POV GIN
No he tenido avance, no encuentro su otra mitad, Aizen sabe que hasta entonces mantendré la cabeza gacha y se asegurara que no lo logre, Tousen está preparando todo para la próxima reunión con Jugram, aún hay algo que me resulta extraño de toda esa supuesta ayuda que nos brindara, sé que Aizen debe de estar haciendo algo para tener a Jugram de su lado. Bajo hasta los pisos más bajos del palacio, Aizen nunca suele venir por estos lugares y lo agradezco, no soportaría tener que verlo todo el tiempo, este es un lugar que uso para despejarme y respirar. Estoy a punto de retirarme cuando un grito resuena entre las paredes, avanzo guiado por el sonido, es extraño, conozco esa voz, pero no debería de escucharla, se supone que ya no está en este mundo. Me deslizo en silencio hasta llegar a la puerta del cuarto, hay dos figuras que conozco muy bien. Sonrió lo más que puedo, esta información puede serme útil muy pronto, solo esperare el momento indicado.
Pov Kyoraku
Veo hipnotizado su boca soltar los gemidos que tanto me gustan, sus ojos vidriosos y llenos de lujuria, su blanco cabello desparramado en las sabanas, alzo sus piernas para penetrarlo aún más teniendo como recompensa un gemido más alto, beso su pecho, sus pectorales hasta llegar a su pezón, lo lamo y jalo ligeramente estremeciéndolo, un ronco jadeo sale de mi boca cuando llego al orgasmo, él se aferra a mi espalda lanzando un grito.
-ah.ah…. Shinsui estoy agotado-
-entonces descansa Shiro-chan, yo velare tu sueño- beso su frente mientras se acomoda en mi pecho-aunque si deseas podemos esperar a que te recuperes y empezar otra ronda…auch- Ukitake había tirado de los vellos de mi pecho.
-nunca te cansas…-
-eres irresistible ¿Cómo podría cansarme?- escucho su risa irrumpir el silencio, como amo a mi shiro.
La noche pasa rauda, el día no demora en llegar, me levanto y dirijo una mirada a mi esposo, tan hermoso. Me doy un rápido baño, regreso y comienzo a vestirme, estoy por salir pero volteo a volver a verlo topándome con sus orbes clavadas en mí.
-no quise despertarte aun mi amor, es temprano, duerme-
-preferiría acompañarte, dormí lo suficiente- su voz un poco ronca y su semblante adormilado me dicen todo lo contrario, sus blancas piernas sobresalen bajo las desordenadas mantas, sé que si descubro un poco más podre apreciar su cuerpo desnudo….meneo la cabeza y me acerco hasta su lado.
-ambos sabemos que no es cierto. Descansa, yo debo atender algunos asuntos del reino- termino de vestirme y salgo rumbo a mi despacho, mi mano derecha, Nanao me espera con una ancho fajo de papeles, que, supongo he de tener que leer uno a uno, fuerzo una sonrisa al ver su semblante molesto, un retraso de una hora lo tiene cualquiera.
-tiene visita- la miro extrañado, su semblante no me da indicios de que sea algo bueno, trato de hallar alguna señal en sus facciones pero simplemente se retira dándonos privacidad. Ingreso algo intrigado para luego ver una figura que no había visto en años. Demasiados años.
-sigues igual Shinsui, veo que el tiempo no ha pasado en ti-parpadeo un par de veces, es real, él está aquí después de tanto, esbozo una sonrisa mientras me acerco.
-y que decir de ti, sigues exactamente igual a como te recuerdo y eso fue hace tanto tiempo-
-sí, antes de que perdiéramos todo tipo de contacto debido al conflicto entre los imperios- posa una mano sobre mi mejilla- pero créeme que recuerdo todo, como si fuese ayer- me quedo mirando sus ojos, como olvidar lo que viví a su lado.
-fueron buenos tiempos ¿no lo crees?, pero toma asiento por favor, no creo que tú, un imponente Quincy de alto rango haya venido a recordar viejas memorias- su cristalina risa hace eco en la estancia, menea la cabeza hondeando sus rubias hebras, me quedo observándolo, se perece tanto a Jushiro, pero al mismo tiempo son tan diferentes….
-pues parece que quien recuerda viejas memorias eres tú-
-tal vez…tal vez no- me recuesto en mi asiento mirándolo directamente- te escucho, General del reino Quincy-
-la verdad buscaba tu ayuda, no hace mucho pedí una audiencia urgente con los monarcas de este imperio, más mi petición fue ignorada y olvidada, mi asunto es urgente y sé que tu podrás ayudarme-
-¿y puedo saber qué asunto es ese?-
-Aizen-cambio todo mi facete alegre por una que amerita el tema.
-haz captado mi atención-
-pero es algo que solo puedo revelar ante todos los monarcas, apelo a ti por ello, reúnelos y haz que me escuchen-
-no puedo prometerte nada ahora, Yama-j…Yamamoto últimamente no se muestra, para todo el día recluido en su palacio y hace poco me llego una carta dejándome como segundo al mando hasta que el decidiese volver-
-entonces si puedes hacerlo- se levanta y acerca hasta mí, demasiado cerca.- vamos Shinsui-
-veré lo que puedo hacer, entonces enviare una carta con la respuesta- sonríe para luego alejarse abruptamente.
-estaré al pendiente entonces…nos vemos pronto Shinsui- y tan rápido como llego se fue dejándome con un ligero presentimiento de que había algo raro en toda la situación, me recargue en el respaldo de mi asiento pensando, ¿Qué es eso que atañe a Aizen? Sin duda la curiosidad no dejara de carcomerme hasta el día que lo sepa. Nanao no tarda en atravesar la puerta.
-necesito que comiences a mandar cartas formales a cada reino informándoles de la reunión que se llevara a cabo dentro de un día, el asunto es confidencial y necesito la asistencia absoluta de todos.-
-si, enseguida-
Lanzo un suspiro para comenzar a rellenar y firmar los informes, esta semana promete ser más que movida y pesada.
Pov Starrk
-puff, eso si que te debió de haber dolido Coyote, haberse visto con la fuerza que se carga a pesar de su debilucho aspecto y su condición, aunque será que soy yo o su semblante ha mejorado- suelta una carcajada para mirarme con sorna- ¿o será que te estas volviendo débil?-
-más vale que cierres la boca Aporro- escupo la sangre de mi boca
-mierda Starrk ayúdame, esta fiera no deja de moverse- Grimmjow sujeta a Soujun mientras este grita y patalea, yo lo estaba cargando cunado me impacto uno de sus puños mandándome lejos. Me acerco cogiendo sus muñecas mientras él se retuerce gritando.
Al final termine accediendo a trasladarlo del lugar en el que había estado por tantos años, no por las ofertas de Aporro, sino por el peligro que corría, la zona ya no era tan segura como antes y aunque me costase admitirlo el único lugar al cual podía trasladarlo era el laboratorio del pelo rosa, grande y nadie, ni el mismo Aizen ingresa ahí. El corazón se me estruja al ver su rostro contraído de terror y pánico pero no tengo opción, es por su bienestar.
-eh, Aporro tiene razón, se ve mejor ¿no lo crees?- miro detenidamente a Soujun, si se ve ligeramente mejor.
Al final, tuvimos que doparlo, como era de esperarse el laboratorio de Zsygel era todo menos acogedor, nos guio entre todos sus experimentos y demás “proyectos” hasta que llegamos a un cuarto con lunas reforzadas e insonoras, una camilla al centro y demás objetos que no me daban confianza.
-si le falta un solo cabello, Aporro-
-.si si, me daras una paliza-
-te matare, no lo dudes- lo recostamos sobre la camilla, al ser el único lugar al cual poder colocarlo, acaricio su rostro, ya no tiene tan marcadas sus ojeras, eso es raro.
-tomaste la mejor elección, no te preocupes por nada Coyote, hare que Soujun sea el mismo.-
Suspiro dirigiéndome a la salida. Grimmjow posa una mano en mi hombro.
-volverá, y entonces podrás arreglarlo.-
-si todo fuese tan fácil, han pasado 15 años, ¿Cómo reparas 15 años?-
-sabrás hacerlo. Vamos si estamos mucho tiempo aquí será sospechoso. Aporro esta en tus, maniáticas y psicópatas manos. –
Salimos sin más que decir.
-cómo te va a ti- pregunto a Grimmjow- con ese chico-
-creo que la cage, me lo folle sin consentimiento-
-lo violaste, está claro que no te va a hablar-
-puta madre Starrk, no lo digas asi, y si la fresa me mando a volar cuando fui a buscarlo-
-dañaste su orgullo, no solo como Hombre, también como doncel, ¿si te diste cuenta que era doncel?-
-no jodas-
-eres un completo idiota- veo como chasquea inquieto, ya asimilo lo que pudo haber causado sus actos.
-¿crees que el este…?-
-¿Cómo podría saberlo tarado? Ve a por el, no cages más las cosas y si de verdad sientes algo por el debes hacérselo saber-
-lo hare en cuanto termine la jodida reunión, pero eh a esta pantera nadie le pone correa-
Avanzamos sin más que hablar, la cesión que planeaba el ataque al reino Quincy comenzaba hoy.