Un castaño abría sus ojos color esmeralda, al despertarse se sonroja al notar su desnudez, intento incorporarse en la cama pero unos brazos se lo impedían, sonrió al ver como Masamune lo abrazaba sobreprotectoramente, se deshizo cuidadosamente del agarre del mayor cuidando que este no se despertara
Se sentó al borde de la cama, en cuanto dio un paso fuera de la cama..
- AHHHHHH…- fue a parar contra el piso – Maldito animal!! – se quejo mientras se sobaba las caderas
- Buenos días cariño, como amaneciste – dijo Takano sentado en la cama con tono burlón
- Eres un maldito – lo regaño – acaso no sabes que es ser gentil
- Pero anoche bien que lo disfrutaste no – soltó una risita
- Cállate – hizo un puchero – ahora ayúdame – alzo sus brazos
- Ok – bajo de la cama, y cargo a Ritsu estilo princesa llevándolo a la ducha – báñate iré a prepara el desayuno
- No te bañaras conmigo – dijo poniendo carita suplicante
- Que no te basto con lo de anoche – miro como Ritsu se sonrojaba
- No estoy diciendo que lo hagamos – contesto
- Y tú crees que aguantare estar contigo sin hacerte algo – ante lo dicho Ritsu frunció el ceño
- PERVERTIDO – dijo algo molesto
- Y apenas te das cuenta – lo abrazo y le dio un beso en la frente – haz lo que te dije – salió del baño y camino hasta la cocina
Mientras tanto Ritsu prefirió bañarse en la bañera, se sumergió de tal manera que solo su cabeza sobra salía del agua, sentía como sus músculos se relajaban y aquel dolor en sus caderas desaparecía pero no del todo
“anoche lo hice con Masamune, será que él lo disfruto, yo creo que si, aparte debo de admitir que si fue gentil ya no me duelen tanto, además puedo caminar eso es bueno no?, no se porque pero tengo un mal presentimiento sobre esto”
No sabía cuanto tiempo había estado pensando, pero de repente reacciono, esperando que no se le hubiera hecho tarde para ir a la preparatoria. Salió de bañarse y se vistió lo más rápido que pudo
Bajo a desayunar
- Te tardaste un poco – Takano estaba sirviendo el desayuno – siéntate ya está listo el desayuno
- Lo siento, me distraje un poco – tomo asiento
- Tu cuerpo está bien – dijo en tono “preocupado”
- Sí, estoy bien jejeje – admitió Ritsu sonrojado – ya no me duele tanto
- Qué bueno – contesto, miro a Ritsu prácticamente desnudándolo con la mirada, pensando en todo lo que habían hecho anoche
- Deja de mirarme así!! – dijo rojo de la vergüenza
- Si, si, está bien – bajo la mirada concentrándose en su desayuno, sabía que si seguía mirándolo se lo llevaría a la habitación a hacer cosas
- Cambiando de tema, me llevaras a la escuela – pregunto deseando que fuera así, a pesar de que el dolor de sus caderas no era mucho le hacía sentir incomodo
- Si, aparte de que no caminas muy bien que digamos – dijo en tono burlón
- Cállate!!! que todo es tu culpa – dijo enojado
Después de esa pequeña conversación de pareja, ya que ambos la sintieron así, terminaron de desayunar y Takano llevo a Ritsu a la escuela
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- Buenos días – dijo Kotaro con mas animo que de costumbre
- Buenos días – devolvió el saludo Ritsu – al parecer estas de buen humor
- Jejeje…tal vez, pero el que tiene mejor humor es otro – miro a su amigo con una sonrisa picara – que hiciste que estas tan feliz
- Na…nada – respondió sonrojado y nervioso
- No me digas que – se acerco al oído de su amigo – ya no eres virgen
- Cállate, no digas esas cosas – dijo rojo como un tomate mientras separaba a Kotaro levemente de el
- Como fue, te dolió, o te gusto - decía torturando a Ritsu quien no buscaba en donde meterse para ocultar su vergüenza
- Buenos días, Kotaro, Ritsu – Reiki llegaba apenas al aula
- Buenos días – respondieron ambos al mismo tiempo
- Acaso no dormiste – dijo Ritsu al notar las enormes ojeras de Reiki
- Claro que dormí, como 3 o 4 hrs – respondió cabizbajo
- Deberías dormir mas – Kotaro estaba enamorado de él aunque no lo admitía, era natural que se preocupara por el
- Si, lo sé – dijo Reiki mientras tomaba asiento
- Buenos días, jóvenes tomen asiento para comenzar la clase – el profesor había llegado dando inicio a las clases
Las clases transcurrieron normales, Ritsu esta vez ponía atención, sabía que estos últimos días había descuidado un poco sus estudios, pero por momentos también notaba que Kotaro volteaba para atrás viendo a Reiki, sabía que estaba enamorado “Oh! Claro, ahora que lo recuerdo, el acepto confesársele a Reiki si yo lo hacía lo mismo con Masamune, yo ya cumplí mi parte ahora le toca a el”
Cuando por fin terminaron las clases, Ritsu estaba dispuesto a cobrar su apuesta, claro que sería cuando Reiki se fuera
- Kotaro – lo llamo, al ver que este guardaba sus cosas para salir del salón
- Que pasa Ritsu – dijo este nervioso, de alguna manera ya sospechaba de que sería el tema de conversación
- La apuesta – ante lo dicho Kotaro trago en seco
- Sabes, ya es tarde me tengo que ir – dijo mientras caminaba fuera del salón, hasta que sintió que alguien lo tomaba del brazo obligándolo a que volviera a entrar
- A donde crees que vas – dijo Ritsu enojado – tienes hasta mañana para confesarte
- Que! Dame mas tiempo – dijo poniendo cara de cachorro
- No, tu no me lo diste a mi – dijo con reproche
- De acuerdo – dijo resignado
Salieron del salón de clases, Kotaro se fue de inmediato a su casa, al igual que ritsu
Llego a su casa totalmente cansado, lo único que quería era acostarse un rato, pero al parecer una fuerza misteriosa no quería que fuera así, su celular comenzó a sonar, contesto
-“Ritsu”
-si, Masamune
-“estas en la casa”
-sí, ¿Por qué?
-“se me olvidaron unos papeles en la casa, podrías traerlos a la editorial”
-claro, ¿Dónde están?
-“estén en *******”
-ok, yo los llevo
-“gracias, adiós te veo ahí”
-adiós
Colgó
“ahora tengo que ir a la editorial” pensó, busco los papeles y salió camino a la editorial
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Había llegado temprano como siempre, se supone que los jefes llegan a la hora que quieran, pero él no era así, siempre trataba de llegar antes, tal vez era para poner el ejemplo o algo por el estilo ni él lo sabía, estaba revisando unos papeles cuando, su celular sonó
-Onodera ryu al habla
-“ryu, hijo, te llamaba para decirte que iré a visitarte a ti y a Reiki”
- enserio mama, cuando
-“aun no lo sé, tengo asuntos que arreglar”
- ok, eso es todo lo que querías decirme, porque tengo trabajo que hacer
-“que malo eres con la mujer que te dio la vida, creo que soy más importante que el trabajo”
-lo siento, pero enserio no tengo ganas de discutir contigo
-“jamás me vas a perdonar”
-No, por lo menos si supiera que estas arrepentida de lo que hiciste lo intentaría, además a quien le deberías de pedir perdón es a Reiki no a mi
-“sabes que eso no pasara”
- lo sé, por eso he tomado la decisión de decírselo
-“DE NINGUNA MANERA, acaso quieres que sufra sabiendo que es raro”
- adiós – dijo para después colgar
Siempre acababan peleando, acaso jamás se llevarían bien, debía de admitir que le tenía un gran rencor a sus padres, eran unas personas muy egoístas, que solo se preocupaban por sus intereses, sin importarle los sentimientos de los demás, los odiaba
Como comenzó a odiarlos
FLASH BACK
- Terminaste con el – dijo ryu mientras miraba a su hermano, quien estaba pegado a su laptop acostado en la cama, sin darle mucha importancia al tema
- Si – contesto sin dejar de mirar la pantalla
- ¿Por qué? Si tu lo amas – su hermano no le hizo caso, camino hasta él le quito la lap dejándola encima de una mesita de noche y se sentó al borde de la cama
- Oye, no hagas eso – dijo el rubio molesto
- Te estoy hablando y quiero que me hagas caso – lo miro fijamente - ¿Por qué terminaste con el?
- Porque no lo amo – bajo la mirada tratando de contener las lagrimas
- Mírame a los ojos – tomo a su hermano del mentón alzándolo para que lo mirara
- Te estoy diciendo la verdad – trato de sonar lo más convincente posible
- No te creo, soy tu hermano te conozco a la perfección – vio como su hermano empezaba a llorar, lo abrazo – dime que paso
- El nos vio – dijo bajito, tratando de contener sus sollozos
- Quien? – pregunto, temiendo que la respuesta fuera lo que sospechaba
- Papa…
FIN DE FLASH BACK
Sus recuerdos fueron interrumpidos por alguien que tocaba la puerta
- Pase – dijo ryu mientras miraba los papeles, un editor entro a su oficina para hablar de algunas propuestas, alejo aquellos recuerdos concentrándose en el trabajo
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Ritsu había llegado a la editorial, estaba esperando a su “padre”, ya que eso seguía siendo ante la vista de todos
- Ritsu – lo llamo Takano al verlo
- Papa – se sentía raro decirle así – aquí están los papeles – sintió como lo tomaban del brazo arrastrándolo – espera papa a donde me llevas
- ……………… - no respondió, solo arrastro a Ritsu hasta un baño, por fortuna este estaba vacío, cerro con seguro
- Masamune que hacemos aqu….mng….- Takano se abalanzo hacia a Ritsu besándolo, metiendo su lengua en la boca del menor, mientras lo besaba comenzó a desabrochar el saco de Ritsu -……espera – dijo Ritsu logrando separarse del beso
- Quiero hacerlo – dijo Takano con voz ronca por la excitación
- Eh? acaso estás loco, alguien podría oírnos - dijo pero el mayor no le hizo caso, este comenzó a morder y lamer su cuello
- No importa solo tienes que contener tu voz – llevo una de sus manos a la entrepierna del castaño para acariciarla
- Ah…. –solto un gemido al sentir que acariciaban su miembro por encima de su pantalón – como crees que voy a poder
(Ya Ritsu déjate violar)
“estúpida conciencia”
(No te hagas bien que quieres)
“Tal vez solo un poco”
(Entonces flojito y cooperando)
- Acaso no puedes –termino de desabotonar el saco de Ritsu quitándoselo
- De acuerdo pero solo por esta vez – comenzó a besar a Takano, este tampoco se quedo atrás y le bajo los pantalones a Ritsu junto con sus bóxers
- Contra la pared – Ritsu asintió y apoyo sus brazos en la pared – separa las piernas – Ritsu separo sus piernas, Takano se bajo los pantalones junto con los bóxers dejando a la vista su erecto miembro
- AHHHHHHHHHH – Ritsu lanzo un grito de placer y dolor, Takano había entrado de un sola estocada – no tan brusco – dijo con algunas lagrimas en los ojos
- Perdón y baja la voz – se quedo quieto esperando a que Ritsu se acostumbrara a la intromisión
- Lo siento, pero si me dolió – se quejo, se quedaron así unos momentos hasta que Ritsu movió sus caderas levemente dando a entender que podía continuar – ah….ah….mng – Takano comenzó a embestirlo bastante rápido, para tratar de ahogar sus gemidos se mor día la mano – ngm……mnhg……mas…..mng….más rápido –
- Y no que no querías – dijo con algo de burla en su voz
- No…ah… preguntes y haz….mhn…lo que te ….ngmn…dije – apenas y podía hablar
- Ok – salió de ritsu, le quito completamente los pantalones al igual que su ropa interior, lo volteo de tal manera que podia ver el sonrojado rostro de ritsu, lo tomo de los glúteos alzándolo pegando su espalda a la pared y volvió a entrar en el – asi esta bien – comenzó a embestirlo
- Si…ah…ngh…mmhh….AH….ahi…mas fuerte…..mhhhh – paso sus brazos por el cuello de Takano y enredo sus piernas a la cadera de este
- Parece que..ah.. di en un buen punto – dijo volviendo a embestir el mismo lugar una y otra vez
- Ah…..ngmhh……Ahh…me vengo – dijo antes de venirse manchando ambos vientres, solo bastaron un par de embestidas mas para que Takano se viniera dentro de Ritsu, salió de el con cuidado para no lastimarlo
Después de que ambos regularizaran sus agitadas respiraciones, Takano se subió los pantalones
- Maldito pervertido!! – dijo ritsu al sentir un liquido escurrirse por sus piernas, se limpio su entrada y se puso de nuevo los pantalones junto con su saco
- Pero hace rato bien que pedias mas – contraataco Takano
- Cállate – dijo sonrojado y con el seño fruncido – a qué hora vas a llegar a casa
- Llegare tarde – abrazo a Ritsu por la espalda y hundió su cabeza en el cuello del menor – no me esperes despierto, tengo una junta y al parecer va a tardar
- Lastima yo quería cenar contigo – dijo algo desanimado
- Yo también quería cenarte – Ritsu frunció el seño – digo cenar contigo – se corrigió antes de que Ritsu lo llamara pervertido
- Ok, ya entendí, será mejor que me vaya – se separo del mayor y fue por los papeles – aquí están los papeles
- No los necesito – respondió Takano mientras caminaba hacia la puerta y quitaba el seguro de esta
- Que!, me hiciste venir aquí para nada – se detuvo a meditar sus palabras – maldito degenerado, solo querías sexo
- Jajajajaja – Takano soltó uno risita – al parecer ya te diste cuenta
- Pervertido – se acerco al mayor, y le dio un corto beso en los labios – nos vemos – salió del baño primero, si salían al mismo tiempo sería raro
- Nos vemos – se despidió Takano
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Tokio, Japón
Yukina caminaba tranquilamente a la dirección que Aoi le había indicado, era un edificio de departamentos para clase media, rogaba que ambos siguieran viviendo en el mismo lugar, eso le facilitaría las cosas, estaba tan sumergido en sus pensamientos que choco con alguien
- Que acaso no ves por dónde vas...
Continuara…………..