con sus dedos de forma extraña – Entonces me grito, me tiro al piso y me pregunto qué rayos pasa por mi cabeza al venir a este lugar –
-¡Espera! ¡Espera! ¿Te hizo daño? –Pregunto Yoshy algo alterado.
-No, solo me pego en las piernas dos veces y no paraba de mirarme con esos ojos fríos y desafiantes… aaamm no saben cuánto lo admiro –Puso sus manos en los cachetes y comenzó a mover la cara gelatinosamente. No puedo describir cuan raro era ver alguien hacer algo así, y por la mirada de mi amigo alto tenía la impresión de que pensaba lo mismo que yo.
-Buenoooo –Mencione intentando hacer que Lain dejara de hacer eso –Creo que desde ahora tenemos que tener precaución frente a estas personas… no sabemos lo que traman, pero debemos estar atentos – Mire a Yoshy con seriedad.
Tanto el como yo sabíamos que el que un vigilante estuviera caminado con esa gente en este lugar, debía ser que tienen algo entre manos. No para hoy. No para mañana, pero si para algún día. La primera vez que expíe a esta gente, casi me roban a mi hermano y casi le hacen algo terrible, sin mencionar que alguien de mi dormitorio murió..
-Veré que puedo averiguar –Hablo Yoshy con una mirada de preocupación- Pienso que todo esto no tiene nada que ver con la competencia, pero actúan debido a que todo el mundo está concentrado en ella y o en otras cosas –Wow ahora que lo pienso, es muy posible.
-Debemos tener cuidado y cuidar unos de los otros –Afirme y estire mi mano hacia Yoshy -¿Tregua? … o mejor dicho ¿Amigos? – Sonreí firmemente. Hace rato en el pasillo se había enojado conmigo porque había hecho una alianza con otro equipo. Ahora, no quería una alianza, quería que Yoshy fuera mi amigo, que formara parte de mi círculo cercano, que fuera uno más de mi familia.
-¡Amigos! –Alzo la voz Lain abalanzándose sobre mi mano para apretarla.
-aaagghh ¡Lain! ¡Suelta!- Forcejeaba arduamente por quitármelo de encima.
-JAJAJAJA –La risa de Yoshitory era jovial y muy ruidosa, pero por primera vez se le veía tan fresco… como si se hubiera quitado un gran peso de encima –Si Tommy, Amigos jajaja –Y justo entonces sentí como Yoshy se abalanzaba también sobre mí y Lain para después caer con todo el peso de la gravedad al suelo.
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-¿A dónde van? –Pregunto Lain por fin.
Habíamos emprendido el regreso a los bloques. Después de darnos la mano, habíamos recordado que teníamos un entrenamiento que dirigir. Así que sin decir nada comenzamos a caminar.
-Vamos a ir a jugar soccer ¿Quieres venir? –Hable con emoción. En verdad estaba contento de tener al jefe de los vigilantes de nuestro lado. ¿Quién lo hubiera pensado?
-No me gustan los deportes, ni sudar –Respondió Lain haciendo pucheros –Me gusta más la naturaleza, estar aquí entre los árboles y espiar a las personas –Agrego con voz profunda y misteriosa. Jajaja como si quisiera ponerle suspenso a sus palabras.
-Así que es por eso que solo te veo por aquí jaja –Afirme riéndome –Debe gustarte mucho este lugar –
- ¡Oye Niño raro! –Grito Yoshy de repente –Tengo una misión de espía para ti - ¿Espía? ¿A qué se refiere?
-¿EHHH? –El chico hizo un sonido de asombro y en ese momento mi compañero se giró para verlo de frente.
- Quiero que espíes a todos los que pasen por este lugar –Menciono el pelirrojo con seriedad –Cualquier cosa que veas, correrás para saber que sucede y me informaras a mi o a Tommy ¿Esta claro? –Cruzo los brazos, justo en ese momento parecía el mandón y brabucón jefe de los vigilantes. Que cambio tan drástico de personalidad.
-eemm… ¡Sí! –Afirmo Lain con mucha emoción –Pero espera… ¿Quién es Tommy? –Cuestiono mientras se golpeaba con un dedo la cabeza.
-Ese –Me señalo el jefe de forma grosera. Como si fuera alguien desconocido.
-De acuerdo, se dónde vive el –Sonrió en lo que me miraba fijamente – Después arreglaremos mi pago “Tommy” –Termino diciendo antes de darse media vuelta para terminar regresando.
-¡Niño Raro! ¿Sabes de la ley de los agentes? –Alzo la voz Yoshy antes de que Lain se perdiera detrás de un árbol.
-¡Claro! ¿Crees que soy un tonto? – Aunque tenía la impresión de que Yoshy iba a gritar que SI, este guardo silencio – ¡Yo también se jugar esto! –Alzo la mano despidiéndose antes de perderse de nuestra vista.
-Parece que estamos en ventaja –Hablo Yoshy sin perder seriedad.
-Si tú lo dices –Dije rodando los ojos mientras pensaba en aquella situación… después explote -¡¿Quién te dio permiso de llamarme Tommy?! –Estalle mientras lo alcanzaba, pues ya me llevaba varios pasos de distancia.
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-¡Hermano! ¡Qué bueno que llegas! –Fue Rei el que primero que se fijó en mi – ¡Mira todos los que vinieron! –Comento entusiasmado mientras señalaba la gran multitud que estaba reunida al lado del campo.
-Wow ¿Desde cuándo vienen tantos a jugar con nosotros? –Pregunte esperando que alguien me respondiera, aunque sabía que nadie lo haría.
-Fuko conoce a muchos –Hablo el pequeño de pelo blanco, quien había venido corriendo detrás de Rei – Son de la clase de Fuko –
-No sabía que fueran tantas personas –Menciono Yoshy quien estaba al lado mío. No había dicho ni una palabra desde que le había prestado ropa mía para la práctica hace menos de 3 minutos – Cuento casi 25, me dijiste que no pasaban de 12 – Dijo refunfuñando.
-Lo sé, pero no podemos decirles que se vallan – Mencione de forma acogedora - Ellos solo quieren jugar – Señale hondamente a los pares de ojos que se acercaban lentamente.
-¡Tu! ¡Dame el balón! –Fuko sin protestar le paso el balón a Yoshy -¡Reúnanse pronto! ¡Rápido! –Alzo la voz, alterando a la mayoría de los presentes.
Cuando por fin vi de cerca a todas las personas, note que éramos más de 20 chicos reunidos allí. Vi a Ritsu que me saludaba desde los más altos, junto con los gemelos; Estaba también Fuko y sus amigos que antes habían jugado con nosotros; Estaba Rei y Konu, quienes no paraban de murmurar algo a algunos chicos junto a ellos, debían de ser amigos; Y sorpresivamente también estaba Takuya y Taichi, quienes se veían muy altos a comparación de los demás.
-… veintidós, veintitrés, veinticuatro. Somos veinticuatro en total – Hablo Yoshy con el volumen justo para que yo lo escuchara.
-Yo me encargo- Respondí sereno. A pesar de haber tanta gente, me emocionaba la idea de que tantas personas vinieran a jugar aqui - ¡Bueno! ¡Soy Tommoky para los que no me conocen, veo algunas caras nuevas¡ ¡El día de hoy vamos a hacer trabajo físico, ya que es necesario para mejorar en este deporte! –Hablaba con firmeza, pero sin intentar parecer mandón ni creerme mucho -¡Después de eso jugaremos partido! ¡Ahora los dejo con el preparador físico del grupo! Es alguien que juega en el equipo del Instituto y acepto ayudarme con esto… ¡Él es Yoshitory! –
Finalmente presente a mi nuevo amigo ante el equipo. Nadie dijo nada ni hizo que llamara la atención, era como si conocer Yoshy los alegrara tanto como ir al cementerio. Seguro ya lo conocían y sabían lo tenaz que podría llegar a ser.
-Bueno… ¡Empecemos! ¡Cinco vueltas al Campo! ¡Ya mismo!- Grito asustándome un poco; Le lance una mirada de enojo justo al tiempo que se ponía a correr.
-¡Vamos! –Anime sonriendo mientras me disponía a seguirle el paso a mi compañero.
Los siguientes 35 minutos fueron interesantes. Yoshy se las ideo para hacer sudar a todos los chicos que estábamos allí: Una tanta de 100 abdominales; 3 carreras de relevos; Hasta nos puso a saltar como conejos para después correr lo más rápido que podíamos. A pesar de ser tan exigente, esta práctica me hizo recordar algunos buenos momentos del pasado… de cuando yo era torpe y no sabía nada y me ponían a correr como burro.
-Uff ¡Rayos!... Estoy muy viejo para hacer estas cosas –Le escuchaba renegar a Taichi una y otra vez, cada vez que me cruzaba con él.
-Estoy muerto… Fuko no puede más –Menciono Fuko una vez antes de ser regañado por el entrenador Yoshy.
-¡Bueno, Terminamos con la parte física! –Grito Yoshy mientras se secaba el sudor con la camiseta que le había prestado -¡Vallan a hidratarse! –
-UUfff… Sí que le gusta sudar –
-Me duelen las piernas-
-¿Haremos esto todas las semanas? –
Muchos comentarios surgían a mí alrededor mientras caminaba para tomar agua en alguna canilla cercana. A la mayoría le respondía que el “sabía lo que hacía” o “que era parte del entrenamiento”. Sabía que en el fondo, para jugar soccer se necesitaba correr demasiado… más que demasiado.
-¿Siempre corren así en los entrenamientos? –Pregunto por sorpresa Daji, quien se le veía casi exhausto.
-Sí, varios de los entrenamientos siempre era así… Solo corre aquí, corre allá… y no te detengas –Mencione intentando ponerle un poco de humor a todo esto, al fin y al cabo, solo es una práctica – Pero eso ayuda en un futuro –Puse una cara alegre, por más que estuviera cansado hacer esto me animaba mucho, era lo mejor de mi vida.
-Hermano estoy muerto… No puedo dar un paso más –La queja de Konu junto con su agarre fueron a parar a mi brazo derecho –No puedo más… Y yo que creí que hoy sería divertido… -Menciono mientras se agarraba fuerte a mi brazo -…Hasta invite a varios amigos que querían… –
- ¡Hora del partido! ¡Reúnanse! –Escuchamos gritar a Yoshy a unos cuantos metros. Sin esperar un segundo grito me apresure a acercarme, olvidándome por completo de lo que Konu me tenía que decir -¡Vamos a Jugar 12 contra 12 de la…! – Continúo hablando en voz alta. En menos de dos minutos ya había repartido los equipos, recibiendo miradas de desconfianza de Daji, Takuya y de Ritsu, pero sin ningún contratiempo mayor.
Luego de haber corrido tanto, el partido se hizo lento para muchos: No había concentración, fallaban los pases y no había trabajo en equipo. Aun así, eso no era excusa para que la gran mayoría disfrutara del partido, de los pases, de los goles, de las risas… y de los dolores también pues un niño le hizo una zancadilla a Koji quien cayó de cara al césped, pero al levantarse solo tenía una sonrisa en su rostro.
Yo jugaba de defensa en mi equipo, al igual que los chicos más mayores… Les dejábamos el ataque a los pequeños: Varios eran muy buenos y otros no tanto. Rei era increíblemente rápido, y aunque controlaba el balón con torpeza había logrado burlarme varias veces. Konu estaba en mi equipo, siempre intentaba llamar la atención con jugadas extrañas pero pocas le salían. Los gemelos, aunque jugaban en distintos equipos, se posicionaban muy bien en la mitad de la cancha, haciendo su tarea como recuperadores. No debería decir que Fuko es un gran jugador, apenas si sabe patear un balón y cabecearlo, pero debo felicitarlo por meter tantos goles… JAJAJA No sé si de suerte o por calidad jajaja, el asunto es que ganamos por los 5 goles que metió ese peliblanco.
-¡Bien! ¡Todos a sus cuartos! ¡Estén pendientes de la próxima práctica! – Dije en voz alta, luego de que Fuko anotara el último gol -¡Gracias por venir! – Sonreí mientras me secaba el sudor con la camisa. Estaba cansado, pero satisfecho por haber jugado.
-Valla… 7 a 4, que goleada nos metieron jaja –Se rio Yoshy quien se acercaba con mi camisa en su mano y una cara alegre – Con algo de practica muchos mejoraran, hay buenos elementos aquí –Se giró para ver a los chicos que se estaban retirando – Esos hermanitos tuyos podrían estar en el equipo del Instituto –Menciono animado.
-¿En serio? Y eso que Konu nunca había jugado hasta que llego aquí- Dije presumiendo del pequeño, aunque hoy no lo hubiere hecho muy bien ¿Qué le habrá pasado? –
-Y ese Naranja sí que corre –Agrego. Parecía impactado.
-Sí. Ojala la próxima vez me ayudes a enseñarles orden en el campo de juego –Mencione estirando mis brazos –Me gustaría que se supieran parar bien –Sonreí mientras pensaba en blanco en mi cabeza.
-Claro, Planeare algo. Ya me voy Tommy, gracias por invitarme –Hablo Yoshy poniéndose la camisa de nuevo –Fue interesante pasar la tarde con un amigo como tú –Sonrió amablemente mientras se despedía con la mano –Nos veremos –Termino diciendo mientras se alejaba cada vez más.
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-¿Qué quiere decir con sancionar? –Fue lo que pregunto Daji con voz alterada -¡Si no hicimos nada! –
-¡Claro! Se supone que hoy tenían reunión de club y no la hicieron, tanto que perdí mi tiempo esperándolos – La manera en que el profesor de matemáticas miraba a Daji me causaba miedo. Estaba ya parado en la puerta del dormitorio justo cuando yo llegaba del baño cubierto por una toalla. Estaba iracundo y enojado, aunque no lo aparentaba – ¡Por esa simple razón! ¡Joven! –Puso sus manos atrás y sonrió.
-Pero señor, nosotros estábamos jugando… - Intente persuadirlo…
-AAHHH Señor Himmy, usted como siempre llegando tarde ante mí –Respondió apenas mirándome, luego giro su cabeza hacia adelante y entro al dormitorio pasando de largo a Daji, quien solamente estaba empuñando sus manos – Se nota que estaban ocupados –Camino hacia el centro de la habitación y recogió una camisa y un bóxer gris que estaban emparamados –Ni siquiera son capaces de limpiar esta porquería de cuarto –
-¡No es una porquería! –Menciono Konu enojado – Así nos gusta tenerlo… ¡Y deje mis cosas ahí! –Agrego señalando lo que el profesor llevaba en la mano. Así que eran de Konu-
-Ya veo, parece que hasta los niños son irreverentes en este lugar –Y dicho esto le tiro las prendas de Konu directamente hacia él, mojándolo un poco. Mucho enojo empezó a correr por mi sangre ¿Cómo se atreve a hacerle eso a un niño? ¡Descarado! –La próxima vez no dejes tus porquerías en el suelo –Afirmo mientras salía del cuarto y se plantaba frente a mí.
-Eso que hizo no está bien señor –Mencione casi murmurando.
-Eso lo veremos Himmy, hoy no está tu novio genio para protegerte –Respondió con sarcasmo – Además, por tu forma de vestir no creo que quieras hacer nada mas jaja –Su risa no duro nada, fue más para acompañar el momento – Mañana sabrán de su sanción estudiantes, así sabrán qué clase de persona soy – Su mirada traía odio. Un odio que no habíamos buscado, que no habíamos provocado… Es más ¡Que ni siquiera seriamos capaz de provocar! ¿Qué le pico a este señor? ¿Por qué de repente no odia? Paso de largo mientras caminaba lentamente por el pasillo –Que tengan Feliz noche –Escuchamos antes de que cruzara la esquina.
-NNUUUU ¡Tonto! –Dijo Rei en voz alta y sacando la lengua con esfuerzo -¡Que tonto más creído! NNUUU –
-Si Rei, desde ahora tenemos que alejarnos de él –Menciono Koji dando un gran suspiro –Vamos a comer –Animo en lo que se ponía unos zapatos extraños y saltaba de su casa.
-Sí, tengo hambre –Correspondió Rei –Hermano Konu, vamos – Sin esperar respuesta agarro a Konu y lo hizo salir de la cama con sabana y todo –
-Vallan, yo iré a lavar la ropa – Note desaliento en la voz de Daji. Estaba desanimado, no tenía que ser un genio para descubrirlo. El rubio agarro toda la ropa mojada de todos, me quito la mía de las manos y salió caminando en dirección al baño-
-Déjenlo… a veces le pasa –Menciono Koji despreocupado – Tommoki, vamos –
-Eemmm si, Vamos –respondí caminado detrás de ellos… Claro, hasta que note que iba en toalla y me devolví corriendo.
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-hmmm… hhmmmm… aahhh - ¿Esos son gemidos? ¿De quién? – hhmmm si, que rico que es esto… hhmm – Soy yo. Una ligera corriente de placer inunda mi cuerpo; Se siente demasiado bien hacer esto… hhhmm –
No logro ver nada a mí alrededor, todo a lo lejos es un fondo negro. Alcanzo a distinguirme a mí, en medio de un terreno mullido y suave. Estoy desnudo… o por lo menos de la cintura para abajo y estoy haciendo el amor con alguien. ¿Qué quién será? No tengo idea pero me gusta mucho como me deja tocarlo de esta forma, además de que tiene algo que me evita ver su cuello, cabeza y rostro.
-¿Te gusta lo que te prepare? –Pregunto una voz proveniente del vacío negro. Algún espectador malicioso o solo un bulloso. No preste atención a eso y volví a disfrutar de mi momento –Aquí te traigo otro conocido jaja –Volvió a sonar la voz cuando juntaba mi pelvis contra los glúteos de mi personita sexual ¿Conocido?
Alce la mirada inquieto. ¿Cómo que conocido? ¿Con quién rayos estoy en este momento? Mil y una cosas se pasaron por mi mente cuando de repente se oyó un portazo y empezó a resonar el eco de los pasos. Sin pensarlo mucho, lo peor se confirmó cuando vi a Reisuke caminar hacia mí mientras que alguien le apuntaba con un arma. Mi excitación desapareció, el calor se extinguió dando paso una gran marea de sudor frio.
Solté las nalgas de aquella persona desconocida y caí sentado en aquel lugar invadido por el miedo ¿Cómo había llegado allí? ¿Qué estaba pasando? Si Rei estaba allí parado, entonces…
-¿Por qué te detienes? Ellos nunca opondrían resistencia hacia ti –Hablo el enmascarado con todo tenebroso –Ellos disfrutaron y disfrutaran las veces que tú te los quieras comer… así que adelante... ¡Desnúdate! –Empujo a Rei hacia la cama y le apunto con el arma – ¡Ahora que empiece el amor entre hermanos! –
El grito psicótico inundo la habitación y lleno mi cabeza. Aquel tipo camino lentamente hacia nosotros y…
AAAAAAAAAAAAAAAHHHHHHHHHHHHHHHHH
-AAHHHH –Me desperté sobresaltado solo para…
PPPUUMMMMMMMMMMMMM
Termine golpeándome con las tablillas de la cama de arriba.
-Ouchh –Renegué sobándome la cabeza con fuerza –Malditas tablas –gruñí entre dientes mientras salía de mi cama y me ponía de pie. Tenía ganas de ir al baño y además tenía mucho calor. Y eso que solo traía puesta mi ropa interior… suspire – Solo fue un sueño –Me golpeó la cabeza levemente en lo intento sacar y olvidar eso de mi mente –Un tonto sueño –
No me tarde mucho en llegar al baño, entrar en uno de los cubículos y sacar todo lo que por naturaleza debe salir. Fue un gran descanso ¿Habré tomado mucha agua? O son solo nervios.
-Baahhh –Exclame golpeándome la cabeza con los dedos –Regresemos a la cama –Pensé mientras me ponía de pie, me vestía con la única prenda que traía y me disponía a salir. Pensé el vaciar hasta que escuche voces detrás de la puerta que me cubria.
¿Voces a esta hora? Ni que fueran vampiros o algo así, todos saben que la noche es para dormir… o al menos eso creía yo.
-Damos inicio a la reunión cotidiana –Hablo una voz extraña, sonaba demasiado normal. Como si fuera alguien tímido pero con ganas de llevar el orden de todo.
-AAAAWWWWW Si, pero dense prisa –Hablo otro bostezando aparatosamente.
-Puntos en la agenda- -Hablo un tercero…