Para Diedrick y otros niños, el invierno es como la muerte vestida de blanco y aunque él este convencido de que es invicible ante el mundo, alguien le demostrará que no esta solo y que no debe darse por vencido.

Despechado luego de haber sido botado de su trabajo, Ian se emborracha hasta casi la madrugada. Cuando decide dejar el bar y dirigirse a su apartamento, se topa con un extraño medallón en el piso, el cual decide llevarse a casa para luego poder entregarlo a las autoridades. Pero lo que él no sabe, es que se llevó mucho mas que un simple medallón hasta su casa y que pronto, mas pronto de lo que él mismo pueda imaginarse las cosas se pondrán realmente locas.
Un desempleado, un demonio y unos sueños mas que reales.