Ah, esto, perdona.- Luhan se levantó apresuradamente cuando se encontró con el rostro de Sehun.
El menor también se puso de pie y se sacudió los pantalones con las manos mientras miraba a Suho y Chanyeol, que estaban en frente. Kai sujetaba por un lado la puerta abierta y también se apoyaba en ella. Casi se cayó cuando ésta se descolgó de su sitio, y todos se asustaron ante el golpe contra el suelo.
-¡Aaaaaah!- gritó Tao saltando encima de Lay ante el susto. Todos le miraron ante aquel chillido tan femenino.
-¿Hay chicas aquí?- preguntó Kris desde el sofá. Parecía que ahora prestaba interés a la situación
-Esto sí que es un problema.- dijo Kai que se agachó de rodillas para intentar levantar la puerta. Mientras, Suho asomó la cabeza para ver el apartamento de los otros chicos, era igual que el suyo.
-¿Y ahora que vamos a hacer?- preguntó Baekhyun que estaba estirado en el sofá. No importaba que una puerta se hubiera caído delante de sus narices, él tan cómodo como siempre.- Bueno, que Sehun la coloque bien, él es quien la ha tirado ¿no? Pues ya está.
-¿Qué está pasando aquí?- dijo alguien con voz algo grave que venía desde la cocina. Un chico más bajito que todos los demás se paró en frente de donde antes estaba la puerta.
-Uy, un enano.- dijo Kai con la mano en la boca.
-No soy un enano, soy Kyungsoo.- dijo el chico bajito con el ceño fruncido.
-A ver, a ver, a ver. Todo el mundo a lo suyo ya. Hasta que alguien arregle la puerta,- Suho miro a Sehun y a Luhan por un segundo- que cada uno siga viviendo normal en su apartamento. Yo soy Suho, por cierto.
-Hay que ver, que ni nos ha dado tiempo de deshacer las maletas y ya viene aquí Sehun a romper las puertas.- Baekhyun se cruzó de brazos mientras movía la cabeza de derecha a izquierda.
Enseguida, todos se alejaron de la pared con el agujero y se pusieron a hacer cualquier cosa. Chen y Baekhyun subieron sus maletas hasta el segundo piso. El piso de arriba estaba compuesto de tres habitaciones y un baño. Al subir las escaleras y caminabas recto, si girabas a la izquierda te encontrabas con el baño a la izquierda y una habitación pequeña en frente; si girabas a la derecha estaba a la izquierda una habitación grande y en frente una habitación mediana. Ellos dos decidieron quedarse con la pequeña ya que no necesitaban mucho espacio para vivir, no como Kai y Sehun, que ellos necesitarían la grande puesto que siempre ocupan mucho espacio con sus cosas. Tao y lay se conformarían con la mediana, porque Chen y Baekhyun ya habían cogido la pequeña, que sino ellos la hubieran ocupado.
Lay y Kai estaban mirando la tele muy atentamente. Kai le explicaba algunos diálogos al rubio puesto que al ser chino, su nivel de coreano no era tan bueno. A veces escuchaban como alguien del otro apartamento hacía aegyo, y eso les irritaba demasiado. Resultó ser que era un tal Xiumin, por lo que pudieron oír.
De repente, vieron como algo corrió por el comedor en frente de ellos y se metió en el baño.
-¿Has visto eso? Un niño del otro apartamento se ha metido en nuestro baño.- dijo Kai alarmado.
-¿Un niño? ¿Pero cuántos son en el apartamento de al lado?- preguntó Lay. Pensó que a lo mejor sería una gran familia de tres generaciones.
-Contemos. Está el señor yo-mando-y-lo-controlo-todo Suho, que es el tío que nos ha dicho que fuéramos a hacer nuestras cosas. Estaba un tío muy alto, muy alto, que antes se ha asomado por la pared hueca, tenía el pelo oscuro. Creo que había alguien en el sofá, y también estaba el chico del aegyo y el otro que hablaba con él. Y aquel chico tan bajito… que ahora está saliendo de nuestro baño.- dijo Kai mientras observaba al niño que se había colado en el apartamento.
-Perdón, tenía una urgencia y nuestros baños estaban ocupados.- se inclinó y cruzó la “puerta” rojo como un tomate.
-Aaah… entonces son seis chicos en total, igual que nosotros. Pensaba que era toda una fami…- Lay se calló de repente.
-¿Por qué te has call...?- la boca de Kai fue tapada por Lay.
-Shhh, calla un momento.
-Kyungsoo, no sé cómo se hace el arroz. ¿Dónde estás? Kris ayúdame, no me ignores. Chanyeol, haz tú la comida. Suho, tú que eres la mamá de todos, haznos la comida. Xiumin, deja de jugar al móvil y ayúdame ¿Cómo demonios se hace esto?- Luhan estaba desesperado porque hoy le tocaba cocinar y no tenía ni idea de cómo hacerlo.
-Pon el arroz a hervir unos 30 minutos en una olla con agua caliente y luego mételo todo en un bol para que se escurra en el fregadero. Sírvelo en un plato y listo.- Lay, que se había asomado porque le había escuchado quejarse, le explicó más o menos como tenía que hacerlo. Luego desapareció.
-G-Gracias.- dijo Luhan sin saber bien que responder.
-A veces me sorprende mucho tu capacidad de oído.- explicó Kai cuando Lay apareció de nuevo.
-¿Te sorprende? Desde que era pequeño oigo así, por lo que para mí tu oído es una mierda.- Lay se dirigió hacia las escaleras.- Ven arriba, que todos están deshaciendo sus maletas.
-A ver listo, intenta escuchar lo que dicen si están hablando.- dijo Kai mientras se levantaba del sofá.
-Vale, pero cállate.- Lay cerró los ojos.- “Fresa, menta, naranja,…”, ese debe ser Chen hablando de sus condones. “Ya te he dicho que no fue culpa mía”, seguro que Baekhyun le está echando la culpa a Sehun por romper la puerta. “Dame más, esto no llena”… la voz es de Tao pero no sé lo que hace. “Pensé que te gustaban las grandes”, ese es Baekhyun, ¿qué estarán haciendo?
-Baekhyun dame más camisetas de Lay, es que sino el armario no se llena. Creo que sería mejor que yo y él durmiéramos en la habitación pequeña.- Tao estaba guardando el su equipaje y el de Lay.
-Pensé que te gustaban las habitaciones grandes, pero ya veo que no necesitas mucho espacio. Lo que si te cambio es al compañero, que sea él quien te hable de sus condones.- a Baekhyun se le puso una cara de asco-horror.
-¡Baek~! ¿Probamos el de fresa?- preguntó Chen entre risas des de la otra habitación. La respuesta de Baekhyun fue un escalofrío seguido de un Uuugh.
¿Los estás escuchando? Están fatal de la cabeza.- desde el otro lado, Kyungsoo estaba con la oreja pegada a la pared. Su habitación estaba al lado de la de Baekhyun y Chen, así que podía oírlo todo.
-No es nuestro problema que sean así. Aunque me pregunto quién será ese Baekhyun al que tanto quieren hacerle probar la fresa.- a Chanyeol le dio un poco de curiosidad saber sobre Baekhyun, y sobre lo que hacían los otros en el otro apartamento.
Baekhyun y Tao estaban en el comedor viendo la tele, Tao sentado y Baekhyun con las piernas encima de las suyas. Lay estaba en la cocina sentado mientras escuchaba una conversación con el chico del aegyo al lado. Kai estaba en su habitación durmiendo la siesta, y Sehun se daba una ducha en el baño del piso de arriba.
¿Teniendo un sofá cama, es necesario que invadas mi espacio con tus piernas?- preguntó Tao moviendo sus piernas para liberarse.
-Sí, es necesario. Y no te quejes porque te echo del sofá a patadas.
Ambos estaban tan tranquilos viendo un programa de variedades, cuando escucharon que la tele del otro apartamento estaba a todo volumen. No le dieron mucha importancia hasta que llegó un punto en el que solo escuchaban la tele de al lado y no la suya.
-¡Oye vecinos, bajar un poco el volumen de la tele!- gritó Baekhyun. Nadie respondió.
-Ven, vamos a verlos.- dijo Tao agarrándole del brazo.
Chanyeol y Kris estaban tan tranquilamente viendo fútbol, cuando su salón fue interrumpido por dos personas. Baekhyun se apoyó en la pared vacía de brazos cruzados mientras que Tao entraba en el comedor algo tímido.
-Os hemos dicho antes que bajéis el volumen de vuestra tele.- Baekhyun habló.
Kris le miró durante unos segundo su luego siguió mirando su tele.
-¿Lo tengo que repetir?
-No quiero bajar el volumen, ¿tienes algún problema?- Kris hablaba con tono amenazador mientras seguía viendo el partido. Chanyeol miraba a Kris y a Baekhyun de manera discreta mientras hacía como que veía el fútbol también.
-¿Qué si tengo algún problema, dices? Pues sí que lo tengo, así que o bajas el volumen o te lo bajo yo. Tao busca el mando.
-¿Y yo por qué?- Tao se fue alejando del comedor y se quedó detrás de Baekhyun, pisando ya el suelo de su apartamento.
-Que bajes el volumen, tío.- insistió Baekhyun. En la cocina, podías escuchar a Lay reírse ante tal situación, claro que él no necesitaba estar precisamente en el lugar donde ocurría.
-Que no me da la gana, niñato.- Kris ya casi estaba a punto de levantarse para hacer algo incoherente, pero Chanyeol puso su mano en su brazo para calmarle. Estaba algo atraído por el mal genio del castaño que estaba desafiando a Kris.
-A mí no me toques los cojones, cara-caballo.- Baekhyun iba a explotar de no ser porque Tao le cogía por los hombros.
-¡Mira chaval, yo lo único que tengo de caballo es la…!
-¡Alto! Todo el mundo… quieto.- y la mamá Suho apareció en medio de la batalla.- Kris o Chanyeol, o bajáis el volumen o os apago la tele. Niño castaño, vete a tu apartamento antes de que tenga que sacarte de mi comedor a gritos. Venga, ¡los dos!
Baekhyun y Tao salieron del lugar mientras que Chanyeol cogía el mando y le clicaba al botón para bajar el volumen de la tele.
-Buah, ese tal Suho se parece a mi madre.- dijo Tao con la boca abierta.
-Y a la mía… y a la mía…
Los pisos de debajo de los dos apartamentos estaban en absoluto silencio. Los 12 chicos andaban en sus respectivas habitaciones. No todos estaban dormidos, como Kai y Sehun, que estaban planeando bajar a la cocina a comer algo, porque la cena de Tao los había dejado muertos de hambre. Los dos salieron de su habitación sin hacer ruido por si alguien dormía. Justo cuando iban a girar a la izquierda para bajar las escaleras, ambos pegaron un salto y les dio un mini-infarto al encontrarse con alguien. Sehun primero pensó que era Baekhyun ya que al estar todo oscuro no podía ver con facilidad.
-Luhannie, Luhannie…- dijo el chico con el que se encontraron.
-Ah, es el chico del aegyo.- Kai lo recordó de cuando estaba con Lay.
¿Quién?- preguntó Sehun que no sabía a qué se referia.
-Se llama Xiumin, por lo que he escuchado. Dejémoslo, ya volverá su cuarto.
Y Kai y Sehun se fueron escaleras abajo en busca de comida, sin darse cuenta de que Xiumin lograba abrir la puerta del cuarto de Chen y Baekhyun. Eran las 23:45 de la noche y los dos estaban durmiendo. El vuelo había sido pesado, era cansado deshacer las maletas, uno de ellos se había peleado con alguien de al lado,… Pero Baekhyun se despertó ante un ruido que le estaba molestando en sus sueños y ahora lo hacía en realidad. Alguien en el cuarto de al lado estaba tocando la guitarra desde hacía un rato y parecía que no iba a parar en un buen rato. Baekhyun golpeó la pared para ver si el de al lado pillaba que quería que parase, pero se seguía escuchando la maldita música.
-¿Puedes dejar de tocar la guitarra y dejarme dormir?- preguntó Baekhyun con la mejilla apoyada en la pared.
No hubo respuesta por unos segundos, el otro no le hacía caso, a lo que solo pudo significar algo.
-¿Eres el cara-caballo?- preguntó Baekhyun convencido. Ese tío era el único en el planeta que era capaz de ignorar a todos. Una risa se escuchó al otro lado de la pared.
-No, no soy Kris. Soy la estatua que estaba a su lado cuando hubo la pelea.- dijo Chanyeol mientras dejaba de tocar la guitarra.
-¿Chanyeol? ¿Eres tú?- preguntó Baekhyun mientras recordaba la escena de la pelea.
-Eh, ¿Cómo sabes mi nombre?- Chanyeol se quedó algo sorprendido al saberlo.
-Suho lo dijo cuándo nos echó al bronca a los cuatro, yo me llamo Baekhyun.- dijo sonriendo sin saber por qué.
Chanyeol sonrió al saber quién era. Era el tipo al que le querían hacer probar la fresa, y también el que desafió a Kris por la tarde. Ahora podía ponerle un rostro al chico.- Encantado, Baek.
-¿Y esas confianzas? Me llamo Baekhyun, encantado. Y ahora que no estás tocando la guitarra, buenas noches.- dijo el castaño tapándose con las sábanas.
-Buenas noches, Baek…- dijo Chanyeol, pero “Baek” lo dijo tan bajo que el otro no pudo llegar a enterarse.
Los dos sentían como si esa no iba a ser la última conversación entre ellos. Baekhyun seguía sonriendo sin saber por qué y Chanyeol dejó su guitarra apoyada en la pared, luego se estiró en la cama, él y Baekhyun miraban hacia la misma pared
Cualquiera pensaría que ellos se podrían llevar bien…
Qué pena que la historia no fuera así.