Una vez en mi departamento, ambos llegamos y nos quitamos nuestros zapatos y nos dirigimos a la sala.
-Pasa y siéntate. Iré por algo para tomar – Dije mientras iba a la cocina
-Bien- Decía el mientras tomaba asiento en la sala.
-¿Gustas café?
-Claro.
-Entiendo.
Llegue a sala con ambas bebidas y las puse en la mesa de en medio
-Bien, Takano, ¿De qué se trata? He estado pensando en ello toda la mañana…
-¿Eh? ¿Por qué?
-¿Eh…? -Decía un poco nervioso- Ah, bueno, no lo sé, aun no conozco ese lado de ti, supongo. Eres mi mejor amigo…
Suspire.
-Mira, es una larga historia. No es que tenga novia, o algo parecido…
-¿Nunca has tenido novia? Pero si eres muy atracti…
-No, no es eso – le interrumpí – He tenido novia pero… yo aborrecía tener novia, porque por lo general las chicas siempre esperan más de una relación. La verdad eso me aburre.
-¿Entonces por qué tenías novia si te aborrecía?
-La verdad, quería saber que se sentía tener novia… pero cada una de las que tuve finalmente terminaron nuestra relación porque decían que yo no les ponía demasiada atención. Aunque no me sentí mal después de que terminábamos… de hecho me sentía un poco más… no se… ¿Aliviado? ¿Libre?
-Entiendo… ¿entonces?...
-Conocí a un chico no hace mucho… Ritsu… me enamore.
-¿De ese chico? ¿Eres…? – Decía Yokozawa un poco extrañado y sorprendido.
-¿Homosexual? ¿Gay? – Decía yo sonriendo un poco-
-Si…
-Hmm… Pues, no sé. En toda mi vida no me he enamorado de nadie más que de ese chico. Incluso se me hace raro hasta la fecha…
-Entiendo. ¿Y qué paso con ese chico?
-Pues…
En fin, le conté a Yokozawa todo lo que había pasado con mi vida y ese chico desde entonces. Nos llevó casi 2 horas y media. Termine de contarle todo...
-Y pues… aquí estoy hasta la fecha…- Dije terminando mi café
-Increíble… no puedo creerlo, ¿El chico simplemente desapareció así nada más de un día para otro? ¿Realmente te quiso? –Decía de forma sorprendida y ansiosa.
- No sé, fueron muy rápido las cosas, aun me acuerdo de ese chico…
-Takano… ¿Fue la primera persona de la que te enamoraste realmente?
-Así es, sentí raro… una cosa que jamás había sentido.
Suspiró
-Lo siento Takano, seguro que fue algo muy difícil…
-No te preocupes… espero que… llegue alguien más algún día… no sé, no me importa…
-¿A qué te refieres?
-¡Hmph! Olvídalo – Recogí ambas tazas vacías y las lleve a la cocina. Yokozawa fue detrás de mí.
-¡Oye! ¿A que te referías con eso de que “Espero que llegue alguien más algún día”?
-¿Eh? ... –Me extraño ver a Yokozawa así… era la primera vez que veía esa expresión en su rostro de querer saber con mucha insistencia lo que había preguntado- pues… mira, para serte sincero, me he considerado un asco de persona….
-¿Asco de persona? ¡¿Por qué?!
-Poco me importaron los sentimientos de las personas menos los míos, siempre he visto por mí mismo sin importarme los demás.
-¿Qué quieres decir con eso?
- La frase que dije “Espero que llegue alguien más algún día”… quiere decir que si consigo salir con más personas es posible que pueda olvidarme de Ritsu, una vez hecho esto, podre desechar a la persona con la que este saliendo.
-¿Realmente tu…?
-Así es, lo haría. Sé que no es lo correcto, pero es lo que yo acostumbro hacer, supongo que por eso no tengo muchos amigos…
-¡Takano! Eso sería usar a una persona… pero… en parte creo que te entiendo…
-Si pues, veré que pasa de ahora en adelante…
Y así fue, pasaron un par de años, ya tenía 20… aún conservaba a Yokozawa como mi mejor amigo. Él me había ayudado a conseguir algunos privilegios, como por ejemplo un celular, realmente no me importaba tener uno, pero Yokozawa dijo que mientras más avanzáramos en nuestras carreras, menos tiempo íbamos a tener de vernos, así que finalmente me convenció de tener un celular para mantenernos en contacto. Y bueno, como aún me faltaba completar la mitad de carrera, pues había muchos chicos nuevos en la universidad. Un día me topé con un chico que era nuevo en la universidad… fue algo más o menos así;
Un día llegue a la universidad solo, pues Yokozawa había llegado antes porque tenía que presentar un examen. Pues bien, mientras caminaba por la entrada de la universidad, un chico venia distraído y choco conmigo, claro el chico era más pequeño que yo, lo único que el logro fue que me hiciera para atrás, pero el, al chocar conmigo, cayó al piso. Le vi, y el chico se me hizo conocido…
Le extendí mi mano
-¿Estas bien?- Dije
-¿Eh? Claro… -Tomo mi mano y le ayude a levantarse- Perdona. Iba distraído.
-Descuida… -Me quede viendo su rostro mientras él se trataba de limpiar el polvo de su ropa. Cuando noto mi mirada.
-… ¿Está todo bien?
-¿Eh? Perdona, creo que te he visto antes…
-Hmmm…- entrecerró sus ojos y me vio fijamente colocando su mano en su barbilla- Ah! Si! Nos hemos visto antes!
-¿Enserio?- Me sorprendí
-¿Ibas en la misma secundaria que yo, cierto? Tú eras el chico de grado superior que llego apurado buscando a uno de mis compañeros y se fue corriendo después… ¿Cuál era su nombre?...
Recordé de inmediato
-¿Ritsu?- Le completé la oración.
-¡Sí! ¡Exacto! … Pero, ese día te pregunte si le conocías o algo y te fuiste corriendo… ¡Dime! Me quede con la duda desde entonces. –Decía en un tono de insistencia bastante infantil… como cuando un niño le pide algo a sus padres para que le compren y le dicen que no…
-¿Hmm? …- “Que rayos, ¿acaso le importa? Este chico es muy infantil como para ir en universidad…” pensé. - Pues, si, era mí… amigo… por eso preguntaba… - Dije lentamente. ¿Amigo? Sí, claro… no podría decirle a ese chico que estaba enamorado de Ritsu.
-¡Ah! ¡Comprendo! Pues, como ya me resolviste mi duda, ¡te diré todo lo que se! –Decía sonriente-
-¿Eh?
-Hmm… pues anteriormente te dije que Ritsu se había ido pero no te dije a donde. Te lo diré, se fue al extranjero- “… Al… extranjero… ¡¿Qué?!” pensaba mientras hablaba con el chico.- ¡Ah! Y tenía una prometida!... Nos lo dijo nuestro profesor que teníamos entonces…
-¡¿Prometida?! ¿¡Desde cuándo!?- Dije apurado
-Hmmm… pues no lo sé la verdad, pero yo creo que fue desde que íbamos en secundaria, porque siempre veía a una chica hablar con él.
“Maldita sea…” Pensaba
-Bien… me tengo que ir…
-¿Eh?...
Di la vuelta. No tome mis clases. Llegue a casa y me envolví en las sabanas de mi cama. Entré en una depresión horrible, es decir, pensé que Ritsu jugaba conmigo nada más, pues tenía una prometida mientras salía con el… tenía esa idea en la mente, pero no se lo dije a Yokozawa. Como era de esperarse, en la noche me hablo por celular…
-¿Takano? Te estuve esperando en la salida de la universidad, ¿Dónde estás?
-Perdona Yokozawa, estoy un poco enfermo, pero no te preocupes, solo necesito dormir, mañana estaré bien. Buenas noches.
-¡Espera! Taka… - Colgué. No quería saber nada, estaba harto. ¿De qué? ¿De las personas? ¿De lo que paso? ¿De la vida? ¿De mí mismo por enamorarme?... Sí, creo que fue eso… fui un idiota. Le dije anteriormente a Yokozawa que olvidaría rápidamente a Ritsu si es que llegaba alguien más… ¡y claro! En estos dos años llegaron al menos como 10 chicas preguntando si quería salir con ellas. A una que otra le dije que sí, pero nuestra relación no duro ni 2 semanas; ellas me terminaban por “falta de atención” o yo las terminaba porque sin pensarlo, recordaba a Ritsu de alguna forma. Tenía la esperanza de que al menos él se encontraba aquí en la ciudad y que nos encontraríamos por casualidad. Gracias a lo que me dijo el chico mis esperanzas se fueron al caño.
Esa noche después de estar todo el día en mi cama, salí en busca de algún tipo de consuelo a la calle. Claro, lo lógico sería contarle a Yokozawa, pero no me gustaría que el viera ese lado de mi sabiendo el por todo lo que he pasado. Si hay algo que detesto, es que me tengan lástima.
Salí vagando por la calle, era tarde, me encontré a algunas mujeres ofreciendo sus “servicios”. El dinero que mi madre me había enviado para la escuela, lo usé para mujeres y alcohol. ¿Qué más podía hacer? Maldición. Mi carrera dejo de importarme, sabía que me estaba yendo a la mierda. Pero poco me importaba.
Pasaron 4 días, no fui a la universidad, hundido en alcohol, y mujeres únicamente para obtener algo de placer teniendo sexo. Por esos días fue cuando también probé el cigarro por primera vez, claro que yo era un torpe con el cigarro, algunas veces aspiraba el humo y comenzaba a toser, y otras me quemaba los dedos levemente con él.
Ahora, ¿Yokozawa? Él no se había puesto en contacto conmigo, pues estaba en época de exámenes y él tenía que concentrarse en estudiar. Él siempre ha sido así, cuando son sus exámenes se olvida de todo y estudia toda la tarde, y le ha resultado muy bien.
Era viernes, terminaron los exámenes de Yokozawa, y el notó que falté a clases toda la semana. De inmediato me llamo al celular. Cuando sonó mi celular, era justo cuando me encontraba con una mujer en mi departamento a mitad del sexo. Ignore el celular y seguí con lo mío.
Yokozawa se preocupó y se dirigió a mi departamento. La puerta estaba abierta, cuando él llegó, entró a mi habitación. Yo me encontraba prácticamente desnudo, sentado en mi cama tapado con las sabanas de la cintura hacia abajo. Estaba fumando y tomando un poco. Estaba un poco ebrio pero aun consiente. A un lado de mí, se encontraba una mujer dormida casi desnuda también, solo tenía encima una pequeña camiseta para cubrir sus senos y su ropa interior.
-¿Takano…? ¿Qué demonios?...
Mire a Yokozawa, mientras yo seguía fumando. Al escuchar la voz de Yokozawa, la mujer se despertó y se levantó un poco apenada al ver a Yokozawa y ella no tenía casi nada encima. Se puso algo que le cubriera sus piernas, tomo sus cosas y se fue. Yokozawa la vio con disgusto mientras salía, después dirigió su mirada a mi.
-¿Qué? – Seguí fumando
-¡¿Y todavía me lo preguntas?! No has ido a la universidad toda la maldita semana ¿Qué rayos te ha pasado? Hay botellas de alcohol por todos lados y está todo lleno de humo aquí. – Decía viendo alrededor – Además, ¿Por qué estas fumando? ¡Te puede hacer daño! ¡Aun eres joven! – Se acercó y me arrebato el cigarro que traía en mi mano, lo apago en el cenicero que estaba a un lado de la cama.
-¡Tsk! Que molesto… Ya cállate…
-Encima te estas involucrando con mujeres mayores que tu…mírate, no puedo creerlo…
-Ya basta, deja de involucrarte en mi vida… - Me desespere – No sabes por todo lo que he pasado… - Comencé a subir el tono de mi voz. Lleve ambas manos a mi nuca agachando mi cabeza, mientras seguía sentado en la cama.
-¿Qué? ¿De qué rayos estás hablando?
-…
-¡Oye! ¡Takano! – Se acercó a la cama. Como estaba un poco ebrio, no sé lo que hice pero… en un movimiento rápido, tome su camisa jalándole hacia mí, y le forcé a un beso. No sé por qué lo hice, supongo que estaba desesperado.
Como era de esperarse, él se sorprendió ante esto y rápidamente se hizo para atrás cayendo al piso.
-¿Q-Que demonios acabas de…? – Hablaba estando en el piso, cubriendo su boca con su antebrazo.
-Perdona, estoy… tsk! – Agache mi cabeza
-¿Estas bien?.... ¿Takano? – Yokozawa se levantó poco a poco del piso.
Sin darme cuenta una lágrima comenzó a escabullirse por mi mejilla. Cuando la sentí, dirigí mi mano hasta mi mejilla y sentí la yema de mis dedos mojada, vi mi mano, y después la apreté…
Yokozawa quedo sorprendido ante esto
-¿Takano, que paso?
-Ya no puedo Yokozawa… -Decía agachado, no podía creer que le estaba mostrando ese lado mío a Yokozawa-
-¿Eh?
Le conté lo que paso con aquel chico que me encontré en la entrada de la universidad. Yokozawa se vio molesto.
-¿Qué? ¿Quieres decir que ese tal Oda Ritsu solo jugó contigo realmente?
-…No se…
-¿Por qué no me lo dijiste antes?
-¡Porque…! No quería mostrarte este lado de mí. Además, estabas ocupado con tus exámenes.
-¡Eso es lo de menos! Yo habría venido a ayudarte de todos modos. ¿Y que hay con eso? No tienes que avergonzarte con ese lado sentimental que tienes… Yo sé que eres una persona a la que no le gusta mostrar su lado débil a los demás. ¡Pero vamos! ¡Somos amigos desde hace dos años!
-… - Me quede callado, no tenía nada que decir… Yokozawa me quedo mirando por algunos segundos y nuevamente se acercó, esta vez fue el, quien tomo mis mejillas y me besó. Yo no tuve reacción alguna, estaba destrozado. Se alejó un poco de mis labios;
-Takano, yo… no te lo había dicho antes pero, de algún modo me siento atraído por ti… por esto no me gusta que estés así…
Me deje caer en la cama, y Yokozawa se colocó encima de mí. Sabía que me convertiría en un “pasivo” si no hacía algo, aún estaba algo consiente, por lo que me senté rápidamente frente a Yokozawa nuevamente.
-¿Qué pasa?
-No tengo intenciones de ser penetrado, así que…
-Bien entonces…-Como me encontraba desnudo, lo único que él hizo fue pasar su mano por debajo de la sabana y comenzó a masturbarme con sus manos.
-Detente, Yokozawa ngh! .. ¡Maldita sea! – Lo tome de los hombros mientras él seguía en lo suyo.
Seguía estando un poco ebrio, lo que provoco que me viniera rápidamente. Cuando lo hice, pude notar un leve sonrojo en el rostro de Yokozawa. Esto me hizo empujarle y hacer que el quedara recostado en la cama y me puse encima, procedí a besarle abriéndome paso a su boca con mi lengua. Yokozawa correspondió al beso.
Detuve el beso gracias a la falta de aire, Yokozawa termino jadeante. Yo por mi parte, procedí a desabrochar su pantalón y a practicarle sexo oral. Por esto Yokozawa empezó a hablar entrecortadamente;
-Takano… está bien… no tienes porque.. ngh!
Si, se corrió. No en mi boca, pero si en mi rostro.
-Perdona, Takano, no pude… - Fue lo único que pudo decir.
Como sea, después de un rato, Yokozawa termino desnudo también. Terminamos y nos quedamos dormidos por un corto tiempo. Después desperté y solo me senté en la cama, y tome mi celular, Yokozawa sintió cuando me desperté y él también se sentó en la cama.
-¿Masamune?
-¿Eh? ¿Ahora me llamas por mi nombre? –Decía mientras seguía tecleando mi celular en un tono de ironía.
-Je! ¿No puedo? Creo que ya me he ganado el derecho de llamarte por tu nombre…- Le volteé a ver sin expresión alguna y después regrese la mirada a mi celular. - ¿Qué tanto haces con tu celular? – Dijo.
-Borrando algunas cosas.
-¿Eh? ¿Cosas?
-Solo hay una persona que necesito y en la que puedo confiar.
-…
-Mira – Le mostré la pantalla de mi celular. En mis contactos no tenía a nadie más que a Yokozawa.
-Masamune…
-Como sea, es tarde, y estoy cansado – Cerré mi celular y me volví a acostar dándole la espalda a Yokozawa.
-Hmph! – Yokozawa rio levemente y también se acostó sin decir palabra alguna.
Ambos nos quedamos dormidos nuevamente pero esta vez, fue hasta el día siguiente.
No sé exactamente lo que paso esa noche, pero así fue como comencé con este “tipo de relación” con mi mejor amigo