Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Almas Gemelas © (Marvel Boys Love) por lilibel vangarret

[Reviews - 4]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Hola

 

 

 

 

 

Exhala e inhala, tratando de ralentizar su respiración, aun aferrado al cuerpo moreno, imitando el castaño con rodearlo fuertemente, temor a dejarlo ir y destrozar esa fantasía. Compartiendo besos cortos que terminan en uno más largo.

–Qué tal una segunda ronda? –reparte besos alrededor de sus pómulos y mentón–. No he quedado conforme.

Ríe Steve, negando. Deslizando sus manos por la cintura hasta alcanzar las redondeces, asimismo, arrastrando su lengua por su cuello.

–Solo un segundo. Mejor ¿un minuto?

–Uuuh, me gusta ese tono.

 

 

 

 

Cap9 Sexo, sudor y golpes.

 

 

 

 

Fue electrizante la adrenalina que nuevamente experimentó su cuerpo luego de frustrar un robo. El hecho de saberse querido por tantas personas. ¡Dios! ¡Deseaba contárselo a alguien!

–Quizás… Harley confié en mí. –piensa, entrando por la puerta principal–

Ya May sabía sobre su identidad, por lo tanto, de que servía entrar por su cuarto. Agradeciendo que en ese bloque de apartamentos pareciera más un hotel abandonado que otra cosa. Da un vistazo a cada lado antes de girar la llave.

–May! ¡Ya llegue! –sonriente quita su máscara. Usando el antiguo traje de Spider-Man y modificado por su padre. No el Iron Spider, aun no se atrevía a utilizarlo–

Frenando cuando se topó en la sala a Happy y May reír en medio de cajas de pizza y bebidas.

–Ahm... ¿Interrumpo? ¡Uh, es de pepperoni! ¿Puedo? –sonriente pregunta, ignorando el brinco de los adultos con su llegada–

–Claro, chico. Alcanza para todos. ¿Qué sucedió con el otro traje?

–Pues... –divaga, sujetando dos trozos–. Estoy cansado y olvidé hacer algunos trabajos de la escuela. Buenas noches. Ah, me llevaré otra. Crecimiento acelerado. –describe, llenando su brazo con otro trozo y una de las bebidas–

Silencio del par. Roto momentos después por la risa mutua. Reclinándose May en su silla, negando con su cabeza.

–Se parece a Tony... ¿Cómo lo está llevando hasta ahora?

–Relativamente bien. De vez en cuando sonríe pero en otras, su mirada es apagada y distante. Saldrá de esta, es fuerte. –peina May hacia atrás su cabello– ¿Y ella... La señora Potts?

–El trabajo es su mayor distractor. Por lo menos, Morgan ayuda a volver más llevadera la carga. –exhala, mirando hacia abajo–. Hm, dejaste muchos corazones rotos aquí, Tony.

Desde su cuarto, Peter interrumpe el bocado por el mensaje en su teléfono de hace algunos minutos.

–«Le pedí robado el número a tu amigo pero ahora no sé qué escribir. Bastará con desearte buenas noches. Creo je je...»

–Ahm... Cálmate, Peter, es solo un amigo. –trata de convencerse. En realidad, persuadir a su agitado corazón– ¿Qué le escribo? –toma asiento en su cama, sin quitar su traje, iniciando los bocados–. «Gracias, igual buenas noches para ti. Espero no hayas torturado demasiado a Ned. Luego seré yo la víctima» –escribe, mordiendo su labio–. Hm, está bien. Creo que luego le diré sobre Spider-Man.

Deja descuidadamente su teléfono en la cama. Era un poco tarde para que- Vira su cuello por el sonido de un nuevo mensaje. Sonriendo.

«Entre los dos podremos con Ned. Si no funciona, seré tu escudo»

Grito interno y brinco involuntario. Lastimosamente saliendo a volar su cena improvisada.

Desde la sala, May y Happy escuchan el grito fatídico del chico.

–Peter, todo bien?

–Sí... So-Solo que... perdí las pizzas. Cayeron al suelo. Estoy bien, luego limpio el desastre. Buenas noches.

–Sí. Muy parecido a Tony. –afirma Happy–

 

*                      *                      *                      *

 

Poco a poco desaparecen los rastros de somnolencia, permitiéndole mover su mano y frotar sus dedos en sus ojos. Leve movimiento que le facilita percibir apretón alrededor de su cintura.

Se tensa, dando un vistazo hacia arriba, localizando rostro masculino.

–“No fue un sueño”. –piensa, conteniendo la respiración–

¡Dios! ¡Lo hizo! Cubre con su palma su boca, parpadeando lentamente. Lo más conveniente era salir sin ser notado. Sujetando la mano morena y alejándola con calma, dejándola sobre una almohada como distractor de peso.

Intenta levantarse con movimientos pausados, impidiéndolo la misma mano rodear su cintura y jalarlo de regreso a la cama. Bufa. Da un vistazo sobre su hombro, topándose con la mirada dorada abierta.

–Después, Steve. Aun no quiero enfrentar la realidad. –tras decirlo, cierra sus ojos, frotándose en la almohada y buscando la conveniente posición–

–... –baja su mirada, pensativo–. Bien. –cede, sonriendo. Regresa a la cama, metiéndose bajo la sábana, rodeándolo– ¿Tony? –parpadea por sentir algo bastante firme golpear su muslo–

–Cuarta ronda antes de presenciar o impedir el fin del mundo? –propone, sonrisa sobresalir en el borde su comisura–

–Mi turno. –mueve sus piernas y cuerpo, colocándose sobre él. Besándolo entre risas–

 

Recobra el conocimiento y sus susceptibles sentidos. Fugaz recuerdo compara la inusual calidez con la última ocasión que pudo tener con su ex pareja. Ridículamente, en su presente, reposaba entre los brazos de Tony. Alejándose confuso por la inconsciente necesidad nocturna, y repudiando sus pensamientos anhelantes por el distanciamiento.

Esta vez, ninguna mano frenaría su emancipación.

–Buen día, Buck. –saluda, bañado y con nuevas prendas ofrendadas por su hermano– ¿Te doy una mano? –inquiere por hacer conversación ya que se prepara para colaborar– ¿Cuántos huevos?

–Media docena servirá. Creo que Sam vendrá, y después se queja de mí y mi metabolismo acelerado. ¿Cómo estuvo tu noche? –pregunta, friendo salchichas y tocino. Cabello atado en una coleta baja y camisa deportiva sin mangas–. Anoche escuché ruido pero desistí salir.

–Fue Tony. Llegó en la madrugada.

–Como en los viejos tiempos. –opta en cambiar de tema, regalándole un puñetazo amistoso–. Espero que esta vez no te dé un ataque de creatividad.

–Creatividad? El único que intentos intoxicarnos fuiste tú. –lo empuja, moviéndose por la cocina–

Cocinar ayuda a distraer su mente del doloroso pasado que no pude ser. Las miles de palabras que no pude decir y el amor que luchaba por emerger. Sin oír el despertar del último invitado en casa, frenando 616 antes de saludar. Permitiéndose observar al par de Súper Soldados compartir risas y empujones amistosos.

Evoca a su propio Steve y a él mismo como reemplazo de Barnes. Pero además de risas, besos tímidos o simples caricias por sobre la ropa. Extrañaba tanto a su compañero, pero era lo suficiente maduro para comprender que no debía consolarse con este nuevo Capitán. Mayormente, temía que pereciera por su culpa y no pudiera evitarlo.

–“Soy un ilusión. Este Steve tiene un hijo y es posible que regrese con su ex pareja.”. –piensa bajando su mirada. Con rapidez, adquiere una máscara sonriente, en medio del sangrado interior–. Muy buenos días ¿Empezaron el show sin mí?

–Tony. –ojea sobre su hombro, borrándose su anhelo. Obstinada amabilidad–. Buenos días. Tomará pocos minutos. Siéntate a esperar.

–Puedo darles una mano? No soy tan inútil como todos piensan. –bromea, rascando tras su nuca–

–Claro. –interviene Bucky–. Los platos y cubiertos están allí. Comeremos en el comedor ¿o prefieres la sala?

–El comedor estará bien, Buckaroo.

–Buckaroo? –repite Steve, reprimiendo una sonrisa–

–No lo olvidarás, cierto?

–Tú que crees, hermano.

 

 

Queens.

–Creo que Iron Man es mejor. –opina, comiendo su emparedado, ganándose el reproche de su mejor amigo–. Qué. Él cuenta como héroe. –desvía su mirada. Suponiendo lo que Ned le diría. «Si es tu padre, no cuenta»–. Así sea mi padre.

–Sigue sin contar.

–Me siento identificado con Spider-Man. –interviene a la posible discusión del par–

–Ah sí ¿Por? –inquiere Ned–

Encoge sus hombros sin dejar de comer.

–No me puedes decir eso y después no dar tus razones. Solo lo haces para hacerte el interesante, además, ni debes conocerlo.

–Ned, Ned. –llama Peter antes de que su amigo metiera la pata–. No es relevante.

–Por qué no. ¿No te gustaría saber por qué le gusta Spider-Man? –pica divertido, elevando repetidamente su ceja–

–Ned. Él no dijo que le gustara. Simplemente que se identifica con él. Deja el tema.

–Oye! –interviene una chica bastante linda, cabello negro– ¿Es verdad que eres hijo de Tony Stark?

Frena Peter, elevando su mirada, permitiéndole su percepción alcanzar a notar a dos chicas lanzar miradas en su dirección, riendo y cuchicheando. Pero, al verse descubiertas, fingen comer.

–Lamento lo de tu padre. En serio fue- –calla por el abrupto levantamiento del castaño–

–No. No lo lamentas. Porque a ti no te conozco ni necesito conocerte. –aclara, manteniendo el contacto visual–

–Peter. –interviene Ned. Sorprendido por su respuesta y por el silencio en el comedor luego de verlo levantarse–

–No. Estoy harto de que chicas y chicos como tú, e incluso algunos maestros vengan a darme sus vacías condolencias.

–Relájate. Yo solo quería ser educa-

–Solo qué! –explota. Su mirada roja por la ira–

–No trates así a mi novia! –interviene un chico del equipo de futbol, acercándose a zancadas–

–En serio? –obstruye Harley su camino, sonrisa altanera–. Entonces qué hace coqueteándole a Peter.

–No te metas. No he olvidado lo que nos hiciste, Keener.

–He recibido mejores insultos, “chico del que no sé el nombre y no necesitó saber”.

–Tal vez deba hablar a golpes contigo.

–Inténtalo. No lo recomiendo. Digo, eres la "supuesta" –usas sus dedos para las comillas– estrella de la escuela. Nadie desea que te lesiones.

–Harley. –sale de su protección para colocarse a su altura–. No vale la pena. Fue mi culpa. Vámonos.

–Concuerdo con Peter. Vámonos a otro lugar. –apoya Ned, observando la aglomeración que ellos causaban, pero, ningún maestro a la redonda–

–Vas a correr a las faldas de tu padre. Cierto, está muerto por no saber escoger lo que le conviene.

La cólera asciende desde los dedos a su cerebro y viceversa, virando empuñando sus manos. Teniendo la “desventura” de que otro puño se encargara de darle su merecido, enviándolo al suelo. Cejas doradas fruncidas y un Harley completamente molesto.

–No vuelvas a decir eso, imbécil! –avanza Harley para terminar el trabajo, metiéndose demás deportistas a someterlo–

Del mismo modo, Peter interfiere en cooperación de su amigo, empezando una histeria en el comedor, Ned evitando entrometerse.

 

–Sabes, es la primera vez que estoy en detención. –muerde su labio inferior, avergonzado–. Gracias por golpearlo. Hubiera hecho lo mismo. Siento que estés aquí... Por mi culpa.

–Nah. No sería mi primera vez. –encoge sus hombros, frotando su moretón–. Auch. Esos imbéciles no pueden solos. Pero me alegra saber que descubrieron que sabes dar buenos golpes.

–Creo que tengo algo que… –rebusca en su maletín–. Oh, mira. Traje mi botiquín.

–En serio? –sonríe, pero después, el dolor interviene–

–Esto es idea de mi padre. Mi otro padre. Es muy sobreprotector en algunas cosas. –describe abriendo la pequeña caja de plástico. Sacando de ella el diminuto frasco de alcohol y una mota de algodón Frenando cuando recién notó su error, elevando su mirada–. Sí, soy hijo de una pareja gay y uno de ellos es un fértil. ¿Empiezo o sentirás repulsión por mí? –inquiere reservado–

–De seguro sí sentiré dolor y bastante ardor. –trata de bromear, sin embargo, no consigue hacerlo reír–. Peter, no me importa de quién seas hijo. Eso no define quién eres. Me agradas. –sujeta su mano entre la suya–. Por lo tanto, cuándo empieza, Doctor Peter.

–Trataré de que no arda mucho ¿Sí? Entonces... ¿eras un chico malo en tu otra escuela? ¿Por eso viniste aquí?

–Verdaderamente soy un amante de la mecánica, física y algunas materias que la estrella del equipo detestaría, así no lo creas. Auch.

–Lo siento. No lo aparentas.

–Sí, me lo dicen mucho. Aunque tú tampoco ¡Peter! –queja entre risas–

–No fue mi intención. En realidad fue tu culpa.

–Cómo te iba diciendo, vengo de un colegio de niños ricos y con un IQ elevado. Mi tutor creyó que ese lugar sería más conveniente para alguien que sufrió de bullying y con una gran imaginación creativa. –niega con una larga exhalación por recordar las ocasiones que estuvo en detención por defenderse con sus propios inventos de sus supuestos compañeros–. Digamos que las clases de deportes sirvieron para algo. Despacio, despacio. –queja cerrando un ojo–. Mi tutor me visitaba a veces y en otras nos encontrábamos en New York... Era un bastardo pero se convirtió en un gran amigo.

–Hm... Sabes, esas serían las mejores palabras para definir a mi padre.

–... –ahora es el turno del rubio en morder su labio. Mirada culposa–. Peter, me gustaría contarte algo.

–Es algo malo? –tantea, terminando la curación. Ahora rebuscando las curas–

–No sé cómo lo tomes tú.

–Oh. Si es sobre la discusión y que deseas alejarte de mí, hazlo. Quiero decir, no me molestará. Fui yo quien te traje en esto. Gracias por todo y- –calla por ser tomados sus hombros, necesitando sujetar su maleta y el botiquín antes de que cayera–. Ahm... ¿uh?

–Agradezco que hicieras silencio, tenía una segunda opción, pero no creo que habría sido la adecuada. –divaga, avergonzado–

En ese momento, el rector finalmente arriba junto con la secretaria, frenando la única oportunidad de Harley de poder sincerarse con Peter.

–Ahm... ¿Harley? Esto es incómodo. ¿Qué es lo que querías decirme?

–No. Nada. Te diré después. Solo recuerda que me agrada ser tu mejor amigo. –sujeta su propia maleta, incorporándose. Entrando con mirada dolida–

Bajo la confusa mirada de Peter. Restándole guardar a prisa su botiquín y botar lo desechable. Entrando.

Notas finales:

Bye xDD


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).