El silencio era casi incómodo y lo único que hacia algo de bulla era la lluvia cayendo en el techo del auto. Kris se aferraba a Jaehyun mientras temblaba por el sentimiento de rabia y preocupación. Había pasado más de un año desde que su aventura había comenzado y había visto al pequeño infante crecer durante todas las etapas de su vida. Se habían resignado a no encontrar al padre biológico del pequeño y hace algunas semanas atrás tenían la seguridad de que este no lo quería.
-Sé que es repentino, pero no puedo dejar de pensar en todo lo que pasó con ella, la amaba ¿sabes? Pero nunca pude ser lo suficientemente valiente por ella – Kris asistió con su cabeza – tuve tiempo para reflexionar y saber que no puedo perder lo único que ella dejó.
- No lo sé, no es justo. Mis amigos y yo hemos criado a Jaehyun como si fuera nuestro, él ni siquiera te conoce – el otro hombre suspiró conteniendo las lágrimas – pero también sé que legalmente no puedo retenerlo.
- No quiero que esto perjudique a Jaehyun, no sería justo para él. Pero al mismo tiempo, lo siento, quiero criar a mi hijo.
- Por favor, denos tiempo para resolver las cosas.
- El tiempo que necesiten.
~Más tarde ese día~
Kris reunió a Lay y Luhan para contarles sobre su reunión con el padre biológico de Jaehyun. Luego de contarles por completo su conversación, el silencio se instauró en la habitación; se sentían devastados y tristes. Pero finalmente acordaron que no podían hacer nada para retener al pequeño niño, sería un problema no solo legal, sino que también si conseguían que se quedara con ellos, luego el niño se convertiría en un adolescente y haría preguntas; preguntas que se convertirían en reproches, eso los terminaría por devastar.
- Lo mejor será hablar con Jaehyun, comenzar a contarle cosas y hacer una transición amigable – Lay interrumpió el silencio de la habitación – deberíamos…no sé…hablar los tres con el padre de Jaehyun.
- Deberíamos decirle que queremos estar en la vida de Jaehyun, no es justo que lo hayamos criado hasta este punto, para luego perderlo para siempre – Luhan comentó suspirando – creo que lo mejor será llamar a Jongdae.
- Sí, creo que será lo mejor – resolvió Kris.
Resolvieron contarle lo más pronto posible a Jaehyun, intentando contarle la historia de la manera más comprensible para un niño pequeño. Al día siguiente del encuentro de Kris con el padre de Jaehyun, se reunieron con el abogado Kim; él les aclaró que, si el padre del niño lo quería de vuelta, no había mucho por hacer. Pero que podía encargarse de todos los trámites para que no tuvieran problemas legales y luego tuvieran acceso a ver a Jaehyun.
- Jaehyunnie, vamos a hablar ¿sí? – el pequeño asintió con la cabeza, los tres chicos se sentaron a sus lados – tu sabes que un día llegaste a esta casa y que desde ese día te quisimos mucho ¿verdad? – Lay habló suavemente acariciando el cabello del niño tratando de cotener las lágrimas.
- Sip, yo también los quelo – respondió feliz. Luhan no pudo esconder el sollozo que salió de sus labios.
- Tu mami te dejó aquí para que te cuidáramos – Kris se arrodilló frente a él – ella nos pidió que lo hiciéramos hasta que ella o tu papá pudieran venir a recogerte – trató de explicar de la manera más sencilla posible.
- Pelo tu eles mi appa – Kris negó con la cabeza.
- No cariño, lo siento no soy tu verdadero papá. Te quiero mucho pero tu padre real ha venido a buscarte – Jaehyun comenzó a llorar haciendo que los tres se desesperaran un poco – nosotros no te dejaremos con él hasta que lo conozcas bien.
- ¿Plomesa?
- Sí bebé, es una promesa – Luhan besó su cabecita.
~Un mes más tarde~
Habían pasado un mes desde que Jaehyun conoció a su papá; algunas semanas desde que habían comenzado a convivir y pasar tiempo juntos. Hace una semana atrás Jaehyun había comenzado a llamarlo papá y unos días atrás habían aceptado la realidad: era hora de que el pequeño fuera a vivir a su verdadero hogar.
- Nunca dejaré de agradecerles lo que han hecho por mi hijo – el padre de Jaehyun estaba sentado frente a ellos con el pequeño en su regazo jugando con un juguete.
- Lo único que pedimos es estar presente en su vida – hace un par de semanas atrás habían firmado algunos acuerdos para asegurarse de que todo fuera bien con el pequeño y protegerlo en caso de que algo saliera mal en el futuro.
- Claro que sí – respondió el hombre – creo que es hora de decirles que le hablé a Jaehyun de venir a mi casa a vivir conmigo, está feliz ¿verdad Jaehyunnie?
- Sí, appa – respondió el infante sonriendo.
- Claro, estaría bien…-respondió Lay susurrando al borde de las lágrimas – solo, deberíamos empacar sus cosas.
- Gracias chicos.
Al día siguiente los tres empezaron a empacar las cosas de Jaehyun en cajas; Suho, Sehun y Tao se habían ofrecido en la mudanza, pero sus parejas habían afirmado que lo mejor era hacerlo ellos solos. Entre risas, recuerdos y lágrimas cerraron la última caja con las pertenencias del pequeño que habían criado durante más de un año.
El padre de Jaehyun hizo que las cajas fueran recogidas por un camión de mudanzas y les dio espacio a los chicos para que se despidieran, aunque solo sería por días, ya que habían conseguido la custodia de los fines de semana del pequeño y también podrían cuídalo cuando su padre tuviera que salir del país.
- Nos veremos los fines de semana ¿sí? – Kris besó la frente de Jaehyun – todos los fines de semana – le prometió.
- No te dejaremos nunca, si quieres algo, dile a tu papá que nos llame ¿sí? – Luhan abrazó al infante.
- Nos veremos pronto – Lay comenzó a sollozar.
- Gracias de nuevo chicos, nos veremos el fin de semana – la imagen de Jaehyun agitando su mano diciendo adiós los hizo llorar por un par de días más. Era el fin de un ciclo.
~Unos días más tarde~
Kris estaba confundido por los mensajes que había recibido de Chanyeol. Primero le decía que Minah se había ido hace unas horas a Londres (igual su amiga le había escrito desde el avión, era una dramática de primera) y la segunda era pidiendo que lo fuera a ver en un oficina en el centro de la ciudad.
- Que bueno que viniste hyung – Chanyeol estaba vestido con un traje muy elegante y tenía una gran oficina.
- Wow, ¿cuándo conseguiste este empleo? – le preguntó en modo de broma.
- Este siempre ha sido mi empleo – Kris se quedó mudo – antes de explicarte, debes leer esto.
Mi querido Wufan,
Tú no me conoces, pero vaya que yo sí. Hace muchos años atrás dejé un amor que no pude recuperar, esa era tu verdadera madre. Mi familia nunca nos dejó estar juntos, la amaba tanto que por eso naciste. Ella te amaba, yo te amaba, pero nos separaron.
Cuando al fin mi familia me dejó en paz y quise buscarlos, era demasiado tarde. Ella había perdido la razón (intenté buscarla, pero descubrieron que había muerto hace poco) y tu abuelo te había dado en adopción antes de morir. No pude encontrarte por ningún lado, hasta que di con el paradero de tus padres adoptivos hace poco.
Te encontré, y eso me hizo muy feliz. Si estas leyendo esto, es demasiado tarde, ya he partido de este mundo. Quiero que sepas que te quise mucho, eres el fruto de un gran amor, y nunca dejé de buscarte. Te deseo una gran vida hijo.
Atentamente,
Tu padre
PD: Me casé, pero nunca tuve hijos, así que no tienes hermanos.
- ¿Qué es esto? – preguntó anonadado.
- Lo que dice la carta – Chanyeol suspiró – yo trabajaba para tu padre. No me malinterpretes, soy tu amigo y nunca he mentido sobre mi amistad. Él te buscó muchos años, hyung. Pero nunca pudo presentarse, murió antes de que yo pudiera conocerte.
- Oh.
- Por cierto, todo lo que ves a tu alrededor es tuyo.